División Escuela de Tiro – Curso de Encargado de Armamento - Armas

La pistola Browning HP35

Generalidades

El decreto 395/75 reglamentario de la ley Nacional de Armas y Explosivos (Ley 20429), nos dice que una pistola:

Es el arma de puño de uno o dos cañones de ánima rayada,

con su recámara alineada permanentemente con el cañón.
La pistola puede ser de carga tiro a tiro,
de repetición o semiautomática.

La definición no es muy precisa y excluye varias armas que pueden encontrarse en el mercado, como la pistola
Cop de cuatro cañones fabricada por Colt, o a la vieja pistola Liberator de ánima lisa, o a cualquier otra arma de
construcción industrial, artesanal o irregular que no reúna alguna de esas condiciones, como la que puede
obtenerse utilizando un arma corta de aire comprimido de 5,5 mm, adaptándola para disparar cartuchos .22LR.
Incluso es muy habitual encontrar armas usadas para cartuchería flobert fabricas a comienzos del siglo pasado, de
pequeño calibre y cañón liso, como la de la imagen que acompaña estas líneas, tomada de un anuncio de venta en
internet. Todo esto sin olvidar la posibilidad que ofrecen las modernas impresoras 3D de fabricar armas caseras
fácilmente y con un bajisimo costo.

La pistola Browning HP35

Existen objetos que por su diseño innovador, sus características de calidad y confiabilidad, y su uso intensivo por
instituciones emblemáticas con el tiempo representan a todos los de su tipo, se convierten en “denominadores de
clase”. Tal es el caso de los fusiles fabricados por Mauser, o de los analgésicos que conocemos por su nombre
comercial de “Aspirinas”. Después de medio siglo de servicio, la pistola Browning HP35 es sinónimo de arma
policial en nuestro país.
División Escuela de Tiro – Curso de Encargado de Armamento - Armas

El diseño

Al finalizar el primer conflicto mundial, los países hicieron una evaluación de las armas empleadas y de los
resultados obtenidos. Conforme con esas conclusiones, en 923 el Ministerio de Guerra Francés llama a una
licitación para proveer a sus Fuerzas Armadas de una nueva arma reglamentaria que debía reunir ciertas
condiciones: tener bajo peso, gran capacidad de almacenamiento, un calibre con un buen poder de detención y con
mecanismos de seguro confiables. La Fabrique Nationale D’ Armees De Guerre Societe Anonyme le encarga a
John Moses Browning el diseño de un arma de esas características, dando como resultado una pistola calibre 9
milímetros parabellum, el cartucho diseñado por George Luger a principios de siglo. Browning patenta su diseño en
junio 1923 en los EE.UU, bajo el número 1.618.510, pero fallece unos meses mas tarde dejando incompleto su
trabajo. El Jefe de Diseño de FN (y yerno de Browning) Dieudonne Saive, mas conocido en el mundo de las armas
por sus diseños del SAFN 49 y el FAL, es quien retoma el proyecto. En líneas generales, la nueva pistola
continuaba la filosofía de la 1911, aunque como expresó su creador, en ella pudo hacer todo lo que las exigencias
del ejército de los EE.UU. no le permitieron realizar en la otra. Saivé lleva a cabo algunas modificaciones
importantes sobre el modelo original: incorpora un cargador de gran capacidad al tresbolillo y reemplaza la aguja
lanzada por un martillo externo, transformando la pistola en un arma de acción simple. En el año 1935 es adoptada
por el ejército belga como Grande Puissance 35 (GP 35) y casi de inmediato es adquirida por Lituania y Estonia. Al
año siguiente nuestro país adquiere una pequeña partida destinada a los oficiales superiores de la entonces Policía
de la Capital y Francia adopta algunos modelos con aparatos de puntería ajustables, aunque no oficialmente. Entre
1937 y 1939 es declarada reglamentaria en Holanda, Dinamarca, Congo Belga, Etiopía, Indonesia, Paraguay, El
Salvador, Siria, Birmania y Venezuela. Durante la Segunda Guerra Mundial fue fabricada y utilizada por ambos
bandos. A partir de 1946 es producida nuevamente en la FM de Lieja con el nombre de Model 1946 en su modelo
civil, y High Power en la versión militar.

Jhon Moses Browning y Dieudonne Saivè

La High Power 35 en nuestro país

Hasta 1968, la Policía Federal utilizaba como armas reglamentarias revólveres calibre .38 spl y pistolas calibre
11.25. Por ODI del 10 de septiembre de ese año se establece la formación de una comisión técnica encargada de
evaluar los distintos tipos de pistolas para determinar un modelo que eventualmente reemplace al armamento en
División Escuela de Tiro – Curso de Encargado de Armamento - Armas

uso. En las pruebas se examinaron cuatro armas distintas: Colt Commander, Browning HP35, Smith and Weasson
mod. 39 y Walther P38, todas ellas en calibre 9x19 mm.

Las cuatro armas fueron sometidas a las siguientes pruebas:

1) Empuñamiento y Portación
1. Browning.
2. Colt.
3. Walther.
4. Smith & Wesson

2) Prueba de precisión:
5. Browning.
6. Walther.
7. Colt.
8. Smith & Wesson

3) Resistencia: 2.000 disparos efectuados en serie de 250 con un descanso de 10 minutos entre serie y serie.
1. Browning ( con 11 fallas).
2. Walther ( con 85 fallas).
3. Colt ( con 105 fallas).
4. Smith & Wesson ( debió retirarse del concurso por haberse roto)

4) Se mojaron las pistolas y luego se dispararon:

1. Browning y Colt ( sin fallas).
2. Walther ( tuvo dos fallas).

5) Se les hecho tierra encima y luego se las disparo:

1. Browning ( con una falla).
2. Colt (sin fallas)
3. Walther ( con cuatro fallas).

6) Se las baño con barro chirle:

1. Browning ( no funciono).
2. Colt ( con una falla).
3. Walther ( sin fallas).

7) Golpes y caídas: se sometió a cada pistola a una serie de golpes, con una maza de madera y luego de las dejó
caer 10 veces desde una altura de un metro y medio sobre piso duro. Todas las armas resistieron estas pruebas.
Posteriormente, haciendo un balance general se estableció que Browning era mejor que las demás, siendo por este
motivo adoptada. A partir de 1974, las pistolas comenzaron a fabricarse en Rosario.

Características generales del arma

El arma se divide en dos partes principales, la corredera y la armadura. En la corredera se encuentran los aparatos
de puntería, y además aloja el cañón, el muelle recuperador, la aguja percutora, la uña extractora y realiza el
acerrojado del arma. En la armadura encontramos la empuñadura con el alojamiento del cargador en su interior, la
cola del disparador y el mecanismo de disparo, incluyendo el fiador, el martillo y sus muelles tensores. La armadura
forma la base estructural del arma.
División Escuela de Tiro – Curso de Encargado de Armamento - Armas

Características Técnicas Calibre 9 MM

Longitud total del arma 197 MM

Longitud del cañón 118 MM

Longitud de la parte rayada 100 MM

Longitud de recámara 18 MM

Altura del arma (sin alza, con cargador) 127,5 MM

Ancho del arma (con cachas) 36 MM

Ancho del arma (sin cachas) 25,5 MM

Número de estrias 6
Dirección del estriado Derecha
Paso del estriado 250 MM

Peso del arma (con cargador vacio) 910 GR

División Escuela de Tiro – Curso de Encargado de Armamento - Armas

Desarme Primario

Se presiona el retén del almacén cargador para extraer el mismo. Se acciona la corredera para desalojar el
cartucho que pudiera haber en la recámara y se verifica visualmente que la misma se encuentra vacía, accionando
nuevamente la corredera para mayor seguridad.

Se lleva la corredera hasta su posición mas retrasada, bloqueándola mediante el seguro de fiador, subiéndolo para
que coincida con el rebajo practicado en la misma.

Se eleva el perno eje retén de corredera y se lo extrae mediante un leve esfuerzo deslizándolo de derecha a
izquierda.

Liberando la corredera, se la desliza hacia delante, extrayéndola.

División Escuela de Tiro – Curso de Encargado de Armamento - Armas

Se comprime el muelle recuperador de corredera con su guía a fin de liberar esta de su alojamiento en el yunque, lo
que permite retirar todo el conjunto.

Se extrae el cañón deslizándolo hacia delante y luego hacia abajo.

Componentes principales del arma

División Escuela de Tiro – Curso de Encargado de Armamento - Armas

Acerrojado

El acerrojado de la pistola HP35 es conocido como “Sistema Browning”, y se realiza por medio del encastre de los
resaltos que posee el cañón en una serie de rebajes mecanizados en la cara interna de la corredera. Al producirse
el disparo, el cañón y la corredera retroceden 5 mm unidos por efecto del retroceso, momento en el cual el cañón
bascula perdiendo ambas piezas el vínculo entre sí. Este tipo de acerrojado también se denomina “calzado” o
positivo”.

Mecanismo de disparo

El mecanismo de disparo de la pistola Browning es sumamente sencillo. Al presionar la cola del disparador, el
movimiento de cabeceo de la pieza obliga al desconector a subir. El desconector entonces empuja hacia arriba la
parte delantera del balancín, por lo que su parte trasera desciende, transmitiendo el movimiento al fiador, que al
pivotar zafa de la muesca de armar del martillo y lo libera. El martillo es empujado entonces por el muelle tensor,
que había sido comprimido al montarlo, y golpea el talón de la aguja percutora, haciendo que se desplace hacia
adelante e impacte en la cápsula iniciadora del cartucho.

Esquema dinámico
División Escuela de Tiro – Curso de Encargado de Armamento - Armas

Mecanismos de seguridad y seguros

La pistola semiautomática Browning HP35 posee dos seguros: el seguro manual y el seguro de cargador, además
un mecanismo de seguridad que conocemos como “seguro de montaje fallido”( erróneamente llamado “primer
descanso”). Veamos cada uno de ellos:

El seguro manual actúa directamente sobre el fiador, y cuando se encuentra colocado también inmoviliza la
corredera al encastrar en el rebaje mas atrasado del lateral de la misma. Vale aclarar que sólo es posible colocarlo
con el arma montada. Como ya vimos, posee una segunda función que es retener la corredera para poder proceder
al desarme, tirando de la misma hacia atrás hasta el final de su recorrido y haciéndolo encastrar en la muesca
delantera.

El seguro de cargador impide el disparo cuando aquel no se encuentra en su alojamiento, haciendo perder la
alineación del desconector con respecto al balancín. Al colocar el cargador, este empuja una pieza que vuelve a
colocarlo en posición vertical, haciendo posible el funcionamiento del mecanismo de disparo.

El “seguro de montaje fallido” no es propiamente un seguro sino un mecanismo de seguridad, por cuanto no
interrumpe el ciclo de disparo. Su función es evitar que se produzca un disparo involuntario si al montar el martillo
este se ve liberado antes de ser tomado por el fiador. Para eso, el martillo cuenta con dos muescas: la
correspondiente al diente de armar, que es donde el fiador encastra para mantenerlo montado, y la otra que es la
del “seguro de montaje fallido”, que acomodará al fiador para impedir la percusión en el caso descripto.

Cuando los componentes de un sistema se reorganizan sin alterarse y permiten una nueva función que no estaba
proyectada originalmente, se dice que adquiere una “propiedad emergente”. Como ya mencionamos, el seguro
manual sólo puede colocarse con el arma montada, pero también es posible hacerlo con el martillo retenido en la
muesca del “seguro de montaje fallido”. Esta característica permitió encontrarle una nueva prestación al sistema, ya
que brinda la posibilidad de transportar el arma en forma segura al inmovilizar la corredera e impedir que se monte
el martillo. Esta función adicional no fue planificada por el diseñador, y no se menciona en el manual del fabricante,
pero si se describe en los manuales editados por Fabricaciones Militares en nuestro país.

Para una mejor comprensión de los mecanismos, se agrega un esquema con la disposición interna del mecanismo.
División Escuela de Tiro – Curso de Encargado de Armamento - Armas

Ciclo de disparo

1 - Estando el arma montada y con un cartucho en recámara, al accionar la cola del disparador su parte delantera
desciende, obligando a subir a su parte posterior. Este movimiento hace que el desconector se eleve verticalmente
y con su extremo empuje el balancín, el cual al descender en su otro extremo se conécta con el fiador, que pivotea
y libera su diente de armar de la muesca de armar del martillo. Estos tres movimientos basculantes que se
producen en la cola del disparador, en el balancín y en el fiador, son posibles gracias a que los pernos que sujetan
las piezas también les sirven de eje.

2 - El martillo al quedar liberado se proyecta violentamente hacia delante por la acción de su muelle tensor,
golpeando contra el talón de la aguja percutora, que por efecto de la inercia es lanzada hacia delante,
comprimiendo su muelle recuperador antagónico, hasta que golpea con su punta la cápsula iniciadora del cartucho.

3 - Esta, al ser aplastada contra el yunque, produce la detonación del fulminante. Los gases a alta presión y
temperatura resultantes se transmiten a través del o los oídos hacia la cavidad interna de la vaina, provocando la
deflagración de la pólvora. El gran volumen de gases liberados generan altas presiones en todas direcciones que
serán contrarrestadas por la pared de la recámara, actuando hacia delante sobre la base de la bala y hacia atrás
sobre el espaldón.

4 - Los gases que actúan hacia delante desalojan a la bala de la vaina venciendo el certizado, e impulsándola por el
interior del cañón adquiriendo sus dos movimientos: el de traslación y el de rotación; el de traslación en dirección al
blanco por la fuerza resultante de la expansión gaseosa y el de rotación otorgado por las estrías.

5 - En sentido contrario, los gases ejercerán una fuerza igual, presionando sobre el culote de la vaina y esta sobre
el espaldón, haciendo que la corredera se desplace hacia atrás comprimiendo su muelle recuperador.

7 - Mientras esto sucede, el extractor que tenia tomada a la vaina por su garganta la arrastrara hasta que la parte
izquierda del culote choque contra el botador y salga eyectada por la ventana de expulsión. Simultáneamente el
cañón retrocederá unos 5 mm, hasta que el yunque hace tope sobre su apoyo y es obligado a bajar gracias a la
forma de su muesca. Al descender, los resaltos se desencastran de los rebajes de la cara interna de la corredera,
quedando esta liberada para continuar el retroceso, montando el martillo en su recorrido.

8 - Una vez disipada la acción de los gases, el muelle recuperador de la corredera se extiende nuevamente,
invirtiendo el movimiento para llevarla a suposición inicial. En su avance, la arista inferior del espaldón desaloja un
nuevo cartucho del almacén cargador y lo empuja en dirección a la rampa de acceso, haciéndolo subir por la misma
mientras la uña extractora lo toma por la garganta.

Precauciones de seguridad y consideraciones finales

La pistola Browning HP35 no posee seguro interno de aguja. Eso significa que si se encuentra con un cartucho en
la recámara y el arma cae desde cierta altura con su cañón en dirección al piso, puede producirse un disparo
involuntario, aún estando desmontado el martillo. El disparo en estas circunstancias se produce por el movimiento
producido por la inercia de la aguja percutora.

La pistola Browning HP35 fue sin duda un arma excelente, y el hecho de haber permanecido en servicio durante
casi 85 años así lo demuestra. En su época, pocas la podían igualar, mucho menos superar, pero en la actualidad
ya no responde a las exigencias tácticas y de seguridad. Pronto tendrá que dejar su lugar a nuevos diseños, y se
convertirá en un objeto venerado por su historia.