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foca investigación

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Diseño interior y cubierta: RAG
Imagen de portada: Manuel Días Salas-Porras

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consentimiento por escrito del editor.

© Alejandra Salas-Porras Soulé, 2018

© Ediciones Akal, S. A., 2018


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ISBN: 978-84-16842-30-8

Impreso en México
Alejandra Salas-Porras Soulé

Conocimiento y poder
Las ideas, los expertos
y los centros de pensamiento en México
res demográficos, desempeño económico, desempleo y otras
cuestiones, los otros tres centros públicos son abiertamente aper-
turistas y promercado.

Conclusiones

Las tendencias que se han analizado en este capítulo se pueden


interpretar a la luz de las reformas económicas que adelgazan al
Estado mexicano y llevan a la desaparición de numerosas agencias
públicas de investigación y, en consecuencia, a la subcontratación
de la investigación que antes se realizaba internamente en el apa-
rato estatal; así como también a la luz de las reformas políticas
que le dan mayor poder al Legislativo y lo vuelven objeto de aten-
ción y presión por parte de diversos intereses que intentan influir
en sus decisiones de política pública.
Ante la crisis del modelo sustitutivo de importaciones y de las
estrategias proteccionistas centradas en el Estado, han adquirido
relieve los centros de pensamiento que buscan opciones de políti-
ca pública centradas en el mercado. Los centros que surgieron
antes de los años ochenta no desaparecieron, pero experimentan
cambios para adecuarse e incluso promover la economía política
centrada en el mercado y las grandes corporaciones. Esta tenden-
cia es especialmente notable en el caso de algunos centros acadé-
micos, el cide en particular.
Conforme se da mayor poder al mercado, a las grandes corpo-
raciones nacionales e internacionales y a todos los actores que
defienden estrategias de corte neoliberal, se transforma también
el conjunto de organizaciones e instituciones que diseñan, defi-
nen y negocian las políticas públicas y, conjuntamente, constitu-
yen el régimen de conocimiento. Adquieren gran relieve los cen-
tros de pensamiento independientes y los despachos que realizan
investigación bajo contrato; por su parte, los centros académicos
asumen posiciones cada vez más abiertas y contestatarias en la
lucha por demostrar la superioridad de sus ideas. En cuanto a los
pocos centros estatales que subsisten, éstos tienden a volverse
práctica o formalmente autónomos y se multiplican las formas de

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cooperación y colaboración entre los centros afiliados a asocia-
ciones empresariales, los académicos y los que operan bajo con-
trato. Éstas y otras tendencias coinciden con los cambios y prác-
ticas que se viven en otros países de América del Norte, los cuales
se difunden a través de las redes que se forman entre los centros
de pensamiento mexicanos y otros que operan a nivel regional y
global, tal y como se verá en los siguientes capítulos.
Dentro de la categoría de los independientes y de los académi-
cos, encontramos algunos centros que elaboran nuevas ideas y
propuestas de políticas que ponen en el centro la justicia econó-
mica y social, la transparencia y el combate a la corrupción, la
seguridad, los derechos colectivos y, en algunos casos incluso,
proyectos de industrialización alternativos.
Como en otros países del norte y del sur, la tarea de identificar
los tipos de centros resulta difícil en México, pues las fronteras
entre uno y otro tipo no son tajantes, y además cambian a través
del tiempo. De esta forma, los centros con una orientación emi-
nentemente académica despliegan un activismo político en dife-
rentes frentes, como se verá con más detalle en el Capítulo III; no
obstante, al distinguir los diferentes tipos y las interacciones entre
ellos, se descubren las relaciones de poder que subyacen en el
conocimiento que producen, defienden y diseminan a través de
las redes que se examinarán en los próximos dos capítulos.

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Capítulo II
Las redes, los expertos y el campo de poder

El propósito que se persigue en este capítulo es revelar quién


controla los centros de pensamiento mexicanos a través, tanto de
las juntas de gobierno, como de la red y los agrupamientos que se
forman mediante las conexiones que sus miembros y los de otros
cuerpos de gobierno generan. Dicha red entraña y promueve for-
mas complejas y sutiles de coordinación y gobernanza que es ne-
cesario descubrir para comprender no sólo cómo se toman las de-
cisiones en materia de políticas públicas, sino también a quiénes
benefician dichas políticas. Para tal fin es preciso analizar la com-
posición de los diferentes cuerpos de gobierno de los centros;
cómo se entrecruzan a partir de los miembros que participan en
dos o más de ellos; quiénes son las figuras más centrales e influyen-
tes de dicha red de acuerdo con el número de posiciones que tie-
nen en los centros; los entrecruzamientos que generan; así como
su nivel de centralidad y conectividad en la red en su conjunto.
La composición e integración de las juntas de gobierno permi-
te esclarecer quiénes, además de dirigir las estrategias de los cen-
tros, encarnan las filiaciones con intereses económicos, políticos
y académicos, generan las conexiones e intermediaciones entre
dichos intereses, y definen la orientación ideológica de los cen-
tros de pensamiento, las líneas de investigación, cabildeo y difu-
sión de ideas.
Con base en este análisis se podrá, más adelante, examinar has-
ta dónde la red que han articulado los centros de pensamiento
forma un nuevo campo de poder en el que se producen, consen-
san, confrontan y validan ideas y propuestas de política pública; en
el cual conviven y se confrontan intereses, preocupaciones, prefe-
rencias políticas e ideológicas; se promueven consensos alrededor
de la agenda de políticas públicas en diferentes ámbitos; se mez-
clan diversas estrategias y enfoques para vincularse con las agen-
cias, funcionarios públicos, legisladores y otros políticos con ma-
yor injerencia en la definición de las políticas públicas, y en donde,
además, se mezclan las estrategias predominantemente académi-
cas de investigación y de asesoría con las de abogacía o defensa y
promoción de intereses particulares (económicos y/o ideológicos).

La red de centros de pensamiento mexicanos

Para procesar las conexiones entre los centros de pensamiento


mexicanos se realizó un análisis de redes formal a través de los
paquetes de cómputo ucinet VI y Pajek 2.0, los cuales nos permi-
ten medir la centralidad que tienen los centros y quienes los diri-
gen (los think tankers), la intensidad de las conexiones, la forma-
ción de grupos y la medida en que éstos coinciden con la
orientación ideológica, temática o política.1
Los cuerpos de gobierno varían mucho, dependiendo del tipo
de centro, así como de su historia. Algunos tienen una estructura
de gobernanza muy sencilla, con sólo un consejo de administra-
ción o junta de gobierno (como en el caso de Cidac e Imco),
mientras otros combinan varias estructuras, que incluyen, entre
otros cuerpos, juntas de gobierno, directores o coordinadores de
centros de investigación, como en los casos del cide, Colmex,
itam y la mayoría de los centros de investigación académicos (Sa-
las-Porras y Padilla, 2013). En estos casos, fueron incluidos en
la base todos los miembros de estas estructuras, además de los
expertos y los investigadores de todos los niveles, ya que a me-
nudo son ellos los que generan las conexiones y definen las lí-
neas de investigación, y porque, además, en dichos centros las
formas de autogobierno suelen ser comunes. La idea fue no dejar
fuera a nadie con potencial de generar conexiones, dado que el
miembro de la junta de gobierno de un centro puede ser un inves-
tigador afiliado a otro centro (por ejemplo, María Amparo Casar
es miembro de la junta de Imco y Colmex e investigadora del

1
Agradezco el apoyo de Alejandro Arnulfo Ruiz León para procesar, a
través del programa Pajek, la base de datos.

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cide). De esta manera, se aseguró que todos los miembros más
activos fueran considerados esto es, todos aquellos con capacidad
de comunicar información y conocimiento relevante para el pro-
ceso de definición y legitimación de políticas públicas. Pero,
como se verá más adelante, muy pocas personas en la red han
acumulado el capital social que dichas posiciones entrañan.
Considerando los criterios anteriores, un total de 2,831 posi-
ciones en los 57 centros de la muestra son detentadas por un total
de 2,555 individuos. De éstos, sólo 156 tienen dos posiciones, 23
tienen tres, 14 tienen cuatro, cuatro tienen cinco, dos controlan
seis posiciones y sólo uno controla siete. Esto significa que 200
personas (151 hombres y 49 mujeres) participan activamente en la
red al tener la posibilidad de actuar desde dos o más posiciones; 44
personas (entre las que se encuentran sólo ocho mujeres) desde
tres o más, y 21 personas desde 4 o más posiciones. Éstos son los
grandes enlazadores, quienes tienen un mayor control sobre el ca-
pital social y la dinámica de la red en su conjunto. Por tal motivo,
sólo aquellos con dos o más posiciones fueron considerados para
calcular las medidas de centralidad que se utilizan en los progra-
mas de cómputo (grado y eigenvector), la articulación de los gru-
pos y las posiciones de intermediación, así como las características
de la red en general (que se pueden apreciar en la Gráfica 2a).
Con base en los programas ucinet y Pajek, se encontraron un
total de 12 componentes en la red, entre los cuales el más grande
incluye 44 de los 57 centros y 2,396 individuos. Esto significa que
13 de los 57 centros, y 159 de los 2,555 individuos, se encuentran
desconectados del componente más importante. Todos los 44
centros del componente mayor (Gráfica 2a) se conectan directa o
indirectamente, aunque la distancia entre ellos varía.2 De esta for-
ma, algunos se conectan a la red únicamente a través de un inter-

2 
En el análisis de redes, el concepto de componente se refiere a los grupos
de actores conectados directa o indirectamente entre sí; el concepto de dis-
tancia se refiere a la rapidez con que los centros (nodos) se pueden comunicar
entre sí, esto es, si se pueden comunicar directamente (distancia uno) o indi-
rectamente a través de otros centros (requiriendo dos o más pasos); y la in-
tensidad se refiere al número de actores comunes entre dos centros.

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mediario y suelen tener una posición marginal, como en el caso
del Instituto Mexicano de Ejecutivos de Finanzas (imef), del Cen-
tro de Investigación Económica y Presupuestaria (ciep), mora y
Colosio, entre otros. El núcleo de la red está formado por un
grupo de centros altamente interconectados entre sí y con los ín-
dices de cercanía y centralidad más altos, lo que significa que se
pueden conectar más rápidamente con el resto de los centros del
componente mayor. Los diez centros del Cuadro 2.1 forman par-
te de dicho núcleo, y como se puede ver en la Gráfica 2a, la cer-
canía entre ellos es muy alta e intensa.3 Así, el Centro de Estudios
Espinosa Yglesias (ceey), que es el de mayor centralidad en toda
la red, tanto en términos del número de entrelazamientos que
genera (el grado) como de la cercanía con los otros centros, com-
parte 26 directores y/o investigadores con cide, 24 con Comexi y
20 con México ¿Cómo vamos? (intensidad que se puede apreciar
en el grosor de la línea). Además, es notorio el número de cone-
xiones de ceey con centros académicos como el Instituto de In-
vestigaciones Jurídicas (iij) de la unam y el itam, con los que com-
parte 13 investigadores, Colmex (con 9 investigadores en común),
y 6 con la Facultad Latinoamericana de Ciencias Sociales (Flac-
so), además de los 26 ya mencionadas con el cide. Es común que
este centro invite a investigadores de éstas y otras instituciones
académicas a formar parte de su red de expertos, a quienes invita
a participar en eventos sobre sus áreas de interés y especializa-
ción. Por su parte, Comexi —otro de los centros independientes
de la muestra— se encuentra intensamente entrelazado con otros
centros independientes como México ¿Cómo vamos?, con el que
tiene 11 investigadores en común, 8 con Imco y 6 con México
Evalúa. La intensidad de las conexiones acelera el flujo de infor-
mación e ideas entre estos centros, así como la convergencia en
torno a los criterios que se consideran válidos para generar cono-
cimiento en los diferentes ámbitos de política pública.

3 
La intensidad de la conexión en teoría de redes se refiere al número de
líneas o actores que comparten dos centros o actores (nodos).

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