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UNIVERSIDAD PERUANA LOS ANDES

Facultad de derecho y ciencias políticas – catedra de derecho civil: familia.

LA INSTITUCIÓN DE ALIMENTOS:

A. ¿QUE SON LOS ALIMENTOS?

Esta institución no se limita exclusivamente a lo referente con la alimentación.


Es un concepto amplio que abarca todos los elementos esenciales para la
subsistencia diaria. Además de las comidas y los alimentos en general, también
se contempla los gastos relacionados con la vivienda, vestido, salud, educación y
esparcimiento.

Según lo regulado en el artículo 472 del código civil: “Se entiende por alimentos
lo que es indispensable para el sustento, habitación, vestido, educación,
instrucción y capacitación para el trabajo, asistencia médica y psicológica y
recreación, según la situación y posibilidades de la familia. También los gastos
del embarazo de la madre desde la concepción hasta la etapa de postparto”.

1. ¿CÓMO SE CALCULA LA PENSIÓN ALIMENTICIA SEGÚN LA


NORMATIVA CIVIL?

No existe una fórmula estándar o universal para calcular la pensión alimentaria.


Junto con las legislaciones propias de cada país en la materia, hay que considerar
que cada caso es diferente.

Existen procesos de divorcio amigables, en el que los dos progenitores alcanzan


sin mayores dificultades los acuerdos amistosos. De la misma manera, hay
resoluciones conyugales ásperas y tediosas, en las que cualquier aspecto y
desacuerdo debe pasar por las manos de un tribunal o un órgano competente para
dirimir y dar resolución a los conflictos. Y en el medio de ambos extremos, una
gran variedad de matices y especificidades.

En la ecuación entran variables como los niveles de ingreso, tanto del padre
como de la madre. Lo mismo que el número de hijos y las condiciones de la
vivienda (incluyendo su ubicación geográfica actual) que servirá de hogar para
los hijos.

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Según el art. 481 del código civil “Los alimentos se regulan por el juez en
proporción a las necesidades de quien los pide y a las posibilidades del que debe
darlos, atendiendo además a las circunstancias personales de ambos,
especialmente a las obligaciones que se halle sujeto el deudor”.

El juez considera como un aporte económico el trabajo doméstico no


remunerado realizado por alguno de los obligados para el cuidado y desarrollo
del alimentista, de acuerdo a lo señalado en el párrafo precedente. No es
necesario investigar rigurosamente y específicamente el monto de los ingresos
del que debe o está obligado a prestar los alimentos.

2. AUMENTO O LA REDUCCIÓN DE LA CUANTÍA DE LA PENSIÓN DE


ALIMENTOS EN NUESTRO PAIS:

Según el artículo 482 del Código Civil del peruano, existen la posibilidad de que
la pensión alimenticia se incremente o se reduzca atendiendo diversos factores:
“La pensión alimenticia se incrementa o reduce según el aumento o la
disminución que experimenten las necesidades del alimentista y las posibilidades
del que debe prestarla. Cuando el monto de la pensión se hubiese fijado en un
porcentaje de las remuneraciones del obligado, no es necesario nuevo juicio para
reajustarla. Dicho reajuste se produce automáticamente según las variaciones de
dichas remuneraciones”.

3. LA CUSTODIA: MONOPARENTAL O COMPARTIDA:

Cuando uno de los padres obtiene la custodia exclusiva del menor, la contraparte
es la encargada de realizar la aportación monetaria. Esta es una regla que se
aplica casi sin excepciones, salvo situaciones realmente atípicas y
extraordinarias que justifiquen la omisión de la aportación monetaria.

Con los regímenes de custodia compartida, sin que en dicho acuerdo limiten
medidas judiciales y todo nazca de un arreglo entre los progenitores, serán estos
quienes determinen las condiciones a continuar. Es decir, medios y frecuencias
para los pagos. Sin embargo, la mayoría de las legislaciones le reserva al estado
el derecho a supervisar estos acuerdos. Con el fin de garantizar que los hijos
reciban un apoyo justo que garantice todas sus necesidades básicas.

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Si bien la pensión alimentaria es un derecho de los descendientes o alimentistas,


el progenitor encargado de su custodia es quien recibe el importe monetario.

De la misma forma, siempre que se considere oportuno, la administración de


estos recursos puede someterse a escrutinio por parte de un tribunal o de un
órgano competente en la materia.

4. UNA PRESTACIÓN PARA GASTOS CORRIENTES:

Todo lo que se considere como gastos corrientes debe ser subsanado (pagado)
parcial o totalmente con la pensión alimentaria.

Lo extraordinario, como los son los viajes escolares o tratamientos médicos que
no estén incluidos en pólizas de seguros básicas, tiene que ser abordado o
asumidos por ambas partes.

El progenitor que no tiene la custodia debe abonar el importe correspondiente


durante todo el año. Incluso durante los periodos vacacionales. Sin que se
considere el tiempo en que el hijo pase bajo su responsabilidad y cuidados.

5. OBLIGATORIO Y VINCULANTE:

La pensión alimentaria es el primer deber que adquieren las parejas con hijos al
decidir divorciarse o separase. En casi ningún caso es una obligación que se
pueda eludir u omitirse. Solo si el responsable de los aportes demuestra ante un
tribunal que sus ingresos no satisfacen su propia subsistencia, se llega a
considerar alguna clase de prerrogativa. Y en algunos países, ni siquiera en este
tipo de escenarios o fundamentos se contempla esta posibilidad.

Según el art. 483 del código civil dice: “El obligado a prestar alimentos puede
pedir que se le exonere si disminuyen sus ingresos, de modo que no pueda
atenderla sin poner en peligro su propia subsistencia, o si ha desaparecido en el
alimentista el estado de necesidad”.

6. ¿CUÁNDO SE EXTINGUE LA PENSIÓN ALIMENTICIA EN NUESTRO


PAIS?

Por norma general, la obligación de prestar alimentos se extinguirá cuando


muera una de las partes, es decir, la defunción del obligado o el alimentista.

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Según el art. 486 dice: “La obligación de prestar alimentos se extingue por la
muerte del obligado o del alimentista, sin perjuicio de lo dispuesto en el Artículo
728. En caso de muerte del alimentista, sus herederos están obligados a pagar los
gastos funerarios”.

En el caso de los hijos menores, el artículo 483 en su segundo y tercer apartado


indican que: “Tratándose de hijos menores, a quienes el padre o la madre
estuviese pasando una pensión alimenticia por resolución judicial, esta deja de
regir al llegar aquéllos a la mayoría de edad. Sin embargo, si subsiste el estado
de necesidad por causas de incapacidad física o mental debidamente
comprobadas o el alimentista está siguiendo una profesión u oficio exitosamente,
puede pedir que la obligación continúe vigente”.

B. CONCLUSIÓN:
 La institución de alimentos va más allá de solo pedir la pensión o
prestación para el alimentista.
 Se aboca a garantizar el bienestar de menor o alimentista, que, mediante
la sentencia emitida por el juez, el alimentista pueda satisfacer sus
necesidades como las de educación, vestimenta, habitación, salud, etc.
 También garantiza el acuerdo de las partes para que el alimentista
dependiente de ello, pueda desarrollarse adecuadamente.

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