Breve relato sobre el determinismo

Leonardo era el primero de 12 hermanos, nacido en Corrientes por el año 1940, su infancia
fue económicamente agradable, cómo consecuencia del buen pasar de su padre Emilio, un
estanciero que poseía grandes cantidades de tierras fruto de la enfiteusis. Su madre,
Etelvina, era una mujer muy dedicada a la protección de sus 12 hijos, siempre tratando de
aligerar las cargas de trabajar en el campo y las constantes presiones de Emilio que
buscaba formar pequeños terratenientes, lograr que sus hijos tengan la capacidad para
trabajar y administrar las tierras que poseía eran su única finalidad, tal vez por ser Patrón se
olvidó de ser Padre, o tal vez nunca pudo o nunca quiso.
La infancia de Leonardo transcurrió entonces de forma particular ya que su familia tenía una
sólida posición económica, pero a diferencia de muchos amigos, el no tenía un Padre, esto
lo volvió muy dependiente de su Madre, esa dependencia fue su forma de fragmentar su
alma, sin dejar nada para si, depósito todo en su Madre de está forma creyó que podría ser
el "Hombre" que su Padre deseaba.
En Julio de 1949 Etelvina muere víctima de un cáncer de Colón, nunca diagnosticado,
consecuentemente jamás tratado, está muerte sería la que determinaría de forma total el
futuro de Leonardo, toda su infancia murió ese día, así como toda posibilidad de ser ese
"Hombre" que su padre quería. Emilio se vio abrumado por la muerte de su esposa, pero
también más determinado a ejercer su idea de paternidad, dos semanas después del
fallecimiento de Etelvina, Leonardo fue vendido al propietario de una plantación de algodón
en el norte de Corrientes, de esa forma creía que podría asegurar su futuro, eligió quedarse
con 11 pequeños, pero vender a su hijo mayor creyendo que de esa forma tendría al menos
un hijo capaz de administrar todas sus tierras, Emilio creyó que su hijo mayor tendría una
formación muy superior a la de sus otros hijos al trabajar desde pequeño en una plantación
de algodón, siendo ellos una estancia familiar clásica, su forma de organización era muy
rudimentaria en comparación con una plantación de algodón semi industrial. El
determinismo me interpela y me motiva a narrar está historia, la vida de Leonardo estuvo
marcada desde ese día, desde entonces solo sería un hombre roto, solo que aún no lo
sabía, todavía era solo un niño de 9 años, el algodón se volvió su trabajo, su casa, su
dueño y su prisión.