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AGUSTÍN MELGAR

 Nació en Chihuahua, Chih., entre 1828 y 1832. Hijo del teniente coronel
Esteban Melgar y de María de la Luz Sevilla, quedó huérfano de ambos
muy niño. Solicito su ingreso al Colegio el 4 de noviembre de 1846 y fue
aceptado con fianza de su hermana Merced, a cuyo cuidado había
estado.

El 4 de mayo de 1847 fue dado de baja por haber faltado a una revista
de comisario. Presentó reiteradamente nuevas solicitudes y fue
reincorporado en calidad de cadete “agregado”, el 8 de septiembre de
ese año. En una nota puesta en su expediente se asienta:

 “Habiendo quedado solo, intentó detener al enemigo que bajaba de la


escalera del lado norte del Mirador. Mató de un balazo a uno de los
asaltantes en dicha escalera, Siendo perseguido se parapeto detrás de
unos colchones en el interior de una de las piezas, desde donde continuó
haciendo fuego hasta que ya no pudo más, por las heridas recibidas.
Fue recogido, y se le acostó sobre una mesa en la pieza, en la primera
que se encontraba subiendo por la escalera, que tiene el cuadro 2 de
Abril a mano izquierda. Quedo así abandonado y en la mañana siguiente
del día 15 se le encontró muerto y caído en el suelo.”

  Cuando Melgar reingresó al Colegio, lo hizo en compañía de Juan


Escutia, Hilario Pérez de León y José Árias Caballero, quienes también
quedaron como “alumnos ingresados”. Todos cumplieron con su deber,
“pues murieron, uno perdió el brazo y sólo el último quedó ileso”
Las notas transcritas fueron puestas en los expedientes en 1924, por el
mayor de infantería encargado del Archivo Histórico del Colegio Militar,
Alfonso R. Montenegro.

FERNANDO MONTES DE OCA

Nació en Azcapotzalco, DF., entre 1828 y 1832. Sus padres fueron José
María Montes de Oca y Josefa Rodríguez. Huérfano de padre, pidió
entrar al Colegio el 24 de enero de 1827, “deseando servir en la gloriosa
carrera de las armas... Viendo al mismo tiempo lo invadida que nuestra
república y queriendo serle útil en la actual guerra con los Estados
Unidos del Norte”.

Ingreso a la Compañía de Cadetes. Fue uno de los alumnos que se


quedaron voluntariamente en el Colegio contrariando la recomendación
del general Monterde en el sentido de que se retirarían a sus casas. Una
nota puesta en su expediente dice:

“Alumno Fernando Montes de Oca. Muerto por la Patria el 13 de


septiembre de 1847, al saltar por la ventana que daba al Rancho de
Anzures para incorporarse al resto de alumnos que defendían la entrada
del Bosque desde el Jardín Botánico. Fue cazado por los americanos que
ya se habían adueñado de la azotea del Castillo, Su cadáver quedó
tirado por tres días. De este alumno se dijo que se había envuelto en la
bandera y se había suicidado, arrojándose desde la azotea para no verla
en poder enemigo” Es a él, pues, a quien debe acreditarse ese acto
heroico, y no a Juan Escutia, a quien una versión oral atribuye haber
recogido la bandera del plantel o la de la Guardia Nacional, que estaba
abandonada, y haberse lanzado al vacío cubierto con ella.

Las notas transcritas fueron puestas en los expedientes en 1924, por el


mayor de infantería encargado del Archivo Histórico del Colegio Militar,
Alfonso R. Montenegro.

FRANCISCO MÁRQUEZ   

Nació en Guadalajara, Jalisco, en 1834. Huérfano de padre, fue hijo de


Micaela Paniagua e hijastro del capitán de caballería Francisco Ortiz.
Solicitó ingresar al Colegio el 14 de Enero de 1874. Permaneció a la
Compañía de Cadetes. Una nota puesta en su expediente dice: 

“En la falda del cerro que mira al este se encontró su cadáver cerca de
D. Juan Escutia, ambos acribillados a balazos”, Era el más joven de
todos. 
 Las notas transcritas fueron puestas en los expedientes en 1924, por el
mayor de infantería encargado del Archivo Histórico del Colegio Militar,
Alfonso R. Montenegro. 
  
 
JUAN DE LA BARRERA 

Nació en la Ciudad de México en 1828 hijo del general Ignacio María de


la Barrera y de Juana Inzárruaga. Fue miembro del Ejército desde los 12
años, privilegio que se concedía únicamente a los hijos militares. Por su
intachable conducta durante la asonada conocida como Plan  de
Regeneración Política, se le dio el grado de subteniente de la 4ª
Compañía de Brigada de Artillería (1841). Sin embargo, solicitó ingresar
al Colegio en 16 de septiembre de 1843 “para ser un oficial
verdaderamente científico”, petición que se le aceptó 2 días después. 

 Ayudó a la construcción de algunas fortificaciones alrededor del Cerro


durante 1847, formando en el Batallón de Zapadores con el grado de
teniente. Murió defendiendo una de las baterías instaladas a la entrada
del Bosque de Chapultepec, donde se unen las calzadas de Chapultepec
y Tacubaya.
JUAN ESCUTIA

Nació en Tepic, antiguo Cantón de Jalisco, hoy Nayarit, entre 1828 y


1832. Se ignora quienes fueron sus padres. Ingreso al colegio como
cadete el 8 de septiembre de 1847.  En el traslado del archivo del
plantel, hecho antes del asedio y  toma del castillo,  o en la destrucción
de éste,  desapareció su expediente o al menos se extravió. Parece ser
que fue subteniente de artillería Su cadáver se encontró en la falda del
cerro que mira al este., junto al de Francisco Márquez.
  VICENTE SUÁREZ FERRER 

Nació en la ciudad de Puebla en 1833. Hijo del primer ayudante de


caballería, comandante de escuadrón Miguel Suárez y de María de la Luz
Ortega, presentó su solicitud de ingreso al Colegio como cadete el 21 de
octubre de 1845. Una nota puesta en su expediente dice: 

“Muerto por  defender la Patria en su puesto de centinela, el 13 de


septiembre de 1847. Marcó el alto a los asaltantes, que continuaron
avanzando. Mató de un balazo a uno de ellos e hirió de un bayonetazo
en el estómago a otro, y fue muerto en su puesto luchando al arma
blanca. Fue muerto por su bravura, pues su juventud hizo a los
asaltantes vacilar en su ataque, hasta ser atacados por él.”

 Las notas transcritas fueron puestas en los expedientes en 1924, por el


mayor de infantería encargado del Archivo Histórico del Colegio Militar,
Alfonso R. Montenegro.

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