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Se identificarán zonas propicias para la habilitación de DMEs en las zonas cercanas al área de
XSTRATA y, de ser necesario, en zonas que presenten condiciones a pesar de no ser inmediatas al
área del proyecto, priorizándose las que, por su geoforma natural, se caracterizan como valles glaciares
u hondonadas, y se encuentren lo más cercanas al área del proyecto.
La identificación consistirá en el desplazamiento del equipo técnico por las zonas aparentes, donde se
realizará una inspección visual de las condiciones topográficas, los cuerpos hídricos presentes o
cercanos, los asentamientos humanos, los usos de suelo, la presencia de restos arqueológicos, la
cercanía de vías de acceso, la presencia de zonas de vida o áreas protegidas, afloramientos hídricos,
formaciones geológicas, cobertura vegetal del área y demás que convengan al diseño preliminar del
depósito.
Identificados los lugares con condiciones para el depósito de excedentes, se demarcará a través de
puntos coordenados (UTM-WGS84) su extensión, se tomarán fotografías y filmarán las zonas para
conformar un archivo de imágenes que sirvan para el posterior diseño preliminar y se establecerán
consideraciones de campo ante posibles modificaciones debido a interferencias inmediatas o cercanas.
Finalmente, también como parte de la ubicación de áreas para DMEs, se verificarán las áreas
destinadas para depósitos que ya cuentan con diseños finales, a fin de verificar las condiciones de los
terrenos y suelos superficiales después de la temporada de lluvias, así como la corroboración de las
mismas características y usos del área desde el momento del diseño y levantamiento topográfico a la
actualidad. Además, todas las inspecciones de zonas aparentes o zonas designadas para DMEs
deberán contar con la presencia de un representante del staff de geotecnia de GMI.
Es importante recalcar que la búsqueda de áreas para futuros DMEs requerirá de inspecciones de
terrenos ajenos a los de XSTRATA, por lo que el acompañamiento de los representantes de Relaciones
Comunitarias de la empresa es primordial, no sólo para que el equipo técnico no sea confundido o su
labor tergiversada en campo, sino además para que RRCC tenga conocimiento in-situ de los lugares
más adecuados para DMEs y pueda gestionar su liberación para dicho fin.
Además, la identificación de áreas con condiciones para DMEs conllevará a la realización de estudios
complementarios de geología –geotecnia e hidrología, los que ratificaran la idoneidad de estas zonas
para el depósito de excedentes.
Esta actividad consistirá en tomar muestras de suelos del movimiento de tierras para la Nueva Ciudad
de Fuerabamba, a fin de determinar en un laboratorio especializado sus características físicas y
mecánicas que definan el posterior diseño del depósito y con ello el volumen de almacenamiento.
El procedimiento de muestreo consistirá en tomar muestras simples alteradas del suelo removido en el
área del proyecto, en un volumen equivalente a 1,000 g de suelo removido por muestra, colocadas en
bolsas transparentes con cierre hermético y codificadas de acuerdo a su procedencia y zona de
disposición (Depósito de Material Excedente - DME), siendo almacenadas en contenedores preparados
para la preservación de muestras de tipo sólido y/o líquido.
El criterio de selección de los puntos de muestreo responderá a las condiciones en que estén
distribuidos los apilamientos temporales de suelo removido en las cercanías de la zona de movimiento
de tierras, estableciéndose que el criterio de selección estará basado en función del volumen de los
apilamientos y su ubicación. Para su determinación, el técnico responsable deberá hacer una
inspección previa del área y establecer los puntos más representativos para el muestreo, además de
tener en cuenta también el origen del material apilado y su tiempo de permanencia.
La toma de muestra requerirá que el técnico a cargo identifique previamente el punto a muestrear y
registre sus coordenadas UTM (WGS-84) y fotografías del mismo, además de indicar la zona de
proveniencia del suelo removido. Identificado el punto de muestreo, el técnico a cargo procederá a
etiquetar la bolsa hermética que servirá para colectar la muestra para posteriormente, con la ayuda de
una picota y una paleta, retirar los 100 mm superficiales de suelo removido para recién extraer la
muestra y colocarla a la bolsa hermética hasta que la balanza de mano indique que se ha alcanzado el
peso requerido (1000 g). Finalmente, la muestra de suelo removido será sellada con el mismo cierre
hermético de la bolsa y colocada en el contenedor plástico (denominado comúnmente como “cooler”,
que contendrá además bolsas refrigerantes para mantener las muestras a bajas temperaturas) para su
preservación y transporte hacia los próximos puntos de muestreo y luego a la ciudad de Lima, para
derivarse al respectivo análisis físico – mecánico de laboratorio.
2. CRONOGRAMA