“EL MUERTO A LA SEPULTURA Y EL VIVO A LA TRAVESURA” CALAVERA A CARLOS FUENTES AUTORA: AMALIA MARGARITA VELIS- MEXICANA RESIDENTE EN CORDOBA La Huesuda complacida, nos muestra todos los dientes, pues yace en el camposanto el escritor Carlos Fuentes. ¿Cómo hizo la Tilica Pa ́meterlo en el costal? Muy sencillo, la tramposa, Se hizo la intelectual. El ilustre mexicano, sumergido en su escritura, ignoró que la Catrina lo echaba a la sepultura. “Tú que hablas de los campos, De los indios, de pueblitos... ¡Escríbeme una novela Pa ́que lean los muertitos!” Carlos Fuentes, sorprendido, apeló a lo “coloquial” le narró algunos relatos de utópica realidad. Le pidió a la gran señora del luto y la obscuridad que en nombre de la cultura le tuviera caridad. La Muerte, colmillo duro, ni se inmutó con la treta: “Carlos mío, no te aferres, aunque seas buen poeta”. La Parca ya estaba inquieta con el “rejego” escritor y sabiendo de su historia lo nombró su embajador. “Ahora sí no te me niegues, no te pondrás reticente, pues te gustará tu espacio: La región más transparente”. Animado el dramaturgo dejó a México de duelo, y con la Calaca toma cafecito con buñuelo.