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Tercero Primaria

“Mi Primera comunión”

NOMBRE:

1
Presentación
Este texto ha sido preparado para que puedas conocer más
de Dios, que es Padre, que es Jesús nuestro amigo y que es el
Espíritu Santo, Espíritu de Amor. Para que conociéndolo,
podamos descubrir qué quiere de nosotros y así puedas ser
más feliz.

También te acercará a la realidad de nuestro país y


conocerás el sufrimiento de nuestros hermanos, para que
puedas ayudarlos y llenar tu corazón de Amor.

Además, este texto ha sido diseñado para que puedas recibir


una formación adecuada para realizar la Primera Comunión,
ya sea que la recibas en el colegio o en tu parroquia.

Si no la vas a recibir este año, o ya la recibiste, la formación


te servirá para crecer espiritualmente.

Te invito a que disfrutes cada momento de este caminar con


Jesús y te sientas inmensamente feliz por recibir a Jesús por
primera vez.

2
Dios camina con su
Pueblo

3
Iniciación en el manejo de la Biblia:
División del Antiguo y del Nuevo
Testamento

Seguro que en casa tienes muchos libros que te gusta leer y a los
que pones atención para imaginarte a cada uno de los personajes
para descubrir lo que te quiere decir el autor. De la misma forma
cuando leas la Biblia debes estar muy atento.

Biblia es una palabra de origen griego, que quiere decir: libros. Este
conjunto de libros al que llamamos Biblia, se fue componiendo a lo
largo de varios siglos por medio de una transmisión oral y luego se
fue poniendo por escrito. Cada libro ha sido escrito por una persona
a la que Dios ha inspirado a través de su Espíritu para escribir lo que
Él ha querido comunicarnos.

Tiene dos grandes divisiones:

Antiguo Testamento (Se abrevia A.T.): está formado por todos


aquellos libros escritos antes del nacimiento de Jesús. En ellos se
habla acerca de la experiencia de fe del pueblo de Israel y de las
promesas que Dios le hace a su pueblo. Fue escrita en: Palestina,
Babilonia, Egipto y consta de 46 libros.

Nuevo Testamento (Se abrevia N.T.): está formado por todos


aquellos libros escritos a partir del nacimiento de Jesús. En ellos se
habla sobre Jesús, lo que predicaron sus apóstoles y de cómo se
cumplen las promesas de Dios. Fue escrito en: Palestina, Siria, Asia
Menor, Grecia e Italia. Consta de 27 libros.
La Biblia es un libro hermoso porque nos cuenta la relación de amor
que Dios tiene con la humanidad a lo largo de la historia.
4
División de la Biblia: libro, capítulo y versículo

Para hacernos más fácil encontrar un texto de la Biblia, cada libro se divide
en capítulos y versículos.

Los Capítulos son las grandes divisiones del libro y puedes ver que están
identificados con números grandes y muchas veces están en negrita.

Los Versículos son las pequeñas divisiones de cada capítulo, y están


identificados con pequeños números entre el texto.

Con tu grupo busca estas citas bíblicas:

1 Corintios 13:4-5 
Salmos 143:8
1 Juan 4:19
De qué nos hablaban estas citas bíblicas: _____________________________

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5
Historia de la
salvación El pecado
original

En el pueblo de Israel las personas


empezaron a preguntarse el porqué del
sufrimiento. Entonces Dios inspiró a las
personas que escribieron el Génesis y ellos
contaron una historia para explicar el
origen del mal. La historia de la creación y
del pecado original está llena de símbolos
que nos quieren decir algo de Dios y del ser
humano, esto quiere decir que no
todo pasó exactamente como lo cuenta
la historia, veamos algunos símbolos:

 El paraíso simboliza la felicidad que Dios quiere para todos.


 La serpiente representa al mal espíritu que nos empuja a tomar
decisiones que van en contra del amor de Dios.

El “pecado original” no tiene el mismo sentido que cuando hablamos del


pecado personal; por ejemplo cuando una persona miente o roba es
responsable de sus actos, sabe lo que hace, eso es pecado personal.
En el pecado original no estamos hablando de acciones pecaminosas sino
de la realidad de pecado que rodea el corazón humano y del mundo.

Hablar del pecado original significa que a partir de nuestra humanidad


somos débiles frente al mal. Ese mal se encuentra en todas partes y en
todos los seres humanos. Contradice la voluntad de Dios sobre el hombre.
Que seamos felices y hagamos felices a los demás.

Para orar… “Dios, crea en mí un corazón puro, hazme de nuevo con


un espíritu firme, dame la alegría de tu salvación, reafirma en mí tu
espíritu generoso. Amén.”

6
Los diez mandamientos
Dios siempre ofrece su
perdón

Nuestros padres nos llaman la


atención cuando ven que nosotros
desobedecemos a lo que ellos
consideran mejor para nuestra
felicidad. Tratan de dialogar con
nosotros, de hacernos ver en qué nos
equivocamos; aunque algunas veces
se molestan por lo que hacemos,
siempre nos siguen amando y esperan
que haya un cambio en nosotros.

Dios Padre conoce de nuestra


debilidad para caer en el mal y realizar
cosas que están en desacuerdo con su
voluntad. Sin embargo, por el amor
que nos tiene, siempre espera pacientemente nuestro regreso, nos invita a
vivir la experiencia del perdón y del cambio en nuestros corazones. En su
plan amoroso nos envía como modelo a seguir a su Hijo, Jesús.

Sabías qué… Entre los judíos, los paisanos de Jesús, tenían por
costumbre, sacrificar los mejores corderos que podían, esto era para
“agradar” a Dios por las faltas que cometían. Pero Dios que es amor,
nos dice que lo que más le agrada, no es el sacrificio, sino la
misericordia y la justicia que podamos practicar entre nosotros,
especialmente con aquellos y aquellas a quienes más nos cuesta
perdonar.

7
Ex. 20, 2.7.10.12-18
Hemos escuchado mucho sobre los diez
mandamientos. La Biblia nos cuenta la historia de
cómo Dios le entregó a Moisés las Tablas de la
Ley o los Diez Mandamientos y que el pueblo se
comprometió a cumplir.

Los Diez mandamientos son un camino de amor


que nos hace libres, en la medida en que cada uno
de nosotros esté dispuesto a vivir en el amor de
Dios. Él no te obliga a cumplirlos, te invita a
vivirlos.

Te los presentamos para que conozcas a qué te invita Dios:

1. Ama a Dios, al Dios de amor que nos enseñó Jesús.

2. Respeta el nombre de Dios.

3. Respeta el día de descanso y dedícalo a Dios.

4. Respeta a tu padre y a tu madre.

5. Respeta la vida.

6. Respeta tu cuerpo y el de los demás.

7. Es injusto tomar las cosas que no te pertenecen.

8. Es injusto decir mentiras y calumnias de los que te rodean.

9. Agradece y sé feliz con tu esposa o esposo.

10. Agradece y sé feliz con lo que tienes, si deseas algo, lucha por conseguirlo.

8
Jesús de
Nazaret

9
Jesús forma un grupo de amigos y amigas,
Y quiere que seamos amigos

Cada uno de nosotros está rodeado de


personas que nos aman, dentro de ellas
están los amigos y amigas. Ellos nos
acompañan en los momentos alegres y
tristes. Quienes así lo consideran
necesario, nos llaman la atención para
que seamos mejores personas. Con ellos
compartimos momentos importantes
de nuestra vida.
Jesús también tuvo a su lado un grupo
de amigos y amigas con los que se
querían mucho. Dentro del grupo tenía
amigos muy cercanos; estaba formado por hombres como Juan y Pedro y
mujeres como María Magdalena, Marta y María, con quienes compartían
sus experiencias de servir ayudando a otras personas y dialogaban sobre el
Reino de Dios.
Los amigos de Jesús, después de tener una experiencia profunda con ellos
intentaban seguir su ejemplo.

Los niños, las mujeres, los ancianos y los sufridos de la historia eran los
predilectos de Jesús, por lo tanto siempre les brindó un amor profundo
siendo cercano y solidario con sus necesidades. Tú, también eres uno de sus
predilectos, cada día te ofrece su amistad a través de las personas que te
rodean y te aman. Él te invita a vivir también como amigo y amiga de los
demás.

Para reflexionar y orar… Piensa en tu Primera Comunión cuando leas esta


oración. “Gracias, Señor, por darme buenos amigos. Sé que me comprenden
y me aceptan. Enséñame a compartir. Yo sé que tú amas al que es generoso
y comparte con alegría. Amén.
10
La última cena, Jesús se queda
con nosotros en la Eucaristía

El Jueves Santo recordamos la última cena de


Jesús con sus apóstoles. Antes de cenar, Jesús
les lavó los pies a sus amigos y amigas, con ello
nos enseña a ponernos siempre al servicio de los
demás. Durante esa cena, Jesús les dejó en el
pan y el vino, su Cuerpo y Sangre.

Jesús pasó toda su vida entregado a los demás.


Compartió todo su amor con los que lo
rodeaban. Por eso pensó que el pan y vino eran
excelentes símbolos. El pan es muy importante
para la alimentación humana. Comer juntos el
pan significa compartir, ser amigos. En la
Eucaristía Jesús se hace alimento para todo aquel
que quiera recibirlo, por eso dijo a sus amigos:
“Hagan esto en memoria mía”.

Por eso tú estás invitado a experimentar la


presencia real de Jesús en la Eucaristía. Cada
vez que comulgues comprométete a ser una
mejor
persona, a
querer ser
como
Jesús, en
donde
vives, en lo
que haces,
en lo que
dices y en
lo que piensas.
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12
¿Por qué mataron a Jesús?

Jesús fue quién puso en marcha el


movimiento del amor, en el cual
hombres y mujeres compartieron su
estilo de vida. Anunció la llegada del
Reino de Dios como la liberación de
aquellas cosas que nos esclavizan y que
nos impiden ser felices: hambre,
injusticias, sufrimientos, muertes, etc.
Nos habló de un Reino de amor, justicia,
solidaridad, verdad, paz.

Jesús optó por los necesitados de alimento, por los marginados, por los
enfermos, por los necesitados de amor, por los pecadores, por los niños.
Optó por los que la sociedad de esa época no
tomaba en cuenta, a todos les reconoció su
dignidad.
Además anunciaba que
Dios no estaba en el
Templo, sino en los
necesitados y
marginados.

Todo ello hizo enojar a los sacerdotes y


fariseos judíos y por eso lo llevaron ante los
romanos para que lo condenaran a muerte y en
una cruz, que en esa época era el tipo de
muerte más cruel. Jesús sigue muriendo en la
cruz, cuando no soy solidario frente a las
necesidades de los demás. Cuando niego mi
ayuda a quien lo necesita, cuando con mis

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actitudes negativas he dejado de amar: en mi
familia, en el colegio y con mis amigos.
También muere en todas las víctimas de la
pobreza, de la injusticia y de la marginación.

Sabías que… En Guatemala muchos niños y adultos mueren cada día por
hambre, víctimas inocentes de la violencia, por enfermedades que se
pueden prevenir... Así muere Jesús en Guatemala.

Realiza dibujos de personas que son los crucificados en nuestro mundo hoy.
Al terminar juntos realicemos una oración por estas personas.

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¡Aleluya, Jesús está vivo!
Jesús nuestro amigo, sufrió y murió
injustamente, por eso Dios Padre a los
tres días lo resucitó. A través de su muerte
y resurrección nos regala la salvación.
Desde entonces es la esperanza que hay
en cada uno de nuestros corazones: Jesús
vive entre nosotros cada vez que optamos
por la vida.

Los ángeles les dijeron a las mujeres, que


fueron a buscarlo al sepulcro y no lo
encontraron: “¿Por qué buscan entre los
muertos al que está vivo? No está aquí, ha
resucitado.” Es la mejor noticia que
podemos recibir, por eso cuando decimos:
“¡Aleluya, Jesús está vivo!”, celebramos el paso de la muerte a la vida de
nuestro amigo Jesús.

Atrás quedó el temor, la duda y la poca fe. Los cristianos no podemos


quedarnos en la muerte y en el dolor ya que somos testigos de la
resurrección, Él está aquí, está presente, es vida y es verdad, su espíritu nos
mueve para amar. Su amor es tan grande que nos comparte a nosotros su
vida nueva de la resurrección.

Sabías que… “Aleluya” quiere decir: “Alabado sea Dios”

Reflexiona… “Nadie tiene amor más grande que el que da la vida por sus
amigos.” Jn. 15, 13 ¿Qué te dicen a ti, estas palabras de Jesús?

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15
Jesús me invita a colaborar en la construcción del Reino

Estamos rodeados de realidades


concretas que necesitan de hombres
y mujeres dispuestos a servir a los
demás, especialmente a aquellos que
pasan hambre, que sufren del rechazo
entre sus compañeros, por la
violencia, por los desastres naturales,
por las injusticias, por la mentira, el
egoísmo y la soledad.

Frente a estas realidades Jesús nos hace una invitación especial a colaborar
con Él, en la construcción del Reino de Amor, justicia, paz, verdad, y
solidaridad; en donde todos los seres humanos puedan tener una vida
digna.

Desde ahora colaboras en la construcción


del Reino: cuando eres solidario con un
compañero o compañera rechazada.
Cuando ofreces tu ayuda en casa o en el
colegio. Cuando eres capaz de compartir lo
que tienes en especial con los más
necesitados. Cuando llevas alegría y
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esperanza a los que ya no encuentran sentido o alegría por vivir…

Reflexiona… ¿Cómo puedo colaborar en la construcción de ese Reino?


¿Cómo se relacionan mis experiencias de Servicio Social con la construcción
del Reino?

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Conociendo la realidad que me rodea:
Mi compromiso de “comulgar” con el pobre

Mc. 9, 35-37

La palabra comunión se integra


de dos palabras: común y unión.
Cada vez que comulgamos nos
unimos a Jesús quien nos da fuerza y
energía para amar.

Cuando hablamos del compromiso


de comulgar con el pobre, nos
referimos a que la Eucaristía no
termina con la bendición del
sacerdote al final de la misa, sino
que continúa en nuestro diario vivir.
De forma especial con los más
necesitados, los pobres: los
predilectos de Jesús.

¿Cuándo y cómo puedes hacerlo? Cuando te encuentras a alguien


necesitado y le ofreces tu ayuda, cuando buscas la unión de todas las
personas sin distinción; cuando ves con amor y sencillez a aquella persona
que no ha tenido las mismas oportunidades que tú. Cuando solidariamente
eres generoso y das de lo que tienes; cuando es valioso para ti servir a los
demás y encuentras alegría en ello, entonces haces vivir esa unión de
amistad con Jesús.

Para orar… “Señor, al recibirte en la Primera Comunión deseo ser como tú.
Te prometo nunca olvidarme de Ti, teniéndote presente en los que sufren y
necesitan de mí, especialmente en las personas a las que atiendo en mis
experiencias de Servicio Social. Amén. “

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María acompañó a Jesús en su vida

Durante el mes de mayo,


agradecemos a nuestra mamá por
todo lo que hace en casa. En cada una
de las cosas que hace nos demuestra
el amor que nos tiene. También
durante este mes le agradecemos sus
manifestaciones de amor en nuestra
vida.

La Virgen María también le demostró


a su hijo Jesús el amor que sentía por
él, a través de su presencia cercana en
los distintos momentos de su vida.
Cuando se perdió en el templo,
cuando salió a predicar, cuando fue
condenado a muerte, a los pies de la cruz y
en su resurrección.

La Virgen María acompañó a Jesús en su


vida y nos acompaña a nosotros en cada
una de las cosas que realizamos. Ella
intercede por nosotros ante su hijo Jesús.
María nos conoce y sabe lo que hay en
nuestro corazón, por eso con amor
maternal lo pone de forma especial en la
presencia de Jesús.

Reflexiona… María aceptó ser la Madre de Jesús. Lo amó mucho, lo educó


con cariño y lo acompañó en su vida. Por eso le pido que me acompañe y
me guíe para recibir en la Primera Comunión, a su hijo. ¿Qué cualidades de
María identifico en mi mamá?

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La acción del Espíritu
en la iglesia

Busca las diferencias 6 diferencias

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Los sacramentos nos acercan a Dios
“El sacramento de la reconciliación”

Muchos de nosotros hemos discutido o peleado


alguna vez con una persona que amamos mucho.
Cuando tomamos la decisión de perdonar o pedir
perdón nos alegra saber que la amistad no se ha
perdido.

Para poder recibir a Jesús en la Eucaristía,


necesitamos un corazón libre y sincero, es por eso
que la Iglesia nos regala el sacramento de la
Reconciliación. Un sacramento es un símbolo que
representa la vida y el amor que Dios nos quiere dar.

Por medio del Sacramento de la Reconciliación, el sacerdote representa a


Jesús, quien amorosamente escucha nuestras travesuras y debilidades, nos
perdona y nos invita a que no lo volvamos a hacer.

Para celebrar el Sacramento de Reconciliación es necesario:


a. Reconocer que se ha cometido una falta, es decir que no se ha amado
lo suficiente.
b. Arrepentirse de haber pecado y pedir perdón.
c. Decidir hacer bien las cosas de ahora en adelante.

Cuando el sacerdote, en nombre de Dios dice: “Yo te absuelvo de tus


pecados en el nombre del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo”, vuelve la
alegría y la paz verdadera a tu corazón dándote la fuerza para seguir
amando. La Reconciliación con tu amigo Jesús es motivo de alegría.

Recuerda… La Iglesia aconseja hacer el examen de conciencia, antes de la


confesión, revisando si has cometido una falta contra el amor. ¡¡Estás casi
listo para recibir la Primera Comunión!!

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Examen de Conciencia

Para que el examen de conciencia sea profundo y completo, te sugerimos el siguiente


cuestionario:

I. Analizar mi actitud y mis acciones u omisiones hacia Dios:


¿Creo verdaderamente en Dios o confío solo en mis propias capacidades?
¿Amo a Dios sobre todas las cosas o amo más a las cosas materiales?
¿Voy a Misa los domingos y para compartir en comunidad?
¿Me confieso y comulgo con frecuencia?
¿Hago oración, entendida como un diálogo amoroso con Dios?
¿He usado el nombre de Dios sin respeto? ¿Pido ayuda a la Virgen y al
Espíritu Santo?

II. Analizar mi actitud y mis acciones u omisiones hacia los demás:


¿Trato bien a mi familia?
¿Busco hacerlos felices o busco que se haga lo que yo digo?
¿Los respeto o los maltrato?
¿Trato bien a los demás?
¿Soy justo con todos?
¿Ayudo a los necesitados?
¿Hablo con verdad o me escondo tras la mentira?
¿He hecho daño a alguien?
¿He tomado pertenencias de otros si su permiso?
¿Acostumbro hablar mal o pensar mal de los demás?

III. Analizar mi actitud y mis acciones u omisiones hacia mí mismo:


¿Lucho por ser mejor cada día?
¿He controlado mi carácter?
¿Muestro autocontrol, incluso cuando no hay un maestro que me observe?
¿Respeto mi cuerpo? ¿En mis tratos soy cariñoso?, ¿Hago deporte, duermo
lo necesario, me alimento adecuadamente?

En la Eucaristía nos unimos a Jesús

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La misa es el conjunto de oraciones y ceremonias que conforman el ritual de
la Eucaristía. En la Eucaristía nos unimos a Jesús de manera especial.

El momento más importante de la misa es la Consagración. En la


consagración el sacerdote ofrece el pan y el vino para que sean
transformados por amor, en el cuerpo y la sangre de Jesús y así podamos
alimentarnos de Él. Al comulgar nos unimos a Jesús, por eso decimos que
la misa, es una fiesta.

Al comulgar no solamente nos unimos con Jesús, también lo hacemos con


la comunidad, es decir, con toda la Iglesia, pero especialmente con los más
cercanos a nosotros: nuestra familia, nuestros amigos, nuestros
compañeros. También nos comprometemos y unimos con los más
esperanzados, los marginados y necesitados; con los favoritos de Jesús.

Recordemos que esa unión con Jesús nos da la fuerza y la energía para amar
a los demás como Él lo hizo.

Para orar… Señor, Tú siempre me escuchas. Vaya por donde vaya,


sé que puedo hablar contigo. Cuando me encuentro en clase, en el
recreo, en mi casa, contaré con tu presencia. ¡Gracias! ¡Haz que te
sienta siempre a mi lado y pueda verte en todas las cosas!

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Momentos de la Eucaristía

Observa los momentos de la misa en los cuales tú participas activamente


como miembro de la Iglesia.

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Sabías que… Hasta antes de una reunión de obispos, llamada Concilio
Vaticano II, las eucaristías en todo el mundo se decían en “latín”, un idioma
que solo lo entendían los sacerdotes y ellos siempre estaban de espaldas al
pueblo. Después de esta reunión, se determinó que se dijera la misa en el
idioma del lugar y viendo al pueblo. ¡Interesante, eh! ¿Te imaginas cómo
sería recibir la Primera Comunión sin entender lo que estás haciendo?

Jesús está presente en cada celebración Eucarística. Los primeros cristianos


celebraban la cena del Señor en sus casas, por eso muchos de los
ornamentos que se usan en la misa se parecen a los que usamos para comer
en nuestras mesas. Observa los objetos sagrados que se utilizan en la
Eucaristía.

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Oraciones que se rezan en la Eucaristía

Presta mucha atención a las oraciones que debes conocer, aprender y


comprender para participar de forma activa en la Eucaristía.

1- RITOS INICIALES

Sacerdote: En el nombre del Padre, y del Hijo, y del Espíritu Santo.


Pueblo: Amén.

Sacerdote: El Señor este con ustedes.


Pueblo: Y con tu espíritu

2- ACTO
PENITENCIAL
Sacerdote:
Hermanos; para
celebrar
dignamente estos
sagrados misterios,
reconozcamos
nuestros pecados.

Pueblo: Yo confieso
ante Dios todopoderoso y
ante ustedes, hermanos, que he pecado mucho de
pensamiento, palabra, obra y omisión. Por mi culpa,
por mi culpa, por mi gran culpa. Por eso ruego a
santa María siempre Virgen, a los ángeles, a los
santos y a ustedes hermanos que intercedan por mí
ante Dios nuestro Señor.

3- INVOCACIONES.

Sacerdote: Señor, ten piedad.


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Pueblo: Señor, ten piedad.
Sacerdote: Cristo, ten piedad.
Pueblo: Cristo, ten piedad.
Sacerdote: Señor, ten piedad.
Pueblo: Señor, ten piedad.

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4- HIMNO DE ALABANZA.
Todos: Gloria a Dios en el cielo, y en la tierra paz a los hombres que ama el
Señor. Por tu inmensa gloria te alabamos, te bendecimos, te adoramos, te
glorificamos, te damos gracias. Señor Dios, Rey Celestial, Dios Padre
todopoderoso, Señor, hijo único, Jesucristo, Señor Dios, Cordero de Dios,
Hijo del Padre; Tú que quitas el pecado del mundo, ten piedad de nosotros;
Tú que quitas el pecado del mundo, atiende nuestra súplica; Tú que estas
sentado a la derecha del Padre, ten piedad de nosotros; porque solo Tú eres
santo, solo Tú Señor, solo Tú Altísimo Jesucristo, con el Espíritu Santo en la
gloria de Dios Padre. Amén.

5- ORACIÓN COLECTA.

Sacerdote: Oremos (todos oran en silencio)… Por los siglos de los siglos.
Pueblo: Amén.

6- LITURGIA DE LA PALABRA

Al terminar la Primera y Segunda lectura:


Lector: Palabra de Dios.
Pueblo: Te alabamos, Señor.

Antes de leer el Evangelio:


Sacerdote: El Señor esté con
ustedes. Pueblo: Y con tu espíritu.
Sacerdote: Lectura del Santo Evangelio
según San...
Pueblo: Gloria a Ti, Señor. (Mientras hacen
la Señal de la Cruz)

Al terminar la lectura del Evangelio:


Sacerdote: Palabra del Señor.
Pueblo: Gloria a Ti, Señor, Jesús.

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7- CREDO APOSTÓLICO - PROFESIÓN DE FE

Todos: Creo en Dios, Padre Todopoderoso. Creador del cielo y de la tierra.


Creo en Jesucristo su único hijo, nuestro Señor. Que fue concebido por obra
y gracia del espíritu Santo. Nació de Santa María Virgen. Padeció bajo el
poder de Poncio Pilato. Fue crucificado, muerto y sepultado. Descendió a
los infiernos. Al tercer día resucitó de entre los muertos. Subió a los cielos y
está sentado a la derecha de Dios Padre Todopoderoso. Desde allí ha de
venir a juzgar a los vivos y a los muertos. Creo en el Espíritu Santo. La santa
iglesia católica. La comunión de los santos. El perdón de los pecados. La
resurrección de la carne. La vida eterna. Amén.

8- LITURGIA DE LA EUCARISTÍA.

Sacerdote: ... Él será para nosotros pan de vida.


Pueblo: Bendito seas por siempre, Señor.
Sacerdote:… Él será para nosotros bebida de salvación.
Pueblo: Bendito seas por siempre, Señor.

Sacerdote: Oren hermanos y hermanas, para que este sacrificio mío y de


ustedes sea agradable a Dios Padre todopoderoso.
Pueblo: El Señor reciba de tus manos este
sacrificio, para alabanza y gloria de su nombre,
para nuestro bien y el de toda su santa iglesia.

El sacerdote dice la oración sobre las ofrendas

9- PLEGARIA EUCARÍSTICA.

Sacerdote: El Señor esté con ustedes.


Pueblo: Y con tu espíritu.
Sacerdote: Levantemos el corazón.
Pueblo: Lo tenemos levantado hacia el Señor.
Sacerdote: Demos gracias al señor, nuestro Dios.
Pueblo: Es justo y necesario.
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10- EL SANTO.

Todos: Santo, Santo, Santo es el Señor, Dios del Universo. Llenos están el
cielo y la tierra de tu gloria. Hosanna en el cielo. Bendito el que viene en
nombre del Señor. Hosanna en el cielo.

11- ACLAMACIONES DESPUÉS DE LA CONSAGRACIÓN

Una vez que el sacerdote repite las palabras que Jesús dijo en la última cena
y consagra la hostia y el vino, hace una reverencia y en cada ocasión se dice:
Pueblo: Señor y Dios mío.

Sacerdote: Este es el Sacramento de nuestra fe.


Pueblo: Anunciamos tu muerte, proclamamos tu resurrección. Ven, Señor
Jesús.

12- RITO DE LA COMUNIÓN.

Sacerdote: Fieles a la recomendación del Salvador y siguiendo su divina


enseñanza, nos atrevemos a decir:
Todos: Padrenuestro que estás en el cielo, santificado sea tu nombre;
venga a nosotros tu reino: hágase tu voluntad en la tierra como en el cielo.
Danos hoy nuestro pan de cada día; perdona nuestras ofensas como
también nosotros perdonamos a los que nos ofenden; no nos dejes caer en
la tentación y líbranos del mal.

Sacerdote: … mientras esperamos la gloriosa


venida de nuestro Salvador Jesucristo.
Pueblo: Tuyo es el reino, tuyo el poder y la gloria,
por siempre Señor.
Sacerdote: La paz del Señor esté siempre
con ustedes.
Pueblo: Y con tu espíritu.

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Sacerdote: Démonos fraternalmente el saludo de la paz.

Pueblo: (le desean la paz a sus compañeros de asiento mediante un abrazo


y algunas palabras.) Lo más común es decir “La paz del Señor”.

13- EL CORDERO DE DIOS


Todos: Cordero de Dios que quitas el pecado del
mundo, ten piedad de nosotros. Cordero
de Dios que quitas el pecado del mundo, ten
piedad de nosotros.
Cordero de Dios que quitas el pecado del mundo
danos la paz.

14- RITO DE LA COMUNIÓN.

Sacerdote: Este es el Cordero de Dios que quita el pecado del mundo.


Dichosos los invitados a la Cena del Señor.
Pueblo: Señor, no soy digno de que entres en mi casa, pero una palabra
tuya bastará para sanarme.

Cuando el sacerdote da la hostia


consagrada, se coloca la mano izquierda
abierta sobre la derecha formando una
cruz. Después de decir “Amén”. Se lleva la
hostia a la boca tomándola con la mano
derecha.
Sacerdote: El cuerpo de Cristo.
Comulgante: Amén.

15- ORACIÓN DESPUÉS DE LA COMUNIÓN

16- RITO DE LA DESPEDIDA.

Sacerdote: El Señor esté con ustedes.


Pueblo: Y con tu espíritu.
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Sacerdote: La bendición de Dios todopoderoso Padre, Hijo y Espíritu
Santo, descienda sobre ustedes y permanezca para siempre.
Pueblo: Amén.
Sacerdote: Pueden ir en paz.
Pueblo: Demos gracias a Dios.

Importante no olvidar:

33
Formación espiritual
Ignaciana

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SAN IGNACIO DE LOYOLA
“Un soldado valiente de Jesús”
Ignacio (Iñigo) nació en 1491 en el castillo de Loyola, en España. Su
padre Bertrán de Loyola y su madre Marina Sáenz, de familias muy
distinguidas, tuvieron once hijos: ocho varones y tres mujeres. El más
joven de todos fue Ignacio.

Estudió para ser militar, pero en 1521, a la edad de 30 años, siendo ya


capitán, fue gravemente herido en una pierna mientras defendía el
Castillo de Pamplona.

Mientras estaba en recuperación pidió que le llevaran novelas de


caballería, llenas de narraciones inventadas e imaginarias. Pero su
hermana le dijo que no tenía más libros que  La vida de Cristo y el Año
Cristiano, o sea la historia del santo de cada día. Y le sucedió algo muy
especial. Antes, mientras leía novelas y narraciones inventadas, en el
momento sentía satisfacción, pero después quedaba con un
sentimiento horrible de tristeza y de frustración. En cambio ahora, al
leer la vida de Cristo y la vida de los santos, sentía una alegría inmensa
que le duraba días y días. Eso no animó a seguir los pasos de Jesús.

Cambió sus lujosos vestidos de soldado por los de un pordiosero, se


consagró a la Virgen Santísima e hizo confesión general de toda su
vida. Y se fue a un pueblecito llamado Manresa, a 15 kilómetros de
Monserrat a orar y hacer penitencia. Cerca de Manresa, había una
cueva y, en ella, Ignacio se encerraba a dedicarse a la oración y a la
meditación. Allá se le ocurrió la idea de los «ejercicios espirituales».

A los 33 años, se fue a estudiar a un colegio en Barcelona, España. Sus


compañeros de estudio eran mucho más jóvenes que él y se burlaban
mucho por su defecto en la pierna.

Después se fue a París a estudiar en la famosa Universidad de La


Sorbona. Allá formó un grupo con seis compañeros: la Compañía de
Jesús. Ellos fueron muy buenos estudiantes y dieron un buen ejemplo
de bondad a todos.

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Los Jesuitas fueron grandes misioneros del continente americano, y
de otras tierras lejanas en África y de Asia. Los jesuitas fundados por
san Ignacio siempre fueron hombres sabios y valientes, dispuestos a
jugarse la vida por Jesús y por la verdad del Evangelio.  

Como todos los años se enfermaba y después se reponía, nadie se


imaginó que se iba a morir, y murió súbitamente el 31 de julio de
1556 a la edad de 65 años, por una enfermedad que le aquejaba de
años ligada a la vesícula. Esta es la fecha en que se celebra su fi esta.

Frases famosas de Ignacio:

1. El amor se ha de poner más en las obras que en las palabras.

2. El examen de conciencia es siempre el mejor medio para cuidar bien el


alma.

3. En todo amar y servir.

4. Alcanza la excelencia y compártela.

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APRENDO DE JAVIER A AMAR

Francisco Javier nació en el Castillo de Javier (Navarra, España) en 1506. Desde


pequeño, su madre le enseñó a rezar, acudiendo a diario a la capilla del
Castillo.
Francisco Javier fue a estudiar a una universidad en París, pues bien, en la
universidad era un excelente estudiante y sacaba muy buenas notas, porque
esperaba conseguir un buen empleo, honores y fama.
En 1534, fue uno de los siete con que San Ignacio funda la Compañía de Jesús,
y haciendo voto de absoluta pobreza, marchan a Tierra Santa para comenzar
desde allí su obra misionera.
Ignacio lo fue acercando poco a poco a Jesucristo, ayudándolo a darse cuenta
del poco valor de los bienes de la tierra y de lo mucho que valía ayudar a los
pobres. A los 31 años, es ordenado sacerdote en Venecia junto a sus
compañeros de la naciente Compañía de Jesús.
También fue un hombre que amó a todas las personas a través de sus
acciones, curaba enfermos, atendía a los niños, difundía la palabra de Dios por
todos los lugares a donde se dirigía.
En 1541, con 35 años, parte desde Lisboa hacia Goa (India), donde comenzará
la parte más importante de su vida: la de misionero. Sus primeros años los
pasó atendiendo un dispensario.
En su último viaje, salió de la India con intención de llegar a China, pero antes
de llegar, cayó enfermo. A pesar de encontrarse con mucha fiebre, no se
quejaba, ni pedía nada, solamente rezaba.
Murió el 3 de diciembre de 1552, a los 46 años. Había recorrido más de 120.000
kilómetros, como tres veces la vuelta a la tierra, conquistando corazones para
Dios.

Francisco Javier nos enseña a amar a todas las personas a través de nuestras
buenas acciones, sirviendo a todos al modo de Jesús.

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¿Qué deseo imitar de Javier?

Pedro Fabro

Pedro Fabro nació en el pueblo francés de Villaret, en la Saboya, el 13 de


Abril de 1506 de familia campesina. De joven fue ovejero, aprovechando los
domingos para impartir la catequesis a personas menores que él.

Quería estudiar, pero eso era un lujo inalcanzable para familias sencillas;
lloraba de ganas de aprender; pero, nada. Hasta que tomó cartas en el 39
asunto su tío Mamerto, Prior de la Cartuja. Habló con su padre y le dijo: Mira,
tu hijo Pedro piensa que Dios le pide que estudie, y yo creo que lo que piensa
Fabro era reconocido como "nuestro hermano mayor"; es decir, el "líder" de
aquella primera comunidad cuando no estaba Ignacio. Uno de los primeros
compañeros de San Ignacio de Loyola, y primer sacerdote de la Compañía de
Jesús. Según sus contemporáneos, destacó principalmente por tres cosas: su
capacidad para la conversación, su manera de proponer el encuentro con Dios a
través de los Ejercicios Espirituales, y lo que podríamos llamar su "oración
constante”. 40

Su compañero Simón Rodríguez dijo de él años después de su muerte, en 1577:


SAN ALBERTO HURTADO
¡Contento, Señor, contento!
San Alberto Hurtado Cruchaga nació en Chile, en la ciudad de Viña del Mar el
22 de Enero de 1901. Su familia era muy cristiana y unida. A los cuatro años de
edad se le muere su padre Alberto y Anita su madre queda con Alberto
Hurtado y su hermano Miguel.

En 1909 entró al Colegio San Ignacio, donde se distinguió por ser buen 41
compañero, alegre, comunicativo y muy piadoso. Con gran generosidad
ocupaba su tiempo libre en visitar y ayudar a los más necesitados.
Más tarde, San Alberto Hurtado fundaría talleres para darles educación a los
jóvenes y capacitarlos para que pudiesen tener un trabajo digno.

Su muerte
Un día, el Padre Hurtado cayó enfermo de cáncer, hospitalizado y con
muchos dolores; nunca se quejó. Aceptaba la voluntad de Dios y repetía:
"Contento, Señor, Contento".

El 18 de Agosto de 1952 el Señor se lo llevó junto a Él. Sus restos mortales se


encuentran en el Santuario a su memoria ubicado en Av. General Velázquez
1090, Santiago de Chile.
Para celebrar este acontecimiento el parlamento chileno decretó asignar el
día 18 de Agosto de cada año como el día de la Solidaridad, en su honor.
Iniciado en Roma el proceso de beatificación, ésta se hizo realidad el día 16 de
Octubre de 1994, en la ciudad del Vaticano en que el Papa Juan Pablo II lo
beatificó. Fue canonizado el 23 de Octubre del 2005 por su Santidad
Benedicto XVI.
Dentro de sus frases más famosas está:
"Contento, Señor, Contento". P. Hurtado
“Lo que necesita el mundo hoy, es una generación que ame,
que ame de verdad” P. Hurtado.
"No descansen mientras haya un dolor que mitigar" P. Hurtado

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Pausa Ignaciana
1. Tomo conciencia de la compañía de Dios, doy gracias por ello y hago
un recorrido por el día.
2. Reviso por dónde se ha manifestado Dios: en qué personas, en qué
actitudes, en qué palabras…
3. Reviso por dónde me ha tratado de engañar el mal espíritu: en qué en
qué pensamientos, en qué actitudes, en qué palabras…
4. Busco un mensaje que me deja este día: agradecimiento, paz,
esperanza, lucha…
5. Termino pidiendo fuerza para mejorar el día de mañana.

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Hoja para recortar

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46
Prepararme para hacer oración

Recordar lo vivido

47
Dar gracias por lo vivido

Pedir perdón

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Mi compromiso para mejorar

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Oraciones
PADRE NUESTRO Gloria.
Padre nuestro que estás en el cielo, Gloria a Dios en el cielo, y en la tierra paz a los
santificado sea tu nombre, hombres que ama el Señor. Por tu inmensa
Venga a nosotros tu Reino, hágase tu gloria te alabamos, te bendecimos, te
voluntad así en la tierra como en el cielo, adoramos, te glorificamos, te damos gracias.
danos hoy el pan de cada día, persona Señor Dios, Rey celestial, Dios Padre
nuestras ofensas así como nosotros todopoderoso. Señor Hijo único, Jesucristo,
perdonamos a los que nos ofenden no nos Señor Dios Cordero de Dios, Hijo del Padre; Tú
dejes caer que quitas el pecado del mundo, ten piedad de
nosotros; Tú que quitas el pecado del mundo,
atiende nuestra súplica; Tú que estás sentado
ÁNGELUS a la derecha del Padre, ten piedad de nosotros;
Porque sólo tú eres Santo, sólo tú Señor, sólo
6. El ángel del Señor anunció a tú Altísimo Jesucristo. Con el Espíritu Santo, en
María. la gloria de Dios Padre. Amén.
7. Y concibió por obra del Espíritu
Santo. Profesión de fe: Credo.

1. He aquí a la esclava del Señor. Creo en Dios, Padre todopoderoso, Creador


2. Hágase en mí según tu palabra. del cielo y de la tierra. Creo en Jesucristo, su
único Hijo, nuestro Señor, que fue concebido
1. Y el verbo se hizo carne. por obra y gracia del Espíritu Santo, nació de
2. Y habitó entre nosotros. Santa María Virgen, padeció bajo el poder de
Poncio Pilato, fue crucificado, muerto y
Ruega por nosotros Santa madre de sepultado, descendió a los infiernos, al tercer
Dios. día resucitó de entre los muertos, subió a los
Para que seamos dignos de alcanzar las cielos y está sentado a la derecha de Dios,
promesas de nuestro señor Jesucristo. Padre todopoderoso. Desde allí ha de venir a
AMEN. juzgar a vivos y muertos. Creo en el Espíritu
Santo, la santa Iglesia católica, la comunión de
ORACIÓN DE ENTREGA DE SAN IGNACIO los santos, el perdón de los pecados, la
resurrección de la carne y la vida eterna. Amén
Toma Señor y recibe,
Toda mi libertad, mi memoria,
mi entendimiento y toda mi voluntad,
Todo mi haber y mi poseer.
Tú me diste, a ti Señor lo devuelvo, Todo es
tuyo, dispón a toda tu voluntad.
Dame tu amor y gracia, que esta me basta

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Hoja para recortar

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