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Suite Esmeralda

(Comedia intima de Enrique Esquivel)

PERSONAJES:
ESMERALDA. 55 años (CONY MUZQUIZ)
ANGELO, 30 años (JAVIER DIAZ)

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SINTESIS
Es en el Restaurant Continental donde se cumplen los tres deseos de Esmeralda. Una
comedia intima sobre los deseos y el paso del tiempo.

ESCENA 1
(Se escuchan los acordes iniciales de Historia de un Amor https://www.youtube.com/watch?v=ivFPsxbpOA4
Entra Esmeralda. Ve un momento el piano y se sienta a la mesa donde está un servicio de café,
agua y su celular y bolso. Se levantó al baño y regresa. Le habla al público como a un confidente)

E: La noticia llego como un rayo. Los resultados han sido positivos y no hay mucho que se
pueda hacer para tratarla. Le recomendamos poner sus papeles en orden, avisar a sus
familiares y tratar de vivir el tiempo que le queda de la mejor manera. (Toma un poco de
café)…y es donde me encuentro ahora. Tratando de vivir lo que me queda de vida con la
mayor intensidad. (Va a tomar otro trago, pero se arrepiente) Lo único…es que no sé qué
deseo…que es lo que me gustaría…que es lo que me gustaría que solo en estas
circunstancias me atrevería a hacer? Y es cuando a mi mente llego lo impensable. Aquello
que me avergüenza y ruboriza solo de considerarlo. (Saca un pañuelo de su bolso y se seca
el sudor) Dios mío! Qué pensarían mis hijos y el bendito de Álvaro mi marido muerto si se
enteraran. (Se le seca la boca y toma un poco de agua) lo que deseo…el secreto deseo que
ha brotado en mi….es que me gustaría…es que me gustaría….ay…como decirlo?...me
gustaría pasar una noche de amor con alguien….recordar aquella intensidad que sentía de
joven por gustar y ser gustada. Recobrar por un momento la sensación de ver mi cuerpo
atractivo en el espejo y gustar de las miradas que me brindaban los jóvenes en la calle.
(Cambia de tono) Nunca fui muy bonita de joven. Pero era alegre y los muchachos me
decían que les gustaba el brillo de mis ojos y mi sonrisa. Me decían que mi rostro parecía
iluminarse cada vez que susurraban palabra a mis oídos….palabras de amor y de
conquista. (Ríe ruborizada) Nunca tuve muchos novios, esa es la verdad, pero sabía que
me gustaba la compañía de jóvenes atractivos y guapos con los que salía en plan de
amigos….porque la verdad, eran mucha pieza para mí. Ahora que lo pienso…esa sensación
me ha acompañado gran parte de mi vida…que no soy suficiente bonita para los demás…o
suficiente buena madre o esposa o suficientemente lista o aventada….o como sucede
Suite Esmeralda
(Comedia intima de Enrique Esquivel)

ahora…que no soy suficientemente joven para amar. Que mi programa de mujer ha


terminado sin haber cumplido los 60 años. Vean ustedes que hermoso plan! Casarse,
tener hijos, ser fiel a mi marido y a mis obligaciones….y al punto donde mis hijos se van y
tienen su propias vidas; mi marido se muere de repente y ahora me encuentro en la

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situación de que también mi vida va a terminar y justo cuando iba recobrar mi libertad e
independencia, debo prepararme para irme al otro mundo sin haber tenido siquiera un
decente acoston con alguien…. Un orgasmo pues. Si. Ya lo dije. Un orgasmo. Me da pena
confesarlo, pero nunca he sentido satisfacción en el sexo. Tampoco es que haya buscado
muchas oportunidades para tenerlo. Me case ya grande y a mi marido y a mí nos urgía
formar una familia. Así que nos dimos a la tarea de tener sexo solo para que los hijos
llegaran rápidamente…y entre las prisas de atender el puesto de la Juárez y las
responsabilidades de criar a los hijos, se nos fue la vida en educarlos y sacarlos adelante
para que pudieran enfrentar la vida con sus propios medios. (Sonríe contenta) Álvaro, el
chico se ha vuelto a casar y parece que está contento con su nueva familia…mientras que
mi hija vive en el extranjero y no tiene hijos. Trabaja todo el día y se ha hecho mucho al
modo americano. Lo único que le importa es hacer dinero y gastarlo todo el día. (Ve su
celular) Ay, Ya es casi la hora. Les diré rápidamente que motivada por la necesidad de
atreverme a hacer algo que he deseado intensamente….busque en la computadora y
encontré un servicio de acompañantes para mujeres. Si…de escors de jigolos o gigolos…
como se diga. La de fotos y propuestas que aparecieron frente a mis ojos. Era como una
niña hambrienta a la que le ofrecían un bufet… y de tanta provocación y palabras bonitas,
me decidí por el único anuncio que ofrecía un encuentro lleno de “discreción y tacto”. Y
que anunciaba de que no le importaba la edad. Que de hecho le gustan las mujeres
tímidas y maduritas. Bueno…espero que no se espante al conocerme. Se llama Angelo y
tiene 30 años y le gusta vivir la vida y cumplir las fantasías de sus clientes. Dice que puede
ser el novio de la escuela que nunca tuviste o el hombre salvaje que despreciaste por
seguir siendo decente….Ay, que opciones! En fin, creo que Angelo es el candidato ideal
para mis deseos. Es muy guapo y tiene unos ojos grandes y una sonrisa que te desbaratas
solo de verlo. Espero que corresponda con la fotografía. En fin…me dijo que a las 5:30 en
el Continental por la Morelos…y aquí estoy esperando. Por si las moscas, hable por
teléfono y reserve una habitación en este hotel…una suite, que me dijeron son más
cómodas. (Saca un espejo de su bolso) Ay…como me va a ver---a lo mejor me mira y se
espanta- Y si no le gusto? Bueno, pues entonces nada más nos tomamos un cafecito y
cada quien para su casa. Ay, Porque tardara tanto!...Ay creo que es el!...me dijo que
vendría vestido un poco formal. Ese debe ser!. Es muy alto y está muy guapo!…Ay Dios
mío, que estoy haciendo aquí de ridícula…mejor me desaparezco y me voy al baño como si
no lo hubiera… (Entra Angelo al punto que ella se agacha en la mesa para esconderse)
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(Comedia intima de Enrique Esquivel)

ESCENA 2
(Entra Angelo)

A: Esmeralda! Es usted?

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E: Ay (se pega al levantar la cabeza) Ay si…como esta? Mucho gusto en conocerlo?

A: Ya se iba? Llevaba mucho tiempo esperando?

E: No, no. Es que pensé que se me había perdido el celular y lo estaba buscando bajo la
mesa…

A: Aquí está, junto a su bolso.

E: Ay sí que tonta…no sabía dónde lo había dejado. (Sonríe entre embobada)

A: (Angelo le regresa la sonrisa. Divertido) Y me permite sentarme?

E: Ay… por supuesto. Es que últimamente no sé dónde tengo la cabeza…siéntese por


favor.

A: Antes….si me permite, me gustaría ir por un café a la barra Se le ofrece algo?

E: Si, claro,…No, no, no…quiero decir. Estoy bien…adelante…yo aquí espero… (Angelo se
va. Al público) Esmeralda!...Le dije que me llamaba Esmeralda, siempre me gusto ese
nombre por las telenovelas. Conchita nunca se me ha hecho muy atractivo. Ay…si está
muy guapo. Ay Dios mío que voy a hacer! Si solo de verlo me tiemblan las piernas.

A: (Regresa y muy cortes sonríe. Trae su taza y una pequeña jarra con café). Le traje un
poco más de café…por si se le había enfriado. Le sirvo un poco.

E: Ay que amable!. Gracias, gracias… Lo hace usted tan bien que de seguro ha trabajado
en un restorán antes.
Suite Esmeralda
(Comedia intima de Enrique Esquivel)

A: De chico me ayudaba en la escuela trabajando como mesero en una fonda. Y


efectivamente, ahora soy ayuda de cocina en un restorán aquí cerca. (Se sienta) Usted, si
me permite decirlo, tiene una sonrisa muy linda. Se lo han dicho antes?

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E: Bueno…cuando era joven me lo decían mis amigos. La verdad es que era muy
espontanea…de risa fácil me decían…pero luego uno cambia y tiene menos motivos para
sonreír…

A: Se puede disfrutar la vida si uno sabe descubrir sus deseos. Le puedo preguntar
Esmeralda… cuáles son sus deseos?

E: Mis deseos…pues bueno. Ya que usted lo pregunta. Esto no se lo he dicho a nadie. Uno
de mis deseos más grandes ha sido pasar toda una noche bailando a la luz de las estrellas.
Abrazar a Héctor el muchacho más guapo de mi grupo en la escuela…y de quien estuve
secretamente enamorada. La verdad es que no pude ir al baile de graduación porque
nadie quiso ir conmigo y esa ha sido una de las grandes tristezas de mi vida.

A: (Angelo se para, se quita el saco) Me permite un momento? (Hace un chasquido con


los dedos) Y esta era la música que le gustaba? (se escucha una música )

E: Si! Como lo ha sabido?

A: Le he dicho que soy capaz de cumplir todos sus deseos. Me permite.(le tiende la mano
invitándola a bailar)

E: No sé si pueda. Me da un poco de pena. Yo estoy muy grande para---

A: Shhhhhhh. (le retira la silla y lleva a bailar muy caballero. Se escucha Moon River
https://www.youtube.com/watch?v=BPMO769ZCkY ) Solo sienta la música en su cuerpo y
déjese llevar por la melodía. (La toma y bailan muy afectivos)

E: Sabes Angelo….te puedo decir Angelo?

A: Me puedes decir Angelo o Héctor…lo que tú quieras que sea…


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(Comedia intima de Enrique Esquivel)

E: Héctor…siempre quise decirte que aunque me dolió que nunca me invitaras al baile de
graduación…abrí la ventana por la noche y mire al cielo estrellado y abrazando mi

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almohada, me puse a bailar contigo. Era tanto el deseo de verte junto a mí, que no me
importo bailar sola y recargar mi cabeza en tu pecho imaginario (Angelo la recarga en su
pecho) y así pase la noche llena de una extraña felicidad: la felicidad de saber que mi
corazón estaría siempre contigo…aunque nunca más nos volveríamos a ver. (Bailan un
momento. Luego ella se detiene. Suavemente se aparta y lo ve. Al público) Fue mi primer
amor. Al cabo del tiempo supe que se había casado. Un alma caritativa se encargó de
contármelo. Luego alguien me comento que había quedado viudo. Ya estando casada tuve
el impulso de buscarle. Pero algo me detuvo. Ya no era la misma. Ahora estaba casada y
tenía a mis propios hijos…mis obligaciones. (Angelo le ofrece la mano. Caminan.)
Recuerdas lo bien que la pasábamos juntos platicando fuera de la escuela. Te acuerdas
cuando nos echábamos la vaca y nos íbamos juntos al bosque. Recuerdas aquél día que un
grupo de gente se reunió en la cancha techada del bosque y tocaban esa canción que era
tan pegajosa. (Se escucha La Macarena https://www.youtube.com/watch?v=iZ2e-xT81JA
0:27) Te acuerdas? Tu tratabas de enseñarme los pasos…pero a mí no me salían!… yo era
tan torpe! ….recuerdo que nos reíamos como locos tratando de seguir los pasos de los
demás. Esa noche la pasamos juntos bailando y divirtiendo toda la noche toda la noche
como si fuéramos novios… (Se aleja la música. Dejando de reírse) …pero no, recuerdo que
al llegar a la escuela en el parque….recuerdas como solo tenías ojos para Sofi, la güerita
del salón que tanto te gustaba y a la que invitaste a bailar en el baile de graduación. Era de
esperarse. Nunca fui bonita….pero igual me gustabas. (Lo ve un poco desconcertada)
Pero. Si eres tú. Eres Héctor…el muchacho alto de cabello rizado y ojos color oliva. (El
asiente) Que paso contigo?...que paso con nuestras vidas? Me da pena que hayas perdido
a tu mujer. Me he enterado que te has dado a la bebida y que tu carácter se ha vuelto
insoportable. Donde quedo el Héctor alegre, mi amigo querido al que quisiera ahora
abrazar y adorar para siempre. (Se abrazan) Esa fue la primera noche con Angelo y mi
primer deseo. Subimos a la habitación del hotel que había alquilado, a la suite Esmeralda…
y abrazados toda la noche como dice la canción: “me quería decir no sé qué cosas. Pero calle su
boca con mis besos Y así pasaron muchas pero muchas horas” (Ambos ríen)… Si… Angelo fue Héctor
para mi toda la noche…como dice la canción. (Se escucha un fragmento de en medio de la
canción “Amanecí en tus brazos” – min. 1:01 como transición)

https://www.youtube.com/watch?v=lfPFNLJwopg
Suite Esmeralda
(Comedia intima de Enrique Esquivel)

ESCENA 3

E: A la semana siguiente – no me aguante las ganas- y de plano volví a hacer otra cita con
Angelo. Un pensamiento extraño me había perseguido durante estos días. Había podido
por fin reconciliar el sueño en las noches, pero entonces al dormir viajaba hacia lugares
extraños en los que nunca había estado. Veía rostros y cuerpos de hombres jóvenes que

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me veían con deseo y buscaban acercarse a mí…y en el momento que iba a tocarlos…se
evaporaban, desaparecían como si nunca hubieran existido. Decidí tomar cartas en el
asunto y explorar con Angelo ese deseo oculto. Que me impedía a mí tocar a los hombres
de mi sueños y entregarme a ellos? Si existían solo en mi sueño. No es posible que sea tan
reprimida y tonta como cuando estoy despierta. En mis sueños siento por fin la libertad de
tomar la iniciativa y cuando estoy a punto de entrar en la acción, me despierto frustrada
de no haber consumado algún tipo de placer con los hombres de mis sueños. La realidad
de las cosas es que en toda mi vida de casada, no me había permitido nunca serle infiel a
mi querido Álvaro, más que en los sueños. Recuerdo que hubo un tiempo en que soñaba
seguido con Ramiro, un cargador del mercado que había llegado de Chiapas y nos pidió
trabajo en el puesto una temporada para arreglar la bodega y cargar la ropa y artesanía
que nos llegaba. En ese entonces, Álvaro estaba arrancando el puesto en el mercado de
Gómez y yo me quedaba mucho tiempo con Ramiro trabajando sola en el mercado de la
Juárez. Era alto y tenía unos brazos muy fuertes y muchos tatuajes en los brazos. Me
decía que había sido boxeador profesional durante un tiempo, pero que después se dio un
poco al vicio y comenzó a perder las peleas. Hasta que de plano lo dejaron de llamar para
competir y su mujer desesperada por no tener para mantener a sus hijos, decidió irse con
su hermana al otro lado. Él – me decía- que después se había hecho cristiano y su fe lo
había salvado de las garras del vicio. Por eso, ahora recuperado, iba rumbo al norte a
cruzar la frontera y reunirse con su familia. Ayyyyy, Era muy guapo y reservado.

ESCENA 4

(Aparece Ángelo vestido como un estibador. Suda y mueve unas cajas de lugar. Ella lo ve
como en un sueño. Toma un rebozo y una taza de café)

A: Ah perdone doña…es que no la había visto…se le ofrece algo…


Suite Esmeralda
(Comedia intima de Enrique Esquivel)

E: No…es que solo pensé has trabajado muy duro desde temprano y te traje un poco de
café.

A: Gracias patrona…usted si sabe tratar bien a la gente. (Toma el café)

E: Y te vas a quedar todavía más tiempo por acá? Tienes alguna noticia de tu familia?

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A: Sigo en contacto con una prima de mi mujer. Ayer hable con ella y me dio la mala
noticia de que mi mujer y mis hijos se habían ido de San Antonio. Que ahora se iban a vivir
a vivir a Dallas.

E. Y porque?

A: Que es que mi mujer había conocido ya a un gabacho de por allá que se iba a hacer
cargo de los niños. Mi prima me dijo que antes de irse, mi mujer le pidió que no me diera
razón de ella. Que lo que quería era hacer una nueva vida por allá y que ya no quería
saber nada de mí.

E: No tenía idea de lo que estabas pasando. Y tu cómo te sientes?

A: Estoy un poco dolido doña, pero la verdad me porte muy mal con ella y con los niños y
solo les deseo que les vaya bien. (Toma otro sorbo de café) Ya son más de tres años que
se fueron y que lastima que no llegaron a verme ahorita que me he alejado del vicio y
quiero comenzar una nueva vida.

E: Es muy triste que siendo tan joven hayas pasado por eso. (Lo ve un poco extasiada) Y
Ramiro es tu verdadero nombre?

A: Si. Porque?

E. Quiero decir…que si tienes algún otro nombre?

A: Si…me llamo también Angelo…Ramiro y yo somos la misma persona. Que es lo que


siempre le quisiste decir a Ramiro?
Suite Esmeralda
(Comedia intima de Enrique Esquivel)

E: Le quise decir… que siempre me había gustado. Que desde que llego a trabajar con
nosotros, he estado inquieta con su presencia. Que por la noche sueño, sueño con el…que
sueño con que toco su cuerpo y quisiera que no desapareciera de mi memoria. Me
hubiera gustado que al despedirse de mí no me hubiera dado solo la mano…sino que me
hubiera dejado tocar su cuerpo por un momento…que me hubiera dejado descifrar los
tatuajes en sus brazos y hubiera deseado que me abrazara antes de despedirse…

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A. Aquí está mi cuerpo…puedes tocarlo

E: Nunca había tocado antes un tatuaje y unos brazos tan fuertes… (Lo toca) He deseado
todo este tiempo estar cerca de ti Ramiro, pero no me atrevía. (Angelo sonríe invitante)
Siempre temí que te dieras cuenta que me gustabas….que cuando pasabas siempre te
miraba de reojo y soñaba con que me tomaras por la espalda y me envolvieras en tu
cuerpo toda la noche. No te conocía, pero me resultabas familiar. Tus palabras y tu
sonrisa resonaban en mi cuerpo como una dulce voz que me atrae y me dice…

A: No te preocupes Esmeralda, conmigo tus deseos están resguardados y protegidos. Al


decirlo has liberado la fuerza que te oprimía y ahora….

E: Y ahora…..Ahhhhhhhh…había sucedido lo que tanto deseaba. El maravilloso “bendito”


había sucedido y (Angelo la sienta. Ella ríe incrédula) mi segundo deseo se había cumplido.
Angelo me había llevado de viaje a mis recuerdos y había desentrañado mis miedos y mis
temores. Esa noche me quede sola en la habitación de la suite Esmeralda. (Sale Angelo)
Cuando Angelo se marchó, y por fin pude dormirme, volví a soñarme caminando. Era un
camino lleno de luz, donde el miedo no existía y las sonrisas y miradas de los demás eran
correspondidas con bendiciones y un abrazo… Ahora en mi sueño, los hombres que
tocaba y me tocaban, no desaparecían. Me tomaban en un cálido abrazo y me llevaban
felices y sonrientes por el paraíso de mis sueños…. (Se escucha el mismo fragmento de
“Amanecí en tus Brazos”)
Suite Esmeralda
(Comedia intima de Enrique Esquivel)
ESCENA 5
E: Y que creen?...Regrese a la semana siguiente al Continental. Esta vez -me prometí a mí
misma – que sería la última noche que me vería con Angelo. Los últimos días habían sido
como el paraíso…ya no me caían mal ni as radiaciones ni las medicinas y había recuperado
el apetito y las ganas de vivir. Ahora se había borrado la frustración de que los hombres de
mis sueños se evaporaran. Ahora dormía tranquilamente abrazada de ellos, sin temor y
con dulzura. Una fuerza se había liberado dentro de mí que me hacía verme de otra
manera. Una fuerza y vitalidad que fui viendo escapar de la mirada de mi marido Álvaro

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en los últimos años de nuestra vida juntos. Siempre Álvaro había sido muy responsable en
el trabajo y cuidaba de mí y nuestros hijos como el más ejemplar de los padres y esposo.
Pero en la noche…al estar juntos en la cama, en la oscuridad de la habitación….la pasión y
el deseo se habían evaporado…había dejado de existir. Como si nunca hubiéramos hecho
una vida juntos, como si de pronto durmiera en la noche con un extraño. Álvaro se
convirtió en un extraño, en un hombre que nunca me abrazaba y se hundía cada día más
en la rutina y en las presiones del trabajo. Un día, mientras arreglaba su ropa para llevarla
a lavar, se cayó de uno de los bolsos una pulserita. Una esclava de oro muy finita que tenía
una inscripción en el reverso y decía: mi tesoro y las letras A y E enlazadas en un corazón.
No era posible que se tratara de un regalo que fuera a darme a mí. Las letras eran A y E…
no podrían referirse a mi…Álvaro nunca supo nada de que me gustaba el nombre de
Esmeralda. Fue entonces cuando sospeche que tenía una amante. En los últimos meses
pasaba casi toda la semana en el puesto del mercado de Gómez y ya no se daba tiempo
entre semana para que comiéramos juntos. Varias veces le llamaba a la mitad del día y
traía el teléfono apagado, como si no quería que lo molestaran. Por las noches venía muy
cansado y me decía que lo dejara en paz, que no le hablara de los problemas del negocio.
Luego se levantaba muy temprano y no lo veía sino hasta ya tarde por la noche. Nunca me
atreví a confrontarlo, a preguntarle porque ya no hablábamos como antes o salíamos a
divertirnos un fin de semana. Que paso entre nosotros Álvaro?

ESCENA 6

(Entra Angelo, como si fuera Álvaro)

A: A mí no me importa lo que paso. Me importa lo que pasa. Hay días en que quisiera huir,
alejarme de mi mismo. Borrarme en alguien que no sea yo, aunque sea por un
Suite Esmeralda
(Comedia intima de Enrique Esquivel)
minuto…pero no. Tengo que regresar a la rutina, a la misma casa y a las mismas cosas.
Sentía que la vida se me estaba escapando…hasta que conocí a Evangelina. (Al público)
Era una empleada de un puesto cercano que siempre me sonreía. Una mujer más joven
que yo, que pasaba por el puesto llena de energía y con una sonrisa me decía…”Don
Álvaro, no deje de echarle ganas. Si todavía usted puede. Esta todavía de buen ver. “Y yo
me ponía colorado como si fuera todavía un chamaco que le daba pena ver a la novia. Un
día, había muy poco trabajo y Evita paso a saludarme y me invito a que nos fuéramos a
echar unas gorditas en el puesto de la esquina. Iba muy arreglada ese día, con su cabello

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rizado recogido en una coleta y sus enormes ojos que me miraban siempre alegres. Sus
dientes y boca eran muy bonitos. Me dijo que había estado casada, pero que el marido la
había abandonado por otra. Con sus ahorros había juntado para poner el puesto y con eso
había salido adelante. No había podido tener hijos y su marido siempre había querido
tener una familia grande. Por eso entendía que la hubiera dejado.

E: ….entonces déjame adivinarlo. Se siguieron viendo en el mercado y de ahí las cosas


fueron creciendo hasta que se hicieron amantes. No es así Álvaro? Aunque nunca faltaste
a la casa, hubo un momento en que te sentí distante, como si algo se hubiera roto entre
nosotros. Que hubiera necesitado hacer para que regresáramos, para recuperarte?

A: Hubiéramos tenido que ser honestos y convertirnos en la imagen de nuestros deseos.

E: ¿Qué quieres decir? No te entiendo.

A: Hablar. Hubiéramos tenido que hablar de nuestros vacíos y necesidades. Ser honestos
en una palabra y no dejarse llevar por la comodidad y la rutina. Debimos de habernos
reinventado para el otro. Convertirnos en la compañía de nuestros deseos. Luchar siempre
por mirarnos a los ojos, recordar en el día con palabras de que nos amamos y tocar en la
noche nuestros cuerpos en un abrazo… que nos lleve juntos hasta el amanecer.

E: En los últimos años ya no me tocabas ni me decías palabras de afecto…entonces yo me


encerraba en nuestro cuarto cuando te veía salir contento a horas que acostumbrabas
estar en casa, y me venía a la mente una canción que a mi papa le gustaba mucho
escuchar cuando murió mama. Recuerdo que me gustaba tararearla quedito, como para
que me arrullara y pudiera conciliar el sueño de sentir que ya no te importaba. (Angelo se
va al piano e inicia el acorde de Historia de un amor. Al inicio solo se escucha el piano,
Esmeralda la dice en voz alta, ambos intercalan más como un recitativo que una canción)
https://www.youtube.com/watch?v=ivFPsxbpOA4

ESCENA 7
Suite Esmeralda
(Comedia intima de Enrique Esquivel)
A:
(Toca la estrofa)
E:
Siempre fuiste la razón de mi existir
Adorarte para mí fue religión
En tus besos yo encontraba
El calor que me brindaba
El amor y la pasión

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A:
Es la historia de un amor
E:
Como no hay otro igual
A:
Que me hizo comprender
E:
Todo el bien, todo el mal
A:
Que le dio luz a mi vida
E:
Apagándola después
Hay que vida tan obscura
Sin tu amor no viviré

A: Esta noche Esmeralda, te voy a decir todo lo que te hubiera gustado escuchar de
Álvaro. Esta noche seré el Álvaro que te amara y abrazara hasta el amanecer. Vamos al
cuarto Esmeralda. El Álvaro de tus deseos te espera en la habitación, donde juntaremos
nuestros cuerpos en un abrazo, que durara toda la noche, toda la noche hasta el
amanecer…
(Solo se escucha la estrofa mientras ella se levanta, cambia de blusa va y se dirige donde
Álvaro)
A:
Es la historia de un amor
E:
Como no hay otro igual
A:
Que me hizo comprender
E:
Todo el bien, todo el mal
A:
Que le dio luz a mi vida
Suite Esmeralda
(Comedia intima de Enrique Esquivel)
E:
Apagándola después
Hay que vida tan obscura

A:
Sin tu amor no viviré

E: (más como un recitativo)


Siempre fuiste la razón de mi existir

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Adorarte para mí fue religión
En tus besos yo encontraba
El calor que me brindaba
El amor y la pasión
(Ambos se abrazan cariñosos)

ESCENA 8

E: La noche que Angelo y yo nos despedimos fue de alguna manera la más deseada. Me
había acostumbrado a la presencia angelical de este bello hombre y todos mis deseos
habían sido concedidos. Nos despediríamos donde nos conocimos…en el Continental. Le
pedí un último encuentro para agradecerle la felicidad que había traído a mi vida. (Ella
regresa a su mesa) Ese día llegue muy temprano a la mesa habitual, para darme cuenta
que el tiempo pasaba y Angelo nos aparecía. Ni un mensaje, ni una respuesta a mis
llamadas. Su imagen desapareció de mi teléfono sin ninguna explicación. Como si nunca
hubiera existido. No hay escapatoria. (Angelo da un acorde. Se incorpora, la lleva frente al
espejo, le quita la peluca y le pone un gorro de hospital y una bata) Mañana inicia la
radiación final. Los doctores están intentando todo en el último momento. Siento la
violencia de los tubos que meten a mi cuerpo esperando darme un poco de oxígeno para
respirar. Todo es un esfuerzo inútil por prolongar la vida en un corazón que ya está
condenado a dejar de latir. El no ver más a Angelo de alguna manera ha hecho que la
situación sea perfecta: un ángel baja y te susurra al oído que eres amada y su aliento te da
fuerzas para enfrentar lo que es imposible evitar. Al ver correr frente a ti los momentos
más importantes de tu vida, te das cuenta que el coraje no es más que un miedo
sostenido, un momento más. (Angelo se oculta tras el espejo) El 24 de Agosto al punto de
las 3:45 de la tarde, el último aliento de vida escapo de mis pulmones…como una brisa
que se libera después de una agitada lucha entre el mar y las estrellas. (Se escucha la
Historia de un amor al piano. Álvaro permanece detrás de ella) Muero con la mirada en
calma, viendo el rostro de mis seres amados: mis padres, mis queridos hijos y hermanos,
mi marido, y la silueta adorada de mi querido Angelo….que a la distancia agita sus brazos y
Suite Esmeralda
(Comedia intima de Enrique Esquivel)
me llama invitándome a llegar a la otra orilla. Sonríe con su dulce sonrisa y me dice
divertido al oído…

A: (Aparece detrás de ella con un saco de lentejuelas) No temas querida Esmeralda, vamos
a cruzar juntos y vamos a vivir solos en una isla en el mar, con columnas, templos,
escalinatas y puertos… allá, en la otra orilla, viviremos felices para siempre… (La música se
desvanece)… el paraíso, es un lugar sin temor y sin vergüenza donde todos recobramos la
inocencia y se cumplen todos nuestros deseos… (La abraza efusivo por la espalda) Ven!

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Ven conmigo Esmeralda. No temas... Se van a cumplir todos tus deseos….todos tus
deseos……

E: Lo único que sabes cuando estas a punto de morir, es que todo lo que importa es el
presente. Celebras la vida mirando hacia el horizonte en donde tu muerte se vuelve la
última celebración de la vida. Te llega entonces, una gran serenidad. Que has hecho con la
hermosa y salvaje vida que has vivido? Las cosas buenas o malas que has hecho dejan de
importar. Al morir, todos nuestros deseos se cubren de un manto de misericordia en el
que todo lo que has vivido y deseado se funden en una sola estrella, que te guía en tu
viaje hacia el horizonte final. Todo es absolutamente maravilloso.
(Se escucha el final de la canción https://www.youtube.com/watch?v=lfPFNLJwopg min.
1:20) o
E: A la lejanía escuchas la melodía de esa música que te llevo a tus deseos. Lo bueno de la
música que te ha acompañado en la vida, es que cuando te llega y te golpea en el corazón,
dejas de sentir el dolor. Solo sientes el calor de la gente que has tocado, el sabor de las
bocas que has besado y el aroma de los cuerpos, con los que hiciste el amor.
(Ella sonríe y se funde en un abrazo con Angelo. Aplausos La Macarena

https://www.youtube.com/watch?v=iZ2e-xT81JA ) FIN

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