identificado con DNI Nro., 80098538 con domicilio real y domicilio procesal en Prolongación Junín N° 2010, Mz D Lt 1 “B” Cercado de Lima Provincia y Departamento de Lima, con casilla electrónica N° 75978, con correo electrónico hugo.reyes.tafur.@gmail.com, con Celular 995 849 298, me presento ante usted y acudo respetuosamente a su Despacho Fiscal y manifiesto:
PETITORIO:
Que, de conformidad con lo establecido por el artículo 11° del Decreto
Legislativo N° 052, Ley Orgánica del Ministerio Público, y el Artículo 2° del Código de Procedimientos Penales, acudo a su Despacho Fiscal para el INTERPONER DENUNCIA PENAL en contra del ALFEREZ PNP BRANDON SANDOVAL OLIVERA, y el BRIGADIER PNP YONE MEZA BUENDIA, , ambos prestan servicios en la Comisaria PNP de SAN CAYETANO- El AGUSTINO; cuya dirección domiciliaria cito en Calle Hoyle Palacios 440, El Agustino 15006, Provincia y departamento de Lima., por la posible comisión de los delitos:
1.- DELITO CONTRA LA ADMINISTRACIÓN PÚBLICA, EN SU
MODALIDAD DE ABUSO DE AUTORIDAD; ilícito penal tipificado en el artículo 376° del Código Penal,
2.-DELITO DE USURPACIÓN ilícito tipificado en el Artículo 202
3.- DAÑOS A LA PROPIEDAD, en su modalidad de daños graves,
tipificado en el Articulo 205 del código penal. Delitos del cual soy víctima y he sido perjudicado con las decisiones y accionar de los denunciados tomadas en virtud del cargo y la función pública que ostenta.
He de indicar que en el transcurso de las diligencias preliminares pueden
aparecer nuevos hechos ilícitos o la reconducción de los inicialmente denunciados.
IMPUTACIÓN CONCRETA:
Los denunciados BRANDON SANDOVAL OLIVERA (ALFEREZ PNP DE
LA COMISARIA SAN CAYETANO- EL AGUSTINO) y YONE MEZA BUENDIA, BRIGADIER PNP (DE LA COMISARIA SAN CAYETANO- EL AGUSTINO) cometieron el Delito contra la Administración Pública, en la modalidad de Abuso de Autoridad. Estos hechos en mi agravio sucedieron con fecha 30 abril de 2021, a horas 8:00 Pm hasta las 8:50 Pm horas, aproximadamente, en las inmediaciones del domicilio del recurrente ubicado en Jr. Junín
FUNDAMENTOS FÁCTICOS QUE SUSTENTAN MI PETITORIO:
PRIMERO: Que, con fecha 30 de abril del año 2021, aproximadamente a
las 8 y 00 Pm, EFECTIVOS POLICIALES DE LA COMISARIA SAN CAYETANO (El Agustino) al mando del ALFEREZ PNP BRANDON SANDOVAL OLIVERA y BRIGADIER PNP YONE MEZA BUENDIA, irrumpieron el domicilio del recurrente ubicado Prolongación Junín N° 2010 Mz D Lt 1 “B”, Cercado de lima, provincia y departamento de Lima, con apoyo policial de 5 patrulleros, en cuyo interior se encontraban los efectivos policiales que no se quisieron identificar, quienes descendieron del patrullero con la finalidad de ingresar de manera abusiva e ilegal, a tal punto de propinar certeros golpes al portón de metal del domicilio mencionado, llegando a abrirse por la magnitud de los golpes dejando inservible el portón dejando daños graves en contra de mi propiedad. SEGUNDO: En primera instancia los efectivos policiales manifestaron como motivo de la intervención, que el recurrente poseía objetos robado, hecho que desmiento en todo su extremo, ya que el recurrente es empresario y se dedica a la compra y venta de electrodomésticos como puedo demostrar mediante boletas y depósitos que realizo frente a tiendas reconocidas del medio, a su vez manifiesto tener dos empresas constituidas ambas activas.
A su vez señalo el momento del ingreso de los efectivos policiales
apuntaron con sus armas de reglamento a mis trabajadores que se encontraban dentro de mi domicilio realizando reparaciones, posteriormente dieron con la escalera que da al segundo piso procedieron a subir interviniendo a el recurrente y a uno de mis trabajadores llevándonos al primer piso, quedando solo los efectivos policiales en la segunda planta por un lapso de 8 minutos produciéndose el hurto de dinero por el monto de S/. 80 000.00 (Ochenta Mil Soles) acreditado mediante boucher de Retiro del Banco de Crédito del Perú
El recurrente ningún momento opuso resistencia ni mucho menos agredió
a los efectivos policiales como se puede apreciar en los videos que adjunto a esta denuncia, muy por el contrario, se mostraba sereno, mientras los efectivos policiales denunciados, solo mostraban insultos y calificativos irreproducibles.
TERCERO: Que, el Art. 139° de la Constitución Política del Perú,
establece que nadie puede ser detenido sin mandato judicial, o en flagrancia delito, los ahora efectivos denunciados no tienen respeto alguno por la integridad física de los ciudadanos, más aun que nos encontramos en cuarentena, a su vez no cumplen con lo normado por nuestra Constitución Política del Estado Peruano, este mal comportamiento debe ser sancionado, en instancia judicial, , ya que dichos actos son repudiables ante la sociedad, CUARTO: Que, con lo antes descrito y con los anexos que adjunto al presente escrito, queda evidenciado el abuso de autoridad realizado por los efectivos policiales de la comisaría de San Cayetano, por lo que solicito a su despacho se realice las investigaciones que el caso amerita, y proceder con las diligencias preliminares e investigación preparatoria, por ser justicia la que espero alcanzar.
CALIFICACIÓN JURÍDICA DE LOS HECHOS DENUNCIADOS:
Adecuación de los hechos al tipo penal:
La conducta desplegada por el denunciado se encuentra tipificada y
sancionada en el Art. 376° del Código Penal, vigente en la fecha de ocurridos los hechos:
Artículo 376° – Abuso de Autoridad
“El funcionario público que, abusando de sus atribuciones, comete u
ordena un acto arbitrario que cause perjuicio a alguien será reprimido con pena privativa de libertad no mayor de tres años […]”.
Este delito, contemplado en el capítulo de tipos penales que protegen la
Administración Pública, sanciona con pena privativa de la libertad al funcionario público que abusa de sus funciones para cometer actos arbitrarios en agravio de una o varias personas.
Precisamente, este tipo penal busca proteger el Bien Jurídico es el
correcto funcionamiento de la administración pública en beneficio de los ciudadanos, toda vez que, el funcionario público cuenta con prerrogativas especiales debido a su cargo, lo que lo sitúa en una especial posición en la que debe cuidar de no cometer actos irrazonables y arbitrarios que vulneren los derechos de las personas y atente contra la Administración Pública y su correcto funcionamiento.
La actividad del funcionario público se encuentra limitada por el marco
legal establecido y por los principios de razonabilidad y proporcionalidad que informan el Derecho en general. Por ello, estas facultades conferidas a los funcionarios públicos no pueden convertirse de ningún modo en carta abierta para avalar actos arbitrarios, y menos aquellos contrarios a la Ley y la Justicia. En el caso de las fuerzas policiales, qué duda cabe que son funcionarios públicos, pues así lo establece expresamente el artículo 425° del Código Penal. Siendo así, resulta necesario señalar que, si bien los miembros de la Policía Nacional cuentan con atribuciones destinadas a preservar el orden, ello no los habilita a realizar un uso desproporcionado de la fuerza. Más aún cuando nos encontramos ante una situación de quiebre constitucional, donde el pueblo (Poder Constituyente) se encuentra manifestando, en el ejercicio legítimo del Derecho a la Protesta.
Cabe señalar que, el derecho a la protesta pacífica, como las que se
vienen realizando, se encuentra reconocido en el inciso 12 del artículo 2 de la Constitución Política del Perú. Asimismo, se encuentra reconocido en el artículo 15 de la Convención Americana sobre Derechos Humanos, habiendo señalado la CIDH que no existen supuestos que habiliten el uso de fuerza potencialmente letal en una manifestación, puesto que esta solo puede ser utilizada para proteger la vida. Así, internacionalmente se ha establecido que las fuerzas del orden no pueden utilizar medios que dañen la integridad, como el uso de perdigones de goma, con el fin de mantener el orden público.
En esta línea, la Corte IDH ha determinado que el uso de la fuerza debe
ser excepcional y proporcional, solo encontrándose legitimado cuando se hayan agotado todos los mecanismos previos de control. Asimismo, de acuerdo con el derecho internacional, el uso de la fuerza debe verse limitado por los principios de proporcionalidad, necesidad y humanidad. En otras palabras, debe ser equivalente a la actuación de los manifestantes, debe ser lo menos lesiva posible y solo aplicarse cuando sea estrictamente necesario. Estos principios deben ser tomados en cuenta en nuestro ordenamiento nacional, en pro del control de convencionalidad. Aunado a ello, los principios de necesidad y proporcionalidad se encuentran reconocidos a manera nacional por medio del Decreto Legislativo N° 1186.
Es preciso indicar, siguiendo al Magistrado Prado Saldarriaga en la
Sentencia de Expediente 24-2015, SANTA, indica que el tipo penal del artículo 376 contiene dos supuestos.
El primero consiste en cometer un acto arbitrario que cause un perjuicio a
alguien. El legislador emplea aquí el verbo cometer para hacer referencia a la realización del delito por parte del funcionario público. El delito puede ser realizado de manera directa, por intermedio de otra persona o conjuntamente con otras personas, lo que dará lugar a la autoría directa, autoría mediata o coautoría.
La segunda modalidad típica es ordenar un acto arbitrario que cause
perjuicio a alguien. Esta modalidad típica es un supuesto autónomo de autoría directa. Para la configuración de la modalidad típica de “ordenar un acto arbitrario” se requiere que la orden del acto arbitrario sea cumplida; y, si no existe consumación, al menos que se haya iniciado la ejecución y, además, que se haya ocasionado un perjuicio a alguien. La relevancia penal de esta modalidad se producirá cuando la orden ilícita cause perjuicio típico al sujeto pasivo.
Sobre la arbitrariedad del acto u orden, el profesor Rafael Chanjan nos
indica, siguiendo a Abanto Vásquez, que: “El acto (orden, resolución o cualquier acto funcional) es arbitrario cuando contraviene el ordenamiento jurídico (Constitución, ley, reglamento, etc.). La “arbitrariedad” se presenta cuando el funcionario actúa por fuera de lo que la ley le permite, no actúa cuando la ley le obliga hacerlo o actúa de un modo prohibido por la ley o no previsto por ella”.
Título de Imputación:
La imputación contra el denunciado es a título de autor, conforme al
Artículo 23° del Código Penal vigente.
Diligencias solicitadas:
Encontrándonos bajo los alcances de la Sentencia Plenaria Casatoria No.
01-2017, que estableció que para abrir investigación preliminar se requiere únicamente el grado de sospecha simple, a continuación, se detallan las diligencias que ofrecemos en nuestra condición de agraviados:
Se reciban las Declaraciones policiales de:
1.- BRANDON SANDOVAL OLIVERA (ALFEREZ PNP)
2.-YONE MEZA BUENDIA (BRIGADIER PNP)
Quien deberá ser notificado en el domicilio de su ficha Reniec o, en su
defecto, en la dependencia policial donde labora, Calle Hoyle Palacios 440, El Agustino 15006, Provincia y departamento de Lima.
A) Se reciba la Declaración del Recurrente WILLY DE LA CRUZ RAMOS,
con DNI N° 80098538 quien deberá ser notificado en Prolongación Junín N° 2010 Mz D Lt 1 “B”, Cercado de Lima Provincia y Departamento de Lima.
Ley de Amparo, reglamentaria de los artículos 103 y 107 de la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos 2016: Comentada y con jurísprudencia