Teoría Jean Jacques Rousseau (1712 – 1778) determina epistemológicamente Rousseauniana que el ser humano es bueno, pero en el contacto con la sociedad se corrompe. “El ideal del maestro es el amigo educativo, el maestro que acompaña y corrige a partir de la buena fe”. Lo anterior conlleva a un nuevo tipo de persona educada por un maestro, el mejor, el virtuoso y el justo, para que se instruya en la naturaleza, alejado de la civilización que en realidad es alienación humana, y así descubra lo que realmente es bueno o malo. La buena educación consiste en lograr un hombre racional. Por eso, siempre, el ser humano necesita de un guía o maestro. El papel de autoridad del maestro queda enfático en lograr al estudiante virtuoso.
El planteamiento de Rousseau, “La Historia de Emilio”, el niño
descubierto en su plano natural hacia el aprendizaje, podemos observar que los adultos imponemos siempre los miedos futuros y los sentimientos de precaución ante cualquier circunstancia a un educando, y no damos la oportunidad de que por sus propios méritos, sean autodidácticas, la guía que hacemos como facilitadores del conocimiento es insistente y muy precoz. Como ya sabemos la sociedad está constituida por un conjunto de personas que habitan un territorio, que hablan un mismo idioma y tienen una misma cultura, pero la infancia juega un papel importante en esto, “Desconocemos a la infancia” dice Rousseau y con las falsas ideas que de ella tenemos, cuanto más avanzamos en su conocimiento más nos desviamos”, en la institución educativa es donde se fomenta la educación, pero también en casa siendo el motor que impulsa el desarrollo de toda sociedad. Teoría Marxista En la educación Marxista se pretende eliminar el adiestramiento propiciado por la educación ideológica y manipulada por los poderosos, que hacen de los seres humanos simples máquinas. La vida colectiva y comunista es el fundamento esencial de su concepción didáctica. De este modo se justifican los medios de organización y la disciplina. Se le da sumo valor al trabajo en la propuesta pedagógica, así como gran valor a la adquisición del conocimiento y a la investigación.
Es importante mencionar que en aquellos tiempos de Marx no se realizó
nunca un análisis detenido de la escuela y la educación; sus ideas al respecto se encuentran diseminadas a lo largo de varios de sus escritos, la problemática educativa está planteada de modo ocasional, fragmentario, pero siempre en el contexto de la crítica de las relaciones sociales y de las líneas maestras de su modificación, que tiende a la formación de una sociedad nueva para un nuevo hombre; en la construcción de una nueva sociedad y este nuevo hombre, a la educación le corresponde un importante papel”. Esto quiere decir que no puede existir una buena sociedad, sino existe una buena educación. La sociedad y la educación forman el carácter de la persona. El buen funcionamiento de una institución educativa depende de aquello que la sociedad quiera conceder y admitir en el momento más importante, según sus ideales y posibilidades de acción.
Teoría de Bourdieu Bourdieu (1930 – 2002) considera vana la formación enciclopedista,
enseñar una gran cantidad de asignaturas y tratar de explicar lo más que se pueda de cada una de ellas. Los conceptos fundamentales según la teoría de Pierre Bourdieu, son el habitus, campo social y capital. Cada estudiante que ingresa al sistema educativo tiene un habitus primario formado en el seno familiar, y éste corresponde directamente a su procedencia social, por tanto la eficacia del trabajo pedagógico del docente para inculcar el habitus que se pretende enseñar, está en relación con la distancia del habitus de origen social del estudiante.
Su acción social invita a la superación de las antinomias o los dualismos
clásicos de la sociología tradicional y porque se ha identificado con la superación de los determinismos y sustancialismos, construyendo enfoques más relacionales y procesuales. Aunque retomó posturas Marxistas, la sociedad la observa bajo dos formas “Campo” y “Habitus”, que finalmente es lo que observamos en nuestros momentos, pareciera que se siguen las tradiciones antiguas y nada ha cambiado. Teoría de Illich Iván Illich (1926 – 2002) define su tesis como la teoría de la desescolarización, pues considera que la escuela, o sistema educativo formal, se halla en crisis; la escuela ha perdido credibilidad como institución educativa en sus fines y principios, en mucho por su politización paulatina pero con fuerza. Para Illich las burocracias han causado graves crisis sobre la educación al apropiarse de la imaginación social, que han fijado reglas que indican lo que es válido. Illich asume la necesidad de abandonar una escuela que aliena, por ello la desescolarización que equivaldría a una desinstitucionalización necesaria porque no ejecuta una real autonomía responsable en los estudiantes.
Considera también que las escuelas solo sirven para transmitir la
ideología de la élite en el poder y consideran a la educación como una mercancía de consumo para los estudiantes, quienes entre más años pasen en las instituciones, más posibilidades tienen de obtener oportunidades laborales, de tal manera que la certificación que reciben es la que les da valor ante la sociedad; quienes más recursos económicos tienen son los más favorecidos, quienes no pueden pagar quedan aislados de los servicios educativos. Illich propone una sociedad sin escuelas, donde los aprendizajes se adquieran y se ofrezcan libremente y haya oportunidades para ricos y pobres y se pueda formar la población a cualquier edad, pues la educación se puede adquirir en cualquier etapa de la vida, además de formar una nueva sociedad.