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Desde la aprobación de la regulación online en Colombia hace dos años, toda la región
latinoamericana ha empezado a despertar ante las opciones de desarrollo que ofrece el
sector del juego. Además de reclamar un desarrollo de segunda generación en este país,
otros han empezado a seguir su estela y es cuestión de tiempo que el juego presencial y el
online convivan en una de las regiones con más potencial de desarrollo del mundo.
Brasil.- El país dio un gran paso adelante al legalizar por primera vez las apuestas
deportivas online a finales de 2018. Tras desbloquear una legislación que llevaba atascada
años, ahora se trabaja en el modelo a aplicar. El Ministerio de Economía pretende definir
antes de junio el modelo más viable para la explotación de apuestas deportivas con cuota
fija —en que el apostador sabe de antemano cuánto dinero recibirá si gana—, como parte
del proceso de reglamentación de la Ley 13.756 / 2018. El Gobierno tiene dos años,
prorrogables por otros dos, para desarrollar la ley.
Perú .- Parece claro que Perú contará pronto con esta norma por primera vez, puesto que el
Congreso está estudiando un proyecto que incluye varios aspectos relativos a las apuestas
deportivas. La ley propone un gravamen para el sector igual que el que ya abonan casinos y
loterías. Así, los operadores online pagarían una tasa del 12 por ciento, en función de la
diferencia entre lo que los operadores ganen y lo que abonen. Las apuestas deportivas se
autorizarán en locales anexos a un casino autorizado. Las casas de apuestas pagarán un
impuesto del 12 por ciento sobre sus ingresos netos. La propuesta de ley establece un
período de adecuación de 180 días para las empresas que vienen ofreciendo apuestas
deportivas de forma alegal.
Panamá.- El impuesto del 5,5 por ciento de las ganancias netas anuales en bingos, casinos,
máquinas traganíqueles y apuestas deportivas sigue pasando factura a la industria de juegos
de azar, que al finalizar el 2018 presentó uno de sus peores resultados. El Gobierno de
Panamá estableció un impuesto del 5,5 por ciento en 2015 a los juegos de azar para
sufragar un aumento de las pensiones y jubilaciones. Desde el 2015 hasta final del 2018, se
han perdido 4.500 empleos fijos y 3.000 eventuales en los casinos, debido a que los
números rojos los han obligado a reducir su personal. En cuanto a las apuestas deportivas,
sufrieron una caída del 4,8 por ciento en 2018 (111 millones de dólares), por lo que los
operadores exigen una reforma legal y la apertura de los bancos a recibir dinero del sector
de los juegos de azar.
Uruguay.- El juego físico está regulado y es legal en el país, mientras que, en el caso del
juego online, la Dirección Nacional de Loterías y Quinielas autorizó en 2018 a un único
operador, Supermatch, a ofrecerlas de forma legal. De hecho, el Gobierno bloqueó 178
webs de juego ilegal en 2018. Por su parte, el único operador de apuestas ha cerrado un
acuerdo con la NBA por el que se ha convertido en partner oficial de juego de la liga de
básquet estadounidense. La NBA tendrá presencia en las 6.000 tiendas que opera
Supermatch en el país. Además, el acuerdo les dará a ambas marcas visibilidad en las
plataformas online.