~RECORDAR ES VIVIR~

MIGUEL ANGEL ORTIZ OLIVO

Son los últimos días de Octubre y en el ambiente se respira fervor, los campos se tiñen de naranja y
morado, las campanas recuerdan que las ánimas ya están cada vez más cerca, las personas
empiezan a colocar altares muy bellos en sus hogares, colocando pertenencias y objetos que en vida
fueron de su propiedad, las plegarias y alabados no podían faltar.
En una familia muy tradicional y conservadora, en pleno Siglo XXI todavía se escucha en el interior
de su casa, el uso del latín, un matrimonio anciano, unos hijos y nietos que se reúnen a las 8:00pm
siendo el nieto mayor quien canta:
-Kyrie Eleison -kyrie Eleison—respondían los demás.
Sancta Maria y todos cantaban: “Ora pro nobis”
Sancta Dei Genetrix…”ora pro nobis”
Meter prissima ... ”Ora pro nobis”
Mater inviolata… ….”ora pro nobis”
Mater intermerata… “Ora pro nobis” ( FUNCIÓN POETICA)
Al terminar el rosario, la abuelita exclamó con voz triste:
-“¡Ay hermanos, cuanto los extraño!” (FUNCIÓN EMOTIVA)
Posteriormente todos pasaron al comedor para la cena y dormir, al día siguiente, 31 de Octubre,
vísperas de todos los Santos, se dedicaron a realizar los dulces típicos de la fecha, todo era trabajo y
mandados. En cualquier casa podía escucharse frases como:
- Ve a la tienda por azúcar.
- Acompaña a tu padre a cortar leña.
- Ve y muévele a la cazuela de mole. Etc…. (FUNCIÓN APELATIVA)
Y al llegar la media noche los copales con incienso inundan la sala con su aroma mientras se
escucha cantar a una sola voz:
“Salgan, salgan, salgan,
Ánimas de penas,
Que el rosario Santo,
Rompe sus cadenas”
(FUNCIÓN APELATIVA)

Y se escucha el repique de campanas nuevamente, porque según la tradición popular, las almas ya
van llegando a sus casas
El rezo del Réquiem no puede faltar en estas fechas.
El día uno y dos se termina de colocar la ofrenda del altar y el 2 por la mañana acuden los primeros
fieles ataviados de luto riguroso y con velo las mujeres al Campo Santo a escuchar la primera Misa
por las ánimas en la capilla ardiente posteriormente pasan a las tumbas para colocar las flores,
coronas, veladoras y rezar nuevamente:
- Requien aeternam donae is Domine,
- Et lux perpetua lucet eis
- Requiescan in pace
- Amén.
Con lágrimas en los ojos empieza la abuelita les dice a sus hijos y nietos:
- Vamos a cantar una alabanza y después que Toño le cante una de Pedro Infante a su
bisabuelo con la guitarra. (FUNCIÓN APELATIVA)
“Señor San Jerónimo
De Dios fuiste enviado,
Para librar las almas
Que están en pecado

Almas pues, a Dios,

A Dios pediremos,
Que les dé el descanso
Por los siglos eternos.”

(FUNCIÓN POETICA)

Mientras tanto, los demás hacían segunda voz y al recordar a sus difuntos también empezaban a
llorar. (FUNCIÓN EMOTIVA) – al terminar de entonar la alabanza, Toño pregunta a la abuela.
- ¿Cual quiere que cante?
- Canta la de “No volveré” le gustaba mucho. (FUNCIÓN APELATIVA)
- Ok, ahí va:
“Cuando lejos me encuentre de ti
Cuando quieras que yo este contigo
No hallaras un recuerdo de mi
Ni tendrás más amores conmigo.

Y te juro que no volveré

Aunque me haga pedazos la vida
Si una ves con locura te ame
Ya de mi alma estarás despedida.

No volveré
Te lo juro por Dios que me mira
Te lo digo llorando de rabia
No volveré.
 No parare
Hasta ver que mi llanto a formado
Un arrollo de olvido anegado
Donde yo tu recuerdo ahogare.”
(FUNCIÓN POETICA)

Después regresaron a la casa, tomaron un baño y se sentaron a la mesa a comer, compartir la

ofrenda, recordar y contar anécdotas de todos aquellos que ya no están con nosotros puesto que
como la abuela dice:
“Recordar es vivir”