Documentos de Académico
Documentos de Profesional
Documentos de Cultura
El Modernismo
El Modernismo
El Modernismo
[I]
El MODERNISMO es un fenómeno multifacético, es decir, muestra
muchas caras de sí, muchas diferencias entre sus componentes. Además no es
un fenómeno exclusivamente cultural.
Tampoco es una escuela (como el Impresionismo, el Surrealismo...), esto
es, no hay manifiestos ni pronunciamientos teóricos o doctrinales.
Podemos afirmar que el Modernismo es un estilo de época, y como tal
afecta a la vida social, la literatura, la política, la religión...
1
de la acción literaria, de la escritura: en el plano temático (los asuntos a tratar),
el plano léxico (las palabras a utilizar), en el plano funcional (las formas, los
modos). Por lo último, dislocar los anquilosados recursos antiguos, en prosa y
en poesía, tal cual comenta Darío: libertad, lo bello sobre lo normativo, color,
vida, aire, flexibilidad...
ANTES:
CABE APUNTAR DOS DATOS IMPORTANTISIMOS EN LO QUE SE REFIERE A LAS
FECHAS, aunque sean extraños esos datos a la cultura, al estricto movimiento
modernista, pero (repito) son esenciales:
1) Hay varios intentos abolicionistas desde el año 1807 hasta la
promulgación definitiva del final de la esclavitud en el año 1886.
Recordemos, 1872, Puerto Rico, con 31.000 esclavos; 1879, Cuba; 1883
liberación de 40.00 esclavos y, por fin, 7 de octubre de 1886 final.
2) Desde la invasión de Napoleón en los años 1808-1814, la rebelión de los
criollos en América se precipita hasta la batalla final. Se consuma la
Independencia de los territorios de la América del Sur (en primer grado) con
la batalla de Ayacucho, en Perú, 9 de diciembre de 1824. A ello seguirá, 74
años después, el final definitivo del Imperio español: independencia de Cuba
(cuyo líder ideológico fue José Martí), Puerto Rico y Filipinas en el año 1898.
Cabe apuntar entonces que el movimiento cultural (literario) más
importante de la América Hispana y del Sur del continente, el Modernismo,
está vivamente enmarcado entre esas dos fuerzas:
a) La reconstrucción y el reordenamiento, con el reconocimiento propio, el
proceso de identificación propia como americanos, de eso que se llamó
2
América después del descubrimiento, conquista y colonización española y
portuguesa. O lo que es lo mismo, el principio del "vaciado" del periodo
colonial que fue de octubre del año 1492 a diciembre de1824, 332 años de
confinamiento, de sometimiento, cual los criollos adujeron, ahora se da la
vuelta en pos del "llenado": lo antes de 1492 como materia del ser y ser en los
márgenes de la colonia, ser para el futuro (por ejemplo, Sarmiento, Facundo.
Civilización y barbarie, 1842).
b) La manifestación, con todo su esplendor, de la “negritud” en América.
Esto es, la constatación, hasta entonces excluida, tapada, prohibida,
esclavizada, de un signo capital (como en la historia de América se aprecia),
de una de las vías más importantes de la “diferencia” que es lo negro en
América. Y ello afecta a la América toda (norte y sur) como sabemos. Lo cual
nos da a entender que la dicha “diferencia" se manifiesta en dos vías:
1) La diferencia del menos 1492 y 2) la diferencia de los negros esclavos
que fueron llevados a América. Recordemos que ese proceso va de la
incursión del portugués Joaõ Fernandez el año 1445 en el Cabo Bojador hasta
la fecha vista de 1886. Eso quiere decir que los negros recuperan la voz y que
la manifiestan, la hacen pública, ya no dentro y confinada en su grupo, en los
sótanos y mazmorras en las que estaban encerrados, sino en la plaza, en la
calle, en los templos... Y uno de los fundamentos de los negros no es solo
manifestar su mundo, sus certidumbres (las certidumbres religiosas,
espirituales, metafísicas, ontológicas, circunstanciales, vitales...) sino imitar,
remedar la voz del amo. Así se exponen, con el ritmo propio, con sus
capacidades. De donde (para el caso hispano) idioma de imposición por
esclavitud (castellano) y los rudimentos no olvidados, repetidos en el grupo:
danza, tambores, movimientos, sonidos, dioses lejanos... ¿Resultado?
Recuerden: bolero, salsa...; o el Blues (literalmente, ‘melancolía’, ‘tristeza’),
el Jazz...
Las dos cosas anotadas son primordiales, porque tanto la Independencia
como la liberación de los esclavos apuntan a una cosa: la contravención, el
3
rechazo, la impugnación del “amo”. Y el Modernismo (en lo que a la literatura
se refiere) es exactamente eso: rechazo a la centralidad, al peso colonial de la
tradición, rechazo a la imposición del canon.
Entonces, recapitulamos:
El Modernismo es una revolución ideológica y artística que alcanza al siglo
XX. Pero no hemos definido, hasta ahora, al Modernismo.
Sea:
[II]
¿QUÉ ES EL MODERNISMO?
Miguel de Unamuno dijo que el Modernismo era cosas diversas y hasta
opuestas entre sí .
«[No sé] que es eso de los modernistas y el Modernismo, pues llaman así a
cosas tan diversas y hasta opuestas entre sí que no hay modo de reducirlas a
una común categoría» [1908].
Iván A. Schulman, en E1 modernismo hispanoamericano, Buenos Aires,
Centro Editor de America Latina (Enciclopedia Literaria, 48), 1969, p.8,
explica el despiste de Unamuno:
«[Unamuno] no explora el problema lo suficiente como para descubrir la
unidad y la armonía encerradas en la diversidad y la antítesis del
Modernismo».
Expliquemos, pues:
"Diversidad" = Variedad, desemejanza, diferencia (RAE).
"Antítesis" = Oposición o contrariedad de dos juicios o afirmaciones
(RAE).
Eso nos lleva a considerar
4
II.1.- DOS ESCUELAS.
UNA, la más tradicional, la considerada «escuela literaria», id est, la tenida
tradicionalmente como la escuela que representa al Modernismo.
Es una escuela limitadora (cual propondría Unamuno que así fuera), para
quien es lo mismo Azu1 (1888) que Prosas profanas (1896).
CARACTERÍSTICAS:
exotismo, preciosismo, decadentismo.
ESPECIFICACIONES:
1.- la elaboración de la forma,
2.- la búsqueda de nuevos metros y nuevos ritmos;
3.- el amor a la elegancia;
4.-guerra al prosaísmo de léxico y de intención;
5.- exotismo del paisaje;
6.- el juego de la fantasía;
7.- el cultivo de un arte desinteresado;
8.- la exhibición y complacencia sensual.
5
6. el arte como refugio y como protesta ante los oprobios histórico-
sociales;
7. la lucha contra la marginación del escritor;
8. la reflexión sobre los enigmas existenciales y ontológicos del hombre.
(José Olivio Jiménez en Antología crítica de la poesía modernista
hispanoamericana, Madrid, Hiperión, 1985, p.20.)
6
II.2. DOS ETAPAS.
a) Preciosista, caracterizada por la destrucción y alejamiento de lo
americano (Rubén Darío, Herrera y Reissig [Uruguay, 1875-1910], Casal,
Rodó). También por la obsesión por París.
b) Mundonovista, caracterizada por lo americano (en los paisajes, los tipos,
los problemas continentales). Si bien es cierto que algunos poetas no
abandonaron y practicaron siempre (por compromiso) esta adscripción,
también lo es que el primer aspecto visto (preciosista) es casi definitivo y
excluyente en algunos de ellos. Ahora bien, cabe considerar el traslado de
posiciones en algunos casos, por ejemplo, el paso hacia atrás, hacia América
que da Darío en su momento, o el paso hacia atrás, hacia Argentina que
Lugones. De los primeros (América) ha de nombrarse a Martí
(fundamentalmente), o a José Santos Chocano (y no tan fundamentalmente
como Martí, aunque...). En Martí, América y el porvenir; en Chocano, la
historia, la heroicidad, la patria, el paisaje... Uno esencial, otro...
7
«[E1 Modernismo] es la forma hispánica de la crisis universal de las letras y
del espíritu que inicia hacia 1885 [1882] la disolución del siglo XIX y que se
habría de manifestar en el arte, en la ciencia, en la religión, en la política y
gradualmente en los demás aspectos de la vida entera, en todos los caracteres,
por lo tanto, de un hondo cambio histórico».
8
En el año 1899, José Enrique Rodó (Uruguay, 1871–1917) declaró:
«Yo soy un modernista también; yo pertenezco con toda mi alma a la gran
reacción que da carácter y sentido a la evolución del pensamiento en las
postrimerías de este siglo; a la reacción que, partiendo del naturalismo literario y
del positivismo filosófico, los conduce, sin desvirtuarlos en lo que tienen de
fecundos, a disolverse en concepciones mas altas» [citado por Schulman, p.13].
III.
9
Alcanza a todos los escritores este convencimiento: Darío, poeta escapista y
amanerado, es más que eso: ser profundo, alma pensante, hombre que siente y
sufre, como los otros modernistas. Dijimos que el Modernismo señala obras con
contradicciones internas entre sí, con cambios de posición respecto al arte entre
uno y otro autor, o incluso entre los autores mismos a lo largo del tiempo. Pero
lo que no se puede obviar es la expresión preciosista o exacta, el vigor, el flujo y
el reflujo de la crisis universal.
IV.
OPOSICIONES:
a) A la prosa chata y gris del Realismo y del Naturalismo.
b) En Martí concurre, para esa revolución dicha, la fijación en la prosa de las
figuras mas relevantes del Siglo de Oro hispánico (Santa Teresa, Cervantes,
Quevedo, Gracián, Saavedra Fajardo...), mas (a partir del año 1879) los dictados
del Simbolismo, el Parnasianismo y el Impresionismo franceses.
IV.1.- La lección martiana es esta: a la tradición hispánica se une la
renovación francesa. Eso quiere decir que los valores de la tradición de la
lengua son inmutables; los de la renovación han de ser adaptados al modo de ser
propio, teniendo en cuenta que lo que se persigue es arrasar con el estado de la
literatura a la que se ha llegado.
IV.2.- Y eso fue lo que hizo actuar a Gutiérrez Nájera, el primer escritor
americano del momento que basó su credo más en la renovación, es decir, en
componentes formales, funcionales, estéticos, y no en componentes sociales,
nacionales, de identidad o históricos, cual había sido común hasta esas fechas.
Schulman, p.19:
«En Marti los elementos franceses de su estilo están asimilados y convertidos
en procedimiento individual; en Gutiérrez Nájera estos se transparentan, de
manera directa, en giros y vocablos franceses, y en su cuentística en los
ambientes parisienses y los temas frívolos aprendidos de [los escritores
franceses de la época]».
11
IV.3.- La prosa modernista surge en Martí y Nájera. La poesía en 1882 con el
Ismaelillo de José Martí.
¿Por qué?
V.
EL ESPÍRITU DE LA ÉPOCA
Todas estas cuestiones traen como consecuencia uno de los centros del
Modernismo: la concepción del vacío. Dios ha muerto, toda capacidad de
trascendencia (que daba apoyo a la debilidad humana) ha desaparecido. Ha
muerto la eficacia de la ciencia enfatizada por el positivismo. Hombre
abandonado ante su propia suerte, solo ante el mundo y ante sí mismo. Luego,
repito VACÍO, y con VACÍO, nihilismo= del latín nihil que significa 'nada',
entonces negación de los tradicionales sentidos de la vida.
CONSECUENCIAS:
VI.
13
a) Lo que los modernistas deploran es la estrecha relación que existía entre
política y literatura (por la construcción de América, p-ej. Andrés Bello,
Sarmiento y...) en la pre-independencia, en la independencia y en la inmediata
post-independencia.
Entonces:
VII.
¿Por qué?
14
b) Por la ruptura de las vías sociales de la acomodación.
Cosa no extraña.
Ricardo Gullón habla de la realidad modernista de la mitad del siglo, entre
1880-1940, y se pregunta por si podemos fijar exactamente las
características individuales del Modernismo en atención a eso que veríamos
como universal, esto es, restrictivo del Modernismo. Dicho de otro modo,
¿son universales y fijas las realizaciones artísticas del Modernismo, como
cabe preguntarnos por las del Renacimiento? Quiero decir que lo que se
plantea Ricardo Gullón es si podemos reducir el Modernismo a su exacta
función y funcionalidad de escuela. Respuesta: no. Y el más del NO que
resulta de la pregunta convertida en respuesta es también categórico: sin
embargo, el Modernismo es, es una operación en tiempo aceptable,
computable, definible, tanto para la literatura como para la vida de los
hombres en esa época. Luego...
Es cierto que hablamos de individuos particulares, singulares en el
Modernismo, ninguno identificable, confundible con otro. Cada modernista
aporta su experiencia al Modernismo, y lo hace como experiencia cimera,
meritoria, sustancial (Martí, Casal, Herrera-Reissig, Darío, Silva...) Ahora
bien, lo que también es cierto y podemos deducir después de los análisis es
que a los modernistas los une la actitud: la relación con su tiempo, con la
fatiga de su tiempo y la respuesta a su tiempo, y a la fatiga de la literatura, por
la que luchan, con la que se comprometen. Eso puede deducirse de lo anterior
visto. Es decir, al Modernismo le ocurre lo mismo que al Renacimiento, al
Barroco, al Romanticismo. Y eso no es poco decir. Eso es lo destacado, lo que
vertebra y distingue al movimiento.
15
Otra de las características del Modernismo (y que siguen todos los
modernistas) es el rechazo a formas académicas rígidas. Ahí su entrada y su
pelea. Y por ello el Modernismo dará un paso extraordinario en pos de la
experimentación, que es una de las funciones sustanciales de las "literaturas
de frontera", y lo que explica lo que luego ocurrirá en América con los autores
modernos ya citados. Dos objetivos básicos:
a) «extender las fronteras de la expresión hispánica»
b) «enriquecer el lenguaje literario» [Schulman, p.24]
SON DOS PRINCIPIOS ESENCIALES PARA EL FUNCIONAMIENTO
DE UN SISTEMA ARTÍSTICO, PORQUE PLANTEAN SOLUCIONES
PRECISAS A LA FORMA, AL MODO DE ACTUACION EN LA LETRA.
VIII.
IX.
18
Cumple ahora hablar de las INFLUENCIAS. Por lo dicho antes, en
especial, el Simbolismo, el Parnasianismo, el Impresionismo. (También se
habla del expresionismo, aunque este movimiento —si se pone con
mayúsculas, Expresionismo, y remite a escuela— es más tardío y yo no veo
del todo la relación Modernismo-Expresionismo, si no tiene que ver ese
muestrario con la incuestionable sumisión de la literatura a las capacidades
expresivas de sus autores...). PERO, vuelvo a insistir: lo que importa del
Modernismo no es ver ahí lo que ocurrió en las etapas miméticas de la
literatura latinoamericana (hasta esa fecha, por seguir, fundamentalmente, los
cánones de la literatura central española); lo importante a considerar aquí es
que lo de afuera existe, pero la condición es que se adopte con naturalidad,
sencillez y espontaneidad. Es decir, priman las influencias «degustadas» y
«digeridas», no la belleza forzada, amanerada.
No es extraño, entonces, que el Modernismo se aprecie por semejantes
virtudes y que cuando el Modernismo se pasa de la raya (en algunos
momentos de Darío o sus seguidores), y sobre todo al final de su recorrido, el
que podemos considerar Modernismo mimético dentro de sus propias filas,
una frase se haya hecho famosa: «TUÉRCELE EL CUELLO AL CISNE».
X.
MODERNISMO Y NEOESPIRITUALISMO.
Del Positivismo toma el Modernismo el espíritu critico, reformador, la
reputación de las ideas clásicas, la reputación de las ideas absolutas
(por consagradas, universalizadas). Recuérdese: la ética es universal; el clima,
la geografía, los hombres son particulares.
19
Ricardo Gullón confirma que en la ideología del Modernismo se encuentran
elementos varios, incluso contradictorios: industrialización, positivismo
filosófico, la politización de la vida [Martí] frente al rechazo de la politización
de la vida (Casal, Herrera y Ressig, Silva...), el anarquismo ideológico y
práctico, el marxismo, el militarismo [Lugones, Chocano], la ciencia
experimental, el auge del capitalismo y la burguesía, el neoidealismo, la
Utopía...
[Vid. Direcciones del Modernismo, Madrid, Credos, 1963.]
XI.
REALIDAD, EVASIÓN Y AMERICANISMO.
Para la primera escuela crítica, el Modernismo era cisnes, pavos reales,
sátiros, ninfas, diamantes, rubíes, jaspe, orfebrería, ebanistería, cristales,
ambientes regios, ambientes exóticos, ambientes aristocráticos,
transposiciones pictóricas...
Es cierto lo que dice Schulman: ESO no es todo el Modernismo. Lo cual
quiere decir que esa realización, esa proliferación modernista no ha de tenerse
como central sino que ha de SER INTEGRADA. Y SE EXPLICA esa cuestión
de pavos, cisnes... (reitero) COMO SE EXPLICA EL BARROCO, esto es, no
hay contradicción. Esto es,
a) Lo superficial no está peleado con b) lo profundo, que ya he señalado.
20
El Modernismo sería, por tanto, un paso de má s del Barroco; como el
Barroco lo fue del Renacimiento. El Modernismo, como el Barroco, es
horizontal y vertical. Má s aú n, lo dicho responde a la misma necesidad de
PERMANENCIA, de TRASCENDENCIA, de HUIDA HACIA LUGARES
ESTABLES, SEGUROS por la fugacidad de un tiempo en crisis, de unos
valores superfluos (cual sucedió en el periodo del Barroco).
Los anhelos estéticos de los modernistas están en Paris, aparte del repaso
dicho a la tradición más incitante de los modelos hispánicos, del Siglo de Oro
a la prosa del XVIII. Pero París representa, asimismo, los ideales vedados,
Martí:
«No hay letras, que son expresión, hasta que no haya esencias que expresar
en ellas. Ni habrá literatura hispanoamericana hasta que no haya Hispano
America. Estamos en tiempos de ebullición, no de condensación; de mezcla
de elementos, de obra enérgica de elementos unidos. Están luchando las
especies por el dominio en la unidad del género.» (Nuestra América.)
Observen:
Si Hispanoamérica es una idealidad, lo que propone Martí es que esa
idealidad sea congénita, les afecta a todos los americanos. Pero eso forma
parte de la responsabilidad y del compromiso ideológicos. Y a eso lo
acompaña la literatura. Frente a España que decidió, ahora ellos deciden con
el rigor, y desde América. Esa será, por ejemplo, la gran guerra de Borges: ser
uno, si no el más, importe escritor del idioma, pero desde la lateralidad, desde
22
Argentina; porque ni en ese momento estaba dispuesto a abandonar Argentina
ni creía (como creyó Galdós) que para ser un buen escritor es necesario
trasladarse a Madrid. Y eso solo se explica por el ejercicio literario, no por ser
argentino, cubano, uruguayo o español. Eso (insisto) es lo que le concede el
valor que tiene a este movimiento.
XIII.
ESPECIFICACIONES FINALES
LAS ETAPAS:
Dos etapas en el desarrollo del Modernismo:
1) La Preciosista: temas exóticos, la antigüedad, sin compromiso con la
realidad, estética de la evasión, paisajes versallescos, objetos
privilegiados (oro, sedas, piedras preciosas...). La obra de Rubén
Darío es quien más insiste en este aspecto, aunque ya vimos la actitud
de Gutiérrez Nájera o la de Leopoldo Lugones, aunque esas
aportaciones son (por lo general) menos reconocidas al respecto, entre
otras cosas porque en Darío son reiteradas y se convierten en
exponenciales.
2) Etapa mundonovista: se vuelve la mirada a América, por los temas
sociales y políticos.
Tres ejemplos:
a) Rubén Darío, Cantos de vida y esperanza (1905).
b) José Santos Chocano (poeta, periodista y diplomático de vida
libresca que no solo fue acusado de un defalco en el Banco de
España sino que mató a un joven escritor —Edwin Elmore—,
se prodigó como amigo de dictadores y fue asesinado en un
tren. Nació en Perú en 1875 y murió en Chile en1934). Libro a
considerar al respecto (aunque no es el único): Alma América
(1906).
c) Leopoldo Lugones, Odas seculares (1910, con motivo de la
24
celebración del primer centenario de la Revolución de Mayo
argentina).
XIV.
LOS NOMBRES
25