Está en la página 1de 6

Primera Generación – 1G – Años 70

A finales de los años 70 y principios de los 80 nace la telefonía móvil. Con la 1G sólo
podías llamar, nada de internet. Los teléfonos no cabían en el bolsillo, se llevaban en maletín.
Además, no había casi antenas y las baterías de los teléfonos duraban muy poco, así que la
movilidad era reducida. Estos “móviles” eran muy caros, un capricho que sólo estaba al
alcance de unos pocos.

La telefonía móvil despegaba –principalmente en Estados Unidos-, aunque nadie imaginaba


en qué se convertiría años más tarde.

Segunda Generación -2G- Años 90


A principios de los años 90 llega la globalización digital. Aparece el concepto del
conocido roaming (usar tu móvil en el extranjero). En este período mejora
considerablemente la calidad de la voz, la velocidad de transmisión de datos y aparecen los
SMS.
Estas mejoras, unidas a unos precios más asequibles, aceleran la popularidad de los teléfonos
móviles. El avance era imparable.
Esta Segunda Generación presenciaría también los inicios de la navegación por internet con
teléfonos móviles que ya entraban en un bolsillo, así como el intercambio de imágenes.
Las primeras Blackberry se hicieron populares en este período.

Tercera Generación – 3G – Siglo XXI


Llega el internet móvil. Las posibilidades para el usuario se disparan. Ya es posible realizar
videoconferencias, intercambiar correos electrónicos, ver vídeos… Proliferan apps de todo
tipo. Llevar Facebook, GPS o Youtube en el móvil empieza a ser común.
Otro gran avance del 3G es que permite la compatibilidad mundial. No importa dónde
estemos para navegar por internet. Cada vez se ve a más gente que no se despega de su
dispositivo ni a sol ni a sombra. Ya llevamos micro ordenadores en el bolsillo.
Surge WhatsApp. Y si no lo usas corres el riesgo de ser «marginado».

Cuarta Generación – 4G – Finales primera década siglo XXI


La convergencia entre redes cableadas e inalámbricas está detrás de la red 4G, basada
completamente en el protocolo IP.
Esta Generación está marcada por la generalización de los smartphones y las conexiones
ultra rápidas desde prácticamente cualquier lugar. El número de teléfonos móviles en Euskadi
ya supera al de personas.
Los teléfonos móviles permiten cosas inimaginables hace unos años: medir tus constantes
vitales, hablar a tu móvil para que te recomiende un restaurante, cámaras fotográficas y
calidad de imagen en alta definición (de hecho, los móviles desplazan a las cámaras digitales
compactas).

Quinta Generación – 5G – ¡Ya está aquí!


Hogares y ciudades inteligentes, realidad virtual, coches autónomos, telemedicina, cloud
computing… La tecnología 5G llega dispuesta a revolucionar nuestras vidas.

Detalles de arquitectura de telefonía móvil

El ejemplo de arquitectura de telefonía móvil describe una red telefónica móvil ficticia en
la que los teléfonos móviles se comunican entre sí.

La arquitectura consta de teléfonos móviles y una red inalámbrica que direcciona las
llamadas. La figura siguiente ilustra dicha arquitectura:
El modelo telefónico detallado se basa en un teléfono móvil real. El modelo consta de una
clase de controlador de teléfono que interactúa con el usuario a través de un altavoz, una
pantalla y un teclado. Cuando el usuario realiza una llamada, se direcciona a través de la red
inalámbrica. La red inalámbrica es una representación generalizada de una arquitectura de
estación base y red inalámbrica. La red inalámbrica procesa la llamada entrante, localiza al
receptor, determina si el teléfono del receptor está desocupado y transfiere la llamada.

El ejemplo de teléfono móvil consta de dos modelos: un caso de uso y una arquitectura. El
modelo de guión de uso de telefonía móvil contiene los guiones de uso y diagramas de
actividades que explican cómo interactúan los usuarios con el sistema. El modelo de
arquitectura de telefonía móvil se basa en el modelo de guiones de uso y contiene diagramas
de secuencia, diagramas de dominio y diagramas de máquina de estado que modelan la
información estática y dinámica del sistema.

También podría gustarte