En otras palabras, un acuerdo comercial internacional es un tratado entre dos o más
partícipes con el fin de incrementar el intercambio de bienes, servicios o inversiones entre ellos. De ese modo, cada uno busca sacar provecho para el desarrollo de su(s) negocio(s). En la mayoría de los casos, un acuerdo de este tipo es suscrito con la misión de multiplicar los beneficios de las empresas intervinientes. Así, podrán, por ejemplo, exportar sus productos a un menor costo. La creación y proliferación de acuerdos comerciales responde a la gran variedad de ventajas de este tipo de estrategia. Entre ellas destaca, por ejemplo, que las compañías son capaces de expandir su mercado potencial.
acuerdos comerciales internacionales
Un acuerdo comercial es un pacto o negociación entre dos o más países con el objetivo de armonizar intereses en materia de comercio e incrementar los intercambios entre las partes firmantes. El acuerdo comercial puede ser más o menos complejo, dependiendo de si los países firmantes deciden o no delegar parte de su soberanía a un organismo supranacional y someterse a su control en materia de política económica, incluida la política comercial. En caso de que haya algún tipo de cesión de soberanía hablaríamos de integración económica.
La importancia de los acuerdos comerciales se basa en el impulso que
éstos brindan a la industria de un país, pues promueven acceso preferencial a nuevos mercados, al amparo de una normativa clara y a largo plazo, que expande el universo de posibles compradores y aumentan los factores de competitividad de los exportadores. Competir abiertamente en los mercados exige al empresario aumentar su productividad, reducir costos de producción y fabricar productos diferenciados e innovadores. tratados de comercio exterior Los tratados internacionales de comercio son acuerdos establecidos entre dos o más países para mejorar el intercambio comercial y sus relaciones económicas. Cuando son tratados de libre comercio (TLC) se establecen unas reglas para realizar un intercambio de productos y de servicios, eliminando los obstáculos (arancelarios, impuestos…) en las importaciones y las exportaciones. En las características de estos tratados comerciales se incluyen: Acceso a mercados más amplios Competitividad y acceso a un mayor número y tipología de productos y servicios Desaparición de las condiciones y barreras comerciales entre dos o más países Intercambio de tecnología de un estado a otro Este tipo de mercados abiertos tienen tanto detractores como defensores, que los consideran beneficiosos para el crecimiento económico, prosperidad y creación de empleo.