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AUTOESTIMA Percepción y juicio de valor que cada uno hace

de sí mismo con relación a atributos positivos


deseados, teniendo en cuenta pensamientos y
recuerdos de los propios recursos, capacidades,
actitudes y conductas.

La imagen física y la imagen psicológica.

Conciencia que toda persona es valiosa por sí misma.

Proporciona satisfacción y seguridad personal.

Confianza en sí mismo. Mayor autonomía.

Participación activa y positiva ante la vida.

BAJA AUTOESTIMA

Menos capaz de resistir las presiones externas y decir NO.

Confía menos en sus posibilidades.

Mayor dependencia de las opiniones de los demás.

Acepta estímulos desvalorizantes, con tal de sentirse reconocido.

Dificultad de reconocer sus errores y aprender de ellos.

Adopta una actitud defensiva. Inhibición o agresión.


HETEROESTIMA Confirmación del otro

Una buena autoestima.

Total aceptación.

Señalar acciones negativas y no juicios totalizadores.

Limites definidos, claros y explicando sus causas. Cumplimiento de


las mismas.

Respeto y libertad para la acción individual dentro de los límites


definidos. Iniciativa y creatividad.

Atribución positiva.

Mantener un tono afectivo.

Escucha y atención a sus necesidades. Aceptación y confianza a


medida que crece.

Permitir expresar sus sentimientos y pensamientos de una manera


adecuada.

Estimular metas posibles a lograr.

Reforzar lo positivo y los logros delante de los demás.

Estimular la heteroestima.
APRENDIZAJE DE LAS NORMAS SOCIALES

CONDUCTA CONSECUENCIAS

RESPONSABILIDADES ESTÍMULOS

Cuidar su propio cuerpo. Afecto. Elogios.


Cuidar sus pertenencias.

Asistir a la escuela. Acompañar.


Hacer las tareas escolares. Jugar.
Disfrutar juntos.

Ayudar con las tareas de casa. Algo material.


Ordenar sus juguetes, ropa.

ERRORES
* Decir siempre... o nunca..., o sos... cuando hace algo mal.
* Retarlo, gritando o pegando, manteniendo el estímulo.
* Castigar lo que hace mal, sin reconocer lo que hace bien.
Características de los niños de seis años

Impulsivos, volubles, tendencia bipolar: risa-llanto.

Emociones ambivalentes ante los padres: amor-odio, crítica-


respeto.

Desplazamientos hacia otros adultos, ej. maestros de los modelos


vinculares con sus padres.

Deseos de investigar, conocer, saber sobre la realidad.

Etapa de adquirir normas y valores. Más obediente.

Vergüenza, pudor. Cuidado de su cuerpo. Bañarse solos.

Juegos más realistas: Armar y desarmar, construir, recortar,


pegar, dibujar, vestir y desvestir las muñecas, dramáticos,
reglados. Quieren jugar con otros y mejor al aire libre.

Gran actividad motriz. Mayor equilibrio. Conciencia de la mano


como herramienta. Mayor actividad bucal y visual.

Amplía la conciencia del espacio.

Se interesa por Dios y por la muerte.

Se forma y refuerza la autoestima.

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