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Historia del Arte IV

Año 2021

Catalina Rocca
Bruno Raffetto

Trabajo Práctico n° 3 Integrador


Reconocer y caracterizar los modos de producción del arte contemporáneo, desde una
perspectiva situada, que considera los factores geopolíticos e institucionales reguladores de
las condiciones de producción, de circulación y de exhibición de obras, prácticas y artistas.

Tema: Arte contemporáneo en contexto. Entre regionalismo, federalismo y globalización.

Subtema: Arte, naturaleza y paisaje: posibilidades y expansiones.


Introducción

En el marco del siguiente análisis decidimos trabajar con una producción artística realizada
por Laura Messing, una artista de trayectoria internacional que comenzó el desarrollo de su
obra visual bajo la disciplina de pintura y fotografía, a mediados de los años 80 luego de
terminar su formación como Arquitecta (Universidad de Buenos Aires, 1978).
Sus proyectos recientes se centran en las investigaciones sobre el rol del artista como
agente interno de los procesos políticos, socio-económicos y culturales que propician
impactos irreversibles en nuestro contexto natural. Para Messing las producciones artísticas
no son consecuencias, sino parte intrínseca de cada sistema y de los procesos de cambio
que accionan sobre las relaciones de los seres humanos, como parte de y en interconexión
con la naturaleza.
La obra seleccionada se titula Torres de marfil, una recreación de piezas del Siglo XVII
torneadas originalmente en marfil, reemplazado, en esta ocasión, por un material sintético
biodegradable.
En la obra de Laura Messing el entorno natural es el protagonista central en el desarrollo de
narrativas históricas y contemporáneas vinculadas al pensamiento y las estrategias de
economía contemporáneas.
En relación, abordaremos el eje de análisis “Arte, naturaleza y paisaje: posibilidades y
expansiones”, ya que la práctica artística de Missing se ancla en la justicia ambiental, el
cambio climático, la sostenibilidad y el modo en que los humanos afectan y alteran el
paisaje que habitan.
A partir de estas esculturas desarrolladas con materiales biodegradables, se interpela un
cambio en el comportamiento de los humanos y un compromiso para y con los recursos
naturales, a partir de nuevos vínculos entre el Arte y la Naturaleza.

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Análisis

Contexto ecológico

Tanto en Argentina como en el mundo, somos víctimas de la contaminación a causa de la


explotación y el uso indiscriminado de los recursos naturales, como el aire, el agua potable,
el suelo, los alimentos, los animales, consecuencias del cambio climático, la amenaza de
especies, enfermedades, como el desarrollo de esta pandemia, entre otras consecuencias.
Problemática en la cual, cada vez nos vemos más inmersos, sin retorno y con muy poco
enfoque político y económico. Y no es casual que los grandes contaminantes o exterminios
provengan de mega industrias como: Agroindustria, minería, petroleras, textiles,
sobrepesca, manejo de residuos.

Arte ecológico

El arte ecológico es una categoría o corriente en el campo del arte contemporáneo, que
emerge y se desarrolla con mayor énfasis a mayor deterioro ambiental a causa de la
globalización.
Esta categoría artística no sólo es abordada por artistas, sino que diversas disciplinas se
orientan en función de encarar proyectos científicos, ambientalistas, biólogos, zoólogos,
geólogos, botánicos, entre otros. Es un hacer vinculado y comprometido con el medio
ambiente.
Abarca diferentes enfoques, compromisos, materialidades, espacios, propuestas; arraigado
a dos ejes fundamentales, arte y naturaleza. Desde una mirada activista encara mensajes
sobre la protección, deterioro, abuso, propiedades, salud, cuidado, beneficios, urgencias del
medio ambiente.
Generando posibilidades y expansiones tanto de materiales, emplazamientos o montaje
como sus procedimientos o técnicas, a la hora de producir.

Es un arte que reúne la estética, la información y la conciencia, pudiendo expresarse a


través de varias disciplinas. En el caso elegido vemos como una artista, toma esta temática
y da forma a una escultura, que carga en sí misma, la historia; tanto del arte, como la de la
relación abusiva de los seres humanos con la naturaleza, haciendo también un llamado de
atención a las altas clases sociales y su relación con la explotación natural, ya que vemos
en su obra y en la vida misma, intrínsecamente relacionados ambos aspectos, los grandes
poderes económicos con el abuso indiscriminado y explotación de la naturaleza con
resultado negativos a grandes impactos, sin llevar una producción sustentable a costas de
ventajas económicas.

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En el arte contemporáneo, subyace la idea de recuperar temas no resueltos a lo largo de la
historia. En esta obra lo vemos recuperando una imagen del pasado, junto a una
problemática que aún existe y se profundiza. La sustentabilidad debe ser un paradigma para
mejorar la calidad de vida, ya que: ambiente, sociedad y economía, son eslabones de una
misma cadena.

Laura Messing, la artista que desarrolla la escultura “torres de marfil” (figura 1) no solo elige
este tema en esta ocasión, sino que toda su producción se ve atravesada por el
ambientalismo y el ecoarte. Continuamente realiza investigaciones en materialidades
artificiales de bases naturales, biodegradables, siendo una especie de fusión entre artista,
creadora, científica, ambientalista, y por sobre todo activista de una causa contemporánea y
urgente.
Se especializa en biomateriales, ¿qué son los biomateriales? Son polímeros orgánicos,
fabricados a partir de elementos naturales, desechos orgánicos como flores, café, sobrantes
de cultivos, cáscaras de frutas o de huevos, poda, etc.

¿Por qué le resulta importante indagar en este tipo de materiales?


Plantea Messing, en su página personal:
Porque estamos en un momento de crisis ambiental alarmante: contaminación, cambio
climático, escasez de agua potable, etc. Los materiales usados a diario en nuestras vidas
son contaminantes, extractivos y/o no respetan en su producción, recursos imprescindibles
para la vida como el agua potable. Mencionó por nombrar unos pocos: plásticos, cueros,
pinturas, cemento, algodón.
Si ideamos alternativas compostables, si reducimos nuestros consumos contaminantes y
entendemos el valor de la economía circular, seguramente no revertiremos el cambio
climático, pero sí podremos ralentizarlo (Torres de Marfil - lauramessing.com).

Estos conocimientos de años de experimentación e investigación, son transmitidos a la


comunidad en forma de talleres pagos, para fomentar y ampliar su activismo, pudiendo
acceder a ellos desde su página personal.

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Torres de marfil, 2019 - Laura Messing

Figura 1 - Turris Eburnea I, Esculturas desarrolladas en ácido poliláctico (2019)

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Figura 2 - Detalle Figura 3 - Turris eburnea S. XVII

Naturaleza Artificial
La obra de Messing, dentro del arte contemporáneo y arte ecológico, puede verse como una
obra ecopoética, donde desde una visión metafórica y estética genera una nueva relación
humano - naturaleza, pero también posee un
carácter de protesta donde exige cambios de
conductas en el modo de preservarla,
criticando viejas costumbres y
estructuras sociales.

Comparte con el Land art (corriente


contemporánea que nace en 1967
EE.UU, inicios del arte ambiental) o arte de la
tierra, su propósito; la idea de reflejar la relación
entre humanos y la tierra, meramente desde
el dolor debido al deterioro ambiental, pero se
diferencia la interacción humano-artista con el medio ambiente, el Earth art; se vale de
materias primas extraídas de la tierra o el mismo medio ambiente, emplazados en sus
mismos paisajes, dejando una huella en la naturaleza. El ecoarte de Messing tiene un
carácter tecnológico de alguna manera, ya que utiliza un material creado por ella, aunque
sus base sean materias primas orgánicas biodegradables, tienen un proceso, para luego ser
esculpido por una impresora 3D y ser emplazado en una galería artística. Es una obra y un
modo de producción sumamente contemporáneo, donde el mundo y problemáticas reales
del momento irrumpen en un hacer y tanto la tecnología como la ciencia son medios para
crear conciencia ambiental, dando catedra ecológica a través de su trabajo artístico
pudiendo finalizar en la transmisión de un cambio cultural en el modo de producir y
consumir.

Torres de marfil de Laura Messing toma de referencia visual piezas de marfil (extraídas de
colmillos de elefantes, figura 3) que luego son torneadas. Aquí hace referencia a la matanza
de elefantes en el siglo XVII, vista como ostentosa “materia prima” para la realización de
objetos de colección, de las clases sociales altas como Duques y cortesanos.
En esta obra, formalmente mantiene la idea de cáliz, pero el material es reemplazado por un
bioplástico sintético totalmente renovable y biodegradable que se manipula en forma de
hilos de ácido poliláctico (PLA), un material, extraído y procesado de la fermentación de la
caña de azúcar y la remolacha azucarera, luego esculpido por un impresora 3D manual,
generando una textura transparente casi inmaterial (figura 2), muestra una antítesis entre el
comportamiento de los seres humanos a lo largo de la historia frente a la naturaleza y desde

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su experiencia expande las nueva posibilidades de relacionarnos con la naturaleza frente a
esta problemática.

Esta obra escultórica, se centra en lo natural como narrativa, donde la preocupación


medioambiental como tema de la contemporaneidad toma forma. Removiendo antepasados
históricos donde el coleccionismo y ostentación generó explotación y masacres de
animales, geografías y seres humanos, que aún se sostienen en otros aspectos u otros
lugares del mundo.
Estas Turris Eburnea (figura 3), llegaron a mano de los Medici en Florencia como parte de
las exploraciones a América y Asia como botín de guerra, inmediatamente cautivaron por su
belleza pero más aún por ese arraigo a su materialidad que implicaba la sanguinaria
matanza de elefantes, hacía de ese objeto algo aún más suntuoso para el deleite.

Conclusión
El arte contemporáneo es más intrínseco a la vida misma, más que nunca la tecnología y la
explotación ambiental engloba problemas y diferencias sociales, económicas y sanitarias.
Los valores ecológicos son necesarios y el arte ambiental es la voz de la conciencia para
este nuevo paradigma que nos atraviesa y responsabiliza. El arte una vez más tiene esa
capacidad de interpelación desde otro lugar, otro lenguaje, desde la sensibilidad hacia la
hermenéutica del mensaje, abre el abanico de posibilidades hacia nuevas fronteras, desde
sus lenguajes divergentes hasta sus materialidades, que se expanden junto a su contexto;
el arte es y será el medio donde fluyen las revoluciones.

Laura Messing remata:


Frente a la destrucción evidente de la Naturaleza, aparecen nuevas formas de resistencia en
las que se involucran humanos y no humanos. La tierra que habitamos ya no es sólo un bien
a preservar, sino un escenario para aprender y desplegar una nueva inteligencia vincular.
Mientras continuemos viendo a la Naturaleza como ese otro lugar en el mundo que queda
fuera de las ciudades y de nosotros mismos, no podremos llegar a comprender qué está
pasando con la devastación de nuestros bosques naturales, las inundaciones que nos
devuelven el agua que los suelos de los monocultivos ya no pueden absorber, la sequía y los
nuevos desiertos, las mutaciones genéticas humanas, animales y vegetales, entre otras
cuestiones (Torres de Marfil - lauramessing.com).

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Bibliografía

Textos de cátedra:
- Giunta, Andrea ¿Cuándo empieza el arte contemporáneo?
- Guasch, A. El arte del siglo XX en sus exposiciones (Cap. 20)
- Premio Itaú Artes Visuales 11ª edición (2019-2020)
Páginas web:
- @lauramessing | Linktree
- Arte ecológico – HiSoUR Arte Cultura Historia
- Land Art - Wikipedia, la enciclopedia libre
- Arte ambiental - Wikipedia, la enciclopedia libre
- Arte Ambiental: qué es, características y artistas - Iberdrola

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