¡VICTORIA EN LA TORMENTA!

Pastor: Andrés Álvarez

Maracay, 31 de octubre de 2021
PARTE 3
INTRODUCCIÓN: Amados en Cristo, la vida es una tormenta
en el mar, a merced de las olas y de los vientos. Donde
disfrutaras de la luz del sol por un momento y te arrojaran
contra las rocas al siguiente. Pero lo que te vuelve un hijo de
Dios, es lo que haces cuando esa tormenta llega.
Debes abrir bien los ojos y mirar dentro de esa tormenta y
gritarle a todo pulmón, has lo que quieras, porque en mi barca
va el Rey de reyes y Señor de señores y, de su mano, yo te
enfrentare. Entonces el cielo y la tierra te conocerán como el hijo
del Dios Vivo.
Amados en Cristo, tengan ustedes un hermoso y maravilloso día
lleno de grandes Bendiciones.
Oración…

DESARROLLO: Ya hemos visto como Dios prueba a Abraham,

y como Abraham pasa la prueba, y ahora veamos en esta…
Tercera y última etapa, como: DIOS BENDICE A ABRAHAM
(Génesis 22:15-19) En estos versículos del 15 al 19 de Génesis. Hay,
diría yo, y es una opinión muy particular, extremas declaraciones del
favor de Dios hacia Abraham, esta confirmación del pacto con él, excede
cualquier otra con la que haya sido bendecido.
Aquellos hombres o mujeres que estén dispuestos a separarse de
algo para Dios, Elohim, el Todo Poderoso se los compensará
con una Gracia indescriptible.
Génesis 22 15  El ángel del Señor llamó a Abraham por segunda vez desde
el cielo, 16 y le dijo: Como has hecho esto, y no me has negado a tu único
hijo, juro por mi mismo – afirma el Señor – Nueva Versión Internacional

Dios en Su indescriptible sabiduría ha guiado a Abraham durante

casi cien años a la exaltación moral, por su abnegación y la
resignación a la voluntad de Dios, y como hemos visto, en su
forma más extrema.

Ahora el Ángel del Señor afirma todas sus promesas de forma

exclusiva y con un juramento incorporado, en sus términos más
amplios. Un juramento de parte Dios es una promesa solemne de
Sí mismo con toda la firmeza de su fidelidad y verdad, para el
cumplimiento de lo prometido.
Génesis 22 17 que te Bendeciré en gran manera, y que multiplicare tu
descendencia como las estrellas del cielo y como la arena del mar.
Además, tus descendientes conquistaran las ciudades de sus enemigos.

La multitud de su semilla tiene un doble paralelo en las estrellas

del cielo y las arenas del mar. Y además deben poseer la puerta
de sus enemigos; es decir, ser dueños y gobernantes de sus
ciudades y territorios. Y como de esta historia inserta en la
Palabra de Dios, hemos, venido a aprender. ¿Cómo se aplica esta
enseñanza a nuestras vidas? Pues muy sencillo.

Donde quiera que un hijo redimido en la sangre de Cristo se

encuentre, es luz y sal, es dueño y señor de ese territorio donde
la voluntad de Dios le ha llevado. Pero, sin arrogancia he. Dios se
lo ha entregado en su mano para llevar la buena nueva de
salvación, ni más, ni menos…
Texto base: Génesis 22 18 Puesto que me has obedecido, todas las
naciones del mundo serán bendecidas por medio de tu descendencia. NVI
La gran promesa, todas las naciones del mundo serán bendecidas por
medio de tu descendencia. Se dio primero, absolutamente sin
referencia a su carácter, de pura voluntad de Dios. Antes de su
prueba definitiva.
Génesis 12: 2-3 2 Y haré de ti una nación grande, y te bendeciré,
haré famoso tu nombre y serás bendición. 3 Bendeciré a los que te
bendigan y maldeciré a los que te maldigan; ¡por medio de ti
serán bendecidas todas las familias de la tierra!

Ahora en este capítulo 22, se le confirma como el hombre de

prueba, que no solo es aceptado como justo en su proceder
exterior, sino que demostró ser realmente justo en su hombre
interior. Porque cada vez que Dios le solicitaba algo, de
inmediato Abraham cumplía en su corazón con aquello que Dios
demandaba, hacerlo realidad, era meramente un trámite:
Génesis 26 5 Por cuanto oyó Abraham mi voz, y guardo mi
precepto, mis mandamientos, mis estatutos y mis leyes.

En este verso 18, se emplea la forma reflexiva del verbo

bendecir, no para denotar énfasis, sino para dar a entender que
las naciones, al ser bendecidas por Dios, están dispuestas a serlo
y, por lo tanto, se bendicen en la simiente de Abraham.

Al escuchar esta bendición trascendente repetida en esta

ocasión de tal importancia, nos podemos dar cuenta que
Abraham realmente no vio el día de la simiente de la mujer, la
simiente de Abraham, el Hijo del Hombre.

Como lo vemos ahora nosotros con asombro, como el Unigénito

Hijo de Dios, manifestado en la posteridad por la obediencia
abnegada de un hombre común, el cual en su naturaleza
renovada y confiando en la dignidad de la promesa del
patriarcado, sobre una semilla santa, y extremadamente
competente para el desempeño digno de todas sus funciones
espirituales. Y de la más importante, ser el Cordero de Dios que
quita el pecado del mundo.

La promesa, todas las naciones del mundo serán bendecidas por medio
de tu descendencia. Sin duda señala al Mesías y la gracia de este
maravilloso evangelio. De este modo, conocemos la bondad
amorosa de Dios nuestro Salvador hacia el hombre pecador, en
el sentido de que no nos ha retenido ni siquiera a su propio Hijo,
su único.

Por este medio percibimos el amor de Cristo, en el hecho de que

él se dio a sí mismo en sacrificio por nuestros pecados.

Sin embargo, él vive y llama a los pecadores para que vengan a él

y participen de su salvación comprada con su preciosa sangre. Él
llama a su pueblo redimido a regocijarse en Él y a glorificarlo.

¿Qué entonces nosotros ofreceremos por esta salvación tan

grande? Que el amor de Cristo nos constriñe a vivir no para
nosotros mismos, sino para Aquel que murió por nosotros y
resucitó. Admirando y adorando su Gracia, dediquemos todo al
servicio, de quien dio Su vida por nuestra salvación.

Mis amados, lo que sea más querido para nosotros en la tierra,

es nuestro Isaac. Y la única manera de que encontremos paz en
algo terrenal, es dándolo por fe en manos de Dios. Que nos
desprendamos de ese Isaac, que nos esclaviza, es la premisa
principal de estos tres mensajes.
Pero permítanme aclararles algo, Abraham no estaba justificado
por su disposición a obedecer, no, no, de ninguna manera, sino
por la nobleza en la infinita obediencia que manifestó
Jesucristo al aceptar la voluntad de su Padre en el jardín del
Getsemaní; el paralelismo que hay entre la vida de Jesús y la de
Abraham no tiene comparación. Su fe recibiendo esto, confiando
en aquello, regocijándose en tal cosa, los dispuso y los hizo
capaces de tan maravillosa abnegación y deber.
Génesis 22 19 Abraham regreso al lugar donde estaban sus criados, y
juntos partieron hacia Berseba, donde Abraham se quedó a vivir.

Que maravilloso es cuando regresamos a nuestra casa

flameando la bandera de la victoria, pero no porque tuvimos fe y
obedecimos, no.

Más bien porque nos regocijamos en Cristo Jesús, en su

maravillosa bondad y confiamos plenamente toda nuestra vida al
único que tiene control sobre la vida y la muerte.

Con el versículo 19 de este capítulo 22 se puede decir que se

cierra la revelación principal de esta historia dada a la
humanidad, para lo cual el resto de este libro es solo un
complemento necesario.

Y no quisiera cerrar este mensaje sin mencionar lo siguiente. Si

reflexionamos un poco, también en este verso 19 están
implícitas las dos historias o revelaciones anteriores: la de Adán y
la de Noé.

Estas dos primeras se aplicaron directamente a toda la raza

humana; pero, esta última, se aplicó exclusivamente a Abraham
y su simiente, como el medio definitivo de una Bendición final
para toda la raza humana.

Con el pacto adámico se reveló la misericordia de Dios ofrecida a

todos los seres humanos, que aun habiéndose Adán y Eva
separado de Dios por su desobediencia, inmediatamente fue el
mismo Dios que crea una estrategia hacia la salvación, hacia la
restitución de la relación de Dios con el hombre. Y con Abraham
revela definitivamente la semilla a través de la cual las
bendiciones de la misericordia de Dios deben ser transmitidas a
todos, y delinea la etapa principal en la vida espiritual de un
hombre de Dios.

En la persona de Abraham, se desarrolla ese proceso espiritual

por el cual el alma se siente atraída por Dios. Como esa amistad
entrañable que se tiene entre amigos, entre panas.

Él escucha el llamado de Dios y llega al acto decisivo de confiar

en el Dios que él conoce, el de la misericordia y la verdad; sobre
la base de qué este acto se le considera justo. Luego se levanta a
los sucesivos actos de caminar con Dios, hacer convenio con él,
comulgar e interceder por otros con él, y finalmente no retener
nada de lo que tiene o aprecia.

De todo esto, mis amados, discernimos ciertas características

primarias y esenciales del hombre que se salva a través de la
aceptación de la misericordia de Dios, que se le proclama en un
evangelio primigenio.
Fe férrea en Dios: Génesis 15 6 Abram creyó al Señor, y el
Señor lo reconoció como justo. RV
Obediencia ciega a Dios: Génesis 17 23 Entonces tomo Abraham a
Ismael su hijo, y a todos los siervos nacidos en su casa, y a todos
los comprados por su dinero, a todo varón entre los domésticos de
la casa de Abraham, y circuncido la carne del prepucio de ellos en
aquel mismo día, como dios le había dicho, y… RV

Amistad leal con Dios: Génesis 18 8 Tomo también mantequilla y

leche, y el becerro que había preparado, y lo puso delante de ellos;
y él se estuvo con ellos debajo del árbol, y comieron.
17
Y Jehová dijo: ¿Encubriré yo a Abraham lo que voy a hacer, 18
habiendo de ser Abraham una nación grande y fuerte, y habiendo
de ser benditas en el todas las naciones de la tierra? RV

Pregunto mis amados, y en esto quiero ser enfático y llamarlos a

la reflexión, poniendo nuestra mano en el corazón, miremos
hacia dentro de nosotros y hagamos esta pregunta:
¿Podemos nosotros afirmar que tenemos estas tres cualidades,
sin duda alguna, podemos?
Estos son los tres grandes puntos de inflexión de la vida de un
creyente, de la vida del regreso del alma. Se basan en el llamado
efectivo de Dios:
Génesis 12 1 El Señor le dijo a Abram: Deja tu tierra, tus
parientes y la casa de tu padre, y vete a la tierra que te mostraré.
NVI

Y culminan en una resignación de obediencia sin reservas hacia

Dios en:
Génesis 22 10 Entonces Abraham extendió su mano y tomó el
cuchillo para sacrificar a su hijo.
Y a nuestra vista y análisis, nos parece que, con una facilidad de
sujeción maravillosa, indescriptible, que hace que este registro
histórico de la biografía espiritual de un hombre común, describa
un modelo legítimo y extremadamente responsable del alma
individual e inmortal de Abraham, que no miró hacia los lados,
más bien caminó la senda trazada por Dios directo a su
redención. Dándole pasó indiscutiblemente a la simiente de
Salvación.

La semilla que amenazó con lastimar la cabeza de la serpiente,

en el Edén, toma vida, y es aquí la simiente que se promete
bendecir a todas las familias de la tierra.

La triple individualidad en la esencia del único Espíritu eterno,

está marcada en los tres hombres que visitaron al patriarca.

Y es precisamente de allí que se deriva su interés personal y

práctico en la salvación del hombre, en general. Cuando de
forma insistente abogó por Sodoma y Gomorra. Aunque, en esta
oportunidad, no aparentaba ser lo más apropiado.

Mientras tanto, contemporáneos con Abraham se verán

hombres como Melkizedec y Abimelek que viven bajo el pacto
de Noé, que no fue abrogado por el de Abraham.

Más bien, fue ayudado por las magníficas circunstancias en las

que Abraham debió demostrar su total y radical dependencia del
Único Dios Vivo.

CONCLUSIÓN: Dios nos ha ofrecido un nuevo comienzo, no

rechaces su llamado. Nunca podrás escapar de Él. Él está en
todo. Dios nos hará justicia. Cristo ya viene, Cristo ya viene,
Cristo ya viene…
Müller escribió en una ocasión: Aquí está el gran secreto del
éxito ministerial:
Trabaja con todas tus fuerzas; pero no confíes en lo más
mínimo en tu trabajo, confía en Dios.
Ora con todas tus fuerzas por la bendición de Dios; pero
trabaja, al mismo tiempo, con toda diligencia, con toda
paciencia, con toda perseverancia. Ora entonces, y trabaja.
Trabaja y ora… Y hazlo así todos los días de tu vida…
Para Müller, las personas debían apoyar la obra del Señor por
deleite y no por obligación.
La bendición vendrá a nuestras vidas cuando seamos sinceros
con Dios. La necesidad más grande de nuestras vidas es la
Unción y la Gracia de Dios, sin ellas nos empobrecemos, y nos
esclavizamos espiritualmente.

El pastor Dante Gebel en una oportunidad expuso un mensaje

que lleva por título Esto también pasará y es muy cierto,
Siempre hay un después tras los valles de la fe. Pero si de algo
debemos estar seguros, es que Dios jamás va a dejar sin
respuesta el sufrimiento de uno de sus hijos. Y sobre todo
cuando pasas las pruebas confiando, con gozo y paz, sin
quejarte, sin renegar. Al contrario, más bien, Glorificando a Dios,
dándole toda la honra y honor.
Entonces Dios te Bendice sobre manera, fíjense que Abraham
recibe muchas Bendiciones por su fe obediente.
Ahora, podría surgir la pregunta: ¿Abraham obedece a Dios
porque quería complacerlo?
No de ninguna manera, el obedece a Dios porque lo amaba, lo
respetaba.
Hay momentos dolorosos en la vida, que nos acercan tanto a
Dios, que a la distancia, una vez pasada la prueba, nos damos
cuenta que ha sido el momento más hermoso, el momento
donde más cerca y unidos a Dios hemos estado.
Porque la intimidad con Dios ha sido tal que no queremos
perderla. Esos, momentos de angustia y sufrimiento nos hacen
crecer tan profundamente en el Señor, que nos hacen ser uno
con Dios indiscutiblemente.

YAHVE YIR’E le dio a los personajes que hemos mencionado

en esta historia, Abraham, Job, George Müller e Italia Páez la
fortaleza, la fe, y la paz que ellos necesitaban en medio de la
adversidad, en medio de la tormenta.
Dios proveerá para Sí el cordero para el holocausto.
¡Y Él hará lo mismo por ti! ¡Y por mí!
¿Qué principios podemos aprender de este pasaje? Que como
Abraham, debemos de confiar que Dios va delante de nosotros
para cumplir su voluntad en nuestras vidas. Dios está contigo en
las buenas y en las malas.
Dios puede mandarnos pruebas muy diferentes a las de
Abraham, pero nuestra reacción debe de ser siempre de confiar
y obedecer a Dios. Porque El Señor que nos Prueba es El Señor
que Provee.
Dios ve lo que necesitas, y tiene el poder de proveerlo…
Siempre…
La historia de Abraham es una prueba de lo que puede hacer un
simple hombre por amor a Dios. ¡Y como Bendice Dios esa
Devoción! Y además vemos como este incidente es una
representación viva de cuanto más hará Dios como expresión
de su amor por ti.
A Abraham se le pide que sacrificara a su hijo; pero realmente
esa no era la intensión de Dios. Él quería que Abraham muriera
definitivamente a este mundo.
Pero cuando llegó el momento para que Dios, nuestro padre
celestial, sacrificara a Su propio Hijo, Jesucristo, esta no era
simplemente una muerte física. Esta era una Muerte que lograría
la redención de todos los pecadores del mundo.
Cuando la mano de Dios estaba extendida sobre el Calvario, no
hubo nadie que diera voces desde el cielo y dijera:
No extiendas tu mano sobre el muchacho, ni le hagas nada.
Cuando Dios ofrece Su sacrificio, la mano que estaba suspendida
sobre Cristo, ¡cayó! Jesús murió. Pero por medio de esa muerte,
Dios salva a todos aquellos que confíen en el sacrificio de
Jesucristo.
Como habrán visto, la historia de Abraham e Isaac Es una
historia de fe… De obediencia. Es el relato histórico que sigue
cautivando los corazones del mundo. Es la bella historia del amor
de un padre por su hijo.
Podríamos comparar esta historia al boceto a lápiz de un gran
pintor, que tiene en mente, una obra maestra. El Boceto, en sí, es
perfecto, por su propio mérito.
Pero, la pintura terminada sobrepasa al boceto original del
pintor. La historia de Abraham e Isaac es el boceto. La historia
de la muerte de Jesús en la cruz es la obra maestra de la
Salvación… la obra cumbre de Dios.

LLAMAMIENTO: Amado amigo, no puedo concluir este mensaje de hoy

sin hacer la siguiente pregunta y posterior llamado: ¿Porque Jesús de
Nazaret sacrifico su vida por ti? Juan 3:16 nos dice perfectamente
la razón: Porque de tal manera amó Dios al mundo, que dio a su
Hijo unigénito, para que todo aquel que en El cree, no se pierda,
mas tenga vida eterna. Amado amigo, este verbo creer inserto en
este texto está en su presente de indicativo cree, lo que quiere decir que
ésta afirmación se aplica en el momento del habla. O sea en este preciso
momento para ti estimado amigo y para mí. Y esto significa, que esta es la
oportunidad perfecta de oír el llamado del Rey de reyes. En presente…

Apocalipsis 3:20 He aquí, yo estoy a la puerta y llamo; si

alguno oye mi voz y abre la puerta, entraré a él, y cenaré con él y
él conmigo. Amigo, Cristo te está llamando, esta es tu oportunidad de
Salvación. ¿Quién aquí conoce el futuro, quien puede decir con toda
certeza lo que le va a acontecer al salir de acá? Entonces, esta podría ser
tu última oportunidad, de decirle si, a Jesús.
EL señor Jesucristo se ha presentado a la puerta de tu corazón y llama,
abre la puerta, que Jesucristo quiere entrar y cenar contigo. No rechaces
la invitación que él te está haciendo. Esa inquietud o exaltación que estas
sintiendo en este momento, en tu pecho, es el Espíritu Santo, inquietando
tu corazón…
¿Hay alguien que desee recibir a Cristo Jesús como su único y suficiente
Salvador? ¿Hay algún Valiente, que se apropie del reino de los cielos esta
mañana?
Si hay alguien que levante su mano en señal de aceptación…
Romanos 3:23 Por cuanto todos pecaron, están destituidos de
la gloria de Dios. Si tú no has hecho tu decisión por Cristo, si no te has
arrepentido de tus pecados y no has entregado tu vida al señor Jesucristo.
La oportunidad de oro está frente a ti. Tú, estas aquí porque Dios te trajo,
tal vez utilizó a algún hermano, amigo o vecino para que te invitaran. Pero
detrás está EL GRAN YO SOY brindándote esta maravillosa oportunidad
de Salvación.
Juan 1:12 Más a todos los que le recibieron, a los que creen en su
nombre, les dio el derecho de ser hechos hijos de Dios. Solamente
hay un camino y es Jesucristo. Abraham obedeció al Rey de reyes. Nunca
le defraudó. Amigo, Cristo te ama, está allí a tu lado, esperando tu
respuesta, no importa cual haya sido tu falta, Cristo está allí para
limpiarte. No le defraudes.
Isaías 1:18 Venid ahora, y razonemos – dice el Señor - aunque
vuestros pecados sean como la grana, como la nieve serán
emblanquecidos; aunque sean rojos como el carmesí,
como blanca lana quedarán. Cristo es el único que puede cambiar una
vida triste y vacía; Por una vida llena de gracia y de seguridad en Cristo
Jesús.
2 Corintios 5:17 De modo que si alguno está en Cristo, nueva
criatura es; las cosas viejas pasaron; he aquí todas son hechas
nuevas. Tu vida dará un giro de 360º, cambiará diametralmente
para bien ¿Deseas aceptar a Cristo Jesús como tu Señor y Salvador? ¿Le
dices si a Jesús? Si tu respuesta es Sí, te invito a realizar esta oración
conmigo.
ORACIÓN DE FE: Señor Jesús te reconozco como mi único y
suficiente Salvador. Te pido perdón por mis pecados. Inscribe mi
nombre en el Libro de la Vida y guíame cada día por el camino del bien,
toma control de cada área de mí vida y ayúdame a serte fiel. Pon en mí
un corazón nuevo, renovado en Cristo Jesús. Amén.

ORACIÓN POR LOS CONVERTIDOS: Señor mi Dios te doy las

gracias por haber tocado los corazones de estos hombres y mujeres
valientes, que han reconocido públicamente que son pecadores y que se
arrepienten de todo sus pecados. Te pido que les restaures, tu palabra
dice que el que esconde su pecado no prosperará, pero el que lo confiesa
hallará misericordia, y ellos la han hallado en tu único hijo, tu amado
Jesús de Nazaret. Y así como hay gozo en los cielos por un pecador que
se arrepiente, haz que en sus corazones halla paz e inmenso gozo en
Cristo Jesús. Amén.
Oración: Señor hoy vengo delante de ti para decirte que te
amo y quiero que transformes mi vida, hazme digno de ser
llamado tu hijo. Amado Padre quiero ser uno contigo y
reflejar tu carácter, permíteme y prepárame para ser luz y
sal en todos los lugares donde me envíes. Hoy me acerco a
ti para amarte más, conocerte mejor y entregarme por
completo a ti sin reservas.
Mis amados Dios les Bendiga Rica y Maravillosamente…
FIN TERCERA PARTE…