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El Arca del Tiempo

La Ciencia del Doctor


Frankenstein
No hay nombre en el mundo que haya inspirado tantas películas y series de televisión
como el de una obra literaria inglesa que nació como un simple juego. Fue un reto entre
escritores quienes después de leer una antología alemana de relatos de fantasmas, se
propusieron componer cada uno de los integrantes una historia de terror. De los cuatro
escritores que participaron en la elaboración de la obra, solo terminaría uno, pero de ahí,
la única dama del grupo llamada Mary Shelley (1797-1851) creo las bases de lo que sería la
primera obra del género de ciencia ficción, su título “Frankenstein”, en esa obra exploraba
temas como la moral científica, la creación y manipulación de la vida, así como la relación
del ser humano ante Dios, que se atreve a arrebatar ese don divino que es la vida para
profanarla y jugar con todo lo bello y sagrado que hay en ella.

Quien piense que esto es de hace unos cuantos años, se equivoca, ya que todo este
concepto que viene en la obra de la señora Shelley, así como la manipulación de la vida
por medio de experimentos, se realizaba ya en 1817, en esa fecha ciertos científicos
estaban constantemente experimentando con cadáveres a los que aplicaban electricidad
para poder revivirlos. Quien diría que esto, sentara las bases para la creación del
desfibrilador, herramienta que induce la actividad del corazón después de un paro
cardiaco. Y es que definitivamente los experimentos que hoy nos causan cierta aberración,
con el paso del tiempo, se hacen realidad, pero otros definitivamente rayan en la locura.

Quien no recuerde el simbolismo en la novela Frankenstein, tengo que comentar


primeramente que simboliza la perversión de la ciencia sobre la vida. Víctor Frankenstein
estuvo inspirado en el investigador Andrew Crosse (1784-1855), quien atrajo la atención
por ser un apasionado buscador del elixir de la vida eterna, fue una persona que tenía un
total desprecio por la naturaleza y fue considerado como un científico que no respeto la
dignidad básica del ser humano. De hecho, la rebelión de la criatura contra su creador es
un claro mensaje del castigo que deriva del uso irresponsable de la tecnología, siendo el
mal sólo una consecuencia imprevista de esto.
Hoy la ciencia del doctor Frankenstein es una realidad, recientemente ha creado los
primeros borregos genéticamente alterados, que tienen la características de ser
fluorescentes. ¿Qué otra cosa puede esperarse de los humanos que actúan como dioses
para jugar con la vida de los seres vivos?

Científicos uruguayos han anunciado el nacimiento de los primeros corderos


genéticamente modificados en América Latina. Los animales tienen la particularidad de
ser fluorescentes bajo luz ultravioleta.

Los nueve corderos transgénicos uruguayos nacieron en octubre de 2012 en el IRAU y


donde crecen sin problemas junto con sus congéneres no transgénicos, dijo a AFP Alejo
Menchaca, presidente del instituto de reproducción animal. Bajo la luz ultravioleta los
animales presentan una tonalidad verde fluorescentes, lo que se debe al gen que les
incorporaron, una proteína de la medusa Aequorea victoria y básicamente permite saber
de inmediato si el animal es transgénico o convencional.

El objetivo principal del experimento era probar una técnica innovadora de transgénesis
que, según el científico, es más sencilla y eficiente que otras tradicionales.

Las investigaciones en este campo allanan el camino para identificar el gen responsable de
la producción de una proteína ausente en los seres humanos en determinadas patologías
tales como la diabetes. Ovejas con un nuevo gen incorporado pueden producir la proteína
deseada en su leche, lo que permitiría aislar esa proteína para elaborar medicamentos de
forma más sencilla que en la actualidad, explicó el científico.

La intención puede ser buena, pero el atreverse a jugar para crear especies que
resplandezcan en la oscuridad, por el simple hecho de hacerlo, es sin duda algo de lo más
perverso que podamos imaginar.

Los Transgénicos:

Este tema es discutido en muchos medios, porque todavía no se saben los problemas que
habrá de generar su consumo. Si bien es cierto que ante la explosión demográfica la
humanidad demanda cada vez de más alimentos, una de las primeras opciones de las
grandes empresas multinacionales dedicadas a esto, es que a toda costa se comiencen a
utilizar todos los productos genéticamente modificados. Seres y plantas que asustarían al
propio doctor Víctor Frankenstein y que en países del tercer mundo son utilizados porque
no hay una legislación que los prohíba.

La ONG Greenpeace, comenta sobre los riesgos sanitarios de estos productos, ya que dice
que los transgénicos no han sido evaluados muy seriamente y su alcance es desconocido.
Generando quizá nuevas alergias al consumir tipo de alimentos, que quizá podrían ser
tóxicos a los humanos. Liberados en el medio ambiente, sin duda crearan una
contaminación genética sin precedentes, poniendo en peligro a cientos de especies con
una acción irreversible. Ante la falta de una legislación sobre transgénicos como lo han
hecho en Europa, el único camino es el estar bien informados y buscar alimentos
naturales, para poder tener una buena salud.

Escríbenos a danielreyesr@gmail.com si tienes alguna duda o comentario.

Borrego Fluorescente, creado en el Instituto de reproducción animal de Uruguay

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