Está en la página 1de 6

UNIVERSIDAD DE SAN CARLOS DE GUATEMALA

FACULTAD DE CIENCIAS JURÍDICAS Y SOCIALES


PRIMER SEMESTRE, AÑO 2021 CÓDIGO 205
CURSO: INTRODUCCIÓN AL DERECHO I.
PUBLICACION OFICIAL

LEONEL ARMANDO LOPEZ MAYORGA

REALIDAD NACIONAL Y
SISTEMA JURIDICO GUATEMALTECO

PRESENTACIÓN

Con este documento se intenta presentar una visión general en el área social, económica y jurídica de la realidad
nacional a los estudiantes del Área Básica de la Facultad de Ciencias Jurídicas y Sociales de la Universidad de
San Carlos de Guatemala, que sirva de de fundamento para poder comprender las distintas concepciones del
Derecho que se estudian en nuestra Facultad, pero especialmente para formar en el estudiante y futuro
profesional del Derecho, el sustento principal para poder comprender los aspectos que influyen en la creación y
formulación de las normas jurídicas y por ende en la creación del Estado de Derecho.

El texto comprende los hechos sociales, económicos y jurídicos, más relevantes que apuntalan el sistema jurídico
guatemalteco, causas y efectos, causas de los aspectos estructurales que impactan en la sociedad y que rigen el
quehacer socioeconómico del país y la implementación de la política gubernamental a través de las normas
jurídicas que implementa la clase dominante, que no solo ha generado una enorme brecha entre la clase
poderosa y la carente de recursos.

ANTECEDENTES

Una de las principales características del país guatemalteco, es su población mayoritaria es indígena que se
constituye en 4 Pueblos y 21 etnias mayas. El Pueblo Maya lo constituye aproximadamente el 60% de la
población actual. Dicha población ha sido particularmente discriminada, excluida y marginada a la pobreza.
Revisando la historia reciente del país. 1944, fecha importante que marca la historia de Guatemala con hechos
relevantes para la sociedad guatemalteca. El gobierno democrátíco de Jacobo Arbenz que dura una década, fue
derrocado por medio de un golpe de Estado respaldado por la CIA y el gobierno estadounidense.

Guatemala, ha tenido una trayectoria política caracterizado por: excesiva violencia estatal, abuso generalizado a
los Derechos Humanos e impunidad; debilidad de la institucionalidad estatal; militarización del Estado y de la
sociedad y desigualdades económícas, sociales y culturales. Durante décadas y actualmente para la mayoría de
las y los guatemaltecos el Estado ha sido sinónimo de militarismo, violencia, discriminación, racismo, corrupción
y criminilización, sin justicia, igualdad y equidad.

Realidad social

Guatemala ha ingresado a un periodo de acelerada descomposición en distintas manifestaciones de la vida


ciudadana, incluyendo la moral y los valores de convivencia. Esa descomposición, se manifiesta también en la
ruina de la política, de la legalidad y en el extravío de la misión de las instituciones públicas. Las relaciones
sociopolíticas que se construyen desde el Estado y que sirven de referencia a la sociedad entera, son mediadas
casi exclusivamente por el patrimonialismo, el clientelismo y la corrupción.

Adicionalmente, se ha exacerbado la crisis social como consecuencia de la precariedad del empleo, el bloqueo de
pequeñas y medianas empresas, pero que representarían múltiples inversiones productivas de amplio beneficio
a la población, y las débiles políticas de salud, educación, vivienda y nutrición.

Se observa la huida de talentos jóvenes en todos los estratos de la sociedad y en prácticamente todo el territorio
nacional; jóvenes que ya no encuentran futuro en Guatemala. La pérdida del talento humano y la degradación
forzada de los valores de convivencia son el indicador definitivo de un país que desciende al caos, como ha
ocurrido en algunos países de África y del Caribe.

Ese conjunto de problemas nos acerca riesgosamente a una condición de disolución social, por la pérdida de la
autoridad legítima materializada en el Estado. A juicio del Grupo cuatro son cinco grandes problemas están
afectando a Guatemala: (Bermudez 2006)
1. El creciente empobrecimiento de la gran mayoría de la población, cuya causa radica esencialmente en el
modelo socioeconómico marcadamente neoliberal que privilegia los intereses de los empresarios y de las
compañías multinacionales. El gobierno empresarial de la GANA privilegia el mercado y los tratados de libre
comercio (el TLC con Estados Unidos entró en vigor el 1 de julio), defiende la privatización y competitividad
basada en la desigualdad e inseguridad alimentaria para miles de familias. Los hospitales están colapsados, lo
que ha generado que los médicos entren en huelga. La Educación atraviesa una grave crisis. Hay una tendencia
a privatizar los servicios públicos.

El proyecto marcadamente neoliberal de los empresarios, se ha limitado a impulsar una inserción a la economía
global basada en la exportación de productos primarios, a la explotación transnacional de los recursos naturales
(minería, petróleo, agua), a la entrega de los servicios y la infraestructura al capital privado para megaproyectos,
a la concesión de privilegios al sector capitalista y al mantenimiento de una fuerza de trabajo barata (bajos
salarios). La economía de las clases populares se sostiene gracias a las remesas del casi millón y medio de
emigrantes en los Estados Unidos y a la economía informal. Situación que se va agudizando debido al
acelerado crecimiento demográfico.

La situación de empobrecimiento se ha agravado por la tragedia de la tormenta tropical Stan, sobre todo en la
región del occidente del país (y más concretamente en el departamento de San Marcos), que ha puesto de
manifiesto la cruel desigualdad existente. Hasta el presente el Gobierno sólo ha realizado un 36 % de la
reconstrucción.

2. El incremento de la violencia, que está alcanzando límites increíbles: un promedio de 19 asesinatos diarios. La
violencia tiene raíces muy variadas, desde el crimen organizado con sus distintas ramificaciones en el
narcotráfico y la mafia, hasta la delincuencia juvenil, conocida bajo el fenómeno de las «maras». La mayoría de
los jóvenes integrantes de las maras proceden de familias marginadas y muchas de ellas desintegradas, sin
oportunidad de estudio ni de trabajo. A diario aparecen cadáveres acribillados a lo largo y ancho del país, sobre
todo en el área metropolitana. Los asesinatos unos son por ajuste de cuentas entre las distintas facciones del
crimen organizado o de las maras y otros por la «limpieza social». Hay constantes asaltos y robos en las calles y
en los buses. Según un informe de Prensa Libre, en los cinco primeros meses del año hubo 36.000 asaltos a buses,
es decir, más de 200 asaltos diarios. Esta situación ha creado un clima de temor e inseguridad ciudadana que,
según las encuestas, es el fenómeno que más preocupa a la población guatemalteca. Cabe señalar entre la
violencia que azota al país, las amenazas, intimidaciones y allanamientos contra líderes y organizaciones sociales.
Esta situación de criminalidad e inseguridad es una expresión del sistema socioeconómico y político imperante

Las violaciones de los derechos humanos continúan porque: 1) las estructuras del terror nunca fueron
desmanteladas; estos grupos paralelos tienen poder económico, político, militar y siguen operando impunemente.
El Estado no ha tenido la capacidad ni la voluntad política de controlarlos ni de desarticularlos; 2) las
estructuras de seguridad democrática siguen siendo débiles e ineficaces, el Ministerio Público, que es el ente
responsable de la investigación y persecución penal, no funciona a cabalidad; 3) persiste un armamentismo
generalizado entre la población; 4) el contexto internacional alimenta los comportamientos violentos,
adquiriendo el carácter de política predominante.

3. La ineficiencia del sistema de justicia, que es arbitrario. Está manipulado por decisiones políticas del gobierno,
presiones económicas y poderes paralelos. El 85% de la población considera que el sistema de justicia es el más
sobornado. Hay justicia para los poderosos y adinerado, en cambio los pobres quedan excluidos. Hay casos
laborales en las fincas que llevan hasta cuatro y cinco años sin avanzar, a pesar de que los trabajadores llevan la
razón.

Los pueblos indígenas han sido particularmente sometidos a niveles de discriminación, explotación e injusticia
por su origen, cultura y lengua. En los juzgados no dan importancia a los mayas.

Es preocupante la falta de acceso a la justicia de gran parte de la población. Según datos oficiales, de cada cien
homicidios, 93 quedan en la impunidad y de las denuncias presentadas al Ministerio Público, sólo el 3% llega a
sentencia. Esto es debido a la fuerte influencia que diversos poderes fácticos ejercen sobre el sistema de justicia.

Existe una marcada exclusión para las áreas rurales en el sistema de salud y la educación básica y diversificada.

4. La degradación de los valores humanos. Las conductas violentas, la criminalidad, la corrupción, el marcado
individualismo, la competitividad, el afán de lucro, la acumulación e idolatría del dinero favorecido por el
mismo sistema neoliberal, se han incrementado en el país. La decadencia de valores éticos afecta enormemente a
toda la realidad humana, a la vida familiar, social, económica, política y cultural. El sistema Educativo nacional,
lejos de promover el desarrollo de los valores humanos, los está excluyendo del programa de formación. Hace
énfasis en la Educación mercantilista, como una capacitación para la competitividad, respondiendo al proyecto
de la globalización neoliberal.
5. La destrucción del medio ambiente. En primer lugar hay que señalar que Guatemala es un país de alto riesgo
debido a su contextura y ubicación geomorfológico, propenso a terremotos, huracanes y tormentas tropicales. El
riesgo y los desastres se acentúan por: 1) la alarmante deforestación por la tala inmoderada de árboles con la
consiguiente pérdida de la biodiversidad y la erosión de los suelos; 2) las basuras vertidas en caminos y
barrancos; 3) la contaminación de arroyos, ríos, lagos y costas marítimas con toda clase de residuos sólidos y
líquidos. 4) la contaminación de los mantos acuíferos por la explotación minera de oro y plata a cielo abierto.

Frente a estos problemas hay una fuerte resistencia y lucha popular. Se percibe un lento, pero constante,
crecimiento de las organizaciones sociales: campesinas, indígenas, mujeres, jóvenes, maestros, sindicatos, de
resistencia a la explotación minera, etc. Un elemento común de lucha popular gira en torno a la resistencia al
TLC y a la explotación minera a cielo abierto.

Existe multitud de expresiones sociales, pero todavía falta cohesión. Se está fortaleciendo el Movimiento
Nacional por los Derechos Humanos, presente en la mayoría de los departamentos. Asimismo, está surgiendo un
movimiento político social de izquierda con una nueva visión, plural, incluyente, participativa, en base a la ética
de la acción política, la justicia social, el servicio, la responsabilidad, la transparencia, el diálogo y la solidaridad,
movimiento que sin ser partido, busca impulsar un proceso de reconstrucción y de unidad de las izquierdas,
para que pueda ser una alternativa en el país. Está en proceso la conformación de un Frente Político Social de
Izquierda que busca ser una convergencia de las fuerzas populares, democráticas, progresistas y
revolucionarias.

Asimismo, la Iglesia ha tomado, a la luz del Evangelio y de la Enseñanza Social de la Iglesia, una postura crítica
frente a las políticas neoliberales, al lado de los más desfavorecidos. En este sentido son significativos los
pronunciamientos y acompañamiento al pueblo por parte de la Conferencia Episcopal de Guatemala (CEG),
como por las Pastorales de la Tierra, Movilidad Humana, Derechos Humanos, Conferencia de Religiosos y
Religiosas de Guatemala (CONFREGUA). Asimismo, distintas iglesias evangélicas han asumido un papel de
resistencia y de lucha frente al sistema, destacando la Comunidad Cristiana Mesoamericana (CCM), con un
espíritu ecuménico. Como cristianos estamos llamados a construir signos de esperanza frente a una realidad que
nos interpela. Los derechos humanos son una lucha constante desde los pobres.

Realidad económica

El país se ha caracterizado por tener un fundamento macroeconómico, bajo crédito que se le debe conceder
primordialmente al Banguat. Nuestra economía está dominada por el sector privado que representa el 85% de
la producción total del País y realiza el 75% de las exportaciones y los mayores socios comerciales siguen siendo,
Estados Unidos, La Eurozona, Centroamérica y México.

Las principales debilidades que tiene la economía guatemalteca sigue siendo el, bajo nivel de carga tributaria, la
poca inversión pública y el bajo nivel de los índices de desarrollo humano y condiciones de vida principalmente
(50% de la población se encuentra en índices de pobreza) a esto se debe sumar la falta de seguridad,
institucionalidad y certeza jurídica que no propicia la inversión extranjera directa como deseamos y
necesitamos. Las empresas transnacionales, han ingresado al país para la exploración y explotación minera, de
manera ilegal y contra la voluntad de la población por los desgastes, la desaparición y contaminación que
generan a los recursos naturales y las consecuencias severas a la salud de las personas, especialmente de los
niños.

Además, no existe una política coherente de crecimiento y desarrollo económico de largo plazo (Solo existen
políticas de gobierno de corto plazo, pero no de Estado en el largo) y el desembolso en inversión social e
infraestructura sigue siendo bajo. La brecha en la desigualdad en la distribución de la riqueza del país sigue
siendo muy alta, medida a través del coeficiente de Gini, coloca a Guatemala en un índice de 57.6, en el segundo
lugar de la región con mayores desigualdades, según cifras del Banco Mundial solo superamos a Honduras que
tiene el 60.2.

Una de las fuentes de ingresos del país, son las remesas familiares, estas crecieron en un 8.5% en el 2014, con
respecto al año 2013. Durante el año 2014 alcanzaron 5.5 mil millones según estadísticas del Banco central. Los
meses de Julio y octubre fueron los meses que mejores remesas recibieron durante el 2014, con $509 y $ 500
millones respectivamente: esta información es positiva para los ingresos del país, como pilar fundamental de la
economía guatemalteca, pero simultáneamente, las mismas son una debilidad ya que representan la incapacidad
de nuestro país para cumplir con las expectativas de empleo para la población, y tampoco hay políticas de
inversión para las remesas. La mayoría de las remesas se destina en infraestructura, la cual emigra en mayores
cantidades y este es un factor que impulsa el crecimiento de las mismas.

Según la última Encuesta de Empleo e Ingresos 2014 –ENEI 2014- la Población Económicamente Activa -PEA-,
todos los guatemaltecos mayores de 15 años que realizan una actividad económica, buscan un trabajo o hacen
gestiones para encontrar un trabajo, supera ya los seis millones de personas. De esos seis millones de personas,
apenas un millón doscientos mil personas tienen un trabajo formal, cotizan al seguro social y gozan de los
beneficios que establece la regulación laboral. De los cinco millones de guatemaltecos restantes, la gran mayoría
no tiene acceso a la seguridad social; no goza de los beneficios que establece la regulación; trabaja menos de
cuarenta horas a la semana; no tiene una ocupación estable; labora por cuenta propia; gana menos del salario
mínimo; etcétera. Uno de los mayores problemas económicos, sino el mayor, que afronta el país en el futuro
inmediato. A la tasa de crecimiento económico actual, y dada la escasa creación de empleo formal, no hay forma
de evitar que este problema se haga más grave conforme pasa el tiempo.

Sin embargo, a pesar de la gravedad del problema, todavía no existe un consenso generalizado acerca de la
importancia y urgencia de aumentar la capacidad de generación de empleo formal en el país. Para los cerca de
cinco millones de guatemaltecos que no tienen un empleo formal el principal problema es la falta de
oportunidades laborales; la inexistencia de nuevas fuentes de trabajo; la deprimida demanda de trabajo en
sectores claves de la economía; el limitado acceso a los beneficios de la seguridad social. Al final de cuentas, si no
hay empleos tampoco hay salarios ni derechos laborales que proteger. Más que “proteger el salario”, en países
como Guatemala lo que se necesita es promover la creación de nuevo empleo y proteger el existente. Lo que se
necesita en Guatemala es promover la creación de nuevas oportunidades laborales formales, de manera que la
inmensa mayoría tenga acceso a un mínimo de seguridad social, protección legal de sus derechos y mayores
ingresos laborales.

No obstante, la mayor parte de las acciones de gobierno se concentran únicamente en estabilizaciones de precios
desde los intereses de los empresarios; ampliación de subsidios a servicios esenciales como el transporte y la
electricidad desde la ciudad capital; persecución y castigo a los infractores de la regulación laboral; etcétera.
Las normas legales, en relación al tema de salario, no se respetan a nivel de empresas en el país porque no se
cumplen las condiciones mínimas.

Población Económicamente Activa:

Llámese así a la parte de la población total que participa en la producción económica. En la práctica, para fines
estadísticos, se contabiliza en la PEA a todas las personas mayores de una cierta edad (15 años, por ejemplo) que
tienen Empleo o que, no teniéndolo, están buscándolo o a la espera de alguno. Esto excluye a los pensionados y
jubilados, a las amas de casa, estudiantes y a los menores de edad.

Si se calcula el porcentaje entre la PEA y la población total se obtiene la tasa de actividad general de un país.
Cuando un país tiene altas tasas de crecimiento demográfico la tasa de actividad suele ser baja, pues existe un
alto número de menores de edad y estudiantes en relación al total. Ello ocurre frecuentemente en los países
subdesarrollados, donde una minoría de la población que labora tienen que producir -directa o indirectamente-
para un gran número de personas que no generan bienes, situación que no permite el crecimiento económico
para el país.

En Guatemala, la fuerza laboral del país,-PEA- representa alrededor de 4.9 millones de habitantes, creciendo a
una tasa anual del 4%. Actualmente la PEA equivale a la tercera parte de la población total.

Otra forma de medir la población económicamente activa es la denominada “población habitualmente activa”,
que se calcula con respecto a un período de referencia largo, por ejemplo, un año.

No toda la población de un país constituye su fuerza de trabajo, ya que no todos están en capacidad de trabajar
o no todos desean laborar. Entonces es necesario dividir la población total de un país (o región) en dos grupos:

1. La población en edad para trabajar

2. La población que no tiene edad para trabajar ya que es demasiado joven para laborar

Sin embargo, no todos los miembros de la población en edad para trabajar desean trabajar. Algunas personas
deciden dedicarse a su hogar, a estudiar u otras actividades. Estas personas pueden tener edad para trabajar
pero no desean hacerlo, así que tampoco forman parte de la fuerza de trabajo o población activa.

Tampoco se incluyen en la fuerza de trabajo a aquellas personas que por algún tipo de enfermedad u otro tipo
de impedimento no pueden trabajar. Puede decirse entonces que la población en edad para trabajar puede ser
separada en dos grandes grupos:

1. La población económicamente activa


2. La población no activa

Sistema jurídico guatemalteco

La actual Constitución Política de Guatemala fue promulgada y sancionada en 1985 y reformada luego en 1993.
En ella el Estado se organiza, en torno de la protección a la persona y la familia, su fin supremo es la realización
del bien común, se establece el sistema de gobierno republicano, democrático y representativo. La soberanía
reside en el pueblo, se reconoce que el país se desarrolla sobre bases pluriculturales, multilingües y su diversidad
étnica.

Su ámbito territorial se encuentra organizado en departamentos, municipios y estos últimos gozan de autonomía
y su gobierno es elegido popularmente.

Poderes del Estado.


Son poderes del Estado, el organismo legislativo, el organismo ejecutivo y el organismo judicial. La
subordinación entre los mismos es prohibida.

La autoridad máxima del organismo ejecutivo es el presidente, el jefe de Estado, le siguen en jerarquía el
vicepresidente, los ministros y los viceministros. El presidente y vicepresidente son electos popularmente,
cuentan con ministerios, secretarías, direcciones generales, entidades autónomas y semiautónomas.

La potestad legislativa corresponde al Congreso, integrado por diputados electos para un periodo de cuatro
años. Sus principales atribuciones son decretar, derogar y reformar las leyes; aprobar, modificar o rechazar el
presupuesto general de ingresos y gastos del Estado; decretar impuestos; declarar la guerra; decretar amnistía
por delitos políticos y comunes conexos; efectuar las operaciones relativas a la deuda externa y aprobar antes de
su ratificación tratados internacionales que afecten a las leyes o a la soberanía nacional.

El organismo judicial se integra por la Corte Suprema de Justicia, las cortes de apelaciones, los juzgados de
primera instancia y los juzgados de paz. A estos tribunales les corresponde en exclusiva la potestad de juzgar.

Otras instituciones del Estado Guatemalateco.

Con la Constitución de 1985 se crearon tres instituciones tendentes a fortalecer el Estado de Derecho: la Corte
de Constitucionalidad, el Tribunal Supremo Electoral y la Procuraduría de los Derechos Humanos.
La Corte de Constitucionalidad tiene como función esencial la defensa del orden constitucional y le corresponde
el control constitucional de las leyes y conocer todos los procesos de amparo.
El Tribunal Supremo Electoral tiene a su cargo convocar, organizar y fiscalizar los procesos electorales.
El procurador de los Derechos Humanos es un delegado del Congreso que tiene como principales atribuciones
investigar y denunciar conductas lesivas a los intereses de las personas y violaciones a los derechos humanos.

Garantías Constitucionales

La Constitución reconoce tanto los derechos individuales como los derechos sociales y los derechos civiles y
políticos. Entre los primeros se encuentran el derecho a la vida, la integridad física, la seguridad, la igualdad y
la libertad. Asimismo consagra la libertad de pensamiento, de religión, de asociación y el libre desplazamiento.
Entre las garantías procesales establece el principio de legalidad, el principio de presunción de inocencia, el
derecho a un proceso justo, el recurso de exhibición personal y el proceso de amparo; también prevé el derecho
de asilo, de petición, de reunión y manifestación y la inviolabilidad de correspondencia y de vivienda.

Entre los derechos sociales reconoce el derecho a la educación, la cultura, la salud y el trabajo. Por último, se
encuentra consagrado el derecho de elegir y ser electo.

Garantía de la propiedad privada y la libre empresa

Los Pilares sobre los que se erige el sistema jurídico guatemalteco, según Santiago López Aguilar son:

La garantía de la propiedad privada. Como un país con relaciones económicos sociales tendentes a un incipiente
capitalismo, ya que todavía existen resabios de carácter feudal y su producción se basa fundamentalmente en la
explotación agrícola, lo que no obsta, que en los últimos años, haya, habido algún crecimiento, en torno al sector
industrial y de la construcción este ha sido en su menor parte, para beneficio de los dueños de los medios de
producción y por otra parte a la inyección económica artificial del paso del narcotráfico y a las remesas de los
guatemaltecos emigrados hacia los Estados Unidos de Norteamérica.
Consideramos que el sistema jurídico guatemalteco, gira en derredor de la protección de la propiedad privada,
merced a que ésta constituye el fin del enriquecimiento de unos y el empobrecimiento de otros. Son
instrumentos jurídicos protectores de la propiedad privada, por ejemplo el Código Civil, Código de Comercio,
las leyes tributarias que por lo general hacen tributar al que tiene menos capacidad de pago y contienen
mecanismos de evasión para los grandes contribuyentes. Como herencia de la gesta revolucionaria de 1,944
quedan algunas leyes de carácter social entre ellas el Código de Trabajo y las que regulan el Instituto
Guatemalteco de Seguridad Social.

Al constatar las diferencias de principios entre los tipos históricos de derecho, hace falta ver claramente los hitos
fundamentales, los primordiales «puntos de concentración» de todos los sistemas jurídicos nacionales en toda la
historia de su desarrollo que son, por un lado, los tipos explotadores, características de la propiedad privada
(esclavista, feudal, burgués), abordados en su unidad, y, por otro el tipo socialista, cardinalmente distinto de
aquellos: el derecho de los trabajadores, antiexplotador, asentado en la propiedad social socialista”.

El artículo 39 de la Constitución Política de la República dice: “Se garantiza la propiedad privada como un
derecho inherente a la persona humana. Toda persona puede disponer libremente de sus bienes de acuerdo con
la ley.

El Estado garantiza el ejercicio de este derecho y deberá crear las condiciones que faciliten al propietario el uso
y disfrute de sus bienes, de manera que se alcance el progreso individual y el desarrollo nacional en beneficio de
todos los guatemaltecos”.

El artículo constitucional 41 establece: “Protección al derecho de propiedad. Por causa de actividad o delito
político no puede limitarse el derecho de propiedad en forma alguna. Se prohíbe la confiscación de bienes y la
imposición de multas confiscatorias. Las multas en ningún caso podrán exceder del valor del impuesto omitido”.

Libre empresa

Esta constituye uno de los fundamentos para la existencia del modo de producción capitalista cuyos requisitos
son: “en primer lugar la existencia de una fuerza de trabajo libre, es decir, la existencia de hombres libres de
medios de producción, desposeídos de todo medio de sustento, con la excepción de su propia energía. En
segundo lugar, la existencia de un mercado de cambio por dinero tanto del trabajo libre como de los productos
de dicho trabajo. En tercer lugar, y como premisa de lo anterior, una profunda división del trabajo (fruto del
desarrollo de las fuerzas productivas) que crea la necesidad de un mercado para abastecer a las diferentes
ramas de la producción. En cuarto lugar, la previa acumulación de riqueza (medios de producción dinero) en
manos de una minoría la clase burguesa”.

La Constitución Política de la República en su artículo 43 dice: “Libertad de industria, comercio y trabajo. Se


reconoce la libertad de industria, de comercio y de trabajo, salvo las limitaciones que por motivos sociales o de
interés nacional impongan las leyes”.

La interpretación de la Corte de Constitucional en este sentido es la siguiente: “...El comercio, entendido como
la actividad individual o colectiva, intermediando directa o indirectamente entre productores y consumidores,
con el objeto de facilitar y promover la circulación de la riqueza, se encuentra especialmente reconocido y
protegido por el artículo 43 de la Constitución Política de la República, el cual preceptúa que el mismo puede
ejercerse libremente, salvo –reza la norma– las limitaciones que por motivos sociales o de interés nacional
impongan las leyes. Como puede apreciarse, este precepto formula una reserva en lo relativo a que sólo
mediante leyes –dictadas por el Congreso de la República– puede restringirse la actividad de comercio...”.

BIBILIOGRAFÍA

Bermudez, Fernando. Documento: Informe sobre la situación de Guatemala, agosto de 2006


Hernández M. Elsa Documento: Realidad Nacional y Trabajo Social, elaboradInvestigadora, Universidad de
San Carlos de Guatemala, Escuela de Trabajo Social, Guatemala, junio de 2015.
López Mayorga, Leonel Armando, Introducción al Estudio del Derecho II, 4a. Edición, Guatemala, 2011.
Publicación: Consideraciones sobre la situación actual de Guatemal, Grupo 4, Monseñor Oscar Julio Vian
Arzobispo Metropolitano de Santiago de Guatemala; M.A. Jorge E. de León; Procurador de los Derechos
Humanos; Reverendo César Vásquez Presidente de la Alianza Evangélica de Guatemala Dr. Carlos Alvarado
Cerezo Rector de la Universidad de San Carlos de Guatemala. Guatemla, 2014.
Revista: de Trabajo Social No. 31 Desarrollo Humano, Universidad de San Carlos de Guatemala, Escuela de
Trabajo Social, DESARROLLO HUMANO, “Instituto de Investigaciones T.S. ANGELA AYALA” Guatemala,
2012
http://www.bancomundial.org/es/country/guatemala/overview
Banco Mundial, Guatemala, Panorama General consultado, Guatemala 2017

También podría gustarte