Está en la página 1de 2

Guión

Narrador: Había una vez, una niña muy bonita, a quien le habían regalado una linda
caperucita roja, desde entonces le llamaban caperucita roja. (Entra caperucita leyendo un
libro)

Papá de caperucita: Caperucita podrías darle esta canasta de alimentos a tu abuelo, es


que hoy no me siento muy bien y me voy a quedar a descansar.

Caperucita: (Deja el libro) ¡Está bien ya me voy! (Caperucita se va y su padre agarra su libro
y empieza a leer)

Narrador: Caperucita roja se fue a visitar a su abuelo, (cantando), ella decide entrar en el
bosque. Allí se encuentra con alguien.

Lobo Feroz: (Así mismo) Pero a quién tenemos aquí.


(Se acerca a Caperucita) Hola niñita, ¿qué haces por aquí sola en el bosque?

Caperucita: Estoy llevando esta canasta con comida y libros para mi abuelo.
Lobo Feroz: (Aparte) Mmm… interesante, hoy podré comer y además leer. (Regresa)
Caperucita ¿qué te parece si hacemos una carrera hasta la casa de tu abuelito?

Caperucita: (Emocionada) ¡Esta bien vamos!


Lobo Feroz: Tú ve por allí y yo por aquí.
(El astuto Lobo Feroz había mandado a Caperucita al camino más largo y por esta razón, él
pudo llegar más rápido)

Lobo Feroz: (Toca la puerta afinando su voz) ¡Abuelito ya llegué!

Abuelo: Pasa, hijita pasa.


Narrador: Y de pronto el Lobo Feroz se come al abuelo y poniéndose su vestimenta se echa
en la cama y espera a Caperucita.

Narrador: Al llegar Caperucita toca la puerta y dice:


Caperucita: Abuelito, soy Caperucita roja.
Lobo Feroz: (Afinando su voz) ¡Pasa hijita, pasa!
Narrador: Caperucita entra a la casa y entonces, ella ve a alguien extraño, no reconocía a su
abuelo.
Caperucita: Abuelito, ¡Que grandes ojos tienes!
Lobo Feroz: Son para leer mejor.
Caperucita: ¡Qué gran nariz tienes!
Lobo Feroz: Son para olerte mejor.
Caperucita: Y abuelito ¡Qué gran boca tienes!
Lobo Feroz: (Sonriendo) ¡Son para comerte mejor!(Salta hacia ella)
Caperucita: ¡Auxilio!
Narrador: El Lobo Feroz se come a Caperucita y se echa en el suelo leyendo un libro, después
de su lectura se queda dormido. Pero no acaba aquí porque un valiente señor escuchó el grito
de Caperucita roja.

Cazador: (Monólogo) Llevó años, tratando de atrapar a ese lobo y no sé cuándo lo atraparé.
Un momento escucho algo. (El cazador escucha el grito de Caperucita roja)Es el grito de una
niña. (Se va)

Narrador: El cazador llega y ve a lobo feroz durmiendo y decide salvar a Caperucita Roja y
a su abuelo.

Caperucita: Muchas Gracias Señor Cazador.


Abuelo: Muchas Gracias.
Cazador: No hay problema (Se retira con el lobo)
Narrador: Y así termina la gran historia de Caperucita Roja.

También podría gustarte