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CLAVES PARA PENSAR EL CAMBIO: ENSAYOS SOBRE PSICOLOGIA DEL DESARROLLO JORGE LARREAMENDY-JOERNS REBECA PUCHE-NAVARRO ANDREA RESTREPO IBIZA CoMPILADORES UNIVERSIDAD DE LOS ANDES FACULTAD DE CIENCIAS SOCIALES - CESO DEPARTAMENTO DE PsICOLOGiA CapituLo TV RELACIONES AFECTIVAS TEMPRANAS: PRESUPUESTOS TEORICOS Y PREGUNTAS FUNDAMENTALES Sonia Carrillo Avila Intreduccién El desarrollo humano es un proceso complejo que involucra una diversidad de variables, relaciones y contextos. El curso que tome el desarrollo para un indivi- duo en particular depende de la interaccién entre estos elementos a lo largo de la vida. Diversos teéricos del desarrollo han tratado de identificar, a lo largo de las ‘iltimas décadas, un conjunto de principios fundamentales del area que reflejen una integracién en relacién con las estrategias de investigacién, problemas de estudio, concepciones acerca del desarrollo y niveles de explicacién. Por ejemplo, Magnusson y Cairns (1996) enfatizan la necesidad de reflexionar sobre unos pre supuestos fundamentales que permitan hablar de un “marco tedrico unificado” dentro de la psicologia del desarrollo. Otros autores coinciden en la importancia de partir de una orientacién comin que guie la investigacién en el area, y dentro de la cual se definan los principios, marcos teéricos y metodologias para abordar las preguntas de investigacién (Elder, 1996; Elder y Johnson, 2002). Dentro de las diferentes propuestas que han surgido se pueden identificar presupuestos que son determinantes para el area del desarrollo social y, particularmente, para el abordaje de las relaciones afectivas tempranas, objeto del presente capitulo; algu- nos de éstos estan relacionados con el concepto mismo de desarrollo, otros, con tematicas fundamentales que se deben abordar dentro del estudio del desarrollo humano, y otros se centran en perspectivas teéricas que enmarean el desarrollo de los individuos. Con respecto a conceptos basicos del desarrollo, uno de los principios que se va a constituir como central dentro del rea social y emocional es que el desarrollo 96 Sonta Carrio AviLa humano es un proceso continuo y dindmico. El nifio es un agente activo en este proceso; los individuos construyen el curso de su desarrollo a través del contacto con el medio, que les brinda estimulos y oportunidades de aprendizaje y cambio. El desarrollo humano es un proceso integrado que involucra relaciones constantes entre los diferentes procesos que conforman al individuo (fisicos, cognitivos y emocionales). Los procesos que ocurren durante los primeros afios de vida van a influir de manera significativa en otros procesos posteriores en el desarrollo del individuo (Elder y Johnson, 2002; Magnusson y Cairns, 1996; Shonkoff y Phillips, 2001). Por otra parte, los diversos procesos del desarrollo se enmarcan en el cardc- ter adaptativo de la conducta de los individuos. Los procesos de socializacién son de gran importancia para la adaptacién de especies sociales (animales y huma- nos). En consecuencia, las relaciones con otros se constituyen en un tema esencial de investigacién dentro de la psicologia del desarrollo humano. Las relaciones afectivas tempranas que establece el nifio con adultos y con otros nifios se consti- tuyen en los cimientos de su proceso de socializacién; estas relaciones favorecen la adaptacién y ajuste psicoldgico y social de los nifios dentro de la familia y en otros contextos 0 se convierten en factores de riesgo y “disfuncionalidad” para su desarrollo social (Kagan, 1994; Maccoby, 1994; Shonkoff y Phillips, 2001; Sroufe, Egeland, Carlson y Collins, 2005). Del anterior principio, que enfatiza el valor adaptativo de la socializacién, se deriva la idea de que el contexto fundamental del desarrollo de los humanos es el ambiente social, primero, a través de la familia y, posteriormente, en otros contextos sociales fuera del niicleo familiar. Algunos autores han enfatizado, en consecuencia, que el desarrollo del individuo ocurre dentro de un contexto y que los individuos humanos, mas que otras especies, muestran la capacidad de modi- ficar los contextos en los que se desarrollan, con implicaciones para su control del ambiente, pero también para la complejidad del mismo (Bronfenbrenner, 2005). El proceso del desarrollo humano se lleva a cabo gracias a relaciones bidireccio- nales que el nifio establece con otros en su contexto inmediato (familia) y en otros contextos importantes en su vida (escuela, comunidad). El desarrollo del nifio depende de las caracteristicas de las relaciones que éste establece con las perso- nas a cargo de su cuidado dentro de la familia y fuera de ella, Las interacciones entre Lo: iolégico, ambiental y cultural son esenciales en el proceso del desarrollo. La comprensién de este proceso implica elementos del funcionamien- o ontogenético, al igual que aspectos evolutivos de tipo filogenético (Bjorklund, Yunger y Pellegrini, 2002; Bronfenbrenner y Morris, 2006; Lerner, Castellino, Patterson, Villarruel y McKinney, 2002; Shonkoff y Phillips, 2001; Sroufe, Ege- land, Carlson y Collins, 2005). [RELACIONES AFECTIVAS TEMPRANAS: PRESUPUESTOS TEORICOS Y PREGUNTAS FUNDAMENTALES 97 Estos principios tienen claras implicaciones y una directa relacién con el es- tudio del desarrollo social, Uno de los temas centrales en el estudio del drea social y emocional del desarrollo humano es el establecimiento de las relaciones sociales y afectivas. El presente capitulo se centra en discutir el proceso a través del cual los individuos establecen vinculos afectivos cercanos con otros, los mecanismos que intervienen en el establecimiento de estas relaciones en los primeros afios de vida y sus implicaciones en el proceso de socializacién y ajuste de los nifios en el futuro, El érea del desarrollo social ha sido definida por algunos autores como aque- lla que estudia los procesos socioemocionales y los mecanismos involuerados en el establecimiento de relaciones afectivas; adicionalmente, aspectos y variables relacionadas con las emociones, creencias, patrones de comunicacién y habilida- des presentes en las interacciones sociales a lo largo de la vida son temas propios de esta drea de estudio Grusee y Lytton, 1988; Santrock, 2006). Investigar el desarrollo socioemocional implica, entonces, el estudio de las relaciones que el individuo establece con otros desde el momento de su nacimiento, y su evolucién a través del tiempo y de los diferentes contextos dentro de los que el individuo se desenvuelve. La literatura sobre las relaciones sociales y afectivas que se ha publicado en las tiltimas décadas es muy diversa. El estudio de esta temética ha incluido un amplio niimero de conceptos, problemas de investigacién y aproximaciones teéri- cas, Algunas preguntas se pueden identificar al revisar los trabajos tanto teéricos como empiricos que se han desarrollado en esta area. Primero, {por qué los hu- manos forman vinculos afectivos? Segundo, ;con quiénes forman estos vineulos 0 relaciones? Tercero, eudles son las caracteristicas de estas relaciones? Cuarto, jeudles son las implicaciones adaptativas de los diferentes vinculos afectivos? Las respuestas a estas importantes preguntas no han surgido de un cuerpo ‘nico de investigacién, ni siempre han mostrado integracién entre ellas. Sin embargo, el panorama del area de la psicologia del desarrollo social y emocional de hoy nos permite dar respuestas a estas preguntas con un nivel de detalle e integracién que ciertamente no posefamos cuando, a principios del siglo XX, Freud, Watson y otros pioneros de la ciencia del desarrollo humano se plantearon las preguntas iniciales que guiaron nuestro camino investigativo. Diversos autores coinciden en afirmar que la manera como los nifios se re- lacionan afectivamente con otros y los modelos de relacién que se establecen des- de el momento del nacimiento son determinantes en su proceso de socializacién (Ainsworth, 1991; Grusec y Lytton, 1988; Weinfield, 2005; Weinfield, Sroufe, Egeland y Carlson, 1999), Estos autores igualmente sostienen que los patrones de relacién tempranos que surgen principalmente en el contexto familiar, y que 98 Sonta Carritto AviLa se afianzan en los primeros afios de vida, influyen significativamente en el tipo de relacién que los nifios establecen con otros y en su adaptacién social posterior a otros contextos importantes dentro de su desarrollo (por ejemplo, la escuela) (Ainsworth, 1991; Sroufe, Egeland, Carlson y Collins, 2005; Thompson, 1999). Perspectivas tedricas del desarrollo y el estudio de las relaciones afectivas Desde el momento del nacimiento, y a lo largo de las diferentes etapas de su desa- rrollo, el nifio establece relaciones con otros. La comprensién del proceso a través del cual se forman estas relaciones y de los mecanismos involucrados en su inicio y con- solidacién depende estrechamente del marco conceptual dentro del cual se estudien dichos fenémenos. Los teéricos del desarrollo han abordado el estudio de problemas de investigacién relacionados con el drea social y emocional bajo diversas aproxima- ciones tedricas; cada aproximacién define un conjunto de elementos esenciales que describen y explican los fenémenos asociados con la formacién, mantenimiento y desarrollo de las relaciones afectivas. En la presente seccién se describiran algunas de Jas perspectivas tedricas generales del desarrollo que tienen importantes implicacio- nes para el estudio de los vinculos afectivos tempranos, En particular, se presentaran la perspectiva ecolégico-contextual y la perspectiva evolutiva, que han enriquecido a las teorias clésicas en la comprensién del desarrollo humano. Perspectiva ecolégico-contextual en el desarrollo socioafectivo Los organismos son sistemas complejos que estén conformados por un conjun- to de subsistemas esenciales de los cuales depende su funcionamiento fisico, cognitivo y social. Estos subsistemas actiian de manera dindmica e integrada en los diferentes ambitos de accién del individuo y van cambiando a medida que éste se desarrolla, De acuerdo con diversos autores que proponen la perspectiva ecolégico-contextual, para comprender el proceso ontogenético del organismo en desarrollo es imprescindible ubicarlo dentro de una serie de contextos o sistemas. Dentro de esta aproximacién, el desarrollo se da gracias al establecimiento de relaciones bidireccionales con otros en los contextos inmediatos y no inmediatos en los que el individuo se desenvuelve, En la literatura del desarrollo social y emocional se encuentran diversos autores que proponen esta perspectiva como el marco teérico fundamental para la comprensién del proceso de formacién y desarrollo de las relaciones afectivas; si bien estos autores asignan diferentes de~ nominaciones a la misma, éstas mantienen unos elementos esenciales que guian [RELACIONES AFECTIVAS TEMPRANAS: PRESUPUESTOS TEORICOS Y PREGUNTAS FUNDAMENTALES 99 el analisis y la investigacién de los problemas dentro de esta area del desarrollo. A continuacién se presentan los presupuestos de la perspectiva ecolégico-con- textual planteados por dos de los principales exponentes de este abordaje, Urie Bonfenbrenner y Richard Lerner. En su descripcién del modelo bioecolégico del desarrollo humano, Bronfen- brenner y Morris (2006) enfatizan que “especialmente en las etapas tempranas, pero también a lo largo del curso de la vida, el desarrollo humano ocurre a través de procesos de interaccién reciproca cada vez mas complejos entre un organismo humano biopsicosocial activo que evoluciona y las personas, objetos y simbolos en su ambiente externo inmediato” (p. 797). Siguiendo estos planteamientos, el andlisis de las relaciones afectivas desde la perspectiva ecolégico-contextual involucra elementos del individuo (como sis- tema basico), de los otros presentes en los sistemas en los que éste se desenvuelve y de las constantes relaciones que se establecen entre ellos a lo largo de la vida (ver la figura 1). Figura 1. Modelo ecolégico-contextual de! desarrollo humano, Adaptado de Bronferbrenner (1979) y Lener y cols. (2002) [MACROSISTEMA Sociedad-Cultura 100 Sonta Carritto AviLa El desarrollo de un nifio se ve inicialmente influenciado por su familia, y en este contexto, por sus padres, hermanos, abuelos y otras personas que a través del contexto de influencia basica inicial tengan una interaccién significativa con él. Posteriormente, la interaccién del nifio se extiende a otros contextos menos inmediatos. Con frecuencia pensamos en la escuela como un ejemplo de este tipo de contexto social, donde el nifio interaetiia con pares, con nifios no familiares de otras edades y con sus maestros, Sin embargo, otros ejemplos de contextos no inmediatos ineluyen el barrio donde habita la familia y los ambientes laborales de los padres, los cuales se constituyen en una fuente importante de influencia, en ocasiones de manera directa pero mas frecuentemente en forma indirecta. Finalmente, el nifio est inmerso en contextos mas lejanos como la comunidad, la sociedad y la cultura, cuya influencia en el desarrollo del individuo se ve reflejada en creencias, tradiciones, instituciones sociales, politicas piblicas, eteétera El desarrollo social y afectivo del nifio esta determinado por las relaciones bidireccionales que éste establece dentro de cada contexto o sistema, al igual que por las relaciones que se generan entre los sistemas. La perspectiva ecologico- contextual permite un andlisis comprehensivo de los vinculos afectivos, de sus caracteristicas y de la manera como éstos cambian desde el nacimiento y a través de los primeros afios de la vida. La investigacién en el drea de las relaciones afec~ tivas tempranas bajo esta aproximacién implica la consideracién de un numero amplio de variables importantes dentro de los diferentes sistemas, que conducira a una comprensién més detallada de los fenémenos relacionados con el estableci- miento, mantenimiento y transformacién de los vinculos afectivos en las etapas tempranas de la vida. Perspectiva evolutiva del desarrollo socioafectivo Numerosos tedricos de la psicologia del desarrollo coinciden en afirmar que el contexto familiar se constituye en uno de los contextos fundamentales dentro del cual se forman las bases del desarrollo en las diferentes éreas que componen el individuo. Los patrones de relacién que se establecen con otros, la estimula- cién ambiental y las oportunidades de aprendizaje, entre otros, que tienen lugar dentro de la familia influyen significativamente en la trayectoria que tome el proceso de desarrollo del nifio. Tanto en los principios del desarrollo como en la aproximacién ecolégico-contextual presentados previamente, se observa un se~ ialamiento importante a las influencias ambientales en el desarrollo de los nifios. Planteamientos recientes de otros autores amplian las posibilidades de andlisis del desarrollo humano a otras perspectivas que incluyen elementos provenientes de disciplinas como la biologia, Desarrollos teéricos y empiricos de esta disciplina, [RELACIONES AFECTIVAS TEMPRANAS: PRESUPUESTOS TEORICOS Y PREGUNTAS FUNDAMENTALES 101 a través de la fisiologia, la etologia, la ecologia conductual, han ampliado los horizontes explicativos de la psicologia y enriquecido nuestra comprensién de los fenémenos del desarrollo. Autores como Bjorklund, Yunger y Pellegrini (2002), Simpson (1999) y Bel- sky (1999) sugieren una aproximacién evolutiva en el estudio de las diversas re- laciones que se desarrollan dentro de la familia y de los patrones de interaccién y crianza de los hijos. Estos autores se refieren a una psicologia del desarrollo evolucionista y enfatizan dentro de esta aproximacién diferentes principios que permiten analizar el rol de la evolucién en el desarrollo de los diferentes procesos psicolégicos en el ser humano y la importancia de hallazgos provenientes de la investigacién con otras especies en la formulacién de teorias 0 en la explicacién de fenémenos relacionados con el desarrollo de los indi luos. El drea del desarrollo social y emocional ha reeibido una gran influencia de investigaciones en el campo de la etologia. Conceptos de la teoria de la evolucién, al igual que hallazgos de estudios con otras especies animales, se han constituido en antecedentes importantes en la estructuracién de teorias sobre el desarrollo afeetivo en los humanos Una de las principales teorfas que explican el proceso del desarrollo social y afectivo y los factores que dan lugar al establecimiento de vinculos afectivos en las etapas tempranas de la vida es la Teoria del Apego. Sus origenes se remontan a los afios 50 y 60 del siglo XX, época en la que hallazgos de estudios de etdlogos prominentes estaban teniendo un impacto importante en algunas reas de la psicologia. Los trabajos de etélogos como Konrad Lorenz y psicélogos experimentales como Harry Harlow se convirtieron en antecedentes centrales en el desarrollo de la teoria. El uso de una aproximacién comparada en el entendimiento del origen, desarrollo e implicaciones de las relaciones afectivas para los organismos permitié ampliar el espectro de andlisis y obtener una visién comprehensiva del fenémeno del apego (Carrillo y Gutiérrez, 2000). En la primera mitad del siglo XX, diversos autores enfatizaban la importan- cia de los vinculos afectivos tempranos; sin embargo, éstos se centraban en un tipo particular de relacién: la relacién madre-hijo. Adicionalmente, las explicaciones de los mecanismos a través de los cuales se establecia dicho vinculo y de las ra- zones que explicaban su formacién y mantenimiento eran diversas. Algunos teé- ricos del aprendizaje, al igual que psicoanalistas, sugirieron que la formacién del vinculo afectivo entre el nifio y su madre era secundaria al hecho de que la madre era quien le proveia la alimentacién. Dollar y Miller (1950, citados por Bowlby, 1969) sugirieron que “probablemente la experiencia de la alimentacién puede ser vista como la ocasién para que el nifio aprenda a querer estar con otros; es decir, 102 Sonta Carrio AviLa ésta puede establecer las bases de la sociabilidad” (p. 211). Freud (1926), igual- mente, habia enfatizado la idea de que la satisfaccién de las necesidades basicas del bebé por parte de la madre se constituia en el origen del amor hacia ella. Esta explicacién se conocié como la hipétesis del impulso secundario, y curiosamente era compartida por psicoanalistas y psicdlogos conductuales (Bowlby, 1969). Esta teoria era inconsistente con los hallazgos de las investigaciones de Kon- rad Lorenz sobre los factores explicativos de los vinculos cereanos en gansos y el desarrollo del concepto de impronta. Este concepto fue planteado originalmente por Lorenz en 1935, con base en las observaciones de Spalding y Heinroth (Sluc- kin, 1964), Lorenz encontré que polluelos de gansos siguen a la primera figura que ven una vez salen del cascarén, y es esta conducta la causante de que esta- blezean un vinculo cercano con dicha figura. Estudios posteriores han mostrado que el desarrollo de la impronta tiene importantes implicaciones no slo desde el punto de vista social, sino también reproductivo (Alcock, 2001). Adicionalmente, los estudios clasicos de Harlow con macacos rhesus tuvie ron como fin principal evaluar de manera experimental la hipdtesis del impulso secundario, En estas investigaciones Harlow sometié a unos monos que habian sido separados de sus madres en el momento del nacimiento, a diferentes con- tactos con dos modelos de madre de lambre (una recubierta de peluche que no proveia alimento y la otra sin ningin recubrimiento pero que contenia una botella de leche), y observé las reacciones de los monos en esta situacién experimental y los efectos que ocasionaba la separacién de su madre biolégica desde el mo- mento del nacimiento en el comportamiento social y sexual de Los resultados de estos estudios mostraron que los monos mucho més prolongados con la madre de peluche y que la provision de alimento no representaba la motivacién principal para que estos monos establecieran y mantuvieran contacto 2004; Harlow, 1961) stos animales. establecian contactos ano y duradero con los modelos de las madres (Blum, John Bowlby (1969) retomé estos estudios de campo y de laboratorio He- vados a cabo por etdlogos y psicdlogos experimentales y examiné su relacién con observaciones clinicas realizadas por psiquiatras y psicélogos en nifios que habian experimentado una pérdida temprana de sus padres, habian sufrido una separacién prolongada o habian recibido poco afecto; con base en ello encontrd importantes relaciones que superaban el nivel inferencial de una analogia. Planted una teoria que hipotetizaba una funcién adaptativa de las conductas de aproxima cién y de vinculo con los cuidadores, mecanismos perceptuales que facilitaban el desarrollo de este sistema de conducta y mecanismos sociales que daban cuenta del mismo. A esta teoria la denominé Teoria del Apego. [RELACIONES AFECTIVAS TEMPRANAS: PRESUPUESTOS TEORICOS Y PREGUNTAS FUNDAMENTALES 103 Teoria del Apego La bisqueda de proximidad con los adultos ha sido identifieada por numerosos autores dentro de la psicologia del desarrollo y en otras disciplinas como uno de los comportamientos que garantiza la supervivencia de las erias. El acercamiento de los hijos a la madre y el mantenimiento de un contacto visual y fisico con ella aseguran su cuidado y proteccién y favorecen el establecimiento de un vineulo afectivo especial entre la madre y las crias, dems de garantizar la superviven- cia, las relaciones que se establecen entre los niiios y sus cuidadores son funda- mentales para el funcionamiento social y la adaptacién a los diferentes contextos en los que ellos se desenvuelven, {Cudles son los efectos de separaciones frecuentes o prolongadas entre el nifio y sus cuidadores? {Tienen estas separaciones implicaciones significativas en el desarrollo social y emocional de los nifios? Estas fueron algunas de las preguntas que dieron lugar a los planteamientos iniciales de lo que hoy se co- noce como la Teoria del Apego. Las observaciones sistematicas realizadas por Bowlby, Robertson y Ainsworth de nifios hospitalizados por periodos prolonga- dos y los cambios comportamentales que dichos nifios presentaban durante su permanencia en la institucién hospitalaria llamaron la atencién de estos investi« gadores, quienes encontraron que, en condiciones de separacién de sus madres por un periodo significativo, nifios pequefios manifestaban diferentes reaccio- nes, como comportamientos de protesta, desesperacién, ansiedad y desapego (Marvin y Britner, 1999), A estas observaciones se sumaron, por una parte, las descripciones de Spitz (1965; Spitz y Wolf, 1946) del llamado sindrome de hos- pitalismo y las implicaciones del estado de depresién desarrollado en los nifios que experimentaban largas hospitalizaciones, y por otra, los hallazgos de las investigaciones etolégicas que descartaron la hipétesis del impulso secundario. Los anteriores hallazgos llevaron a Bowlby y colegas a plantear el afecto como una necesidad basica para los individuos y a enfatizar la importancia de los vinculos afectivos tempranos para la adaptacién y ajuste en las diferentes etapas del ciclo vital. En palabras de Thompson (1999), “una relacién célida y continua con el cuidador promueve la salud psicoldgica y el bienestar a lo largo de la vida de una manera acorde con los requerimientos adaptativos de la especie huma na” (p. 265). El cambio en la concepcién de las necesidades fundamentales de Jos individuos y del papel del afecto en el desarrollo de los nifios marcé un hito importante en la psicologia del desarrollo y, en particular, en el estudio del de- sarrollo social y emocional durante los primeros afios de vida. 104 Sonta Carrio AviLa Definicién y conceptos basicos del apego Los presupuestos iniciales de la teoria del apego sedujeron a diversos investiga- dores que estudiaban el desarrollo social y emocional y sus implicaciones en la ‘ign se centré en definir aquello que se denominaba relacién de apego y en disefiar estrategias que permitieran aproximarse a su medicién, De acuerdo con Bowlby (1969, 1982), el apego con- siste en un vinculo afectivo entre el cuidador y el nifio, que se desarrolla gracias a vida de los individuos. En sus inicios, la preocupa las interacciones repetidas entre ellos; este vinculo involucra diferentes sistemas comportamentales que se activan en situaciones de estrés, peligro o enfermedad, Ainsworth (1991), por su parte, define el apego como: Un vinculo afectivo especial y duradero en el cual la figura de apego (adulto significa tivo) es importante como individuo tinico, inintercambiable con otro, En este vinculo afectivo hay una necesidad de mantener cercania con esa figura (representa cuidado, proteccién, seguridad para explorar el ambiente). El contacto y reunién con esta figura, produce confianza y felicidad; la separacion genera ansiedad y tristeza. (p. 38) de apego es mantener proximidad con el cuidador, . ¥ asegurar su proteccién en situaciones amenazantes, La concepcién del apego involucra, adicionalmente, tres conceptos importantes que se definieron en los trabajos ini ciales de Bowlby y Ainsworth, Estos conceptos son base segura, modelo interno de trabajo y figuras de apego (Bowlby, 1980). La meta de las conduct: con el fin de garantizar su afecto y cuidado en situaciones cotidiang El concepto de base segura hace referencia al papel que cumple el cuidador una vez se ha establecido una relacién de apego con el nifio, Hacia el final del primer afio el nifio usa al cuidador como una base para explorar el ambiente, a la que regresa continuamente para buscar seguridad y proteccién (Sroufe, 1995). Este concepto es crucial en la teoria del apego, ya que refleja la basqueda de un balance entre dos caracteristicas esenciales en la interaccién cotidiana del nifio con su cuidador, como son la bisqueda de contacto y proximidad y la exploracién del ambiente (Posada y cols., 1995). Esto se observa particularmente en situaciones no familiares en las cuales el nifio mantiene contacto visual o fisico con la madre mientras explora los objetos, los lugares o las personas. La presencia cercana de la madre le proporeiona al nifio seguridad y le garantiza proteccién en casos de peligro. El concepto de modelo interno de trabajo fue propuesto por Bowlby (1980, 1988) para referirse a las representaciones mentales (expectativas y creencias) que se desarrollan en los nifios como resultado de interacciones continuas entre ellos y sus cuidadores, en el proceso de establecimiento de la relacién de apego. De la manera como el cuidador perciba y responda a las necesidades del nifio y [RELACIONES AFECTIVAS TEMPRANAS: PRESUPUESTOS TEORICOS Y PREGUNTAS FUNDAMENTALES. 105 de las cualidades de su interaccién cotidiana, el nifio aprender relaciones que est compuesto de representaciones sobre si mismo, sobre los otros fio evaluar el comportamiento del cuidador en futuras situaciones y guiarin las expectativas del nifio en interacciones futuras con otros (Lépez, Meléndez, Sauer, Berger y Wyssmann, 1998; Thompson, 1999) i un modelo de y sobre las relaciones, Estas representaciones le permitiran al El sistema del apego se manifiesta a través de diversos comportamientos que realizan los nifios en las situaciones cotidianas de relacién con otros. Sin embargo, estos comportamientos no se presentan en todo tipo de interaccion: sociales ni se dirigen hacia cualquier persona, Las conductas de apego son dir gidas diferencialmente hacia personas especiales del contexto inmediato de los nifios con quienes ellos interactian en forma regular y quienes tienen a cargo su cuidado y proteccién. Bowlby denominé a estas personas figuras de apego; estas figuras pueden ser principales (aquellas que asumen regularmente el cuidado y proteccién de las crias y son responsables de la satisfaccién de sus necesidades primordiales) o subsidiarias (aquellas que asumen el cuidado de los nifios tempo- ralmente, en ausencia de las figuras principales) (Bowlby, 1969), En las etapas iniciales de desarrollo de 1a teorfa del apego, en muchas de las investigaciones se habl6 exclusivamente de figuras principales de apego y se asumié que la madre era quien representaba este rol dentro de la familia; esto lev a los investigadores a seleceionar solamente a madres para conformar las muestras en la mayoria de los estudios de apego (Blehar, Lieberman y Ainsworth, 1977; Grossmann, Fremmer-Bombik, Rudolph y Grossmann, 1988), La negligencia en la consideracién de otros miembros de Ja familia en los estudios obedeci6, en parte, a la marcada influencia psicoanalitica de la época que enfatizaba en la relacién madre-hijo como fundamento del desarrollo psicolégico de los nifios; a esto se suma la concepcién igualmente dominante de la divisién de los roles dentro de la familia, segiin la cual el padre se constituye exclusivamente en un proveedor de recursos y la madre en la persona a cargo de las tareas de la casa y del cuidado de los hijos. La omisién del padre y otros miembros de la familia dentro de la categoria de posibles figuras de apego fue sefialada por autores como Lamb, Clarke-Stewart y Parke a finales de los aiios 70 y prineipios de los 80 (Lamb, 1975, 1978; Clarke-Stewart, 1978). A partir de entonces se increment el interés por estudiar el rol del padre en el desarrollo de los nifios; numerosos estudios se centraron en la identificacién de los estilos de apego entre padres © hijos, en la evaluacién de las caracteristicas de los padres asociadas a cada uno de estos estilos de apego y en la comparacién de los patrones de relacién que el nifio establece con la madre y con el padre (ver Fox, Kimmerly y Schafer, 1991, para 106 Sonta Carrio AviLa un me ;ndlisis sobre los principales estudios de apego con madres y con padres del momento). El papel de diferentes cuidadores como figuras de apego principales 0 sub- sidiarias ha sido evaluado recientemente en estudios realizados en diferentes cul- turas. Por ejemplo, True (citado por Van Iizendoorn y Sagi, 1999) encontré que en muchas familias de la comunidad Dogi de Mali, en Africa Oriental, las abuclas asumen todos los cuidados de los primeros nietos durante el dia porque se identi- fican como las figuras de apego principales, mientras que las madres se encargan solamente del cuidado durante las noches. Miembros de la familia como las abue- las y los hermanos mayores se constituyen en figuras significativas para los nifios en algunos contextos socioculturales de Estados Unidos (familias afroamerica- nas) y paises de Latinoamérica. Por ejemplo, Carrillo, Maldonado, Saldarriaga, Vega y Diaz (2004) evaluaron el rol de las abuelas como figuras de apego subsi- diarias, en un estudio sobre patrones de apego en familias de tres generaciones en Colombia, Los resultados de este estudio indicaron que en contextos en los cuales conviven abuclas, madres adolescentes ¢ hijos pequefios, la relacién que estable- cen las madres con sus hijos se caraeteriza por niveles adecuados de seguridad. Los puntajes de seguridad en la interaceién madre-hijo obtenidos en el Q-sort de Apego fueron mas altos para el caso de las madres que para el de las abuelas. Esto indica que las madres, en esta muestra, gjercieron el rol como figuras principales de apego para los nifios, mientras que las abuelas se constituyeron en figuras de apego subsidiarias. El papel de las figuras de apego (principales o subsidiarias) ha sido evaluado en otras poblaciones en riesgo, como los nifios victimas de violencia y maltrato familiar. Por ejemplo, Amar y Berdugo de Gémez (2006) evaluaron un conjunto de dimensiones relacionadas con el apego en una muestra de nifios en edad escolar maltratados, y encontraron que en estas circunstancias los nifios buscan seguridad y proteccién en figuras alternativas, como familiares cercanos, vecinos, y en los pares, y tienden a establecer lazos afectivos cercanos con ellos, caracterizados por confianza ¢ intimidad emocional con dichas figuras. Ontogenia del apego El desarrollo del apego es un proceso complejo que tiene lugar durante los pri- meros aiios e involucra caracteristicas del nifio, del cuidador y del contexto, Los tedricos del apego han identificado dos caracteristicas en el comportamiento del cuidador que son necesarias para que se establezea una relacién de apego. La pri mera hace referencia a la manera como éste percibe ¢ interpreta las necesidades [RELACIONES AFECTIVAS TEMPRANAS: PRESUPUESTOS TEORICOS Y PREGUNTAS FUNDAMENTALES. 107 del nifio (Sensibilidad ) y la segunda se centra en el tipo y la calidad de la respues- ta que emite frente a dicha necesidad (Ainsworth, Blehar, Waters y Wall, 1978). El sistema de retroalimentacién permanente que se genera en las secuencias de interaccién entre la diada bebé-cuidador se constituye en la base de lo que sera su relacién de apego. Estudios que han evaluado el papel de la sensibilidad mater- na en el establecimiento de las relaciones de apego han encontrado asociaciones significativas entre niveles altos de sensibilidad y establecimiento de relaciones de apego seguro durante la infancia (Bell y Ainsworth, 1972; Belsky y Isabella, 1988; De Wolff y Van Ijzendoorn, 1997). Otro de los factores que influyen en el establecimiento de las relaciones de apego son las caracteristicas del nifio. La adquisicion de la permanencia del objeto, ‘uno de los logros cognitivos planteados por Piaget, y que tiene lugar durante el pr mer aifo, esté estrechamente ligada a la ansiedad que experimenta el nifio cuando se separa del cuidador. El reconocer que la madre sigue existiendo, aun cuando no est presente, significa para el nifio que no cuenta en ese momento con su proteccién y, por tanto, esta en peligro; este riesgo le produce miedo y ansiedad. Diversos autores sefialan la influencia de ciertas caracteristicas del nifio en los patrones de interaccién que se establecen con sus cuidadores dentro del con- texto familiar; dentro de estas caracteristicas se ha dado un énfasis significativo al temperamento y se ha evaluado su asociacién con comportamientos particulares de los padres y con los estilos de interaccién entre padres ¢ hijos. Hallazgos de di- ferentes investigaciones muestran asociaciones modestas entre rasgos de tempe- ramento y tipos de apego; la fuerza y la direccién de estas asociaciones dependen de los rasgos particulares que se evaliten dentro de la variable de temperamento (llanto, excitabilidad, atencién, etc.) (ver Vaughn y Bost, 1999, para un extenso anilisis de estudios que evaluaron la asociacién entre temperamento y apego). 51 tiempo que se requiere para el establecimiento de patrones de apego con los cuidadores es mayor en la especie humana. El nivel de desarrollo de los nitios en el momento del nacimiento es menor que el de las crias en otras especies; esto hace que se extiendan la inversién y el cuidado parental y que los patrones de desarrollo de algunas conductas sean mas lentos (Bjorklund, Yunger y Pellegrini, 2002). Estudios con animales brindan elementos importantes que favorecen la comprensién de los prineipios y mecanismos que explican las relaciones tempranas en los humanos; a pesar de esto, los anslisis comparativos dentro de la psicologia del desarrollo y dentro del area del desarrollo social son ain escasos (Carrillo y Gutiérrez, 2000). El proceso a través del cual se desarrolla el apego en los humanos tiene lugar durante los dos primeros afios de vida y depende de la interaccién constante 108, Sonta Carrio AviLa entre el nifio y su cuidador. Bowlby (1969) identified cuatro fases principales en el desarrollo del apego. La primera tiene lugar en los dos primeros meses de vida del nifio y se denomina de orientacién y sefiales sin discriminacién de la figura de apego; la segunda fase, de orientacién y sefiales dirigidas hacia una 0 mas figuras discriminadas, tiene lugar entre el tercer y sexto mes; en la tercera fase, que ocurre entre los siete y los 12 meses, los nifios muestran conductas de mantenimiento de proximidad con esas figuras a través de contactos visuales 0 verbales y de la locomocién. Los nifios utilizan a las figuras como base segura para explorar y conocer el ambiente y empiezan a mostrar sefiales de ansiedad y alarma en situaciones no familiares y frente a personas extrafias. Finalmente, entre los 12y los 18 meses tiene lugar la cuarta fase, la cual se centra en la formacién de una sociedad entre el nifio y la figura de apego, que Bowlby denominé de metas corregidas; esto significa que en esta etapa el nifio ya ha formado una relacién con el cuidador, tiene la capacidad de “inferir” sus planes para permanecer con él y se adapta mas facilmente a las separaciones, Sroufe (1995) coincide con la identificacién de estas etapas iniciales en el desarrollo del apego; sin embargo, va mas alld de la infancia en la descripcién del proceso ontogenético e identifica cuatro etapas adicionales entre la infancia y la adolescencia. De acuerdo con este autor, a los 18 meses la meta dentro del proceso de desarrollo social son la individuacién y la adquisicién de autonomia; en este proceso es fundamental el rol de los cuidadores como proveedores de apoyo, pero también de normas claras respecto al comportamiento deseable y no deseable, El inicio de las relaciones con pares, la identificacién de si mismo y de los roles de género son algunas de las tareas propias de la etapa comprendida entre los 3 y los 5 aiios. En la etapa escolar (comprendida entre los 6 y los 11 afios) se presenta la consolidacién del autoconcepto y de diferentes procesos afectivos que determinan la competencia social del nifio en los grupos, el mantenimiento de las relaciones con pares y el establecimiento de las relaciones de amistad, Finalmente, en la etapa de la adolescencia la tarea esencial se centra en la busqueda de identidad; tiene lugar un cambio en la jerarquia de las figuras de apego, en el que se enfatiza la importancia de las relaciones con pares y se abre la posibilidad a las relaciones de pareja; los adolescentes adquieren el rol de figuras de apego de sus pares. La funcién de los cuidadores se centra en prover a los adolescentes oportunidades para la exploracién y el ejercicio de la autonomia, con un adecuado cuidado, proteccién y monitoreo. Qué hemos aprendido sobre las relaciones afectivas en Ia infancia? Los avances conceptuales y teéricos en el rea del desarrollo social y emocional en las primeras etapas de la vida han estado acompafiados de un cuerpo amplio [RELACIONES AFECTIVAS TEMPRANAS: PRESUPUESTOS TEORICOS Y PREGUNTAS FUNDAMENTALES. 109 de estudios empiricos que los sustentan, Desde los origenes de la teorfa del apego, los investigadores han utilizado diferentes metodologias y disefios de investiga cién para abordar los problemas esenciales alrededor de la formacién, manteni- miento ¢ implicaciones de las relaciones afectivas tempranas. La investigacién sobre los vinculos afectivos en las etapas iniciales de la vida ha girado alrededor de tres preguntas fundamentales. La primera de ellas se centra en la identifica cién de diferencias individuales en la calidad de las relaciones de apego que los nifios establecen con sus cuidadores y en las implicaciones que estas relaciones tienen para el desarrollo de los nifios; la segunda evalia la posibilidad de es blecer relaciones de apego con miltiples cuidadores y los criterios que permiten la identificacién de estas figuras como primarias o subsidiarias; finalmente, la tercera pregunta indaga sobre la estabilidad de los patrones de apego que se for- ‘man en los primeros afios y la continuidad de dichos patrones en etapas siguientes del desarrollo. A continuacién se presentardn investigaciones relevantes que dan cuenta de avances en el Area del desarrollo social y emocional, y en particular, de la formacién ¢ implicaciones de los vinculos afectivos tempranos, con base en cada una de estas preguntas Diferencias individuales en los patrones de apego tempranos Desde el momento de su nacimiento los nifios establecen relaciones con las per- sonas que se encuentran en su contexto inmediato, El proceso de formacién de un tipo particular de relacién entre un nifio y sus cuidadores est influenciado por numerosos factores, dentro de los que se encuentran rasgos tipicos del cuidador, rasgos especificos del nifio y condiciones singulares del contexto en el que se desarrolla dicha relacién. ,Cudles son las caracteristicas de las relaciones que los nifios establecen con sus cuidadores? ;Existen diferentes tipos de relaciones de apego entre los nifios y sus cuidadores? {Tienen las separaciones frecuentes de a madre algin efecto en los nifios? {Se presentan los mismos tipos de relacién en diferentes poblaciones o grupos de nifios? La busqueda de respuestas a estos cuestionamientos Ilevé a diferentes tedricos del apego a explorar el campo de las relaciones afectivas durante los primeros afios de vida y a idear metodologias para aproximarse a una caracterizacién de dichas relaciones en distintos grupos de familias. Una delas estrategias que dio lugar a los primeros cuestionamientos alrededor de las relaciones afectivas y de su importancia en el desarrollo de los nifios fue la observacién naturalista, Las observaciones iniciales de Bowlby y colaboradores de los nifios hospitalizados permiticron identificar los primeros indicios de los efectos que separaciones prolongadas y frecuentes de la madres producian en 0 Sonta Carritto AviLa los nifios. Los estudios iniciales de Mary Ainsworth en Uganda, guiados por la inquietud de si existen o no diferentes tipos de relaciones afectivas entre nifios y sus madres, arrojaron como resultado la primera tipologia de las relaciones de apego. Basada en extensas y sistemdticas observaciones en ambiente natural de interacciones entre madres ¢ hijos en una poblacién de Uganda, Ainsworth identificé tres patrones de apego en los nifios: los nifios con apego seguro se mostraban interesados en explorar el ambiente cuando la madre estaba presente, parecfan contentos la mayor parte del tiempo y su frecuencia de Ilanto era baja; los nifios con apego inseguro mostraban baja exploracién y Horaban frecuentemente, y los nifios ain no apegados manifestaban un comportamiento neutro, sin sefiales de atencién especial hacia la madre (Bretherton, 1994). Estudios posteriores realizados en Estados Unidos en los que se utilizaron tanto la observacién naturalista como la Situacién Extrata condujeron a la cla- sificacién de los tres tipos principales de apego que se encuentra actualmente en la literatura de las relaciones afectivas en la infancia y que han dado lugar a tipo- ogias similares en otras etapas del desarrollo, La Situacién Extrafia (Ainsworth, Blehar, Waters y Wall, 1978) es un procedimiento de laboratorio que consiste en exponer al nifio y al cuidador a una serie de 8 episodios de 3 minutos cada uno, que ocurren en un ambiente desconocido para ellos, con el propésito de registrar las conductas de apego que se activan a través de situaciones de interaccién, se- paraciones y reuniones entre el nifio y su cuidador (ver la tabla 1). Los tres tipos de apego descritos por Ainsworth en la situacién extrafia fueron los siguientes: Apego Seguro (0 apego tipo B) es aquel en el que el nifio utiliza al cuidador como base segura para explorar el ambiente (por ejemplo, establece contactos visuales, verbales o fisicos mientras explora); muestra ansiedad ante la separaciones del cuidador (por ejemplo, Hora, se aproxima a la puerta, lo llama); muestra claras sefiales de bienvenida en las reuniones con el cuidador (por ejemplo, se dirige a él, levanta los brazos para indicar que desea ser alzado, se calma facilmente y muestra sefiales de afecto); una vez, calmado, regresa a la exploracién. El Apego Inseguro Evitativo (0 apego tipo A) se caracteriza porque el nifio explora inme- diatamente el ambiente no familiar, no muestra comportamientos que indiquen que utiliza al cuidador como base segura; muestra poca ansiedad ante la salida del cuidador y mantiene su nivel de exploracién; en las reuniones evita el contacto con el cuidador y continia interesado en los juguetes. En el tipo de Apego Insegu- ro Ambivalente o Resistente (0 apego tipo C) el nifio muestra sefiales de estrés a lo largo de la situacién. El nifio no muestra interés en explorar, permanece sentado en el lugar inicial o quiere estar cerca del cuidador. En los episodios de separa- cién muestra altos niveles de estrés (por ejemplo, Hora intensamente, llama al cuidador o grita); durante las reuniones puede buscar el contacto con el cuidador [RELACIONES AFECTIVAS TEMPRANAS: PRESUPUESTOS TEORICOS Y PREGUNTAS FUNDAMENTALS 11] y mostrar sefiales de querer ser alzado y consolado, pero una vez lo alzan mues- de él, Un cuarto tipo de Apego, denominado Desorganizado/Desorientado (0 apego tipo D), tra comportamientos de rabia hacia el cuidador y deseos de s sparars fue identificado posteriormente por Main y Solomon (1986). Este tipo de apego surgié de dificultades observadas en la clasificacién de los patrones de relacién, particularmente en poblaciones en riesgo (por ejemplo, madres con caracteristi- cas psicopatolégicas o condiciones de maltrato del nifio en la familia). El apego desorganizado se caracteriza porque el nifio presenta comportamientos contra- dictorios y desorganizados que reflejan caracteristicas de los otros tres tipos de apego; el nifio se puede mostrar atemorizado o aprensivo; muestra confusién res- pecto a su comportamiento con el cuidador (por ejemplo, intenciones marcadas de bisqueda de proximidad y evitacién), y las secuencias de su conducta pueden ser incompletas o interrumpidas abruptamente (Thompson, 2006). Tabla 1. Descripcidn de la Situacién Extrana Episodio Descripeién del evento Variable observada ; Fl experimentador conduce a la madre al salén, > La madre se sienta mientras el niio Uso de la madre como base explora el ambiente y los juguetes segura a Reaccién ante un adulto des- 3 Entra la persona extraiia conocido Primera salida de la madre: la madre 4 sale del salén, el nifio se queda con el Ansiedad ante ta separacién extrafio 5 Primera reunién con la madre: regresa Reaccién ante la Ilegada de la la madre, sale el extrafio madre 6 Segunda salida de la madre; el nie S© — . edag ante la separacién queda solo en el salén 7 Entra el extrafio y le ofrece consuelo (si Permite ser calmado por el lo requiere) extrafio Segunda reunién con la madre: regresa 8 la madre, sale el extrafio; le ofrece consuelo, interactia con el nifio Reaccién ante la Ilegada de la madre Nota: adaptada de Ainsworth, Blehar, Waters y Wall (1978) 12 Sonta Carrio AviLA La identificacién de los estilos de apego usando la situacién extrafia en dife- rentes estudios realizados en Estados Unidos indieé un patron de distribucién si- milar caracterizado por una mayor presencia del estilo de apego seguro en mues- tras de familias blancas de estrato socioeconémico medio. Aproximadamente el 65% de las familias estudiadas correspondian al tipo de apego seguro; el porcentaje restante de las muestras se dividia en 20% de apego evitativo y 15% de apego ambivalente (Ainsworth, Blehar, Waters y Wall, 1978), Los resultados de las observaciones del comportamiento de las madres en los estudios iniciales sobre los patrones de apego mostraron diferencias en los estilos de relacién, en términos de las caracteristicas esenciales del cui- dador definidas por Ainsworth; asi, en el patrén de apego seguro las madres mostraban alta sensibilidad, responsividad y aceptacién y una clara accesibi- lidad frente al nifio, mientras que las madres con estilos de apego inseguro evidenciaban menos sensibilidad, mas rechazo, y se mostraban menos accesi- bles frente a los nifios (Solomon y George, 1999) La identificacién de variables predictoras de los estilos de apego Ilamé la atencién de numerosos investigadores. Hallazgos de diversos estudios indi- caron una asociacién significativa entre el comportamiento del cuidador en la situacién de interaccién con el nifio, en particular, responder en forma inme- diata a las necesidades del bebé, exhibir manifestaciones positivas de afecto, expresar satisfaccién en el cuidado del nifio y el estilo de apego seguro (Bates, Maslin y Frankel, 1985; Isabella, Belsky y Von Eye, 1989; Sroufe, 1985). Wolf y Van Ijzendoorn (1997) Ilevaron a cabo un metaanilisis, cuyo propésito fue evaluar los antecedentes parentales del apego infantil, en particular, el papel de la sensitividad materna en el establecimiento de las relaciones de apego seguro, Estos autores incluyeron en su andlisis 66 estudios realizados con poblaciones no-clinicas que evaluaban estas variables a través de la situacién extrafia y de medidas observacionales de sensibilidad. Los resultados de este estudio confirmaron una asociacién moderada entre la sensitividad materna y el apego seguro; adicionalmente, los autores sefialaron que la sensibilidad materna no se constituye en la tinica caracteristica parental que predice el apego seguro. Otras variables, como sincronia en la interaccién con el nifio, apoyo emocional que se provee al nifio y actitud positiva, cumplen un papel igualmente importante en la prediccién del apego seguro en la infancia. En su mayoria, los estudios sobre las relaciones de apego que se encuen- tran en la literatura durante los afios 70 y 80 del siglo XX comparten una serie de caracteristicas: se centran en figuras de apego principales, y dentro de éstas, principalmente en la madre; incluyen muestras de familias pertenecientes aun estrato socioeconémico medio y son realizados primordialmente en el contexto [RELACIONES AFECTIVAS TEMPRANAS: PRESUPUESTOS TEORICOS Y PREGUNTAS FUNDAMENTALES. 113 norteamericano. Esto Hevé a numerosos investigadores a plantearse cuestio- namientos importantes sobre la universalidad de los tipos de apego, asi como sobre la validez de las estrategias de medicién del mismo bajo circunstane! sociales cambiantes y en condiciones socioculturales diferentes. Por ejemplo, Raikes y Thompson (2004) evaluaron la sensibilidad ma- terna y su relacién con la seguridad en el apego, en una muestra de familias de estrato socioeconémico bajo, y encontraron que la sensibilidad y respon- sividad maternas actiian como mediadores en la relacién entre los riesgos socioeconémicos asociados con las circunstancias de pobreza y la seguridad en el apego; adicionalmente, estos autores mostraron que riesgos emocionales que se presentan en estas familias, como violencia doméstica y consumo de alcohol 0 drogas, tienen un efecto directo sobre la seguridad en el apego que se establece entre las madres y sus hijos. Hallazgos similares han sido repor- tados por Vondra, Shaw, Swearingen, Cohen y Owens (2001) y Van Ijzendo- orn y Sagi (1999). Estudios transculturales cuyo propésito principal fue la identificacién de los patrones de apego caracteristicos en familias de otros paises mostraron pa- trones diferentes de distribucién de los tres estilos basicos identificados por Ainsworth y cols., en 1978. Por ejemplo, McFarley (1990) llevé a cabo uno de los primeros estudios sobre apego en Colombia, cuyos objetivos fueron, por una parte, identificar los patrones de apego presentes en una muestra de fa- milias bogotanas, y por otra, realizar una comparacién de estos patrones con aquellos encontrados en los estudios norteamericanos y en investigaciones realizadas en Alemania, Japén ¢ Israel. La muestra en el estudio de McFarley estuvo conformada por 40 familias de estrato socioeconémico medio, con un solo hijo menor de un aio y residentes en la ciudad de Bogotd. La metodo- logia incluyé observaciones naturalistas de la interaccién madre-hijo en el hogar y el procedimiento de laboratorio de la situacién extraiia, cuando los nifios tuvieron entre 12 y 15 meses de edad. Los resultados indicaron aso- ciaciones significativas entre los comportamientos de sensibilidad materna observados durante la visita a la casa y en la situacién extrafia, Estos hallaz- gos fueron consistentes con los reportados por Ainsworth y cols. (1978) y por Grossmann, Grossmann, Spangler, Suess y Unzer (1985). En términos de los estilos de apego, los resultados mostraron ciertas diferencias en los porcentajes obtenidos en cada uno de los tipos de apego en las distintas muestras, La tabla 2 incluye la comparacién de la distribucién de los estilos de apego para Colombia y los otros paises (McFarley, 1990). 4 Sonta Carritto AviLa Tabla 2. Porcentaje de los diferentes patrones de apego en cuatro culturas Colombia FS'*408-— Alemania Israel Unidos ‘Apego Seguro 512 648 56,6 644 Apego Inseguro Evitativo 23 aut 353 67 ‘Apego Inseguro Ambivalente 19,5 140 81 eas Fuente: tomado de McFarley (1990). Los estudios culturales del apego arrojaron evidencia que apoya la hipétesis de la universalidad de las relaciones de apego con los cuidadores primarios. A pesar de las diferencias particulares en la distribucién de los estilos de apego en las muestras de los diferentes paises y en algunas de las conductas de apego ma- nifestadas por los nifios, se encontré que el patrén de apego seguro es la clasifi- cacién que se encuentra con mayor frecuencia en las investigaciones (Thompson, 2006) La etapa inicial del desarrollo de la teoria del apego se concentré en la ope- racionalizacién del constructo, en la identificacién de diferentes variables de la predictores del mismo (tanto de los cuidadores como del nifio) y en la evaluacién de los estilos de apego desarrollados durante los dos primeros afios de vida. Los cambios en el desarrollo motor, cognitivo y emocional de los nifios que tienen lugar en la etapa preescolar, asi como los hallazgos encontrados en los estudios culturales, impusieron nuevos retos en la valoracién del apego. Los investigadores se enfrentan, por una parte, a muevas preguntas sobre las caracteristicas asociadas a los diferentes tipos de apego, las implicaciones de las relaciones de apego tem- pranas y las posibles trayectorias de los diferentes estilos de apego de la infancia a otras etapas en el desarrollo y en diferentes contextos socioculturales. Surge, por otra parte, una necesidad de utilizar nuevs problemas y de disefiar nuevas estrategias de medicién de las relaciones afeetivas mis alld de la infancia, Algunos investigadores optan por métodos de investiga- cién longitudinales para abordar aquellos problemas relacionados con la conti- nuidad e implicaciones de los estilos de apego en el desarrollo posterior de los nifios (NICHD, 2006; Sroufe, Egeland, Carlson y Collins, 2005). Otros autores se centraron en el disefio de nuevas estrategias de medicién de los estilos de apego 0 ciadas a los mismos. Por ejemplo, Cassidy y Marvin (1992) propusieron una adaptacién de la situacién extrafa, para evaluar las relaciones de apego en nifios de edad preescolar; esta estrategia se desarrolla en el laboratorio y se basa en el modelo categérico de las tipologias del apego propuesto por Ain- sworth, Otros autores propusieron instrumentos basados en observaciones de tipo s metodologias en el abordaje de estos de caracteristicas a [RELACIONES AFECTIVAS TEMPRANAS: PRESUPUESTOS TEORICOS Y PREGUNTAS FUNDAMENTALES. 115 naturalista de las interacciones madre-nifio; uno de estos fue el Q-sort de Apego, propuesto por Waters y Dean (1985), el cual se basa en un modelo dimensional (no categérico) que evatita el nivel de seguridad y dependencia presente en la re~ lacién de apego. Fraley y Spicker (2003) sugiricron estas categorias (categéricos vs. dimensionales) para evaluar los instrumentos usados en la medicién del apego; en su andlisis de las diferentes medidas que se han usado en la literatura, estos autores recomiendan un uso combinado de modelos categéricos y dimensionales, para lograr una éptima aproximacién al fenémeno. El uso de los nuevos instrumentos de medicién se difundié ampliamente entre los investigadores interesados en la evaluacién de las relaciones afectivas cereanas durante la nifiez, tanto en Estados Unidos como en otros paises. Por ejemplo, recientemente, en Colombia se han Hevado a cabo varios estudios que han utilizado el Q-sort de Apego propuesto por Waters y Dean (1985), para evaluar relaciones de apego en familias que presentan condiciones de riesgo. Carrillo, Maldonado, Saldarriga, Vega y Diaz (2004) utilizaron este instrumento para evaluar la seguridad en el apego, en una muestra de madres adolescentes de estrato socioeconémico medio y sus nifios. El puntaje promedio de seguridad obtenido por las madres de esta muestra fue de 0,40 (en un rango entre -1,0 y H1,0). Estos resultados son consistentes con los puntajes obtenidos por Posada, Jacobs, Carbonell, Alzate, Bustamante y Arenas (1999) en un grupo de familias bogotanas de estrato socioeconémico bajo, Igualmente, Ortiz, Borré, Carrillo y Gutiérrez (2006) llevaron a cabo un estudio en el que compararon la sensibilidad materna y el nivel de seguridad en las relaciones de apego de dos grupos de familias colombianas de estrato socioeconémico bajo: un grupo conformado por madres de bebés prematuros que participaron en el Programa Canguro™ y otro grupo conformado por madres de bebés a término, Cada grupo se dividié a su vez en dos subgrupos, dependiendo de la edad de las madres (madres adolescentes y madres adultas). EI nivel de seguridad en la relacién de apego de las madres y los nifios pertenecientes a los cuatro grupos mencionados se evalué a través del Q-sort de Apego; adicionalmente, se examiné la sensibilidad materna, Los resultados 'straron puntajes mas altos en sensibilidad materna y en el nivel de seguridad en larelacién de apego en los grupos de madres de bebés prematuros que participaron en el Programa Canguro. 35. EL Programa Canguro fue diseiado en el Hospital Materno Infantil (Bogotd, Colombia) en 1978 por los doctores Edgar Rey Sanabria y Héctor Martinez, con el fin de brindar atencién integral a Ja poblacién de nifios prematuros. 16 Sonta Carrio AviLa Figuras subsidiarias o alternativas de cuidado {Los nilios dirigen sus conductas de apego hacia més de una persona? Si esto es asl, {el apego hacia diferentes personas se desarrolla simulténeamente 0 el apego hacia tuna precede el apego hacia la otra? ;Puede una mujer, diferente de la madre del nifio, cumplir adecuadamente el rol de figura de apego? (Bowlby, 1969, p. 304) Estas son algunas de las preguntas que Bowlby se planted en el desarrollo de la teoria del apego y que formaron parte central de su analisis de los cuidadores 0 personas cercanas con quienes los nifios establecen las relaciones de apego. En la mayoria de los trabajos iniciales que se Mevaron a cabo sobre las relaciones de apego y que contribuyeron a la consolidacién de esta teoria, los autores se refieren solamente a las relaciones entre las madres y sus hijos, lo que presupone que es la madre quien se constituye en la figura de apego para el nifio, Este hecho se desprende de diferentes concepciones sobre las relaciones dentro de la familia que imperaban en los afios 60 y 70 del siglo XX y que en- fatizaban una clara division de los roles entre padres y madres dentro de la fa- milia; el padre era considerado exclusivamente como el proveedor de recursos, mientras que a las madres se les atribuia el rol de cuidadores del hogar y de los hijos. Si bien es cierto que durante los primeros meses de vida la madre tiene un rol protagénico en la supervivencia y en el cuidado del bebé, esto no significa que otros integrantes de la familia no puedan actuar como figuras de apego. Los planteamientos originales de Bowlby y Ainsworth reconocen explicitamente dos tipos de figuras con quienes los nifios pueden establecer relaciones de ape- go: las figuras principales y las figuras subsidiarias. Las figuras principales de apego son las personas més importantes afectivamente en la vida de los nifios y son responsables de su cuidado y proteccién en forma mas permanente. Las figuras subsidiarias o alternativas de apego (como las ha denominado Howes, 1999) asumen el cuidado y proteccién de los nifios en ausencia de los padres, y de manera temporal, Con frecuencia, las figuras principales de apego son los padres y los hermanos; otros familiares, como los abuelos o tios, o personas fuera de la familia, como maestros © amigos, pueden asumir el rol de figuras subsidiarias, {Existen criteric un nifio? para identificar a una persona como figura de apego de Howes (1999) define tres criterios particulares que permiten identificar una figura de apego diferente de la madre, Estos criterios son: 1) prover cuidado fisico y emocional; 2) continuidad o consistencia en la vida del nifio; y 3) inversién emocional en el nifio”, [RELACIONES AFECTIVAS TEMPRANAS: PRESUPUESTOS TEORICOS Y PREGUNTAS FUNDAMENTALES. 117 Los estudios sobre las relaciones de apego con personas diferentes de la madre han recibido una atencién limitada en Ia literatura, A partir de los cuestio- namientos de autores como Lamb y Parke, a principios de los afios 80, se incluye al padre dentro de las investigaciones y se empie: figura de apego principal (Lamb, 1978; Parke, 1981). La presencia de otras figuras de apego diferentes de la madre ha sido documentada desde los trabajos iniciales de Ainsworth en Uganda, En las familias que participaron en este estudio, las madres representaban a las figuras de apego principales, y dentro de las figuras de apego subsidiarias més comunes se encontraban los padres y los hermanos. Resultados similares fueron reportados por Schaffer y Emerson (1964) con fami- I is suecas Investigaciones que han evaluado el papel del padre como figura de apego han encontrado patrones similares en los estilos de apego que forma el nifio con la madre y con el padre; sin embargo, en situaciones de interaccién, cuando los dos padres estén presentes, el nifio muestra una clara preferencia por la madre (Eas- terbrooks y Goldberg, 1987; Lamb, 1977). Hallazgos de estudios recientes con madres y padres muestran asociaciones significativas entre la historia de apego de los padres y el estilo de apego que éstos establecen con sus hijos (Steel, Steel y Fonagy, 1995). El papel de los hermanos como figuras de apego ha sido menos estudiado, Stewart (1983) y Stewart y Marvin (1984) Ilevaron a cabo dos de los estudios pio- neros en el tema del papel de los hermanos en las relaciones afectivas de los nifios. Estos autores analizaron situaciones de interaccién entre hermanos y encontraron que, en ausencia de las madres, los hermanos mayores brindan afecto, proveen cuidado y proteccién y consuelan a sus hermanos menores. Otros autores han encontrado que el rol de los hermanos es determinante cuando la familia enfrenta procesos de duelo por la muerte de uno de los padres; bajo estas circunstancias, los hermanos mayores asumen responsabilidades de cuidado hacia los hermanos menores y muestran conductas de apoyo y ayuda hacia los miembros de la familia (Ainsworth y Eichberg, 1991). En ciertos contextos socioculturales los abuelos cumplen un papel prepon- derante en el desarrollo social y afectivo de los nifios, y pueden constituirse en figuras de apego principales o secundarias; éste es el caso de algunos paises de Latinoamérica, Asia y Africa. Sin embargo, las investigaciones sobre las relacio- nes abuelo-nieto son escasas, En la iiltima década se ha visto un incremento en los estudios sobre relaciones afectivas con abuelos, ligados a la problemitica de las ma- dres adolescentes. Diferentes autores reportan que un porcentaje alto de las madres adolescentes permanece en la casa de sus padres durante un perfodo prolongado después del nacimiento del bebé y que dicha convivencia representa una fuente de 8. Sonta Carrio AviLa apoyo importante para las madres adolescentes (Coley y Chase-Lansdale, 1998; Hogan, Hao y Parish, 1990). Estudios que han abordado esta problemitica se han ligado a aspectos relacionados con los efectos de las condiciones de convivencia entre madres y abuelas, a los efectos que el rol de figura de apego de las abuclas tiene sobre el desarrollo del nifio y sobre la relacién con sus hijas, y a las impli- caciones en la salud y calidad de vida de las abuelas que tiene el hecho de ejercer el rol de cuidador. Hallazgos de investigaciones han mostrado asociaciones posi- tivas y significativas entre los patrones de apego abuelas-madres adolescentes y aquellos que las madres establecen con sus hijos (Benoit y Parker, 1994). Carrillo y cols. (2004) llevaron a cabo un estudio en el que evaluaron ca- racteristicas de las relaciones de apego en una muestra de familias de tres gene- raciones (en las que conviven abuela, madre ¢ hijo) de estrato socioeconémico medio en Colombia. El objetivo de este estudio fue evaluar el nivel de seguridad en las relaciones de apego que forma el nifio con su madre y abuela, y examinar la asociacién entre los patrones de apego que establece la madre adolescente con la abuela y con su hijo. Los resultados de este estudio indicaron niveles adecuados de seguridad en las relaciones madre adolescente-hijo (0,42, rango posible de -1,0 a +1,0) y abuela-nieto (0,37). Adicionalmente, se encontré que el tipo de apego que predominé en la relacién entre la madre y la abuela fue apego seguro (53%), seguido del apego evitativo (26%) y el tipo de apego ambivalente (6%); el resto no fue clasificado (14%). Sin embargo, no se encontraron asociaciones significativas entre las caracteristicas de la relacién de apego entre la madre y la abuela y el nivel de seguridad de la relacién entre madre ¢ hijo, Los hallazgos de este estudio son congruentes con postulados de autores que sugirieron que el apoyo emocional que recibe la madre adolescente de 1a abuela bajo condiciones de corresidencia favorece el desarrollo de relaciones adecuadas y de patrones de apego seguro (Spieker y Bensley, 1977). Finalmente, las figuras de apego subsidiarias 0 alternativas incluyen no so- lamente personas de la familia diferentes de los padres, sino también personas con quienes el nifio establece relaciones fuera del contexto familiar. El ingreso de los nifios al medio escolar representa un espectro amplio de posibil interaccién social para el nifio y de establecimiento de relaciones nuevas con pa- Tes y maestros, Los estudios sobre el papel del maestro como figura alternativa de cuidado surgen del interrogante sobre la continuidad en los patrones de apego de la infancia a la nifiez y del contexto familiar al escolar. Numerosos estudios reportan asociaciones significativas entre la calidad de la relacién madre-hijo y la calidad de las relaciones que el nifio establece con el maestro. Algunos autores reportan consistencia entre los patrones de apego desarrollados en la familia, par- ticularmente con la madre, y aquellos que se establecen con el maestro (Hamilton [RELACIONES AFECTIVAS TEMPRANAS: PRESUPUESTOS TEORICOS Y PREGUNTAS FUNDAMENTALES. 119 y Howes, 1992; Howes, Matheson y Hamilton, 1994; Pianta, Nimetz y Bennet, 1997). Pianta (1999) y Pianta y Stuhlman (2004) resaltan el papel de los maestros en el proceso de socializacién de los nifios fuera de la familia. El tipo de relacién que se establece entre el nifio y el maestro y las caracteristicas particulares de dicha relacién tienen una influencia determinante en el desempefio del nifio y en su ajuste psicolégico y social dentro de la escuela. En ciertos contextos socioculturales el papel de las figuras subsidiarias 0 alternativas de apego es fundamental en el desarrollo de los nifios. Por ejemplo, en paises latinoamericanos, las abuelas forman parte esencial de la vida familiar y, en particular, del cuidado y la crianza de los nifios en la infancia, El incremento en las interacciones de los nifios con figuras subsidiarias o alternativas de apego se ha visto influenciado por cambios sociales y culturales que han tenido lugar en las tiltimas décadas. El acceso cada vez mayor de la mujer a niveles superiores de educacién, el incremento en su participacién en las diferentes instancias del campo laboral, cambios en los roles del padre en la familia y en su nivel de invo- lueramiento en la crianza de los hijos, y el ingreso cada vez mas temprano de los nifios al contexto escolar, son s6lo algunos de los factores que han contribuido a dicho incremento. Estos hechos dan cuenta de una necesidad de ampliar la inves- tigacién sobre el papel de las figuras subsidiarias en la dindmica familiar y sus implicaciones para el desarrollo social y afectivo durante la nifiez. Continuidad en las relaciones afectivas y competencia social El desarrollo de los presupuestos esenciales de la teoria del apego dio lugar a diversas hipdtesis, que guiaron las reflexiones tedricas y las investigaciones em- piricas alrededor del tema de las implicaciones del apego en el desarrollo social de los nitios, en particular, en los afios preescolares y escolares. Dos de las hipé- tesis que se destacan y originan un amplio cuerpo de literatura en el area son las siguientes: la calidad de la relacién de apego que se establece entre un nifio y el cuidador en los primeros afios de su desarrollo se asocia a las caracteristicas del cuidado previo y a los comportamientos del cuidador. La segunda hipotesis seiia- la una conexién entre la calidad del apego nifio-cuidador y las relaciones sociales posteriores del nifio con otros y en contextos distintos a la familia (Sroufe, 1995). Las caracteristicas del desarrollo social més alla de los dos afios, el ingreso al contexto escolar y el inicio de las relaciones con pares enfrentaron a los tedricos del apego con una serie de preguntas alrededor de la contimuidad y estabilidad de los patrones de apego tempranos. Thompson, Braun, Grossmann, Gunnar et al. (2005) sintetizan algunas de ellas asi: ,Existe continuidad entre los patrones de apego que el nifio establece en los primeros afios en el contexto familiar y aque 120 Sonta Carrio AviLa los que se formarin en otros contextos sociale: del apego seguro en la vida social de los nifios? {Las relaciones de apego seguras garantizan un adecuado funcionamiento social (competencia social, autorregula- cién emocional, autoconcepto positive) durante toda la vida, y los patrones inse- guros, problemas de adaptacién y de comportamiento? 2 {Cues son las consecuencias Investigadores interesados en el estudio de las relaciones con pares y la adaptacién al contexto escolar se centraron en la evaluacién de lo que se denomind conexiones familia-pares. Dentro de esta linea, algunos autores definieron unas rutas de conexién directa (que involucraban acciones explicitas por parte de los padres encaminadas a ensefiar, monitorear o facilitar el contacto de los nifios con los pares) y otras de conexién indirecta (que implicaban influencias de aspectos caracteristicos de las relaciones entre los miembros de la familia, en las relaciones del nifio con sus pares); las relaciones de apego tempranas se ubicaron dentro de estas Ultimas (Ladd, 1992, 2005). De acuerdo con esta ruta indirecta de influencia, nifios que establecen pa- trones de apego seguro con sus cuidadores aprenden una serie de habilidades y conductas prosociales que transfieren a las relaciones con otros; adicionalmente, a través del establecimiento de una relacién segura, el nifio internaliza un modelo de relacién positive que incluye creencias y expectativas sobre si mismo y sobre los otros, las cuales facilitarén el desarrollo de relaciones sociales adecuadas con pares. Por el contrario, patrones de apego inseguro durante la infancia se asocian a dificultades en las relaciones con otros y a problemas de comportamiento que obstaculizan la adaptacién social de los nifios en contextos distintos a la fami- lia, Investigaciones que evalian los mecanismos de conexién entre las relaciones familiares y de pares han mostrado que nifios con relaciones de apego seguras presentan mayores niveles de competencia social, expresiones positivas de afec- to, mayores niveles de popularidad y aceptacién dentro de su grupo de pares y bajos indices de problemas de comportamiento en situaciones escolares (Bost, Vaughn, Washington, Ciclinski y Bradbard, 1998; Demulder, Denham, Schmidt y Mitchell, 2000; Sroufe, Egeland, Carlson y Collins, 2005). Patrones de apego inseguro con los padres se han asociado con comportamientos hostiles con los pares, problemas de comportamientos internalizantes y externalizantes y bajos niveles de popularidad en el grupo (Lyons-Ruth, Alpern y Repacholi, 1993; Me- Cartney, Owen, Booth, Clarke-Stewart y Vandell, 2004; Steel, Steel, Croft y Fo- nagy, 1999), Estudios recientes han encontrado influencias diferenciales de los estilos de apego establecidos con cada uno de los padres en el desarrollo social de los nifios (Lamb, 2004), indices més altos de asociacién entre patrones de apego seguro y relaciones mas cercanas (por ejemplo, de amistad), que entre este patron [RELACIONES AFECTIVAS TEMPRANAS: PRESUPUESTOS TEORICOS Y PREGUNTAS FUNDAMENTALS 121 y telaciones con pares (Schneider, Atkinson y Tardif, 2001), y evidencia de conti- nuidad en los estilos de apego de la infancia a la adultez (Sroufe y cols., 2005). Esto iltimo es el resultado de un estudio longitudinal en el que se evaluaron caracteristicas de las relaciones de apego, variables predictoras de las mismas e implicaciones de los patrones de apego tempranos de la infancia a la adultez, en una muestra de 180 nifios norteamericanos de estrato socioeconémico bajo. El estudio partié de la evaluacién de los tipos de apego en los nitios participantes, a través de la Situacién Extrafia; se utilizaron numerosas medidas para evaluar las diferentes variables de personalidad y de ajuste social y psicolégico a lo largo de los afios. Hallazgos de este estudio ofrecen evidencia contundente de la asociacién entre patrones de apego seguro y variables de personalidad y adaptacién social, como autoestima, afecto positive, competencia social, dependencia, problemas de comportamiento y diferentes indices de psicopatologia. Conclusiones Las relaciones afectivas han mostrado ser esenciales para la supervivencia de los seres humanos. La perspectiva evolutiva ofrece evidencia importante que enfatiza el papel de los vineulos afectivos tempranos en la vida de los organismos de dife- rentes especies. De acuerdo con Bowlby, una de las funciones de las relaciones de apego es la busqueda de proximidad y contacto con el cuidador, lo cual asegura Ja proteccién de la cria; el contacto cercano con este cuidador garantiza seguridad para la exploracién del ambiente. La perspectiva ecolégica, por otra parte, sefiala la importancia de elementos de los contextos inmediatos y lejanos al individuo y de las diferentes figuras con quienes el individuo intera ‘mantenimiento de relaciones afectivas. ‘Numerosos autores han enfatizado la importancia de las relaciones afeeti tempranas en el desarrollo de los individuos. Igualmente, existe amplia evidencia en la literatura que ha mostrado asociaciones significativas entre patrones de apego seguros y una adecuada adaptacién social y psicolégica y entre patrones inseguros y problemas de comportamiento y ajuste escolar. El rea de estudio de las relaciones afectivas ha mostrado grandes avances desde los primeros escritos de John Bowlby. Se han desarrollado miltiples estrate~ gias de investigacién; taxonomias de los estilos de relaciones afectivas tempranas; se han descubierto fendmenos basicos y se han explorado variables fisiolégicas, evolutivas, sociales y culturales, que permiten visualizar un proceso integrativo del area. Existe un cuerpo amplio de investigadores reconocidos dentro de la psi- cologia del desarrollo que contindan impulsando la investigacién alrededor de las 122 Sonta Carrio AviLa relaciones afectivas tempranas y de sus implicaciones para el desarrollo de los individuos, Sin embargo, este interés no se queda en la psicologia, En las altimas décadas se ha incrementado la inquietud de analizar fenémenos asociados con la formacién, mantenimiento y consecuencias de las relaciones afectivas tempranas desde otras perspectivas y areas de trabajo. El abordaje interdisciplinario e inter- nacional de los problemas y preguntas de investigacién alrededor de este tema, que promueva una visién comprehensiva e integradora de los fendmenos, se hace cada vez mas perentorio. The Dahlem Workshops que se realizan en Alemania son un ejemplo de esta tendencia, El propdsito de estos grupos de trabajo es “pro- mover un intercambio internacional ¢ interdisciplinario de ideas e informacién cientifica que estimule la cooperacién internacional en la investigacién y desarro- lle y ponga a prueba nuevos modelos alrededor de las preguntas fundamentales sobre un tema particular” (Carter y cols, 2005, p. viii). Uno de los temas abordado recientemente en este grupo de trabajo fue el apego y los vinculos afectivos tem- pranos. El primer reporte publicado como resultado de estas discusiones refleja, por una parte, el estado del arte en la investigacién sobre este tema y, por otra, las preguntas fundamentales que los investigadores identificaron en el estudio del apego. Estas preguntas son: 1. ,Cudles son los procesos biolégicos (neurolégicos, moleculares, endocrinos) y los procesos comportamentales asociados con el ape- go y con los vinculos afectivos? 2. ;Cudles son las caracteristicas de las relaciones de apego tempranos y sus consecuencias para las rel: ciones futuras? 3. ,Cudles son los origenes de los vinculos de apego mas all de la infancia? y 4. ;Cuales son las implicaciones adaptativas y desadaptativas de las relaciones de apego tempra- nas y cuales las alternativas de intervencién? Otras preguntas de cardcter mas especifico que se pueden identificar y que reflejan problemas de investigacién importantes en nuestro contexto sociocultural surgen de tematicas poco estudiadas o de vacios metodolégicos encontrados en la literatura sobre relaciones afectivas tempranas. Una de las tematicas se centra en el estudio de las figuras alternativas de cuidado o figuras subsidiarias de apego. Los estudios alrededor de estas figuras son escasos. {Cual es el rol que ejercen figuras como los hermanos, abuelos y demas personas que asumen, cada vez con miis frecuencia, el cuidado de los nifios en ausencia de los padres? {Cudles son las de los vinculos afectivos que establecen los nifios con dichas figuras y cuales son las implicaciones de estas relaciones en el desarrollo psicoldgico de los nifios? Ademés de personas pertenecientes al Ambito familiar, los maestros se han identificado como figuras de gran importancia en el desarrollo social, intelectual y académico de los nifios. Diversos investigadores se han concentrado en el estudio de las relaciones afectivas en el contexto escolar y han evaluado estas preguntas de investigacién en las relaciones del nifio con sus maestros (Pianta, caracteristica [RELACIONES AFECTIVAS TEMPRANAS: PRESUPUESTOS TEORICOS Y PREGUNTAS FUNDAMENTALES. 123 1999; Pianta y Stuhlman , 2004; Frediksen y Rhodes, 2004). {Se constituyen los maestros en figuras de apego subsidiarias? {Existe una relacién entre los patrones de apego de los nifios con sus padres y el vinculo afectivo que establecen con sus maestros? ;Cémo perciben los maestros las relaciones con sus estudiantes y cuales son los efectos de las relaciones maestro-nifio en el ajuste social y en el desempeiio académico de los estudiantes? Estas son s6lo algunas de las preguntas que surgen de esta literatura y que han sido identificadas por los autores como fundamentales dentro del andlisis de las relaciones familiares fuera del contexto familiar. Una limitacién importante que se ha evidenciado en Ia literatura y que conduce a cuestionamientos de orden metodolégico en la investigacién en el érea de las relaciones afectivas tempranas se centra en los instrumentos de medicién utilizados en la evaluacién del apego. Existen diversos instrumentos que se han desarrollado desde los origenes de la teorla para evaluar los estilos de apego en la infancia (Ainsworth y cols., 1978; Main y Solomon,1986; Bretherton, Ridge y Cassidy, 1990); dimensiones particulares de las relaciones de apego entre el nifio. y el cuidador durante la infancia, como son la sensibilidad materna, intrusividad y hostilidad maternas, niveles de seguridad en la relacién (Waters y Dean, 1985; Egeland y cols., 1990; Erickson, Sroufe y Egeland, 1985; Biringer, Robinson y Emde, 1993; Condon, 1993, y Condon y Corkindale, 1998), y percepeién de caracteristicas particulares, como niveles de confianza, comunicacién y alineacién de la relaci6n tanto con padres como con pares en preadolescentes y adolescentes Cook, Greenberg, y Kusche, 1995; Armsden y Greenberg, 1987). Aunque muchos de los instrumentos que se encuentran en la literatura han sido desarrollados en el contexto norteamericano, existen esfuerzos importantes de investigadores de otras, regiones por adaptar y validar algunos de estos instrumentos y por disefiar nuevas estrategias de medicién de las relaciones de apego. Ejemplos de este interés los encontramos en los trabajos de Diaz, Vargas y Rivera, 2003, en México; Scopes Viterbori, Sponza y Zucchinetti, 2004, en Italia; Pardo, Pineda, Carrillo y Castro, 2006, y Camargo, Mejia, Herrera y Carrillo, 2007, en Colombia, Un mayor desarrollo de instrumentos de medicién y evaluacién de las relaciones afectivas, en general, y durante los afios escolares, en particular, es imprescindible. Las aproximacién evolutiva al estudio de las relaciones afectiv: jado datos importantes sobre proc miento y mantenimiento de vinculos afectivos con los cuidadores, asi como el papel de la proteccién, el cuidado y el afecto en el desarrollo de las erfas. Sin embargo, algunas preguntas evolutivas contindan sin respuesta. Por ejemplo, {emo afecta el sistema social particular de algunas especies el establecimiento de relaciones de apego entre la madre y la cria? {La transferencia del estilo de s ha arro- tableci- y mecanismos que explican el 124 Sonta Carrio AviLa interaccién afectiva se presenta de manera similar en diferentes especies? (Ca- rrillo y Gutiérrez, 2000). La importancia de las relaciones afectivas tempranas es innegable, asi como son incuestionables sus implicaciones en el desarrollo social y psicolégico de los nifios, El camino en el establecimiento de las relaciones afectivas es largo y complejo. Los avances en la investigacién en esta area han permitido profundizar en la comprensién de los fenémenos y mecanismos bisicos asociados con el desarrollo de relaciones afectivas adecuadas ¢ inadecuadas. Identificar nuevas variables, sugerir y evaluar conexiones complejas entre las mismas en nuevos contextos y disefiar estrategias metodolégicas sofisticadas que amplien la comprensién de estos patrones de interaccién contribuirin al desarrollo de esta area y serviran de insumos para la investigacién de problemas en otras areas basicas y aplicadas dentro de la psicologia.

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