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punta de lobos

juancarreño
quieres dormirte en medio de todos tus fetiches
los de la Oceanía y aquellos de Guinea
Cristos son de otra forma Cristos de otra creencia
Son Cristos inferiores de oscuras esperanzas

g.a., zona
ojo de agua

estamos solos en el ojo de agua del desierto


describiendo la subida de pasajeros a buses interprovinciales
cuando es invierno y despedidas innecesarias
como innecesario es quedarse mirando desde una pasarela
el entrar y salir de camiones a la ciudad
el cálculo en segundos de un cuerpo desde esa altura
los momentos de dos cuerpos en hoteles abandonados
por la baja afluencia de turistas
a la depresión intermedia, lo poco llamativo
de la falta de cascadas en la cordillera de la costa
estamos solos en el ojo de agua del desierto
y siempre estamos a diez años
ya sea atrás o adelante, el ojo debajo del ojo
el agua que habita en la mirada, una tormenta de polvo
para perder el tiempo buscando tus monedas
en las franquicias gastronómicas de campamentos
donde siempre fuimos unos cesantes hermosos llenos de amor y barro
costras de guerra y amor en las rodillas
quisimos escapar de la belleza, ni pensar sentarla en nuestras heridas
y dormir sin miedo a la puna o a despertar ateridos de insectos
en los intersticios de enlaces carreteros
te enamoraste de la hija del chofer, de puro imposible
que pueden resultar 70 kilómetros y sus ojos en el espejo
a 10 años de ciudades fronterizas y tupacamaru
a 10 años de sombras de lluvia de estirar la lengua a la noche
y reposarla sobre una tormenta eléctrica
sobre las cenizas de un incendio forestal 
en tomas de terrenos como reescrituras de poemas
como contrabandos plataneros 
estábamos vivos y ese era nuestro premio
algunos pasos hacia atrás para saltar
estamos al borde del ojo de agua en el desierto y estamos solos
podemos dejar la bici y nuestras ropas sobre la tierra
tierra que sostiene nuestra vagancia tan exigua
tan al aire tan a la chuña 
hemos tratado a nuestros mejores amigos de burgueses y los perdemos
hemos besado a todas nuestras amigas y caemos
se abre el ojo como una proyección justificada
de prendas secándose en invierno
por 10 años de asfalto, de puropicado a bivalvo
para fumar porros en los santuarios de san la muerte
antes de los aviones y satélites
antes de llorar escondido en las bodegas industriales
de golpearte los muslos y decir
si estamos en esta que el fuego acabe con nosotros
suspendidos en una carga de yuca
con conductores de camiones menores de una edad
que le temen menos a la muerte
que a un coito bien ejecutado
y fumamos y hay neblina
hay una carretera que se llama panamericana
y una cantidad de cibers cafés
donde teclear sobre los dientes sueltos de un teclado inmundo
la carne de un sacrificio reducida a tierra de carne
estamos a 10 años de lo subterráneo
a 10 dedos de comprender que esta luz de transporte
es un detenerse y respirar, pestañeando como alerones
en una cancha donde nos ejecutamos como plásticos al sol
hemos vuelto
aquí estamos, les diremos
pero que antes nos despierte el frío para dar saltitos en el bosque nevado
que antes seamos pura deshidratación y besos
en carpas como saunas y alcoholes duros
como duros son algunos sueños sin vigías
algo así como escuchar a la muerte por la radio comunitaria
de lo que pudieron ser los andes
antes de los cruces maoístas y las fuerzas del estado
pues aquí estamos y contamos hasta diez
cerezos del pueblo y jugos de granada como sangre o vino
podríamos escuchar los goles desde lejos
el azote de la abeja contra el vidrio
chorreando cítricos, un paso de polvo y el salto
en la caída se devuelve la comida robada en restoranes turísticos
donde dijimos que éramos estudiantes en busca
de ciertos cactus beneficiosos para la salud y el ego
nada más lejos de estos diez dedos
de estas nueve formas de desperdicio
yo sólo quiero que revisemos estos mapas juntos
y perdamos la noche memorizando nombres de pueblos
el tiempo no es el tiempo de una bodega
donde familias jóvenes acumulan su línea blanca
sus fotocopias de carreras cortas, caras y un olor a asado
estamos a 10 años de un río que es frontera
de un río y de un verano donde sólo podíamos amar
a la única niña que leía sobre la arena
biografías de grandes deportistas
y allí la fábrica, los ductos de ácidos mezclados al agua
porque te has enamorado
y para llamar la atención
te lanzas desde el sauce, en forma de bombita
gritando que todos estos duraznos
tienen un solo nombre
los que no están para la conserva
ni para intermediarios que encarecerán tu alegría
tu salto desde el ojo de agua
te largas y estás por dormir sobre el volcán
recordando a tus hermanos y a tus tíos
recolectando uva o cebollas
a 10 años de rodar de risa cerro abajo
a sentir el polvo de nieve en la cintura
a comer manzanas con hielo en la cima
a pelar naranjas en el faro y el viento
porque siempre será el viento y un nombre en la orilla
por ser camino, por ser humano
lo virginal es fetichista alguien grita 
pongámonos flaites y escopetiemos a estos pacos
te ves hermosa encerrada tras la puerta haciendo el amor
con alguien a quien también querré mucho 
son bosques de aromos y es septiembre
son barracas de hombres que aúllan al escuchar los truenos
y arrancas plantas y piensas en un huerto
te ves hermosa viajando en el conteiner de un camión
en la parte trasera de una camioneta porque son tus ojos
sujetada a la cintura de un motorista que sabe de bujías
y de no acampar bajo torres de alta tensión
es de noche y los vidrios se empañan
pero esto es hablar de ciudad y estamos lejos de ella
a 10 años de gente que aún no nace
que todavía no ríe no besa ni se enamora de ti
las masas rugen y no queremos estar solos
aunque quiera llover aunque el salto exista o no aunque
levantes la cabeza como un velociraptor y tu hermana
siga sin escribir poemas o alguna nota
que dé cuenta de este tiempo
porque hemos visto ballenas varadas en esta costa
y a padres sin padres matando por un trozo
estamos a 10 años de la edad de tierra
que es información y 10 años de discos duros, furiosos
como esos powerspoints exhibidos en casorios pobres
con canciones melosas y textos azucarados
para dar a entender que este salto no existe
quiero decir oh
y sorprender en una fiesta con un dibujo
que desoriente a los invitados
y les haga subir el regetón
estoy sentado a la mesa de unos desconocidos
ellos me preguntan por ti
les digo que allí estás
que si acaso no te ven bailar
ellos me preguntan por ti
les digo que allí estás
que si puedo contar hasta diez
y retroceder
estamos sobre el ojo de agua en el desierto
alguien me dice me gusta tanto
que me busquen piojos sobre la entrepierna de la tía
derretir chocolate falso sobre la estufa a parafina
ellos me preguntan por ti
y acá yo doy un paso
el vuelo al vacío se toma desde el pecho
no hay conciencia de vuelo en la caída
cuenta hasta diez
no hay conciencia desde el pecho
no hay vacío de vuelo a la caída
el ojo de agua en el desierto
la caída al agua desde el pecho
el ojo al vacío a la conciencia
son 10
y estás tú
cámaras de la unidad de control de tránsito

me dices
estaremos adentro, en este terreno
que quisiéramos como casa
parras al suelo, Beatriz
y los faroles donde brillamos
de espaldas en el pasto
luego de jugar voley con los peruanos
(esto tiene algo más que paragua)
y nos callamos
porque tenemos 19 años porque
te abrazo como un perezoso
dejando que el skate ruede hasta el subterráneo
pero es el aire, este potrero
bellos, como un sacrificio
como una tropa de niños que ríen en la montaña
esperando que llueva que nadie los encuentre
tú me dices bolaca
no me muerdas tan a la deriva
porque Juan eso será Punta de Lobos
Juan eso será una playa donde encontremos el manantial
y no una gota de rocío que brilla que habita
unos labios partidos a la sangre y al frío
eso será Punta de Lobos
llegaremos caminando, sedientos, tonificados
equilibrio sobre rieles y los cuadernos
tapizados de hologramas, la lámina que nos falta
aquí los piuquenes de la laguna se van al norte
aquí se detiene un camión y nos separamos
te llevo como costras de sangre en el sexo
como un último cruce que inunda el ombligo
los ascensores se detienen
no hay electricidad en el pueblo
y te busco iluminando
el bosque con el celular
esto es el desierto, mijo
me dice una mujer mayor
con la boca llena de espuma
los vasos de vidrio caen sobre las baldosas
símbolo de que algo se transforma
y los autos pasan por la ventana
los perros ladran
como si se estuvieran evaporando
Beatriz, estoy dando vueltas por la fonda
estoy hecho una perrera y sólo quiero una canción
estarás en Bucalemu recolectando huiro?
tengo unos tobillos de mujer en la mochila
y la arena se reseca y comienza un terremoto
ahora duermo en una plaza de peaje
y hago el amor con un chico
que le vende cocaína a los camioneros
las ventanas de los buses
son películas y ahora con cueva
dibujo una casa con mi dedo sobre el vaho
hay noches donde él no puede irse
puede estar más de una hora sobre mí
flameando sin dureza
y pienso dónde podría estar mejor
y veo la línea blanca de la carretera
las carpas de gitanos en las afueras de este sueño
por qué estas calles son tan brillantes?
cuántas veces nos quedamos al sol
sobre el suelo, con una caña infinita
(Juan esto no es Punta de Lobos)
inabordables, hermosos y tersos
como boca apuntando la lluvia
la entrega de lengua como beso en la micro
estamos bajo el arco de piedra
luego de la tormenta de arena
y nos abrazamos
como recién escapados del Sename
los helicópteros iluminan las rutas desechables
vamos al cementerio, me dices
todas las micros van hacia allá
como a plazas tranquilas
con perros y niños dentro de la pileta
donde el sol nos pone tan de 17
tan de pendejo frente a dios
que quiero gastarme lo que no tengo
en hostales donde admirar acostado
tu dormir tan de cedro
tan de álamo a la orilla del camino
cuando regresamos y es febrero
y el sol está rojo y somos un cerro
meta cactus meta piedras
más que niños en una cancha buscando membrillos
más que bodegas agrícolas y oler la primera infusión
a la espera de humedad, de una lengua en la coyuntura
el sonido se contrae
un pliego de celofán en las manos
esta noche quiere jengibre
esta noche quiere piel
tardígrados en volada de criptobiosis
lo necesario de tu sonrisa en el terreno tomado
una pieza en la casa de los papás
(el pololo de tu mami te trata de maraca)
Juan yo no quiero ser tu suegra
Juan yo no quiero tener hijos contigo
quiero verte la cara brillando como una esclava negra
y que trabajes en algo donde te pueda querer
como querer quiero todo lo que odio
porque es tanto vino
porque es tanta plata que no tienes y que gastas
en fuegos artificiales
frases cortas y hechas luego de cantar
en un karaoke la desidia
y son fronteras y atardeceres
ausencia de tarjetas andinas
ymacheteos a un costado de cabinas migratorias
estos cuerpos se inundan se deshidratan
vente afuera, amor
lo que oyes son queltehues
un viaje por la avenida Santa Rosa
donde en cada cuadra, en los paraderos
luego del turno en la bencinera
somos una pareja de haitianos ateridos de frío
(no quiero editarme pero te amo)
creol el brillo de este rocío
creol el ahorro en menudencias
Beatriz son todas las lenguas como un regadío
desinfectante luego de la feria
te espero en esta berma
(he dormido en la plaza afuera de tu casa)
cuando la cordillera, desde Peñalolén
es una madre, que nos observa
sobajearnos como dínamos
en las áreas verdes de los barrios privados
uncadenazo a las intenciones lumínicas
de una clase sin clase
mañana no tenemos colegio
mañana no tenemos tarea
hay playa
azúcar en nuestras palmas
y este continente
y una imagen
el calor
lo delatable
Barranquilla
Chaitén
Jujuy
Beatriz, una ventana
quiero animar mi última hora con fuegos artificiales

a Claudia Cardinale

Fitz, mira cómo miran los piratas senegaleses


nos están hundiendo estos malditos
que bajemos sus videos de youtube
que cortemos la propaganda del engrudo
pero el manantial, Fitz, dónde beber, avísame
bájame de la canoa que lo mío es el tráfico de hielo
despierto rodeado de niños y cerdos
por factura, leo a Miller en el palafito y me pongo
pero tan sed, tan Atacama para mis cosas simples
este sueño es sobre el Ucayali, Fitz?
es sobre el retumbe de los bajos de un regetón
como de un barco fenicio repleto de esclavos?
sólo sé, compañero, que atravesamos aldeas
selvas bajas, relaves de minería ilegal
un potrero, un arrebol
y por no perdernos el rayo verde
salimos de espaldas caminando
pero nos importa un coco
que los sheriff laman las huellas
si a la polaca, luego de emanar círculos de humo
le puedo poner mi oreja en su obligo
para escuchar su última cena
estos tipos nunca tuvieron 17 años
estos guachos culeros son el refugio del dolor
andan blindados a sobrevivencia
tapados en cliché, Fitz, malagradecidos
pistoleros al peo y mayonesa en estos pasajes
dejen tranquilo este cariño a la espera del ferrocarril
dejen tranquilo este invierno y este caucho
lágrimas de árbol o miel de sol
atardeceres metálicos y la idea del suicidio
como cría de tigre soñolienta sobre la hamaca
déjame meterte mano a los cachetes, polaca
las poetas bolivianas nos sorprenden en posición de loto
y dicen desperté en Valparaíso meta cumbia, Fitz
imagínate, cuánta noche, cuánta vida
andamos a puro maracuyá, dirán, pasando frío en Chile
en este frigorífico besando estrías
dejaré todas las puertas abiertas de la choza
que me roben el balón de gas y del tarrito dorado
hasta el último concho de mentolatum
me da lo mismo, me importa una raja
que la jurisprudencia habite las horas de la casa
ni en bajada le prestamos ropa a los industriales del caucho
cabezas reducidas en el Pachitea para los turistas
Fitz, oh, Fitz, si ella entrara a dibujar
todos estos tipos de calma
nos haríamos la ópera en la población
para despachar en camiones
haciendo la Copiapó, la Chañaral
mejor cerremos la iglesia hasta que todos estos indios
bailen su Marcoantonio, su Juanga, su Camilito
ohCarusso, oh Verdi
a pura totora y guanacos y dame un poco más de tu boca
polaca, ábreme todo el grifo
deja que el agua corra hasta el atlántico
que los niños surfeen la ola que hacen las camionetas
por las veredas, que los que llegaron del campo
con los baldes de pintura rieguen los ciruelos
oh, Fitz, somos sed y fósforos mojados
y tú quieres cruzar este poema
de un río a otro, por selva y montaña
qué importan los muertos en la faena
mejor pedir perdón que permiso
los piratas senegaleses se pusieron tan magenta
tan nado sincronizado, que los sheriff
nos pierden la pista en los juegos olímpicos
y nosotros estamos aquí no más
jugando a las quemadas, aprendiendo quechua
con los parlantes en la calle
amor, amor, dónde oí esa palabra antes?
tenemos más versiones del blanco que Nanuk, Fitz
este árbol se llama melia, mi queltehue
armamento de los chupapotos
locaicai de mi lana, lo cachipún del ensamblaje
todo lo David Bowie
todas las Valquirias de Wagner que queramos
no hay poema latino, Fitz
no hay poema latino
escríbeme, antes que nos despedacen
que el olvido en este juego no vale
que la polaca aún está en cuarto básico
esperándome en la lluvia para salir en cleta
a buscar latas de aluminio para la alianza
pero ahora tengo 16 pero ahora tengo casi 50 años
y continuamos en el río
agregando jugo en polvo a la marraqueta
en la orilla de nuestra pesca inútil, Fitz
mira cómo se ríen de nosotros los industriales
nos prestan ropa por puro pasatiempo
le lanzan billetes a los lenguados de la pileta
pero nosotros bailamos como azote las baladas
y nuestros miembros de acero nos cobijan de la adicción
aliento de coito, musgo sobre los techos
plantas aéreas sobre los cables
Fitz, cacha, al fondo hay un destello
job

Haré mi cama en las tinieblas. 


17:14 A la corrupción he dicho: Mi padre eres tú; 
A los gusanos: Mi madre y mi hermana. 
17:15 ¿Dónde, pues, estará ahora mi esperanza? 
Y mi esperanza, ¿quién la verá? 
17:16 A la profundidad del Seol descenderán, 
Y juntamente descansarán en el polvo.
comida rápida la orquesta

este vaso de vidrio, vacío de cerveza


al suelo, es una señal:
somos los únicos clientes de los chinos
cuando en los monitores los clavadistas
kazajos y checos ni se arrugan
para el ojo contra el agua, y aplaudimos
llueve en Santiago y despertamos en el piso 18
miras desnuda el edificio del frente
los administradores se instalan
ordenan los clips, ejercitan su caligrafía
deslizan las yemas por los objetos
comprobando la ausencia de polvo
abolladuras, rayados
regresamos de cintura a la cama
hay sangre como yodo de evidencia
bebemos algo desvanecido y tibio
yo no quiero llegar al frente y que me perquineen
me dices
juan, cuánto nos falta para que salga Boric?
la imagen del tiempo:
cuánto pagan la hora en un Burger King?
cuánto pagan la hora de bodeguero en Ripley?
cómo se hace el sueldo un cartero negro en esta provincia?
me paso por la zorra las llamadas perdidas de mi madre, dices
abrimos las puertas buscando a los amigos
sólo apuntes de imágenes, garrapateos entre las latas
y prendes el último pallmall rojo
dices he perdido tanta sangre estos días
qué haremos de aquí a diez años mi güacho
tirar en el living tirar en la cocina en el ascensor
como si nos fuéramos a morir por mandato divino
la derrota es la prudencia, la resignación
ser madre a los 15 y abuela a los 30
mírame Juan, tengo 19 y estoy intacta frente al mar
cuántos saltos nos pegamos en la playa de noche
puroflaiteando las hilachas en las fogatas
cuántas veces nos quedamos en el acantilado
mirando el mar, como si fuéramos un
plateado sobre plateado cuando soy yo la que te abrazo
aquí podemos llorar sin escándalo un rato
pasarnos los dedos por las lágrimas
que saben a bloqueador solar
nos alcanza para buses piratas los domingos
un chimbombo, una tommy cola
con los rostros dibujados en ceniza
atardecer antes que nos despedacen
atardecer en buses y monocultivos forestales
atardecer en terminales, en paraderos
en los potreros más fértiles de la población
las señales: desde un carro de completos
observar las gotas de lluvia en el tendido eléctrico
la multicancha vacía, brillante, respirar
vagar por Juliaca buscando un ciber

como si estuviéramos en Lautaro


niñosHuimpil adentro
reducciones forestales y Puno
Ayaviri, Sicuani, Loncoche
un bus, una ventana
mirarte dormir o estar solo y llorar
pupila contra pupila
siluetas de cerros que se hunden
como manos en la arena
o en tu pelo, 5 am, fuego
quién vive en esas luces
esas fogatas tan a la cresta
existeTrovolhue, Lilicura, Acomayo
Paruro, a orillas del lago Moquehue
tienes 17 años y antes de hacer el amor
con un campista marroquí
le pides a dios en el bosque
lentamente, como si escribieras
un poema en el teléfono
que no quieres caravanas fúnebres
ni camionetas cargadas de flores
tocando las bocinas en la feria
dame Abancay, dame Andahuaylas
dame todas las habitaciones
donde voltearme el útero
y mirar desde el hospedaje
en el segundo piso del terminal
barnizada por la lluvia
la estatua dorada de Vallejo
abajo las mujeres gritan
el nombre de los destinos
se pelean a los pasajeros
rebajan los pasajes
a Chincheros, Vilscahuaman
y tengo éxtasis
o vanas anfetaminas
quién sabe, llueve
torsos desnudos frente a las olas
mordernos las nalgas
a oscuras, escuchar la población
azotar los bototos
y que el barro seco caiga
en los rincones de ropa húmeda
intento hidratarte
gatorade, agua hervida
en los labios con mis dedos
mientras miro una maratón
sobre el río Amur
el Amazonas de Asia
los chinos, amor
disparan a las nubes yoduro de plata
sobre los campos de arroz
para reinventar el granizo
los mongoles, por su parte
lanzan bombas de ruido al cielo
para espantar a los cisnes de alojar
un lago envenenado
nosotros, dejaremos en este pueblo
el colchón manchado de sangre
y una caja de guantes quirúrgicos
bajo la cama
el viento que agita banderines plásticos en Tumbes

la casa está vacía


como vacías estuvieron las casas de los tíos
empepados hasta el reviente de vena
porque era verano
año nuevo, pascua
alguna atrocidad así
los mayores con los primos dependientes
se han ido, por el día
hacia algún lugar con agua
suficiente, que les cubra el ombligo
allí hay huevos duros
hay sandía, avispas
anzuelos en los lechos
las tías y tíos cambian de pareja
los vemos fornicar en los eucaliptus
nuestros padres son coquetos
se besan con ternura con las sobrinas
la casa está vacía
y en botellas de coca de dos litros
hay conchos tibios de cuba libre
cubetas, conchas con cenizas, lo clásico
en esta casa hay alguien sola
que se aprende a masturbar
cuando en la playa desdoblamos
la bajada de piedra al quitasol
para sentarnos juntos
a ver
a las amigas surfear
yo nunca le presté
el chico a nadie, grita la abuela
que bebe chorreando
malta con cacao
ríe, y no es tan atroz verla muerta
la casa está vacía
llena de sacos de dormir
de arena en la ducha
los tíos te dejan cuando duermes
en el camarote los calzones
de las pololas en la cara
por la mañana
al abrir la carpa
en la playa
o trotan los policías constantes
o bailan los que pasaron de largo
o espuma aves migratorias
en la casa vacía alguien pica arroz
papas fritas, tabacazo de colilla
las medusas son lágrimas de ballena
las pulgas de mar el poronguito
la casa está vacía
adentro la sombra
es alguien con un sable
estás en la habana y no escribes

la mejor amiga dejó a su pareja y viene a esta casa a fornicar


losferianos desconfían de mi dinero, huyen
componemos canciones cuando está nublado
hay noches que me quedo bajo la ducha
hasta que se me acaba el gas hasta que pase piola

floreció la primera maravilla de nuestro primer huerto

paso por entre vendedores de charqui y zapatos


entre niñas tristes que habitan solas un furgón escolar
y soplo el cuerno para vender mi cloro
y ando en bicicleta cuando no llueve
lo mejor es pedalear ebrio por santiago
todo lo que es estar hecho pico las noches vacías
cuando las calles brillan y son una canción

floreció la primera maravilla de nuestro primer huerto

no ocupo nuestra cama una colchoneta en el segundo piso


donde el ventanal es el amanecer y los andes
la sonrisa terca de un demente que deja
la bici afuera y entra a la casa del traficante

hay menta albahaca tomates rabanitos cilantro


todo siempre es por primera vez
todo siempre al otro día suena absurdo
en el bandejón, desde los baños químicos
intentar por rooming estas buenas noches
noches blancas menguantes
noches de nidos en los cables
de gatos de cachas en el techo

a la primera maravilla las niñas la celebran


le hacen con tambores este tema
ellas me preguntan por ti
les digo que allí estás
que si acaso no te ven pintando la máscara
les digo que allí estás
que si acaso no ten ven picando la tierra
que si acaso no te ven
acostada aquí
con un poco de acelga
de nuestro huerto
entre los dientes

floreció la primera maravilla y estás en la habana

daniel está en león


malebrán en cocha
lapriscila en valpo
elnico en sao paulo
podestá en Iquique
urtaza en puerto

quisiera que esta primera flor te la entregara el negro verástegui


y la guardes, a pesar de los aceites, en la hojas de este libro
Colofón:

Punta de Lobos es una playa chilena ubicada a 6 km al sur de Pichilemu y 177 km al suroeste de Rancagua, en la
provincia de Cardenal Caro, región de O´Higgins. Además de su fina arena gris, su principal característica es que está
rodeada por grandes acantilados que llegan hasta los 50 metros de altura. Según la época del año, las olas oscilan entre
los 8 y 10 metros, en ocasiones con más altura para las expectativas de los competidores en el Big Wave World Tour
2012. En 2013 fue nombrada reserva mundial del surf.

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