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Bilaam y Su Asna - Parasha 40 Balak
Bilaam y Su Asna - Parasha 40 Balak
La historia de Bilaam.
El pueblo de Israel se está abriendo camino desde Egipto y se está acercando a la Tierra
Prometida. Ellos muy educadamente solicitan el paso a través de territorio soberano a los
edomitas y luego a los amorreos, pero en ambos casos, son rechazados y luego
atacados. Sin embargo, el pueblo de Israel se defiende y gana, y luego captura el
territorio. Con Edom y el territorio amorreo sin querer en su haber, el pueblo de Israel
sigue adelante. El rey de Moab, Balak, hijo de Zippor, los ve acercarse y entra en pánico. Él
cree que sabe lo que podría funcionar... hay un hombre mágo llamado Bilaam que está en
contacto con los Elohímes... ¿tal vez podría venir y poner una maldición sobre los
israelitas? Balak envía a sus mejores personas con un fabuloso incentivo en efectivo para
ver si Bilaam estaba preparado para el desafío de la maldición. Y aquí es donde se vuelve
confuso.
Bilaam es un conocido adivino, y la brujería está prohibida por Elohím. Sin embargo,
parece confiar en lo que oye de Elohím y está preocupado por hacer lo que Elohím
dice. Elohím le dice a Bilaam que no vaya, porque la gente de Israel debe ser bendecida,
no maldecida. Así que Bilaam obedece: se niega a ir y le asegura a los hombres de Balak
que no es una cuestión de dinero.
Pero tal vez lo sea.
Debido a que Balak envía a los hombres de rango más alto con una oferta más tentadora,
y parece haber hecho el truco, porque Bilaam vuelve a consultar con Elohím, ¿estás seguro
de que no puedo ir? Entonces Elohím, por extraño que parezca, cede. Le da permiso a
Bilaam para ir, pero solo para decir lo que le dice que diga. Entonces Bilaam parte, con
permiso. Pero luego se detiene en su camino, nada menos que por el Ángel del Eterno, y
su asna se niega a ceder y explica por qué. Con palabras. Todo el incidente es altamente
irregular, lo que realmente debería ser un aviso para todos los involucrados. Si realmente
quieres saber lo que Elohím piensa acerca de este esfuerzo de ir a maldecir a Israel, está
es la respuesta: no quiere que Bilaam vaya.
Bilaam dice: "No iré entonces, si no quieres que lo haga", pero una vez más, de manera
bastante extraña y aparentemente contraria, Elohím le da permiso para proceder. ¿Que
es eso? ¿Le importa a Elohím que vaya o no?
Bilaam va y se encuentra con Balak, pero es incapaz de pronunciar una palabra negativa
sobre Israel, y en su lugar los bendice tres veces, con algunas palabras proféticas
asombrosas para comenzar.
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