ESCUELA SUPERIOR ADMINISTRACIÓN PÚBLICA –ESAP

RÉGIMEN Y SISTEMA POLÍTICO COLOMBIANO II

ENSAYO LECTURAS Y DOCUMENTALES

Docente: Nilce Ariza Barbosa

Estudiante: Neidy Marcela Guerrero González

CETAP Moniquira Boyacá

Cuarto Semestre
Fecha: mayo 2020
Ejercicio Final:

Con base en la comprensión de todas las lecturas realizadad y los documentales

vistos, por favor:
1. Construyan un ensayo con base en las preguntas que a Ustedes les haya surgido
durante las lecturas y los documentales.
2. Unido a lo anterior tengan en cuenta las siguientes preguntas:
*¿Cómo jóvenes ciudadanos y ciudadanas que crecen en la colombia que han
observado, cómo la reconstruirían desde la perspectiva del derecho a la Paz o la no
violencia, a la democracia y a la justicia social?
*¿Qué responsabilidades tendría el sistema educativo en la prevención de la
violencia con las actuales generaciones de niños y jóvenes?
 Ensayo

Colombia, un país lleno de culturas, etnias, rico en flora y fauna, con gente
acogedora y emprendedora, lo empaña una dura y cruel realidad que lo rodea por
años, si nos vamos a la historia y los muchos sucesos que ocurrieron, vemos una
Colombia manchada por dolor, muertes, sangre, pobreza, terrorismo e
innumerables atropellos a causa de unos pocos que buscaban y aun buscan el
bienestar económico y personal sin importar lo que tengan que hacer.

La página del paramilitarismo una de las duras realidades de nuestro país aún no
ha pasado, aunque después de tantas masacres, tanto dolor, destierros y con una
disfrazada desmovilización de las AUC en Colombia, en donde ese proceso de
verdad, justicia y reparación a tantas víctimas que ha dejado el conflicto armado,
todavía falta mucho por saber y muchos culpables por pagar en medio de unas elites
que manejan el poder en este País.

Los que sufrieron en mano propia y pasaron por los años más duros de esta
violencia siguen esperando las confesiones de sus verdugos, cuyos delitos siguen
impunes y peor aún, con beneficios.

El debate político de Colombia ha sido la relación que han sostenido el

paramilitarismo y el Estado durante años, más propiamente con la libertad que
desde un comienzo se le dio a este tipo de grupos armados, donde el mismo
gobierno beneficiaba de cierta manera la creación y el poder político y social en
cada una de las regiones.

Si nos vamos a esa época en que la violencia era el pan de cada día, la triste historia
de muchos de nuestros campesinos en donde su única opción era callar, donde les
obligaban hasta cargar a los cuerpos de sus mismos familiares para no correr con
la misma suerte que ellos, y lo peor saber que los que debían cuidarlos como lo era
las fuerzas militares estaban siendo parte de sus mismos verdugos, una fuerza
militar corrupta y cruel, dirigida además por la oligarquía de unos pocos.

La impunidad que cobija la historia de Colombia no se queda atrás, procesos de ley

incumplidos, en donde la verdad se veía truncada, mientras que la justicia y la paz
era la razón por la que las victimas esperaban algún día. La sociedad colombiana
no se puede sentir contenta cuando la realidad es otra, un gobierno que ha
comienzos negó la existencia de un conflicto armado, cuando eso era negar las
mismas víctimas.

Entonces después de tanta violencia en nuestro territorio nacional y con nuestros

campesinos nos preguntamos si era necesario la creación y promoción de estos
grupos armados? ¿Porque el gobierno permitió tantas masacres sin hacer nada?
¿Cuál era el papel del Estado con la población? ¿Qué culpa tenía la población civil
de las guerras y conflictos entre los grupos armados? Niños, madres, adultos
mayores, personas con discapacidades, agricultores y jóvenes, toda la población
civil envuelta en la tragedia, tristemente una historia que no tiene responsables, pero
si miles y miles de desaparecidos, miles y miles de víctimas que aún no tienen una
respuesta del Estado después de los supuestos procesos de paz, justicia y
reparación.

Los diferentes conflictos por los que ha atravesado la humanidad, en la época del
conflicto armado, nos hacen saber que la convivencia y la vida humana siempre se
encontrara amenazada por la guerra y la violencia, en más de una ocasión ha
servido de pretexto para dominar y exterminar (desaparecer) a los campesinos que
no tienen nada que ver en esta situación, La Historia nos brinda muchos ejemplos
de ciudadanos que se han valido de la violencia y del poder como medio para lograr
e imponer sus intereses y fines personales, campesinos a los que les devuelven sus
tierras pero que al cabo del tiempo los han asesinado por querer regresar a retomar
sus vidas, ¿todo porque? Porque el interés de unos pocos es acumular
extensidades de tierras a consta de los desplazados por la violencia. La violencia
que originan las guerras ha ido produciendo una serie de problemas culturales,
políticos, sociales, psicológicos, etc., que piden de un concepto de una verdadera y
real democracia y tolerancia cívica que parecen estar muy lejos de la realidad, no
sólo la idea de guerra está asociada a conflictos de extrema violencia y de muertes,
también podría hablarse de guerras consumistas, propagandísticas, electorales y
hasta religiosas, todas ellas con el mismo interés; lograr expandir una forma de
poder sobre todo el pueblo colombiano, con el fin de doblegarlo y gobernarlo en un
orden de represión donde los derechos a la vida y la libertad quedan totalmente
negadas o reducidas a lo que los políticos y el gobierno decidan.

Sin embargo, vemos que ese rechazo a la guerra y sus atrocidades cuenta con
personas que aún tiene una esperanza en todo el mundo. Los pueblos están
tomando conciencia de lo que significa un estado con violencia y guerra para así
poder lograr un desarrollo de la libertad ciudadana y la paz social de todo un País,
hoy en día se ha ido dando un origen a una conciencia más humanitaria sobre la
importancia y urgente necesidad de lograr derechos que busquen la paz y eviten la
guerra y la violencia.

La necesidad de llegar a realizarnos como personas verracas que quieren salir

adelante y que a pesar de su dolor lograron sobrevivir, donde todos puedan estar
un poco más tranquilos, con normas de convivencia y basados en la justicia y
reparación buscando la Paz, si tomamos en cuenta la capacidad tecnológica y
educativa de la sociedad moderna podemos generar una forma de educación
basada en principios morales y éticos de vida en sociedad. Educar para la paz es
una forma de educar en valores, la educación para la paz lleva otros valores como:
justicia, democracia, solidaridad, tolerancia, convivencia, respeto, cooperación,
autonomía, amor a la verdad… La educación en valores es un poder importantísimo
para conseguir la calidad que propone nuestro sistema educativo que quiere
erradicar la violencia desde sus aulas.
La educación en la actualidad como un proceso en la búsqueda de la paz, asume
el conflicto armado como un proceso natural en la existencia humana de Colombia.
La educación para la paz ayuda a las personas a ver críticamente la realidad
compleja, dura y real de la violencia, para así mismo poder situarse en ella y actuar
de forma humana como si a todos nos hubiera tocado ese duro proceso. Educar
para la paz es invitar a actuar en todo el ámbito escolar desde preescolar hasta
universitario, basados en componentes para la paz como lo es: la comprensión, los
derechos humanos, el mundo multicultural, el desarme, el desarrollo, el conflicto, el
poder, la democracia y la libertad.

La educación para la paz armoniza lo personal, una educación moral, responsable,

social y sensible. El pleno desarrollo de la personalidad de los alumnos es un
objetivo primordial de la educación, que tiene como única meta transmitir
conocimientos y transmitir la historia para que probablemente no se repita.

¿Entonces que buscamos? Buscar e implantar la educación para la paz como un

proceso de enseñanza donde puede ser el fruto del temor a la guerra y sus
consecuencias, la convicción y el poder social ante el llamado de la historia y el
concepto de la dignidad de todas las victimas que todavía esperan ser reconocidas,
los grandes retos educativos son aprender a ser, hacer, pensar, sentir y a convivir
en un país basado en conflictos armados y muertes, sentir esta historia como propia,
como si les hubiera tocado a cada uno de los estudiantes que buscan un mejor país.

Ahora vamos a un derecho a la Paz, un derecho que debe serle reconocido a todos,
pero más aún a aquellos seres, campesinos que vivieron en carne propia todo este
destierro y muerte de sus seres queridos. Aquellos que sobreviven en un sistema
social que no les reconoce las mínimas condiciones de vida y que no busca reparar
ningún daño, son aquellos que buscan la Paz como refugio a la violencia y a la
guerra de los que ambicionan el poder, sólo así habrá una oportunidad para la Vida
y el perdón de todos aquellos que han sufrido por causa de la violencia del conflicto
armado en nuestro bello pero injusto país.