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-Estaba siendo una tarde tranquila, los chicos habían tenido gimnasia y el profesor de

literatura estaba llegando tarde así que me quede en el aula un rato con ellos mientras
llegaba.

Ya es la segunda vez que tengo que hacer esto en la semana. Ni bien llego el profe, yo me fui a
mi oficina y me olvidé. El profe parecía agitado y distraído. Después del recreo de la tarde los
chicos volvieron al aula a tener su segunda hora con el profe y él les dejo una película para que
descansaran un poco. El profe salió del aula y bajo las escaleras contestando una llamada.

Pasaron unos minutos y los chicos empezaron a hacer mucho ruido, los escuchaba desde la
oficina. Estaba levantándome para ir a buscarlos cuando veo que un alumno, Gonzales, se
asoma por la puerta y me ve yendo para allá.

El da la señal de alerta a sus compañeros y el ruido para. Cuando llego veo la sorpresa, la tele
estaba completamente rota. Rápidamente los rete y vine corriendo. El resto de la historia ya la
sabe. -

-Entiendo, ¿y los chicos como los vio? ¿había alguno que saltaba a la vista o algo? -

-todos en sus lugares y mirándome fijamente, algunos con cara de preocupado. Mi primer
instinto fue ver a Juan, pero estaba en su lugar como si nada. -

-bueno ahora los voy a llamar uno por uno a ver si alguno quiere confesar, igual gracias por los
detalles. -

-Perfecto, ahí les aviso a los chicos-

-genial, nos vemos-

Medio raro como reacciono el director, pero bueno debe estar cansado. Después de todo este
grado es un quilombo. Ya es la segunda vez que me hacer recurrir al director en este mes.-
pensó Sofía

Voy a avisarles...

Sofía entra en el aula.

-A ver chicos, Juan el director quiere hablar con vos sobre la tele, tráete la libreta de
comunicaciones.

Gonzales se levanta con la cabeza baja y se dirige a la sala del director. Sofía lo acompaña

-González, si sabes quién fue, decirlo porque si no estarías teniendo parte de la culpa y te
podes llevar una sanción-

-Yo no sé nada, solo me asome porque me dijeron que me fije, si soy el que se sienta cerca de
la puerta.-

-bueno dale anda.-

Gonzales entra en la sala del director con cara de preocupado

Sofía se relaja un poco y se va a la sala de profesores a agarrarse un vaso de agua.

Casualmente ahí está el profesor de lengua y Sofía aprovecha para preguntarle un poco.
-Hey como andas-

-pfff, preocupado. Un quilombo lo de la tele. Espero que no me perjudique.-

-Si es una cagada, igual que mala suerte-

-si soy un boludo también, dejo la tele sola con el pero curso del colegio.-

-si la verdad que el curso es un desastre, los chicos son terribles -

- Igual no todos son malos, Ramírez y su grupo son los quilomberos. Seguro fueron ellos...-

- Yo no los conozco tanto pero puede ser que sean ellos. Bueno, voy a tener que preparar las
sanciones a los chicos.-

-Okey nos vemos-

Voy volviendo a mi oficina cuando veo a Lautaro saliendo de la sala del director con toda la
remera manchada de tinta. Confundida le pregunto.

-hola, ¿todo bien?

-sí mi papa me quería decir algo.- dice nerviosamente.

-ha bueno, anda a limpiarte eso al baño-

-bueno-

Sofía mira para adentro y ve al director suspirando. Sofía entra a la sala y pregunta

-¿Todo bien?

-Si se le exploto la lapicera a Lautaro y vino a pedir un paño.-

-mmh, por eso, claro.-

-Por cierto, al final fue Ramírez el que rompió la tele. Al final me dijo todo. Se cayó encima de
la tele jugando con un avión de papel.-

-Mira, eso sospechaba el profe. Ahora le preparo la sanción. Como vamos a hacer con la tele,
¿va a tener que comprar una nueva?-

-No, vamos a dejarlo así por unos días. A parte con la sanción ya alcanza.-

-¿De en serio? ¿Vamos a quedar sin tele así no?-

-Sí pero yo voy a poner de mi parte para comprar una nueva. Lo que pasa es que la familia de
Ramírez no tiene mucha capacidad económica y los voy a ayudar.-

-hmm, bueno. Voy a llevar la tele rota abajo así no molesta en la oficina.-

-okey, pedí ayuda si necesitas-

Sofía sale de la habitación.

-Qué raro todo esto, pero bueno, se debe sentir generoso el director- Piensa

Sofía pide ayuda para bajar la tele y entre dos profesores y ella bajan la tela hasta el almacén
del taller
Bajando un escalón de la escalera, el control remoto de la tele se cae y Sofía al agarrarlo se da
cuenta de algo. El control de la tele está lleno de tinta azul fresca.

-¡Ha me manche todas las manos! Esto no estaba así a la mañana.-

Sofía deja la tele y va al baño a limpiarse.

¿Porque el control estaba manchado? Aparte parecía la misma tinta que la que se manchó
Lautaro. Igual puede ser de cualquier lapicera. No sé, todo esto es medio raro. Pudriese
preguntarle a Ramírez para estar segura. – piensa Sofía mientras se limpia las manos.

Un rato después Sofía llama a Ramírez para que le ponga una nota en la libreta.

-¿Me van a poner una amolestación?-

-Y sí para eso te llame. ¿Igual fuiste vos no?-

-Sí fui yo-

-¿Y cómo la rompiste?-

-Estábamos jugando con un papel y me tropecé hacia la tele- contesta nerviosamente

-¿Un papel o un avión de papel?-

-sí eso un avión de papel… me olvidé-

-ha me parecía… Bueno, ¿y la tinte de dónde salió?

-¿qu-q-que tinta?- pregunta agitado

- el control remoto estaba manchado de tinta-

- no sé de q-q-qué s-s-estás hablando-

-bueno no importa, acá tienes la libreta, te podes ir.-

-perfecto-

Ramírez se para rápidamente y se va de la oficina.

Sofía, cada vez más confundida con todo el asunto decide llamar a Lautaro a su oficina para
poner una nota en la libreta.

-Hola, ¿cómo estás?

-Bien, ya me limpie la remera –

- bueno, sentate. Mira, te llame porque me parece que me mentiste, vos rompiste la tele y de
alguna forma convenciste a Ramírez de confesar por vos-

Lautaro se queda paralizado por la sorpresa

-Por tu cara veo que tengo razón- dice Sofía-

-No me va a quedar otra más que decirle a tu papa sabes-

-¡No por favor, no!-


-Tienes que hacerte cargo de lo que hiciste-

- ¡No, pero vos no entiendes!-

- ¿Qué no entiendo?-

-¡Yo me quiero hacer responsable pero no me dejan!- Grita Gonzalo llorando

-¿Quién no te deja?-

-¡Mi papa no me deja, él quiere que sea perfecto!! ¡Él no me deja!

Se hace el silencio durante unos segundos hasta que se abre la puerta. El director entra y ve a
su hijo llorando y a Sofía conmocionada.

Fin.

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