I: INTRODUCCION:
La petrología es la rama de la petrología que describe y clasifica las rocas
clasificándolas según su textura y composición mineral mediante la
observación microscópica de rebanadas o secciones delgadas de la roca en
estudio bajo un microscopio petrográfico. Este tipo de análisis
revela varias características y/o propiedades que se pueden evaluar dentro del
cristal y las relaciones entre ellas, lo que ayudará a determinar la composición
de la roca, enfocándose principalmente en su naturaleza y origen. Las
rocas no son grupos aleatorios de minerales, estos grupos responden a
condiciones específicas de formación, y estas condiciones pueden ser
estudiadas por minerales, como las propiedades ópticas de la luz
polarizada que los atraviesa o los refleja (mineralogía óptica).

De la gran cantidad de minerales conocidos en la naturaleza, solo una pequeña

fracción (alrededor de 50) juega un papel importante en la formación de rocas,
lo que se conoce como diagénesis o petrografía. Los más importantes son:
silicatos - los componentes principales - carbonatos, sulfatos, sulfuros, cloruros,
fosfatos, óxidos e hidróxidos. En todos los minerales que componen las
rocas se distinguen componentes mayores y menores; Los factores
esenciales incluyen factores esenciales que dan a las rocas sus
nombres y existen en forma permanente, y factores incidentales o
accesorios cuya presencia es menos importante para la clasificación de las
rocas. Factores Los minerales secundarios son aquellos que resultan de la
transformación o alteración de los minerales primarios.
Aunque el examen macroscópico de afloramientos y/o rocas (a simple vista o
con una lupa) puede ser informativo, la mayoría de los datos necesarios
para los estudios petrográficos más precisos se obtienen utilizando
microscopios. Otros métodos (químicos y experimentales) de mayor resolución,
como los rayos X y la microscopía electrónica, pueden ayudar con estudios
más detallados de los cálculos.
Los estudios petrográficos comienzan con un examen físico de las rocas (una
descripción macroscópica), que nos da información sobre la apariencia, textura,
color, dureza, tamaño de grano o granulometría de la roca. Si la composición
es tan pequeña que no se puede ver a simple vista, se dice que la roca tiene
una textura afanítica o afántica, y si los cristales se pueden ver a simple vista o
con una lupa, se llama epimorfo.

Después de la observación macroscópica, se realiza la descripción

microscópica. La descripción microscópica implica la determinación de la
composición y propiedades estructurales de los minerales, a partir de la cual se
puede obtener gran cantidad de información sobre el origen de la roca, la forma
y color de los cristales, el tipo u origen de cada mineral (primario o secundario).
), la textura, la composición de los minerales y/o la relación de éstos con la
matriz o el cemento (si los hubiere). Cada tipo de roca tiene características
microscópicas específicas que son importantes en la clasificación. Cabe
señalar que estos dos análisis (macroscópico y microscópico) en
conjunto proporcionan los parámetros necesarios para describir y clasificar con
precisión las rocas.