Por su parte, la Constitución peruana reconoce límites al ejercicio del derecho de
huelga [artículo 28°, inciso 3), de la Constitución], en la medida que en principio no
existen derechos fundamentales absolutos, debiendo protegerse o preservarse no sólo otros derechos fundamentales, sino también otros bienes constitucionalmente protegidos. CONCLUSIONES La huelga es la paralización colectiva y concertada de labores que se ejerce en forma pacífica con abandono del centro de trabajo, y que origina una suspensión perfecta de la relación laboral. El demandante alega que para la expedición de la Ley N. 0 29062 no se ha observado lo dispuesto en el Reglamento del Congreso de la República, contraviniendo de esta manera el artículo 94° de la Constitución que dispone que el Reglamento del Congreso tiene fuerza de ley. Así, refiere que se incumplió con el procedimiento legislativo establecido en el artículo 73° del Reglamento del Congreso, por cuanto para su aprobación no se observó la segunda votación. El demandante manifiesta que el artículo 3° de la Ley N. 0 29062 resulta inconstitucional por cuanto le confiere a la educación como un servicio público esencial, atentando contra el ejercicio del derecho a la huelga de los profesores. El derecho de huelga, como todos los derechos, no puede ser considerado como un derecho absoluto, sino que puede ser limitado por la legislación vigente, razón por la cual resulta admisible que mediante una ley el Estado module su ejercicio, dado que "la huelga no es un derecho absoluto, sino regulable. Por ende, debe efectivizarse en armonía con los demás derechos.”