Conclusión: en el texto anterior podemos concluir que la sexualidad no

debe tener tabús, se le debe hablar a los jóvenes con total confianza
para que ellos se sientan seguros de llevar una educación sexual sana
y correcta.
En muchas ocasiones no se les habla de manera adecuada a nuestros
hijos de nuestras partes íntimas colocándoles sobrenombres causando
inseguridad en ellos al mencionarlas de manera correcta. Una
problemática que existe al momento que se le pregunta a una persona
de donde viene, en muchas ocasiones responden de forma fantasiosa
insinuando que algún animal los trajo entre otras. Hay muchas
menores de edad que salen embarazas a temprana edad por que no
existe un adulto que les hablen de las prevenciones que deben de
tener al momento de tener intimidad y de las diversas enfermedades
venéreas que podrían contraer al realizar dicha acción.
Hay muchos padres que no saben como abordar estos temas con sus
hijos y prefieren evitarlos, en algunas ocasiones algunos padres son
mal ejemplo de sentirnos avergonzados de dichos temas por que al
momento de preguntarles no saben que responder y tratan de evitar e
invisibilizar todo lo que tenga que ver con sexualidad. Gracias a esto a
muchos de los niños cuando se les dice en talleres que se imaginen a
sus padres teniendo relaciones, lo común es ver caras de desagrado,
horro e incomodidad y otros solo ignoran.
Por eso el ejemplo de mama y papa es muy importante, la mayoría de
creencias se instauran desde el vientre hasta los 6 años, por que en
en el transcurso de ese tiempo no sabíamos cómo actuábamos, ni
muchos menos nuestro ejemplo a seguir, por que simplemente no
teníamos conciencia de nuestros actos no sabíamos diferenciar lo
bueno de lo malo.