Nombre: Isabela Hoyos Quintero.

Fecha: 14/02/2021.
Solución.
En primer lugar, el paradigma tecnocrático es una ideología que sostiene que el
poder de la tecnociencia aplicado a la vida económica y social conduce al progreso
y al estadio final de la evolución humana. Entonces el hombre moderno no podrá
ser acreedor de los poderes de la ciencia y la tecnología sino toma en su poder
los valores que le son asignados como deberes, debido a que todas estas cosas
tienen un costo, no solo económico sino también en la medida en la que el mundo
se va desarrollando y si los seres humanos no tomamos la responsabilidad
necesaria, todo ese progreso se irían “por la borda”.
La injerencia humana en la naturaleza y la ciencia siempre ha existido, pero desde
hace mucho tiempo tiene el rasgo de preceder o avalar las posibilidades que ofrecen
los propios objetos. Se trataba de obtener lo que la existencia natural requiere
ofrecer por sí misma, como extender la mano. En la actualidad, lo importante es
extraer todo lo concebible de las cosas imponiendo la mano humana, que parece
descuidar o pasar por alto la verdad misma de lo que tiene delante. Esta es la razón
por la que los humanos, la naturaleza, la ciencia y la tecnología han empezado a
caminar de la mano, siendo contendientes. Lo que tienen los hombres no deben
dejar de ser herramientas que hemos ido ganando y que, ellos al ignorar lo que son
las convierten en una extensión del ser, perdiendo de vista que son temporales y
circunstanciales, sujetas a la transición y a la transformación, a la superación o al
desvanecimiento.