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DEL PERÚ
“AÑO DEL FORTALECIMIENTO DE
LA SOBERANÍA NACIONAL”
- ZEBALLOS
- MARCELO
- BELLO SILVA
- CACCIOLATO
Índice General
Introducción.......................................................................................................................3
Cuerpo y Desarrollo..........................................................................................................4
Análisis (Literario-Crítico)..............................................................................................10
Conclusiones...................................................................................................................11
Recomendaciones............................................................................................................12
Anexos.............................................................................................................................13
Anexo 1........................................................................................................................13
Anexo 2........................................................................................................................13
Bibliografía......................................................................................................................14
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Introducción
Cuerpo y Desarrollo
En un frío viento de octubre, ya había anochecido casi del todo y Leamas seguía
esperando en el puesto de control, junto a él un trabajador joven llamado americano,
quien impacientemente le repetía a Leamas que se fuera hasta que los agentes le
avisaran cuando llegue la persona que tanto esperaba; Leamas que era un hombre bien
persistente pese al tiempo que llevaba esperando siguió ahí.
Alec recordaba que Karl y el eran amigos y control quería conocer a Karl por el
gran éxito que había conseguido, pese a la amistad hubo desencuentros y
complicaciones ya que Karl había confiado mucho en Elvira una mujer cuarentona y
rubia, fuerte como el acero. Alec Leamas trató de variar los métodos, y cambiar los
sitios de encuentro y las contraseñas, pero a Karl no le gustó.
Por otro lado, la oficina en Berlín Occidental, que estaba dirigida por el jefe de
estación Alec Leamas había sufrido un par de fracasos lo cual mostraba a Leamas como
un agente mal visto.
Alec demuestran sus fallos y su ineficacia después de que mataran a uno de los
espías del otro sector cuando lo cruzaba en bicicleta. Poco después es llamado a
Londres de parte del jefe máximo por la muerte de uno de sus agentes.
Inicialmente Leamas es invitado a comer por Liz, sin embargo, este no muestra
ningún interés por ella, momentos después Alec le confiesa que su credibilidad no se la
tiene a nadie ni siquiera en Dios, también le comenta que forma parte del partido
comunista británico. Pareciese que este esta obstinado por su anterior trabajo el cual
hace que se debilite y gaste la mayor parte de su corto sueldo en alcohol. Por su lado
Alec Leamas, es un cincuentón plebeyo, algo rudo, con pocas ilusiones después de
haber experimentado la dura realidad de su trabajo, es escéptico en lo que respecta a los
fines, pero tenaz y experto en los medios. Talvez no sea joven pero no pudo evitar
tenerle simpatía a Liz.
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Continuando con la historia; sin fondo alguno. Pide fiado en las tiendas, pues
esto sucede porque ahora todo lo malgasta en la bebida, y el trabajo que tiene no es
suficiente. El comerciante Mr. Patmore se muestra esquivo a esa opción.
Cuando es libre de contacto con esos nuevos agentes tiene lugar un encuentro
con su superior, Control, y con el hombre que le servirá de cobertura el agente George
Smiley. La única condición que pone a Control y Smiley es dejar en paz y al margen a
Liz Gold.
La propuesta que se negocio era de salir de Gran Bretaña con destino a los
Países Bajos, luego pasar desde allí a Suiza para recibir una fuerte cantidad de dinero
por sus filtraciones. Para luego ponerle en contacto con el aparentemente hombre fuerte
del espionaje en la zona.
Finalmente aparece Peters quien opta por ponerlo en contacto a Leamas con el
servicio de inteligencia de Alemania Oriental. A ellos le expresa Leamas, su voluntad
de abandono y vender secretos británicos por obtener dinero de por medio. Sin
embargo, Peters decide que su información es lo suficientemente destacable como para
enviarlo a Alemania Oriental.
Fue en ese entonces que aparece Liz Gold quien testificaría para Alemania
Oriental; supuestamente ella había pedido permiso para asistir a un acto del cultural
amparado por el partido en Leipzig, sin embargo, tanto ella como Leamas se ven
obligados a testificar en el tribunal y, sin saberlo, revela que ha estado recibiendo pagos
de un oficial de inteligencia británico que no es otro que Smiley, como lo había
acordado Leamas.
Sin embargo, en medio de la noche, ve que la puerta se abre. Cuando sale del
complejo en el que está encarcelado ve a Mundt que es la persona que ha liberado a
Leamas y Liz de sus celdas y les proporciona un plan de escape a ambos. Entonces
Mundt explica que la verdadera misión de Leamas ha tenido éxito; ya que Mundt en
realidad es un agente británico, y el interrogador Fiedler había sido el blanco de la
operación todo el tiempo. Para Leamas todo esto habría ocasionado una gran impresión.
Se da cuenta de que él es un peón en la compleja red en la que se ha visto atrapado y
también se dio cuenta del peligro en el que lo han puesto sus propios superiores. Todo
este suceso se lo explica a su compañera Liz, mientras conducen el coche rumbo hacia
la frontera. Ella lo
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corrige por estar involucrado en lo que equivale al asesinato de Fiedler, quien solo
estaba haciendo su trabajo. Entonces Liz pregunto ¿por qué no te fusilan a ti?, en otras
palabras, Liz solo quería saber porque a Fiedler lo iban a fusilar si era a aliado de Alec,
tú conspiras con Fiedler contra Mundt dijo Liz, eso es lo que dicen. Mataste a un
guardia. ¿Por qué te ha dejado marchar Mundt?, Alec Grito nervioso y ansioso por el
suceso y de repente dijo: Te diré lo que no tenías que saber nunca, nunca, ni yo
tampoco. Escucha: Mundt es el hombre de Londres, su agente: le compraron cuando
estaba en Inglaterra. Somos testigos del asqueroso final de una asquerosa y sucia
operación para salvarle el pellejo a Mundt; para salvarle de un pequeño judío listo, de su
propio Departamento, que había empezado a sospechar la verdad. Nos han obligado a
matarle, ya lo ves, matar al judío. Ahora ya lo sabes, y que Dios nos ayude a los dos.
Alec no logra comprender porque Mundt lo había liberado puesto que un día
antes lo consideraba malvado y enemigo. Pero no hoy. Hoy es malvado y mi amigo.
Sin embargo, el agente acaba descubriendo que su misión es una simple tapadera
y él un instrumento al servicio de un complot secreto; Leamas y Liz llegan al Muro de
Berlín y reciben instrucciones para pasar a Alemania Occidental en una escalera de
emergencia mientras un reflector se apaga intencionalmente.
tirando de Liz detrás de él, Liz encontró con el pie el primer saliente de metal y el muro
empezó arde en fuego, cuando de repente el reflector brilla directamente sobre ellos,
suenan las alarmas y Liz es asesinada a tiros por los agentes de Mundt, los ojos de Alec
se hicieron húmedos, miró al pie del muro y logro verla, quieta tirada cerca al muro de
metal. Como Alec ya había subido el muro volvió a bajar lentamente por los mismos
salientes de metal, hasta que quedó de pie a su lado. Y ella estaba ahí muerta, tenía la
cara vuelta a un lado, con el pelo negro a través de la mejilla como para protegerla de la
lluvia, fue la última mirada que le hizo Leamas a Liz.
Finalmente dispararon contra él, dos o tres balas, él se quedó quieto, mirando a
todo su alrededor. Al caer, Leamas vio un coche pequeño aplastado entre grandes
camiones, y los niños agitando la mano alegremente por la ventanilla. (Carre, 1890)
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Análisis (Literario-Crítico)
Esta obra me pareció excelente, podemos persistir que Jhon le Carré lo introduce
en el mundo del espionaje de tal manera que se ve tan fácil tan entretenidamente que
hace que los lectores, sientan que son un personaje más de esta historia; personalmente
así lo puede sentir.
Comentando acerca de los personajes puedo decir que, me gustaron mucho, ellos
fueron descritos de una forma muy sagas y perfecta en la obra, cada uno de ellos muy
introducido en su papel. Uno de los personajes que me llamo la atención y que
personalmente siento que dio el realce a la historia, fue Alec Leamas, este espía amo
sentir lo que el percibía, fue de agrado sentir toda la esencia que Jhon le Carre le dio a
este hombre. Ahora describiendo un poco a Alec, él era un personaje muy obstinado,
necio, nada reflexivo y alcohólico, sin embargo, aunque Leamas, mostró ser un hombre
fuerte y nada sensible, en la obra podemos persistir el sentimiento y su parte tierna que
tuvo por Liz, una mujer encantadora, buena persona y sobre todo que lo quiso a Alec
pese al carácter que este pudo tener.
En esta obra Jhon le Carré nos quiere narrar un sin fin de traiciones de cierta
cantidad de personajes en donde no sabremos quien es el malo o quien es el bueno,
también el autor nos traslada a Alemania, Inglaterra a Copenhague, es una historia
conmovedora, que me mantuvo emocionado e intrigado por cada uno de los episodios
que iban apareciendo; muy aparte de que describe cada país, cada ciudad tan
perfectamente, es una gran historia un gran libro excelente de comienzo a fin.
La historia termina en un trágico final dado que Liz muere, pese a ello, la obra
no deja de ser tan interesante y en lo posible reflexiva.
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Conclusiones
Es una obra que muestra muy bien el contexto político ente la Europa oriental y
occidental. El argumento es algo lioso pero muy elaborado, se conoce que el
autor comprende grandes conocimientos sobre el tema.
Esta obra de espionaje y suspenso que está dentro del contexto de la Guerra Fría,
presenta una buena psicología de los personajes y su ambiguo dilema moral.
El personaje principal Alec Leamas es un buen espía y sabe que el juego doble,
o triple, forma parte de las reglas. Sin embargo, a medida que se adentra en la
trama, va comprendiendo que aquel no era su juego, que no encarna en el papel
de estrella en busca de una luz de esperanza, sino el de un pobre trabajador en
desgracia que está siendo manipulado por Control.
La obra tuvo un final estremecedor, Liz muere y el quedó quieto, lanzando
ojeadas alrededor, como un toro herido en la plaza. Al caer, Leamas vio un
coche pequeño aplastado entre grandes camiones, y los niños agitando la mano
alegremente por la ventanilla.
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Recomendaciones
Les recomiendo este libro, ya que es muy entretenido y está muy bien escrito, el
autor por su parte es la máxima figura es las novelas de Espías, por otro lado, la
forma de cómo fue redactado ha logrado cautivar a muchos lectores;
personalmente me ha gustado mucho.
Al principio el nombre de tantos personajes en la historia te puede confundir, sin
embargo, es una obra muy bonita, una historia que es relevante y esta relaciona
con hechos reales, en la cuales deja mucho que platicar.
Esta obra aclara la importancia de ser espía, muchas veces son dejadas de lado
algunas de las profesiones y significativamente lo que vas a descubrir en esta
obra es básicamente una visión reflexiva, una revisión casi filosófica.
Anexos
Anexo 1
Nota: Jhon Le Carré - autor de la obra El espía que surgió del frío
Anexo 2
Bibliografía
Carre, J. L. (1890). El espía que surgió del frío. España: Club Bruguera .