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BIBLIOGRAFÍA
Fernández Chrislieb, F., & García Zambrano, A. (2006). Territorialidad y paisaje en el altepetl del siglo XVI. México:
Fondo de Cultura Económica: Instituto de Geografía de la Universidad Nacional Autónomo de México.
SINTESÍS
El segundo capítulo titulado La policía de los indios y la urbanización del Altepetl menciona las
consideraciones, métodos y lineamientos u ordenanzas para la creación de asentamientos urbanos en
Mesoamérica después de la conquista española, así como la percepción de los pobladores hacía ellas.
OPINIÓN CRÍTICA
Como primer momento en el texto se encuentra la definición de “policía humana”, dicho término es un
fundamento teórico de los colonizadores españoles para confinar en núcleos urbanos a las poblaciones
rurales y dispersas de los antiguos altepeme, ya que para los colonizadores las poblaciones indígenas no
guardaban ningún orden territorial, no tenían conocimiento de vida en sociedad y en política. La creación
de estos núcleos facilitaba su conversión al cristianismo, su control, la organización de su trabajo y la
recolección de su tributo. Dentro del contexto encontramos textos que hablan sobre la importancia de la
evangelización: Los religiosos (franciscanos, dominicos y agustinos) eran de importancia capital para la
justificación ideológica de la conquista, pues en el contexto del pensamiento cristiano ésta sólo era
aceptable si aducía como fin último la conversión de los paganos. Estos realizaron su labor con el apoyo
de los encomenderos y, sobre todo, de los señoríos nativos con los que se formaron alianzas, de los
cuales dependieron del tributo para su sustento. (Escalante Gonzalbo, y otros, 2008, págs. 124-126)
Citando el siguiente texto: “En vísperas de la conquista española, el valle de México vivía una etapa de
florecimiento formidable. Había muchas ciudades con calles, canales y plazas de mercado… Los nahuas
usaban el término “altépetl” (cerro de agua) para referirse a la ciudad, con su población y sus tierras. Cada
“altépetl” era dirigido por un tlatoani o rey, quien era auxiliado por una nutrida burocracia de jueces,
recaudadores y otros administradores. (Escalante Gonzalbo, y otros, 2008, págs. 92-94); entiendo que
con la llegada de los españoles el mundo mesoamericano vivió cambios radicales pero también hubo
permanencias y continuidades, ya que al construir un cuerpo documental formado por reglamentos,
ordenanzas y disposiciones legales de cómo debía aplicarse la vida en polis, la práctica estuvo dada por
la arquitectura y el ordenamiento plasmado en el territorio por lo que a pesar de la implementación de
esta vida en política, las comunidades indígenas seguían viendo en ese mismo pueblo la traza de
ortogonal un altépetl formado de calpultin que guardaba aún los ritmos mesoamericanos y el paisaje
sagrado que los identificaba.
BIBLIOGRAFÍA
Escalante Gonzalbo, P., Garcia Martinez, B., Jauregui, L., Zoraida Vazquez, J., Speckman Guerra, E., Garciadiego, J.,
& Aboites Aguilar, L. (2008). Historia mínima de México Ilustrada (Vol. 1). Distrito Federal, Distrito Federal,
Distrito Federal: Secretaría de educación del gobierno del Distrito Federal.
Fernández Chrislieb, F., & García Zambrano, A. (2006). Territorialidad y paisaje en el altepetl del siglo XVI. México:
Fondo de Cultura Económica: Instituto de Geografía de la Universidad Nacional Autónomo de México.