Está en la página 1de 8

“En 1910 París era la capital del mundo.

La Conferencia de Paz era el asunto más importante del momento y


sus participantes, las personas más poderosas del planeta. Se reunían día tras día. Discutían, debatían, se
peleaban y volvían a reconciliarse. Hacían pactos. Redactaban tratados. Creaban nuevos países y nuevas
organizaciones. Cenaban juntos y juntos iban al teatro. Durante seis meses, entre enero y junio, París fue a la
vez el gobierno del mundo, su tribunal de apelación y su parlamento, el lugar donde se centraban sus temores
y sus esperanzas. Oficialmente la Conferencia de Paz duró todavía más, hasta 1920, pero aquellos primeros
seis meses son los que cuentan, pues en ellos se tomaron las decisiones clave y se encadenaron crucialmente los
acontecimientos. El mundo nunca había visto nada parecido ni volverá a verlo.” (p. 19)
Europa antes y después de la Gran Guerra
Evolución de las fronteras
en Europa

También podría gustarte