La trama se centra en cuatro personajes 2 ratones y 2 liliputienses en
búsqueda de queso dentro de un laberinto donde se presentan diferentes dificultades a cada una de las cuales mostraban diferentes reacciones, mientras los liliputienses se lamentaban y despilfarraban el queso, los ratones buscaban otras salidas y depositaban el queso que sabían que un día se terminaría. Al terminarse el queso del depósito los ratones en lugar de lamentarse se aventuraron a buscar más mientras los liliputienses no se animaban a volver a recorrer el laberinto por miedo a la incertidumbre y a salir de su zona de confort. Un día uno de ellos se animó a aventurarse y a pesar de las dificultades no se rindió hasta que encontró un nuevo depósito donde ya se encontraban los ratones y se sintió feliz de haber dado el paso. ¿Qué representa el queso a nivel personal y para una organización?
En cuanto a nivel personal
El queso es una metáfora Puede ser un puesto de trabajo, una relación,
dinero, libertad, salud, reconocimiento, pero para conseguirlo, hay que ir a por ello. En cuanto a nivel organizacional
Esta fábula se puede aplicar a la situación en la que se encuentran muchas
personas. Reducciones salariales, despidos o cambios en la forma de trabajar dentro de una empresa
¿Qué representa el laberinto a nivel personal y para una organización?
El laberinto representaría las dificultades y los caminos que tenemos que
recorrer para poder llegar a nuestros objetivos y superar también las dificultades que nos aparecen en nuestros recorridos como personas y como empresas
¿Qué enseñanza deja su lectura?
La enseñanza que deja la lectura es que debemos salir de nuestra
zona de confort, el queso representa nuestros sueños que con el tiempo van desapareciendo porque ya fueron cumplidos y para alcanzar otros nuevos debemos movernos a lugares desconocidos para así poder llegar a esos nuevos sueños Aunque la enseñanza de esta historia se pueda aplicar a muchos ámbitos de la vida, ¿Quién se ha llevado mi queso? está muy enfocado al mundo profesional, intentando ayudar tanto a jefes como empleados para salir adelante y afrontar el cambio de forma positiva. En ocasiones es necesario alejarnos de nuestra zona de confort, donde sabemos lo que podemos encontrar, para mejorar y desarrollarnos. Esta historia resulta muy útil y aplicable hoy en día. Como por ejemplo La crisis política y económica que llegó de sorpresa ha supuesto un cambio muy difícil de afrontar en la sociedad actual. La clave está en cómo lo afrontemos, podemos buscar culpables en el gobierno, en las empresas o en los bancos, mientras el tiempo pasa sin que hagamos nada. O por el contrario, podemos movernos con el «queso» y actuar antes de quedarnos sin él, aunque el camino hacia lo nuevo sea algo laberíntico.