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Esta es tan precisa y detallada que indica qué se hace, cómo, cuándo, dónde y
por qué se realizan dichas funciones o tareas. La última interrogante es la
fundamental pues responde al objetivo del puesto; si no hubiera una respuesta
clara debería eliminarse dicho puesto. Luego, se procede a detallar y establecer
los requisitos que debe cumplir el aspirante al puesto para cumplir con dichas
tareas.

Este segundo paso constituye la “Especificación del puesto”, conocida

comúnmente como el perfil de este. Incluye los requisitos de instrucción,
experiencia y capacitaciones recibidas y todo lo relacionado a las habilidades,
aptitudes; y, quizá también actitudes y comportamientos: lo que ahora se conoce
como competencias. Ambos procesos constituyen el “Análisis de puestos”.

Como vemos, varias empresas e instituciones tienen el “Análisis de puestos”; por

tanto, muchos de los problemas de personal no son técnicos, si se tiene a las
personas idóneas y adecuadas a los perfiles de los puestos; sin embargo, si no es
así, hubo un problema de toma de decisiones: no querer hacer las cosas bien
desde un inicio para evitar problemas futuros.

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La acción humana es una conducta consciente, movilizada voluntad transformada

en actuación, que pretende alcanzar precisos fines y objetivos; es una reacción
consciente del ego ante los estímulos y las circunstancias del ambiente; es una
reflexiva acomodación a aquella disposición del universo que está influyendo en la
vida del sujeto.

Además, la bondad o la maldad de un determinado acto humano sólo se juzga

bajo sus aspectos suficientemente conocidos. Por ejemplo, una persona que roba
y mata a una persona sin saber que es su hermano, es culpable de lesiones
criminales, pero no es culpable del delito de fratricidio. Sin embargo, a partir de la
discusión anterior, no se debe presuponer que tenemos pleno conocimiento del
acto y sus implicaciones cada vez que realizamos una acción humana. Todavía
hay lugar para los errores. Afirmamos aquí que, con el esfuerzo adecuado, la
persona puede tener un conocimiento suficiente del objeto y de sus otras
consideraciones, esenciales para realizar un acto humano.

Al reconsiderar al ser humano en su continuidad y discontinuidad con la

naturaleza, intentan identificar la cualidad específica de la acción humana con
respecto al comportamiento animal y emplear esta categoría como criterio para la
crítica del mundo social. Por otro lado, el trabajo subrayará cómo Dewey
contribuye significativamente a perfilar un proyecto crítico contemporáneo con
premisas naturalistas.