Hipótesis: ¿Cómo la ley 20.500 legitima la participación ciudadana en la gestión pública?

Objetivo General: Determinar la relevancia de la ley 20.500 en el fortalecimiento de la sociedad

civil.

Objetivos Específicos:

1.- Distinguir los mecanismos contemplados la ley 20.500 que permiten la participación ciudadana
en la gestión pública.

2.- Diagnosticar el estado de implementación de la ley 20.500 y sus principales desafíos.

3.- Analizar las formas no institucionales de participación, como muestra de la insuficiencia de los
mecanismos legales.

INTRODUCCION.

La ley 20.500 Sobre Asociaciones y Participación Ciudadana en la Gestión Pública. Esta ley entro en
vigencia el 16 de febrero del año 2011 con su publicación en el diario oficial y contemplo un
periodo de vacancia de doce meses en determinadas materias; en lo que dice relación con el título
33 del libro primero del Código Civil sobre las personas jurídicas y en lo referente al registro
nacional de personas jurídicas sin fines de lucro, por esto la ley no se encontró totalmente vigente
sino hasta el 16 de febrero del año 2012.

Esta ley viene a asegurar mecanismos reales y efectivos de participación ciudadana a través de las
Asociaciones, simplificando los procedimientos de constitución de las mismas, facilitando su
acceso a fondos públicos y permitiendo su participación en planes y proyectos estatales, siempre
que estas persigan fines de interés general.

Los fundamentos de esta ley se encuentran en la Libertad de Asociación y en el Principio

Participativo. La Libertad de Asociación se encuentra consagrada en nuestro ordenamiento
jurídico constitucional, específicamente en el artículo 19 N° 15, constituye un derecho que el
estado debe reconocer, amparar y garantizar, lo que se busca materializar mediante la ley 20.500.
Por otro lado está el principio de Participación, el que busca que la relación entre los ciudadanos y
el estado se desarrolle en un marco de cooperación y no de sujeción de los individuos al poder.
Esto trae como necesaria consecuencia la injerencia de la sociedad civil en el diseño y elaboración
de las políticas públicas.