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VACUNAS.

2011;12(4):150-153


ISSN: 1576-9887

Volumen 12, Enero-Marzo 2011 1 N.°

Editorial
Las vacunaciones en la encrucijada
L. Salleras

Artículo especial

Vacunas
Evidencias científicas disponibles sobre la seguridad de las vacunas
Juan J. Picazo, Javier de Arístegui Fernández, Jose M. Arteagoitia Axpe,
Dolores Barranco Ordóñez, Aurelio Barricarte Gurrea, Xavier Bosch José, Javier Díez
Domingo, Fernando González Romo, Teresa Hernández-Sampelayo Matos, Jesús Ruiz
Contreras, Lluís Salleras i Sanmartí, Francisco Salmerón García, Luis Urbiztondo
Perdices

Consenso de sociedades científicas


Calendario de vacunaciones de la Asociación Española de Pediatría:
Recomendaciones 2011
Comité Asesor de Vacunas de la Asociación Española de Pediatría

www.elsevier.es/vac Indexada en EMBASE/Excerpta Médica,


Índice Médico Español, IBECS y Scopus. www.elsevier.es/vac

Imágenes en vacunología

Fiebre tifoidea. Una enfermedad que no hay que olvidar


Typhoid fever. A disease that must not be forgotten

A. Martínez Roiga y F.A. Moraga Llopb


aServicio de Pediatría. Hospital Universitari del Mar. Barcelona. España.
bÁrea Pediátrica, Hospital Universitari Vall d’Hebron. Universitat Autònoma de Barcelona. Barcelona. España.

Caso clínico

Niño de 8 años de edad, procedente y original de Bangladés,


que acude a la consulta por presentar fiebre desde hace 7
días. Acaba de regresar a España con toda su familia tras
haber estado 6 meses en su país, en una ciudad rural. El pro-
ceso febril se acompaña de tos leve durante los últimos 2 días,
algún vómito, dolor abdominal y alguna deposición de poca
consistencia.
En la anamnesis epidemiológica destaca la ingestión de
agua sin plenas garantías sanitarias. El resto de la familia no
presenta ningún tipo de clínica. Entre los antecedentes per-
sonales destacan hepatitis A hace 3 meses y algún episodio
de paludismo en estancias previas. Los antecedentes perina- Figura 1 – Fuligo labial en un niño con fiebre tifoidea.
tales y de desarrollo psicomotor no presentan ningún dato
anómalo. Ha seguido los calendarios vacunales de su país y
del nuestro, según el momento en que vivía en uno u otro Diagnóstico
país.
La exploración física muestra un estado general regular, Se hace una primera orientación diagnóstica como “síndrome
sensación estuporosa, fuligo labial (fig. 1), pequeñas úlceras febril en recién llegado de país del Sureste Asiático”. Esto
en la mucosa del labio (fig. 2), lengua tostada (fig. 3), sin lesio- comporta descartar en primer lugar la malaria y, en caso de
nes cutáneas ni exantemas; abdomen con ligero meteorismo, que ésta sea negativa, las siguientes enfermedades a conside-
depresible, hepatomegalia de 2 cm de consistencia normal, rar serán la fiebre tifoidea y la tuberculosis. Se procedió a
levemente dolorosa a la palpación, ausencia de esplenomega- realizar exploraciones complementarias con fines diagnósti-
lia; auscultación respiratoria normal, auscultación cardíaca cos, cuyos resultados fueron: gota gruesa y determinación de
normal; ausencia de rigidez de nuca y de anomalías neuroló- antígeno de Plasmodium (en dos muestras) negativa; aspar-
gicas; faringe y otoscopia normales; no se palpan adenopa- tato-transaminasa 120 U/l, alanina-aminotransferasa 114 U/l,
tías. urea 35 mg/dl, creatinina 0,67 mg/dl, hemoglobina 13,2, volu-

Sección coordinada por el Dr. F.A. Moraga Llop.


Correspondencia: Dr. A. Martínez Roig. Correo electrónico: 6226amr@comb.cat

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Figura 2 – Úlceras en el labio, conocidas como úlceras Figura 3 – Lengua tostada.


de Devic.

men corpuscular medio 73,5, leucocitos 3.690, neutrófilos tras ingerir agua o alimentos contaminados con heces u orina
segmentados 66%, linfocitos 27%, monocitos 6%, eosinófilos de enfermos o de portadores asintomáticos de la bacteria. En
0%, plaquetas 210.000, proteína C reactiva 3,1 mg/dl; iono- los últimos 25 años ha dejado de ser un problema sanitario en
grama y gasometría normales; sedimento de orina normal. Se nuestro entorno, al igual que en todos los países desarrolla-
recoge muestra para hemocultivo y se practica la prueba de la dos, donde actualmente el diagnóstico de casos suele ir aso-
tuberculina. Radiografía de tórax normal. En la ecografía ciado a inmigración o a viajeros procedentes de países con
abdominal se observan numerosas adenopatías, de hasta 1,5 redes de saneamiento del agua deficitarias1,2.
cm, en la fosa ilíaca derecha, con edema mucoso difuso en las El pediatra o el internista ya no están acostumbrados a sus
paredes del íleon. manifestaciones clínicas, pero deben pensar en ella como
A las 36 horas se confirma el diagnóstico con la positividad posible diagnóstico ante un recién llegado con síndrome febril
del hemocultivo para Salmonella typhi resistente a la ampici- de un país con riesgo. Su período de incubación habitual es de
lina y al cotrimoxazol. Más tarde, se conoció la positividad del 7-14 días, aunque en algún caso puede ser más prolongado,
coprocultivo al mismo microorganismo. Se realizó trata- por lo que debe considerarse entre los posibles diagnósticos
miento con cefixima durante 14 días. La evolución fue buena, de un episodio febril aparecido en las 2-3 semanas posteriores
con desaparición de la fiebre a partir del segundo día de tra- a la llegada3.
tamiento. Los coprocultivos practicados posteriormente fue- La aparición de cepas de S. typhi multirresistentes (cloran-
ron negativos. fenicol, cotrimoxazol, ampicilina), así como resistentes a las
quinolonas, ha incrementado la gravedad de la enfermedad y
la tasa de portadores asintomáticos4. Es evidente que las
Comentarios mejoras en la salud pública con higienización de las aguas es
el paso fundamental para eliminar o reducir la enfermedad.
La fiebre tifoidea es una enfermedad cuyo reservorio es las La vacunación estaría indicada en las zonas de riesgo alto, en
personas y su mecanismo de transmisión, la vía fecal-oral, los viajeros que estarán expuestos largo tiempo a alimentos
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y bebidas contaminadas, en las personas expuestas a porta- ción genética, capaz de inducir efecto protector. Se considera
dores sanos y en personal de laboratorio que habitualmente que hay protección aproximadamente unos 7-10 días después
trabaja con S. typhi. de la última dosis. Fundamentalmente se dirige contra el
antígeno O. Genera una tasa de anticuerpos circulantes
menor que la vacuna polisacárida, pero induce una respuesta
Vacunas frente a la fiebre tifoidea inmunitaria celular y una importante producción de IgA
secretora en el intestino, que se cree que es la que confiere la
En España se comercializan dos tipos de preparaciones vacu- protección. Tiene eficacia protectora en el 56% de los casos
nales: a) la oral, que es una vacuna viva atenuada (Ty21a), y b) contra Salmonella enterica subespecie enterica, serotipo para-
la parenteral, que es una vacuna inactivada (polisacárida cap- typhi B.
sular Vi). Ambas consiguen una eficacia protectora entre el 50 La composición de la vacuna, además de bacterias,
y el 80%. En algunos países se dispone de una vacuna combi- incluye sacarosa, ácido ascórbico, aminoácidos, estearato de
nada fiebre tifoidea y hepatitis A, de gran interés en el calen- magnesio y lactosa. Existe una forma galénica en cápsulas y
dario del viajero. otra en suspensión líquida; la segunda es la utilizada en los
países en desarrollo, ya que puede usarse desde los 6 años
Vacuna de polisacárido Vi o parenteral de edad.
La eficacia se considera del 51%, sin diferencias entre adul-
Es una vacuna inactivada cuyo componente activo es el antí- tos y niños. A los 3 años de la administración se mantiene en
geno polisacárido capsular Vi de la cepa Ty2, tras purificación un 67% de los vacunados, y a los 7 años, en un 62% de los
por centrifugado selectivo y precipitación de los cultivos. Al residentes en zonas endémicas. Se considera que cada 3 años
tratarse de una vacuna polisacárida, es T-independiente y debe revacunarse si persiste la exposición al agente. Las per-
estimula la inmunidad humoral, pero no la celular. Es poco sonas que viven en países no endémicos y han de viajar a
inmunógena en los menores de 2 años, por lo que sólo debe otros que sí lo son, deben vacunarse cada año.
administrarse a partir de esa edad. La respuesta inmunitaria Los efectos secundarios suelen ser poco frecuentes, pero si
de inmunoglobulina (Ig) G aparece a los 15 días y una sola aparecen son de tipo gastrointestinal.
dosis proporciona protección durante un tiempo aproximado No debe administrarse conjuntamente con alimentos ni
de 3-7 años, aunque estudios realizados en Nepal, China y el bebidas calientes, ya que inactivarían al microorganismo, lo
sur de África han hallado concentraciones de anticuerpos que obliga a tomarla 1 hora antes o 2 horas después de cual-
protectoras a los 10 años. Para mantener el grado de protec- quier comida. Está indicada a partir de los 6 años de edad. Ha
ción en las personas de los países de riesgo o en situaciones de conservarse entre 2 y 8 °C.
laborales de riesgo, es preciso revacunar cada 3 años. La efica- Sus contraindicaciones incluyen la hipersensibilidad a
cia se estima entre un 70 y un 80%. cualquiera de los componentes, fiebre o enfermedad aguda
Se administra por vía subcutánea o intramuscular. Si bien concomitante, menores de 6 años, embarazo e inmunodepre-
su conservación debe ser entre 2 y 8 °C, se mantiene estable sión. Deberá posponerse su administración en los niños con
durante 2 años a 22 °C, y 6 meses a 37 °C. Debe evitarse su diarrea. Puede administrarse a las personas con infección por
exposición a la luz. el VIH con un recuento de CD4 superior a 200 células. Los
Las reacciones adversas sistémicas o locales son poco fre- fármacos antiparasitarios con efecto antimicrobiano, como la
cuentes. Las locales son las propias de cualquier vacunación mefloquina, la cloroquina y el proguanil, deben evitarse
subcutánea o intramuscular, y las sistémicas pueden consistir durante los 3 días anteriores y posteriores a la vacunación. No
en mialgias, cefalea, dolor abdominal, náuseas, diarrea, vómi- presenta interacción con otras vacunas5-7.
tos o febrícula, pero siempre en proporciones que no llegan
al 8%. ¿Quién debe vacunarse?
No debe administrarse a los menores de 2 años, así como
tampoco a personas con hipersensibilidad a alguno de sus — En los países de renta alta, la vacunación debe dirigirse a
componentes (polisacárido capsular Vi, fenol o solución tam- quienes vayan a viajar a zonas con riesgo alto de la enfer-
pón isotónica). Puede administrarse junto con otras vacunas medad, como el norte y el oeste de África, y el sur de Asia,
recomendadas para los viajes internacionales y siguiendo las en particular India, Pakistán y Bangladés. Está especial-
sistemáticas de los calendarios vacunales. También puede mente indicada en las personas que vayan a permanecer
administrarse a personas con alteraciones del sistema inmu- más de 1 mes, o vayan a vivir expuestos a condiciones
nitario o infectadas por el virus de la inmunodeficiencia higiénicas deficitarias y en zonas donde pueda haber
humana (VIH); en este caso, la respuesta será proporcional al microorganismos resistentes. Igualmente, deben vacu-
número de linfocitos CD45,6. En España sólo está disponible la narse los emigrantes que vuelven a sus países endémi-
vacuna monovalente, pero en el Reino Unido se encuentra cos.
combinada con la de la hepatitis A. — Personas en contacto con portadores de S. typhi.
— Personal de laboratorio que trabaje con S. typhi.
Vacuna Ty21a — En los países de alta endemia, y en especial en aquéllos con
una incidencia de resistencias alta, debería considerarse la
Es una vacuna atenuada cuyo componente activo son bacte- situación epidemiológica local y aplicarla en los calenda-
rias atenuadas de la cepa de S. typhi Ty21a, obtenida por muta- rios vacunales propios7,8.
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