La guerra espiritual profética lo lleva al siguiente nivel de la guerra espiritual al

agregar el poder de la percepción profética a los planes de batalla que Satanás

ha escondido en el reino invisible. El campo de batalla ahora está nivelado y la
victoria es una certeza. Más que otra pieza de armamento, la Guerra Espiritual
Profética te equipa con un arma de destrucción masiva contra los gobernantes,
las autoridades, los poderes de este mundo oscuro y las fuerzas espirituales del
mal en los reinos celestiales.

—RABINO ERIC WALKER

DIRECTOR EJECUTIVO, ENCENDIENDO LOS MINISTERIOS DE UNA

NACIÓN

La Guerra Espiritual Profética lleva a los creyentes a la sala de guerra del

cielo brindándoles tácticas espirituales furtivas, estrategias y revelación
bíblica sólida para usar en esta batalla invisible contra el archienemigo de
Dios: el diablo. Mi amiga líder apostólica Kathy DeGraw describe a lo largo
de las páginas de este libro herramientas poderosas y prácticas forjadas
por la Palabra de Dios para que los lectores ganen cada batalla invisible.
Ella ofrece el equipamiento, la inspiración, la impartición y la revelación
para que formes armas que prosperarán contra el enemigo antes de que
él pueda forjar armas que intenten prosperar contra ti. Este libro acusa y
alienta al pueblo de Dios a librar una guerra profética sobre su destino
profético y con Su asistencia sobrenatural para pelear victoriosamente la
buena batalla en el campo de batalla invisible.

-DR. HAKEEM COLLINS

FUNDADOR, CHAMPIONS
INTERNACIONAL;
 AUTOR, GUERRA OCULTA, EL CIELO DECLARA Y ORDENA TU
CURACIÓN

¡La apóstol Kathy DeGraw lo ha hecho esta vez! Este libro es como tener
un mapa del tesoro dado desde el cielo. Añade estrategias espirituales y
armas a tu arsenal que atravesarán el reino de las tinieblas cuando se
pongan en práctica. Mientras leía este libro, me sentí recargado,
fortalecido y valiente, ¡listo para el combate! Exponer las tinieblas y revelar
misterios es algo que esta mujer de Dios hace bien. Después de leer este
maravilloso libro, se volverá más consciente de su entorno y será más
efectivo en su caminar cristiano. La única palabra que usaría para resumir
este libro: ¡estratégico!

—APÓSTOL LUIS LÓPEZ, DD

LUIS LOPEZ MEDIOS MINISTERIOS INTERNACIONAL;

ALTAVOZ; AUTOR, EL CRISTIANO FALSO

Kathy DeGraw ha hecho un trabajo excepcional al explicar la batalla

invisible detrás de lo profético en su último libro, Guerra espiritual
profética. Ella inteligentemente revela bíblicamente que la guerra
espiritual debe ser dirigida proféticamente por el Espíritu Santo para ver
avances sobrenaturales, victorias, liberaciones y sanidades. Respaldo
enfáticamente este poderoso libro de estrategias de guerra profética,
herramientas y armamento espiritual para que cada creyente, como
guerrero espiritual profético, aprenda a enfrentar y vencer los ataques
sigilosos de nuestros adversarios invisibles.
—NAIM COLLINS
 VOZ PROFÉTICA;

FUNDADOR, FAN THE FLAMES GLOBAL MINISTERIES;

AUTOR, REINOS DE LO PROFÉTICO

Conozco a Kathy desde hace algunos años y, durante ese tiempo, la he

conocido como soldado de primera línea del reino de Dios. No solo ha causado
estragos contra el enemigo en mi nombre con su cubierta de oración
inquebrantable; ella ha hecho daño al reino de las tinieblas con sus escritos,
podcasts, reuniones y ministerio de liberación. Como ella dice en Guerra
espiritual profética: “El diablo usará nuestro pasado, las maldiciones
generacionales y los lazos del alma para establecerse en nuestras vidas”, pero
no debemos “dar lugar al diablo”. Kathy da consejos prácticos sobre cómo tomar
el control de nuestros pensamientos, aumentar el discernimiento espiritual y
reprender a Satanás. Lea este libro y aprenda de Kathy cómo librar una guerra
espiritual poderosa y efectiva todos los días con el Espíritu Santo como su
abogado.

—SHAWN A. AKERS

DIRECTORA EN LÍNEA, CHARISMA MEDIA

¿Quieres mejorar y finalmente entrar en tu destino? Si es así, Guerra Espiritual

Profética es el libro para usted. Seamos francos, incluso cuando hayas recibido la
mejor enseñanza, ocurrirán guerras y ataques. Pero cuando lo hagan, con la
ayuda de este manual profético, la guerra ocurrirá pero no prosperará, y eso es lo
que necesita saber. Tu alma necesita limpieza, y eso
es algo que este libro le enseñará a hacer todo el tiempo, y me refiero a
todos los días. Finalmente, aquí hay un libro donde la plenitud y la
limpieza espiritual lo llevarán al destino que solo ha soñado. Obtenga
este libro y, mientras lo hace, ¡compre una copia para un amigo!

—STEVE SHULTZ

FUNDADOR, THE ELIJAH LIST Y ELIJAH STREAMS

En Guerra espiritual profética, Kathy DeGraw comparte el profundo deseo de

su corazón de ver a las personas sanadas y liberadas. Ha experimentado
mucho a lo largo de los años en la guerra espiritual, y ha aprendido a vencer
liberando lo profético y el amor de Jesús. Se sentirá alentado por la verdad
reveladora que se derrama a través de sus historias personales de victoria,
activaciones de fe y ejercicios en cada capítulo, que lo ayudarán a desarrollar
las habilidades que necesita para aprender a mantenerse firme en su fe y
vencer al enemigo. También serás bendecido por su deseo de verte entablar
una relación íntima con el Señor. Que Dios use este libro para afilar sus
herramientas para el avance del reino.

-DR. CANDICE SMITHYMAN

¡HOST, GLORY ROAD Y TU CAMINO HACIA EL DESTINO

EN ES SOBRENATURAL! LA RED

Kathy DeGraw es una ministra de liberación a quien Dios está usando

poderosamente en esta generación. Después de leer estas páginas, fui
desafiado por el conocimiento revelado que el Señor le ha dado a esta
mujer de Dios para escribir tal libro. Su exposición sobre los diversos tipos
de guerra y liberación es excelente. Está
pertinente para que los cristianos de los últimos tiempos estén al día
con el mover del Espíritu Santo. Este libro es relevante en un
momento como este, considerando los problemas que enfrenta
mucha gente.

—APÓSTOL/PROFETA BERNARD D. EVANS

SUPERVISOR, TABERNÁCULO RUACH HA'KODESH

MINISTERIO CRISTIANO;

MINISTERIOS BERNARD D. EVANS

¡La Guerra Espiritual Profética de Kathy DeGraw es un campo de

entrenamiento de guerra espiritual seguro! La autoridad, el poder, la
perspicacia, la revelación y la clara definición espiritual de este tema
posiblemente complejo es diferente a lo que he encontrado en mi tiempo
de estudio personal. Este libro desacredita los mitos, los miedos y las
mentiras predominantes relacionadas con la guerra espiritual. Más
interesante y única es la parte profética de esta maravillosa guía. Cada
capítulo tiene una guía extensa y enfocada de activación, oración y
declaración. Ministra a toda la persona y equipa al cuerpo de Cristo para la
obra mayor de Dios.

—BEATRIZ ZALDANA

DIRECTOR, MINISTERIO DE CONVERGENCIA

La última obra literaria de Kathy DeGraw, Guerra espiritual profética, ofrece
al lector una vista panorámica de las nefastas maquinaciones de Satanás.
reino a través de la lente del ministerio profético. En cada capítulo, equipa al
lector con herramientas de guerra espiritual, como proclamaciones,
activaciones, oraciones y decretos, que pueden usar personalmente para
vencer las influencias demoníacas que se han infiltrado en sus vidas.
Recomiendo encarecidamente este libro interesante, interactivo, transparente
e informativo, que te ayudará a deshacerte de los demonios obstinados que
desean impedir que alcances tu máximo potencial en Dios.

—JUAN TERNERA

DIRECTOR EJECUTIVO, MINISTERIOS JOHN VANER;

PASTOR PRINCIPAL, CENTRO CRISTIANO FE DURADERA

En este libro, Kathy pregunta: “¿Conoces al Espíritu Santo? ¿Puedes

llamarlo tu amigo?” Si quieres conocerlo más o si respondiste
afirmativamente a su pregunta, entonces este libro te dará los principios y las
activaciones que necesitas para conocerlo a un nivel más profundo. Kathy es
una guerrera apostólica experimentada que le enseñará cómo escuchar a
Dios y profetizar, participar en una guerra espiritual, activar sus sentidos
espirituales y acercarse a Jesús. Guerra Espiritual Profética es una palabra
en sazón que encenderá un fuego dentro de ti para correr al lugar secreto.

—JARED LASKEY

COFUNDADOR, MINISTERIOS FIREBORN;

ANFITRIÓN, AVENTURAS EN EL ESPÍRITU CON JARED LASKEY
PODCAST
El libro de Kathy DeGraw sobre la guerra espiritual profética es
imprescindible en la caja de herramientas de todo creyente. Contiene
pasos, estrategias y ejercicios prácticos y fáciles de seguir que
enseñarán y equiparán a los lectores a fondo para asociarse con el
Espíritu Santo para recibir un avance duradero. Valiosas tanto para
los cristianos nuevos como para los experimentados, las ideas de
Kathy ayudarán a acelerar a los lectores al próximo nivel de su
destino.

—JOANNA ADAMS

AUTOR, CIERRE LA PUERTA A LOS DEMONIOS;

CO-PASTOR, CONFRATERNIDAD DEL NIDO DE ÁGUILAS

La apóstol Kathy DeGraw ha revelado un conocimiento refrescante del

Espíritu Santo como maestro que la mayoría de la gente desconoce. A través
de la Guerra Espiritual Profética, se le alentará a confiar en el Espíritu Santo
para que le enseñe y guíe a guiar a otros en la liberación, así como a permitir
que Él lo guíe a usted mismo a la liberación. Qué poderosa revelación para
tanta gente. Con el Espíritu Santo y Cristo de tu parte, puedes hacer todas las
cosas (Filipenses 4:13).

-DR. GINA R. PRÍNCIPE

CONSEJERO CRISTIANO;
ANFITRIÓN, DR. CHAT DE
RADIO DE GINA
Este libro no es solo un libro con información; es un poderoso arsenal de
conocimiento para equiparlo y empoderarlo a usted y a su familia para las
batallas espirituales que se avecinan. ¡La guerra tocará a la puerta de
nuestras vidas, pero podemos estar preparados y listos para reclamar la
victoria! ¡Ármate con este libro!

—JOEL YOUNT

COFUNDADOR, SPIRIT FUEL;

ANFITRIÓN, TRANSMISIÓN DE VIDEO EN VIVO DE SPIRIT FUEL

(WWW.SPIRITFUEL.ME)
La mayoría de los productos de Charisma House Book Group están
disponibles con descuentos especiales por cantidad para compras al
por mayor para promociones de ventas, primas, recaudación de
fondos y necesidades educativas. Para más detalles, llámenos al
(407) 333-0600 o visite nuestro sitio web en
www.charismahouse.com.

GUERRA ESPIRITUAL PROFÉTICA por Kathy DeGraw

Publicado por Carisma House

Charisma Media/Charisma House Book Group

600 Rinehart Road, Lago Mary, Florida 32746

Este libro o partes del mismo no pueden reproducirse de ninguna

forma, almacenarse en un sistema de recuperación ni transmitirse
de ninguna forma por ningún medio (electrónico, mecánico,
fotocopia, grabación u otro) sin el permiso previo por escrito del
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Las citas bíblicas marcadas como NKJV se tomaron de la New King
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Copyright © 2021 por Kathy DeGraw

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electrónico ISBN: 978-1-62999-972-2

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de la publicación. Además, el editor no tiene ningún control y no asume ninguna
responsabilidad por los sitios web del autor o de terceros o su contenido.
 A mi esposo, Ron DeGraw: su amor y apoyo inquebrantables llenaron de
gratitud mi corazón y cambiaron innumerables vidas. Gracias por nombrar mi
programa de podcast, Guerra espiritual profética, que finalmente dio origen a
este libro. Aprecio tu sacrificio de aguantar guerras invisibles y plazos
constantes. Me permitiste viajar por el mundo, investigaste y descifraste
cámaras y equipos de grabación sin experiencia previa, y obedeciste al
Señor al concederme mi pedido de tener a mi cachorro, Shiloh, cuando no
querías un perro. ¡Eres un verdadero hombre de Dios! ¡Te amo!
 TABLA DE CONTENIDO

Prefacio

Palabra profética de apertura

1 ¿Qué es la guerra espiritual?

2 Andar en lo Profético

3 Limpieza y protección espiritual

4 La guerra espiritual es audible

5 Caminar en Dominio

6 Construye el corazón de un guerrero

7 Operaciones Demoníacas y Jerarquía

8 Exponiendo la Infiltración Demoníaca del Alma

9 Conquista cada pensamiento

10 Reprender y exponer asignaciones demoníacas

11 Reprende al enemigo

12 Activa tus sentidos espirituales

13 Acuerdo de ruptura

14 La pasión de Jesús por la liberación

15 Activación Profética

Palabra profética de cierre

Biografía

Apéndice: Recursos adicionales

notas
 PREFACIO

HONESTAMENTE PUEDO decir que el Espíritu Santo es mi mejor amigo.

Pregunto, y Él responde. Confío en Él para que me enseñe, guíe, corrija y
me convenza. Pero no siempre ha sido así. Mi amistad con el Espíritu
Santo comenzó después de que mi esposo, Ron, y yo pasáramos un año
largo e intenso de guerra espiritual hace varios años. En ese momento, no
estábamos familiarizados con la guerra espiritual y todo lo que podíamos
hacer era confiar en el Espíritu Santo.

Después de esa temporada de ataque espiritual sin precedentes,

trasladamos a nuestra familia a nuestra ciudad natal en Michigan. Pasé mi
tiempo adaptando a nuestros hijos a su nuevo hogar y escuelas y me
concentré en ser madre y esposa. No trabajé fuera de casa, así que pude
pasar los siguientes dos años postrado en la alfombra en la presencia del
Padre, conociendo a Jesús y al Espíritu Santo. Tenía un objetivo en mente:
llegar a conocer profundamente la Trinidad.

Durante este tiempo, tuve muchos encuentros y visiones con Jesús.

Me acostaba en el piso donde a menudo se sentía como si Su rostro
estuviera en la alfombra (muchas veces lo vi allí) mientras hablábamos
de un lado a otro. Ningún ministro de liberación expulsó mis demonios
ni me guió a través del proceso de liberación. Jesús fue mi Libertador.
Nadie me enseñó acerca de la guerra espiritual. El Espíritu Santo fue
mi Maestro y Guía.
La vida de esos años había sido intensa, pero en los años siguientes, descansé
en la presencia del Señor y aprendí acerca de la sanidad y la liberación. No
busqué ser profético o tener un ministerio de liberación; Simplemente deseaba
llegar a conocer a Jesús íntimamente. Permití que el Espíritu Santo dirigiera mi
tiempo de oración y adoración, derribando fortalezas y llevándome a la gloria de
la presencia de Dios. Él me indicó qué libros debía estudiar y me enseñó las
Escrituras.

Esos años de buscar el Espíritu Santo me dieron a luz y me lanzaron al

ministerio de liberación. Seguí la dirección del Espíritu Santo en el
ministerio de liberación durante los siguientes años, y aunque no
caminaba en el ministerio profético, a menudo denominado "profético",
en ese momento, tenía un agudo sentido de discernimiento y podía ver
al reino espiritual.
En 2009 el Espíritu Santo me convenció del llamado profético en mi vida.
Hasta ese momento, nunca quise tener nada que ver con el ministerio
profético porque había visto motivos impuros en las personas que lo
buscaban. Jesús me había puesto un manto profético durante un encuentro
que tuve con Él, del cual hablaré más adelante. Pero negué esta llamada tres
veces y había estado huyendo desde entonces. Sin embargo, en 2009,
finalmente fui obediente. Me arrepentí y acepté el llamado profético en mi
vida, pero a un nivel limitado. Todavía no estaba usando completamente lo
que el Señor me había dado hasta que fui testigo de cómo podía
fortalecerme para conquistar los ataques espirituales a través de la oración y
ayudarme a ver el corazón de una persona para romper las fortalezas de su
vida. Cuando presencié cómo las personas se liberaban de la opresión
demoníaca en sesiones de cinco minutos en lugar de sesiones de ocho
horas, ¡estaba completamente adentro!

Oro y permito que Él me guíe a través de decisiones, incluyendo dónde y

cuándo viajar, qué comprar y en qué restaurante comer. He confiado en Él
varias veces al discernir a qué regiones ha llamado a mi equipo a viajar,
ministrar y orar. Él nos ha guiado en giras de ministerio profético que llamamos
Be Love Prophetic Tours. Hemos confiado en Él para saber a qué ciudad ir, qué
ruta tomar y dónde parar en el camino para el ministerio, la comida y el
alojamiento.

En el camino comencé un podcast llamado Guerra Espiritual Profética, y le he

dado a este libro el mismo título. Es fundamental saber el significado detrás
de este título. Cualquier libro o podcast sobre guerra espiritual explorará
cómo combatir los obstáculos espirituales y la oscuridad, pero Guerra
espiritual profética enfatiza que la clave de la guerra espiritual es ser guiado
por los ejemplos de Jesús en la Biblia y la guía del Espíritu Santo. Ser guiado
proféticamente por el Espíritu de Dios significa que nos asociamos con el
Espíritu Santo en todo lo que decimos y hacemos y, lo que es más
importante, en nuestro tiempo de oración. El Espíritu de Dios sabe por qué se
debe orar y cómo se debe conquistar. Él conoce cada batalla que
enfrentamos y cómo se relaciona con nuestro pasado, presente y futuro. Por
lo tanto, cuando nos asociamos con el Espíritu Santo, Él nos llevará a la
victoria. No podemos hacer nuestro caminar espiritual solos; tampoco
podemos basarlos en una fórmula legalista hecha por el hombre. Somos
seres espirituales. Por lo tanto, debemos ser guiados por el Espíritu Santo.
Dado que la guerra espiritual profética es conquistar la adversidad mientras es
dirigido proféticamente por el Espíritu Santo, el mensaje central de este libro es
rendirse por completo al Espíritu de Dios. ¿Cómo permites que el Espíritu del
Señor se mueva a través de ti sin inhibiciones? Si quieres ser profético, y estoy
seguro de que lo haces porque el título de este libro te llamó la atención,
entonces
Necesita aprender a moverse proféticamente, lo que significa ser
guiado continuamente por el Espíritu de Dios.
Eso es lo que hace que este libro sea diferente. No se trata sólo de la
guerra espiritual. Se trata de vivir una vida entregada al Espíritu Santo.
Te enseña cómo asociarte con el Espíritu Santo en oración, tiempo de
devoción personal, sanidad, liberación y todos los aspectos de la guerra
espiritual. Se trata de convertirse en una generación profética de vasos
que el Espíritu Santo puede usar, conductos de Él y de Su flujo perpetuo.
Nuestras vidas son plataformas entregadas al Espíritu Santo para
glorificar el nombre de Jesucristo y hacer avanzar el reino de Dios.

Haz este viaje conmigo y hagamos la vida juntos. Aprendí del Espíritu Santo, y
Él es el mejor Maestro. No solo le pido que le permita ser su Maestro y Guía a
través de este libro, sino también que le permita convertirse en su mejor amigo.
Use este libro como una herramienta, como un punto de partida, y luego pase
tiempo en la presencia del Espíritu Santo y deje que Él lo instruya más, como
lo hizo conmigo.

Siempre ha sido mi sueño que las personas estén tan desesperadas por
sanidad, liberación o impartición que interrumpan mi predicación y corran al
altar para recibir lo que sea que esté hablando. El Espíritu Santo me llevó a
agregar ese elemento de inmediatez a este libro. Por lo tanto, discuto un
tema y te doy herramientas para abordarlo de inmediato. Los ejercicios
proféticos se implantan dentro de los capítulos, y cada capítulo se cierra con
activaciones proféticas. No solo estás aprendiendo sobre un tema; estás
siendo activado.

Para participar en la guerra espiritual profética, deberá rezar intensas

oraciones de guerra para combatir los poderes de las tinieblas.
Proporciono en cada capítulo ejemplos de proclamaciones de fe y
declaraciones de guerra espiritual. Y siendo un ministro de liberación, he
cargado este libro con oraciones de liberación e información sobre
recursos adicionales donde puede recibir libertad o aprender cómo
ministrar libertad a otros.

Todas estas herramientas se proporcionan para equiparte y activarte en lo

profético, que es el tipo de guerra espiritual más eficaz. Te animo a comprar
un diario o cuaderno para registrar lo que creo que Dios quiere hablarte
durante estas secciones de activación. Manténgalo cerca mientras lee este
libro y escriba en él con frecuencia. Lo que tienes en tus manos no es
simplemente un libro de conocimiento. Este es un libro de revelación,
impartición y activación.
El diablo ha robado tu destino por mucho tiempo. Las batallas que se
han librado contra ti deben cesar. ¡Es hora de aprender a conquistar
batallas y manifestar tu destino mientras sigues la dirección del Espíritu
Santo! No esperes ni un minuto más. Pasa la página y empieza.
 PALABRA PROFÉTICA DE APERTURA

SIENTO EL reino profético agitándose. Siento que viene un avivamiento. Veo

en el espíritu un remolino del Espíritu a tu alrededor, el lector. Veo el Ruach
Ha'Kodesh, el aliento de Dios, rodeándote y rodeándote. El Señor dice: “Esta
es una nueva temporada, una temporada de revelación, una temporada de
unidad con el Espíritu Santo. El Señor dice que vas a conocer al Espíritu
Santo en un nuevo nivel. La revelación, el aumento y la liberación están en
camino. Las cosas viejas se han ido; las viejas formas de operar en la carne y
lo natural van a pasar.” Él dice: “Vas a apoyarte y confiar en Mi Espíritu.
Envié a Mi Hijo Jesús a morir por vosotros para dejaros un ayudante. El
Espíritu ha estado aquí desde antes de tiempo. Lo he liberado para que sea
tu ayudador. Ahora deja que Él sea tu ayudante. Permítele ser todo lo que
necesitas. No tienes que hacer esto con tus propias fuerzas. El Espíritu está
listo para la batalla y sabe lo que se necesita para conquistar la guerra en tu
vida. Asóciate con Él. Depende de Él. No des un paso sin Él. Él te llevará a
través de la batalla rápidamente y con facilidad. Has luchado con tus propias
fuerzas, y estás cansado y fatigado. Con el Espíritu de tu lado participando
proféticamente en la batalla por ti, no habrá más cansancio. Disfrutará
asociarse con el Espíritu Santo y lo que Él puede hacer por usted ya través
de usted. Tu vida es una plataforma para el Espíritu Santo; acérquese e
invítelo a que libere Su Espíritu fuera de usted. Estás en un camino de
sentido único, un camino que conduce al Espíritu Santo. Mantente en el
camino. Recibe todo lo que puedas de Él para que estés listo para la batalla
con el mejor equipo de tres de tu lado, el Padre, Jesús el Hijo,
 Capítulo 1

¿QUÉ ES LA GUERRA ESPIRITUAL?

SI ERES nuevo en el concepto de guerra espiritual, no estás solo. No sabía

nada acerca de la guerra espiritual cuando mi familia se encontró en el epicentro
de la batalla espiritual más intensa que jamás hayamos enfrentado. Pero el
Espíritu Santo me enseñó todo lo que necesitaba saber, y en este libro pretendo
aprovechar esa experiencia y ayudarte a descubrirlo a Él como tu Maestro y
Guía de la misma manera.

Hace muchos años, cuando mi esposo, Ron, y yo estábamos verdes en el

ministerio y pastoreando nuestra primera iglesia, nos lanzamos a la peor
batalla espiritual de nuestras vidas. No teníamos ni idea de a lo que nos
enfrentábamos ni de cómo combatirlo. No sabíamos acerca de nuestra
autoridad en Cristo o el poder de nuestras palabras. Todo lo que sabíamos
era que estábamos en una guerra total y que nuestra iglesia, comunidad y
familia estaban siendo atacadas. También sabíamos que Dios nos tenía en
una misión. Íbamos a mantenernos firmes en el Señor sin importar lo que
nos arrojaran. La batalla fue intensa, pero no nos rendimos.

La Biblia dice: “Ninguna arma forjada contra ti prosperará” (Isaías 54:17). No

dice que no vendrá un arma, sino que no prosperará. En el caso de nuestra
familia, un ataque espiritual de enfermedad y muerte visitó a nuestra familia
durante un período de dos años, pero no prevaleció. El estrés extremo y la
fatiga por esforzarme tanto en el ministerio me llevaron a la cama durante
seis semanas, sin poder levantar la cabeza. Me diagnosticaron presión
arterial alta, una condición de la que me curé años después después de un
tiempo de oración y ayuno. Más tarde ese año, nuestro hijo, Dillon, que tenía
diez años, fue atacado con cuatro enfermedades diferentes, y nos dijeron que
teníamos que llevarlo al hospital dentro de las cuatro horas antes de que sus
órganos comenzaran a fallar.

Ahora sé que el espíritu de la muerte estaba atacando a nuestra familia.

Continuó agrediendo a mi esposo, Ron, un año después. Empezó a sentirse
muy mal y fuimos al hospital. Tenía un recuento elevado de glóbulos blancos.
Me paré junto a su cama de hospital, no
orando por sanidad pero orando: “Dios, si llevarlo al cielo traería gloria a
Tu nombre y aliviaría el dolor, hazlo”. No pudieron diagnosticar a mi
esposo y lo enviaron a casa. Su apéndice estalló de la noche a la
mañana. A la mañana siguiente me llamaron y me dijeron que los rayos
X estaban mal leídos y que necesitaba llevarlo allí para una cirugía de
emergencia. Lo que le salvó la vida cuando le reventó el apéndice fue
que el veneno se quedó en una parte de su estómago en lugar de viajar
por todo el cuerpo. Estuvo en el hospital durante una semana y luego
fue enviado a casa para recuperarse aún más.
La actividad paranormal y las visitas demoníacas comenzaron a ocurrir en
nuestro hogar. No habría radios encendidas y, sin embargo, escucharíamos
música a través de los conductos de aire. Nuestro hijo, Dillon, tuvo dos visitas
del enemigo, donde el enemigo dijo: "Te voy a matar". Nuestra hija Lauren, a los
cuatro años de edad, tenía demonios con ojos rojos brillantes que la visitaban
todas las noches. Estas y otras manifestaciones continuaron hasta que
consultamos con un pastor amigo nuestro lleno del Espíritu que sabía acerca de
la guerra espiritual. Ella nos enseñó los conceptos básicos de la limpieza
espiritual de la casa, donde uno recorre su hogar para discernir la atmósfera
espiritual y luego reza para expulsar cualquier actividad demoníaca y llamar a
bendiciones y paz. Cuando ungimos la cama y la habitación de Lauren con
aceite y comenzamos a pronunciar declaraciones de oración contra los ataques,
se detuvieron por completo.

Luego, el asalto espiritual tomó una nueva forma con maldiciones

verbales y personas dentro de la iglesia conjurando y admitiendo haber
difundido mentiras sobre nosotros. No tenían vergüenza al revelar sus
planes de destrucción contra nosotros, y coaccionaban a las personas
para que se unieran a ellos en su plan para echarnos de la comunidad y
la iglesia. Deseaban el control y podían controlar todo en la comunidad
excepto nosotros. El control estaba siendo desencadenado por la
actividad de brujería en esa región. Cuando los principados de brujería
están en una región, pueden atacar y atraer a las personas para que
causen estragos, incluso si no saben que lo que están haciendo es
brujería.

Estas personas estaban enojadas y dolidas por su pasado, y el control era una
forma de lidiar con su dolor. Al principio, estaban participando
inconscientemente en la brujería al no saber que sus acciones eran parte de las
tácticas de guerra espiritual que despliega el enemigo. Sin embargo, más tarde,
una de las personas involucradas en este grupo nos admitió que contrataron a
un médium y comenzaron a practicar la brujería a través de maldiciones,
sesiones de espiritismo, lectura de manos y otras actividades de brujería.

Sabíamos que no estábamos peleando contra la gente. Estábamos

luchando contra los principados
operando a través de ellos. (Ver Efesios 6:12.) Debemos separar el
principado de la persona, lo cual discutiré en profundidad en otro capítulo.

Si eso no fue un campo de entrenamiento espiritual, no sé qué es.

Fuimos arrojados a una batalla total sin experiencia. Una persona con
más de treinta años de experiencia en el ministerio medió en la
situación y nos dijo que la mayoría de los líderes habrían dejado el
ministerio después de lo que experimentamos, pero no nosotros. Con
la ayuda del Espíritu Santo, nos hizo más fuertes.
Creo que Dios a menudo nos da nuestra tarea más difícil primero para hacer
que todo lo demás parezca fácil. Siendo un ministro de liberación, sé que hay
diferentes niveles de liberación y una variedad de experiencias demoníacas.
Cuando ministro a una persona que ha sido golpeada por el enemigo, le digo
a la persona: “¡Dios te usará poderosamente!” Mi lado profético se emociona
porque sé la victoria que le espera a la persona del otro lado. Si esa persona
pudo soportar lo que hizo, sé que podrá superar cualquier cosa.

Cuando finalmente salimos de la región, detuvimos el vehículo, salimos y nos

limpiamos los pies de acuerdo con Mateo 10:14. No sabíamos acerca de la
autoridad espiritual y las operaciones demoníacas, pero sí sabíamos lo
suficiente como para hacer un acto profético y limpiarnos los pies como dice
la Biblia. El Señor estuvo con nosotros de muchas maneras. Fue una
experiencia difícil, pero no estaría aquí hoy escribiendo este libro o
funcionando como un ministro profético de liberación sin él.

DEFINICIÓN DE LA GUERRA ESPIRITUAL

Estamos en una guerra invisible e invisible entre el bien y el mal, la

oscuridad y la luz. La guerra espiritual es cuando Satanás y su reino de
tinieblas, mentiras y destrucción vienen contra Dios y su reino de luz,
amor y bondad. La fricción y el conflicto ocurren en el ámbito espiritual,
y Satanás viene a oponerse a las profecías y la voluntad de Dios para
tu vida.
Hay una correlación directa entre lo natural y lo espiritual. Lo que sucede en lo
espiritual ocurre en lo natural y viceversa. En todo momento está ocurriendo una
colisión en el reino espiritual, y ya estás involucrado en ella, ya sea que
te guste o no. La ignorancia no es felicidad, y no ser consciente de la
guerra no minimiza sus efectos. Satanás instiga implacablemente los
ataques para desgastar a aquellos que buscan a Dios y desean hacer
avanzar Su reino. Él intentará causar estragos en tu vida de cualquier
manera que pueda. Una guerra invisible no abrazada por los creyentes
es una forma estratégica en la que puede atacar a escondidas.
Compartí las experiencias de mi familia contigo por dos razones. En primer
lugar, quería que entendiera de dónde vengo y cómo aprendí las ideas que
comparto con usted en este libro. En segundo lugar, quería darles una idea de
cómo puede ser la guerra espiritual. Nuestra batalla era real, y aunque podíamos
ver a la gente y darnos cuenta de que los ataques eran demoníacos, estábamos
peleando una guerra invisible. No pudimos ver las fuerzas oscuras detrás de las
dolencias médicas, el trauma emocional y los espíritus de brujería. Esta es la
esencia de la guerra espiritual. Ya sea que experimente o no ataques abiertos
como nosotros, es importante saber que está participando en una guerra
invisible. No es algo que elijas; todo el mundo nace en él. Todo lo que dices y
haces lo afecta, dando poder a un lado o al otro. Por eso es tan importante ser
guiado por el Espíritu Santo.

También es importante saber a quién te enfrentas.

EL ADVERSARIO

¿Quién es nuestro adversario? El diablo fue una vez uno de los

ángeles de Dios. Su nombre era Lucifer. Él era el ángel a cargo de la
adoración en el cielo. Lucifer se rebeló contra Dios y, como resultado,
Dios lo arrojó a la tierra. Esto es lo que dice la Biblia al respecto.

¡Cómo caíste del cielo, oh Lucero, hijo de la mañana! ¡Cómo eres cortado
por tierra, tú que debilitas a las naciones! Porque has dicho en tu corazón:
Subiré al cielo, exaltaré mi trono sobre las estrellas de Dios; Me sentaré
también en el monte de la reunión, en las profundidades del norte; Subiré
sobre las alturas de las nubes, seré como el Altísimo”. Sin embargo, serás
derribado al Infierno, a los lados del abismo.
 —ISAÍAS 14:12–15

Él les dijo: “Vi a Satanás caer del cielo como un rayo”.

—LUCAS 10:18

Fue lanzado fuera el gran dragón, la serpiente antigua que se llama

Diablo y Satanás, el cual engaña al mundo entero. Fue arrojado a la
tierra, y sus ángeles fueron arrojados con él.

—REVELACIÓN 12:9

Ahora que hemos cubierto cómo se convirtió en nuestro adversario,

echemos un vistazo a tres cosas que la Biblia nos dice sobre el diablo.

1. Es un ladrón.

El diablo es un ladrón que viene a robar, matar y destruir cualquier cosa

y todo en tu vida. “El ladrón no viene sino para hurtar y matar y destruir.
yo he venido para que tengan vida, y para que la tengan en abundancia”
(Juan 10:10, NVI). Robar, matar y destruir son guerras espirituales. El
diablo trata de asegurarse de que no tengamos la vida abundante que
Jesús dijo que podríamos tener.
Jesús quiere que tengamos vida abundante. Los ataques que conducen a un
resultado negativo nunca son el resultado de que el Señor envíe algo para
obstaculizarnos o castigarnos. Dios no enferma a las personas para usarlas o
enseñarles lecciones. Él es un Padre que quiere lo mejor para Sus hijos. Es el
enemigo el que viene a robar, matar y destruir, mientras que la intención del
Señor es que tengamos vida abundante.
2. Es malvado.

“Sabemos que somos de Dios, y el mundo entero está bajo el dominio del
maligno” (1 Juan 5:19, NVI). Cuando Satanás fue arrojado a la tierra, se le
dio autoridad sobre la tierra. ¡Vivimos bajo el dominio del maligno hasta que
lleguemos a conocer a Jesús y Su glorioso poder! Desafortunadamente, el
enemigo tiene demasiada influencia en la tierra, por lo que vemos pecado,
crimen, falta de perdón, adicción y esclavitud. Sin embargo, Jesús vino a la
tierra para corregir lo que estaba mal. Él nos dio Su autoridad.

3. Es un mentiroso.

“Vosotros sois de vuestro padre el diablo, y queréis hacer los deseos de vuestro
padre. Él fue homicida desde el principio, y no está en la verdad, porque no hay
verdad en él. Cuando miente, de suyo habla, porque es mentiroso y padre de
mentira” (Juan 8:44). El diablo es el padre de la mentira, y nos mentirá. Sus
mentiras pueden aparecer como pensamientos que agarramos, cosas que
alguien nos dijo o sobre nosotros, o manipulación. El diablo usará nuestro
pasado, las maldiciones generacionales y los lazos del alma para establecerse
en nuestras vidas. Discutiré esto más adelante.

Cuando no se nos ha enseñado acerca de la guerra espiritual y cuán

astuto es el enemigo, aceptaremos las mentiras y comenzaremos a
creerlas. Después de un tiempo, estas mentiras que asimilamos se
convierten en fortalezas en nuestras vidas, y cuando no cambiamos
nuestros pensamientos y patrones de comportamiento, las fortalezas
pueden convertirse en hombres fuertes, que son espíritus demoníacos.
Para asegurarnos de que los hombres fuertes no entren y ocupen
nuestras almas, debemos capturar rápidamente todas las mentiras del
enemigo y no darle lugar al diablo. Captar la mentira significa reconocer
la mentira. Cuando le venga un pensamiento a la mente, pruébelo
discerniendo si se alinea con la Palabra de Dios. ¿Es algo que tendría un
resultado que está de acuerdo con las Escrituras? Si no, descártelo en
lugar de entretenerlo.
No le des lugar al diablo tomando el control de tus pensamientos para
que la mentira no te atormente y te provoque ansiedad, ira o miedo. A
medida que tomamos pensamientos improductivos y negativos y
quedan capturados en nuestras mentes, los entretenemos en lugar de
descartarlos. Cuando conocemos las Escrituras, podemos conquistar
nuestros pensamientos con la Palabra y reemplazar lo negativo que
podría hacer que nos sintamos derrotados o temerosos con algo
positivo, una verdad de la Palabra de Dios y lo que Él dice acerca de
nuestras situaciones.

Ejercicio profético: No hay lugar para el diablo

Haz una lista de 1 a 3 cosas que ocupan tus pensamientos. ¿Qué te

consume de forma negativa? ¿Dónde no has podido recibir avance?
¿Qué produce estrés, depresión o miedo?

Luego, piensa en lo que dice la Escritura con respecto a esos

pensamientos improductivos. Por ejemplo, si el pensamiento es que
nunca tendrá suficiente, compruébelo con las Escrituras, que dicen que
Dios es su proveedor (Filipenses 4:19). Por lo tanto, elimine la mentira
ahora y apóyese en las Escrituras. Practica llevar cautivo cada
pensamiento. Si no se alinea con las Escrituras, descártelo.
Pídele al Espíritu Santo que te convenza cuando comiences a tener
pensamientos improductivos y cuando el enemigo te esté atormentando.
Pídele al Espíritu Santo que se asocie contigo para conquistar tus
pensamientos al convencerte y corregirte. Confíe en Él para que sea su amigo
y lo guíe a través del crecimiento espiritual en esta área.

Tenemos la victoria final. No importa cuánto intente el diablo vencernos, su

destino está escrito en la Palabra de Dios, ¡y él pierde! ¡Está derrotado! Tenga la
seguridad de que pase lo que pase, lo que sea que intente ayudar a alguien,
puede ser conquistado. La Palabra de Dios dice que somos vencedores. “Sin
embargo, en todas estas cosas somos más que vencedores por medio de aquel
que nos amó” (Romanos 8:37, NVI). Nosotros
son vencedores, y el diablo es vencido!

Ahora que entendemos a nuestro adversario, examinemos las fuerzas

espirituales en acción.

ÁNGELES VS. DEMONIOS

Para muchas personas es más fácil creer en un ángel que en un

demonio. Las personas eligen creer en cosas que las hacen felices y
las ayudan. Hebreos 1:14 nos dice que los ángeles son enviados como
ministros. Están aquí para ayudarnos, guiarnos y protegernos, entre
muchas otras funciones que realizan los ángeles. La mayoría de la
gente preferiría hablar sobre la ayuda que nos brindan los ángeles que
sobre cómo los demonios pueden atacarnos o su papel en la tierra.
Muchos cristianos ni siquiera creen en los demonios. No puedo contar la
cantidad de personas que han venido a mi ministerio para una sesión de
liberación porque un amigo les dijo que fue la mejor experiencia. Esto es una
advertencia para mí. Me dice que no saben en lo que se están metiendo.
Cuando esto sucede, empiezo preguntando si creen en los ángeles. La
respuesta habitual es sí. Luego les pregunto si creen en demonios. La mayoría
de la gente duda o dice que no.

La verdad es que vivimos en un mundo caído. Satanás fue una vez el

hermoso ángel Lucifer, pero permitió que surgieran el orgullo y la
rebelión. En las Escrituras leemos que la tercera parte de los ángeles
fueron arrojados del cielo con él. ¿Cómo podemos leer la Biblia y
pensar que los demonios no existen? No podemos elegir qué partes de
la Biblia creer y cuáles ignorar. La lucha entre el bien y el mal es una
batalla muy real, y Satanás se opone a todo lo que sea la voluntad de
Dios, incluido el plan de Dios para tu vida.

EL PLAN DE BATALLA
Para derrotar al enemigo, debemos conocer sus planes y propósitos, exponerlos
y erradicar sus ataques. ¿Cómo luchamos y resistimos algo que no podemos
ver?
El conocimiento es poder, y cuando seguimos el ejemplo de Jesús y
las ideas proféticas del Espíritu Santo, tendremos todo lo que
necesitamos saber para participar y ganar la batalla que se nos
presenta.
Las fuerzas de la oscuridad tienen una tarea principal: crear obstáculos y
barricadas para retrasar y desviar nuestros destinos. Queremos avanzar
en nuestro caminar espiritual y avanzar en nuestros destinos. Los
espíritus demoníacos intentan establecer barreras y establecer perímetros
para evitar nuestro avance.

El diablo provoca estas restricciones en nuestras vidas, pero Jesús vino

a enseñarnos cómo pelear estratégicamente. Cuando seguimos el
ministerio de liberación que exudaba Jesús, cómo oraba, echaba fuera
demonios, sanaba a los enfermos y ministraba, aprenderemos cómo
derrotar al diablo. Jesús venció los poderes de la muerte y la
destrucción en la cruz. Él derrotó al enemigo con Su notable victoria.
Necesitamos ser una extensión de esa victoria, caminando en la
plenitud de Dios y manifestando Su reino en la tierra.
Esto no se puede hacer con herramientas naturales, sino confiando en la
fuerza del Espíritu Santo. Las guerras naturales con artillería militar se libran
con tanques, misiles y armas. Sin embargo, son las estrategias de los que
están al mando las que establecen cómo atacar al enemigo. Si bien existen
herramientas de batalla naturales, debe saber cómo moverse
estratégicamente, lo cual se logra con el estudio, la experiencia y la lluvia de
ideas con otros comandantes militares.

En el ámbito espiritual, nosotros también necesitamos ideas sobre cómo

movernos estratégicamente. Podemos movernos de forma natural,
luchando con las Escrituras, orando de rodillas y leyendo libros sobre el
combate espiritual, pero algunos de estos pueden estar compuestos por
estrategias formuladas. Moverse en el Espíritu es solo eso: moverse en
el Espíritu y seguirlo como nuestro comandante de armamento.
Permítale que le muestre cómo moverse estratégicamente. Conoce al
Espíritu Santo y entrégate a Él. Esto te permite pelear y ganar una
guerra invisible.

Como un comandante militar natural dice qué arma disparar primero y cuántas
municiones lanzar al enemigo, es lo mismo con el Espíritu Santo. Él puede
decirnos cuándo y qué escritura publicar. Él puede llevarnos a orar en lenguas
o decretar y declarar en nuestro idioma nativo. Él nos da movimientos
estratégicos para enfrentar al enemigo si seguimos Su dirección en lugar del
conocimiento que hemos obtenido en lo natural. Es mi deseo más profundo que
al leer este libro, se equipe para permitir que el Espíritu Santo lo guíe en todo lo
que haga y para
conquistar batallas militares en el reino espiritual.

ES HORA DE LA ACTIVACIÓN

Cada capítulo de este libro concluye con Es hora de la activación. Los

guiaré a través de pasos que los capacitarán y equiparán para la guerra
espiritual profética. Emprende este viaje conmigo a través de las oraciones
de arrepentimiento, renuncia, ruptura del acuerdo, impartición y activación.
(Tenga en cuenta: me sumerjo profundamente en el concepto de romper
un acuerdo en el capítulo 13). Aprenda a orar y hablar audiblemente en el
ámbito espiritual con declaraciones de fe y guerra. Equípese aún más para
la guerra espiritual profética a través de las asignaciones de activación
espiritual. ¡Prepárate para estar equipado para la guerra espiritual que es
dirigida proféticamente por el Espíritu Santo!

ORACIÓN DE ARREPENTIMIENTO, RENUNCIA Y RUPTURA DEL

ACUERDO

Jesús, perdóname por cualquier legalismo e incredulidad que haya

tenido acerca de la guerra espiritual. Te agradezco por el conocimiento, y
me arrepiento si, en algún momento, no tomé en serio Tu Palabra o la
guerra espiritual. Rompo el acuerdo con cualquier infiltración demoníaca
en mi alma. Cancelo todos los ataques demoníacos. Ayúdame a
entender las Escrituras y lo que quieres que aprenda. Te agradezco que
tengo el Espíritu Santo para acompañarme mientras aprendo sobre el
ámbito espiritual. Rompo con cualquier enseñanza falsa que haya sido
recibida en mi corazón y mente. En el nombre de Jesús, amén.

ORACIÓN DE IMPARTACIÓN Y ACTIVACIÓN

Espíritu Santo, te recibo como mi maestro e instructor. Ven y convénceme
de la verdad versus la mentira y la luz versus la oscuridad. Ayúdame a
caminar en la luz y el amor de Dios. Espíritu Santo, erradica cualquier cosa
oscura de mí para que pueda vivir ardiendo por el Señor con la plenitud de
Dios manifestándose en todas las áreas de mi vida.

Doy gracias a Jesús por dejarme con el mayor ayudante. Espíritu Santo,
recibo tu ayuda. Enciéndeme para ser un trabajador de batalla de primera
línea para Tu reino. Ayúdame a continuar derrotando al diablo en mi vida y
en la vida de los demás. Conviérteme en un guerrero de oración y un arma
poderosa contra el campo enemigo. Te amo, Espíritu Santo, y confío en Ti
para mi futuro. En el nombre de Jesús, amén.

PROCLAMACIONES PROFÉTICAS (DECLARACIONES DE

FE)

Profetiza sobre ti mismo orando en voz alta estas declaraciones proféticas de

fe.
Ore con propiedad y expectativa para ver la manifestación:

Te pido, Dios, que ordenes, dirija y asigne ángeles para que salgan y
me ayuden a vencer los ataques espirituales.

Anuncio al reino demoníaco que estoy armado, soy peligroso y

estoy listo para la batalla. Estoy empoderado en lo alto con el
Espíritu Santo.

Declaro que soy un guerrero por Cristo. El poder del Espíritu Santo
aniquilará la batalla puesta delante de mí.
Hablo y declaro que tengo una artillería llena de escrituras para combatir
toda fuerza del mal. El Espíritu Santo está de mi lado, y nada será imposible
para mí.
Cumpliré mis órdenes de marcha para hacer avanzar el reino de Dios.
Camino en mi destino profético en el nombre de Jesús.

ACTIVACIÓN ESPIRITUAL

La activación puede venir de forma natural o sobrenatural. Cuando

practicamos lo que aprendemos, podemos aumentar la aceleración de
lo que recibimos. Nuestra fe crece a medida que implementamos lo
que aprendimos. Activa lo que aprendiste practicando estos tres
ejercicios de guerra espiritual.

Estudie los ángeles y su participación en la tierra. A través de un

tiempo de oración, pídele a Dios que libere a sus ángeles para que te
ayuden en tiempos de necesidad.

Recuerda la fidelidad de Dios. ¿Qué guerra espiritual has

experimentado? ¿Cómo has sido testigo de la intervención del Señor
en tu situación para ayudarte durante la guerra? Mire hacia atrás y
descubra dónde fue fiel. Le ayudará a confiar en Él en su situación
actual.

Estudia al adversario. Hay varios nombres y características del

maligno, Satanás, en la Biblia. Estudie sus nombres y sus definiciones
para exponer cómo opera. Esto te ayudará a estar a la ofensiva en
lugar de a la defensiva cuando surjan ataques.
DECLARACIONES DE GUERRA ESPIRITUAL
Ore por la ofensiva, no por la defensiva. Protégete en lo natural y
espiritual pronunciando oraciones y declaraciones de guerra para atar
y restringir toda fuerza maligna en tu contra. Pronuncie estas oraciones
audiblemente para atar y restringir los ataques demoníacos.

Descarto todos y cada uno de los pensamientos contrarios a la

Palabra de Dios. Hablo y declaro que tomo cautivo todo
pensamiento, exuda mi autoridad y despido los poderes malignos
que penetrarían en mi mente.

Ato y restrinjo al enemigo para que no ataque mi conocimiento y comprensión

a medida que avanzo en este libro para aprender acerca de la guerra espiritual
profética.

Destruyo cada ataque demoníaco enviado contra mí para

bloquearme y paralizarme de avanzar en las cosas del Espíritu.

Derribo y derribo por la fuerza cada torre demoníaca erigida en mi nombre.

Ordeno y ordeno a cada comandante demoníaco que cese sus actividades
contra mí.

En el nombre de Jesús, elimino mi fecha de nacimiento y derecho de

nacimiento de cada objetivo demoníaco escrito con mi nombre.
 Capitulo 2

CAMINA EN LO PROFÉTICO

HUÍ del llamado profético en mi vida durante cinco años. Espiritualmente

hablando, tenía puestas mis zapatillas deportivas y corrí tan fuerte y rápido
como pude. No quería ser parte de eso porque había visto abusos en el
ministerio profético y uso como un tipo de “brujería cristiana”. Los profetas
vendrían a la ciudad y la gente acudiría en masa a sus conferencias para
hablar. Mientras tanto, otros eventos dirigidos por el Espíritu se retrasarían
en la asistencia porque no estaban profetizando sobre todos.

La falta de pureza fue un gran desvío para mí. La gente preferiría acudir a una
persona que opera en el don u oficio profético que al Espíritu Santo
directamente por una palabra. Tomé 2 Pedro 1:21 en serio: “Porque nunca la
profecía fue traída por voluntad humana, sino que los santos hombres de Dios
hablaron siendo inspirados por el Espíritu Santo” (NKJV). Me costaba creer que
los profetas siempre estuvieran siendo movidos por el Espíritu cuando la gente
les exigía tanto que dieran palabras proféticas.

Ni siquiera me di cuenta de que tenía un llamado profético en mi vida

hasta un día, hace varios años, cuando Ron y yo asistíamos a una
conferencia pastoral. Mientras estábamos sentados en una sesión
impartida por Benny Hinn, el Señor se me apareció de repente en una
visión. Cerré los ojos y vi al Señor. No estaba al tanto de mi entorno
porque la visión era muy intensa. No podría decirle lo que estaba diciendo
el pastor Benny, excepto que comenzó a hablar sobre lo profético.

Todavía recuerdo la visión vívidamente. Jesús se me apareció y me dijo

que tenía un manto profético para mí. Tantas emociones rabiaron a través
de mí. No me sentía digno. No entendía por qué me estaba llamando, y
luego dijo: "Te he llamado para devolverle el equilibrio a lo profético".
Como Pedro, lo negué tres veces. (Véase Juan 18.) Dijo que tenía que
tomar el manto.
Corrí y corrí de este llamado hasta que finalmente me sometí a él en 2009.
Empecé a operar en lo profético, pero incluso entonces estaba contento con lo
que surgiría y nunca traté de despertar el don. No conocía todas las diferentes
facetas de lo profético en ese momento. Yo estaba contento de lanzar un nivel
de principiante de la profecía de
edificación, exhortación y consuelo. Creo que una parte de mí aún
necesitaba sanación de los dones proféticos distorsionados y
codiciados que había observado.
El Espíritu Santo me sacó de mi zona de confort, dándome diferentes
instrucciones para aumentar mis habilidades proféticas. El Señor es un
caballero, guiándote y guiándote a través de tus insuficiencias percibidas. Un
día Él usó la perspicacia profética y mi habilidad de vidente para ayudarme a
liberar a alguien de la esclavitud demoníaca. Todo lo que se necesitó fue ser
testigo de cómo una unción profética podía ver el corazón de una persona y
liberarla en cinco minutos en lugar de ocho horas. Me arrepentí, grité mi
desobediencia y acepté el llamado profético en mi vida.

Tienes una llamada también. Estoy seguro de que algunos de ustedes

en este momento están huyendo de él. Sé que lo eres porque, mientras
escribo esto, el Espíritu Santo me está diciendo proféticamente en este
momento que lo eres. Estoy seguro de que has escuchado dichos como
"Puedes correr, pero no puedes esconderte" o "No puedes correr más
rápido que Dios". Sabes tan bien como yo que Dios te alcanzará, y
tarde o temprano terminarás por someterte, así que mejor lo haces
antes y te ahorras el problema. Confía en mí, tuve que cortarme los
zapatos como un acto profético de sumisión para indicar que había
terminado de huir de Dios.

ABRAZA TU DESTINO

Jonás trató de huir de Dios. El Señor deseaba que Jonás fuera su voz
profética: “Pero Jonás se levantó para huir de la presencia de Jehová a
Tarsis” (Jon. 1:3). El Señor quería la atención de Jonás, así que creó una
tormenta en el mar y puso el barco en peligro. Los marineros tenían miedo de
la tormenta y echaron suertes y le preguntaron a Jonás por qué sucedía esto
(vv. 4–8).

Estaban preocupados por sus vidas, por lo que Jonás les ordenó que lo arrojaran al
mar (v. 12). “Ahora el SEÑOR designó un gran pez para tragar a Jonás. Y estuvo
Jonás en el vientre del pez tres días y tres noches” (v. 17). El Señor llamó la
atención de Jonás con la tormenta, pero el Señor aún necesitaba la obediencia de
Jonás. Mientras estaba en el vientre del pez, Jonás finalmente se sometió al
llamado de Dios. (Véase Jonás 2.)

Dios alcanzó a Jonás. Jonah podía correr, pero no podía esconderse. Tu puedes
correr,
pero no puedes esconderte. El Señor me dijo cuando estaba corriendo:
“Kathy, cada día que no profetizas, alguien se pierde de ser bendecido
por la palabra que tengo que darles”. ¡Ay, Señor! Estoy seguro de que
puede tener algunos problemas que debe abordar, como lo hicimos
Jonah y yo.

Ejercicio Profético: Convicción

Detengámonos y reflexionemos. ¿Permitirías que el Espíritu Santo

convenciera tu corazón? ¿En qué áreas de tu vida has estado huyendo
y escondiéndote de Dios? ¿Has sido desobediente y te ha faltado
disciplina en cuanto a las instrucciones del Señor? ¿Hay algo que Él te
dijo que hicieras o que dejaras y que aún no hayas hecho? En un diario
o cuaderno, escriba sobre la condena que puede estar recibiendo.
Pídele al Espíritu Santo que te dé un plan de batalla sobre cómo
cambiar y volverte obediente al llamado de Dios en tu vida.

Permita que el Espíritu Santo lo guíe a un plan de acción. Es hora de

quitarse las zapatillas de correr. La Biblia dice: “Porque muchos son los
llamados, pero pocos los escogidos” (Mateo 22:14). Ser el llamado y
elegido. No seas llamado y no cumplas con tu cometido.
Elías tuvo su mayor victoria y se sintió derrotado el mismo día. Dios tuvo que
ungir a Eliseo en su lugar. No hagas que Dios envíe a otro para cumplir lo que
te ha propuesto. Completa tu misión y persevera con toda diligencia.
“Corramos con paciencia la carrera que tenemos por delante” (Heb. 12:1).

Si quieres caminar y moverte en lo profético, necesitas permitir que el

Espíritu Santo surja de tu interior y salga de ti. Jesús dijo: “El reino de
Dios está dentro de vosotros” (Lucas 17:21). Está en ti, y el Espíritu
quiere manifestarlo fuera de ti. Su reino no está en ti únicamente para tu
beneficio; está en ti para que puedas compartirlo con otros.
Acepta el llamado de Dios y la forma en que Él quiere que ministres. Si Él te
llamó a ello, Él te guiará a través de él. Arroja tu carne para que puedas caminar
en Su Espíritu. “Andad en el Espíritu, y no satisfagáis los deseos de la carne.
Porque la carne codicia contra el Espíritu, y el Espíritu contra la carne. Estos se
oponen entre sí, para que no hagáis lo que queréis” (Gálatas 5:16-17). Vive una
vida rendida al Espíritu. Abandona tu carne y tu agenda para que Su voluntad se
manifieste en la tierra a través de tu vida. Recuerde, ser guiado proféticamente
por el Espíritu de Dios significa que nos asociamos con el Espíritu Santo.
Permitimos y recibimos Su convicción e instrucciones. Construya una relación
profunda con el Espíritu Santo y aprenda a rendirse a Él. Desarrollar una
relación íntima con Él,

ENTREGA TU ALMA

Entrega tu alma y ríndete al Espíritu. Abandona tu carne y todos los derechos

a tu vida y destino. Sométete incondicionalmente al Señor. Renuncia a tus
necesidades y deseos por los de Él. Cumple Su voluntad, avanza Su reino y
libera Su amor. Debe ser lo primero y más importante en tu vida. Jesús
crucificó su carne para que tengamos vida. Cuando crucificamos nuestra
carne, comenzamos verdaderamente a vivir. “He sido crucificado con Cristo.
Ya no soy yo quien vive, sino Cristo quien vive en mí. Y lo que ahora vivo en
la carne, lo vivo en la fe del Hijo de Dios, el cual me amó y se entregó a sí
mismo por mí” (Gálatas 2:20). Recibe esta escritura, y cambia tus
pensamientos para creer que ya no eres tú quien vive, sino “Cristo en
vosotros, la esperanza de gloria” (Col. 1:27).

Muchas veces durante mis años en el ministerio, recuerdo haber tenido

que renunciar a mis anhelos, sueños y deseos por lo que era la
voluntad de Dios para mi vida. A menudo iba pataleando y gritando:
“Dios, ¿por qué no está pasando esto? ¿Por qué esta puerta no está
abierta? ¿Por qué no me llamaste para hacer esto en lugar de
aquello?” ¿Te identificas? Si te soy sincero, sigo pataleando y gritando
un poco de vez en cuando.
El problema con nuestra carne y nuestra agenda es que si el Señor nos
mostrara nuestros destinos completos, tomaríamos la pelota y correríamos
con ella, en lugar de permitir que Él nos guíe y nos haga madurar mientras
esperamos Su tiempo. Debemos someter nuestra voluntad a la Suya. Mi
dicho es “Mi vida no es mía; pertenece al que está en el trono”.
Puede que tengas que arrojar tu carne varias veces. Es posible que no
funcione la primera vez que lo intente, y puede recuperar el control
nuevamente. Cuando eso suceda, desempolvate, arrepiéntete de tus
fracasos y de las veces que quisiste hacer las cosas en tus fuerzas, y
ríndete al que está sentado en el trono.

Además, la mayor parte del tiempo, Él te da los deseos de tu corazón porque

son Sus deseos que Él te dio. “Deléitate en Jehová, y él te concederá las
peticiones de tu corazón” (Sal. 37:4). “Buscad primeramente el reino de Dios y
su justicia, y todas estas cosas os serán añadidas” (Mat. 6:33).

Solía poner a Dios en un tatami de lucha espiritual cada vez que me

llamaba a moverme en una dirección que no me entusiasmaba. Sería
como si estuviera tratando de clavar el Espíritu Santo en esa lona de
lucha libre. Como Jacob, he aprendido que es más fácil no luchar con
Dios. ¡Él siempre gana! Cuando sometemos nuestra carne y hacemos
lo que Él nos ha llamado a hacer, ¡también ganamos!

Haz lo que tengas que hacer para rendirte. ¡Ayuna, ora y adora!
Acuéstese sobre el altar como Abraham puso a Isaac sobre el altar.
Me encanta la historia de fe, perseverancia y amor que tuvo Abraham
por el Señor cuando se enfrentó a poner a su hijo Isaac en el altar
para ser sacrificado. (Véase Génesis 22). Pienso en los días que tuvo
que pasar preparándose. Tuvo que cortar la madera, hacer las
maletas y la comida, y hacer el largo viaje. Es una historia de tanta
obediencia, disciplina, compromiso, dedicación y todo lo demás que
nuestro Padre quiere ver de un siervo fiel.

Ejercicio Profético: Entrega

¿Estás listo para rendirte por completo como lo hizo Abraham? ¿Has sido
condenado hasta ahora? No esperes ni un segundo más. Habla y decreta esta
oración.
¡Dios, puedes tener todo de mí! ¡Me entrego a ti! ¡Cambio mi agenda por la
tuya! Hágase tu voluntad en mi vida. En el nombre de Jesús ato y restrinjo mi
carne para que no se active. Proclamo que soy sumisa. salgo con ansias
expectativa de lo que harás en mi vida. Me arrepiento de toda
desobediencia a Tu voluntad. ¡Confío en ti! Caminaré contigo y no
contra ti. ¡Me someto a Ti! Te amo, Señor, y te entrego mi vida por
completo y sin reservas. En el nombre de Jesús, amén.

A menudo necesitamos hacer una acción profética, algo en lo natural

que se correlacione con el avance espiritual. Considere escribir su
rendición en una hoja de papel y quemar el papel o escribirlo en una
nota adhesiva y ponerla en una cruz que tenga en su casa.

Comience un tiempo de consagración y dedicación al Señor, como un tiempo

de oración, ayuno o soledad. Pasa tiempo y busca el Espíritu Santo. Pídele
que elimine de raíz cada parte de ti que no se alinea con la Palabra de Dios.
Puede ser incómodo y desconocido; sin embargo, a medida que permita que
el Espíritu Santo elimine las heridas del alma, los patrones de
comportamiento negativos y las fortalezas demoníacas, ¡se sentirá victorioso
y empoderado! ¡La experiencia del quebrantamiento nunca es placentera,
pero los resultados son fructíferos y productivos para el reino de Dios!

RECIBIR PODER

El Espíritu Santo nos da poder para operar en lo profético y tener la plena

manifestación del Espíritu dentro de nosotros. Debemos sacar de nosotros todo
lo que no sea del Señor. Debemos volvernos menos, y Él debe volverse más.
Una razón clave de esto es que no podemos escuchar efectivamente del
Espíritu Santo si nuestra carne se interpone en el camino. Podemos escuchar
tres fuentes dentro del ámbito espiritual: el enemigo, nosotros mismos y el
Espíritu de Dios. Operar proféticamente depende de escuchar la voz del Señor
con claridad, precisión y sin cuestionamientos. Una relación profunda con el
Espíritu Santo es pertinente para conocer Su voz y estar lo suficientemente
cerca de Él para que deseemos actuar de acuerdo con las instrucciones que Él
nos imparte.
Nuestro Dios existe en tres personas, y una persona de la Deidad es el
Espíritu Santo. Una relación con cada persona de la Trinidad es vital en
nuestro espiritual
camina. Conozca al Espíritu Santo y sus características. Él es el
Espíritu de revelación. (Véase Efesios 1:17.) Caminar en estrecha
comunión con Él aumentará su capacidad profética.
¿Conoces al Espíritu Santo? ¿Puedes llamarlo tu amigo? La única forma
de responder afirmativamente a estas preguntas es desarrollar una
relación con el Espíritu Santo pasando tiempo en la presencia del Señor.
Cuando lo hagas, descubrirás que el Espíritu Santo es un amigo, un
consejero y el Espíritu de sabiduría y fuego. Enseña, instruye y escucha.
Ayuda a interpretar y aplicar las Escrituras. Jesús nos dejó con un
ayudante; Él es el Espíritu Santo. ¡Él es mi mejor amigo y espero que se
convierta en el tuyo también!

RECIBEN EL ESPÍRITU SANTO

Ministrar a través de los dones proféticos depende de recibir el Espíritu

Santo en Su plenitud. Lo profético tiene muchos niveles y operaciones.
Todos ellos están interconectados y tienen una fuente común: brotan del
bautismo del Espíritu Santo. Todo comenzó en el Aposento Alto el día de
Pentecostés.

Cuando llegó el día de Pentecostés, estaban todos juntos en un mismo

lugar. De repente, vino del cielo un sonido como de un viento recio que
soplaba, y llenó toda la casa donde estaban sentados. Se les
aparecieron lenguas como de fuego, repartiéndose y reposando sobre
cada uno de ellos, y todos fueron llenos del Espíritu Santo y
comenzaron a hablar en otras lenguas, según el Espíritu les permitía
hablar.

—HECHOS 2:1–4

La escritura dice que “fueron todos llenos del Espíritu Santo”. El bautismo del
Espíritu Santo permite que los dones del Espíritu sean liberados a través de
nosotros. Me gusta usar la analogía de cortar el césped en un día húmedo de
noventa grados. Estás caliente y sudoroso. ¿Prefieres tomar medio vaso de
agua o un vaso lleno que
rebosa de agua? Nuestras vidas espirituales se pueden comparar con
un día caluroso. ¿Quieres sólo una porción del Espíritu Santo, como en
ese medio vaso de agua? ¿O quieres ser lleno hasta rebosar del Espíritu
Santo?

Jesús vino para que pudiéramos ser llenos y bautizados con el Espíritu
Santo y fuego (Mateo 3:11). Cuando rebosamos del Espíritu Santo,
podemos operar en los dones del Espíritu como se enumeran en 1
Corintios 12. Específicamente, los dones de sabiduría, conocimiento,
fe, lenguas, discernimiento de espíritus y profecía lo ayudarán a
moverse y operar en el profético.

ORACIÓN AUDIBLE PARA RECIBIR EL BAUTISMO

DEL ESPÍRITU SANTO

Señor, Tú dijiste: “Si te pido”. Pido ahora que el Espíritu del Señor, el Espíritu
Santo, venga sobre mí con poder y fuerza. ¡Jesús, bautízame en tu Espíritu y
fuego! Recibo el bautismo del Espíritu Santo con fuego y evidencia. Espíritu
Santo, quiero y deseo más de Ti y de Tus dones. Bautízame con el poder de
operar y liberar Tus dones. Recibo el empoderamiento y la llenura del
Espíritu Santo, así que estoy rebosante. ¡Tocame ahora! Espíritu Santo,
derrama Tu fuego sobre mí. Bautízame en el fuego y poder del Espíritu
Santo. Fuego de Dios, ven sobre mí ahora. Creo y recibo en el nombre de
Jesús. ¡Amén!

OPERAR EN LO PROFÉTICO

Ser guiado proféticamente por el Espíritu de Dios es un factor de

confianza; construye nuestra relación con el Señor a medida que
confiamos en que el Espíritu de Dios se mueve a través de nosotros. La
duda y la incredulidad deben ser evacuadas de nuestras vidas. Dios
puede y todavía habla a Su pueblo hoy, y aunque eso no siempre sea
audible, puedes conectar tu hombre espiritual con el Espíritu Santo.
Soltar lo profético es una frase que significa soltar palabras en base al don
de profecía u oficio de profeta. (Vea 1 Corintios 12:8–11 y Efesios 4:11).
Moverse en lo profético es una extensión del Espíritu Santo y nos lleva más
allá de lo que sabemos. Las diferentes funciones de lo profético son soltar
una palabra, predicar proféticamente (ser guiado por el Espíritu en lugar de
notas) y ministrar proféticamente con perspicacia de vidente para soltar una
palabra sobre alguien o llevar a esa persona a experimentar sanidad y
liberación.

Estas funciones proféticas dependen en gran medida de cuánto confiemos en el

Espíritu Santo cuando recibimos revelación. Entonces, la revelación debe
convertirse en impartición, activación y aplicación. La guerra espiritual profética
es cómo operar proféticamente a través del Espíritu Santo para participar en la
guerra espiritual. La revelación impartida por el Espíritu Santo conquista
eficazmente los poderes de las tinieblas.

MANIFIESTA TUS PROFECÍAS

Las palabras proféticas pronunciadas sobre nuestras vidas son mapas de

ruta hacia nuestro destino. Son inspiración divina del Espíritu de Dios para
guiarnos en una dirección hacia adelante para liberar el reino de Dios. El
Espíritu Santo usa a las personas para soltar palabras proféticas sobre
nuestras vidas. Además, podemos recibir ideas proféticas directamente del
Espíritu Santo. Pablo nos dice que “profetizamos en parte” (1 Corintios
13:9). Una vez que se recibe la palabra profética, debe hacer su parte. Tu
parte es traer la profecía a la manifestación.

Ejercicio profético: Invoque sus palabras proféticas

1. Examinar la palabra y buscar el Espíritu Santo para la exactitud (1 Juan 4:1).

2. Revise la palabra y vea si se alinea con las Escrituras (1 Tesalonicenses
5:21)

3. Escriba una declaración de oración basada en la palabra que

recibió. (Vea mi libro SPEAK OUT .)

4. Proclamar en voz alta para que se manifieste la palabra (Job 22:28)

Además de los pasos anteriores, he creado un curso electrónico

gratuito que creo que le brindará información útil sobre cómo
manifestar sus palabras proféticas. (Ver el apéndice.)

Hace años, la mayoría de las palabras proféticas que había recibido hasta ahora
se habían manifestado porque continuamente les exigía. Oré, declaré y tomé mi
autoridad para ver el cumplimiento de esas palabras. Entonces le pedí al Señor
que soltara más palabras proféticas sobre mi vida porque había experimentado
los resultados de la mayor parte de la mía. Las personas se inquietan mientras
esperan que se manifiesten sus palabras proféticas, pero cuando
comprendemos que tenemos que colaborar con el Espíritu de Dios a través de
la oración, veremos que nuestras palabras se manifiestan.

La confianza es el elemento más crucial para caminar en lo profético.

Cuando comencé a soltar palabras proféticas, el Espíritu Santo me
probaría. Él expandió mi fe y me hizo confiar en Él cuando
profetizaba. Me llevó de saber lo que diría a confiar en Él para que
me proporcionara las palabras cuando me acercaba a alguien para
decirle una palabra.
Años después me volvió a probar. Me instruyó que no escribiera un sermón
durante seis meses, sino que permitiera que Él me hablara cada vez que
subiera al púlpito, incluso si no tenía ninguna dirección de Él hasta un minuto
antes de comenzar a predicar. Recuerdo haber pensado más de una vez:
“Espíritu Santo, ¿llegas tarde? ¿Vas a aparecer? Estoy caminando hacia el
púlpito, y la primera oración todavía no aparece”. Sin embargo, Él siempre
apareció, y todavía lo hace. Aprendí a confiar. A
este día, no escribo sermones porque Él puede predicar a través de mí
del desbordamiento del Espíritu y la Palabra de Dios que tengo
guardada en mi interior.

ES HORA DE LA ACTIVACIÓN

Tú también puedes caminar en lo profético. Comienza a recibir el

Espíritu Santo en Su plenitud y confía en Él.

ORACIÓN DE ARREPENTIMIENTO, RENUNCIA Y RUPTURA DEL

ACUERDO

Jesús, perdóname por no aceptar mi destino. Recibo el llamado y la unción que

has puesto en mi vida. Renuncio y rompo el acuerdo con terquedad, obstinación
y orgullo. Ordeno que cualquier cosa que bloquee mi destino sea liberada ahora
en el nombre de Jesús. Yo entrego mi carne por Tu voluntad, Señor. Te confío
mi vida y mi destino. Quiero ser poderoso para el reino de Dios. Te pido perdón,
y me perdono a mí mismo. En el nombre de Jesús, amén.

ORACIÓN DE IMPARTACIÓN Y ACTIVACIÓN

¡Espíritu Santo, ven sobre mí ahora! Pido recibir el Espíritu de Dios en plenitud
con fuego y poder. Deseo que cada don se manifieste, y llamo al bautismo de
fuego y poder con evidencia de todos los dones. Creo que lo recibo. Espíritu
Santo, ven y lléname hasta rebosar. Lléname con tu amor y tu Espíritu.
Proclamo que caminaré en mi destino profético y exudaré el poder de Dios en
todo momento. Espíritu Santo, lléname de nuevo. Donde he vacilado o me he
sentido seco y estancado, ¡dame fuego fresco! ¡Bautízame de nuevo en Tu
amor, Espíritu y fuego! En el nombre de Jesús, amén.
 PROCLAMACIONES PROFÉTICAS (DECLARACIONES DE
FE)

Hablo y pronuncio que entro y suelto lo profético con fluidez y

desinhibición.

Libero el poder puro del Espíritu Santo para que surja a través de
mi vida para impactar y alcanzar a otros para el reino de Dios.

Convoco mi destino profético a la plena manifestación. Pongo demanda

profética en el reino espiritual para activar y materializar mis palabras
proféticas.

Invoco palabras proféticas para que se cumplan en mi vida. Hablo

y decreto que el reino espiritual se mueve y activa en mi nombre.

Declaro que tengo fe y confío en el Espíritu Santo con el discernimiento que

recibo.

ACTIVACIÓN ESPIRITUAL

¡Activa lo profético! Prueba estos tres ejercicios para activar lo profético

que llevas dentro.
Practique obtener una palabra de conocimiento o sabiduría. Dele un
cumplido al cajero o a la camarera y luego enfóquese en el Espíritu Santo
y vea si Él le daría una palabra o una imagen para compartir además del
cumplido natural. Espera recibir algo para liberar espiritualmente.

Medita y pasa tiempo en silencio. Pídele al Espíritu Santo que te hable.

Escribe un diario sobre lo que recibiste. Siga escribiendo en la próxima
temporada lo que escucha en su mente y espíritu, y vea si puede
identificar cuándo el Espíritu del Señor está hablando claramente.

Discernir sus palabras proféticas. Busque el Espíritu Santo para estrategias

creativas y elecciones de palabras de oración declarativas para invocar a ver el
cumplimiento de sus palabras.

DECLARACIONES DE GUERRA ESPIRITUAL

Disperso todos los ataques del mal contra mi vida, y ordeno que
estos ataques se disipen en el nombre de Jesús.

Incinero y quemo por completo cada plano demoníaco escrito en

el reino espiritual con mi nombre en él.

Impido que las infiltraciones demoníacas vengan en contra de

mis bendiciones y herencia.
En el nombre de Jesús ato de la activación a todo malhechor que
provoque ataques ilegales y dañinos en el ámbito espiritual debido a mi
destino. Restringo tus actividades por la sangre del Cordero.

En el nombre de Jesús desalojo y expulso toda asignación demoníaca de

sabotaje y espíritu de aborto enviado para robar, matar y destruir mis
profecías y destino.
 Capítulo 3

LIMPIEZA ESPIRITUAL Y PROTECCIÓN

CUANDO MI ESPOSO y yo llevábamos casados cinco años, robaron en

nuestra casa. El ladrón acechó nuestra casa mientras hacíamos una venta
de garaje. Los investigadores de la policía dijeron que el hombre
probablemente entró por la puerta trasera cuando estábamos ocupados
con los invitados, evaluó si valía la pena saquear nuestra casa y salió por
la puerta principal. Unos días más tarde, entró en nuestra casa a través de
la ventana de nuestro dormitorio aproximadamente una hora después de
que nos fuéramos al trabajo. Sabía que nos habíamos ido, así que se
quedó un rato y se sirvió un refresco y una llamada de entretenimiento
premium de cuarenta y cinco minutos.

Nos sentimos invadidos y profanados. Pero dejamos nuestra puerta trasera

abierta, y le dio derecho a invadir. No solo dejamos la puerta trasera abierta
el día de la venta de garaje, sino que tampoco cerramos con llave el día que
entró, lo que le permitió obtener una herramienta para abrir la ventana de
nuestro dormitorio. Ahora sé que cuando tiene una venta de garaje, debe
cerrar con llave todas las ventanas y puertas de su casa. No deis lugar al
enemigo. (Véase Efesios 4:27.)

El diablo también entra y trata de robarnos. El ladrón pudo asaltar nuestra casa
porque no teníamos sistema de seguridad; no teníamos alarma y bajamos la
guardia. Recuerde, el enemigo viene a robar, matar y destruir (Juan 10:10),
especialmente después de que hayamos ministrado o hayamos tenido un
avance profético. Quiere robar tu destino, robar tu salud y arruinar tus finanzas.
Él quiere robar, matar y destruir su vida, sus hijos y su negocio, y usará todos los
medios necesarios para evitar que cumpla el propósito de Dios.

Por eso es tan importante cerrar la puerta a la reacción demoníaca y

mantenerse espiritualmente fuerte. La Biblia describe al enemigo
como un ladrón. Como un ladrón, puede infiltrarse a través de tu
puerta trasera, una puerta de tu alma por la que entra sin que te des
cuenta. Es posible que estés enfocado en una dirección particular,
completamente inconsciente de que él busca invadir tu alma y lanzar
un ataque de guerra cuando menos lo esperas.
El desafío con el enemigo entrando por nuestra puerta trasera es que no lo
vemos, de la misma manera que no vi al ladrón entrar por la puerta trasera
de mi casa. Por lo tanto, el ladrón pudo regresar y saquear mis bienes. El
enemigo también saquea nuestros bienes. Los bienes que saquea son
nuestras emociones, salud y autoestima. Él quiere que nos sintamos
derrotados e indignos, y quiere dejarnos en la condenación, sintiéndonos
estancados e incapaces de avanzar.

Cuando el enemigo entra por la puerta de atrás, a menudo no sabemos

que hemos sido atacados hasta días, semanas o meses después,
cuando de repente experimentamos algo con lo que no habíamos
lidiado antes. Podríamos sentirnos rechazados cuando el rechazo nunca
nos molestó. Puede que sintamos dolor en el cuerpo aunque no nos
hayamos hecho daño. Podríamos preocuparnos o tener miedo de cosas
en las que antes teníamos confianza y seguridad.

Descubrimos el ataque de la puerta trasera a medida que somos

vivificados proféticamente en nuestros sentidos. Nuestras almas y
espíritus pueden alertarnos de que algo anda mal cuando
comenzamos a discernir y analizar por qué nos sentimos bien un día
y luego experimentamos algo poco común al día siguiente. Podemos
ser vivificados y alertados por acontecimientos inusuales.
Participar en la guerra espiritual y hacer el ministerio del reino pinta un
blanco en el centro de su atención. El enemigo se opondrá al avance que
estás haciendo por el reino de Dios. Tienes que estar alerta y consciente de
sus tácticas. Él opondrá resistencia. Cuando conoces sus despliegues y
patrones en tu contra, te capacitará para pelear victoriosamente en la
ofensiva, no en la defensiva.

Escribir este manuscrito ha desatado una gran guerra en mi vida. Sé que

el enemigo no quiere que la gente se movilice para subyugar las tinieblas
espirituales, por lo que la resistencia es intensa, pero somos más que
vencedores en Cristo Jesús.

No, en todas estas cosas somos más que vencedores por medio de
Aquel que nos amó. Por lo cual estoy seguro de que ni la muerte ni la
vida, ni ángeles ni principados ni potestades, ni lo presente ni lo por
venir, ni lo alto ni lo profundo, ni ninguna otra cosa creada podrá
separarnos del amor de Dios, que es en Cristo Jesús nuestro Señor.

—ROMANOS 8:37–39
El amor de Dios es suficiente para aplastar lo que el enemigo nos
lanza. Nuestro enfoque debe estar en la obra terminada de la cruz y
permanecer fuertes para completar la misión que Él ha puesto ante
nosotros. Cuando Jesús fue a la cruz, no se dio por vencido, y nosotros
tampoco deberíamos.

¿Cómo te mantienes espiritualmente fuerte, limpio y protegido mientras

cumples con el llamado de Dios en tu vida? Desarrolle un plan de
acción de batalla para ayudarlo a proteger su corazón, cerrar el acceso
demoníaco y atar y restringir al enemigo en la ofensiva. Probablemente
esté familiarizado con el sistema de seguridad para el hogar llamado
ADT (American District Telegraph). Me gusta aplicar este acrónimo
familiar a mi sistema de seguridad espiritual y orar contra los impíos A =
apegos, D = impurezas o T = transferencias. Cuando termino con un
evento ministerial o una sesión de liberación, siempre oro y establezco
mi sistema de seguridad al decretar en el nombre de Jesús que no
habrá ataduras, contaminaciones o transferencias impías.
Además, oro y hablo: “No habrá retribución del enemigo por la obra del
Señor que hice y por la liberación de los cautivos. Hablo y decreto que la
sangre del Cordero cubra mi familia, hijos, finanzas, mascotas, hogar,
vehículos, ministerio y salud. Pido a Dios que envíe ángeles para que
guarden y protejan todo y me refresquen”. Ahora, no soy legalista sobre
esto, pero oro esto guiado por el Espíritu, y siento que debo establecer un
cortafuegos alrededor de mí y de mis seres queridos.

Ejercicio Profético: Ora un Cortafuegos de Protección

¡Ora conmigo ahora! ¡Habla audiblemente!

Espíritu Santo, te doy gracias por el conocimiento que estoy recibiendo. Ordeno
que no habrá retribución por aprender a librar una guerra espiritual profética.
Hablo y decreto que la sangre del Cordero cubra a mi familia, hijos, finanzas,
mascotas,
electrodomésticos, hogar, vehículos, ministerio, y salud. Hablo y decreto
que ninguna arma forjada contra mí prosperará. Envía a Tus ángeles para
que guarden y protejan a todos los que amo y todos mis bienes. Vengo
contra espíritus de confusión. Hablo con claridad y comprensión mientras
estudio este tema. Ato a todo gobernante malvado para que no envíe
ataques y obstaculice mi destino. Hablo y decreto que no habrá
contragolpe. Ordeno que mis palabras proféticas sean liberadas de
acuerdo a la voluntad de Dios. ¡En el nombre de Jesús, amén!

RELACIÓN CON EL PADRE

Quiero hablar de tu relación con Dios. ¿Con qué nombre llamas a Dios?
No estoy hablando de Jesús o del Espíritu Santo. Hablo de la última
persona de la Trinidad, Dios Padre. Tómese un momento e identifique el
nombre que usa para dirigirse a Dios. Tu terminología al dirigirte a Dios
revela dónde estás en tu caminar con Él y el lugar de intimidad que tienes
con Él. Dios es Padre. El padre es personal e íntimo.

Ejercicio Profético: Identificar a Dios como Padre

Si nunca se ha dirigido a Dios como Padre en su tiempo de oración o en su

vocabulario, quiero que se detenga aquí y medite en algunas cosas. ¿Tuviste
una ruptura en una relación con tu padre terrenal? ¿Alguna vez dijo: “Te amo”?
¿Era amable o malo y agresivo? ¿Alguna vez abusó de ti? ¿Te abandonó?
Nuestra relación con el padre terrenal tiene un impacto directo en nuestra
relación con el Padre celestial. Busque la curación del alma si tiene problemas
con el padre. Mi libro Unshackled te ayudará a recibir sanidad interior y
liberación en tu alma.
La contaminación sexual es otro factor que puede bloquear nuestra
relación con nuestro Padre celestial. Lamentablemente, es un problema
demasiado común y, sin embargo, muchas personas no se dan cuenta al
principio. Si las personas han sido abusadas o acariciadas de manera
inapropiada, es común ocultar esos sentimientos y bloquear esas
experiencias. El problema es que aún crean trauma, provocando una
necesidad de sanación emocional y posiblemente liberación de los
espíritus demoníacos. He ministrado a muchos cristianos que no
pensaron que habían sido abusados sexualmente de ninguna manera.
Después de pasar por varias sesiones, el Espíritu Santo revelaba el
abuso. No tenían que revivirlo; necesitaban reconocerlo y curarse de él.
Puede haber problemas en nuestro pasado, aunque no seamos
conscientes de ellos, que aún pueden estar activos en el reino espiritual
sobre nosotros que deben tratarse y eliminarse.

¿Ha sido abusado sexualmente? No todo el mundo tiene. Sin embargo, si tu

respuesta es no, te pido que medites más esta pregunta y la lleves al
Espíritu Santo. Recuerda si alguna vez alguien te tocó de manera
inapropiada, pero te encogiste de hombros o no le diste mucha importancia.
¿Se sintió incómodo con la forma en que alguien lo miró o lo tocó? No dejes
pasar esta oportunidad. Piensa ahora mismo y determina si algo viene a la
memoria a través de este ejercicio profético.

Ejercicio Profético: Libertad del Abuso

¿Hubo alguna vez que alguien te tocó de manera inapropiada o que fuiste
agredida sexualmente? ¿Puedes recordar un momento en que te sentiste
incómodo con algo que alguien hizo, sin importar lo minúsculo que fuera? Si
puede recordar algo fácilmente, es posible que necesite curación si aún no lo
ha recibido. Piensa en la situación y concéntrate en el tipo de sentimientos que
genera. No lo piense demasiado ni trate de revivir la situación. ¿Necesitas
liberar el perdón hacia un
delincuente o un miembro de la familia por no prevenir estas acciones? ¿Qué
sientes?
¿Cómo puedes liberar esos sentimientos?

Si su respuesta sigue siendo no, en base a mi experiencia como

ministro de liberación, quiero llevarlo un paso más allá.

Ejercicio Profético: Revelación del Espíritu Santo

Ore y pídale al Espíritu Santo que le revele cualquier cosa oculta o en la

oscuridad de su pasado. (Véase Marcos 4:22.) Presiono este tema porque
quiero guiarte a la libertad. He visto a personas ignorarlo o no permitir que
el Espíritu entre para recibir una liberación completa. He sido testigo de
los beneficios de la transformación. Alabo a Dios si no lo has
experimentado, pero te pido que seas lo suficientemente honesto contigo
mismo y con el Señor para permitirle que te examine y te revele todas las
cosas, no solo las cosas que elijas. La actitud de “lo que no sabes no te
hará daño” sí te hace daño. A medida que maduras en tu caminar con el
Señor, y a medida que Él te da la revelación, te lleva a la libertad.

Confíe en el Espíritu Santo para revelarlo y liberarlo en Su tiempo.

Cuando sientas que Él te está convenciendo y trayendo de vuelta a
este recuerdo, continúa con este ejercicio.
Tranquilízate y pídele al Espíritu Santo que revele y traiga a la luz cualquier
cosa que esté oculta que Él quiera revelar para llevar a la sanidad. Si el Espíritu
Santo trae algo, ore y confíe en Él para que lo guíe a través del proceso de
sanidad. No permitas que el diablo tenga un punto de apoyo. Atar y restringir
imaginaciones vanas y escenarios falsos. Confía en que el Espíritu Santo es un
caballero, y si necesita sacar algo, lo hará con amor y dignidad. Él no revelará
cosas que te causen trauma, miedo o dolor, a menos que sea para llevarte a
través de la liberación. El resultado final de lo que descubras debe dar fruto en
tu
vida y en definitiva os dé la paz y glorifique el nombre de Jesucristo.

Realmente creo que si una persona ha sido abusada pero no lo

recuerda, el Espíritu Santo lo revelará en el momento adecuado. Él
sabe cuándo cada persona puede manejarlo. He sido testigo de muchos
cristianos que descubrieron su abuso y estaban agradecidos de haberlo
hecho. Ahora que han sido liberados del trauma y los lazos del alma
asociados, se sienten diferentes acerca de sí mismos. ¡Ha cambiado
sus vidas!
Después de que elimines estos obstáculos, recibas sanidad de cualquier
problema con tu padre terrenal o cualquier abuso sexual, podrás entrar
en una relación estrecha con el Padre celestial. La gente no se dirige a Él
como Padre porque no lo conocen como Padre. Para conocerlo como
Padre, debes quitar cosas de tu pasado que te impiden acercarte a Él.
Cuando nos acerquemos a Él, lo veremos como un Padre amoroso que
nunca nos hará daño, sino que solo tendrá en mente nuestros mejores
intereses. Notarás cambios en tu vocabulario y adornos de Dios Padre a
medida que aumentes la intensidad de tu relación con Él y comiences a
decir, “Padre”, cuando te refieras a Él.

ALÓJATE EN UN LUGAR DE DESCANSO

Luchar contra las fuerzas oscuras y ser atacado espiritualmente puede

desgastarte física, emocional y espiritualmente. Permanecer en un lugar
de descanso perpetuo con el Padre celestial es crucial cuando estás en
el frente de batalla. Cuando estés con tu Padre, nada será impenetrable.
Cuando un arma o dardo del enemigo intente invadir tu alma, estarás tan
lleno de la presencia del Señor que podrás despedirlo fácilmente.

Estar en un lugar de descanso es relajante. Disfruta de Su presencia y alivia

tu mente de las luchas. El descanso no es oración de guerra. Es un tiempo
para llenar y no derramar. Hay un tiempo para soltar la unción y un tiempo
para refrescarse.
Disfrutar de la presencia del Señor es difícil para las personas porque
estamos acostumbrados a estar continuamente activos y tener que trabajar
por las cosas. Nos desafía a establecer nuestras mentes y nuestros cuerpos
físicos para descansar. He tenido temporadas en las que no puedo
descansar lo suficiente en Él, y nunca quiero otro día sin este tipo de paz e
impartición. Otras veces, estoy tan ocupado que tomarse el tiempo para
estar quieto y descansar, aunque sea por unos minutos, es un desafío. Sin
embargo, se siente tan bien estar protegido en ese lugar de paz y unidad con
Él. El descanso te refresca y te da fuerzas para seguir adelante.

¿Cómo descansamos en Su presencia? Aquietamos nuestras mentes y

esperamos recibir de Él. Una forma de hacer esto es tocar música suave de
adoración, profética, instrumental o relajante. Elijo postrarme la mayor parte
del tiempo cuando escucho música para refrescarme en Su presencia. Hay
algo acerca de humillarte e ir al piso que disfruto. Pongo un bloc de notas
cerca para la revelación que pueda recibir o para escribir rápidamente un
pensamiento que me distrae en una lista de tareas pendientes. De esta
manera, puedo sacarlo de mi mente sin preocuparme de que lo olvide más
tarde. Descansar en Su presencia es glorioso y necesario a medida que
aprendemos a ser victoriosos en la guerra espiritual.

Establecer límites en tu vida es importante. Debemos conocer los límites de

lo que podemos manejar y dar un paso atrás cuando comenzamos a
sobrecargarnos. ¡Es necesario establecer límites con la familia, el trabajo, el
ministerio y todo! Establecer límites seguros y un balance de paz, trabajo,
ministerio y “tiempo de Dios” nos hace mejores ministros, empleados, jefes,
cónyuges, padres y amigos. Aprender a decir no o detenerse, en otras
palabras, establecer límites saludables, puede ayudarnos a eliminar los
puntos de acceso demoníacos.

Cuando te desgastas, el enemigo se afianza en tu vida. Cuando vives una

vida ocupada con muchas demandas, no estás tan alerta como deberías
estar, y el enemigo puede usar esas oportunidades para entrar por la
puerta de atrás. También podemos experimentar fatiga mental, que es un
punto de acceso a nuestras almas. Nuestros guardias están bajos cuando
experimentamos presión y fatiga. Podemos consumirnos con nuestros
problemas, la sequía en nuestras vidas y la derrota que sentimos. Cuando
esto suceda, no estaremos en oración como deberíamos. Por lo tanto, no
somos tan perspicaces como deberíamos ser.
CIERRE LA PUERTA TRASERA
El ladrón entra cuando no estamos vigilando, por eso la Biblia nos dice que
estemos alerta y vigilantes. “Sed sobrios y vigilantes, porque vuestro
adversario el diablo, como león rugiente, anda alrededor buscando a quien
devorar” (1 Pedro 5:8). Una forma en que el enemigo ha ganado acceso a
mi vida es durante los momentos en que he ministrado liberación a otros. He
aprendido que cuando termino de ministrar, debo pasar tiempo en oración.
Oro contra la reacción espiritual, le pido a Dios que envíe ángeles en misión
y descanse en el Padre.

Jesús fue solo para estar con el Padre después de haber ministrado. Sigue el
ejemplo de Jesús. Te mantendrá en un lugar de descanso y en un lugar donde
se niega el acceso al enemigo. El diablo está buscando escapatorias en tu vida.
Una de esas lagunas es ministrar cuando estás en una lucha. Puedes pasar por
cosas, y sí, Dios puede usarte, pero cuando estás pasando por una batalla
enorme, es mejor retirarse y retirarse por un tiempo de consagración y
reenfoque. La consagración es un tiempo dedicado y centrado en el Señor a
través de la oración, el ayuno y la soledad. Experimentar una guerra intensa
puede hacer que te concentres en la guerra física en cuestión y no
necesariamente en lo que no se ve. Lo que no se ve penetra y entra por la
puerta de atrás y te deja peor que antes.

Arrepiéntase rápidamente para cerrar cualquier punto de entrada al pecado y

evitar que el enemigo entre por su puerta trasera. Busque a Dios para su
avance. Presionar hacia tu liberación rompe la pasividad y el estancamiento, y
cuando esas cosas se rompen en tu vida, el enemigo queda expuesto y
eliminado. No significa que necesites ver un demonio en cada esquina. Significa
que debe estar alerta y abierto a la posibilidad de que los espíritus malignos
puedan estar al acecho. Descubrir qué es tu carne y qué es demoníaco te
ayudará a saber cómo orar con precisión.

ORAR POR LA OFENSA

Un buen lugar para comenzar a ganar la batalla contra el enemigo es orar por la
ofensiva y no por la defensiva. Las oraciones contundentes, feroces y
autorizadas aniquilan el campamento del enemigo y saquean sus bienes contra
ti. Cree con fe que cuando colaboras con el Espíritu Santo, Él te dará las
palabras adecuadas para hablar. Desarrollar una estrecha relación personal con
el Espíritu Santo que incluya
asociarse con Él en oración, no solo orar en lenguas, sino unir
fuerzas y orar con Él en su idioma nativo.
Confíe en el Espíritu Santo cuando ore. “Asimismo, el Espíritu nos ayuda
en nuestras debilidades, porque qué pedir como conviene no lo sabemos,
pero el Espíritu mismo intercede por nosotros con gemidos indecibles”
(Rom. 8:26). Nuestras vidas de oración se estancan porque estamos
aburridos de nuestras vidas de oración. Involucra al Espíritu Santo y
permítele orar a través de ti. Esto hará que su tiempo de oración se vuelva
vibrante y lleno de vida. ¡Será tan divertido que no querrás dejar de rezar!
Este tipo de colaboración con el Espíritu Santo comienza por desarrollar
una relación, escucha y confianza.

LIMPIEZA DE HERIDAS DEL PASADO

La limpieza espiritual comienza con nosotros. Mi esposo dice: “Si quieres ver un
avivamiento, dibuja un círculo en el suelo, da un paso adelante y ponte en él”.
Antes de que podamos liberar al mundo, debemos buscar la liberación. Las
heridas del alma son puntos de entrada abiertos al reino demoníaco. Debemos
eliminar estos puntos de entrada para protegernos. La sanidad interior y la
liberación van de la mano. No puedes tener uno sin el otro. La sanación interior
es descubrir las heridas de nuestra alma, liberar y recibir el perdón, y trabajar
nuestros sentimientos y pensamientos sobre los ataques, heridas y abusos que
hemos sufrido. La liberación es expulsar el espíritu demoníaco correspondiente
cuando corresponda.

La sanidad interior traerá paz a nuestras almas. El diablo no quiere que

mantengamos esa paz, y los ataques demoníacos y las fortalezas espirituales son
algunas de las formas en que trata de robarnos la paz. Cuando hemos lidiado con
maldiciones generacionales, heridas del alma, abusos y otras aflicciones durante
años, pueden convertirse en fortalezas en nuestra vida. A través de situaciones,
emociones y circunstancias adversas, incluso accidentes, adicciones y
experiencias cercanas a la muerte, los espíritus demoníacos pueden infiltrarse en
nuestras almas y deben ser expulsados. Cuando no recibimos un avance, a
menudo se debe a que recibimos sanidad interior pero no fuimos lo
suficientemente profundos para expulsar el espíritu demoníaco correspondiente
como lo hizo Jesús. Cuando no permitimos que la sanidad interior y la liberación se
manifiesten juntas, recibimos un alivio temporal pero no resultados duraderos.
hacer que llegue a su plena realización. En mi libro Unshackled
discuto esto más a fondo y guío a las personas hacia ya través de la
sanación interior y la liberación. (Ver el apéndice.)
Cuando no estamos espiritualmente limpios, los puntos de acceso
demoníacos y los espíritus malignos pueden atacarnos. ¿Cómo podemos
hacer la guerra de manera efectiva si, dentro de nosotros, albergamos lo
mismo que estamos tratando de combatir en el reino de los espíritus?
Recuerdo un excelente ejemplo de esto. Mi equipo y yo estábamos
realizando una sesión de liberación y un miembro del equipo tenía un espíritu
de ira que no había sido desalojado por completo. Estábamos ministrando a
una persona que tenía un fuerte espíritu de ira. Mientras mi equipo trataba de
expulsar la ira de la persona, el miembro del equipo con un espíritu de ira
comenzó a manifestarse. Tuvimos que sacar al miembro del equipo de la
sesión para que no interfiriera con la liberación de la persona.

INTELIGENCIA ENEMIGA

El enemigo conoce tus luchas y debilidades. Ha observado maldiciones

generacionales y ha enviado espíritus monitores. Él sabe cómo presionar tus
botones porque ve lo que te molesta y te hace ir en una dirección negativa. Él
sabe cómo luchas y qué te consume.

Las palabras que decimos son poderosas y liberan cosas en la

atmósfera espiritual. El enemigo quiere causar estragos en tu vida. A
medida que el enemigo recopila inteligencia sobre su vida, surgen y se
manifiestan nuevos ataques de guerra. Hace años, el Señor me reveló
cómo orar con eficacia contra la información que recopila el enemigo.
El mundo demoníaco usa líneas de comunicación y canales de
frecuencia en el reino espiritual.

Ejercicio Profético: Declaraciones Contra el Ataque Espiritual

Aquí hay algunas declaraciones de mi libro Discerniendo y Destruyendo las
Obras de Satanás que el Espíritu Santo me dio sobrenaturalmente. Utilícelos
como ejemplos de lo que debe decir en voz alta y consulte ese libro para
obtener la revelación completa y la lista de declaraciones que puede orar contra
los ataques en su vida.

• En el nombre de Jesús, ordeno a los guardias demoníacos y espíritus

territoriales que no me sigan, escuchen, informen o recopilen
información para usar en mi contra.

• Disuelvo y profano las corrientes de comunicación malvadas y los

canales de frecuencia en el reino espiritual con la sangre del Cordero.

• Ordeno que las tropas demoníacas sean desmanteladas,

desobedientes, desorganizadas y sin compromiso con sus
asignaciones.

• Envío interferencias al campo del enemigo para destruir sus tácticas

organizativas.

• Ato toda cháchara espiritual y silenciaré la boca del adversario y de

sus secuaces. En el nombre de Jesús, ordeno que cesen de inmediato
todas las conversaciones enviadas contra mí, mi familia y mi ministerio.

MIEDO A LOS ESPÍRITUS MALOS

No hay nada que temer cuando se piensa en espíritus malignos. Jesús dijo:
“Miren, les doy autoridad para hollar serpientes y escorpiones, y sobre todo el
poder del enemigo. y nada os dañará” (Lucas 10:19). Tenemos
autoridad sobre el diablo; no tiene autoridad sobre nosotros. Él puede
lanzar un ataque espiritual en tu camino, pero el poder de Dios dentro de ti
tiene la última palabra.

Como dije antes, la Biblia no dice que nunca seremos atacados. Dice que el
ataque no prosperará. “Ninguna arma forjada contra ti prosperará” (Isaías
54:17). La Biblia judía completa dice: “Ninguna arma hecha prevalecerá
contra ti”. Prevalecer significa ser eficaz o eficaz. Medios efectivos para
producir un efecto deseado. No podemos discutir cuando estudiamos las
capas proféticas de este versículo. Podría decir: “Ninguna arma o ataque
formado contra ti será efectivo o producirá los resultados deseados por el
enemigo. En cambio, cualquier arma que se cruce en tu camino será refutada
por el Señor”.

Vemos una historia de manifestaciones demoníacas en Marcos 5. “Pero

cuando vio a Jesús de lejos, corrió y se arrodilló delante de Él, y gritó a
gran voz: ¿Qué tienes conmigo, Jesús, Hijo del Dios Altísimo? Te
conjuro por Dios, no me atormentes'” (vv. 6–7). Los demonios tienen
miedo de Jesús y gritan en voz alta, rogándole que no los atormente.
Los demonios tienen miedo del poder de Dios. Tenemos el poder de
Dios dentro de nosotros a través del poder del Espíritu Santo que mora
en nosotros. Por lo tanto, los demonios deben temer al Espíritu de Dios
en nosotros, y nosotros no debemos tener miedo.
Recuerdo una vez cuando estaba en un lugar remoto para el ministerio, y
pude ver los demonios en ese lugar. Tengo el hábito de reproducir Escrituras
grabadas para limpiar la atmósfera cuando estoy en un lugar nuevo o en una
habitación de hotel. Por lo tanto, configuré mi iPod en mi base para
reproducir las Escrituras. Lo escuché mientras desempacaba y luego salí de
la habitación para visitar a mi anfitrión. Cuando regresé, la base y el iPod
estaban separados y esparcidos al otro lado de la habitación. Solo me había
ido por un par de horas, pero estuve cerca todo el tiempo, lo suficientemente
cerca como para saber que nadie había entrado en la habitación. A pesar de
estos hechos, dormí en esa habitación y no tuve miedo. Sé que voy en el
nombre del Señor, y sé que mi Dios es mayor que todo espíritu maligno.

ES HORA DE LA ACTIVACIÓN
Cierra la puerta al enemigo, y entra al descanso perfecto de tu relación
con Dios.
 ORACIÓN DE ARREPENTIMIENTO, RENUNCIA Y
RUPTURA DEL ACUERDO

Jesús, te pido perdón y me arrepiento de cualquier inmundicia, impureza y

pecado al que he contribuido. Rompo el acuerdo con el pecado que era una
puerta abierta para la infiltración demoníaca en mi hogar, vida espiritual,
emociones y relación contigo. Me arrepiento de cualquier acción y pensamiento
impío. Me arrepiento por no cerrar la puerta al enemigo en todas las áreas de
mi vida. Te pido que me perdones por cualquier distancia en nuestra relación.
Destruyo cada fortaleza con la que he llegado a un acuerdo y le ordeno que se
vaya ahora en el nombre de Jesús. Amén.

ORACIÓN DE IMPARTACIÓN Y ACTIVACIÓN

Jesús, dame un fuerte deseo de estar en Tu presencia. Donde he sido

desobediente y falto de disciplina, dame perseverancia, empuje y deseo. Señor,
te amo y quiero acercarme más a ti. Elimina todo lo que no sea tuyo, incluidas
las posesiones, las amistades, los ídolos y los patrones y hábitos de
comportamiento. Ayúdame a buscarte con todo en mí y darte la primera
prioridad en mi vida. Recibo tu amor y te pido, Espíritu Santo, que elimines las
barricadas y los obstáculos. Ayúdame a ser productivo y fructífero en mi día y
caminar espiritual. Confío en que me amas y sé que nunca me harás daño. ¡En
el nombre de Jesús, amén!

PROCLAMACIONES PROFÉTICAS (DECLARACIONES DE

FE)
Proclamo que soy amado por el Padre y tengo una relación íntima con
Él sin obstáculos ni obstáculos.
Decreto que mi caminar espiritual aumente y que vaya de gloria en
gloria. La presencia del Señor me rodea.

Cancelo cualquier espíritu obstaculizador que intente evitar que los

ángeles lleven a cabo su tarea de cuidar y proteger a mi familia ya mí.
Hablo y declaro que estoy cubierto con la sangre de Jesús, y ninguna
arma forjada contra mí prosperará.

Yo digo que soy un adorador. Me encanta adorar y pasar mi

tiempo libre adorando al Padre en espíritu, verdad y libertad.

Proclamo que mis relaciones terrenales de ninguna manera inhiben mi

relación con mi Padre celestial, Su Hijo Jesús y el Espíritu Santo.

ACTIVACIÓN ESPIRITUAL

Ore y unja su hogar, vehículo, posesiones y cuentas bancarias. Ore por

protección en torno a todo lo que posee y a todas las personas
importantes para usted, incluidos los miembros de la familia y las
mascotas.

Desarrolle un plan para aumentar su caminar espiritual y busque la

liberación de Jesús. Permita que el Espíritu Santo lo guíe y guíe a
través de un tiempo productivo de intimidad con la Trinidad.
Recibe liberación de cualquier herida paterna o abuso sexual que hayas
experimentado. Encuentre un ministro de liberación de confianza y
solucione los problemas que le impiden recibir plenamente el amor del
Padre.

DECLARACIONES DE GUERRA ESPIRITUAL

Ato y restrinjo toda operación demoníaca para que no venga contra mi

destino. ¡En el nombre de Jesús, hablo de cada distracción y retraso en mi
vida, y te ordeno que ceses! Estás restringido de activarte contra mí.

Hablo y decreto que los planes de los ladrones de tiempo y los

derrochadores del destino asignados desde el reino de las
tinieblas sean difundidos.

En el nombre de Jesús, aborto todo despliegue y misión demoníaca que venga

en contra de la edificación y mejora de mi relación con el Señor.

Expulso y expulso a la fuerza cada espíritu monitor enviado para

interrumpir mi crecimiento espiritual.

Aniquilo con el fuego de Dios toda maniobra malvada contra mi fe y

contra el aumento de mi relación con el Señor.
 Capítulo 4

LA GUERRA ESPIRITUAL ES AUDIBLE

TODOS HEMOS ESCUCHADO que la batalla está en nuestras mentes. Pero,

¿hemos oído que la victoria sale de nuestra boca? Nuestras palabras son
proféticamente asignadas y enfocadas para obtener resultados. Visualiza tus
palabras saliendo como una poderosa corriente de aire que atraviesa la
habitación. Alcanzan un objetivo y obtienen resultados. Somos huestes del
Ruach Ha'Kodesh, el aliento de Dios, y como Él nos ha dado dominio cuando
hablamos, es Su aliento, Sus palabras, y el reino espiritual debe responder.

¡Hay poder en las palabras que decimos, incluso si no lo sabemos o no lo

creemos! Mi yerno supo cuando empezó a salir con mi hija que quería casarse
con ella. No conocía el poder de sus palabras, pero siguió declarando, y se
manifestó. Mi hija decía que tendría un caballo y un perro, y se manifestó. El
poder de nuestras palabras puede ir tanto en una dirección positiva como
negativa. Proverbios 18:21 dice: “La muerte y la vida están en poder de la
lengua”. Nuestras palabras pueden activar y llamar cosas y atar y restringir al
enemigo.

El principio de atar y desatar debe hacerse de manera audible. “A ti te

daré las llaves del reino de los cielos, y todo lo que ates en la tierra
quedará atado en los cielos, y todo lo que desates en la tierra quedará
desatado en los cielos” (Mateo 16:19). El reino demoníaco no puede
escuchar lo que oras cuando oras en silencio, conectando a tu
hombre espiritual con el Espíritu Santo. Tomas autoridad sobre el
reino demoníaco cuando hablas, cuando decretas y declaras usando
tu voz.
Nuestro Padre celestial habló cuando creó la tierra en Génesis 1, y Jesús
habló en varias ocasiones en los Evangelios cuando oró para que viniera
la sanidad y los demonios huyeran. Además, David llamó y clamó a Dios
por liberación. David lloró, llamó y dijo. Estas palabras son verbos e
indican acción. Las palabras también significan una súplica audible. Llorar
en estas escrituras no se refiere a derramar lágrimas sino a hacer una
fuerte súplica a Dios para que detenga la guerra y lo libere de sus
enemigos. Debemos pelear la guerra de la manera en que la Biblia lo
modela: audiblemente.
 JESÚS HABLÓ

Jesús modeló cómo luchó contra el diablo cuando fue tentado en el

desierto. Respondió citando la Palabra, diciendo: “Escrito está”.

Pero Él respondió: "Escrito está: 'No sólo de pan vivirá el hombre, sino
de toda palabra que sale de la boca de Dios'".
—MATEO 4:4

Jesús le dijo: "También está escrito: 'No tentarás al Señor tu Dios'".

—MATEO 4:7

Entonces Jesús le dijo: “¡Fuera de aquí, Satanás! Porque escrito está:

Al Señor tu Dios adorarás, y a Él solo servirás.
—MATEO 4:10

Jesus dijo. El Diccionario Americano del Idioma Inglés define la palabra decir
como hablar, expresar en palabras, declarar, confesar y pronunciar.¹ Estas son
acciones audibles que expresamos con nuestras voces y bocas. Jesús luchó
contra el diablo, no pensando en la Palabra de Dios sino hablando la Palabra de
Dios. También habló cuando ministró en sanidad y liberación. Hablaba
constantemente a las cosas. Habló a un demonio y le dijo: “¡Cállate y sal de él!”.
(Marcos 1:25); Habló a una higuera (Marcos 11:14); Le dijo a un leproso: “Sé
limpio” (Mat. 8:3); y le dijo a un paralítico que tomara su camilla y caminara
(Marcos 2:11). Jesús modeló la guerra espiritual audible y demostró la
poder y autoridad de la palabra hablada.

Jesús estaba en el ministerio de liberación. Sabía cómo atar y restringir al

enemigo y expulsar demonios. Cuando estudiamos los Evangelios, podemos
ver que Jesús peleó la guerra de manera audible y pronunció órdenes para
hacer que los demonios se fueran.

“¡Cállate y sal de él!” (Marcos 1:25).

“¡Sal del hombre, espíritu inmundo!” (Marcos 5:8).

“Espíritu mudo y sordo, yo te mando, sal de él, y no entres más en él”

(Marcos 9:25).

El diablo no es omnisciente (conocedor infinito, todo lo ve), omnipotente (posee

un poder ilimitado) ni omnipresente (presente en todos los lugares al mismo
tiempo). Por lo tanto, él no puede escuchar tus pensamientos o lo que oras en
silencio cuando conectas tu espíritu con el Espíritu Santo. Una vez, le enseñé a
una persona cómo reprender al enemigo, y él seguía reprendiendo al enemigo
en su mente. Lo que él oró nunca se manifestó, y se requirió una intervención
física natural en su situación en lugar de una intervención sobrenatural divina
del cielo.

Nos sentimos incómodos y no estamos familiarizados con las oraciones y

declaraciones audibles porque antes de que muchos de nosotros entráramos en
iglesias llenas del Espíritu, no se nos enseñó a orar en voz alta para atar y
restringir el ámbito espiritual o invocar las bendiciones de Dios. No tenemos
confianza y nos preocupa cómo sonarán nuestras oraciones cuando
comencemos a hablar. Por lo tanto, nos quedamos en silencio y tratamos de
luchar contra el enemigo en nuestras mentes en lugar de hacerlo con la boca, y
no obtenemos los resultados que deseamos.
Aquí hay un buen ejemplo. Están reunidos en una comida y es hora de bendecir
la comida. ¿Lo que sucede? Hay una pausa incómoda mientras todos esperan
que alguien más se ofrezca como voluntario para orar en voz alta. Si hay un
pastor en el grupo, todos se remiten a él o ella. Se sienten intimidados para orar
en voz alta por temor a lo que otros harán.
pensar y cómo sonará.

No tenemos miedo de gritarle a la televisión, gritar en un partido de

fútbol, regañar a alguien o animar a alguien. No debemos preocuparnos
por cómo se verá o sonará si oramos en voz alta, tomamos autoridad y,
sí, incluso a veces le gritamos al diablo.

¿Quién sabe? Puede obtener algo de libertad si le grita al enemigo y lo

pone debajo de sus pies. Si no está bajo tus pies es porque no lo
pones ahí con el poder de tus palabras.

Ejercicio Profético: Declarar Audiblemente Contra el Enemigo

¿Sobre qué necesitas tomar autoridad? ¿Dónde necesitas poner al

diablo debajo de tus pies? ¡Habla, ahora mismo! Use las siguientes
declaraciones para comenzar, y luego tenga fe al comenzar a declarar
audiblemente que el Espíritu Santo se asociará con usted y le revelará
lo que debe decirse en voz alta para su situación.

Ato y restrinjo toda asignación demoníaca contra mi familia, mi salud y mis

finanzas. Ordeno que tus ataques dejen de existir. Sal de aquí y sal de mis
instalaciones. Cese y desista de toda asignación contra mí y aquellos a
quienes amo y cuido. Proclamo que ninguna arma forjada contra nosotros
prosperará (Isa.
54:17).
Cada ataque maligno contra mi mente, cada espíritu infiltrado tratando de
atacarme con miedo, trauma, ansiedad, depresión, enfermedad mental,
derrota y mentalidad de víctima, les digo que aborten su asignación.
Tienes restringido el acceso a mi mente. Tengo una mente sana,
disciplinada y con dominio propio (2 Timoteo 1:7). Tengo la mente de
Cristo (1 Cor. 2:16).
Cada intrusión demoníaca en mi línea generacional y que viene en contra de
mis palabras proféticas, reprendo, cancelo y anulo tus efectos en el reino
espiritual. Hablo y decreto que mi destino avanzará sin obstáculos, demoras o
destrucción. Cada marcador demoníaco con mi nombre asignado, quemo tu
punto de contacto y marcador con el fuego de Dios. ¡El fuego de Dios apresa a
mis enemigos y trae bendición generacional y mi destino profético!

Debemos ser contundentes contra el enemigo, usando la autoridad que Jesús

nos da al hablar en contra de los poderes de las tinieblas. La Biblia dice: “Desde
los días de Juan el Bautista hasta ahora, el reino de los cielos sufre violencia, y
los violentos lo arrebatan” (Mateo 11:12, NVI). La versión en inglés moderno
traduce el mismo versículo como: "Desde los días de Juan el Bautista hasta
ahora, el reino de los cielos avanza con fuerza, y los fuertes lo arrebatan".
Necesitamos ser contundentes y fuertes con el poder de nuestras palabras.
Nuestras palabras son proféticamente asignadas y dirigidas a crear un resultado
espiritual. Queremos crear un resultado cuando atamos y restringimos al
enemigo contra nosotros. Logramos esto cuando elevamos nuestras oraciones
al reino espiritual para que el reino demoníaco responda a las palabras que
decimos y la autoridad que exudamos.

ORAR EN LO NATURAL

Las oraciones de guerra espiritual se pueden orar en lo natural por lo que

sabemos sobre una situación. Podemos aplicar palabras destructivas al
ámbito espiritual tomando el conocimiento natural que tenemos sobre una
situación y orando para destruir los poderes de las tinieblas contra nosotros.
Conocemos las circunstancias y las oraciones y palabras específicas que
podemos dirigir en esa dirección. Todos tenemos un nivel de inteligencia y
sentido común de lo que se necesita orar. Es efectivo orar en lo natural hasta
que lo espiritual entre en acción, pero debemos aspirar a ir más profundo,
más lejos y más amplio en nuestra vida de oración. La oración es la base.
Establecer una base en lo natural nos ayudará a medida que hacemos la
transición a lo espiritual.
La Escritura es un gran lugar para obtener información y sabiduría sobre lo
que se debe hablar proféticamente a través de la oración. El Libro de los
Salmos es un libro de oración.
y un gran lugar para abastecer nuestros arsenales con artillería contra
el diablo. La Biblia es una herramienta fenomenal contra el diablo y los
malos espíritus en cada situación que encontramos. En su Biblia,
subraye o resalte las oraciones, las escrituras de guerra y las armas
poderosas que puede usar contra el diablo en su tiempo de oración.
Además, etiqueto cada salmo como alabanza, guerra o un tema
específico que los describe para una fácil referencia cruzada. Esta
práctica me ayuda a tenerlos disponibles en cualquier momento cuando
necesito hablar en contra de una situación particular.

EL ESPÍRITU SANTO ES TU GUÍA

El estancamiento y la sequedad pueden afectar su vida de oración. Rezas y te

duermes o te aburres, sintiendo que siempre rezas las mismas oraciones
repetitivas. ¿Alguna vez has considerado al Espíritu Santo como tu Guía en tu
tiempo de oración? “Pero cuando venga el Espíritu de verdad, él os guiará a
toda la verdad. Porque Él no hablará por su propia cuenta. Pero Él hablará
todo lo que oiga” (Juan 16:13).

El Espíritu Santo está conectado con Dios el Padre y Jesús, Su Hijo.

Jesús es nuestro gran intercesor, y el Espíritu Santo está aquí para
ayudarnos. ¿Recurrimos a Su ayuda a través de la oración? En este
ejemplo particular de oración, no estoy hablando de orar en lenguas,
aunque lo que te enseñaré podría aplicarse a cuando oras en lenguas.

Podemos orar de forma natural basándonos en lo que sabemos, y

podemos incorporar las Escrituras en nuestro tiempo de oración. Pero,
¿qué hay de invitar al Espíritu Santo a nuestro tiempo de oración? Lo
profético en la guerra espiritual profética es dejar que el Espíritu Santo
dirija y guíe. Tenemos al Espíritu Santo morando dentro de nosotros.
Necesita aprovechar Su poder y concentrarse conscientemente en su
hombre espiritual y en el Espíritu Santo cuando ora. Colabore con el
Espíritu Santo en la oración, y le ayudará a orar lo que el Espíritu Santo
sabe que se debe orar, llamar y liberar en el ámbito espiritual. El Espíritu
Santo sabe mejor porque Él es parte de la Trinidad, el equipo más grande
de tres.
¿Cómo nos asociamos con el Espíritu en la oración? Comience a orar en lo
natural. Ora lo que sabes, sientes o piensas. Habla las escrituras. Piensa en
cómo mejor
conectar con el Señor. Es posible que necesite entrar en un lugar de
tranquilidad, paz o adoración para aprovechar o estimular la presencia
de Dios. Posicionarse para conectar su hombre espiritual con el Espíritu
Santo es fundamental para colaborar con el Espíritu de Dios.
Mientras desea aprovechar el poder del Espíritu dentro de usted, deje de
pensar en lo que está haciendo (orando) y confíe en que el Espíritu Santo
hablará a través de usted. Construir una relación profunda con el Espíritu
Santo; te ayudará a confiar en Él para que te guíe en lo que debes orar. A
medida que comience a liberar la oración natural y confíe en que el Espíritu
Santo colaborará con usted en la oración, Él comenzará a darle palabras de
conocimiento y unción en el espíritu de lo que debe orar. Puede ver una
imagen, puede escuchar una palabra o algo surgirá dentro de usted para
orar en una dirección específica. Siga Su ejemplo y confíe en Él para que le
dé instrucciones precisas sobre lo que debe orar.

Atar y restringir los pensamientos que distraen. No dejes que tu mente

divague. Tienes dentro de ti el mismo poder que resucitó a Jesucristo
de entre los muertos: el Espíritu Santo. Aproveche esa fuente de
energía. Confía en que Él te dará las palabras para orar y te conducirá
y te guiará. Así se ora proféticamente guiado por el Espíritu de Dios.

Enfoca tu atención en el Espíritu Santo mientras oras. Esto le ayudará a

recibir revelación. A medida que recibimos revelación, se convierte en
una impartición que conduce a la aplicación. Mientras oramos, no solo
queremos aniquilar las fuerzas de la oscuridad, sino que buscamos
estrategias de oración que nos ayuden a orar con mayor eficacia.
Cuando el Espíritu Santo nos da una visión profética del ámbito
espiritual, podemos discernir aún más esa información para orientar
nuestras oraciones en una dirección específica para obtener los
resultados deseados.

ENCIENDE TU VIDA DE ORACIÓN

Comienza tu tiempo de oración con adoración, porque esto te lleva a la

presencia de Dios. A medida que experimenta la presencia de Dios, queda
atrapado en las cosas de Dios. La paz y la alegría vendrán sobre ti. Parece que
cuando tú y yo estamos atrapados en la presencia del Señor, las
preocupaciones de este mundo se calman. como se preocupa
calma, tu mente se cierra, y dejas de pensar y analizar todo. A medida
que conectas tu espíritu con Su Espíritu, puedes comunicarte abierta y
libremente con Él. La revelación vendrá, y pronto descubrirás que lo que
oras en lo natural ha pasado a la oración espiritual.

Permítanme explicar eso un poco más. Cuando oras en lo natural, tu mente

está orando, y piensas en qué orar a continuación y puedes tropezar con
tus palabras o incluso sentirte estancado o aburrido, como dije antes.
Cuando conectas tu espíritu con el Espíritu Santo, de repente lo que oras en
las transiciones naturales a lo espiritual, y tu vida de oración se energiza. A
medida que tu vida de oración se regocija, se vuelve divertido orar porque el
Espíritu Santo se derrama a través de ti y de repente no quieres dejar de
orar.

Este es precisamente el punto al que queremos llegar, ya sea que atemos y

restrinjamos el reino demoníaco o llamemos y ordenemos que vengan
bendiciones y cosas positivas. Necesitamos que el Espíritu Santo nos cambie
y nos cargue tanto que queremos permanecer en nuestros cuartos de
oración y entrelazar nuestros espíritus con Su Espíritu a través de la oración.
Pruebalo ahora. Deje este libro a un lado y comience a orar en lo natural por
una situación específica que no ha recibido una respuesta o un avance.

Ejercicio Profético: Permita que el Espíritu Santo dirija su oración

Invita al Espíritu Santo a tu tiempo de oración ahora mismo. Comienza a

alabar a Dios. No le des tu lista de oración. Alábenlo y adorenlo con
palabras. Ahora haz la transición a lo que sientes que necesita ser orado,
usando el discernimiento y la percepción. Permita que el Espíritu Santo le
diga a su espíritu lo que necesita orar. Podrías decir: “Espíritu Santo, por
favor guíame en mi tiempo de oración. Te invito a entrar y ceder a Tu
dirección. Revelar estrategias y las palabras para orar desde mi espíritu
hombre. Confío en ti para lo que quieres revelar y liberar”.
A menudo leemos sobre formas de potenciar nuestra vida de oración,
pero nunca las aplicamos. Por eso espero que hayas participado en el
ejercicio profético anterior. Quiero que te detengas y lo hagas ahora. Me
apasiona porque sé que te ayudará a descubrir una nueva forma de orar
y acceder a la fuente de poder definitiva para manifestar tus oraciones.

ES HORA DE LA ACTIVACIÓN

El Espíritu Santo está listo para cambiarte y encender tus oraciones.

Activemos este poder en tu vida.

ORACIÓN DE ARREPENTIMIENTO, RENUNCIA Y

RUPTURA DEL ACUERDO

Padre Celestial, me arrepiento por la falta de oración. Lo siento por los

momentos en que debería haber sido más activo en mi vida de oración.
Rompo el acuerdo con la pereza y me conformo con menos de lo que Tú
tienes para mí. Ordeno que la condenación no venga sobre mí sino que la
convicción del Espíritu Santo me llame a la acción. Renuncio al
estancamiento en mi vida de oración y en mi caminar espiritual. Hablo y
decreto un cambio y un giro en el nombre de Jesús. ¡Amén!

ORACIÓN DE IMPARTACIÓN Y ACTIVACIÓN

Espíritu Santo, te pido que me convenzas y me corrijas en mi tiempo de

oración. Te invito en mi tiempo de oración a ser mi líder, guía y amigo.
Instrúyeme sobre qué y cómo orar. Guíame por el camino de la verdad.
Ayúdame a escuchar Tu voz. Confío y confío en Ti. Ayúdame a ir a lugares
más profundos en mi oración
tiempo mientras mejoro mi vida de oración. Convénceme de orar
audiblemente y hablarle al reino espiritual. Guíame en mi tiempo de
oración cuando estoy orando en silencio y debo hacer la transición a la
oración audible. En el nombre de Jesús, amén.

PROCLAMACIONES PROFÉTICAS (DECLARACIONES DE

FE)

No estoy estancado en mi vida de oración y caminar espiritual.

Crezco diariamente y soy espiritualmente fuerte.

Llamo a una relación más profunda con el Espíritu Santo. Proclamo

que aprovecharé el Espíritu Santo en mi tiempo de oración y me
asociaré con Él.

Decreto y declaro que apartaré tiempo diariamente para buscar la

presencia del Señor y escuchar del Espíritu Santo en oración.

La guerra espiritual es audible; por lo tanto, hablaré y decretaré en el

reino espiritual para atar y restringir al enemigo. No estaré estancado o
pasivo en mi tiempo de oración.

Confieso que me levantaré y tomaré mi autoridad en mi tiempo de

oración. Tengo una boca, y la usaré para hacer avanzar el reino de
Dios y atar y restringir al enemigo de nuevos ataques.
ACTIVACIÓN ESPIRITUAL
Transición de su tiempo de oración a la oración audible. Si ha orado en
silencio durante años, trate de orar en voz alta. Permita que el Espíritu
Santo lo dirija y lo guíe cuando hablar y cuando quedarse callado. Me
gusta estar tranquilo cuando descanso y me lleno en la presencia del
Señor. Lo describo como mi válvula de admisión. Cuando necesito
aniquilar al enemigo o invocar algo, es cuando todo lo que absorbí al
estar en silencio sale a través de la oración audible.

Ore y hable en su idioma nativo. Los cristianos llenos del Espíritu pueden
sentirse tan cómodos orando en el espíritu o en lenguas que dominan sus
vidas de oración. Debemos tener un equilibrio entre orar en el espíritu y orar
en nuestros idiomas nativos. Si te encuentras orando en lenguas más que en
tu idioma nativo, pasa algún tiempo orando en tu idioma nativo. Los demonios
no pueden entender lo que estás orando en lenguas; por lo tanto, debes
hablar, proclamar y declarar en contra de las fuerzas del mal cuando te
encuentres con una guerra espiritual.

Estudie el Libro de los Salmos y subraye las oraciones de guerra en un

solo color. Mantenga un resaltador a mano cuando estudie su Biblia
para subrayar las escrituras que se pueden aplicar y orar contra la
guerra espiritual.

DECLARACIONES DE GUERRA ESPIRITUAL

En el nombre de Jesús destruyo todo poder maligno y espíritu de pitón

que viene a sofocar mi caminar espiritual e impedir mi destino
profético.
Aniquilo todo principado y poder enviado para interrumpir mi tiempo de
oración. Ato y restrinjo todas las distracciones. Digo que mi mente
permanecerá enfocada.
Reprendo y renuncio a cualquier brujería y a las maldiciones de Jezabel que se
liberan en el reino espiritual en mi nombre para silenciar la voz de lo profético e
interrumpir mi tiempo de oración. En el nombre de Jesús obstruyo que estas
maldiciones salgan.

Extingo las fuerzas demoníacas que surgirían en base a maldiciones

verbales autoimpuestas sobre hechos que hablé sobre mi vida y que
no sabía que tenían poder y autoridad en el reino espiritual. Reprendo
cada palabra que he dicho que ha sido en detrimento de mi caminar
espiritual y vida de oración.

Cuando hablo, mis palabras son proféticamente asignadas y dirigidas

para impactar con precisión en el ámbito espiritual. Dios envía Su
palabra y la lleva a cabo sobre mi vida. Mis palabras tienen poder
profético y producen resultados.
 Capítulo 5

PASEO EN DOMINIO

AL PRINCIPIO DE MI caminar cristiano tomé un libro sobre el dominio y lo

devoré en horas. Disfruté aprendiendo las escrituras en Génesis acerca de
cómo Dios le dio dominio al hombre. ¡Quería ese dominio! Tomé lo que
aprendí y corrí con él. Una de las historias más notables que mi esposo
todavía cuenta hoy es cómo, cuando el motor de nuestro lavavajillas
comenzó a hacer ruidos fuertes y extraños, yo iba y ponía las manos sobre el
lavavajillas y le ordenaba que se silenciara y funcionara correctamente. Tenía
mi oficina en casa y no necesitaba distracciones. Mi dinero es el dinero de
Dios. No quería gastar el dinero del reino en un nuevo lavavajillas cuando
sabía que podía gastar mi dinero en algo que cambiaría la vida de las
personas y realmente avanzaría en el reino de Dios. No importaba quién
estuviera cerca o lo que estuviera haciendo, durante tres meses me
levantaba cuando ese motor comenzaba a rechinar, y le ordenaría a ese
lavaplatos que funcionara correctamente en el nombre de Jesús. Los
resultados fueron que el lavavajillas me duró ocho años más.

Continué aprendiendo acerca de cómo Jesús nos dio autoridad. Pero

no solo aprendí; Lo apliqué. Una cosa es saber sobre algo, pero
tenemos que implementarlo en nuestras vidas. El conocimiento sin
aplicación es solo un cerebro lleno de información que nunca
permitimos que nos cambie a nosotros oa aquellos en los que influimos.
Tomar mi autoridad dada por Dios sobre cosas y situaciones funcionó
para mí, y quiero que funcione para usted también.
No creo que exudar autoridad sea un juego de nombrarlo y reclamarlo.
Creo que tenemos autoridad sobre las cosas, pero tenemos que estar
alineados con la voluntad de Dios y la Palabra de Dios. El Espíritu debe
vivificarnos en cuanto a qué y cuándo tomar autoridad. Él es nuestro Guía
y debemos depender de Él. Necesitamos estar sintonizados con Él y Su
dirección. Andar en autoridad depende de tener una relación personal
cercana con el Espíritu Santo. Manifestamos nuestro destino y dominio
cuando confiamos en el Espíritu Santo.
¡Desde entonces he tomado autoridad sobre las finanzas, la curación de
mascotas, la liberación de demonios, los contratos de escritura de libros, el
favor con el hombre y mucho más! Dios tiene
abrió puertas divinas para mí y ató y restringió al enemigo para que no trabaje en
mi contra debido a la autoridad que he exudado y las palabras que he pronunciado
audiblemente. Lo he dicho antes, y lo diré de nuevo: sus palabras están asignadas
proféticamente y dirigidas a obtener resultados. Cuando hablas, el reino espiritual
debe responder.

Sin embargo, necesitamos conocer nuestra autoridad e identidad para

tener la confianza de que nuestras palabras están entrelazadas con el
fuego y el poder del Espíritu Santo. Tenemos el mismo poder dentro de
nosotros que resucitó a Jesucristo de entre los muertos. ¡Tenemos vida de
resurrección, poder y autoridad! Somos ciudadanos del cielo y se nos ha
dado una herencia del reino para liberar aquí en la tierra. ¿Qué liberarás
con el conocimiento que tienes y el poder que exudas? ¡El mismo Espíritu
Santo está dentro de ti, y es poderoso y lleno de autoridad!

Ejercicio Profético: Liberar Autoridad

Declare ahora mismo una oración audible en oraciones cortas de algo

sobre lo que necesita tomar autoridad. ¿Necesita cambiar algo en una
relación, empleo, finanzas o salud? Habla y ordena que tu situación
cambie. Puede consultar las Proclamaciones proféticas al final de cada
capítulo como guía.

IDENTIDAD EN CRISTO

Si alguien te preguntara quién eres, ¿cuál sería tu respuesta? ¿Se identifica

como padre, profesional o ama de casa? ¿Responderías con “Soy amable,
bullicioso o divertido”? De vez en cuando escucho a personas con
discapacidades usar las palabras: “Estoy discapacitado”. Se identifican con
sus discapacidades y permiten
ellos para definir quiénes son.

Una vez escuché a un pastor ministrar a una persona que tenía una
conversación. La persona dijo: “Soy una divorciada”. El pastor
disciplinó a la persona y dijo: “Ese no eres tú. No te identifiques de esa
manera.

Las personas a menudo se identifican por circunstancias pasadas,

situaciones actuales, fracasos o logros. Las situaciones pueden
haberte enfrentado y las circunstancias pueden haberse manifestado,
pero no son tu identidad. Tu profesión, tu rol familiar y tus deberes
tampoco son tu identidad. No eres médico, pastor, autor, conserje o
ama de llaves. En última instancia, eres un hijo de Dios y un ciudadano
del cielo. Esta debería ser la primera respuesta que sueltes de tu boca.
Mi respuesta sería: “Soy la hija del Rey Altísimo (Jesucristo)”. Es lo que
soy, y la ciudadanía del reino y la herencia celestial son mi porción. Soy
valorado, amado, elegido y perdonado. Me identifico con el reino de Dios
y con quien soy en ese reino. ¿Por qué? Porque Romanos 8:15 dice:
“Porque no habéis recibido el espíritu de esclavitud otra vez para temer.
Pero habéis recibido el Espíritu de adopción, por el cual clamamos: 'Abba,
Padre'”. ¡Soy adoptado! Mi Padre celestial me ha creado y adoptado en
Su linaje. Por lo tanto, soy un ciudadano del reino.

Hubo un tiempo en que no habría respondido de esta manera. Luché

con el miedo durante años. Fue una maldición generacional, e intenté
liberarme durante años. Cuando sentía que era parte de lo que yo era,
citaba Romanos 8:15. Cuando el miedo quería colarse a través de una
conversación o un pensamiento negativo, tenía que convencerme de
que no lo hiciera.
Hice esto diciéndome a mí mismo que ya no era la misma persona. No fui
producto de una maldición generacional que siguió a mi linaje. Fui
adoptado por mi Padre celestial y tenía el linaje de Jesucristo. Esto me
ayudó a recibir mi identidad. Tuve que transferir mi identidad de cómo me
identificaba con mis padres terrenales a mi padre celestial. Tuve que
cambiar mi mentalidad. Cuando no capturé el pensamiento, no caminé en
mi identidad espiritual. En cambio, caminé en una identidad de víctima y
derrota, sintiendo que nunca me liberaría de la maldición generacional del
miedo.

La identidad que conocía era una de carencia, miedo y otros pensamientos

pesimistas. Yo tomé
en pensamientos carnales en lugar de andar en el Espíritu. Necesitaba
una transformación mental. “No os conforméis a este siglo, sino
transformaos mediante la renovación de vuestro entendimiento, para
que comprobéis cuál sea la buena voluntad de Dios, agradable y
perfecta” (Rom. 12:2). La Biblia nos instruye a no conformarnos a este
mundo. No podemos moldear nuestras identidades en el mundo, sino
que necesitamos que nuestra ciudadanía del reino nos moldee.
Tu identidad está en Cristo, no en las circunstancias. Podemos descubrir
quiénes somos en Cristo leyendo el Libro de Gálatas. “Estás en Cristo”, decía
mi apóstol. “Necesitas ser uno con la Palabra y la Palabra uno contigo”. Jesús
es la Palabra. Por lo tanto, debemos ser uno con Jesús. Cuando estemos en Él
y en Su Palabra, descubriremos y viviremos en nuestra identidad en Cristo.

AUTORIDAD

Jesús dejó esta tierra y nos dio Su autoridad. En el mundo, las personas son
designadas para ser apoderados de otra persona. Se les da la autoridad para
tomar decisiones en nombre de la persona. Tienen autoridad sobre las cuentas
bancarias, las decisiones médicas, la vida e incluso la muerte de esa persona.
Jesús nos dio este tipo de autoridad cuando dejó la tierra y fue al cielo. Se
podría decir que Jesús nos dio su poder notarial. Él nos dio el poder y la
autoridad para sanar enfermedades, expulsar demonios y resucitar muertos.
“Llamó a sus doce discípulos y les dio autoridad sobre los espíritus inmundos,
para expulsarlos, y para sanar toda enfermedad y toda dolencia” (Mateo 10:1).

La definición de autoridad del English World Dictionary es “el poder o el

derecho de dar órdenes, hacer cumplir la obediencia, tomar medidas o
tomar decisiones finales”.¹ Tienes el derecho y el poder de dar órdenes,
tomar medidas y tomar decisiones finales. Tienes derecho a dar órdenes
al diablo y a los espíritus malignos en lugar de que el diablo te dé órdenes
a ti. Tienes el derecho de hacer cumplir la obediencia y ordenar que el
reino espiritual se active con tus palabras. Puedes cambiar tu situación
con el poder de tus palabras.
Jesús habló audiblemente y tomó autoridad en los Evangelios sobre la higuera, las
tormentas, la comida (pan y pescado), la enfermedad y los demonios.
Constantemente modeló para nosotros
como tomar autoridad. Habló al reino espiritual, y sucedió un
resultado natural.

Nuestra autoridad viene a través del nombre de Jesús. “Por lo cual Dios
lo exaltó hasta lo sumo, y le dio un nombre que es sobre todo nombre,
para que en el nombre de Jesús se doble toda rodilla de los que están
en los cielos, en la tierra y debajo de la tierra” (Filipenses 2:9–10).
Cuando pedimos por fe, en Su nombre y según la voluntad del Padre,
veremos el fruto de la autoridad que desatamos. “Cualquier cosa que
pidáis en mi nombre, haré, para que el Padre sea glorificado en el Hijo”
(Juan 14:13).
Tienes poder profético en tus palabras. Tienes el poder de crear, restringir,
atar, desatar y convocar. Cuando hablas de acuerdo con la dirección del
Espíritu Santo, el ámbito espiritual debe responder a tus palabras a
medida que tomas autoridad sobre las situaciones. Los discípulos y Jesús
usaron su autoridad para sanar a los enfermos, resucitar a los muertos y
expulsar demonios. Nosotros también debemos ejercer nuestra autoridad
si queremos ver que las batallas se calmen y que la vida de las personas
cambie. Tenemos el Espíritu de Dios adentro para guiarnos y
capacitarnos. Ahora necesitamos aprender nuestra autoridad en Cristo y
luego liberarla. Eliminar obstáculos como la duda y la incredulidad es
fundamental en este proceso.

Cuando le hables a una parte de tu cuerpo que necesita sanidad, cuando

saques un demonio de tu mente y cuando quieras cambiar tus circunstancias,
hazlo en el nombre de Jesús. "¿Cómo?" Tu puedes preguntar. Bajo la dirección
del Espíritu Santo, diga lo que ordene o decrete seguido de: “En el nombre de
Jesús”. Pablo nos dijo en Colosenses 3:17: “Y todo lo que hacéis, sea de
palabra o de hecho, hacedlo todo en el nombre del Señor Jesús”. Hazlo en el
nombre del Señor Jesús, nuestro Mesías. En su nombre nada es imposible y
todo es posible.

He estado en aviones con tormentas y turbulencias severas. Me subo a

ese avión, toco con mi mano el costado del avión cuando entro y digo:
"Tomo autoridad sobre este avión para que funcione correctamente y no
controle turbulencias". Una vez tuvimos el peor aterrizaje de mi vida.
Mientras aterrizábamos en el hielo, saltábamos sobre la pista. La gente
pensó que íbamos a estrellarnos. El piloto no tenía control sobre el
avión y no podía detenerse. Me preocupé y decidí que era hora de
intervenir. Declaré audiblemente dos veces: “Avión, te detendrás en el
nombre de Jesús”. El avión dejó de brincar, rebotar, saltar y el piloto
pudo controlarlo.
Pablo echó fuera un demonio cuando tomó su autoridad. “Y esto lo hizo
durante muchos días. Pero Pablo, muy molesto, se volvió y le dijo al espíritu:
'Te mando en el nombre de Jesucristo que salgas de ella.' Y salió en esa
misma hora” (Hechos 16:18, NVI). Pablo dijo: “Yo mando”. ¿Qué podría
suceder de manera diferente en tu vida si ordenaras lo que necesitabas que
sucediera?

Pedro sanó a un hombre que no podía caminar. Jesús no solo podía sanar,
sino que Su poder podía sanar a la gente a través de Sus discípulos. Ese
mismo poder sana hoy. Cuando creemos en Jesucristo y hemos sido llenos
del Espíritu Santo, tenemos el poder sanador de Jesús viviendo en nuestro
interior. “Pedro dijo: 'No tengo plata ni oro, pero lo que tengo te doy: en el
nombre de Jesucristo de Nazaret, levántate y anda'” (Hechos 3:6, NVI).
Pedro dio una orden sencilla: “Levántate y anda”, y un hombre que no podía
caminar fue sanado. ¿Qué pasaría si los cristianos actuaran con autoridad y
fe, hicieran mandatos simples y creyeran con fe que ellos y los demás
recibirían lo que se decreta en la atmósfera espiritual? ¿Cuán diferente sería
nuestro mundo?

REINAR EN DOMINIO

La autoridad es buena, pero quiero que alcances más y que camines en

dominio. Explico la autoridad como algo que liberamos cuando lo
necesitamos. Vemos una necesidad, oramos por la dirección del Espíritu
Santo y liberamos nuestra autoridad. Como cristianos, no debe detenerse
en la autoridad; debemos gobernar y reinar en dominio. Déjame
explicarte el dominio de una manera que quizás puedas entender con
respecto a otro tema. Cuando adoramos, podemos levantar nuestras
manos y sentir la presencia de Dios, y eso es bueno. Hay veces que
pasamos más allá de la presencia de Dios y sentimos el peso de Su
gloria. Es como si nos invadiera un temor sagrado y, a veces, pensamos:
“Dios mío, Dios está aquí y ahora”. En la adoración podemos sentir la
energía o el espesor de la gloria de Dios en la atmósfera. La gloria de
Dios se manifiesta de manera diferente. Sin embargo,
Con adoración nos movemos a través de la presencia para llegar a la gloria.
Con autoridad nos movemos más allá de la autoridad para caminar y gobernar
y reinar en dominio. Aprender acerca de nuestra autoridad es bueno. Podemos
sanar enfermedades y dolencias, cambiar nuestra
circunstancias, y echar fuera demonios. Sin embargo, creo que muchas
veces después de haber orado con autoridad, volvemos a guardar esa
autoridad en el estante hasta que la necesitemos nuevamente. Pero el
dominio debe ser algo en lo que gobernamos y reinamos, no algo que
elegimos y elegimos cuando usar. Debería ser el núcleo mismo y la
esencia de nuestro ser.

La palabra hebrea para dominio es radah (raw-daw), que significa

hollar, subyugar, tener dominio, prevalecer, reinar o gobernar.²

Entonces Dios los bendijo, y Dios les dijo: “Fructificad y multiplicaos;

llenad la tierra y sojuzgadla; y señoread en los peces del mar, en las
aves del cielo, y en todas las bestias que se mueven sobre la tierra.”

—Génesis 1:28, NVI

Tenemos dominio sobre la tierra, sobre todo. Es necesario que ocurra un

cambio espiritual en nuestras mentes: cuando veamos que estamos en tal
lugar de autoridad y dominio, gobernaremos y reinaremos en él. ¡Es nuestro!
No es algo orgulloso de reconocer. Es recibir el lugar de herencia que nuestro
Padre creó para nosotros.

Leemos en Génesis 1:26: “Entonces dijo Dios: 'Hagamos al hombre a

nuestra imagen, conforme a nuestra semejanza'” (NKJV). Nuestro
indica la Trinidad: el Padre, el Hijo y el Espíritu Santo. Sabemos que la
Trinidad tiene dominio y autoridad sobre todo. Por lo tanto, dado que
nuestra identidad está en Cristo y estamos hechos a imagen de Dios,
tenemos Su dominio. El Espíritu Santo está en nosotros, Dios nos dio
dominio y Jesús nos dio Su autoridad.

Tenemos autoridad, y no podemos sufrir ningún daño si exudamos esa

autoridad. El enemigo puede atacarnos y tratar de penetrarnos, pero a
medida que confesamos la Palabra de Dios, podemos ser sanados,
liberados y protegidos.
Os doy autoridad para hollar serpientes y escorpiones, y sobre todo el
poder del enemigo. Y nada os dañará en modo alguno.
 —LUCAS 10:19

Estas señales acompañarán a los que crean: En mi nombre echarán

fuera demonios; hablarán en nuevas lenguas; ellos tomarán serpientes;
si bebieren cosa mortífera, no les hará daño; sobre los enfermos
pondrán sus manos, y sanarán.

—MARCOS 16:17–18

Jesús dijo: “En mi nombre echarán fuera demonios”. Los discípulos usaron Su
nombre, y los poderes espirituales que plagaban a la gente se fueron. Esas son
las promesas que nos da la Palabra de Dios. Tenemos la autoridad; se nos ha
dado dominio sobre toda la tierra y el diablo y sus demonios, enfermedades y
dolencias. Ahora, no solo usemos nuestra autoridad, sino que caminemos en
dominio sobre la tierra como Dios lo ordenó.

ES HORA DE LA ACTIVACIÓN

Usa tu autoridad dada por Dios y tu voz para caminar en dominio.

ORACIÓN DE ARREPENTIMIENTO, RENUNCIA Y RUPTURA DEL

ACUERDO

Rompo con el acuerdo y renuncio a la pasividad y la complacencia. Me

arrepiento de no liberar mi autoridad. Te pido, Espíritu Santo, que me
convenzas y me ayudes a ser valiente en mi fe y liberar la autoridad que Jesús
me dio. Señor, enséñame la verdad de Tus Escrituras. Hablo y decreto que
usaré mi autoridad para impactar al mundo para Tu reino. Liberaré mi autoridad,
proféticamente dirigido por el Espíritu Santo. Que la autoridad liberadora
muestre a las personas la gloria de Dios y edifique la
nombre de Jesús.

ORACIÓN DE IMPARTACIÓN Y ACTIVACIÓN

Jesús, gracias por darnos autoridad. Ayúdame a usar mi autoridad. Creo que
cuando moriste en la cruz, venciste los poderes de las tinieblas. Permíteme
continuar lo que Tú lograste y sanar a los enfermos, expulsar demonios y tomar
autoridad sobre todas las cosas. Recibo la Palabra de Dios y todo lo que dice que
puedo tener. Me has dado tu poder notarial para usar aquí en la tierra. Espíritu
Santo, ayúdame a liberar lo que me ha sido confiado. En el nombre de Jesús,
amén.

PROCLAMACIONES PROFÉTICAS (DECLARACIONES DE

FE)

Tengo autoridad y dominio sobre todas las cosas en la tierra. Activo y

libero la autoridad que me ha sido dada.

Gobernaré y reinaré en dominio, que es el poder de dirigir. Puedo ordenar al

enemigo que se mantenga alejado de mí en lugar de que él dirija la guerra
contra mí.

Obedeceré al Espíritu Santo sin demora mientras me da vida para

operar en la autoridad que me ha sido dada. No me dejaré intimidar
por lo que otros piensen cuando declare mi autoridad de manera
audible.
Declaro que tengo armamento útil y eficaz contra el reino de las tinieblas.
Tengo una voz, y la voy a usar con amor y
audacia.

Dirijo mis palabras para alcanzar un objetivo espiritual con precisión. Cuando
hablo, mis palabras están asignadas proféticamente para alcanzar un objetivo
espiritual y producir un efecto natural.

ACTIVACIÓN ESPIRITUAL

Escriba una declaración de diez oraciones que indique sobre qué tiene que
tomar autoridad.

Lea un libro sobre autoridad y busque escrituras sobre autoridad.

Haga una lista de las peticiones de oración que no han sido

contestadas y busque la dirección del Espíritu para un plan que le
permita tomar autoridad sobre esos puntos.

DECLARACIONES DE GUERRA ESPIRITUAL

Elimino toda fuerza oscura que viene en contra de recibir revelación

bíblica sobrenatural. Espíritus sordos y mudos, los ato y los restrinjo y
les ordeno que desistan de su misión.
Derribo todo despliegue demoníaco contra mi familia. Ordeno que
cesen los ataques de guerra en el nombre de Jesús.
Paralizo toda asignación demoníaca en mi contra, y les ordeno que cesen y
desistan de su activación de destrucción contra mi destino profético.

Ordeno que todos los embargos financieros enviados contra mi familia

y contra mí se dispersen en el nombre de Jesús, y proclamo que
tenemos prosperidad.

Cancelo la asignación de todas las entidades demoníacas llamadas a

enviar retribución. Hablo y declaro que la bendición y el favor de Dios
están sobre mí; por lo tanto, en el nombre de Jesús, anulo los planes
de retribución y ordeno que tales planes se derrumben, caigan y
colapsen.
 Capítulo 6

CONSTRUYE UN CORAZÓN DE GUERRERO

CONSTRUIR EL CORAZÓN DE UN GUERRERO requiere esfuerzo.

Necesitamos desarrollar dos aspectos del corazón de un guerrero. En
primer lugar, para crear el corazón de un guerrero, tenemos que
desarraigar de nuestras vidas la ofensa, el rechazo, el control y el
orgullo. Segundo, tenemos que dedicar tiempo y saber el valor de
estar en el lugar secreto y desarrollar una relación profunda con el
Espíritu Santo.

No siempre tuve el corazón de un guerrero. Recuerdo una temporada

en la que me emocioné demasiado y lloré cuando ministraba en salas
de curación. Pensé: “¿Cómo puedo ministrar si estoy llorando
constantemente junto con la persona a la que estoy ministrando?” Es
bueno tener compasión, pero cuando escuchamos la historia de otra
persona, y con frecuencia nos conmueve hasta las lágrimas, puede
haber algo en nosotros que necesita ser sanado.
A lo largo de los años he aprendido que mientras buscamos nuestra liberación e
intentamos volvernos fuertes espiritualmente, Dios a menudo pondrá en nuestro
camino a personas que tienen “basura en el baúl” y necesitan sanidad emocional
en cierta área porque esto nos revela lo que necesita ser desarraigado de
nosotros. Déjame ser más específico. Si niega que tiene problemas de control,
Dios podría poner personas controladoras en su camino. Debería ser un punto
de control espiritual y una parada de autoevaluación para ti cuando alguien te
molesta o ves a alguien como un irritante en tu vida. Entrénate para usar estos
encuentros como una señal de precaución para controlarte.

Quiero aclarar que el llanto no es señal de debilidad. Sé que a muchas

personas se les ha enseñado a taparse las lágrimas. Os animo a liberar
vuestras emociones cuando se amerite. Sin embargo, llorar cada vez que
escuchaba una historia triste era una maldición generacional por ser demasiado
emocional. Después de recibir un amor abrumador y sanidad de Dios,
necesitaba equilibrar mis emociones. El corazón de un guerrero está hecho de
amor, compasión, equilibrio y fuerza. Si no tuviera el corazón de un guerrero,
experimentaría ofensa, rechazo y confusión debido a la intransigencia que
conlleva ser un ministro de liberación.
 DERRAIGUE FORTALEZAS

Desarraigar las fortalezas es crucial porque nos volvemos vulnerables a los

ataques emocionales cuando combatimos la guerra espiritual y nos
involucramos en la construcción del reino. Jesús pudo haberse ofendido con los
fariseos, pero no lo hizo. Lo estaban acusando de ser demoníaco, lo cual es
solo una ofensa. Podría haber aceptado el rechazo, pero mantuvo su enfoque.
Nosotros también debemos ser como Jesús.

Entonces le trajeron un endemoniado, ciego y mudo, y lo sanó, de modo

que el ciego y mudo hablaba y veía. Todo el pueblo estaba asombrado y
decía: "¿No es el Hijo de David?"

Pero cuando los fariseos lo oyeron, dijeron: Este hombre no echa fuera
demonios, sino por Beelzebub, el príncipe de los demonios.
Jesús conocía sus pensamientos y les dijo: “Todo reino dividido contra sí mismo
es asolado. Y toda ciudad o casa dividida contra sí misma no permanecerá. Si
Satanás echa fuera a Satanás, está dividido contra sí mismo. Entonces, ¿cómo
se mantendrá su reino? Y si yo echo fuera los demonios por Beelzebub, ¿por
quién los echan fuera vuestros hijos? Por tanto, ellos serán vuestros jueces.
Pero si yo echo fuera los demonios por el Espíritu de Dios, entonces el reino de
Dios ha llegado a vosotros”.

—MATEO 12:22–28

Un guerrero debe mantenerse concentrado en la batalla y no permitir

que su armamento sufra daños. Cuando permitimos que el rechazo y la
ofensa penetren en nuestra armadura, no estamos completamente
protegidos cuando vamos a la guerra. Construye tu escudo de fe y
ponte tu casco de liberación para ayudar a proteger tu corazón mientras
los ataques de guerra intentan infiltrarse en tu armadura. (Véase
Efesios 6:16–17; Proverbios 4:23.) Libera una fe inquebrantable y
edifica un corazón que resistirá los ataques del enemigo y del pueblo.
(Ver Salmo 62:3.)
La ofensa, el rechazo, el control y el orgullo todavía están activos en la
iglesia hoy y causan desunión. Estamos explorando cómo desencadenar
una guerra espiritual profética, pero no podemos participar de manera
efectiva en la batalla si estos asesinos de ministerios y ladrones de destinos
nos tienen en cautiverio. El detrimento de estas cuatro fortalezas, a las que
llamo espíritus cegadores, es que no sabemos que estamos esclavizados
por ellas. Las personas esclavizadas por ellos no se dan cuenta de que
están esclavizadas.

• El orgullo nos impide ver que estamos en cautiverio.

• La ofensa piensa que todos los demás están equivocados.

• El rechazo es una fortaleza oculta.

• Nadie quiere admitir que tiene problemas de control.

Por lo tanto, en lugar de ser liberados de estas fortalezas,

permanecemos atados a ellas.
Estuve atado al orgullo y al control durante años. No lo vi. Mi marido me diría.
Sabía que tenía un nivel de control y orgullo, todo el mundo lo tiene, pero no me
di cuenta de lo malo que era. El apóstol Bernard Evans, quien es mi
responsabilidad como supervisor de mi ministerio, me decía que tenía orgullo y
control. Lo negaría continuamente. Un día lo vi. Me sorprendió lo cegador que
era. Me sorprendió aún más que nunca había visto la esclavitud que llevaba, a
pesar de que era un ministro de liberación que había ayudado a miles de
personas. Mirando hacia atrás, sé que Dios puede usar esa experiencia.
Aunque no estoy contento de haber tenido orgullo, estoy agradecido por la
revelación de esa experiencia sobre el efecto ciego del orgullo. Me ayuda a
liberar a otras personas que no ven que están en cautiverio. Puedo
relacionarme con ellos diciéndoles que yo también lo experimenté.
El orgullo era un baluarte para mí. Hay muchas fortalezas por las
cuales podemos ser afligidos. En mi libro Unshackled analizo las diez
principales fortalezas. Cuando te involucras en una guerra espiritual,
hay cuatro fortalezas que te sugiero que desarraigues de tu vida.

NULIFICAR E IDENTIFICAR CUATRO FUERZAS

1. Ofensa

El espíritu de ofensa comienza con la falta de perdón después de que una

persona ha sido maltratada o lastimada en una situación. La persona se molesta
y siente que tiene derecho a una justificación, una retribución o una disculpa.
"'La venganza es mía. Yo pagaré', dice el Señor” (Rom. 12:19). Es nuestra
responsabilidad liberar el perdón, no responsabilizar a las personas por sus
acciones o desear penitencia. Cuando ocurre una injusticia, el deseo de rendir
cuentas comienza a construir una fortaleza dentro de nuestras almas. La falta
de perdón, cuando no se libera y se atraviesa, conduce a un hombre fuerte de
ofensa. Una vez que crece la ofensa, la persona comienza a pensar que todos
los demás están equivocados y que él o ella siempre tiene la razón. El orgullo
acompaña a la ofensa, formando un dúo mortal de ataduras que necesitan ser
liberadas.

2. Rechazo

El rechazo es una batalla de la mente con los espíritus mentirosos y engañosos.

La persona que sufre el rechazo no está mintiendo o engañando, pero los
espíritus que atacan la mente de esa persona están mintiendo y engañando. El
rechazo no se descubre al principio porque las personas que sufren el rechazo se
esfuerzan mucho por complacer a la gente para ganar la aceptación. No se dan
cuenta de que su miedo al rechazo está impulsando su comportamiento. También
puede haber un conocido rechazo por parte de familiares y amigos, lo que hace
que la persona se sienta derrotada y victimizada. El rechazo sigue durante toda la
vida hasta que
las personas tienen una liberación profunda y pueden conquistar
espíritus atados a la mente que les mienten y penetran sus
pensamientos.

3. Controlar

Los problemas con el control son comunes. Un espíritu controlador

generalmente se manifiesta como una maldición generacional,
principalmente de nuestras madres, pero también puede manifestarse a
través de nuestros padres. Quienes están dominados por un espíritu de
control pueden actuar de diversas formas; por lo tanto, no siempre es fácil
de identificar. Hay muchas fuentes de raíz y puntos de entrada, como
nunca tener el control, siempre estar controlado y estar en una relación
abusiva. Recibir liberación de un espíritu controlador depende de que la
persona quiera ceder el control. Permítele que te lleve al quebrantamiento,
a un lugar de completa rendición y dependencia de Él, y todo control será
desalojado.

4. Orgullo

El orgullo es astuto y multifacético. Identificar el orgullo en los demás es

razonablemente fácil. Me gusta decir que la gente lleva orgullo en sus
mangas. Nuestro propio orgullo por lo general pasa desapercibido hasta
que hemos tenido una batalla o confrontación con otra persona o el
Espíritu del Señor comienza a convencernos de orgullo. No pude
identificar el orgullo en mí mismo porque se manifestaba de manera
diferente. El orgullo que experimenté no fue un orgullo descarado en mis
pensamientos y acciones. Puedes mirar a otra persona y decir: “No tengo
esa característica ni actúo de esa manera; por lo tanto, no tengo orgullo.”
Todos necesitamos pedirle al Espíritu Santo que nos convenza y exponga
las intenciones de nuestro corazón para ver dónde se manifiesta el orgullo,
porque todos tenemos un nivel de orgullo.

LA CONVICCIÓN Y LA CORRECCIÓN TRAEN LIBERACIÓN

Permita que el Espíritu Santo lo convenza y corrija sus acciones, pensamientos
y motivos. Jesús nos dice lo que sucederá cuando llegue el Espíritu Santo.
“Cuando él venga, convencerá al mundo de pecado, de justicia y de juicio” (Juan
16:8). No es fácil exponernos y ser vulnerables y humildes, pero algo
maravilloso surgirá cuando lo hagamos. Para ser victorioso en la guerra
espiritual se requiere el corazón de un guerrero. El corazón de un guerrero no se
puede hacer donde existen fortalezas. Por lo tanto, se necesita una mente y un
corazón dispuestos para permitir que el Espíritu Santo revele esas cosas en
nosotros; no queremos ser expuestos o haber sido ignorados o no darnos
cuenta de que hay problemas. Una de las escrituras de mi vida ha sido: “Crea en
mí, oh Dios, un corazón limpio, y renueva un espíritu recto dentro de mí” (Sal.
51:10). También invito al Espíritu Santo a “examíname, oh Dios, y conoce mi
corazón; pruébame y conoce mis preocupaciones, y ve si hay en mí camino de
rebelión, y guíame por el camino antiguo” (Sal. 139:23–24).

Pasa tiempo en el lugar secreto y conoce al Espíritu Santo. Él te guiará

a través de la liberación. Permita que Él lo convenza y luego obedezca
lo que Él le hable. Te llevará a la curación y la libertad.

DESARROLLA UN CORAZÓN DE CONFIANZA

El corazón de un guerrero también está confiado. Es un corazón en una

misión para revelar el reino de Dios. Sirve a Dios y sirve a las personas; ama
a Dios y ama a las personas. La confianza viene cuando te das cuenta de lo
que Dios te ha llamado a hacer y quién te ha llamado a ser. Sabes que Él te
ha llamado para hacer avanzar Su reino. Pero, ¿estás equilibrado en la
unción que Él ha puesto sobre tu vida?

Nuestra seguridad para la asignación proviene no solo del amor sino

también de la determinación. Cuando aceptamos que Dios nos ha dado
un deber profético que cumplir, el poder descansar con esa tarea nos
ayudará a perseverar para cumplir con toda diligencia lo que se nos
presenta. Si somos indignos, inseguros o tímidos en nuestra misión,
podríamos vacilar en lugar de estar llenos de fuerza mientras Él nos da
nuestras órdenes de marcha, la dirección en la que Él quiere que
caminemos y nos manifestemos aquí en la tierra.
Los espíritus malignos están comprometidos a causar estragos en tu
vida. Se dedican a lanzar ataques de guerra espiritual. Debes ser fiel a
tu objetivo de servir al Señor y al pueblo. Su corazón debe ser sólido
como una roca, fuerte y determinado para completar su tarea profética.
La guerra puede desgastarte. Si no tienes un corazón de amor por Dios
y Su pueblo, te cansarás y te darás por vencido en el camino hacia tu
victoria más importante. Elías se rindió después de su victoria. Mató a
todos los falsos profetas con una espada, y ahora Jezabel venía tras él
para matarlo. Elías corrió por su vida y oró para morir. (Véase 1 Reyes
19.)
Abraham no se dio por vencido cuando Dios lo llamó a entregar a su hijo. ¿Te
imaginas a Dios llamándote a masacrar y sacrificar a tu único hijo? Decir que
sería difícil es quedarse corto. Pero Abraham mantuvo la visión. Mantuvo el gol
en mente. Estoy seguro de que su carne estaba gritando: "¡No, Señor, no me
obligues a hacerlo!" ¡Pero estaba concentrado! Abraham temía a Dios y servía
a Dios de todo corazón.

No renuncies a lo que el Señor te ha llamado a hacer. Se te ha dado un reino

que no puede ser conmovido. (Véase Hebreos 12:28.) Me gusta cómo lo dice la
Biblia judía completa: “Por tanto, puesto que hemos recibido un Reino
inconmovible, tengamos gracia, mediante la cual podamos ofrecer un servicio
que agrade a Dios, con reverencia y temor. ” Temer a Dios y ofrecer un servicio
que le agrada son actitudes del corazón. ¿Has identificado la condición de tu
corazón?

Profundizando en Hebreos 12:28, vemos las palabras clave y

componentes como servicio, reverencia y temor. El American Dictionary
of the English Language nos da una buena explicación que resume estas
tres palabras. Reverencia significa “temor mezclado con respeto y estima;
veneración.”¹La veneración, tal como la define Webster, es “respeto o
asombro inspirado por la dignidad, la sabiduría, la dedicación.”² “El temor
aceptable a Dios es un temor filial [Webster lo define como “relacionado
con, o propio de un hijo o hija” ³] temor, una terrible [inspiradora]
reverencia de la naturaleza divina, procedente de la justa estima de sus
perfecciones, que produce en nosotros una inclinación a su servicio y una
falta de voluntad para ofenderlo.”⁴
EL AMOR ES UN ARMA
Edificar el corazón de un guerrero es crear un corazón lleno del amor
abrumador de Dios. Elimina cualquier dureza de corazón y permite que Dios
llene tu corazón con Su amor. Levantamos muros de autoprotección y
guardamos nuestros corazones, pero creo que algunos de nosotros
endurecemos nuestros corazones hacia Dios y las personas en el proceso.
El amor es un arma y una poderosa en eso. El enemigo no puede competir
con un corazón de amor. Permite que el Padre celestial llene tu corazón de
amor. Necesitamos recibir amor pero también liberar amor. El amor debe
abarcar cada parte de nuestro ser y exudar en todas las formas interna y
externamente.

Recibir el amor del Padre no es fácil. Los cristianos tienen dos obstáculos para
aceptar el amor del Padre. El primero son los problemas de abuso sexual sin
resolver. Cuando una persona ha sido abusada sexualmente y no ha recibido la
sanidad interior adecuada y la liberación del trauma o abuso, es difícil aceptar el
amor de Dios Padre. El segundo es el tema del padre terrenal. Es posible que
tenga dificultades para conectarse con el Padre celestial porque su padre terrenal
lo abandonó, se divorció de su madre, abusó sexualmente de usted, no era
identificable o era un adicto al trabajo o alcohólico. El Centro Nacional para la
Paternidad informa que solo entre el 3 y el 4 por ciento de los papás tenían padres
que decían "Te amo" de manera constante.⁵ Cuando no escuchas a tu padre
terrenal, que está aquí en un cuerpo físico, di , “te amo”, es difícil recibir que tu
Padre celestial,

CONSTRUYE UN CORAZÓN DE AMOR

Al recibir la sanidad, necesitamos construir un corazón lleno de amor.

Me gustaría decir que es natural que tengamos este amor abrumador
dentro de nosotros, pero en mis años de ministerio y experiencia
personal he descubierto que no siempre sucede. ¿Cómo se gana el
amor? ¡Pregunta por ello! Nuestro Padre “es galardonador de los que
le buscan” (Heb. 11:6).
Recuerdo haber estado en Missouri una vez para una de nuestras giras de
ministerio profético. Mientras estaba allí para ministrar en las calles, el Señor me
llamó un día para quedarme en mi habitación de hotel. Pensé: “¿En serio,
Señor? ¿Me has traído hasta aquí para encerrarme en una habitación de hotel?
Fue uno de los encuentros más poderosos que he tenido mientras me acostaba
en la cama del hotel durante una hora, diciendo: "Te amo, Señor". Seguí
repitiendo esas palabras y recibí la mayor lluvia de amor del Señor. Allí tienen
Ha habido ocasiones adicionales, ya sea conduciendo, adorando o caminando,
que le he pedido al Señor que haga esto nuevamente para poder compartir Su
amor con más de Su pueblo.

Mientras escribo este libro, estoy en otra temporada de enfocarme en Su

amor. Cuando tengo muchas responsabilidades y plazos, puedo quedar
atrapado en el ajetreo en lugar de exudar el amor abrumador del Padre a
los demás. También puede ser un poco intenso cuando tomo autoridad
sobre los malos espíritus. Aún así, mi oración al Padre es que Él me ayude
a exudar amor incluso en momentos de intensidad. Quiero que la persona
que está siendo liberada a través de mi ministerio sienta amor en medio de
su liberación. Quiero ser una persona que ame en todo momento. Quiero
ser conocido por la cantidad y calidad en la que amo.
¿Y usted? ¿Deseas ser conocido como alguien que exuda el amor del
Padre? Aquí hay cuatro formas de reunir amor para regalarlo.

Ejercicio Profético: Impartición de Amor

¡Deténgase y ore ahora mismo! Pídele al Padre que derrame Su amor sobre
ti. Pídele que te llene con su amor para que puedas regalarlo. Ore y pídale
que le permita amar como lo hace Jesús: incondicionalmente y lleno de
misericordia y gracia.

Padre celestial, lléname con la abundancia de tu amor. Quiero amar

radical y honestamente a las personas como lo haría Jesús. Deja que mi
corazón se llene de intenciones puras. Derrama Tu amor sobre mí para
que a cambio yo pueda derramar Tu amor sobre los demás. Déjame sentir
el gran amor que tienes por mí y derriba cualquier barrera que tenga para
recibir ese amor. En el nombre de Jesús, amén.
 COMO CONSEGUIR AMOR

Sagrada Escritura

La Palabra de Dios es una de las mejores formas en que puede obtener una
impartición de amor. Lea las Escrituras y estudie el contexto; tendrá la
seguridad de que servimos a un Dios de amor. Toda la Escritura es una
representación de Su amor. ¡La Biblia es un gran libro de amor! ¡Nuestro
Padre nos ama tanto que escribió estas Escrituras a través de personas
inspiradas por el Espíritu de Dios! Mi supervisor dice que debemos ser uno
con la Palabra y la Palabra uno con nosotros. ¿Qué significa eso? Debemos
estar en la Palabra y conocer la Palabra tanto que se nos haga.

Culto

Cuando adoramos, conectamos nuestro espíritu con Su Espíritu. La

adoración es un lugar en el que podemos estar entrelazados y conectados
con el Padre, el Hijo y el Espíritu Santo. El amor es la emoción que
experimentamos en la adoración cuando “entramos por sus puertas con
acción de gracias, y por sus atrios con alabanza” (Sal. 100:4). Fuimos
creados para adorarlo. Ministramos al Señor mientras adoramos por amor.

La adoración ha sido ese lugar para mí donde me he conectado

firmemente con el Señor. He tenido tantos encuentros con Jesús y
visiones donde he experimentado Su gran amor. La adoración es una
experiencia privada llena de Su amor. No espere para adorar
públicamente con su congregación; hágalo parte de su caminar diario
con el Señor.

Oración
Nuestras vidas de oración reflejan nuestro amor por Él. Cuando amamos a
alguien, pasamos tiempo con esa persona, que es la forma en que
demostramos que nos importa. No podemos estar en una relación con
alguien con quien no nos comunicamos constantemente. Necesitamos
hablar y orar varias veces al día. La Biblia dice que Daniel se arrodillaba
“tres veces al día, y oraba y daba gracias delante de su Dios” (Daniel
6:10). En los Salmos dice: “Siete veces al día te alabo” (Sal. 119:164).
Debemos estar en oración regularmente durante todo el día.

Meditación tranquila y descanso.

Una de las formas esenciales en que puedes conectarte con el Espíritu del
Señor es descansar en Su presencia a través de la meditación en silencio. La
primera vez que el Señor me llamó para salir a un retiro de soledad con Él, no
estaba familiarizada con la idea y tenía pensamientos incómodos como: ¿Qué
voy a hacer? ¿Podré conectarme? ¿Podré entrar en la presencia de Dios,
encerrado solo durante cuarenta y ocho horas? Temía no poder pasar tanto
tiempo a solas con el Señor. Estaba tan preocupada de salir corriendo de la
cabaña e ir de compras a un pueblo cercano que le pedí a mi asistente que me
dejara, así que no tenía un vehículo.

Mis temores eran infundados, y el tiempo con el Señor resultó ser

maravilloso, aunque confieso que mi asistente me recogió unas horas antes.
Pasé las primeras veinticuatro horas en la presencia constante del Señor.
Recuerdo mirar un cuadro en la pared durante las primeras tres horas y
recibir revelación tras revelación. Me condujo a través de las primeras
veinticuatro horas paso a paso, momento a momento. Ahora valoro los
momentos íntimos a solas con el Señor en los retiros de soledad. Empiezo a
ponerme de mal humor cuando no he tenido mi cuota de "tiempo de Dios". Mi
esposo incluso me dice amablemente: “¿Por qué no vas y estás con el
Señor? Puedo decir que no has tenido suficiente tiempo.

INOFENDIBLE EN LA PRESENCIA DE DIOS

¿Qué cosa tienen en común las personas en el mundo, sin importar la raza,
religión, sexo o edad? Todos queremos ser amados. Creo que todos también
podemos dar amor. La pregunta es, ¿Podemos dar amor como el Padre lo
da? La Biblia nos dice: “El mayor de ellos es el amor” (1 Corintios 13:13), y
“Dios es amor” (1 Juan 4:8).

Fuimos creados para adorar y llamados a amar. El amor que debe brotar es
una abundancia de amor directo del corazón del Padre. Es un amor que brota
de una extensión del amor que hemos recibido al estar en la presencia de
nuestro Padre. No podemos derramar lo que no tenemos. Me doy cuenta de
que cuando no he estado en Su presencia, amo, pero no amo
abundantemente. La presencia de Dios es un lugar donde estamos saturados
de su amor y nos sentimos seguros y protegidos. Nuestros corazones deben
estar tan rebosantes de Su amor que la gente pueda decir a través de las
palabras que decimos: “Porque de la abundancia del corazón habla su boca”
(Lucas 6:45). Si no hablamos y desbordamos amor, probablemente no
hayamos tenido suficiente tiempo en el lugar secreto.

La presencia de Dios no se trata solo de tener suficiente amor para

derramar sobre los demás. También es un lugar donde encontramos
seguridad y descanso emocional, físico y espiritual. Me gusta decirlo de
esta manera: cuando estamos en continua comunión y compañerismo con
Él, nada nos puede tocar. La ofensa, la ira y los espíritus controladores de
otras personas pueden tratar de atacarnos, pero se alejan porque Su
presencia está a nuestro alrededor y ninguna cosa inmunda puede existir
en Su presencia.

¿Me creerías si te dijera que es posible no volver a sentirse rechazado u

ofendido nunca más? He vivido durante años sin ofensas. No puedes
ofenderme. Ahora, no estoy diciendo que no me lastime o me moleste, pero
nunca se manifiesta al nivel de ofensa cuando lo hago. No me puedes ofender
porque me quedo en la presencia de Dios donde no existe ofensa. Si siento
ofensa, sé que es una de dos cosas: una reacción emocional de mi carne o un
espíritu demoníaco que desea atacar mi alma. De cualquier manera, tengo
autoridad sobre esas cosas. Por lo tanto, puedo reprender y destruir la ofensa
antes de que plante su semilla de disidencia.

SALMO 91
Las Escrituras nos dicen que cuando estamos en el lugar secreto, tenemos
protección y descanso. Me encanta estudiar profundamente el Salmo 91 porque
tiene muchas capas proféticas y
profunda revelación. La revelación conduce a la impartición.
Sumerjámonos en el Salmo 91 y hagamos que esto se convierta en
una aplicación.

El que habita al abrigo del Altísimo morará bajo la sombra del

Omnipotente.

—SALMO 91:1

Morar es una palabra llena de poder que se define como poseer un lugar,
permanecer, asentarse, tomar una propiedad y establecer habitación. El
significado más profundo de la palabra habitar es permanecer en ese
lugar. Significa que necesitamos entrar a ese lugar secreto continuamente,
y cuando salimos de ese lugar secreto, todavía necesitamos mantenernos
en la presencia del Señor. Cuando salimos físicamente de nuestros
armarios de oración, debemos mantener nuestras mentes, voluntades y
emociones quietas en ese lugar de oración. Mientras mantenemos
continuamente nuestras almas en esa morada, estamos en un lugar
permanente de descanso y protección, que es una de las razones por las
que digo que es posible no volver a ofendernos nunca más.
La Biblia judía completa realmente da en el clavo en este punto: “Tú que habitas
al abrigo de 'Elyon, que pasas tus noches a la sombra de Shaddai…” (Sal. 91:1,
CJB). Permanecer es otra palabra clave, y significa permanecer
permanentemente, continuar, soportar, permanecer bajo la protección de la
defensa.⁷ Permanecer es ceder. Permanecer y habitar están vinculados a la
importancia de estar en el lugar secreto y permanecer en ese lugar.

La Biblia está llena de condiciones y resultados. Si hacemos algo,

entonces Dios cumplirá sus promesas. En este caso, cuando
permanecemos y moramos, Él nos protegerá. Descubrimos su
protección a medida que profundizamos en este salmo.
Diré del SEÑOR: “Él es mi refugio y mi fortaleza, mi Dios en quien
confío”. Ciertamente El te librará del lazo del cazador y de la
pestilencia mortal.

—SALMO 91:2–3
La Biblia Judía Completa trae otra revelación: “Quienes dicen a ADONAI,
'¡Mi refugio! ¡Mi fortaleza! ¡Mi Dios, en quien confío!'—Él te librará de la
trampa del cazador y de la plaga de las calamidades.”

El Señor construye una fortaleza de protección a nuestro alrededor mientras

estamos en el lugar secreto. Él nos librará de la plaga de las calamidades. No
significa que nada nos atacará jamás. Pero si somos atacados, tendremos paz
interior. Mientras permanezcamos en el lugar secreto, creo que el Señor nos
salvará sobrenaturalmente de los ataques espirituales, pero también creo que
cuando lleguen los ataques, estaremos en paz.

ES HORA DE LA ACTIVACIÓN

Busca la presencia del Señor y encontrarás amor, protección y paz.

ORACIÓN DE ARREPENTIMIENTO, RENUNCIA Y

RUPTURA DEL ACUERDO

Padre Dios, me arrepiento y pido Tu perdón donde no he derrochado

amor. Sé que parte de la falta de amor que experimento proviene del odio
hacia mí mismo, la culpa, la condenación, la vergüenza y la indignidad.
Libero estas emociones y fortalezas de mi vida. En el nombre de Jesús
echo fuera la ofensa, el rechazo, el orgullo y el control. Renuncio a todo
lugar de odio, discordia, inseguridad y dolor. Me arrepiento por no ser una
persona que perdona y no buscar el amor o ser un recipiente de Tu amor.
En el nombre de Jesús, amén.
ORACIÓN DE IMPARTACIÓN Y ACTIVACIÓN
Señor Jesús, te pido que me encuentres en el lugar secreto. Te amo y deseo
pasar tiempo contigo. Ayúdame a eliminar el ruido exterior y las distracciones en
mi vida. Ayúdame a ser diligente en buscarte, y cuando esté contigo, ayúdame a
darte todo de mí. Te mereces toda mi atención. Ofreces perdón incondicional e
instantáneo cuando te lo pido. Por favor, ayúdame a liberar ese perdón hacia los
demás para que no entren en mi alma heridas emocionales. Te amo, Señor, y
quiero acercarme más a Ti. Espíritu Santo, guíame y guíame mientras te busco
en el lugar secreto, y sumérgeme en tu presencia. En el nombre de Jesús,
amén.

PROCLAMACIONES PROFÉTICAS (DECLARACIONES DE

FE)

Mi corazón rebosa del amor del Padre y exuda su gran amor a todos.
Siento el amor de Jesús por las personas y se lo comunico a través de
palabras y acciones.

Soy una persona que perdona. Elijo soltar el perdón y no

ofenderme cuando otros me han lastimado, traicionado o
rechazado.

Hablo y decreto que Dios es amor, y como Dios es amor, yo soy amor.

Proclamo que soy diligente en la búsqueda del Señor. Mi tiempo en el

lugar secreto está lleno de intensos encuentros con el Señor.
Ordeno que se eliminen todas las distracciones de mi vida. Ningún
obstáculo me impedirá quedarme quieto ante el Señor.
 ACTIVACIÓN ESPIRITUAL

Orad y buscad al Señor para un encuentro de amor radical con Él.

Pasa tiempo en ayuno y oración, clamando al Señor y esperando
recibir más de Su amor.

Arrepiéntete y busca sanidad para cualquier ofensa, orgullo, rechazo y

control. Pídele al Espíritu Santo que entre y te corrija y te convenza.
Mientras dedica tiempo a buscar la liberación, confíe en que la
recibirá.

Estar comprometidos, organizados y disciplinados para permanecer

en la presencia de Dios y rezumar amor. Haz un plan de acción.

DECLARACIONES DE GUERRA ESPIRITUAL

Aborto toda misión demoníaca enviada para interferir con mi ser un

recipiente del amor de Dios. Toda disensión malvada enviada para
albergar odio, ira y ofensa, la declaro nula y sin efecto en el nombre de
Jesús.

En el nombre de Jesús, ordeno a todos los torturadores malvados

que anulen sus órdenes contra mí.
Erradico al enemigo de mi mente. Hablo y decreto que mi corazón y
mi alma sean apartados para un uso constructivo para el reino de
Dios.
Hablo y decreto que libero herida y ofensa inmediatamente. No dejo
lugar para el enemigo. Reprendo y renuncio al rechazo y al egoísmo
en el nombre de Jesús.

Destruiré todo principado y potestad que venga contra mí. ¡Proclamo

que voy con la fuerza y el poder del Espíritu Santo y estoy lleno de Su
amor en abundancia en el nombre de Jesús!
 Capítulo 7

OPERACIONES DEMONÍACAS Y JERARQUÍA

¡EN CASO DE QUE NO LO SEPAS, hay una verdadera guerra entre

ángeles y demonios y entre la luz y la oscuridad! Debemos conocer a
nuestro oponente y cómo opera. La iglesia se ha negado a hablar de los
espíritus malignos y los estragos que pueden causar. En el fútbol, los
entrenadores y los equipos estudian las jugadas de sus oponentes para
conocer su próximo movimiento y reacción ante una situación. Debemos
hacer lo mismo en la guerra espiritual profética. Debemos conocer a
nuestro oponente, el reino de las tinieblas, y estar a la ofensiva contra sus
estrategias y tácticas. No significa que debamos dejarnos llevar por el
estudio del lado oscuro, pero debemos saber que tenemos un adversario
real que nos persigue y nadie es inmune a él.

Hasta que el cuerpo de Cristo se dé cuenta de que hay una jerarquía de

poderes demoníacos dispuestos a destruirnos, no viviremos en la victoria
que Jesús pretendía. Es hora de llevar la educación de guerra espiritual y
el ministerio de liberación al frente de la iglesia para que podamos armar al
pueblo de Dios y finalmente prepararlo para la batalla.
Las tropas demoníacas están organizadas, comprometidas y disciplinadas para
llevar a cabo sus tareas. Al igual que las tropas militares, son obedientes para
completar sus órdenes destructivas y harán todo lo posible para llevar a cabo los
planes del enemigo contra ti. Hay soldados de infantería, comandantes y guardias;
algunos son visibles, pero muchos son invisibles. Ya sean demonios de rango
inferior o espíritus de hombres fuertes, tienen la misma tarea: ir en contra de los
planes de Dios para tu vida.

El diablo y sus soldados de a pie están comprometidos con su causa. Nosotros

también debemos comprometernos a conquistar en el reino espiritual y hacer
avanzar el reino. Significa que le pide al Espíritu Santo discernimiento y
revelación a medida que se familiariza con las estrategias y tácticas
demoníacas. Llevar una vida de obediencia y disciplina y confiar en el Espíritu
Santo nos ayudará a ser totalmente entregados y comprometidos con nuestra
causa y nos dará una ventaja sobre el enemigo.

Cuando se trata del reino de Satanás, debes entender la organización de su

ejército.
y estructura Como dije, los espíritus malignos, e incluso traeré a esto
brujas, señores de la guerra y satanistas, están comprometidos con su
causa. Pero recuerda, no hay nada que temer. Jesús ganó la batalla, y
hay el doble de ángeles buenos que de ángeles caídos (demonios). Jesús
conquistó los poderes de las tinieblas, y ahora debemos ser una extensión
de lo que Él logró.

En última instancia, sabemos cómo termina la guerra; salimos

victoriosos, incluso cuando las batallas son difíciles. ¿Qué pasaría si
pudiéramos empoderar al cuerpo de Cristo para que esté tan
comprometido con Jesús y el reino de Dios como el pueblo que sirve al
diablo? En ese caso, podríamos ganar esta lucha y convertir a los que
sirven a Satanás en los que sirven a Jesús. Siempre he dicho que los
satanistas, las brujas y los brujos desean las mismas cosas que
nosotros: amor y poder. Y podemos darles ese amor y ese poder.
(Véase 2 Timoteo 1:7.)
Hay una jerarquía en el reino satánico. Conocer a nuestro adversario implica
conocer los niveles de fuerzas contra las que luchamos. No debes avanzar
con arrogancia o falsa confianza cuando luchas contra demonios de alto
nivel que la Biblia llama principados y potestades. Escucho a personas que
van a regiones, y atan, restringen e intentan expulsar a los principados y
potestades en esa región y experimentan guerras extremas o se enferman.

¡Aclaremos esto! No vamos a regiones y territorios totalmente radicales por

Jesucristo y empezamos a tratar de anular y tomar autoridad sobre
principados y potestades. A menudo, las personas que hacen esto no tienen
autoridad en la región ni un ministerio de unción para la liberación. Son
individuos imprudentes con orgullo y arrogancia que intentan destruir algo
que no tienen por qué eliminar. Ahora puedes estar diciendo, bueno, Kathy,
no puedo estar del todo de acuerdo. Tenemos dominio sobre estas cosas. Sí,
tenemos dominio cuando Dios dice que tenemos dominio y nos da una
asignación profética para abordar estas cosas. En la guerra espiritual,
específicamente cuando se ora por territorios y regiones, es necesario
colaborar con los pastores y líderes ministeriales locales que tienen autoridad
sobre la región que presiden. Al tratar con demonios de alto rango, puedes
enfrentarte a una guerra severa. Si te enfrentas a principados de una región
sobre la que no tienes autoridad, resistirán y no se irán. Cuando las personas
ungidas asignadas por el Señor para esta tarea trabajen junto con los líderes
locales, la guerra se minimizará, la autoridad será liberada y las fortalezas
cesarán.

Recuerde, ser guiado proféticamente por el Espíritu de Dios significa que

asumimos las tareas del Espíritu Santo, y no tratamos de crear las nuestras. No
todas las ciudades para
conquistar es tuyo. No todos los poderes que se sientan en un banco son
suyos para derrocarlos. No todos los enemigos que surgen son tuyos para
atacar. Esto puede sonar duro, pero el amor duro nos lleva de regreso a
donde Dios necesita que estemos. Nos mantiene enseñables y
continuamente asociados con el Espíritu Santo.

Hay una fórmula de cómo deben ser atacados los principados y potestades
(demonios territoriales y regionales). En primer lugar, debemos tener una
asignación y una directiva del Señor para perseguir a estos gobernantes.
Necesitamos un plan de batalla del Espíritu Santo, un tiempo de oración y
ayuno, y sobre todo necesitamos hacerlo cuando estemos espiritualmente
fuertes y listos para la batalla. Tiene que haber una convergencia entre los
líderes locales y los intercesores. Cualquier persona de fuera del área
debe ser enviada por el Espíritu Santo como ministro de liberación, líder
apostólico o alguien que tenga una unción quebrantadora sobre su vida.
Se necesita un equipo para unirse colectivamente y converger para ver a
los altos poderes expulsados de una región. Consulte Territorial Spirits de
C. Peter Wagner para obtener más información sobre este tema.

EFESIOS 6:12

Porque nuestra lucha no es contra sangre y carne, sino contra

principados, contra potestades, contra los gobernantes de las
tinieblas de este mundo, y contra huestes espirituales de maldad en
las regiones celestiales.

—EFESIOS 6:12

Antes de definir la jerarquía del reino demoníaco en Efesios 6:12, me

gustaría liberar libertad en tu vida. Reconocer que nuestra lucha no es
contra la carne y la sangre, sino contra las fuerzas del mal, os ayudará
a alcanzar la libertad. En otras palabras, tu lucha no es contra un ser
humano, como un familiar, amigo, compañero de trabajo, jefe o vecino;
tu lucha es contra un espíritu maligno. Esta es la forma en que la Biblia
judía completa traduce este versículo:
Porque no estamos luchando contra los seres humanos, sino
contra los gobernantes, las autoridades y los poderes cósmicos
que gobiernan estas tinieblas, contra las fuerzas espirituales del
mal en el reino celestial.

—EFESIOS 6:12, CJB

Algunas personas son difíciles de amar. Usted podría estar en conflicto con
ellos. Tal vez los amas, pero no te gustan mucho. El Espíritu Santo me reveló
hace años que ame a la persona pero no le guste el espíritu maligno que opera
a través de esa persona. Cuando aprende a separar a la persona del espíritu
maligno con el que está ligada, puede comenzar a tolerar, aceptar y amar a la
persona. Te vuelves más indulgente y menos irritable o molesto cuando la
persona te ofende o te enoja. Cuando nos damos cuenta de que nuestra lucha
no es contra la carne y la sangre, podemos separar la parte que no nos gusta
de la persona que amamos y con la que tenemos una relación. Esta percepción
ha traído mucha tolerancia y libertad a mi vida, y espero que esta revelación les
brinde libertad.

Ejercicio Profético: Relaciones Desafiantes

¿Hay una persona desafiante en tu vida? ¿Puedes extender la gracia y

el perdón? Pronuncie esta oración para liberar el amor y comprender el
reino espiritual. Además, puede pedirle al Espíritu Santo que se asocie
con usted en oración y le dé palabras adicionales para orar por la
situación.

Amo a [inserte el nombre de la persona]. No me gusta el espíritu demoníaco que

opera a través de él o ella. Perdono a [inserte el nombre de la persona]. Señor,
ayúdame a separar a la persona que amo —a la que Tú amas— del espíritu
demoníaco que opera a través de él o ella. Oro para que bendigas a [insertar el
nombre de la persona] y ablandes su corazón para recibir Tu amor. Jesús, quita el
dolor de su corazón para que [inserte el nombre de la persona]
puede dar amor, ser amor y recibir amor. ¡En el nombre de Jesús,
amén!

JERARQUÍA DEMONÍACA

He comparado fuerzas demoníacas con tropas militares, así que

analicemos los rangos enumerados en Efesios 6:12.

• Principados: Estos son los gobernantes principales y los poderes

más altos en rango y orden en el reino de Satanás. Tienen un poder y
una autoridad significativos en el ámbito espiritual.

• Poderes: Estos son los segundos al mando en el reino de Satanás.

Ejecutan las órdenes y llevan a cabo la destrucción de los
principados.

• Los gobernadores de las tinieblas de este mundo: Estos espíritus se

oponen a los propósitos de Dios de una manera sujeta, disciplinada y
ordenada. Cuando a estos espíritus se les dan tareas para llevar a cabo,
se produce una destrucción masiva.

• Maldad espiritual en lugares altos, o lugares celestiales: Estos son los

demonios más comunes que encontraremos. Son fuerzas malignas en los
lugares celestiales, en la atmósfera espiritual que es más probable que
penetremos.
Satanás organiza sus espíritus demoníacos, les da órdenes y asignaciones y los
envía a robar, matar y destruir. Se nos ha dado la armadura de Dios para
combatir tales ataques.

Así que toma cada pieza de equipo de guerra que Dios provee; para que
cuando venga el día malo, podáis resistir; y cuando la batalla sea ganada,
todavía estarás de pie. Por lo tanto, ¡levántate! Abrochen el cinturón de la
verdad a sus lomos, pónganse la justicia por coraza, y pónganse en los pies el
apresto que viene de la Buena Noticia de shalom. Llevad siempre el escudo de
la confianza, con el que podréis apagar todos los dardos de fuego del Maligno.
Y tomad el yelmo de la liberación; junto con la espada dada por el Espíritu, es
decir, la Palabra de Dios; mientras oráis en todo tiempo, con toda clase de
oraciones y peticiones, en el Espíritu, con vigilancia y perseverancia, por todo el
pueblo de Dios.

—EFESIOS 6:13–18, CJB

Cuando nos pongamos y activemos la armadura de Dios, ¡seremos

victoriosos en cada batalla!

LA BATALLA INVISIBLE

En Daniel 10 podemos ver de primera mano la guerra que ruge en el

ámbito espiritual.

Pero entonces me tocó una mano que me puso de rodillas y sobre las
palmas de mis manos. Me dijo: Daniel, varón muy amado, entiende las
palabras que te hablo y levántate, porque ahora he sido enviado a ti. Y
cuando me hubo dicho esta palabra, me quedé temblando.

Entonces me dijo: “No temas, Daniel. Porque desde el primer día que dispusiste
tu corazón a entender esto y a humillarte delante de tu Dios, tus palabras fueron
oídas, y yo he venido a causa de tus palabras. Pero el príncipe del reino de
Persia me resistió durante veintiún días. Así que Michael, uno de los
principales príncipes, vinieron a ayudarme, porque yo había
quedado allí con los reyes de Persia”.

—DANIEL 10:10–13

Daniel oró y ayunó durante veintiún días. Por la vida de Daniel, sabemos
que era un hombre de Dios que oraba constantemente. No tuvo miedo de
mostrar su fe y compromiso con Dios. Era un hombre de oración.
Podríamos decir que Daniel era un guerrero de oración y muy avezado en
la oración. Sin embargo, sus oraciones no fueron respondidas. Se produjo
una guerra espiritual. Daniel no podía ver esta guerra, y nosotros tampoco.
Peleamos una batalla invisible, y un enemigo invisible apunta a cada
pedido de oración que enviamos.

¿Cómo combates las fuerzas de la oscuridad que vienen en contra de

tus oraciones? Puede parecer contradictorio, pero su primera línea de
defensa es orar por la ofensa. No espere hasta que se necesiten tomar
medidas defensivas para combatir la guerra. Oren enérgicamente con
autoridad para atar y restringir los ataques que se envían contra
ustedes.
Pero, ¿cómo orar en la práctica contra la guerra invisible? Piense en lo que
está sucediendo o ha sucedido en el pasado, con lo que lucha o lo que teme.
Esos son objetivos en horario de máxima audiencia para que el enemigo los
persiga. Por lo tanto, debes apuntar a las cosas que él puede atacar rezando
por la ofensa. Si sabe que lucha con el rechazo en las relaciones, comience
a hablar de bendiciones, sanidad, restauración, confianza, aceptación y
cualquier otra cosa que necesite para asegurarse de que el rechazo no se
manifieste. Ven contra el juicio, la crítica, el chisme y la traición. Pídele al
Espíritu Santo medidas tácticas y palabras estratégicas para orar contra la
guerra que el diablo quiere enviarte.

Cree que cuando te asocias con el Espíritu Santo, Él te dará las palabras
para orar estratégicamente. Es hora de dejar atrás oraciones simples como
“Señor, bendíceme” o “Cubre a mi familia y a mí con la sangre de Cristo”.
Si bien estas oraciones son buenas, pueden volverse pasivas y rutinarias.
Evite orar por legalismo, lo que le impide avanzar más en su vida de
oración. En su lugar, presione para recibir más mientras coopera con el
Espíritu Santo.
Las fuerzas satánicas maximizarán cada oportunidad que tengan para inhibir el
avance de sus oraciones. Son viles y no tienen otra agenda que robar, matar y
destruir. (Véase Juan 10:10.) Aunque las fuerzas espirituales pueden retrasar sus
oraciones, aún necesita orar con expectativa. Cree que tus oraciones se
manifestarán.

Recuerdo a una mujer que me pidió ayuda con la liberación en múltiples

ocasiones. Experimentaría la libertad a través de nuestras sesiones, pero
en casa volvería su tormento. Finalmente, un día, dijo: “Terminé. Es más
fácil vivir con mis demonios que obtener liberación”.

Podemos sentirnos de manera similar acerca de nuestra vida de oración.

Podemos tener la tentación de tomar el camino más fácil y hacer
oraciones pasivas en lugar de ser agresivos. Cuando oramos por la
ofensa, hacemos la guerra. Nuestras oraciones están dirigidas a combatir
al diablo y la lucha que lanza en nuestro camino. Si rezamos oraciones de
ratón, seremos atrapados en la trampa que el diablo nos ha tendido.

ES HORA DE LA ACTIVACIÓN

Es hora de resistir la tentación de hacer oraciones pasivas y activarte

para orar sobre la ofensa.

ORACIÓN DE ARREPENTIMIENTO, RENUNCIA Y

RUPTURA DEL ACUERDO

Me arrepiento por vivir una vida que no está basada en la Palabra de Dios.
Vengo contra cada hueso seco de mi cuerpo, y profetizo y hablo compromiso y
disciplina a mi vida. Renuncio y rompo el acuerdo con los espíritus de pitón
para robar, matar y destruir mi destino. Vengo contra cada poder oscuro que
ha intentado operar en mi contra. Hablo y decreto que soy perdonado, y me
perdono a mí mismo por cualquier cosa que cause guerra en mi vida. ¡En el
nombre de Jesús, amén!
 ORACIÓN DE IMPARTACIÓN Y ACTIVACIÓN

Espíritu Santo, enséñame cuándo y cómo ponerme la armadura de

Dios. Te agradezco que me hayas proporcionado herramientas
estelares para conquistar poderes y principados. Recibo estas
herramientas y me dedicaré a usarlas. Ayúdame a estar en Tu Palabra
ya vestirme de verdad. Ayúdame a caminar en shalom y estar
preparado para lo que tienes. ¡En el nombre de Jesús, amén!

PROCLAMACIONES PROFÉTICAS (DECLARACIONES DE

FE)

Proclamo que tengo poderosas armas y artillería para usar contra el

reino de las tinieblas.

Caminaré por fe y usaré la oración, el estudio de la Biblia y la

adoración como herramientas contra el enemigo.

Tengo todo lo bueno y perfecto que necesito para enfrentar los

ataques de guerra. El Espíritu Santo está de mi lado y es mi
compañero y amigo.

No temeré cuando me enfrente a los poderes de las tinieblas, porque

Jesús es la luz.
Ninguna arma forjada contra mí prosperará. Mis oraciones
dispersarán cada flecha demoníaca.
 ACTIVACIÓN ESPIRITUAL

Desarrolle un plan de oración. Puede pensar que no necesita un plan,

pero si no está orando regularmente, configure alarmas en su teléfono
o encuentre una manera de ser disciplinado en su tiempo de oración.

Orad y discernid sobre vuestra comunidad. Los hombres fuertes

generalmente se sientan en instituciones bancarias y ayuntamientos. Ve al
centro de tu región y ora y trata de discernir qué principados y potestades
están sobre tu región. Este ejercicio es para darle la oportunidad de
asociarse con el Espíritu Santo para recibir revelación. Este no es un
momento para que trates de abordar y derribar los principados. Abre tus
oídos y ojos espirituales y trata de recibir del Espíritu Santo.

Recuerde, el reino demoníaco está organizado, disciplinado y

comprometido. Pídele al Espíritu Santo que te convenza de los ladrones
de tiempo y los derrochadores del destino. ¿Dónde y cómo puedes

organizado, disciplinado y comprometido con el avance del reino,

aumentando su vida de oración, trabajando a través de su
liberación y manifestando su sanidad?

DECLARACIONES DE GUERRA ESPIRITUAL

En el nombre de Jesús disuelvo todo ataque demoníaco contra mi matrimonio,

hijos, y familia, y constriñe el movimiento de todo espíritu demoníaco
enviado para causar desunión.

Ato y restrinjo las fuerzas del mal para que no ataquen mi hogar.
Proclamo un cerco de protección alrededor de mi hogar para que ninguna
arma forjada contra él prospere.

Reprendo al devorador y los planes que orquesta contra nosotros.

Digo estar expuesto y que todo plan oscuro salga a la luz. Que mi
oración sea un arma para ir estratégicamente contra todo plan
destructivo.

Paralizo los poderes de las tinieblas en mi vida y sobre la jurisdicción y

esfera de influencia que Jesús me ha dado.

Restrinjo el movimiento del enemigo en mi vida, familia y hogar en el

nombre de Jesús. Ato y restrinjo a los principados para que no operen
contra nosotros.
 Capítulo 8

EXPONIENDO LA INFILTRACIÓN DEMONÍACA DEL ALMA

SOMOS seres tripartitos. Cada uno de nosotros tiene un alma (mente,

voluntad y emociones), un cuerpo físico y un espíritu. Somos seres
espirituales en trajes de carne. Cuando has probado la bondad de Dios
al estar en Su presencia, es incómodo estar en la carne.

Cuanto más me acerco al Señor, menos me gusta mi carne. No me

gusta ser emocional, enfadarme, o incluso a veces sentir. ¡Quiero ser
invencible! ¡No quiero que me penetre la ofensa, el rechazo o la
desilusión! Deseo ser amor, dar amor y recibir amor sin restricciones.
Desearía poder decir que soy completamente un ser espiritual, pero eso
no sería cierto. Aún así, es mi deseo caminar en el Espíritu en todo
momento.

OPRESIÓN VS. POSESIÓN

Antes de profundizar en el tema de este capítulo, me gustaría disipar la

idea errónea de que un cristiano no puede tener un demonio. Como
cristianos, los demonios pueden infiltrarse en nuestra alma o nuestro
cuerpo físico, pero no pueden ocupar nuestro espíritu donde reside el
Espíritu Santo. Para desglosarlo aún más: un demonio puede entrar en
el alma de un creyente, que es la mente, la voluntad y las emociones, y
puede residir en el cuerpo físico de un creyente.
Un espíritu maligno puede ocupar una parte del alma de un creyente, pero
no puede entrar en su espíritu. Nos obsesionamos con la palabra poseído,
que significa ocupar. Un demonio puede poseer u ocupar tu alma pero no tu
espíritu. Para ser claros, un cristiano puede ser oprimido por demonios pero
no poseído en su espíritu. Sin embargo, un cristiano puede estar poseído
(ocupado) pero no completamente dominado por un demonio en su cuerpo o
alma (mente, voluntad y emociones).
Es bastante sencillo: si un espíritu de enfermedad causa cáncer,
entonces posee esa parte de tu cuerpo donde ataca el cáncer. Si un
espíritu seductor posee tu mente y te atrae hacia el miedo y la
depresión, entonces posee parte de tu mente, pero no posee tu
espíritu.
Cuando estudiamos las Escrituras, encontramos que la liberación es para los
creyentes. Pablo estaba hablando a los creyentes cuando dijo: “Por lo tanto,
sométanse a Dios. Resistid al diablo, y huirá de vosotros” (Santiago 4:7).
También sabemos que si no nos llenamos del Espíritu Santo, los demonios
volverán siete veces peores. (Véase Mateo 12:45.) Una vez más, esto indica
que la liberación es para los creyentes.

Una persona sin Jesús en el interior puede ser poseída por un demonio
que controla sus acciones. Pero un cristiano que ha rendido su vida al
Señor solo sentirá opresión, como un fuerte espíritu seductor que lo
atrae al pecado natural o emocional. Se sentirá como si una fuerza
invisible lo guiara en la dirección equivocada, pero no puede poseer su
espíritu.

Al mirar nuestras almas, tenemos dolencias emocionales que, cuando

no se curan, pueden convertirse en fortalezas espirituales. Una forma
en que los demonios pueden ocupar tu alma es cuando las fortalezas
no se abordan durante la curación interior. Las dolencias emocionales
vienen por estrés o trauma. El ministerio de sanidad interior evita que
estos se conviertan en fortalezas demoníacas. Cuando fallamos en
sanar el trauma, se intensifica, y luego se necesita un ministerio de
liberación para expulsar un espíritu demoníaco.
Nuestros cuerpos físicos pueden ser atacados con enfermedades o dolencias a
través de traumas, accidentes, maldiciones generacionales, dolencias
emocionales no resueltas, no comer los alimentos adecuados, estar expuestos
a toxinas y varias otras circunstancias. Estos pueden permitir una puerta abierta
para que entre el enemigo y plagar su cuerpo físico con un demonio que
manifiesta enfermedad y dolencia. Las personas no siempre experimentan
sanidad física cuando se ora porque un espíritu demoníaco podría ser la fuerza
impulsora de esa enfermedad. Un demonio no puede ocupar todo el cuerpo de
un cristiano; eso sería considerado posesión. Sin embargo, un demonio puede
ocupar una parte del cuerpo a través de enfermedades y dolencias físicas,
como el cáncer.
No tenemos que tener miedo de esta realidad. Recuerda, “Porque nuestra
lucha no es contra sangre y carne, sino contra principados, contra potestades,
contra los gobernadores de las tinieblas de este mundo, y contra huestes
espirituales de maldad en las regiones celestiales” (Efesios 6:12). No luchamos
contra carne y sangre sino
contra principados, potestades, gobernantes y fuerzas espirituales,
todos los cuales son espíritus demoníacos.

Discutamos las formas en que encuentran entrada en la vida de las

personas.

PUNTOS DE ENTRADA

Los espíritus demoníacos pueden entrar en nuestros cuerpos físicos a través

de maldiciones generacionales, accidentes, lazos del alma, experiencias
cercanas a la muerte, traumas, adicciones y pecados. Erradicar estos
espíritus en los puntos de entrada es fundamental. Los puntos de entrada se
exponen a medida que discernimos y miramos rápidamente hacia atrás en
nuestro pasado para descubrir dónde obtuvieron acceso los espíritus
malignos. Podemos abrir la puerta conscientemente a través del pecado.
Pero también podemos subconscientemente permitir un ataque al no buscar
nuestra sanidad o ser un blanco del enemigo debido al llamado de Dios en
nuestras vidas. De cualquier manera, los portales abiertos de nuestras almas
deben abordarse.

Jesús conquistó la muerte en la cruz, pero ¿cómo podemos nosotros,

como cristianos, cerrar la puerta a los ataques espirituales? Las
Escrituras nos dicen que cuando los espíritus malignos se van, pueden
regresar si no cerramos las puertas al pecado en nuestras vidas y
buscamos apasionadamente una relación con Jesús.

Cuando un espíritu inmundo sale de un hombre, va por lugares secos

en busca de descanso. Al no encontrar ninguno, dice: "Volveré a mi
casa, de donde salí". Cuando llega, la encuentra barrida y amueblada.
Entonces va y trae otros siete espíritus peores que él, y entrados,
moran allí. Y el último estado de ese hombre es peor que el primero.

—LUCAS 11:24–26
A medida que cerramos las puertas demoníacas, es imperativo buscarlo a Él y
Su Palabra y orar. He visto volver peores a los demonios, tal como dice el
Evangelio de Lucas. El área donde más lo veo es en los creyentes cristianos
promedio. Cuando ellos
reciben liberación pero no son consistentes en su búsqueda de la
santidad y las cosas de Dios, entonces es cuando los demonios
regresan. Esto se multiplica en las personas que luchan con el
victimismo, la derrota y la pasividad.

SEIS FORMAS EN QUE LOS DEMONIOS PUEDEN INFILTRARSE EN

EL ALMA

1. Ensayos y pruebas

Ser atacado continuamente por el reino demoníaco puede desgastarte y

desgastarte. Sufrir ciclos repetidos de ataques espirituales puede plagar tu
mente y dejarte sintiéndote derrotado. Durante tiempos de prueba, debemos
asegurarnos de humillarnos ante el Señor en oración. La mentalidad de
derrota y víctima puede entrar cuando hemos sido desgastados y golpeados.
Lo que hagamos durante la prueba y al otro lado de ella tendrá frutos
duraderos. “Hermanos míos, tened por sumo gozo cuando os halléis en
diversas tentaciones, sabiendo que la prueba de vuestra fe produce
paciencia. Mas perfeccione la paciencia su obra, para que seáis perfectos y
completos, sin que os falte cosa alguna” (Santiago 1:2–4).

Todos enfrentamos pruebas y pruebas, y debemos aceptarlas. Abrazarlos no

significa que digamos: “¡Oh, qué bueno! Mira lo que me está pasando”. Significa
que dejamos de resistirnos a ellos. No vayas contra la corriente; ir con el grano.
Después de que reconozcamos y reconozcamos que nos enfrentamos a algo
en una guerra espiritual, lo superaremos más fácilmente si dejamos de luchar y
lo abrazamos.

2. Engaño
Los espíritus seductores son espíritus seductores que te alejan de la enseñanza
adecuada y te llevan al engaño. No podemos asumir que solo porque una
enseñanza suena bien, es precisa. Las personas interpretan las escrituras de
diferentes maneras. Si tiene un control en su espíritu, se siente incómodo o
sacude la cabeza ante el
enseñanza, entonces muy bien podría ser el Espíritu Santo
advirtiéndole que no es exacto.
En 1 Timoteo 4:1 la Biblia dice: “Algunos apostatarán de la fe, y prestarán
atención a espíritus engañadores y a doctrinas de demonios”. Debemos
proteger nuestras almas y espíritus lo mejor que podamos. La mayoría de los
falsos maestros no comienzan siendo falsos; Creo que una buena parte
comienzan como buenos maestros pero se desvían en el camino.

Recientemente compré algunos libros escritos por un autor muy conocido.

Algunas de las personas que siguen mi ministerio comenzaron a usar una
práctica que él enseñó y yo quería saber más al respecto. Empecé a leer estos
libros y estaba inquieto. Tomé estos libros y fui y escudriñé las Escrituras para
probar esta enseñanza. Revisé los capítulos y busqué los versículos de las
Escrituras a los que se refería el libro para ver si podía obtener conocimiento de
las Escrituras para estar de acuerdo con lo que él estaba enseñando. Estaba
inquieto y no podía recibir la misma revelación. Le pedí a mi esposo que leyera
algunos puntos del libro, y tampoco vio dónde se alineaban las Escrituras y
dónde estaban inestables. Entonces llamé a uno de mis amigos apostólicos que
sabe mucho sobre el tema. Le transmití mis sentimientos y le pregunté si me
estaba perdiendo algo. Mi amigo dijo: “Kathy, usted está respondiendo a su
propia pregunta. Tenía un control en mi espíritu y necesitaba escucharlo.

Cuando reciba una nueva revelación de las Escrituras, siéntese y

medite en ella durante unos minutos. Permita que el Espíritu Santo
entre y sea su maestro. El engaño proviene de tomar las cosas al pie
de la letra. Me encanta cuestionar a Dios. Cuando recibo una
respuesta a una oración o discernimiento, no solo la asimilo; Pregunto
por qué. ¡Probar todo es bueno!

3. Penetración del pensamiento

El diablo es un mentiroso. Es el padre de la mentira. (Ver Juan 8:44.)

Todos hemos tenido pensamientos negativos en nuestras mentes.
Cuando un espíritu maligno está en tu alma, puede atacar tu mente con
negatividad y atraerte hacia formas de pensar incorrectas.
Conectamos nuestros espíritus con el Espíritu Santo. Conectamos nuestras
almas (mente, voluntad y emociones) con el Padre, el Hijo y el Espíritu Santo.
Del mismo modo, los demonios son seres espirituales.
que se infiltran en nuestros pensamientos. Las personas que practican la
brujería no siempre escuchan una voz malvada audible, sino que conectan
sus almas con un espíritu demoníaco. Cuando un demonio nos oprime,
podemos escuchar pensamientos como: “Nunca te liberarás”, “No eres
bueno” o “¿Por qué no vas y te suicidas?”. Los demonios son espíritus
malignos en nuestras almas y pueden penetrar nuestras mentes.

Cuando las brujas y los brujos se comunican con los demonios, entregan
sus almas a un ser demoníaco. Cuando no buscamos la liberación y nos
hemos puesto de acuerdo con las fortalezas o hemos sido víctimas de un
trauma, puede suceder lo mismo: podemos entregar una parte de nuestra
alma al enemigo. No es lo mismo que cuando un señor de la guerra
conscientemente decide unirse con un ser espiritual. Aún así, por nuestra
falta de conocimiento y pereza contra la liberación, nos unimos en un nivel
inferior con una entidad demoníaca. Lo que no echamos fuera, lo
habilitamos y damos acceso a parte de nuestra alma.

La sociedad se burla de la idea de que cuando una persona escucha voces,

esas voces podrían ser demoníacas. En cambio, piensan que la persona tiene
una enfermedad mental, como la esquizofrenia, y quieren resolver el problema
solo a través de la terapia y la medicina. Según mi experiencia, en la mayoría
de los casos, las voces atormentadoras son espíritus demoníacos. El
ministerio de liberación debe presentarse si queremos liberar a las personas
de su tormento mental. Jesús expulsó al demonio y se ocupó de la raíz del
problema. Se dirigió a él por lo que era: ¡un demonio!

A los demonios les encanta atormentar a las personas que luchan con
problemas mentales. Por lo tanto, independientemente de la causa raíz, el
enfoque sigue siendo el mismo. Tenemos autoridad a través del Espíritu
Santo y la sangre derramada de Cristo para detener y expulsar cualquier
demonio que explote a una persona que está luchando mentalmente. He
conocido a muchos cristianos maduros y llenos del Espíritu que tienen
antecedentes de enfermedades mentales o tienen hijos que los padecen. A
menudo dirán que han orado y peleado por sus hijos, los han llevado a través
de la liberación, los han ungido con aceite, han renunciado a las maldiciones
generacionales y aún persiste la enfermedad mental. De hecho, las raíces y
las causas de la enfermedad mental y la opresión demoníaca son complejas,
pero sepa esto: ¡Dios quiere liberarlo a usted y a sus hijos!
Es posible que no se conozca la causa raíz (aparte de que vivimos en un mundo
defectuoso y caído, lleno de enfermedades y muerte). Sin embargo, ¡la
dimensión espiritual no puede ni debe ser ignorada! Continúe orando contra la
influencia demoníaca. Cualquiera que sea el problema, debes saber que sirves a
un Dios amoroso que ve tu dolor, y el Espíritu Santo es tu Consolador y
Libertador. Date cuenta de que tienes un enemigo, y el
las fuerzas del infierno tratarán de aprovecharse de vuestras
debilidades y dolencias humanas. Sigue orando con fe; seguir atando
al enemigo para eliminar cualquier ventaja.

4. Imaginaciones vanas

Nuestras mentes son creativas. Siempre me asombro cuando veo

películas de Star Wars. Pienso, "¿Cómo piensa la gente estas cosas?"
Estoy impresionado con los personajes únicos y sus apariencias y formas
de actuar.

¿Alguna vez te has preguntado cómo vanas imaginaciones llenan

negativamente tu vida de pensamientos? Imaginaciones vanas y escenarios
falsos entran en nuestras mentes. La verdad es que los ponemos ahí, y
entretenemos esos pensamientos al no descartarlos. Pensamos y visualizamos
cosas que nunca sucederán. Las fortalezas están en nuestras mentes. Al llevar
cautivo todo pensamiento y someterlo a la Palabra de Dios, podemos despejar
nuestra mente de negatividad y duda y vivir en la fe y creencia que la Biblia
declara. En 2 Corintios 10:4-5 dice: “Porque las armas de nuestra milicia no son
carnales, sino poderosas en Dios para la destrucción de fortalezas, derribando
argumentos y toda altivez que se levanta contra el conocimiento de Dios, para
todo pensamiento a la cautividad a la obediencia de Cristo.”

A medida que eliminamos las fortalezas de nuestra mente, obtenemos una

comprensión más clara de cómo operan las mentiras y el miedo. Los
pensamientos que entran en nuestra mente pueden ser nuestra carne,
imaginaciones vanas o ataques demoníacos. Cuando repasamos
pensamientos en nuestra mente y comienzan a manifestarse vanas
imaginaciones, se vuelve difícil descifrar lo que es verdadero versus lo que
es falso. Detrás de una fortaleza o de una imaginación vana hay una mentira,
detrás de la mentira hay miedo, y detrás del miedo hay un área donde no
confiamos en el Señor. Cuando descubres la mentira y reconoces el miedo,
puedes llevar cautivo todo pensamiento y echar fuera lo que no es de Dios.
5. Pecado
Efesios 4:27 dice: “No deis lugar al diablo”. ¿Cómo damos lugar al diablo? Él
obtiene acceso cuando abrimos la puerta al pecar. Cerrar la puerta debe ser
nuestro primer paso al dedicar nuestras vidas a Cristo. El pecado puede ser algo
que hacemos conscientemente, como la pornografía, el robo o la mentira; también
puede ser subconsciente, como ser controlador, irritable o enojado. Puede ser un
acto consciente del que sabemos que debemos arrepentirnos o un comportamiento
emocional del que inconscientemente no nos damos cuenta que ha abierto la puerta
al enemigo. La sanidad interior y la liberación son importantes porque cierran la
puerta y niegan el acceso al enemigo.

La desobediencia puede estar en cualquier área de tu vida: descuidar el tiempo

personal con Dios, malos hábitos alimenticios, finanzas fuera de control, etc. Si
Él te dice que no comas algo o quiere que renuncies a algo, debes ser
obediente. Cada vez que no llevas a cabo Sus instrucciones, estás en
desobediencia al Señor.

Prevenga los ataques espirituales caminando en obediencia a las

instrucciones del Señor. Vive alineado con las Escrituras. Sé
disciplinado para cumplir las órdenes e instrucciones que Él te da.

6. Maldiciones generacionales

Las maldiciones generacionales y los patrones de comportamiento aprendidos son

puntos de entrada y acceso a lo demoníaco. La Biblia nos dice cómo las
maldiciones pasan de generación en generación. “…que guarda misericordia a
millares, que perdona la iniquidad, la transgresión y el pecado, pero que de ningún
modo tendrá por inocente al culpable, que castiga la iniquidad de los padres sobre
los hijos y sobre los hijos de los hijos, hasta la tercera y cuarta generación” (Éxodo
34). :7).

Estas maldiciones continúan construyendo fortalezas en nuestras vidas porque

muchos cristianos sienten que Jesús tomó todas nuestras maldiciones en la
cruz y ya no luchamos con ellas. Si bien Jesús tomó nuestras aflicciones en la
cruz, ahora tenemos que caminar hacia nuestra salvación y liberación. Cuando
aceptaste a Cristo, ¿te liberaste automáticamente de la presión arterial alta, la
diabetes o el glaucoma de tus padres? ¿Ninguna de sus dolencias físicas ha
plagado tu cuerpo? Si está libre de la maldición, no debe tomar los
medicamentos que toman sus padres, o no debe tener un alto riesgo de
enfermedades generacionales.
Las dolencias emocionales también atraviesan nuestras líneas
generacionales, como la depresión, el trastorno bipolar, la ira, el control y el
miedo. En términos generales, somos un producto de cómo fuimos criados.
No estoy proclamando eso sobre tu vida negativamente; Estoy afirmando
que durante nuestros años de formación, los comportamientos modelados
para nosotros, las cosas que observamos y la forma en que nos trataron
tienen un impacto significativo en lo que somos. Estas dolencias
emocionales pueden ser una maldición generacional, y dado que se nos ha
dado un nuevo linaje a través de Cristo, podemos romper la maldición y
pasar de la aflicción personal a la victoria.

RECIBIR LIBERACIÓN DE MALDICIONES

GENERACIONALES

Diagramamos un árbol genealógico para descubrir nuestro linaje

familiar. Anotamos los nombres de nuestros parientes y cómo se
relacionaron con nosotros, y si profundizamos, generalmente
encontramos de dónde vinieron. Nuestros árboles genealógicos
pueden contener información valiosa para nuestro caminar espiritual
y nuestra liberación. Diagramar un árbol genealógico puede ayudar a
descubrir problemas de salud, problemas emocionales y maldiciones
espirituales generacionales.

Ejercicio Profético: Árbol Genealógico Generacional

¿Cómo puedes tomar lo que sabes sobre tu línea familiar para lograr tu
sanidad física y liberación de las fortalezas emocionales? Cuando dirijo a
las personas a través de maldiciones generacionales, no es tan fácil como
decir: "Todas las maldiciones generacionales desaparezcan en el nombre
de Jesús". Evalúe y haga un diagrama de su árbol genealógico de
dolencias emocionales y físicas. Créalo como lo harías con un árbol
genealógico genealógico con la abuela y el abuelo en la parte superior,
seguidos por tu mamá, papá, tías, tíos, hermanos y hermanas. Incluso
puede agregar a sus hijos para averiguar lo que ya se les está
transmitiendo.
Como guía sobre qué diagramar, busque las circunstancias
negativas que sufrieron que usted está experimentando, tales
como:

• trauma

• pobreza

• aborto

• divorcio

Registre cualquier aflicción física que hayan sufrido, tales como:

• Experiencia cercana a la muerte

• intento de suicidio

• colesterol alto

• diabetes

Ahora haga una lista de las dolencias emocionales que sufren, tales
como:
• depresión
• enfado

• amargura

• miedo

Escriba tantas cosas como pueda bajo el nombre de cada persona.

Recorra su árbol y descubra lo que se repite a través de las
generaciones. ¿Qué puntos en común puedes identificar?

Ejercicio Profético: Romper Acuerdo Con Maldiciones

Ore y pídale al Espíritu Santo por dónde empezar y que lo guíe a

través del proceso de sanación.
Quiero enfatizar la importancia de hablar en voz alta las siguientes pautas.
El reino demoníaco no puede escuchar lo que oras en tu mente. Estas cosas
necesitan ser habladas en la atmósfera espiritual. Obtenga más información
sobre la importancia de orar en voz alta en mi libro SPEAK OUT. (Ver el
apéndice.)

• Arrepentíos por vuestras generaciones.

Di: “Me arrepiento de los pecados de mis abuelos, mis padres y los
que me precedieron. Señor, te pido perdón por ellos. Cancelo
cualquier tarea que esto nos haya impuesto a mí y a mi generación”.
• Arrepiéntase de sus acciones e inacciones.

Habla: “Padre, por favor, perdóname por los patrones de

comportamiento, los hábitos y las adicciones que asumí. Perdóname
por lo que sabía y no sabía y por lo que no traté de detener y cambiar”.

• Romper acuerdo.

Proclama: “Rompo el acuerdo con los espíritus demoníacos de las

maldiciones generacionales. Cancelo cualquier efecto negativo que
tengan sobre mí. Ordeno que no colaboraré más con estos espíritus.
Decreto y declaro que he violado su derecho legal de tomar acción en
mi contra.”

Ejercicio Profético: Oración de Victoria y Agradecimiento por la

Sanación Emocional

Cuando esté libre de su dolencia emocional, practique hablar y declarar

su victoria. Declare la verdad que sabe y una escritura que se
correlacione con su situación.

Te agradezco, Señor, que estoy libre de temor y que Tu Palabra dice:

“Porque no nos ha dado Dios espíritu de cobardía, sino de poder, de
amor y de dominio propio” (2 Timoteo 1:7). .
 Ejercicio Profético: Sanación Física de las Maldiciones

¡Manifieste su curación física invocando y declarando la curación en

su cuerpo!

Rompo el acuerdo con la enfermedad y la dolencia en mi cuerpo y

declaro que por Su llaga soy sanado (Isa. 53:5).

Ordeno que toda maldición generacional de enfermedad [enumere la

enfermedad por nombre] que salga de mí en el nombre de Jesús.

Me arrepiento y renuncio a todo en lo que participé para mejorar o colaborar

con esta enfermedad [como aferrarme al estrés en lugar de liberarlo] en el
nombre de Jesús. Espíritu de estrés, te ordeno que dejes mi cuerpo en el
nombre de Jesús.

Declaro y decreto: “Soy redimido de la maldición”.

Cuerpo, te hablo y te ordeno que te alinees con la Palabra de Dios

en el nombre de Jesús.

La salud y la curación son mías por lo que Jesús hizo por mí.
 LAZOS DEL ALMA

Los lazos del alma son espíritus demoníacos que heredamos de las personas
con las que tenemos una relación, incluidos familiares, amigos, compañeros de
trabajo y líderes ministeriales. Los lazos del alma se infiltran en nuestras almas
cuando pasamos tiempo con personas impuras, emocionalmente enfermas o
que necesitan ser liberadas de los malos espíritus. Los lazos del alma pueden
afligirnos cuando codiciamos, idolatramos o comenzamos a tener sentimientos
lujuriosos hacia una persona. Un lazo del alma es un demonio heredado de una
relación con otra persona. Es un lugar donde otra persona puede necesitar
sanidad interior y liberación.

Puede identificar fácilmente un lazo del alma cuando surge un nuevo desafío o
problema. Pregúntese si su reacción está fuera de lugar para usted. ¿Te estás
comportando de una manera diferente a ti? El siguiente paso es ver si puedes
identificar ese comportamiento en un amigo, pariente o pariente. ¿Hay alguien
con quien te hayas juntado que puedas ver que manifiesta este comportamiento
o demonio? ¿Has notado que adquiriste el hábito o la característica? Esto
podría ser un lazo del alma, un lugar en tu alma que se abrió a la influencia
demoníaca. El lazo del alma ha penetrado en tu mente, voluntad y emociones y
se ha convertido en una fortaleza espiritual.

Los lazos del alma también provienen de las relaciones sexuales. Suponga
que está en una relación sexual, que Dios considera un pacto. Las
maldiciones generacionales de esa pareja sexual pueden transferirse a ti.
Por lo tanto, es importante mantenernos puros fuera del matrimonio, junto
con limpiarnos de todas las relaciones anteriores. Esta es también la razón
por la que es importante incluir cualquier relación sexual pasada o presente a
través del incesto cuando trazas tu árbol genealógico.

Permítanme compartir dos ejemplos pertinentes. Estaba entregando a

toda una familia de maldiciones generacionales. Retrocedimos a través
de cinco generaciones y diagramamos accidentes extraños, suicidio,
discapacidad intelectual y alcohol. Mientras trabajaba con la familia y
anotaba las dolencias físicas y emocionales, comenzamos a ver las
manifestaciones de las maldiciones en matrimonios y relaciones
sexuales solteras. No fue con una persona sino con varias personas en
la línea familiar. Las maldiciones generacionales se transfirieron a los
lazos del alma y comenzaron a manifestarse en miembros que no eran
de la familia.
Otro caso que recuerdo fue el de una pareja que eran novios en la secundaria
pero que se casaron más tarde. Uno de los padres de la persona tenía una
enfermedad rara e incurable.
Se casaron y, dentro de los seis meses posteriores a la muerte del
padre a causa de la enfermedad, el cónyuge contrajo la enfermedad y
murió. Esto muestra cómo un lazo del alma puede permitir que una
maldición salte de una línea familiar a otra.
Liberar a las personas de las ataduras del alma no es tan simple como
decir: “Todas las ataduras del alma desaparezcan en el nombre de Jesús”.
Los convenios sexuales deben romperse y las fortalezas demoníacas
deben ser desalojadas. Arrepiéntase y renuncie a la atracción emocional o
sexual y rompa el acuerdo con cualquier punto de apoyo al reino
demoníaco.

Las maldiciones generacionales y los lazos del alma pueden entrelazarse. Al

recibir la liberación de las maldiciones generacionales y las ataduras del
alma, debemos desecharlas tanto colectiva como separadamente. Hay
mucho más sobre este tema de lo que tengo espacio para compartir, pero
permítanme explicarlo brevemente, usando el rechazo como ejemplo.
Cuando tenemos un lazo del alma de rechazo y una maldición generacional
de rechazo, también se abre una puerta para nuestro propio rechazo y un
espíritu familiar de rechazo. Esto es lo mismo con cualquier fortaleza
espiritual. Por lo tanto, al desalojar el espíritu, debemos abordar la maldición
generacional y el lazo del alma colectivamente, diciendo: "Maldición
generacional y lazo del alma de rechazo, sal en el nombre de Jesús".

Sin embargo, también queremos abordarlos por separado porque en

algunos casos la fortaleza puede provenir de una persona diferente, ya sea
en el caso de un lazo del alma o una maldición generacional. Cuando los
mencionamos por separado, nos aseguramos de cubrir todas nuestras
bases. En este caso también tendríamos que echar fuera el rechazo,
porque cuando se convierte en una maldición generacional, es algo que
también asimilamos y dejamos arraigar. Además, nos gustaría expulsar un
espíritu familiar de rechazo que nos ataca repetidamente. Cuando
rompemos líneas generacionales de maldiciones, dolencias emocionales,
enfermedades y dolencias, ¡nos convertimos en rompedores de líneas de
sangre y creadores de bendiciones!

ES HORA DE LA ACTIVACIÓN
Rece esta oración en voz alta para romper todas las maldiciones que
se transmiten a través de su línea de sangre, así como cualquier lazo
del alma. Ceda al final de la oración y espere que el Espíritu Santo se
asocie con usted y le dé discernimiento de qué más necesita orar.
 ORACIÓN DE ARREPENTIMIENTO, RENUNCIA Y RUPTURA DEL
ACUERDO

Rompo el acuerdo con cada maldición generacional de mi linaje. Todas las

maldiciones de la tumba y las generaciones pasadas, ato, reprendo y cancelo su
efecto en mi salud, emociones y linaje. Hablo y decreto que soy redimido de la
maldición y que ninguna enfermedad o plaga se acercará a mi morada. Cada
activación generacional en el ámbito espiritual, tomo autoridad sobre ustedes
ahora y los llamo nulos e inválidos, totalmente cancelados de todo efecto por la
sangre del Cordero. ¡Hablo y decreto que todas las maldiciones conocidas y
desconocidas se rompan conmigo, y cualquier espíritu demoníaco asociado sea
expulsado y desalojado ahora en el nombre de Jesús!

ORACIÓN DE IMPARTACIÓN Y ACTIVACIÓN

Te agradezco, Padre, que soy un rompedor de líneas de sangre y un

hacedor de bendiciones. Tu Palabra dice maldito el que es colgado en
un madero. Te agradezco, Señor, que quitaste la maldición para que
pudiera ser libre. ¡Recibo mi libertad en plenitud! Señor, ayúdame a
convertirme en un hacedor de bendiciones en mi linaje. Espíritu Santo,
convénceme de guardar mis palabras para que no ponga maldiciones
sobre mis hijos. Doy un paso en la fe y la fuerza del Señor que las
cosas viejas han pasado y todas las cosas se han vuelto nuevas.
Recibo la nueva vida que tienes para mí, una vida de poder, abundancia
y alegría. En el nombre de Jesus. ¡amén!

PROCLAMACIONES PROFÉTICAS (DECLARACIONES DE

FE)
Proclamo que soy un rompedor de maldiciones y un hacedor de bendiciones. Mi
linaje es el
linaje de Jesús, libre de maldiciones, enfermedades y dolencias.

Hablo y decreto que mi fe es fuerte. Mi mente se enfoca en la verdad

de lo que dice la Palabra de Dios acerca de mí.

Me arrepiento de cualquier maldición que pueda haber puesto sobre mis hijos
con mis palabras y acciones.
Declaro que son liberados de mis maldiciones generacionales.

Proclamo que mis ojos están fijos en Jesús. No pongo ídolos falsos,
ladrones de tiempo y derrochadores del destino delante del Señor.

Creo y confío en la Palabra de Dios. Tomo lo que dice la Palabra y

creo que se establecerá permanentemente en mi vida.

ACTIVACIÓN ESPIRITUAL

Disciplina tu mente. La batalla está en la mente. Enseñe y practique una

técnica para capturar cada pensamiento mientras el diablo intenta penetrar su
mente.

Rompe maldiciones generacionales. Lea este capítulo, haga el árbol

generacional y salga libre de las maldiciones generacionales. Si necesita más
ayuda o desea obtener más información sobre cómo romper y eliminar las
maldiciones generacionales, inscríbase en mi curso electrónico sobre
maldiciones generacionales. (Ver el apéndice.)
Rompe los lazos del alma. Manténgase puro y asegúrese de no
idolatrar o acercarse particularmente a nadie fuera del matrimonio.
Busque el Espíritu Santo para el discernimiento, la sabiduría y la
dirección en las relaciones cuando una nueva persona llegue a su vida
por la que se sienta atraído o le guste especialmente. Da un paso atrás
y discierne y pregunta al Espíritu Santo acerca de esta persona. Haga
que el Espíritu lo guíe y lo guíe sobre cómo proceder y cómo establecer
límites seguros. Permita que el Espíritu Santo lo convenza si no debe
avanzar en una relación con la persona.

DECLARACIONES DE GUERRA ESPIRITUAL

Ato y anulo todas las maldiciones que operan desde la tumba de mi abuelo.
Cancelo y anulo en el reino de los espíritus cada voto, juramento,
dedicación y promesa hecha en mi nombre por las maldiciones de la
Francmasonería del lado de mi abuelo.

Quemo en la atmósfera espiritual cualquier lazo impío del alma que otra
persona pueda tener conmigo. Hablo y decreto que no hay pactos
espirituales o anímicos por sentimientos inmundos o idolatrados. En el
nombre de Jesús cancelo cualquier oscuridad espiritual y maldición puesta
contra mi vida.

Reprendo y tomo plena autoridad sobre mis pensamientos. No doy

espacio a mis pensamientos para que se desenfrenen con vanas
imaginaciones.
Me arrepiento de cualquier pecado y abro las puertas que he
activado. Elimino los derechos legales y los lugares donde tomé
maldiciones generacionales y les permití operar en mi vida.
El enemigo no me engañará. Ato y restrinjo al enemigo de plagar mis
pensamientos con mentiras. Confío en el Espíritu Santo para las
percepciones proféticas.
 Capítulo 9

CONQUISTA CADA PENSAMIENTO

EL DECIR QUE LA BATALLA ESTÁ EN LA MENTE NO PODRÍA SER MÁS

CIERTO. He peleado esas batallas, y no son divertidas. Uno de los puntos
de entrada a mi mente fue experimentar un trauma por problemas de salud
en mi familia inmediata. Como mencioné anteriormente, nuestro hijo, Dillon,
tuvo que ser reanimado dos veces al nacer. Nuestra hija Amber casi muere
debido a una alergia a un medicamento. Mi esposo, Ron, fue enviado a casa
desde un hospital cuando se leyeron mal las radiografías y su apéndice se
reventó de la noche a la mañana. El trauma incluyó que mi hijo fuera al
hospital por accidentes extraños durante los primeros doce años de su vida.
Hasta que descubrimos que una maldición estaba en el trabajo, nuestra hija
pasó el primer año de su vida entrando y saliendo del hospital, y me desperté
en una mesa de operaciones. Pude haber presentado numerosas demandas
por mala práctica por varias razones diferentes, pero demandar va en contra
de mis convicciones bíblicas. Sin embargo, varias circunstancias médicas
que encontramos me dejaron temiendo dolencias médicas. También estaba
rodeado de personas que pensaban lo peor cuando ocurrían afecciones
médicas.

En el proceso de mi liberación, tuve que hacer una lista de todos los

acontecimientos porque el enemigo atormentaba mi mente cuando pasaba
algo con mi salud. Incluso recuerdo ser un predicador lleno del Espíritu en el
camino a uno de mis eventos cuando siete diferentes síntomas de salud se
manifestaron en mi cuerpo dos horas antes de predicar. De repente,
mientras me preparaba, todas estas cosas comenzaron a suceder en mi
cuerpo para hacerme sentir mal y hacerme temer que algo andaba mal.
Sabía que era un ataque demoníaco que intentaba atormentarme antes de
ministrar. Seguí adelante a pesar del tormento, pero así es como describirlo:
tormento. El enemigo bloquea tu mente. Te sientes emocional y
espiritualmente paralizado, incapaz de luchar y contraatacar la agonía. Es un
espíritu que te ata la mente y te mantiene enfocado en lo mismo que temes.
Capturar cada pensamiento y reconocer la mentira es la clave de tu libertad.
Aunque el diablo todavía trata de atraerme hacia el miedo a las dolencias
médicas, ahora puedo reconocer que es un ataque demoníaco. Sí, de vez en
cuando puedo tener un síntoma real. Aún así, el diablo intensificaría la
manifestación en mi cuerpo al
atacándome con un espíritu seductor y cautivador para que me
concentre en él y proponga imaginaciones vanas y escenarios falsos.
Ahora puedo orar y superar las condiciones médicas de mi familia,
como cálculos renales, huesos rotos, alergias a medicamentos y
otras, sin la intervención de un médico.
Los espíritus seductores que te llevan a concentrarte en lo negativo y en aquello
de lo que estás tratando de liberarte no te dejarán en paz de forma permanente.
El diablo quiere mantenerte en cautiverio. Sin embargo, a medida que somos
empoderados y reconocemos sus ataques, podemos elevarnos por encima de
nuestra situación y orar efectivamente contra el reino de las tinieblas. Mi hija
Lauren solía luchar contra el rechazo. Permitiría que perforara sus emociones
durante unos días o semanas a la vez. La recuerdo entrando en nuestra sala de
estar, sentándose en mi silla de liberación y diciendo que ahora reconoció la
mentira. Le dio tanta libertad reconocer la mentira. Cuando te das cuenta de la
mentira, puedes descartarla.

LA BATALLA POR TU MENTE

El campo de batalla de la guerra espiritual está en la mente. El enemigo

penetrará tus pensamientos. Tu alma (mente, voluntad y emociones),
que es tu lado carnal, se levantará con vanas imaginaciones y
escenarios falsos. Reconocer sus mentiras lo pondrá en el camino para
descubrir cómo el enemigo apunta a las mentes de los creyentes para
mantenerlos en cautiverio. Cuando puede mantenernos en cautiverio,
sentimos que no somos dignos de recibir el llamado que Dios tiene para
nuestras vidas. No nos sentimos como si tuviéramos el conocimiento, la
libertad o el empoderamiento para orar con eficacia y luchar en el reino
de los espíritus.

Cuando somos atacados con pensamientos negativos, dolencias

emocionales y miedo, estamos en una batalla del bien contra el mal: el
bien en nosotros, el Espíritu Santo dentro de nosotros, contra los
espíritus malignos que intentan desplegarse contra nuestros destinos.
Hay una guerra constante, la veamos o la sintamos o no.
Cité este pasaje antes, pero vale la pena repetirlo porque las
Escrituras discuten la batalla de la mente muy claramente aquí:
Porque aunque andamos en la carne, no militamos según la carne.
Porque las armas de nuestra milicia no son carnales, sino poderosas en
Dios para la destrucción de fortalezas, derribando argumentos y toda
altivez que se levanta contra el conocimiento de Dios, y llevando
cautivo todo pensamiento a la obediencia a Cristo.

—2 CORINTIOS 10:3–5

La Biblia judía completa dice:

Porque aunque vivimos en el mundo, no hacemos la guerra de una manera

mundana; porque las armas que usamos para hacer la guerra no son
mundanas. Al contrario, tienen el poder de Dios para demoler fortalezas.
derribamos argumentos y toda soberbia que se levanta contra el
conocimiento de Dios; llevamos cautivo todo pensamiento y lo hacemos
obedecer al Mesías.

Me encanta cómo la traducción judía dice “tomar cautivo todo

pensamiento y hacerlo obedecer al Mesías”. Este es un ejercicio
excelente y práctico que puedes aplicar a diario. ¿El pensamiento que
penetra en mi mente obedece al Mesías? ¿Esta idea sigue al Mesías y se
alinea con la Palabra de Dios? Las aplicaciones de vida como estas
pueden ayudarlo a conquistar cada pensamiento.

Ejercicio profético: captura la mentira

¿Qué pensamientos has tenido que no se alinean con el Mesías? Escribe los
pensamientos ahora y repréndelos. Hable y declare: “Reprendo el
pensamiento, la mentira o la imaginación vana que penetra en mi mente con
respecto a [insertar
algo de tu lista]”. Decir el pensamiento, la mentira, la falsedad o la
distracción para ir en el nombre de Jesús. ¡Ahora mismo, rompe el
acuerdo con eso! Habla y declara que ya no vas a escuchar al enemigo.
Vamos; ponerse agresivo al respecto. ¡Rompe el acuerdo con esa cosa!

ESTRATEGIAS Y TÁCTICAS DE BATALLA

Mientras luchamos y el enemigo hace la guerra contra nosotros,

necesitamos estrategias y tácticas de batalla. La Palabra de Dios y
nuestras mentes pueden ser dos grandes herramientas para tener en
nuestros arsenales contra el mundo demoníaco. Cuando nos armamos
completamente con todo el armamento que podamos, los espíritus
malignos no podrán plagar nuestras mentes. El Señor me dijo una vez:
“Kathy, si tu mente está llena de Escrituras, no habrá lugar para el
enemigo”.
Debemos combatir los fuegos del infierno con el fuego del Espíritu Santo y la
Palabra de Dios. Capturar cada pensamiento requiere práctica. Me gustaría
decir que fui liberado rápidamente de espíritus y pensamientos que me
ataban la mente y que me atormentaban, pero no fue así. Tenemos que
considerar que tenemos años de patrones de comportamiento, hábitos y
pensamientos para deshacer y renovar. Cuando tenemos una forma
específica de pensar, no podemos cambiarla de la noche a la mañana.
Debemos “ser transformados por la renovación de vuestra mente” (Rom.
12:2). Este versículo habla de no conformarse a este mundo sino ser
transformados por la renovación de nuestra mente.

Hemos escuchado el dicho adaptado de las Escrituras: “Estamos en el

mundo, pero no somos del mundo”. Cuando se trata de pensar, no
podemos pensar como si estuviéramos en el mundo. Necesitamos pensar
como seres espirituales. No nos adaptemos a la forma de pensar del
mundo, sino seamos únicos en nuestro pensamiento. Ser únicos en nuestro
pensamiento proviene de saber lo que la Palabra dice acerca de nosotros y
nuestra identidad en Cristo.
Capturar cada pensamiento no es fácil cuando te sientes estancado o
derrotado. Las mentalidades improductivas pueden convertirse en una lucha
por conquistar. Pero lo bueno de esto es que no tienes que hacerlo solo.
Tienes un ayudante, el Espíritu Santo, para ayudarte en tus momentos de
debilidad. Él es vuestra fuerza y vuestra porción, como se afirma en los
Salmos. “Mi carne y mi corazón desfallecen, pero Dios es la fortaleza de mi
corazón y mi porción para siempre” (Sal. 73:26). Mantenga las
Escrituras ante sus ojos, y las promesas de la Biblia lo ayudarán a salir
y derrotar a los espíritus que atan la mente.

CASCO DE SALVACIÓN

Se nos ha dado un yelmo de liberación para ayudarnos con la batalla en

nuestras mentes. Cuando miramos la armadura de Dios, el yelmo de la
salvación es el yelmo de la liberación. La palabra salvación significa
liberación. Por lo tanto, podemos interpretar el versículo: “Tomad el yelmo de
[la liberación] y la espada del Espíritu, que es la palabra de Dios” (Efesios
6:17). Una vez más, me referiré a la Biblia judía completa para la traducción
correcta de esta escritura: “Y tomad el yelmo de la liberación; junto con la
espada dada por el Espíritu, es decir, la Palabra de Dios.” Aprecio que la
Biblia judía completa incluya la palabra salvación como “liberación”. Cuando
veamos las Escrituras de manera diferente y nos sumerjamos en todas las
capas proféticas, se volverá más aplicable.

Hace años escribí un artículo para la revista Charisma, el cual estoy extrayendo
aquí.

La Palabra del Señor dice que “pónganse el yelmo de la

salvación”. La salvación, cuando se estudia, significa liberación.
¿Por qué Su Palabra nos dice que nos vistamos de liberación, y sobre todo,
sobre nuestra cabeza, sobre nuestra mente? Nuestro Padre sabía que
nuestras luchas estarían en nuestra mente. Las mentiras, los engaños y los
ataques demoníacos están arraigados en un espíritu seductor y cautivador.
Enfoca tus pensamientos en la dirección equivocada; de hecho, un patrón de
pensamiento poco saludable e improductivo. Nuestro Padre nos creó y nos
conoce intrincadamente. También está familiarizado con el diablo y sus
esquemas y tácticas.

Verás, tenemos una acción. Tenemos algo que hacer. Tenemos que
ponernos nuestro casco de liberación. Él ya nos ha dado el yelmo de la
liberación, pero tenemos que ponérnoslo para guardar nuestras mentes y
pensamientos para que estén enfocados en Cristo Jesús. Necesitamos
ponernos el yelmo de la liberación para tener la mente de Cristo y Su forma
de pensar ya que tenemos el Espíritu de Dios dentro de nosotros.
Necesitamos hacer una pausa y pensar como pensaría Cristo, no como
nuestra carne quisiera levantarse y hacernos pensar, o como el
enemigo nos atraparía para que pensemos. Necesitamos caminar a lo
largo de la vida y saber que el casco fuerte está sobre nuestra mente,
cubierto y asegurado.

El enemigo solo puede penetrar nuestros pensamientos hasta donde

se lo permitamos. Tenemos que volvernos fuertes como esa
armadura. Imagine los dardos de fuego atacando nuestro escudo de
fe y nuestra coraza de justicia. El primer lugar donde entran esos
dardos es nuestra mente.¹

Nunca olvidaré un mensaje que recibí poco después de publicar este artículo.
Una anciana me contactó y me dijo que había sido atacada de miedo por las
noches mientras dormía. Fue atormentador. Al leer este artículo y mirarlo en su
contexto correcto de ser el yelmo de la liberación, ella fue libre. Se inscribió en
todas mis clases de discipulado para aprender más y todavía sigue mi
ministerio. Ella recibió una gran libertad en su mente al tener esta revelación y
transición mental.

La Biblia nos dice que “tenemos la mente de Cristo” (1 Cor. 2:16).

Necesitamos cambiar nuestro pensamiento para que tengamos la
mente de Cristo, que es la forma de vencer al enemigo y los espíritus
seductores que usa para atacarnos. Necesitamos hacer la transición a
la manera de pensar de Cristo.

Ejercicio Profético: Parte 1, Asignación Visual

Desarrolla una aplicación práctica, un ejercicio visual que puedas

utilizar para cuidar tu mente. Aquí hay unos ejemplos:
• Imagina el mazo de un juez aplastando cualquier pensamiento que
se supone que no debes permitir.
• Imagine una pizarra en su mente y borre todos los pensamientos que
no se alineen con la verdad de Dios.

• Imagina el yelmo de la salvación y la liberación en tu mente y bloqueando

cualquier flecha del enemigo que intente invadir tus pensamientos.

Piensa en un ejemplo que funcione para ti.

Ejercicio Profético: Parte 2, Ejercicios Visuales

Aquí hay algunos ejercicios visuales que puede imaginar en su mente

para ayudarlo a cerrar sus pensamientos, concentrarse y dejar de
analizar.

• Imagínese el yelmo de la salvación sobre su cabeza y concéntrese en

cómo se sentiría el fuerte yelmo de metal contra su frente. A medida
que se enfoca en la presión del casco visual y mentalmente, su mente
no podrá procesar lo que estaba pensando y le da la oportunidad de
dejar de pensar demasiado. La palabra salvación significa liberación.
Por lo tanto, piensa en el casco como una liberación para tu mente.

• Tómese un momento e imagine sus pensamientos en una pizarra, luego

visualice su brazo moviéndose y su mano borrando y limpiando la pizarra. Ahora
tiene una pizarra limpia para que el Espíritu Santo entre con el espíritu de
revelación. Visual
Los ejercicios pueden distraer su mente de donde estaba previamente
enfocada.

• El mazo de un juez es una herramienta poderosa cuando se golpea contra una

base de madera, lo que hace que el veredicto sea definitivo. Un juez tiene la
última palabra, y usted también tiene la última palabra contra los pensamientos
furiosos. Imagine el mazo de un juez en su mente, derribando esos
pensamientos y desechándolos. Me imagino el mazo cayendo y los
pensamientos moviéndose hacia un lado y fuera de mi trayectoria. Tienes la
autoridad para emitir el veredicto final en tu mente. Descartar el caso de ser
demasiado analítico.

RECONOCE LA VOZ DEL ENEMIGO

Los pensamientos corren desenfrenados por nuestras mentes, pero ¿cuál o

quién es la fuente? Saber a quién estamos escuchando es fundamental para
capturar pensamientos que obstaculizarían nuestro destino. Reconocer lo
que viene a nuestra mente, cómo pensamos y cómo Dios nos habla nos
ayudará a desalojar cualquier cosa contraproducente. Escribí un libro sobre
este tema titulado ¿Quién habla? (Ver el apéndice). Es imperativo identificar
clara y rápidamente si estamos escuchando a Dios, al enemigo, oa nuestros
propios pensamientos y vanas imaginaciones. En la sección de aplicación
práctica al final de este capítulo, le daré ejercicios para ayudarlo a determinar
la fuente de sus pensamientos.

Recuerde, el enemigo es el “padre de la mentira” (Juan 8:44).

Reconocer sus mentiras es uno de los primeros pasos para exponerlo.
¿Alguna vez te has detenido a considerar cómo te habla? ¿Que dijo?
¿Qué tácticas usa para atraerte a una batalla mental?
El enemigo también puede falsificar cosas que el Padre hace en tu vida. Él
falsificará experiencias espirituales y manifestaciones físicas y te hará creer que
escuchas la voz de Dios, cuando es el enemigo quien habla mentiras. Hay
falsos maestros y falsos profetas en el mundo, y ya sea que el enemigo hable a
través de ellos o directamente a usted, la Biblia advierte: “¡Y con razón! Porque
aun Satanás se disfraza como ángel de luz” (2 Cor. 11:14). Sé consciente de
que él es
astuto y astuto. Reconocer la diferencia entre cómo te habla el Padre,
cómo te escuchas pensar y cómo el enemigo ataca tu mente es crucial
para caminar en victoria sobre las dolencias mentales.

ROMPER MALDICIONES GENERACIONALES MENTALES

La depresión, las dolencias mentales, el estrés, la ansiedad y la preocupación se

pueden heredar a través de líneas generacionales. A medida que nos criamos y
vemos que estas emociones y dolencias se manifiestan en nuestros seres
queridos, pueden venir sobre nosotros. La Biblia habla de cómo funcionan las
maldiciones generacionales y viajan a través de las líneas de sangre. (Véase
Números 14:18.)

La libertad puede manifestarse completamente. Ya no estamos bajo la

maldición. Se nos ha dado una nueva línea de sangre. Pero debemos
destruir los pensamientos negativos en nuestras mentes yendo a la fuente
raíz y al punto de entrada de esas maldiciones.

Cuando estaba recibiendo mi libertad, renovaba mi mente diciéndome: “Soy

adoptado. No soy un producto de mis padres. Soy un ciudadano del reino.
Tengo un Padre celestial que no tiene maldición en Él. Por lo tanto, no estoy
bajo maldición.” Me basé en pasajes de las Escrituras como los siguientes
para ayudarme a renovar mi mente:

Porque no habéis recibido el espíritu de esclavitud otra vez para

temer. Pero habéis recibido el Espíritu de adopción, por el cual
clamamos: ¡Abba, Padre!

—ROMANOS 8:15
Porque no recibisteis espíritu de servidumbre para volveros a temer; al
contrario, recibisteis el Espíritu que nos hace hijos y por cuyo poder
clamamos: ¡Abba! (es decir, “¡Querido Padre!”).

—ROMANOS 8:15, CJB

En la versión New King James, Romanos 8:15 dice que “hemos recibido el
Espíritu de adopción”. Utilicé este verso cuando trataba de liberarme de los
rasgos similares que tenía con mi madre. Cuando mi mente iba en una dirección
improductiva, hablaba y decretaba: “He recibido el Espíritu de adopción”.

Entonces fui un paso más allá. Pensé en versículos como Romanos 11:19 y
Juan 15:5, donde la Biblia habla de nosotros como sarmientos injertados en
la vid. Dado que mi piel es muy transparente y puedo ver mis venas, vería
mis venas ramificándose de otras venas como las ramas de un árbol. Pensé
en todos los lugares que conectaban con otras venas, y visualicé estar
conectado e injertado con mi Padre celestial y Jesús. Cada vez que me
enfocaba en una maldición generacional, miedo o espíritus que atan la mente
debido a la maldición, hablaba y declaraba: “He recibido el Espíritu de
adopción. No soy quien mis padres me hicieron ser. Tengo la sangre de mi
Padre celestial corriendo por mis venas, y soy un hijo de Dios. Tengo una
nueva línea de sangre”.

Ejercicio profético: profetiza sobre ti mismo

Profeticé Romanos 8:15 sobre mí mismo. Profetizar sobre ti mismo es

similar a declarar sobre ti mismo. ¿Qué verdad necesitas profetizar
para llevar tus pensamientos al lugar que el Señor quiere que estén?

CONVICCIÓN DEL ESPÍRITU SANTO VS. CONDENA DEMONÍACA

¿Cómo sabe si está escuchando la convicción del Espíritu Santo o la

condenación demoníaca? Mientras aprendes a conquistar cada pensamiento,
necesitas conocer la fuente de tus pensamientos. Tomando cautivos tu carne,
pensamientos, sentimientos y cualquier
la confusión en su mente es esencial.

Espíritu Santo convicción

Cuando el Espíritu Santo nos corrige o nos convence, lo hace rápidamente. Me

gusta describirlo como el enfoque de "entrar, salir". Él corregirá, disciplinará y
nos mostrará lo que hicimos mal, y entonces nos amará. Él nos mostrará el
error, lo pondrá en nuestro corazón para que nos arrepintamos y pidamos
perdón, y luego esperará que sigamos adelante. Él nos convencerá hasta que
hagamos algo al respecto, y siempre nos guiará de regreso a Dios,
impulsándonos a enderezar nuestra relación con Él nuevamente. Puede que nos
sintamos un poco apenados o decepcionados, pero nos llevará a la acción y la
verdad. Una vez que termine, podríamos pensar en ello durante unos minutos y
luego seguir adelante. Está hecho, está manejado y nos sentimos liberados.

Cuando el Espíritu Santo te da convicción o una palabra de conocimiento,

no te dejará hasta que actúes en consecuencia. La misma palabra te
seguirá llegando. Es como un programa de computadora BÁSICO que
solíamos escribir hace años. El programa nos dice qué hacer línea por
línea, pero siempre tenemos una línea de "ir a" en el programa. Por lo
tanto, no importa lo que hagamos, o en este caso, lo que tratemos de
evitar, Él siempre nos traerá de vuelta a la instrucción original.

Podemos tratar de ignorarlo, pero el Espíritu Santo nos lo traerá hasta

que la convicción se vuelva tan incómoda que debemos actuar en
consecuencia. Tan pronto como actuamos en consecuencia, nos
sentimos liberados por el Espíritu del Señor y sabemos que hemos sido
obedientes a lo que Él nos ha llamado a hacer.

Condena demoníaca
La condena del enemigo es diferente. Él quiere que nos sentemos y pensemos y
nos pudramos y apestemos. Nos hará sentir indignos y derrotados. Su objetivo es
que se manifiesten las emociones de culpa, arrepentimiento, reproche y
vergüenza, haciendo que nos concentremos en el
emociones negativas de nuestros errores. Él quiere que estas emociones
planten semillas dentro de nosotros diciéndonos que no somos buenos, que
volveremos a equivocarnos y que la gente no nos perdonará por nuestros
errores. El enemigo intentará torcer y cambiar nuestros pensamientos. Nos
repetirá viejas mentiras y nos hará sentir como si estuviéramos en un pozo
sin salida. Él quiere que nos revuelquemos en nuestra autocompasión.

Recuerdo hace años cuando me enojaba con alguien, me quedaba

enojado por tres días y no quería soltarlo. Creo que el enemigo es similar
a eso en nuestras vidas. Él quiere que sigamos enojados, que
permanezcamos en la autocondena y que no la dejemos. Creo que esta
es una diferencia clave entre la convicción y la condena: la convicción es
rápida, pero la condena se retrasa. Recuerda, el ladrón viene a robar,
matar y destruir (Juan 10:10), y las mismas cosas que quiere robar, matar
y destruir son tu tiempo, tus emociones y tu libertad.

DESCUBRE LA DIFERENCIA

La próxima vez que no pueda volar algo, pruebe la fuente.

Pregúntese: "¿Es esta convicción del Espíritu Santo la que me llevará
a la acción y será breve y breve, o el diablo está enviando
condenación para hacerme pesado y mantenerme en un lugar de
preocupación y derrota?"
Métase en la Palabra de Dios y ate su mente a la mente de Cristo.
(Véase 1 Corintios 2:16.) No tenga pensamientos innecesarios. No
alquiles espacio en tu mente a Satanás permitiéndole ocupar tus
pensamientos.

Ejercicio Profético: Conquista Tus Pensamientos

Pase tiempo en oración y reflexione: “¿Hubo momentos en que fui
condenado o condenado? ¿Cómo puedo aprender a escuchar la voz del
Señor más rápido?” El siguiente
vez que reciba una dirección, corrección o instrucción, pregúntese: "¿De
dónde vino esto?" y “¿Cómo me hace sentir esto?” Cuando llevamos las
cosas a Dios en oración en lugar de encontrar la solución a la ligera,
conoceremos la verdadera fuente y cómo proceder con lo que se nos
presenta.

La Biblia dice: “Así que, mis amados hermanos, toda persona sea pronta
para escuchar, pero tardía para hablar, tardía para enojarse” (Santiago
1:19, cjb). Seamos rápidos para discernir, lentos para reaccionar y
cautelosos antes de asimilar el pensamiento.

ES HORA DE LA ACTIVACIÓN

Es hora de orar y decretar su libertad de los espíritus que atan la

mente y las mentiras del enemigo.

ORACIÓN DE ARREPENTIMIENTO, RENUNCIA Y

RUPTURA DEL ACUERDO

Rompo el acuerdo con cada pensamiento improductivo e infructuoso.

Descarto los pensamientos que no se alinean con la Palabra de Dios.
Todo espíritu mentiroso, aprisionador y engañoso, te ordeno que salgas
de mi mente y no entres más en mí, en el nombre de Jesús. Me
arrepiento de la autocompasión, de la esclavitud emocional y de sentirme
derrotado en mis pensamientos. Reprendo y destruyo toda fortaleza
demoníaca en mi mente. Renuncio y rompo el acuerdo con el miedo, el
estrés, la preocupación, la ansiedad, el rechazo, el trauma, el tormento y
la indignidad. Ordeno que toda infiltración malvada en mis pensamientos
y espíritus atrayentes, seductores y cautivadores se vayan ahora. Sal de
mi mente en el nombre de Jesús.
ORACIÓN DE IMPARTACIÓN Y ACTIVACIÓN
Te agradezco, Señor, que tengo la mente de Cristo. Recibo la Palabra de Dios
en mi vida y la llamo a su plena activación. Te agradezco que soy creado a la
imagen de mi Padre Dios, y por lo tanto estoy facultado para conquistar cada
pensamiento que me distrae. Recibo la plenitud de lo que Tú quieres hacer en
mi vida. Ayúdame a elevarme en autoridad y llevar cautivo todo pensamiento.
¡En el nombre de Jesús, amén!

PROCLAMACIONES PROFÉTICAS (DECLARACIONES DE

FE)

¡Redirecciono cualquier pensamiento negativo e improductivo!

¡Soy disciplinado en mi forma de pensar!

Tomo dominio sobre mi mente. ¡Los pensamientos piadosos ocupan

completamente mi mente!

Proclamo que tomaré cautivo todo pensamiento y desecharé

instantáneamente de mi mente todo pensamiento que no se alinee
con las Escrituras.

Declaro y decreto que tengo el yelmo de salvación y liberación para

ayudarme a capturar cada pensamiento. No estoy solo; Jesús está
conmigo para liberar la libertad en mi vida.
Hablo y decreto que no se me ha dado espíritu de temor ni de
intimidación, sino de poder, de amor y de una mente sana, de dominio
propio y de dominio propio (2 Timoteo 1:7).
 ACTIVACIÓN ESPIRITUAL

Captura tus pensamientos. Cuando un pensamiento te haga sentir

pesado, preocupado o fatigado, deséchalo en lugar de entretenerlo.
Inmediatamente tome cautivo el pensamiento y no permita que se
afiance en su mente.

A través del tiempo con el Espíritu Santo, identifica y discierne tus

pensamientos negativos. Categorice qué pensamientos son carnales y
qué pensamientos son de espíritus demoníacos mentirosos. Reconoce
y discierne las voces del enemigo, Dios y tu carne para saber la
diferencia.

¿Sufres de miedo, ansiedad o depresión? ¿Puedes identificar la raíz y

el punto de entrada? Dedique tiempo y busque al Espíritu Santo para
recibir revelación sobre cómo renovar su mente. Espere que Él le dé
una estrategia que sea única para usted y haga clic en la forma en que
su mente procesa la información y maneja las situaciones estresantes.

DECLARACIONES DE GUERRA ESPIRITUAL

En el nombre de Jesús, derribo todo principado y fortaleza que

venga contra mi mente, y hablo y declaro que no te infiltrarás más
en mi mente.

Rompo el acuerdo y echo fuera todas las maldiciones generacionales

de dolencias emocionales y fortalezas demoníacas. se me ha dado
autoridad sobre todas las cosas; por lo tanto, estos obstáculos deben
irse en el nombre de Jesús.
Por el fuego de Dios incinero y quemo por completo toda
asignación demoníaca que se ha establecido contra mi mente.

Me niego a permitir que la negatividad y los espíritus que atan la mente

operen en mi vida. Cada espíritu enviado para atormentarme, quédate
quieto ahora en el nombre de Jesús.

Yo derrumbo cada pensamiento negativo, cada espíritu de preocupación y

miedo, y cada espíritu destructivo, ¡y les digo que evacuen ahora en el
nombre de Jesús!
 Capítulo 10

REPRENDIR Y EXPONER ASIGNACIONES DEMONÍACAS

NO CRECÍ queriendo ser un ministro de liberación. No sabía nada acerca de

los demonios o cómo operan. Mi esposo era pastor de una iglesia cuando
empezamos a tener las experiencias paranormales que describí
anteriormente en este libro. Fuimos lanzados a lo que yo llamo “campo de
entrenamiento de liberación”. Nos encontramos con los espíritus de Jezabel
mucho antes de que supiéramos qué eran. La gente literalmente nos maldijo
en hogueras y sesiones de espiritismo y destrozó nuestra reputación en la
comunidad. Estábamos en una guerra total antes de saber cómo combatir
las fuerzas espirituales. Estas experiencias nos hicieron más fuertes y listos
para el llamado al ministerio de liberación que Dios había puesto en mi vida.

En este capítulo expondré algunos de los espíritus de hombres fuertes

más volátiles que he encontrado en el ministerio. Esta no es una lista
exhaustiva, sino un punto de partida práctico para comprender los
espíritus de los hombres fuertes. Cuando Jesús estaba hablando del
hombre fuerte, dijo que lo atáramos. “¿Cómo puede alguien entrar en la
casa de un hombre fuerte y saquear sus bienes si primero no lo ata? y
entonces saqueará su casa” (Mateo 12:29). La gente malinterpreta este
versículo y siempre quiere ir tras el hombre fuerte primero.

La Biblia judía completa lo dice así: “¿Cómo puede alguien entrar en la

casa de un hombre fuerte y llevarse sus posesiones a menos que primero
ate al hombre fuerte? Después de eso, puede saquear su casa. Saquear,
según Webster, es “buscar y robar de una manera enérgica y dañina”.¹
Visualice a alguien saqueando una casa. Recorre esa casa como un loco,
en busca de objetos de valor. Pero los objetos de mayor importancia no
siempre son los primeros que se descubren. A menudo, los elementos
más valiosos están ocultos o tardan más en encontrar.

Lo mismo ocurre con el hombre fuerte, que es de mayor valor debido a

que mantiene a las personas estrechamente sujetas a la esclavitud. Está
oculto y lleva más tiempo descubrirlo y exponerlo. Podemos impedir que
el hombre fuerte se active mientras saqueamos, pero no podemos
desalojarlo de las instalaciones hasta que sepamos su
características y derechos legales. El conocimiento de cómo opera el
hombre fuerte nos ayudará a saquear sus bienes.

JEZABEL

Jezabel es el nombre de un hombre fuerte con espíritu de control. Lleva el

nombre de la reina Jezabel, cuya historia se registra en 1 y 2 Reyes. Jezabel
era malvada, vengativa, seductora y manipuladora. Promovió la adoración de
dioses falsos, siendo adoradora de Baal, y mató a los profetas de Dios. Era
orgullosa y usaba su belleza para manipular y seducir a las personas para
que hicieran lo que ella quería. Jezabel era una mujer, y aunque el espíritu de
Jezabel funciona principalmente a través de mujeres, también puede operar a
través de hombres.

Los espíritus de control a menudo comienzan con una maldición

generacional. “Jehová pasó delante de él y proclamó: 'Jehová, Jehová Dios,
misericordioso y clemente, tardo para la ira y grande en bondad y verdad,
que guarda misericordia a millares, que perdona la iniquidad, la transgresión
y el pecado, pero que por de ninguna manera absuelven al culpable, que
castiga la iniquidad de los padres sobre los hijos y sobre los hijos de los
hijos, hasta la tercera y cuarta generación'” (Éxodo 34:6–7). Si quieres saber
qué tan controladora es una persona, echa un vistazo a su madre y, a veces,
a su padre. A menudo, los espíritus de Jezabel surgen de tener un padre
controlador. El control se manifiesta de diferentes maneras. Una vez
descubrí que uno de mis amigos estaba controlando, pero de manera
subconsciente y sutil; no lo identificaría como control a menos que conociera
las operaciones de Jezabel.

Jezabel seduce de forma manipuladora. Cuando hablo de seducción, no es

necesariamente de forma sexual. Jezabel te atrae y te atrae hacia sus
planes. Le gusta aparecer como tu nueva mejor amiga, la nueva persona
súper espiritual y súper útil en un ministerio, y siempre intenta acercarse lo
más posible al líder. Ella estará allí cuando necesites a alguien, te dará todo
su tiempo y prodigará su dinero contigo en un intento de infiltrarse en tu
corazón. Sus palabras son seductoras y manipuladoras; ella está de acuerdo
contigo para generar confianza.
Más tarde, ella te domina para revelar sus verdaderos motivos. Ella está llena
de ofensa, rechazo y orgullo, y te traicionará cada vez que la actives.
plan. Viene disfrazada, bellamente empaquetada, pero es una serpiente
víbora dispuesta a matar. Una víbora guarda sus colmillos dentro de su
boca y los saca en el último momento para inyectar su veneno mortal. Del
mismo modo, Jezabel es astuta y permanece disfrazada hasta que quiere
dominarte. Y cuando lo hace, sus tácticas son mortales. Divide ministerios,
arruina relaciones y cierra negocios. Deja destrucción y ruina a su paso.

Jezabel es rebelde, y la Biblia dice que “como pecado de adivinación es la

rebelión” (1 Samuel 15:23). Jezabel está alimentada por la manipulación, el
orgullo y la rebelión. Cuando una persona manipula, él o ella dice o hace
algo para causar un resultado a favor de esa persona. La manipulación es
rebelión contra la autoridad y ser astuto y astuto para salirse con la suya. Es
una forma de brujería. El control, la rebelión, el orgullo y la manipulación son
todos pecados. Conducen a la brujería y, en última instancia, a un espíritu de
hombre fuerte de Jezabel que opera a través de una persona. No es
suficiente orar contra el espíritu de Jezabel. Una persona debe desear la
liberación del control, el egoísmo y el orgullo.

BRUJERÍA Y JEZABEL

Jezabel es una maestra manipuladora y opera conjuntamente con un

espíritu de brujería. Jezabel viene a silenciar la voz de lo profético.
¿Cómo puede Jezabel silenciarte? Orar y hablar en tu contra, la unción
en tu vida y las palabras que tienes que pronunciar liberan maldiciones
en la atmósfera espiritual. Hay poder en las palabras que decimos, ya
sea que las hablen los cristianos o las fuerzas del mal de la brujería que
operan contra los cristianos a través de falsos profetas, satanistas,
brujos y brujos.

¿Alguna vez ha estado listo para predicar o testificar a una persona, y

de repente se encuentra esforzándose por pronunciar las palabras o
siente que está perdiendo la voz? Estos son ataques del espíritu de
Jezabel y actividades de brujería contra el cuerpo de Cristo. Pueden ser
enviados a propósito por una persona o por un principado que opere
sobre un territorio.
Los aquelarres de ocultismo y brujería sirven al enemigo y se les enseña a
enviar asignaciones para obstaculizar su ministerio, predicación, vida de
oración y enseñanza. Rezan a propósito contra los cristianos. Se sientan en
tus reuniones y pretenden
recibe la Palabra, pero ellos están ahí para orar contra ti y tratar de impedir
que la voz de Dios hable a través de ti. Experimenté que mi voz estaba bien,
pero de repente, mientras iba a predicar, mis cuerdas vocales se sintieron
tensas. Una vez, estaba en otro país cuando esto sucedió, y sabían que la
bruja local estaría en la reunión. Ella apareció y la grabaron en video
mientras practicaba brujería activamente. Me levanté y tomé autoridad
sobre la brujería, até y restringí la actividad, mandé a mis cuerdas vocales a
funcionar correctamente y continué con la reunión.

Las personas que operan en actividades ocultas y de brujería buscan sus

posesiones para usarlas como punto de contacto. Tener su propiedad les
da un gran poder en el mundo de los espíritus porque pueden tocarlo
físicamente mientras rezan maldiciones sobre él. Si sientes que alguien
podría maldecirte a través de un objeto o posesión tuya, ora contra ello,
cubre tu posesión con la sangre de Jesús y rompe el punto de contacto en
el ámbito espiritual.

Ore por la ofensa en lugar de por la defensa contra las operaciones de brujería.
Pídele al Espíritu Santo que te revele lo que se está hablando en tu contra.
Búscalo en busca de estrategias divinas para romper las maldiciones y eliminar
su efecto en el reino de los espíritus. Si siente incomodidad en su espíritu acerca
de una situación (a menudo llamada “tener control en su espíritu”), lo más
probable es que se trate de discernimiento, y debe tomar medidas. Las
oraciones audibles, las declaraciones y los decretos son más efectivos para
romper las maldiciones. Debes demoler el reino espiritual con el poder de tus
palabras. Discuto este tema en profundidad en el capítulo “La guerra espiritual
es audible”.

ESPIRITU CENTINELA

La Biblia nos advierte de los espíritus falsos, y el espíritu centinela es un

espíritu falsificado de alto rango. Cuando miramos en términos militares
definidos en el Diccionario Americano del Idioma Inglés, un centinela es “un
soldado enviado para vigilar o proteger un ejército.”² El espíritu centinela es
un espíritu falso que entra en el alma de una persona y monta guardia. La
New King James Version llama a esto un "espíritu diferente".
Porque si el que viene predica a otro Jesús que nosotros no hemos
predicado, o si recibís un espíritu diferente que no habéis recibido, o un
evangelio diferente que no habéis recibido, ¡bien podéis tolerarlo!

—2 CORINTIOS 11:4, NVI

El centinela es un espíritu falso que imita al Espíritu Santo. El Espíritu

Santo nos da un lenguaje de oración en el cual hablar y orar. Sin
embargo, el espíritu centinela intenta imitar todo lo que Dios hace. En el
Antiguo Testamento vemos ejemplos de cómo los magos replicaban los
actos de Dios. En Éxodo 7, el Señor convirtió la vara de Aarón en una
serpiente y convirtió el agua en sangre. Pero los magos de Faraón
hicieron los mismos actos.
¿Alguna vez has estado cerca de alguien cuyo idioma de oración, la lengua
en la que habló la persona, parecía extraño? Tal vez tenías un control, una
incomodidad, en tu espíritu de que algo no estaba bien. El enemigo también
tiene un idioma y puede hacer que el habla de una persona suene como
lenguas. El espíritu centinela manifiesta un falso espíritu de lenguas a través
de una persona.

Los cristianos que tienen este espíritu centinela pueden tener una lengua
falsa. Los demonios que se infiltran en sus almas pueden surgir y hablar una
lengua, así como un demonio puede apoderarse de la voz de una persona y
escuchar a un demonio hablar por la boca de la persona. Por lo general, los
cristianos no saben que un espíritu falso los ocupa. Los líderes del ministerio
a veces pueden identificar algo extraño en la persona; sin embargo, la
persona está etiquetada como de alto mantenimiento porque el espíritu
centinela no está expuesto ni identificado. La persona se encoge de hombros
como una víctima o como alguien que no sabe cómo ayudarse a sí mismo.

Los líderes del ministerio están bajo tanta demanda y limitaciones de

tiempo que no se toman el tiempo para orar y buscar el Espíritu Santo. En
cambio, la persona es aún más rechazada cuando el líder no tiene tiempo
para amar e invertir genuinamente en la persona y ayudarla con la
situación. A menudo tengo personas que me cuentan cómo han estado en
tantos otros ministerios e iglesias de liberación y cómo a menudo son
rechazados. Nadie fue lo suficientemente profundo como para liberar el
espíritu falsificado dentro de ellos.
Los espíritus centinelas pueden entrar a través de falsas enseñanzas y falsas
profecías. Se manifiestan de manera más prominente en ciertas etnias y
provienen de la ascendencia.
Los espíritus ancestrales, nacionalidades que han creado ídolos
falsos y tienen espíritus malignos que viajan por la línea generacional,
pueden hacer que un espíritu centinela invada a una persona. Las
personas que han participado en vudú, rituales, satanismo y otras
formas de brujería son los principales objetivos del espíritu centinela.
Es un demonio de alto rango y difícil de expulsar.

Al buscar la liberación o tratar de desalojar al demonio centinela, la

oración y el ayuno serán necesarios. También es esencial descubrir la
causa raíz de la entidad demoníaca y los derechos legales para cerrar
todos los puntos de entrada. Es posible que este demonio no siempre
salga la primera vez, y es posible que sea necesario intentar múltiples
encuentros con él para desalojarlo. Cuando ocurre la liberación, si la
persona ora en un idioma desconocido, puede y notará que su idioma
de oración cambia a uno inspirado por el Espíritu Santo.

LEVIATÁN

El hombre fuerte del orgullo se llama Leviatán. Leviatán se menciona en la

Biblia como una enorme criatura marina. (Véase Isaías 27:1.) Cuando
miramos el espíritu de orgullo, es enorme y tiene muchas facetas. Lucifer
cayó por orgullo.

¡Cómo caíste del cielo, oh Lucero, hijo de la mañana! ¡Cómo eres cortado por
tierra, tú que debilitas a las naciones! Porque has dicho en tu corazón: Subiré al
cielo, exaltaré mi trono sobre las estrellas de Dios; Me sentaré también en el
monte de la reunión, en las profundidades del norte; Subiré sobre las alturas de
las nubes, seré como el Altísimo”.

—ISAÍAS 14:12–14

Lucifer permitió que el orgullo sacara lo mejor de él. Se sentía

superior y que sabía más. Encontramos muchas personas dentro y
fuera de la iglesia hoy que piensan de la misma manera. Saber cómo
opera el orgullo nos ayudará a identificar y exponer este espíritu.
 IDENTIFICAR Y DIFERENCIAR EL ORGULLO

orgullo natural

Este es el orgullo que podemos ver y saber que tenemos. Estamos

orgullosos de nuestros logros. Nos gustan nuestros hogares y nos
sentimos exitosos en nuestras carreras. Está satisfecho con su aspecto y
con la forma en que crió a sus hijos.

orgullo espiritual

Este orgullo es cegador y vinculante. Las personas con orgullo no se

dan cuenta de que tienen orgullo. Cuando estás atado por un espíritu de
orgullo, no te quiere libre, por lo que una de sus tácticas es paralizarte
espiritualmente para evitar que descubras que tienes un problema.
Exponer el orgullo traerá libertad a tu vida. El principal logro del orgullo es
dar vueltas y vueltas a la comunicación. ¿Alguna vez has estado en una
conversación que podría describirse como "él dijo, ella dijo"? En otras
palabras, tuviste una conversación pero la persona con la que conversaste
más tarde no está de acuerdo contigo o tergiversa lo que dijiste. Sientes
que la persona ha puesto palabras en tu boca o ha torcido tu significado.
Esto es orgullo en su máxima expresión. Los demonios del orgullo hacen
que el oyente reciba un mensaje diferente e incitan a una batalla entre lo
que se dijo y lo que se escuchó, entre lo que se percibió y lo que fue un
hecho. Esta ruptura de la comunicación causa discordia, ofensa y rechazo.

El orgullo trabaja de cerca con el control, la ofensa y el rechazo. Cuando el

orgullo colabora con otras entidades demoníacas, construye un hombre fuerte, y
el hombre fuerte del orgullo es Leviatán. El orgullo es difícil de entregar porque
es cegador. Las personas no pueden verlo en sí mismas y, a menudo, dicen que
no son orgullosas. Recuerdo que me dijeron que yo
estaba orgulloso Seguía diciendo: "No, no lo soy". Un día se me quitaron las
anteojeras y vi el orgullo que estaba manifestando. No podía creer que
aunque era un ministro de liberación, liberando a otras personas del orgullo,
no podía verlo en mí mismo. Estaba tan cegado por eso espiritual y
emocionalmente. Estoy agradecido de haber tenido esa experiencia porque
ahora entiendo lo cegador que es.

Pride es un demonio de bajo nivel que ataca a todos. Cuando una

persona ha operado con orgullo a lo largo de los años, se convierte en
un hombre fuerte de Leviatán. Recuerde, la descripción bíblica de
Leviatán es una serpiente de mar. El orgullo en la jerarquía del reino
demoníaco está ligado a los espíritus marinos de alto rango. Los
espíritus marinos también están relacionados con los espíritus de la
brujería. Hace años el Espíritu Santo me reveló que por encima de
estos tres espíritus está un espíritu de Lucifer. Lleva el nombre del
diablo, que solía llamarse Lucifer.

PITÓN

¿Alguna vez te has preguntado por qué no pudiste avanzar hacia tu

gran avance o hacer que tu camino espiritual volviera a donde lo
deseabas? Nuestra falta de deseo espiritual puede ser más que carne o
pereza. ¡Puede ser un principado y potencia en funcionamiento! Un
espíritu pitón es una operación de brujería que viene en contra de tu
caminar espiritual.

En una ocasión, mientras íbamos al lugar de oración, nos salió al encuentro

una sirvienta poseída por un espíritu de adivinación, que daba mucho
provecho a sus amos con la adivinación. Ella nos siguió a Pablo y a
nosotros, gritando: “Estos hombres son siervos del Dios Altísimo, que nos
anuncian el camino de la salvación”.

—HECHOS 16:16–17
La palabra adivinación en griego se conoce como pitón.³ Un espíritu de pitón en
el reino espiritual se correlacionaría con una serpiente pitón en lo natural. Una
pitón mata a su presa por constricción y asfixia. La constricción es un
estrechamiento o endurecimiento.
La asfixia es la privación de oxígeno, lo que puede provocar la pérdida
del conocimiento o la muerte. El espíritu de pitón se contrae y aprieta
alrededor de la tráquea y dificulta la respiración.
Cuando estás en un territorio dominado por la brujería o tienes una voz y un
mensaje profético, puedes sentir que tu tráquea se tensa. Los espíritus pitón
generalmente quieren dejarte sin oración, y vienen a atacar tu caminar
espiritual. Te hacen perder la pasión por la adoración, la oración y el Señor.
Un espíritu pitón ataca tu caminar espiritual y crees que estás en un lugar
seco. El espíritu pitón seguirá atacando hasta que lo erradiques a través de
la oración.

Constreñir es ejercer presión sobre algo para hacerlo más apretado y más
estrecho. En lo natural perdemos la voz cuando nuestras cuerdas vocales
están inflamadas o hinchadas, haciendo un estrecho pasaje entre ellas.
Cuando esto sucede, nuestras cuerdas vocales no vibran tan fácilmente,
lo que nos impide hablar y hablar con fluidez. Cuando miramos el ámbito
espiritual, los espíritus de pitón y brujería hacen lo mismo con los
ministros cristianos. Vienen a perturbar y silenciar la voz profética,
intentando impedir que la Palabra de Dios avance para hacer avanzar el
reino de Dios.

Los espíritus de los hombres fuertes expuestos en este capítulo a menudo

trabajan juntos. No asumas que te enfrentas a un solo hombre fuerte. Puede
haber muchos hombres fuertes. En Marcos 5, Jesús le preguntó al demonio su
nombre, y dijo: “Mi nombre es Legión; porque somos muchos” (Marcos 5:9).
Una vez entregué a una dama que tenía cinco hombres fuertes de control. Por
lo tanto, no asuma nada en el ministerio de liberación y guerra espiritual.
Permita que el Espíritu Santo lo guíe proféticamente a través de cada situación
para lo que se necesita únicamente para esa circunstancia en particular.

ES HORA DE LA ACTIVACIÓN

Oremos para liberarnos de las fortalezas demoníacas.

ORACIÓN DE ARREPENTIMIENTO, RENUNCIA Y
RUPTURA DEL ACUERDO
Padre celestial, perdóname por el control, el orgullo y las fortalezas de la
mente. Perdóname por sentirme superior a los demás, soltar maldiciones
verbales en el ámbito espiritual o actuar en rebeldía, que es el pecado de
la brujería. Jesús, me arrepiento. Te agradezco por lo que hiciste en la
cruz y recibo la plena reconciliación. Rompo con las obras de la carne, las
malas actitudes, la superioridad, el orgullo generacional y los espíritus de
Jezabel. Hablo y decreto que soy perdonado y liberado por la sangre de
Jesús.

ORACIÓN DE IMPARTACIÓN Y ACTIVACIÓN

Espíritu Santo, lléname con el conocimiento del reino espiritual. Sé mi Líder y

Guía. Quiero asociarme contigo para ayudar a combatir los poderes de las
tinieblas. Ayúdame a caminar en el Espíritu y no en la carne. Guíame y
ayúdame para que no me apoye en mi propio entendimiento, sino que confíe
en las Escrituras y las percepciones proféticas que me das. Te invito a que me
guíes en todo lo que hago. Ayúdame a ser guiado por el Espíritu.

PROCLAMACIONES PROFÉTICAS (DECLARACIONES DE

FE)

Hablo y declaro que soy sumiso y humilde. Tengo un corazón para el

Señor.

Gracias, Señor, porque soy amor porque Tú eres amor y Tu Espíritu

vive en mí.
Invoco la posesión manifiesta de mi destino. Estoy listo para abrazar mi
vocación completa.

¡Te agradezco que el reino de Dios esté obrando a mi favor! Sé que

tienes todos los dones buenos y perfectos para mí.

Anuncio que estoy libre de fortalezas demoníacas. Soy eficaz y útil

para el reino de Dios.

ACTIVACIÓN ESPIRITUAL

Identifica a Jezabel. Ella tiene muchas características diferentes.

Aumente su discernimiento diagramando sus rasgos, incluso yendo
tan lejos como para comenzar a discernir a las personas a su
alrededor que puedan estar manifestando un espíritu de Jezabel.

Discierne las palabras proféticas que se te han dado. ¿Hay alguna

palabra equivocada que te dieron o algo que no se sentó bien en tu
espíritu? Trata de recordar cómo recibiste la palabra: dónde estabas,
cuáles eran los alrededores. ¿Sientes que podrías haber recibido una
palabra o enseñanza falsa?

El orgullo tuerce y gira la comunicación. Yo digo que la gente lleva

orgullo en sus mangas. ¿Puede identificar a alguien con orgullo y
cuáles son las características específicas? ¿Cómo puedes controlarte
y hacerte responsable para asegurarte de no manifestar esos
síntomas?
 DECLARACIONES DE GUERRA ESPIRITUAL

Limito y restrinjo todas las actividades de brujería. Anulo la agenda

de todos los malhechores en mi contra.

Desalojo todo espíritu de soberbia de mi alma. Espíritu de Leviatán, te

ordeno salir ahora en el nombre de Jesús. Rompo el acuerdo con
orgullo y desactivo todos los puntos de entrada.

Rompo el acuerdo con todo espíritu de control. Paralizo los poderes y

acciones de Jezabel sobre mi hogar, familia, ministerio y empleo.
Restringo a Jezabel de operar a través de mi línea familiar.

En el nombre de Jesús erradico y abolo por completo toda falsa

enseñanza y falsa profecía en mi vida, y hablo y decreto que los malos
espíritus sean desalojados de mi alma y las falsas profecías no se
manifiesten.

Proclamo que todo espíritu maligno está expuesto y que las agendas
ocultas salen a la luz.
 Capítulo 11

REPRENDIR AL ENEMIGO

EN GENERAL, LA MAYORÍA de los ministerios de liberación y las oraciones

de guerra espiritual no alcanzan lo que necesitamos para atar, restringir,
limpiar y aclarar la atmósfera espiritual. La gente permanece en cautiverio
porque no profundizamos ni profundizamos lo suficiente en la autoridad y
echamos fuera demonios. Nos aburrimos y nos estancamos en nuestro
tiempo de oración y no nos asociamos con el Espíritu Santo para escuchar lo
que Él dice que se debe orar. Recuerdo a una persona que seguía tratando
de hacerse cargo de la salud de su hijo orando en su mente: “Te reprendo,
Satanás”. Estaba tratando de enseñarle cómo hablar y decretar su situación,
pero ella insistió en que reprender al diablo en su mente era suficiente.

Hay dos problemas con esto, y deben abordarse de manera diferente.

El diablo no puede escuchar lo que pensamos o orar a Dios en

silencio. Por lo tanto, el reino demoníaco que activó las órdenes contra
este niño no estaba escuchando la autoridad de la madre sobre el
niño.

El segundo problema era no saber la aplicación de la palabra reprensión.

Reprender significa tomar autoridad sobre algo. Cuando reprendemos algo,
debemos tomar autoridad sobre ello y luego darle una orden de seguimiento.

En las Escrituras, cuando Jesús reprendió, le dio al artículo que reprendió un

mandato de seguimiento. Cuando miramos la tormenta en el agua en Marcos 4,
vemos un ejemplo de Jesús reprendiendo al viento y hablando al mar. “Se levantó y
reprendió al viento, y dijo al mar: '¡Calla, enmudece!' Entonces el viento cesó y
hubo una gran calma” (Marcos 4:39).

Jesús se levantó y reprendió al viento que agitaba el mar. Cuando

reprendió al viento y tomó autoridad sobre él, le habló al mar con una
orden de seguimiento para que se calmara. Note que el viento cesó
primero, cuando comenzó Su reprensión, el punto de partida de la
autoridad. El viento y el mar, ambas cosas sobre las que Él tomó
autoridad, tuvieron que reaccionar para que apareciera la quietud. Era
doble: reprender y dar un mandato de seguimiento.

Descubrimos otro ejemplo de reprensión cuando Jesús tomó autoridad

sobre los demonios. “Al ver Jesús que la gente se agolpaba, reprendió
al espíritu inmundo, diciéndole: Espíritu mudo y sordo, yo te mando, sal
de él, y no entres más en él” (Marcos 9:25) .
El demonio no salió solo porque Jesús lo reprendió. Tomó autoridad sobre el
espíritu inmundo, se dirigió a él por su nombre y le ordenó que se fuera y no
volviera a entrar. Lo reprendió y luego siguió ordenándole que saliera y no
entrara más. Estaba ocupándose de la situación inmediata y previniendo futuros
movimientos.

Al buscar en las Escrituras técnicas de guerra espiritual, debemos prestar

atención a palabras como decir, decir y llamar. Necesitamos buscar
palabras de acción en las Escrituras. Mire nuevamente lo que Jesús dijo
en Marcos 9:25: “Espíritu mudo y sordo, yo te mando, sal de él, y no
entres más en él”. Jesús no solo expulsó al demonio sino que tomó
autoridad, ordenó la salida y selló la liberación de la persona al ordenarle
al demonio que no entrara más en él. Él reprendió y tomó completa
autoridad sobre cada parte de la fortaleza demoníaca.

Debemos seguir el ejemplo de Jesús. Dirige el reino demoníaco a través

del mando. Decretar y tomar autoridad para demoler ataques. En mi libro
SPEAK OUT, encontrará una lista de palabras poderosas y autorizadas y
sus definiciones para usar en su tiempo de oración. (Vea el apéndice). Le
recomiendo que use una variedad de palabras en la oración. Esta práctica
puede ayudarte a evitar una vida de oración aburrida y estancada.
También debe tener cuidado de no ser legalista en sus oraciones. Cuando
oras en voz alta, el enemigo puede escuchar tus oraciones y puede darse
cuenta cuando estás siendo legalista y orando de manera rutinaria en
lugar de estar inspirado por el Espíritu Santo y liberar tu autoridad.
 PERMITA QUE EL ESPÍRITU dirija

Jesús no era tradicional ni legalista. Él no ministró repetidamente de la

misma manera. El Espíritu de Dios lo guió. El mensaje principal de este libro
es ser guiado por el Espíritu Santo en la guerra, liberando oración y
recibiendo discernimiento. Me gusta decir, “Deliverance no es un ministerio
de corte de galletas. No es una talla única para todos”. Lo que funciona para
una persona no necesariamente sirve para otra.

Jesús entregó de diferentes maneras. Dirigió la guerra a través de Sus

propias oraciones, no a través de las oraciones de otra persona. He
descubierto que en el cuerpo de Cristo queremos que otros peleen nuestras
batallas más de lo que queremos pelearlas nosotros mismos. Necesitamos
aprender a orar como lo hizo Jesús. La guerra espiritual, ser profético y
liberar el ministerio de liberación son los ministerios más inusuales y no
uniformes. No podemos esperar y enseñar un patrón o fórmula. Debemos
permitir que nuestro hombre espiritual sea guiado por el Espíritu e instruirnos
sobre cómo liberar el ministerio para cada situación particular que
encontremos.

JESÚS PREDICÓ Y REPRENDIÓ A LOS DEMONIOS

La liberación y la toma de autoridad sobre los demonios fue el primer

ministerio que Jesús lanzó después de llamar a sus discípulos. En
Marcos, Jesús trató con un hombre en la sinagoga que tenía un espíritu
inmundo. Cuando Jesús predicó con autoridad, acompañó su
predicación reprendiendo a los demonios.

En su sinagoga había un hombre con un espíritu inmundo. Y gritó: “¡Déjanos

en paz! ¿Qué tienes que ver con nosotros, Jesús de Nazaret? ¿Has venido
a destruirnos? Sé quién eres, el Santo de Dios”.
Jesús lo reprendió diciendo: “¡Cállate y sal de él!”. Cuando el espíritu inmundo
lo hubo convulsionado y clamado a gran voz, salió de él.

—MARCOS 1:23–26
Jesús reprendió al demonio diciéndole que se callara, y luego le dio una
orden de seguimiento para que saliera. Él no conversó con el demonio sino
que tomó autoridad para guiar al demonio a obedecer sus órdenes. El
demonio se resistió pero tuvo que irse. Los capítulos 1, 5 y 9 de Marcos
tienen varios relatos de Jesús confrontando al demonio que nos dan
ejemplos e instrucciones bíblicas. En el capítulo 9 vemos otro relato del
ministerio de liberación.

Al ver Jesús que la gente se agolpaba, reprendió al espíritu inmundo,

diciéndole: Espíritu mudo y sordo, yo te mando, sal de él, y no entres
más en él.

El espíritu gritó y lo convulsionó mucho. Pero salió de él, y estaba

como muerto, de modo que muchos decían: “Muerto está”.

—MARCOS 9:25–26

Convulsionado se define como una contracción violenta e involuntaria. Es

contorsionarse, sacudirse o sacudirse. El demonio gritó audiblemente y
sacudió el cuerpo del niño sin control. Cuando miramos hacia atrás en los
versículos 20–22, descubrimos que el padre le dijo a Jesús que este tormento
demoníaco había continuado desde la infancia de su hijo, arrojándolo al fuego
y al agua para matarlo. Jesús exudaba autoridad cuando le ordenó al
demonio que saliera y no entrara más en él (v. 25).

La guerra espiritual profética es tomar conocimiento natural y asociarse con

el Espíritu Santo para que Él nos diga qué decir en una situación particular.
Recuerdo una vez durante una sesión de liberación cuando la mandíbula de
un hombre se bloqueó cuando se manifestó un demonio. El hombre no podía
hablar, pero pudo indicarme que su mandíbula estaba bloqueada. No sabía
qué hacer a continuación, y decidí postrarme ante el Señor en busca de
sabiduría y dirección. Me indicó dónde estaba esperando la esposa de este
hombre. El Espíritu Santo me reveló a través de una conversación con la
esposa de este hombre que su tío le había puesto votos y juramentos de la
Masonería. Rompí los votos y juramentos de su vida y expulsé a los
demonios correlativos. Como resultado, su mandíbula se abrió y fue puesto
en libertad.
A menudo me preguntan dónde enviar demonios, cómo salen, qué
pasa si se resisten y si debo consultar con un demonio. Ser profético
no es preocuparnos por todas estas cosas, sino confiar en el Espíritu
Santo para que nos guíe. ¿Cómo puedes combatir la guerra si no
puedes confiar en Aquel que conoce la salida de esa guerra?
Además de seguir la dirección del Espíritu, debemos seguir el ejemplo de
Jesús en las Escrituras. Cuando Jesús trató con demonios, les dijo que se
callaran (Marcos 1:25) y les prohibió hablar (Marcos 1:34). No necesitaba
consultar con un demonio para desalojarlo. La reprensión es tomar autoridad
sobre un demonio, no negociar, discutir o consultar con él. Tus palabras
están asignadas proféticamente para dar en el blanco. Los demonios deben
inclinarse ante el nombre de Jesús y la autoridad que exudas.

REPRENDE AL ENEMIGO SOBRE TU MENTE

Ya he hablado de tener la mente de Cristo en este libro. No se puede

exagerar: participar en una guerra espiritual profética es tomar el control
y la autoridad sobre tu mente. El enemigo intenta penetrar nuestras
mentes varias veces al día. Cuando el enemigo ocupa tu mente, puede
resultar difícil escuchar del Espíritu del Señor.
No debemos permitir que el miedo, el trauma, el tormento, la depresión y la
inestabilidad mental ocupen nuestras mentes o permitir que el enemigo nos
arrastre hacia la preocupación, la derrota y la ansiedad. La transformación
de nuestras mentes debe resultar en mentes proféticas llenas del Espíritu
del Señor, un Espíritu no de pesadez sino de libertad. Cada lugar en el que
no capturamos mentiras, preocupaciones o miedos, los entretenemos.

Queremos que el Espíritu nos dé conocimiento, pero nuestro

pensamiento se nubla cuando permitimos que nos consuman
pensamientos que son contrarios a la Palabra de Dios. Reprender al
enemigo por los espíritus que atan la mente es el comienzo de la
libertad, y cuando tenemos libertad, podemos escuchar del Espíritu
Santo. Hablo más sobre los espíritus que vinculan la mente en varios
episodios de mi podcast, Guerra espiritual profética. (Ver el apéndice.)
Deseamos reprender al enemigo y tomar autoridad sobre los principados para
liberar a la gente. Aun así, la verdad del asunto es que tenemos que empezar
por nosotros mismos.
Tenemos que tomar autoridad y reprender al enemigo de nuestras
mentes. Hago esto varias veces al día. Una vez que tengas un
hombre fuerte, intentará invadirte y victimizarte nuevamente. Por lo
tanto, debes estar alerta, reconocer sus tácticas y constantemente
capturar y descartar pensamientos que no son de Dios. Reprende al
enemigo orando por la ofensa en lugar de la defensa. Sé proactivo y
ponlo bajo tus pies.
Reprender al enemigo en tu mente sigue el mismo formato que usó
Jesús al reprender. Reprenderás el pensamiento, lo capturarás y lo
desecharás. Le dirás al pensamiento que se quede quieto, que salga y
cualquier otra cosa que necesites decir. Después de reprender y tomar
autoridad, Jesús dio una orden de seguimiento. Le dirás al pensamiento
que se vaya, al espíritu mentiroso que se calme y al demonio que se
vaya. Siga la expulsión del pensamiento y la entidad demoníaca con
una verdad en la que pueda creer, reclamar y confiar.

Ejercicio Profético: Oración de Posesión

Soy más que vencedor en Cristo Jesús. Tengo una herencia real y soy
amado por mi Padre Dios. Soy bendito en mi venida y bendito en mi
partida. Soy rico en el abundante amor del Señor. Tengo todo lo que
necesito en Cristo Jesús. Todas las cosas están trabajando juntas para
mi bien. Tengo victoria sobre toda fortaleza demoníaca y camino en
alegría, paz y amor.

TOMAR AUTORIDAD Y REPRENDER

Necesitamos estar atentos al reino y tomar autoridad al reprender al enemigo.
En los siguientes versículos de las Escrituras, Pedro estaba más preocupado
por la
comodidad del mundo que hacer avanzar el reino de Dios. Pedro no
quería que el Señor tuviera que ir a la cruz, pero Jesús reprendió a
Pedro por no tener en mente el reino.

Entonces Pedro lo tomó y comenzó a reprenderlo, diciendo: “¡Lejos

esté de Ti, Señor! Esto no te sucederá.”

Pero se volvió y le dijo a Pedro: “¡Aléjate de mí, Satanás! Tú me eres

una ofensa, porque no te acuerdas de las cosas que son de Dios,
sino de las que son de los hombres”.

—MATEO 16:22–23

Muchas veces, no reprendemos al enemigo porque, como Pedro, estamos

preocupados por los asuntos de este mundo. Hay un dicho: “Sé audaz pero
controlado”. Tenemos que ser audaces. No siempre podemos ser controlados. La
iglesia nos ha enseñado a predicar el amor y, si bien eso es importante, no es el
único mensaje que se debe enseñar. También debemos aprender cómo atar al
enemigo orando con autoridad. Nos reprimimos en nuestras oraciones y
reprensiones porque tememos lo que pensarán los demás. Necesitamos ser tan
radicales por Cristo y Su reino que no nos importe lo que piensen los demás.

No estoy sugiriendo que actuemos imprudentemente, pero ya no podemos

permitir que la intimidación nos detenga. Si estamos orando por alguien y
necesitamos reprender al enemigo por la vida de esa persona, pero tenemos
miedo de lo que la persona crea o de lo que pueda pensar, le estamos
haciendo un flaco favor al no liberarlo por temor al hombre. Necesitamos
darnos cuenta de que es exactamente lo que necesita, pero no sabe cómo
pedirlo o recibirlo. Nuestras acciones y nuestro corazón deben estar enfocados
en el reino. Las preocupaciones y los asuntos de este mundo deben ser
secundarios a la promoción del reino. Ser dirigido por el reino significa
reprender y tomar autoridad sobre cualquier cosa contraria al reino.

Jesús dijo: "¡Aléjate de mí, Satanás!" (Mateo 16:23). Jesús estaba tomando
autoridad sobre la distracción y el desvío de Pedro hacia su destino. Algunos
de ustedes necesitan decir: "¡Aléjate de mí, Satanás!" a tu situación Debe
hablar y reprender las distracciones, los retrasos y los desvíos de su destino.
No puedes esperar a que todos los demás reprendan al diablo en tu nombre.
Jesús dijo: “Yo os doy autoridad” (Lucas
10:19), lo que significa que tienes más autoridad sobre tus
circunstancias que aquellos a quienes les pides que oren por ti y
reprendan al diablo en tu nombre. Tienes autoridad. ¡Tómalo!

Ejercicio Profético: Reprende al Enemigo

No esperes otro momento. ¡Esté tan desesperado por la libertad que quiera
hacerlo ahora! ¡La activación es instantánea! Levántate y dile al enemigo: “Te
reprendo”, y luego habla y declara de qué necesitas que desista en tu vida.

ES HORA DE LA ACTIVACIÓN

Es hora de hablar y reprender al enemigo en tu vida.

ORACIÓN DE ARREPENTIMIENTO, RENUNCIA Y

RUPTURA DEL ACUERDO

Padre, perdóname por cualquier arrogancia y orgullo al pensar que sabía

orar mejor que alguien que Tú pusiste en mi vida para enseñarme
estrategias más intensas. Perdóname por cualquier exaltación propia y por
sentir que todo lo sabe, como si no tuviera más lugares donde podría
crecer en el espíritu. Rompo el acuerdo con cualquier espíritu que no se
pueda enseñar o falta de motivación para profundizar más en la Palabra
de Dios y aprender nuevas capas proféticas de las Escrituras. Renuncio a
cualquier emoción carnal que me impida aprender, crecer y activarme.
 ORACIÓN DE IMPARTACIÓN Y ACTIVACIÓN

Espíritu Santo, ayúdame a recibir nueva revelación. Recibo la plenitud

de Dios en mi vida. Activo el reino dentro de mí y lo manifiesto. Hablo
que tengo la mente en el reino, cumpliendo cada misión y llamado que
tienes para mí. Deseo recibir mi destino profético en plenitud sin
obstáculos. Ayúdame a estar completamente equipado para exudar
todo lo que me has dado con tanta alegría. ¡En el nombre de Jesús,
amén!

PROCLAMACIONES PROFÉTICAS (DECLARACIONES DE

FE)

Hablo, y el enemigo debe ser atado, restringido y llevar a cabo cualquier

orden de seguimiento que le dé. ¡Tengo la autoridad que Jesús me dio!

Mi destino avanza sin obstáculos. Las estaciones familiares, los ciclos y

los espíritus del pasado han sido cancelados y anulados en el nombre
de Jesús.

El fracaso no es mi porción. La derrota no es una opción. ¡Se me ha

dado vida abundante, amor y poder!

Soy redimido de la maldición porque Cristo colgó en la cruz por mí.

Por tanto, soy un vencedor y tengo la victoria.
Confieso que estoy dispuesto a someterme al Espíritu Santo y
permitirle que me corrija, me convenza y me enseñe.

ACTIVACIÓN ESPIRITUAL

Cambia tus pensamientos. Tienes la responsabilidad de cambiar tus

pensamientos. ¿Dónde necesita cambiar su pensamiento y cómo
puede hacer un plan de acción para implementarlo?

Cambia tus oraciones. ¿Dónde posiblemente ha orado mal, y dónde necesita

cambiar qué y cómo está orando para recibir resultados efectivos?

Reprender al enemigo viene de hablar claro. Escriba una declaración

de diez oraciones para reprender al enemigo y tomar plena autoridad
sobre él.

DECLARACIONES DE GUERRA ESPIRITUAL

En el nombre de Jesús, elimino todo poder demoníaco para que no se infiltre

en mi alma con ataduras emocionales. Soy sanado y liberado por la sangre
del Cordero.

Cierro las puertas de entrada y los puntos de acceso que otorgan derechos legales
a los ataques demoníacos.
Reprendo toda dolencia de salud en mi vida, y ordeno a mi cuerpo que
se alinee con la Palabra de Dios.

Reprendo a todo malhechor contra mis finanzas. Ordeno a los espíritus

familiares que atacan mis finanzas que sean atados y restringidos.
Abortarás tu misión de robar mis finanzas.

Arranco todo espíritu de hombre fuerte que se ha infiltrado en mi alma a causa

de los pecados que he cometido. Fortalezas y hombres fuertes, desató, en el
nombre de Jesús.
 Capítulo 12

ACTIVA TUS SENTIDOS ESPIRITUALES

LA PREGUNTA NÚMERO UNO que recibo en mi ministerio es cómo

aumentar el discernimiento y ver en el ámbito espiritual. Cuando las
personas hacen esta pregunta, a menudo les pregunto por qué quieren ver
en el ámbito espiritual y qué harán con la información que reciban a través
del discernimiento. Ver en la atmósfera espiritual es una bendición; sin
embargo, ver en el ámbito espiritual también puede ser uno de los mayores
desafíos que encontrará.

Todo se reduce a lo que vas a hacer con la información que recibes. He

visto en el reino espiritual durante años. El desafío es que cuando ves un
demonio en la espalda de alguien en una tienda, no puedes acercarte a la
persona y decirle: “Discúlpame. Veo un demonio sobre ti. ¿Puedo
quitártelo rápido?” Un desafío al que me enfrento a menudo es no disfrutar
de unas vacaciones o de una cita nocturna con mi cónyuge. La actividad
demoníaca en la atmósfera a menudo asoma su cara fea, y me enfrento a
los poderes de la oscuridad que invaden mi espacio. Recuerdo una vez
que fui a una cita nocturna con mi esposo y le pedí al Señor por
adelantado que apagara mi capacidad de ver el reino espiritual para poder
disfrutar la noche como una persona normal.

No me arrepiento en absoluto de poder ver en el reino espiritual. Ha liberado

a muchos cautivos y ha sido una bendición decirle a la gente cuando veo
ángeles a su alrededor. Sin embargo, también puede ser una distracción y
hacer que algo que alguna vez disfrutó sea un desafío para experimentar.
Puede hacer que seas más cauteloso y piadoso acerca de dónde vas y
cuándo. Entonces, sí, es un honor estar en la guerra en nombre del Rey,
pero debe calcular el costo.

El discernimiento viene en dos formas: el discernimiento general,

en el que cualquiera puede funcionar, y el don de discernimiento.
DISCERNIMIENTO GENERAL
El discernimiento natural puede provenir de nuestro conocimiento,
sabiduría e indicadores de lo que sucederá a continuación. Es posible
que podamos predecir las acciones o los motivos de una persona, como
cuando las madres conocen tan bien a sus hijos que pueden predecir lo
que harán a continuación. Al familiarizarnos con las personas, podemos
anticipar su próximo movimiento o lo que pueden o no decir o hacer. El
discernimiento general puede provenir de lo que sabemos sobre una
situación, la información que hemos obtenido o una percepción de lo que
sucederá a continuación. El sentido común también puede tener un factor
en el discernimiento. No todo discernimiento es del Espíritu del Señor;
algo de esto es lógico.

EL DON DEL DISCERNIMIENTO

El discernimiento de espíritus es un don según 1 Corintios 12. Es la

capacidad de discernir entre el Espíritu Santo, los malos espíritus y el
espíritu humano. El Espíritu Santo da dones, pero también podemos
aumentar y avivar los dones (2 Timoteo 1:6). A medida que utilizamos un
don, podemos crecer y aumentar en el don. En el don de discernimiento
de espíritus, usted tiene la capacidad de discernir las intenciones
verdaderas y falsas en una persona, sentir actividad demoníaca o
espíritus malignos en una persona y recibir dirección del Espíritu Santo
sobre cómo proceder en una reunión ministerial o situación natural. .
Además, también podría tener la capacidad de ver en el reino espiritual
tanto ángeles como demonios.

ACTIVACIÓN INTERNA

Podemos aumentar nuestro discernimiento y recibir guía espiritual y

comprensión. Una de las formas en que podemos crecer en el discernimiento
natural es observando a la gente. Vaya al centro comercial oa un lugar público
concurrido y observe a la gente. Concéntrese en lo que están haciendo las
personas y, ocasionalmente, vea si puede predecir sus próximos movimientos.
Concéntrense en ellos con los ojos, sin hacer contacto visual físico, pero
enfocando tus ojos en ellos, y mira si puedes discernir algo acerca de
ellos. Incluso puede hacer esto con personas que conoce en una cena o
en un estudio bíblico. Mientras te enfocas en ellos, concéntrate.

Hay dos formas en las que puedes proceder después de que te hayas
concentrado en ellas. La primera forma es mantenerse en sintonía con
lo que se está enfocando, pero no pensar en ello. En otras palabras,
no intentes averiguarlo. Enfoque. Permita que el Espíritu Santo le
hable acerca de ellos. La segunda forma es reflexionar, pensar y tratar
de averiguarlo. Presente diferentes escenarios y vea qué resuena con
usted y es testigo en su espíritu. Ambos ejercicios aumentarán tu
discernimiento y activarán lo profético dentro de ti.

ACTIVACIÓN HACIA EL EXTERIOR

Deje que el Espíritu Santo sea su guía y siga Su guía mientras busca
pasar de la activación interna a la activación externa. Aquí es donde das
un paso más allá. Cuando esté haciendo mandados o mirando a la
gente, pídale al Espíritu Santo que le dé una tarea profética. Luego esté
listo para hablar cuando sienta Su dirección.
Por ejemplo, si estoy comprando ropa y me siento guiado a orar, profetizar o
ministrar evangelismo profético, me coloco cerca de una persona que busca
ropa en un perchero y uso la ropa para iniciar una conversación. A medida
que la persona responde, le pido al Espíritu Santo que me ayude a discernir
su respuesta.

El acto de fe es confiar en que después de dar un paso y abrir la boca en

lo natural, el Espíritu Santo hará algo en lo sobrenatural y le dará las
palabras para hablar y una perspectiva profética sobre la situación de la
persona.
Esta activación externa de sus sentidos espirituales comienza con un paso de fe y
audacia. Haces algo en lo natural y esperas que el Espíritu Santo aparezca y
presuma, en el buen sentido, como descargar información que solo Él conocía
sobre la persona para llamar su atención y enfocar sus ojos en el Señor.
 Ejercicio Profético: Activación Interior y Exterior

Practique las técnicas de activación interna y externa que he mencionado

para aumentar su discernimiento. Nunca sabrás si tienes razón a menos que
intentes liberar lo que el Espíritu te ha dado. A menudo nos estancamos en
nuestros dones porque no los liberamos. Al remover, liberar y activar
nuestros dones, podemos crecer en confianza en lo que Dios nos ha dado, y
podemos confiar en que Él lo recibirá y lo liberará. No puedo decirte cuántas
veces necesité que me empujaran o que alguien me impulsara cuando
estaba empezando, pero todo comienza con un acto consciente de
obediencia.

ORACIÓN ESCUCHA

Trate de escuchar durante la oración y luego actúe de acuerdo con las

palabras de conocimiento que reciba. Esta es una gran prueba para
aumentar tu discernimiento y afinar tu oído a la voz del Señor. Solo o con
un grupo de amigos, ore y espere recibir palabras de conocimiento para
compartir con la gente. El Espíritu Santo puede decirle a qué tienda ir y
qué ropa usará la persona. Siéntese y reciba del Espíritu orando en
lenguas, invocando palabras de conocimiento, o sentándose en silencio y
esperando que Él imparta algo.

Toma la información que recibes y actúa en consecuencia. Ve al lugar

y busca a la persona que el Espíritu describió. Acérquese a la persona
guiada por el Espíritu Santo. Pídele que deposite más instrucciones
en tu espíritu.
 Ejercicio Profético: Recibe una Palabra de Conocimiento

Deje de leer y pase de tres a cinco minutos en silencio ahora mismo.

Tranquilizarse. Trate de no pensar. Solo espera pacientemente en el
Espíritu Santo y ve si Él te dará una palabra de conocimiento o te
hablará.

OBEDIENCIA Y BENEFICIOS DE AUMENTAR EN DISCERNIMIENTO

Podría compartir muchas historias de las formas en que el Espíritu

Santo me ha llevado a ministrar a las personas a lo largo de los años.
Por ejemplo, recuerdo un viaje ministerial que el Espíritu Santo nos
había llamado a tomar donde Él nos había dado instrucciones
específicas para viajar, llevándonos a Georgia. Luego obtuvimos una
palabra de conocimiento para ir a un restaurante de cadena
específico. Había tres cerca, y tratamos de discernir en qué ubicación.
La primera vez nos equivocamos. Ubicamos los otros dos sitios y
procedimos.

En la segunda ubicación sabíamos que el gerente era nuestro objetivo.

Estaba trabajando en una mesa cercana y comentó: “Ojalá funcionara
Internet”. Mi asistente y yo instantáneamente deslizamos nuestras sillas
y dijimos: "Podemos ayudarlo con eso". Oramos y el internet comenzó
a funcionar. Sin embargo, esa fue la apertura, no la cita. El
administrador había orado y ayunado durante diez horas el día anterior
y necesitaba escuchar una palabra del Señor. El Espíritu me llevó a
profetizar y hablar sobre ella.

En otra ocasión, el Espíritu del Señor me dijo que fuera con mi equipo a
una cadena de tiendas en particular a las 2:00 p. m. Obedecimos e
identificamos fácilmente a quién sentimos que el Señor nos estaba
dirigiendo a acercarnos. Hablamos de su vida y le dimos mi tarjeta.
Llamó al día siguiente y nos reunimos con ella. No podía perdonarse a
sí misma por un aborto y nos dijo que había estado planeando
suicidarse antes de que apareciéramos.
Y en otra ocasión, estaba trabajando en la oficina cuando el Señor me
indicó que fuera a nuestra tienda de comestibles local. Estaba ocupado y
tratando de ignorarlo, pero la palabra de conocimiento no me dejaba. Le
dije a uno de los miembros de mi equipo, y ella dijo: “¿Qué estás
esperando? Si Dios te está diciendo que te vayas, tenemos que irnos”.
Fuimos y ella oró acerca de a qué parte de la tienda ir. Ella sintió que el
Espíritu Santo nos decía que fuéramos a la cafetería.
En el café, la gente estaba sentada en tres mesas, pero no podíamos discernir a
qué mesa acercarnos. Finalmente me puse de pie y dije: “Dios me dijo que
viniera a esta cafetería en esta tienda a esta hora, y necesito saber quién
necesita oración”. Al principio, la gente me miraba y no decía nada. Pero
entonces un hombre le interpretó a su amigo lo que yo había dicho y nos llamó y
nos dijo que su amigo necesitaba oración.

Comparto estas historias para ayudarlo a ver que su discernimiento puede no

ser preciso la primera vez, o puede sentirse tentado a ignorarlo o dudar de
haber escuchado correctamente. Moverse en el Espíritu y confiar en Él puede
ser difícil a veces. Sin embargo, confiar en el Señor no depende de nuestros
sentimientos. Nuestra carne debe ser crucificada, la intimidación debe huir y
no se puede permitir que se manifieste la inseguridad. Seguir la dirección del
Espíritu es un acto de obediencia y disciplina de nuestra parte. En los
ejemplos que compartí, fui obediente para llevar a cabo la tarea que me dio.
Pero no fui el más disciplinado en el caso de la tienda de comestibles porque
casi pierdo la cita. Escuché claramente del Señor, y debería haber ido la
primera vez que me lo pidieron en lugar de tratar de ignorarlo.

CONFUSIÓN EN EL DISCERNIMIENTO

La claridad debe estar presente en lugar de la confusión en nuestros

momentos de oración. Podemos recibir una respuesta incorrecta en oración
al pensar en ello en lugar de orar al respecto. Cuando tratamos de discernir
y activar nuestros sentidos espirituales, debemos ser conscientes de nuestro
entorno, cómo el enemigo puede infiltrarse en nuestros pensamientos,
dónde estamos y qué estamos haciendo cuando recibimos el discernimiento.
Lamentablemente, los cristianos no somos tan disciplinados en la oración como
deberíamos ser. Nuestros tiempos de oración pueden ser escasos y pasivos.
Podemos terminar meditando y ponderando una decisión durante nuestros
tiempos de oración, y como estamos orando, terminamos creyendo que la
respuesta es del Señor cuando no lo es. Necesitamos límites claramente
definidos.
Es imperativo que diferenciemos entre nuestro propio pensamiento y la
oración. Podemos identificar escuchar del Señor asegurándonos de entrar
por Sus puertas con acción de gracias y Sus atrios con alabanza. (Véase
Salmo 100:4.) Cuando guardamos nuestros tiempos de oración y
entramos a través de palabras y cantos de alabanza, establecemos un
perímetro alrededor de nuestras almas que el enemigo no puede
penetrar.

Cuando comenzamos nuestros tiempos de oración pensando y

reflexionando, puede ser difícil hacer una transición para unir nuestra
carne para conectarnos y escuchar al Señor. Nuestros pensamientos
errantes y qué pasaría si se involucran en escenarios y, a menudo,
recibimos una respuesta de nuestros pensamientos en lugar del Señor. Si
nuestras mentes están ocupadas en otra parte, puede ser difícil
concentrarse en lo que el Señor está hablando. No quiero discutir y decir
que no podemos escuchar a Dios mientras manejamos. Sé que lo he
hecho, y estoy seguro de que usted lo ha hecho, pero todavía estamos
enfocados en la carretera, las señales de tránsito y los peatones cuando
conducimos. Por lo tanto, no tenemos el 100 por ciento de nuestra
atención dirigida hacia el Señor y lo que Él quiere hablarnos. Cuando
queremos orar por algo específico y mejorar nuestra relación con el Señor,

DESCARGAS DE DISCERNIMIENTO

Construir una relación con el Espíritu Santo y reconocer Su voz es

fundamental para recibir descargas o lo que yo llamo “gotas espirituales”.
A medida que sintonizamos nuestros oídos espirituales con Su voz y
construimos una relación con Él, Él comenzará a dejar caer cosas en
nuestro espíritu, incluso cuando no estemos en oración. Habrá ocasiones
en las que esté caminando por la casa y recibiré una instrucción
depositada en mi espíritu. Mi hija Lauren y yo recibimos gotas y descargas.
Ella puede hacerme una pregunta y yo puedo recibir instantáneamente una
respuesta en mi espíritu, y viceversa. El Espíritu Santo nos hablará clara y
rápidamente a medida que mejoremos nuestra relación con Él.
De la misma manera, Él puede depositar palabras proféticas y revelación.
Cuando estés orando y buscándolo, Él derramará mucha revelación para
escribir algo que Él quiere que hagas, o puede darte una palabra profética.
Puedes aumentar la revelación que recibes pasando tiempo en Su presencia,
estudiando
Su Palabra, y conocer Sus características y la forma en que Él te habla.

AUMENTO EN EL DISCERNIMIENTO

Cuando el Señor le dé una respuesta a una pregunta, espere en Él y vea si

recibe más instrucciones. Si estás orando por algo específico y el Señor te
responde, entonces da un paso más y ora por la respuesta, las diferentes
direcciones sobre cómo se puede manifestar. A medida que lo busca en
busca de más dirección, es posible que vea mapas de ruta que lo lleven a la
solución que está tratando de encontrar. Puede descubrir muchas piezas del
plan que Dios tiene ante usted.

Aprende a aquietar tu mente y concentrarte. Puede ser un desafío

discernir cuándo tu mente va en varias direcciones diferentes. Tienes que
darle al Espíritu la oportunidad de entrar en tus pensamientos. Si tu
mente está llena de todo lo demás, ¿cómo lo escucharás cuando hable?
Permítele que penetre en tu mente. Quizás estés pensando: “Kathy, Él es
Dios. Él puede penetrar mi mente en cualquier momento que quiera”.
¿En serio? ¿Es eso cierto? ¡Piénsalo! ¿Le das una oportunidad, o tu
mente está yendo todo el tiempo?

Solía ser muy analítico. El Señor me enseñó a retirarme y aquietarme dentro

de mí. Ahora puedo estar en una conferencia con ruido y gente alrededor y,
sin embargo, puedo conectar mi espíritu con el Espíritu Santo, recibir
instrucción y estar en un lugar de intimidad con Él. Esta habilidad me ayuda a
obtener dirección para las reuniones y a saber cómo quiere guiarme el
Espíritu. Se necesita práctica para aprender a aquietar tu alma. Encuentre un
ejercicio o una forma en la que pueda retirarse y escuchar al Señor. Soy muy
visual, entonces haría ejercicios visuales en mi mente que aclararían mis
pensamientos para preparar mi mente y mi corazón para escuchar al Señor.

Ejercicio profético: calma tu mente

Cuando tu mente va en varias direcciones, captura el pensamiento.
Deténgase y tómese un momento y concéntrese en el pensamiento. Toma el
pensamiento e imagínalo saliendo de tu mente, bajando por tu cuello, a
través de tu pecho y dentro de tu corazón, hacia el lugar de amor con el
Padre. Transfiere el pensamiento analítico y ocupado de tu mente al lugar
de paz y descanso en el amor del Padre.

Si puedes, cierra los ojos y concéntrate en tu mente, no en los pensamientos.

Date un punto focal y los pensamientos se calmarán. Ahora procede a sacar
fuerza interior de ese lugar de amor donde está el Padre y el Espíritu Santo
está viviendo dentro de ti. Deje a un lado las distracciones mentales y físicas
del mundo exterior y acérquese a su hombre espiritual y al Espíritu Santo. Al
hacer esto, su mente, voluntad y emociones, la parte del alma de usted,
dependerán y obtendrán claridad, fuerza y revelación del Espíritu Santo. Este
es el núcleo y la esencia de este libro: asociarse con el Espíritu Santo.
Cuando sometamos nuestra alma al Espíritu Santo, dejaremos de ser
analíticos.

Mis amigos solían etiquetarme como la persona más analítica que conocían. Yo
era un adorador y todavía lo soy, pero por mucho que me encantara adorar a
Jesús y concentrarme en amarlo, los pensamientos analíticos que me distraían
invadían mi adoración. Me haría dejar la adoración sintiéndome como si hubiera
perdido el tiempo porque no estaba enfocada en el Señor. Me frustré conmigo
mismo. A medida que implementé estas prácticas que he compartido con
ustedes, he podido conquistar mis pensamientos analíticos. Creo que ser
analítico es un regalo de Dios Padre. Es cuando tomamos algo bueno que Él
nos ha dado, lo mezclamos con nuestra carne y analizamos al extremo que
puede llegar a ser perjudicial para nosotros. No puedes eliminar completamente
el ser analítico de tu vida, pero puedes minimizarlo para que puedas aumentar tu
caminar espiritual y disfrutar tu tiempo en la presencia del Señor.

CINCO SENTIDOS
¿Dónde te habla mejor Dios? Puede que tengas un lugar secreto o un lugar
donde mejor escuches del Señor. Identifique este lugar, ubíquese allí
mientras crece en el discernimiento y observe cómo Él le habla. Este es
un momento en el que podrías probar y usar tus cinco sentidos naturales
para experimentar al Señor. Los cinco sentidos naturales que creó
nuestro Padre (vista, olfato, oído, tacto y gusto) también se pueden usar
para experimentar a Dios, discernir si hay demonios presentes y sentir lo
que sucede en la atmósfera espiritual. ¿Alguna vez has olido la
presencia de Dios o sentido el mal? ¿Has experimentado
manifestaciones usando tus sentidos?

Visión

Nuestro Padre puede abrir nuestros ojos para ver seres espirituales tanto en el
ámbito natural como en el espiritual. Podemos ver demonios y ángeles. También
podemos experimentar visitas de Jesús y el Espíritu Santo, donde los vemos
aparecer en una habitación. En tu tiempo devocional, el Señor puede aparecerte en
una visión, o puede aparecer físicamente ante ti. Recuerdo que el Señor se me
apareció en una visión intensa, tomándome de la mano, llevándome al cielo y
mostrándome a mi hijo que murió en mi vientre.

El Señor puede usar nuestros ojos para mostrarnos cuándo están

presentes los demonios y cuándo se han ido. Él puede usar nuestros
ojos para ayudarnos sobrenaturalmente en el ministerio o enseñarnos
cómo orar específicamente por algo. La visión espiritual proviene de
un lugar de intimidad y compromiso con el Señor.

Oler

Podemos oler la fragancia de Dios en nuestros tiempos de adoración

o oración. ¿Alguna vez has notado que el olor de la habitación cambia
y se vuelve dulce como las rosas? Cuando estás orando o adorando y
de repente notas que un olor invade la habitación, es el Señor.
Estaba predicando una vez y comencé a oler a incienso y mirra. Fue
extraordinariamente fuerte. No había aceite de unción en la habitación
con incienso y mirra. No pude superar el olor. Cerré mi carpeta, detuve
mi enseñanza y comencé a discernir.

El Espíritu del Señor me instruyó que no tocara a nadie sino que me

quedara sentado en mi taburete y hablara lo que Él me dijera. Las
siguientes cuatro horas fueron constantes sanidades, milagros,
liberación e impartición del fuego y la presencia de Dios. Las espaldas
fueron sanadas, los demonios fueron expulsados y la gente yacía en la
presencia del Señor.

Sonido

Nuestros oídos son puertas de entrada al reino espiritual. Nuestros oídos

pueden oír en lo espiritual y lo natural. Podemos escuchar a Dios cuando
nuestros espíritus están conectados a Su Espíritu. Dios también habla
audiblemente a Su elección a Su pueblo. Podemos escuchar otro sonido si
nos sintonizamos con él. Podemos escuchar la atmósfera espiritual, como el
aleteo de las alas de los ángeles, o podemos escuchar el correteo en el
reino espiritual de los demonios que se activan en una misión.

El Espíritu nos dio a mi equipo ya mí discernimiento sobre cómo opera

el demonio a través de las ondas de radio y cómo atar y restringir la
charla y las asignaciones demoníacas. La declaración de ondas de
radio que Él descargó sobrenaturalmente para nosotros está al
principio de mi libro Discerniendo y Destruyendo las Obras de
Satanás. (Ver el apéndice.)

Gusto y tacto
Podemos experimentar el gusto y el tacto en lo espiritual. Sin
embargo, a diferencia de los otros sentidos, tendremos que
presionar un poco más en el reino espiritual para ver sus
manifestaciones.
 Ejercicio Profético: Esté Alerta y Consciente de su Entorno

Activa tus sentidos espirituales haciéndote consciente y alerta. A veces nos

ponemos en modo robot en nuestro caminar espiritual y podemos volvernos
legalistas al escuchar a Dios y cómo lo experimentamos. Necesitamos estirarnos
para pasar a otro nivel y esperar más. A veces, aumentar y liberar el
discernimiento y una nueva unción no es tan difícil como pensamos. Viene de
esperar más, alcanzar un nuevo nivel e intentarlo. Como cristianos podemos
caer en un falso contentamiento y estancamiento porque estamos satisfechos
con lo que tenemos o no sabemos cómo aspirar a más. Siempre debemos estar
buscando y esperando ir a un nuevo lugar espiritual, más profundo y más
cercano al Señor.

ES HORA DE LA ACTIVACIÓN

Ora y activa tus sentidos espirituales.

ORACIÓN DE ARREPENTIMIENTO, RENUNCIA Y

RUPTURA DEL ACUERDO

Me arrepiento de sentirme frustrado o de haber afirmado que no

escuché de Dios. Escucho del Señor. Renuncio a cualquier insuficiencia
en mi discernimiento. Rompo el acuerdo con la comparación con otras
personas y cómo escuchan y reciben del Señor. Renuncio a los
sentimientos que he tenido cuando escuché de mi carne o la gente me
dijo que estaba equivocado. Rompo los obstáculos que estas palabras
y sentimientos erigieron en mi vida. En el nombre de Jesús, amén.
 ORACIÓN DE IMPARTACIÓN Y ACTIVACIÓN

Te agradezco, Espíritu Santo, que desees asociarte conmigo. Quiero recibir

de Ti. Sé que eres mi amigo y deseas comunicarte conmigo. Abro mi alma y
mis sentidos espirituales para escuchar de Ti. Confiaré en ti por la revelación
que me das. Ya no cuestionaré mi discernimiento, sino que avanzaré con la
confianza de que escucho de Ti cuando me asocio contigo y te mantengo en
primer lugar en mi vida. ¡En el nombre de Jesús, amén!

PROCLAMACIONES PROFÉTICAS (DECLARACIONES DE

FE)

El Espíritu Santo es mi mejor amigo. Él está trabajando en mi

nombre. Él desea comunicarse conmigo. Soy sensible al Espíritu y
hago tiempo para estar en Su presencia.

El Espíritu Santo es mi maestro, instructor y amigo. Él me guía cuando

lo miro.

Proclamo que el Espíritu Santo es mi Guía. Él me da revelación y me

instruye sobre qué dirección tomar en mi vida.

Hablo y decreto que recibo discernimiento del Espíritu Santo y que mi

carne no se mete en decisiones.
Recibo del Espíritu Santo ideas e instrucciones. Soy obediente y
disciplinado para actuar rápidamente sobre la unción que Él me da.

ACTIVACIÓN ESPIRITUAL

Ponte a disposición del Espíritu Santo. ¿Cómo puedes eliminar los

pensamientos que te distraen y el ajetreo para pasar tiempo
esperando en Él?

Aumenta tu discernimiento. ¿Necesitas quitarte la duda o ser librado

de algo que atente contra tu confianza para escuchar de Dios?

Posiciónate para usar tus sentidos. Dedique tiempo a orar por las
personas y a aceptar peticiones de oración para sintonizar sus sentidos
con el Espíritu del Señor.

DECLARACIONES DE GUERRA ESPIRITUAL

Obstruyo que el enemigo se infiltre en mi tiempo de oración. Hablo y decreto

que no tengo confusión sino claridad, y puedo oír del Espíritu Santo
claramente.
Prohibo que los espíritus malignos penetren en mis
pensamientos. Me pongo el yelmo de salvación y liberación
sobre mi mente.
Obstruyo que todo espíritu maligno me ataque a mí ya mi
discernimiento. Sintonizo mis cinco sentidos con el ámbito espiritual, y
no me desanimo, porque escucho del Espíritu Santo.

Ato y abolo los espíritus de miedo e intimidación. Se me ha dado amor,

poder, autodisciplina, autocontrol y dominio propio.

Le prohíbo al enemigo que interrumpa mi tiempo con el Señor y

envíe ataques espirituales para interrumpir mi tiempo con Dios.
 Capítulo 13

ACUERDO DE RUPTURA

EL MIEDO FUE un bastión en mi vida durante años. Tenía miedo de

estar en un vehículo en un puente con agua debajo. Tenía miedo a las
alturas, las tormentas y los caminos helados y nevados. Sentía miedo
cuando escuchaba un leve ruido o vibración en mi vehículo, pensando
que algo andaba mal o que iba a tener un accidente. Presté mucha
atención cuando algo estaba mal en mi cuerpo, temiendo que se
manifestara una dolencia médica. Estos miedos atarían mi mente, me
traumatizarían y me mantendrían angustiado.

El miedo ganó un punto de entrada en mi vida cuando la gente

pesimista me rodeó; lo comparo con que me enseñen a tener miedo.
Me enseñaron a pensar lo peor de una situación ya esperar un
resultado negativo. El miedo era parte de la maldición generacional que
heredé. Me crié en una familia donde el pesimismo superaba al
optimismo. Pensar lo peor de una situación era una reacción normal y
habitual, y se convirtió en parte de mí.

Imaginaciones vanas y escenarios falsos corrían desenfrenados por mi

mente, causando preocupación y miedo. Esto me siguió hasta mi edad
adulta porque nunca recibí el conocimiento de que estaba luchando
contra fuerzas espirituales. No me enseñaron cómo revertir las
emociones temerosas.
Mientras escribo esto ahora, puedo sentir el atractivo de los espíritus
familiares que intentan hacerme retroceder en mis pensamientos. Puedo sentir
el ataque espiritual que intenta hacer que mis pensamientos dejen de escribir
y se concentren en las minúsculas variaciones físicas que estoy
experimentando en mi cuerpo. ¡Pero es una mentira del abismo del infierno,
ya que estoy en excelente estado de salud! El diablo es implacable y nunca
dejará de intentar atacar.
Me enseñaron a temer la enfermedad, la enfermedad y cualquier cosa
anormal en mi cuerpo. De niño escuché comentarios negativos sobre
manifestaciones adversas para la salud. Escuché afirmaciones como: “Si
tiene palpitaciones en el corazón, podría ser un ataque al corazón”, o “Si
tiene dolores de cabeza recurrentes, podría ser un aneurisma”, o “Si tiene un
lunar anormal, es probable que ser cáncer.”
Sabemos que los síntomas médicos pueden manifestarse en nuestros
cuerpos, y algunas de estas situaciones pueden ocurrir. Pero escuché el
peor de los casos cada vez que había un síntoma, incluso si no era un
problema de salud genuino. Las palabras en nuestra casa fueron
exageradas y llevadas al extremo.

Lo que pasa con el diablo es que, aunque te hayas liberado de las

fortalezas, el enemigo intentará atormentarte con lo mismo que
conquistaste para tratar de atraerte de nuevo a tu lucha. La diferencia
para mí ahora es que el enemigo ha sido expuesto, y reconozco sus
mentiras para seducirme de nuevo a la esclavitud. La mitad de la
victoria de la guerra espiritual es reconocer el ataque.

Cuando entré en la edad adulta, no sabía que estaba luchando con

principados. Un desafío de la liberación es no saber que estás en
cautiverio; otra es cuando descubres la esclavitud pero no sabes qué
hacer al respecto. En lugar de arrepentirme y renunciar al miedo, permití
que las mentiras penetraran en mi mente y atormentaran mi alma. Al no
tomar autoridad sobre las mentiras, abrí un lugar en mi alma que los
malos espíritus podían atacar.

Los espíritus malignos tenían el derecho legal de acosar e invadir mi

alma. Recuerde, la Biblia nos instruye: “Sométanse a Dios. Resistid al
diablo, y huirá de vosotros” (Santiago 4:7). Someterse a Dios y resistir al
diablo requiere un esfuerzo consciente. Requieren práctica y
perseverancia.
El apóstol Pablo nos dice: “Pero temo que, como la serpiente con su astucia
engañó a Eva, vuestros sentidos sean de alguna manera extraviados de la
sinceridad que es en Cristo. Porque si el que viene predica a otro Jesús que
nosotros no hemos predicado, o si recibís un espíritu diferente que no habéis
recibido, o un evangelio diferente que no habéis recibido, ¡bien podéis tolerarlo!
(2 Corintios 11:3–4, NVI). Compartí esta escritura en un capítulo anterior porque
habla de recibir enseñanzas y espíritus falsos. Sin embargo, también habla de
los derechos legales. Cuando los corintios aceptaron la falsa enseñanza, le
dieron a “un espíritu diferente” el derecho legal de estar allí. Pablo les dijo: “¡Bien
pueden soportarlo!”. O abrieron la puerta a la falsa enseñanza o no hicieron
nada al respecto.
Es lo mismo si permitimos que el enemigo invada nuestras mentes
o si pecamos pero no hacemos nada para vencerlo. Habilitamos
aquello contra lo que no luchamos, y se convierte en un derecho
legal.
Si no eliminamos el acceso demoníaco, seguiremos siendo atormentados y
atacados por el enemigo. Si no reprendemos los ataques, estamos de
acuerdo con las fortalezas. Las fortalezas no solo se rompen expulsando
demonios. Cambiar nuestros pensamientos y aprender nuestra ciudadanía
del reino son claves para vencer los pensamientos penetrantes. Renovar
nuestras mentes y recibir lo que la Palabra de Dios dice acerca de nosotros
desplazará la voz del enemigo.

El Señor me dijo hace años: “Kathy, si tu mente está llena de Escrituras, no

habrá lugar para el temor”. El miedo es la voz del enemigo. El miedo nos lleva
a pensamientos destructivos, que son muerte para nuestras almas, pero la
Escritura nos lleva a la vida y la paz.
“Tener la mente controlada por la vieja naturaleza es muerte, pero tener la
mente controlada por el Espíritu es vida y paz” (Rom. 8:6, CJB). Somos
responsables de la mayoría de nuestros pensamientos e imaginaciones
vanas que se desbocan. Tenemos una decisión que tomar cuando entran
falsos escenarios, dudas y miedos. ¿Los vas a entretener o los vas a
despedir? ¿Te ocuparás y cambiarás la negatividad, o te concentrarás en
lo que te deprime?

CERRAR PUERTAS

No podemos pelear y batallar efectivamente en el ámbito espiritual si

estamos en pecado o necesitamos liberarnos o recibir perdón. Me
acuerdo de Hechos 19:15, cuando el demonio les dijo a los exorcistas
judíos: “Conozco a Jesús y conozco a Pablo, pero ¿quiénes sois
vosotros?”. No tenían autoridad porque no habían recibido la salvación
y el poder del perdón.
Cuando soltamos el perdón, nos arrepentimos y renunciamos a lugares donde
hemos permitido ataques demoníacos, podemos abandonar nuestra libertad y
destruir el derecho legal del enemigo a acosarnos. Debemos examinar nuestras
vidas y recibir liberación si queremos tener autoridad contra los ataques hostiles.
Cuando vivimos en pecado, tenemos falta de perdón en nuestros corazones,
tenemos una mentalidad derrotada o languidecemos en la falta de oración, abrimos
puertas a la infiltración demoníaca. Donde hay puertas abiertas y puntos de acceso
legales, no tenemos autoridad en el ámbito espiritual. Cuando nos abrimos a través
del pecado, damos lugar al diablo. Recuerde, el apóstol Pablo nos dijo: “No deis
lugar al diablo” (Efesios 4:27). Tenemos derechos legales para subyugar al
enemigo, pero cuando estamos en pecado, renunciamos a la
dominio que Jesús nos dio.

Demonios y ángeles vagan por la tierra. Los ángeles están asignados para
protegernos y guardarnos. Los demonios causan ataques espirituales. Las
entidades espirituales invisibles pueden vernos aunque nosotros no podamos
verlas. El enemigo sabe con qué luchamos y cómo atacarnos. Él sabe
cuándo estamos en pecado y cuándo estamos exudando o cediendo
autoridad. En Lucas 4:34–35, los demonios conocían la autoridad de Jesús y
tenían que actuar según sus mandatos. Lo contrario también es cierto: si no
conocemos nuestra autoridad o la cedemos debido al pecado, hemos abierto
una puerta y dado derechos legales a los malos espíritus. Por lo tanto, no van
a estar atados y restringidos.

El reino demoníaco tiene planes de batalla escritos contra ti. Los

espíritus malignos acechan a tu alrededor, controlan lo que dices y
haces, y utilizan la información que recopilan para presentar pruebas
contra ti ante las jerarquías demoníacas. Debes cortar y desalojar todos
los puntos de acceso al mundo satánico y la infiltración de los ataques
que el enemigo ordena en tu camino.

Usa el fuego de Dios para quemar los planos del infierno en tu contra.
Autoevalúese y permita que el Espíritu Santo lo convenza, corrija y
discipline. Esto lleva a una vida de verdad y amor, de pureza y
honestidad contigo mismo y con los demás. Cuando sacas toda la
basura de tu baúl, puedes ser útil y eficaz para el reino de Dios.

El arrepentimiento y el perdón son estrategias de primera línea para

vivir una vida victoriosa y destruir los puntos de entrada a los ataques y
fortalezas demoníacos. Cuando el pecado y la carne se manifiestan,
debemos romper el acuerdo renunciando, arrepintiéndonos y eliminando
los puntos de entrada legales y las causas fundamentales. Debemos
orar en voz alta y hablar en contra de estas acciones, y mientras nos
perdonamos a nosotros mismos y a los demás, podemos cerrar la
puerta a los ataques demoníacos.

ACUERDO DE RENUNCIA Y ROMPER

El primer paso para conquistar los ataques espirituales es renunciar al pecado ya
las actividades impuras en tu vida. Renunciar se define como repudiar, rechazar,
negarse a poseer, descartar y renunciar a la lealtad.¹ No es suficiente detener las
actividades impías e improductivas y dejar de pecar. Debes ir un paso más allá y
romper el acuerdo legal que estas alianzas han creado en el ámbito espiritual.
¿Cómo haces eso? Debe proclamar en voz alta contra los derechos legales y
las infiltraciones que han creado. Entrega al enemigo los papeles de aviso de
desalojo y dile que se vaya de tu vida. Declara en voz alta que ya no vas a
participar en actividades que te impidan ganar terreno espiritual.

Romper el acuerdo produce liberación. La confesión conduce a la posesión.

Confesar y proclamar tus acuerdos erróneos produce libertad.
Las dolencias emocionales y las fortalezas en la carne y la mente deben ser
liberadas.

Cuando rompo el acuerdo, declaro: “No permito que exista la fortaleza”.

Hablo: “Ato y restrinjo esta acción y manifestación demoníaca en mi vida”.
Cuando proclamo: “Tengo fe y no tengo miedo”, o “soy sumiso y no
rebelde”, anuncio quién soy en Cristo. Comienzo a creer lo que hablo y
decreto. Aflojo fortalezas y obtengo la libertad.

Es una proclamación profética que nos desvinculemos del ataque

demoníaco, las dolencias emocionales y las infiltraciones demoníacas
de nuestras almas. Usa las palabras Rompo acuerdo cuando te
enfrentes a una fortaleza que no quiere ser erradicada de tu alma.
Cuando le ordenas a un demonio que salga, pero no se va, debes decir
en voz alta que rompes el acuerdo con el espíritu.

Ejercicio Profético: Rompiendo Acuerdos Con Fortalezas

Hay poder cuando hablamos y rompemos acuerdos con fortalezas.

Estamos de acuerdo con la fortaleza al no buscar nuestra sanidad y
liberación siendo pasivos, legalistas, estancados o sintiéndonos
derrotados. ¿Dónde no has podido experimentar la victoria total? ¿Qué
causa raíz, derecho legal o dolencia de salud lo está aquejando?
Hablando en voz alta, repita esto varias veces en este momento: "Rompo el
acuerdo con
___________________.” Sigue haciéndolo hasta que sientas una liberación, un
cambio espiritual,
o algo se rompe. Al principio puede estar repitiendo esta oración, pero siga
orando y hablando hasta que sienta poder, autoridad e intensidad en sus
palabras. Cree que recibirás el avance, y después de que sientas una
liberación, asegúrate de seguir diciendo: “Expulso el espíritu de
_______________”—cualquiera que sea el espíritu relacionado con lo que
acaba de romper el acuerdo
con.

ARREPENTIMIENTO

El arrepentimiento es pedirle a Jesús que perdone nuestros pecados. Cuando

nos arrepentimos, necesitamos escudriñar en lo profundo de nuestra alma
para experimentar una profunda tristeza por caminar en desobediencia hacia
nuestro Padre celestial. Reconocemos que estábamos equivocados y que
debemos alejarnos del pecado y de las acciones que no glorifican al Señor. El
arrepentimiento es un acto de admitir el arrepentimiento que sentimos por las
acciones pasadas. Puede manifestarse en los gritos sinceros de nuestras
almas cuando reconocemos nuestros errores.

Nos arrepentimos y pedimos perdón por fe porque sabemos que es lo

correcto y porque deseamos aceptar la reconciliación que Jesús compró para
nosotros en la cruz. Jesús vino a dar su vida por la nuestra. “Porque la paga
del pecado es muerte, mas la dádiva de Dios es vida eterna en Cristo Jesús
Señor nuestro” (Rom. 6:23). Deberíamos haber estado muertos en nuestros
pecados, pero debido a la muerte de Jesús en la cruz, viviremos para
siempre cuando lo aceptemos en nuestro corazón y vivamos para Él.
Arrepentirse significa cambiar y dar la vuelta. A medida que decidimos vivir
para Jesús y aceptar la reconciliación de la cruz, nos alejamos de nuestras
viejas naturalezas y caminos: “…que os despojéis del antiguo modo de vivir
en la vieja naturaleza, la cual está corrompida según los engañosos deseos” (
Efesios 4:22).
 LA FALTA DE PERDÓN: EL PRINCIPAL DERECHO LEGAL PARA
EL ACCESO DEL ENEMIGO

La falta de perdón es el principal derecho legal que tiene el enemigo para

acceder a tu vida. Eso
es el derecho legal detrás de cada fortaleza y acusación demoníaca. Jesús
habló sobre la importancia del perdón. Puso urgencia en el ministerio del
perdón porque sabía que ofrecer y aceptar el perdón cierra la puerta a los
ataques demoníacos. Cuando nuestro corazón guarda rencores, ofensas y
amarguras, no estamos viviendo en paz, amor y unidad. Las puertas
abiertas a la infiltración del enemigo surgen cuando vivimos en contra de la
Palabra de Dios, y no perdonar no se alinea con la Palabra de Dios. Cuando
liberamos el perdón, como lo instruye la Biblia, destruimos la obra del diablo
sobre nuestras vidas.

Esto es lo que Jesús dijo acerca del perdón:

Por tanto, si traes tu ofrenda al altar y allí te acuerdas de que tu

hermano tiene algo contra ti, deja allí tu ofrenda delante del altar y
sigue tu camino. Primero reconcíliate con tu hermano, y luego ven y
presenta tu ofrenda.

—MATEO 5:23–24

Y perdónanos nuestras deudas, como nosotros perdonamos a nuestros

deudores.

—MATEO 6:12

Entonces Pedro se le acercó y le dijo: “Señor, ¿cuántas veces

perdonaré a mi hermano que peca contra mí? ¿Hasta siete veces?

Jesús le dijo: “No te digo hasta siete veces, sino hasta setenta veces
siete”.

—MATEO 18:21–22
La falta de perdón está ligada a cualquier otro bastión demoníaco que
encontremos. Cuando nos involucramos en la guerra espiritual pero no
recibimos el ministerio completo de liberación,
es a menudo porque nos aferramos a la falta de perdón, dándole al
enemigo el derecho legal de acosarnos. Necesitamos perdonarnos a
nosotros mismos y a los demás.

LIBERAR PERDÓN

Jesús murió en la cruz y nos perdonó. Debemos ser una extensión de la cruz y
seguir Su precedente. Extender el perdón no es un sentimiento. Si esperamos
hasta que tengamos ganas, es posible que nunca lo hagamos. Extender el
perdón es una acción de nuestro corazón. Es decir que reconocemos y
aceptamos que Jesús nos perdonó.

Cuando dudamos en extender el perdón, a menudo es porque sentimos que

la otra persona no lo merece. Después de todo, la persona nos lastimó.
Debemos recordar que Jesús nos perdonó a pesar de que le hicimos daño y
pecamos contra Él. Él extendió su gran amor hacia nosotros y, a cambio de
lo que hizo por nosotros, debemos perdonar a los demás, ya sea que
sintamos que lo merecen o no. Es un acto de liberación del amor ágape,
que es el amor incondicional de Dios; es un amor de la voluntad, no
necesariamente de sentimiento o emoción.

RECIBE EL PERDÓN

Cerrar los puntos de entrada demoníacos para que podamos

conquistar las batallas espirituales también depende de que nos
perdonemos a nosotros mismos. Si no podemos perdonarnos a
nosotros mismos, todavía hay falta de perdón en nuestros corazones.
Podemos quedar atrapados en el pasado, con sentimientos de
indignidad, vergüenza, culpa y arrepentimiento. Aferrarnos a
sentimientos improductivos e infructuosos nos lleva a establecer
fortalezas en nuestra vida. Con el tiempo, las dolencias emocionales
para las que no recibimos sanación se convertirán en fortalezas que ya
no sabremos cómo liberar. Los problemas se vuelven mucho más
grandes de lo que nunca pretendimos.
Nuestra libertad debe comenzar con nosotros mismos. La sanidad interior, la
sanación que debe ocurrir dentro de nuestras almas, y la liberación son
procesos que duran toda la vida. Mientras buscamos la
Espíritu Santo a través de la meditación silenciosa, Él revelará los problemas que
debemos abordar, nos ayudará a eliminar los derechos legales y establecerá la
curación donde hay heridas del alma.

Ningún pecado es demasiado grande para que el Señor lo perdone. Sin

embargo, de alguna manera, percibimos que nuestro pecado es peor que
el de los demás. Nos mantenemos en una prisión de vergüenza, culpa y
arrepentimiento como una forma de autocastigo. He ministrado a muchas
personas que no pueden perdonarse a sí mismas. Cuando no se
perdonan a sí mismos, es una forma de castigarse por el pecado que
cometieron contra sus seres queridos. He conocido a muchas personas
que cometieron adulterio y no perdonarse a sí mismos es una forma de
autocastigo por haber pecado contra sus cónyuges. Es una forma de
castigarse a sí mismos ya que sus cónyuges no lo saben. Es un
recordatorio para no volver a pecar.

La buena noticia es que Cristo tomó nuestro castigo sobre sí mismo para
que podamos vivir en libertad y victoria. No podemos vivir en algo que no
tenemos, y cuando nos mantenemos en cautiverio, nos mantenemos
encadenados a nuestros errores del pasado. Cristo murió para que
tengamos vida. Podemos vivir la vida que Él planeó para nosotros y ser
fructíferos para el reino de Dios cuando los grilletes y cadenas del pasado
hayan sido liberados.

Perdonarnos a nosotros mismos es lo más difícil de hacer, pero hay que

hacerlo. En lugar de castigarte repetidamente por tus errores, pídele al Espíritu
Santo que te ayude a superar tus remordimientos y pecados. Pídele que te
ayude a eliminar la autocondenación y caminar en la libertad y la victoria que
Jesucristo compró para ti. Si continuamente te acosas por los errores del
pasado, vives en derrota en lugar de ser el vencedor y conquistador que Cristo
dice que puedes ser. Mi libro Unshackled comparte más sobre el perdón. (Ver el
apéndice.)

Ejercicio Profético: Perdónate a ti mismo y a los demás

Escriba y medite con la ayuda del Espíritu Santo:
• ¿Necesitas extender el perdón a alguien? ¿Quién?

• ¿Con qué necesitas romper el acuerdo, incluidas acciones

específicas, palabras, pecado, culpa, vergüenza, arrepentimiento y
autocondena?

• Haz una lista de los pecados que necesitas perdonarte por haber
cometido.

ABOLIR LAS MALDICIONES DE PALABRAS

Hay poder en las maldiciones verbales pronunciadas sobre nosotros, incluidas

las palabras que hemos emitido de nuestra propia boca. Proverbios 18:21 nos
dice: “La muerte y la vida están en poder de la lengua, y el que la ama comerá
de su fruto”. Ya sea que hayamos hablado las palabras o que alguien más lo
haya hecho, las maldiciones de palabras habladas son poderosas en el ámbito
espiritual. Para romper estas maldiciones, debemos eliminar el acceso
demoníaco, arrepentirnos, perdonar y buscar el perdón. Nuestro intento en este
capítulo es eliminar los puntos de acceso demoníacos. No queremos que el
enemigo pueda encontrarnos culpables de nada. Queremos ser absueltos de
todos los cargos. Y para ser absueltos, necesitamos rescindir lo que se ha dicho
en la atmósfera espiritual.

Cuando la gente habla negativamente de nosotros, se lanzan palabras

de maldición en la atmósfera espiritual. El reino demoníaco puede
encender y activar esas maldiciones de palabras. Pueden bloquear
nuestras profecías e impedir nuestra libertad. Las maldiciones verbales
toman vuelo en la atmósfera espiritual para activar ataques
demoníacos. Satanás es “el príncipe de la potestad del aire” (Efesios
2:2). El reino demoníaco puede activarse a partir de palabras que suben
a la atmósfera espiritual. Los demonios están esperando para activar las
palabras habladas.
Cuando se pronuncian palabras negativas, pueden impedir nuestro destino y
bloquear nuestras profecías. Hay un dicho: “Nos convertimos en quienes nos
rodeamos”. Podemos adoptar una mentalidad de víctima o de derrota y sentirnos
condenados por
Qué dice la gente de nosotros. Sentirnos humildes y derrotados puede
impedirnos avanzar hacia nuestros avances o creer que Dios se moverá
en nuestras vidas como dijo que lo haría.
Cuando escuchas la negatividad acerca de ti mismo durante el tiempo
suficiente, comienzas a creerlo y ataca el núcleo mismo de tu ser. A
medida que ocurren los ataques espirituales, sus profecías se demoran en
manifestarse, y a medida que experimenta una mentalidad de víctima y
derrota, no recibe la libertad que Cristo pretendía.
Las personas con las que tienes desacuerdos pueden lanzarte insultos y
agravios. Es posible que no tengan idea de que el enemigo usa estas palabras
para disuadir tu destino. Cuando se activan las maldiciones verbales de
ofensa, ira, amargura y calumnia, encienden una guerra total en el reino
demoníaco sobre tu futuro.

A menudo no damos crédito a estas palabras como encendedores espirituales,

pero son armas peligrosas que el diablo usa para contraatacar la voluntad de Dios
para nuestras vidas. Cuando no limpiamos la atmósfera espiritual y aniquilamos
estas fuerzas contra nosotros, ocurre una guerra invisible en el ámbito espiritual
que se manifiesta en el ámbito natural.

Ejercicio profético: Oración para rescindir las maldiciones verbales

Es necesario orar sobre la ofensa para mantener una atmósfera clara y limpia a tu
alrededor. Si nunca ha orado contra las palabras de maldición sobre usted, le
sugiero que ahora ore a la defensiva y contraataque las medidas del enemigo
contra usted.

Ato y reprendo toda palabra de maldición pronunciada sobre mí. Ordeno que
todas las activaciones negativas en el reino espiritual sean destruidas y
quemadas por el fuego de Dios. Hablo y decreto cada palabra de maldición que
ha enviado contra mí, mi destino, mis finanzas y mi salud para ser cortados en
el nombre de Jesús. Proclamo que toda palabra maldición a través del chisme y
la calumnia sea abolida en el reino espiritual. En el nombre de Jesús, reprendo
todas las palabras de maldición que se hablan de mí.
 RESCINDIR LAS MALDICIONES DE PALABRAS
AUTOINVITADAS

Podemos maldecirnos a nosotros mismos por lo que decimos. Palabras

simples como “Eso me enferma”, “Me vas a matar por esto” o “Ella me
vuelve loco” son todas maldiciones verbales que le dan al diablo un derecho
legal. Recuerdo estar sentado en una conferencia una vez, y el presentador
estaba hablando de un espíritu de muerte. Específicamente entró en
maldiciones de palabras y lo que decimos, cosas como "Me estás matando",
"Te voy a matar por eso" o "Te vas a morir de risa cuando escuches esto".
Continuó enseñando y luego reprendió y tomó autoridad sobre el espíritu de
muerte. Oró y dijo a la audiencia: “Espíritu de muerte, te ordeno que salgas y
te vayas, en el nombre de Jesús”. Rezó durante un par de minutos y siguió
ordenando a los espíritus demoníacos que se marcharan.

Sentí tres espíritus demoníacos de la muerte abandonar mi cuerpo en

ese instante. Una parte de mí no podía creer que una cristiana llena del
Espíritu que hablaba en lenguas se maldijera a sí misma e invitara a
espíritus de muerte a su vida. Pero no podía negar lo que sentí cuando
esos demonios se manifestaron fuera de mi cuerpo. Cuando se fueron,
supe que los había invitado a pasar porque yo era una de esas
personas que dirían palabras como matar, morir o morir en broma y en
conversaciones informales.

Nuestras palabras tienen tanto poder que ya sea que estemos

caminando en dominio, declarándolas o hablándolas en una
conversación informal, experimentaremos la materialización de ellas.
Debemos arrepentirnos, renunciar y rescindir los efectos de estas
palabras sobre nuestras vidas. (Haremos esto en la sección de
activación profética a continuación).
 ES HORA DE LA ACTIVACIÓN

Renunciemos a los derechos legales que le hemos dado al enemigo de nuestras

almas.
 ORACIÓN DE ARREPENTIMIENTO, RENUNCIA Y
RUPTURA DEL ACUERDO

Padre Celestial, me arrepiento de todas las acciones impías y profanas. Corto y

rompo lazos con todo pecado y palabra maldición expulsada de mi boca. Vengo
contra cualquier poder oscuro que intente infiltrarse en mi suelo y plantar
semillas demoníacas en mi vida. Ato y restrinjo al enemigo para que no tenga
acceso demoníaco a mi vida. Rompo el acuerdo con la falta de perdón, las
maldiciones verbales y todos los hábitos destructivos de mi vida. Renuncio al
pecado en mi vida, a las dolencias emocionales que se han convertido en
fortalezas y lugares que no he edificado y glorificado Tu nombre. Rompo el
acuerdo con los poderes demoníacos que he habilitado debido a mi inactividad
y desobediencia. Te pido perdón, y elijo este día para perdonarme a mí mismo.
Me perdono por todos los pecados, errores, fracasos pasados, veces que he
lastimado y abusado de otros, y todo lo que he hecho ha desatado tinieblas y
maldición en lugar de luz y amor. Lléname, Espíritu Santo, con tu abrumador
amor, paz y bondad. Oro esto en el nombre de Jesucristo, el Mesías. ¡Amén!

ORACIÓN DE IMPARTACIÓN Y ACTIVACIÓN

Espíritu Santo, por favor dame un corazón de perdón y arrepentimiento.

Recibo tu amor y te pido que me llenes abrumadoramente de tu amor para
que pueda extenderlo a los demás. Ayúdame a ser un recipiente de Tu
amor. Te pido, Espíritu Santo, que me ayudes a exudar el fruto del Espíritu
en todo momento. Lléname de amor, alegría, paz, paciencia, mansedumbre,
bondad, fe, mansedumbre y dominio propio.
PROCLAMACIONES PROFÉTICAS (DECLARACIONES DE
FE)
¡Proclamo que estoy caminando por fe y no por vista! ¡Soy un
vencedor! Supero las ofensas en mi contra, y perdono
rápidamente.

Estoy perdonado; por lo tanto, liberar el perdón es una reacción

natural a lo que soy, ya que el Espíritu del Señor vive dentro de mí.

Recibo el amor abrumador del Padre para ayudarme a caminar en

fortaleza, esperanza, integridad y paz. Él es mi sustancia abrumadora y
la fuente de poder de la que saco.

Me someto a la voluntad del Padre para mi vida. Padre Dios,

úsame para impactar a las personas con Tu amor y perdón.

Yo glorifico al Señor en palabras y acciones. ¡Declaro que todo lo

que hago trae gloria y honra a Su nombre!

ACTIVACIÓN ESPIRITUAL

Desarrolla una técnica en la que elijas perdonar. Por ejemplo, cuando la falta de
perdón o la ofensa intentan atacar mi mente, me la imagino corriendo por mi
hombro y bajando por mi brazo. No permito que entre en mi mente y eche
raíces.
Habla y declara sobre diferentes situaciones en tu vida según
corresponda, "Me perdono a mí mismo". Continúe hablándolo hasta
que sienta una liberación emocional, lágrimas o paz.
Reprende las maldiciones verbales que puedas haber liberado en la
atmósfera espiritual. Habla y declara audiblemente: “Toda palabra de
maldición, palabra ociosa y palabra negativa que he hablado, la reprendo y
la rescindo. Ordeno que no afecten mi vida ni la de la persona de quien les
hablé. En el nombre de Jesús, cancelo todo despliegue y asignación
demoníaca que se haya activado como resultado de mis palabras”.

DECLARACIONES DE GUERRA ESPIRITUAL

Ore por la ofensiva, no por la defensiva. Protégete en lo natural y

espiritual pronunciando oraciones y declaraciones de guerra para atar
y restringir toda fuerza maligna en tu contra.

En el nombre de Jesús confino y restrinjo todo despliegue demoníaco

contra mi destino.

Hablo y declaro que ninguna raíz de falta de perdón u ofensa se

implantará en mi alma. Ordeno a los espíritus de enfermedad por falta
de perdón que salgan en el nombre de Jesús.

Ordeno que el espíritu de la ofensa sea atado y restringido

inmediatamente después del despliegue. No entrarás en mi mente ni en
mi corazón. No te permitiré un punto de apoyo en mi vida.

Aniquilo todo poder oscuro que pudiera causar división, lucha y disensión en
mis relaciones Hablo protección sobre mis relaciones.

Reprendo todo espíritu de falta de perdón enviado contra mi mente y mis

emociones. En el nombre de Jesús te ordeno que no completes tu misión.
 capitulo 14

LA PASIÓN DE JESÚS POR LA LIBERACIÓN

LA SALVACIÓN NO ES UNA tarjeta para salir libre de la cárcel.

Cuando aceptamos a Cristo en nuestro corazón, la mayoría de
nosotros lo hacemos porque el evangelio se nos ha presentado de
manera seductora y deseamos venir y conocer al Jesús del que
alguien nos habló íntimamente. Cuando hablamos de la salvación y el
arrepentimiento y la entrega de nuestra vida a Cristo, la gente tiene
prisa por contarte sobre el boleto de ida al cielo que puedes obtener.
Pero no entran en detalles sobre la expiación total de la cruz que ahora
está disponible para usted.
Cuando fui salvo, el mayor impulso que recibí de otros cristianos fue hacerme
orar en lenguas. Sentí mucha presión para recibir mi lenguaje de oración. Ni
una sola vez nadie me dijo que Jesús era el Sanador y el Libertador. He
vivido con el Señor en mi corazón durante treinta y tres años. Me enfermé
como todos los demás y tuve ataduras demoníacas durante años.
Supongamos que estas mismas personas que estaban entusiasmadas con
que obtuviera mi lenguaje de oración hubieran estado ansiosas por hablarme
sobre sanidad y liberación. En ese caso, podría haber vivido mucho más de
esos treinta y tres años en la victoria que en la derrota.

Creo que aceptar a Cristo en nuestros corazones y salvar a las

personas es algo bueno, pero no podemos detenernos ahí.
Evangelizamos en ascensores, centros comerciales y restaurantes. Le
contamos a la gente acerca de Jesús en las esquinas de las calles y en
cualquier otro lugar donde el Espíritu del Señor nos guíe. Pero
entonces, ¿qué sigue?
Siempre traigo mis tarjetas Be Love conmigo cuando evangelizo. Estas
son tarjetas del tamaño de una tarjeta de presentación que imprimí de
manera personalizada para decir: "Un miembro del equipo de Kathy
DeGraw Ministries te amó hoy". Las tarjetas brindan nuestra información
de contacto si necesitan oración adicional, una iglesia a la que asistir o
alguien que los ministre. Hago esto porque Jesús nos instruyó a hacer
discípulos, no a llevarlos a Cristo y dejarlos.

La obra consumada de la cruz se trata de arrepentirse (que es más que decir

que lo sientes; requiere cambiar de dirección, alejarse de su vida anterior y
entregando todo su corazón a Jesús) y deseando servir a Dios y a las personas.
Es hacer avanzar el reino de Dios, amar a Dios y al pueblo, y servir a Dios y al
pueblo. Sin embargo, cuando Jesús fue a la cruz, murió por nuestra sanidad y
liberación física también. Cuando guiamos a las personas a la salvación a
través de Jesús, a menudo fallamos en presentar los otros elementos
importantes que las personas necesitan al comenzar su caminar con Cristo.
Creo que debe haber una progresión de salvación, bautismo en agua, ministerio
de liberación y conexión con una buena iglesia, grupo pequeño o estudio bíblico
lleno del Espíritu. Las personas necesitan el paquete completo para entrar en
una relación con Jesucristo, no solo una tarjeta para salir del infierno.

Recuerdo cuando mi esposo estaba pastoreando y el superintendente de su

distrito le dijo que podía predicar sobre la gracia pero no sobre los demonios. Mi
esposo respondió: “Entonces solo estaría predicando la mitad de los
Evangelios”. Jesús murió para perdonar nuestros pecados, pero también vino
para liberar a los oprimidos. Si le contamos a la gente acerca de la salvación
pero nos quedamos cortos en el resto, solo estamos predicando la mitad de la
Biblia. La gente está interesada en ir al cielo, pero también buscan soluciones a
sus problemas. Desean ser sanados y no tener que preocuparse por
enfermedades físicas. Quieren cambiar, pero no se dan cuenta de que han
estado plagados de rechazo, abandono e indignidad. Por lo tanto, cuando los
conducimos al Salvador, también debemos llevarlos a la solución ya través de
ella.

JESÚS ESTABA TODO ADENTRO

Jesús vino por algo más que la salvación, como vemos cuando citó a
Isaías.

El Espíritu del Señor está sobre mí, por cuanto me ha ungido para predicar
el evangelio a los pobres; Me ha enviado a sanar a los quebrantados de
corazón, a pregonar liberación a los cautivos y vista a los ciegos, a poner en
libertad a los oprimidos; predicar el año aceptable del Señor.
—LUCAS 4:18–19
Jesús no sólo predicó, sino que ministró. Me encanta que Jesús puso
todo de sí mismo en ministrar. Podemos ver eso cuando limpió al
leproso.

Por eso predicaba en las sinagogas de ellos por toda Galilea y echaba
fuera los demonios. Un leproso se acercó a Él, le suplicó y se arrodilló
ante Él, diciendo: “Si quieres, puedes limpiarme”.

Entonces Jesús, movido a compasión, extendió la mano y lo tocó, y le

dijo: “Quiero. Sé limpio. Tan pronto como hubo hablado, la lepra
inmediatamente se fue de él, y quedó limpio.

—MARCOS 1:39–42

Jesús se invirtió emocional, física y espiritualmente. Fue movido a compasión,

extendió Su mano y estuvo dispuesto a limpiar y sanar al hombre con lepra.
Jesús tocó a este hombre con cada parte de Su ser porque liberar a los
oprimidos y sanar a los enfermos era importante para Jesús.

Sin embargo, Jesús estaba tan apasionado por poner todo de sí mismo en la
liberación del reino que también llevó a los discípulos y les enseñó cómo
ministrar. Jesús hizo las cinco cosas más importantes en el ministerio.
Discipuló, predicó, enseñó, sanó y liberó, y lo hizo todo con amor y
compasión. El propósito de la cruz no terminó con la vida eterna con Jesús
en el cielo. ¡Él quiere que caminemos en completa victoria, en cuerpo, mente
y alma! Él vino para que pudiéramos tener vida y tenerla en abundancia
(Juan 10:10), ¡ahora, aquí en la tierra! No tenemos que esperar hasta llegar
al cielo para vivir en abundancia, ser vencedores y tener la victoria. Todo nos
pertenece ahora.

LA EXPIACIÓN
Isaías analiza lo que Jesús proveyó en la cruz y la muerte agotadora
por la que pasó para lograrlo.
Seguramente él llevó nuestro dolor y cargó con nuestros dolores; mas
nosotros le tuvimos por azotado, por herido de Dios y abatido. Pero él fue
herido por nuestras transgresiones, molido por nuestras iniquidades; el
castigo de nuestra paz fue sobre él, y por su llaga fuimos nosotros curados.
Todos nosotros nos descarriamos como ovejas; cada uno de nosotros se
apartó por su camino, mas Jehová cargó en él el pecado de todos nosotros.
Angustiado él, y afligido, no abrió su boca; fue llevado como cordero al
matadero, y como oveja delante de sus trasquiladores, enmudece, así no
abrió él su boca.

—ISAÍAS 53:4–7

Me asombro cada vez que estudio Isaías 53. Estoy completamente

deshecho por lo que Jesús soportó por nosotros. Bajó del cielo y no tuvo
nada de su gloria. Se hizo niño y luego hombre para sufrir por nosotros.
Fue continuamente despreciado y rechazado. La gente lo evitaba
rotundamente. Apartaron sus rostros de Él.
Esta escritura lo describe como un hombre de enfermedad. ¿Podrías pensar
en eso? Era un hombre de enfermedad. Aunque no pudimos ver enfermedad
física en Él, Él llevó nuestras enfermedades físicas a la cruz. Piense en
cómo manejamos estar cerca de personas que están físicamente enfermas y
son contagiosas. Si tosen o estornudan, corremos hacia el otro lado. Sí,
Jesús, despreciado y rechazado por los hombres, tomó nuestra enfermedad,
tocó a un leproso y no dudó en tocar y acercarse a aquellos que
consideraríamos víctimas o contagiosos.

Podemos llevar esto un paso más allá. Algunas personas son

extremadamente sensibles al reino espiritual y pueden sentir cuando las
personas están oprimidas por demonios. Puede ser tentador huir de estas
situaciones, sin querer sentir la opresión de los demás. Sin embargo, si
tienes este don espiritual, oro para que corras hacia ellos, deseando
ayudarlos y liberarlos. Jesús fue el ejemplo perfecto de involucrar todo Su
ser en la liberación de los cautivos.

Era un hombre de enfermedad, tomando nuestra enfermedad y experimentando

nuestro dolor. Nuestras enfermedades y nuestras ataduras emocionales fueron
quitadas de nosotros, puestas en Él y llevadas a la cruz. Cuando llevamos cargas,
preocupaciones y temores, no estamos recibiendo completamente la obra
consumada de la cruz. ¿Por qué poseemos, reclamamos, enfocamos y hablamos
de
algo que nos ha sido quitado? A veces pensamos y hablamos más
sobre nuestras condiciones o diagnósticos médicos que sobre nuestra
creencia de que Jesús puede sanarnos. En lugar de vernos como seres
carnales con cuerpos imperfectos que sufren enfermedades y
aflicciones, necesitamos vernos como seres espirituales,
perfeccionados y hechos a Su imagen. Él sufrió por nosotros para que
no tuviéramos que sufrir.

Ejercicio Profético: Oración por Sanación

¡Declara una oración como la siguiente y comienza a recibir tu sanidad

ahora!

Enfermedad y dolencia, os ordeno que dejéis mi cuerpo y evacuéis las

instalaciones. Hablo y decreto a mi cuerpo para que se alinee con la Palabra
de Dios. Declaro por Sus heridas y llagas que soy sanado. Yo no soy una
victima; soy victorioso Recibo la obra consumada de la cruz con toda
victoria. No estoy derrotado. En el nombre de Jesús, ordeno que se revierta
todo diagnóstico médico y que se desaloje y erradique todo perpetrador
malvado que invada mi alma. Decreto completa libertad, sanidad y
liberación, y recibo la expiación de la cruz en su plenitud. Hablo y decreto
que soy física y emocionalmente sanado y hecho completo. Ordeno que mi
cuerpo y mi mente sean completamente restaurados y fortalecidos. En el
nombre de Jesús declaro que soy sanado y liberado, y recibo mi completa
sanidad y liberación.

Jesús compró nuestra liberación, pero a menudo saltamos de ministerio en

ministerio, tratando de recibir esa liberación de un hombre o una mujer que
está ungido para expulsar demonios en lugar de recibir la liberación de
Jesús. Pero cuando idolatramos a hombres y mujeres, nunca veremos que
se manifieste nuestra liberación. Él fue herido por nuestros crímenes,
pecados y rebelión. Él fue disciplinado por nosotros.
Nuestra esclavitud demoníaca no se debe solo a maldiciones
generacionales, traumas o lazos del alma. La mayor parte de nuestra
esclavitud demoníaca es culpa nuestra. Asimilamos el dolor, el dolor, la
ofensa y el rechazo. Permitimos que las emociones crecieran en más de
lo que deberían tener. El orgullo invadió nuestras almas, el control se
convirtió en una forma de vida y el miedo nos inhibía. Jesús compró estas
mismas cosas que estamos pasando años tratando de liberar. Si nos
enfocáramos en recibir lo que Él compró y Su amor, no tendríamos que
trabajar duro para obtener nuestra liberación. Él fue disciplinado por
nosotros, pero algunos de nosotros nos castigamos a nosotros mismos al
no entregar lo que Él ya llevó a la cruz.

Al estudiar Isaías 53, podemos ver un paquete completo de sanidad y

liberación. Esta fue la obra consumada de la cruz. ¿Por qué no estamos
recibiendo lo que Él ya realizó y manifestó? Arrepentirse por no recibirlo.
¡Declara ahora mismo!

Ejercicio Profético: Oración de Penitencia

Jesús, me arrepiento. ¡Perdóname! Lo siento por no recibir la obra

manifestada de la cruz. Me deshago de la derrota y la mentalidad de
víctima. Me arrepiento por la falta de conocimiento y entendimiento.
Rompo el acuerdo con todo poder demoníaco, mi carne y cualquier
pensamiento y acción que me mantenga en cautiverio. Jesús, Tú viniste
para ser mi rompedor de ataduras. Recibo. Ayúdame a entregarlo todo
a Ti. Declaro que no hay lugar para fortalezas en un ciudadano del
reino, y yo soy un ciudadano del reino. ¡Por lo tanto, la preocupación, el
miedo, la carencia, la pasividad, la desconfianza y todo lo demás debe
irse ahora en el nombre de Jesús!

Toda nuestra iniquidad fue puesta sobre Jesús a la vez. Hay liberación instantánea
y libertad cuando recibimos este mensaje. Hay momentos en que necesitamos
trabajar en nuestra liberación, pero también hay una libertad sobrenatural disponible
cuando recibimos el mensaje en la Biblia. Parte de nuestra liberación es recibir lo
que Él ya tiene
hecho por nosotros. La Palabra es profética, y cuando leemos la
Palabra, la liberación puede manifestarse y se manifiesta porque la
Biblia es un gran libro de libertad. Las transiciones mentales y una
comprensión completa de lo que Él hizo nos ayudarán a capturar la
liberación que Él compró y liberarnos de las cadenas que nos impiden
desarrollar todo nuestro potencial. Esta es la verdad de la Palabra de
Dios; por lo tanto, ¡recibamos algo de liberación ahora mismo!

Ejercicio Profético: Oración de Liberación

Espíritu Santo, recibo la verdad de Tu Palabra, y ahora mismo recibo liberación.

Declaro completa libertad en mi mente, cuerpo y alma. Mi identidad está en
Cristo y acepto lo que la Palabra dice de mí. Confío en Ti, Jesús, para mi
liberación. ¡Le hablo a cada entidad demoníaca que me mantiene en cautiverio,
y te erradico de mi alma por la sangre de Jesús! Declaro que todo plano del
infierno establecido en mi contra es quemado por el fuego de Dios. Restringo los
poderes demoníacos de llevar a cabo asignaciones contra mi destino. Rechazo,
miedo, indignidad y control, te destruyo a ti y al baluarte que has tenido en mi
vida. Intimidación, te ordeno que me sueltes y no entres más en mí. Recibo la
verdad de la Palabra de Dios de que Jesús murió por mis pecados, sanidad,
liberación y fortalezas. Ato y restrinjo a cada hombre fuerte en mi vida, y te digo
que vayas y salgas en el nombre de Jesús. Declaro que a quien el Hijo libera es
verdaderamente libre, y te doy gracias, Señor. Me liberaste, y soy
verdaderamente libre. Hablo y declaro que por las llagas de Cristo soy sanado y
liberado, y mi mente está libre de toda fortaleza y espíritu apremiante. Elimino
todo pecado y ataque demoníaco en mi vida, en el precioso nombre de Jesús,
mi Mesías. ¡Amén!

Apenas puedo pasar del siguiente verso sobre el que voy a escribir. Me
conmueve cada vez. “Angustiado él, y afligido, no abrió su boca; fue llevado
como cordero al matadero, y como oveja que delante de sus trasquiladores
enmudece, así no abrió él su boca” (Isaías 53:7). Fue maltratado, tomó nuestro
castigo, y nunca se quejó. Él no abrió Su boca.

Una palabra y podría haberse salvado a sí mismo, pero eligió soportar

por nosotros. ¡GUAU! ¡Qué perseverancia hasta el final! Él se sometió.
Tomó nuestras palizas. Él podría haber enviado ángeles en misión, pero
no lo hizo. Fue llevado como oveja al matadero. Él sacrificó Su cuerpo
por tu sanidad y liberación. Él no abrió Su boca. Guardó silencio.

Cuando no recibimos expiación, sanidad y liberación, en esencia estamos

diciendo que nada de lo que hizo Jesús importó porque no lo recibimos.
Odio ese pensamiento. Él perseveró cuando pudo haber renunciado. Recibir
lo que Él hizo hace que Su sacrificio valga la pena y sea honorable. No
quiero que mi vida diga que Su sacrificio no importó. Si importa. Siento la
emoción de esto mientras lo escribo. Mi corazón está afligido, no
condenado, por las veces que no lo hago bien. Creo que todos debemos
recordar el sacrificio de Jesús con más frecuencia.

Jesús sufrió tantas injusticias. Lo arrestaron, se lo llevaron y la gente

gritaba: "¡Crucifícalo!". Sus seguidores no protestaban; guardaban
silencio. Algunos incluso estaban alentando estos eventos. No puedo
imaginar cómo se sintió, pero persistió.
Cuando pienso en lo que Él sufrió, pienso en la película La Pasión de
Cristo. La escena que me llega es cuando Jesús está en el poste de
flagelación. Está de rodillas por el dolor y la agonía de haber sido
golpeado. Juan, María y María entran al patio. Jesús los ve y retrocede
para recibir más palizas. No digo que esta escena de la película sea
precisa, pero me encanta lo que transmite: que Jesús sabía lo que tenía
que hacer, y en esos momentos cuando sintió que no podía continuar, fue
su gran amor por nosotros que lo motivó a llevarlo a cabo. No había hecho
violencia, no había engaño en Su boca, pero Él tomó el castigo. ¿Cuántas
veces hay engaño, chisme, calumnia, traición y ofensa en nuestra boca?

Y de nuevo, este versículo me atrapa cada vez. “Sin embargo, agradó al

SEÑOR herirlo; lo ha puesto en aflicción. Si se ofreció a sí mismo como ofrenda
por el pecado, verá descendencia, prolongará sus días, y la benevolencia de
Jehová será prosperada en su mano” (Isaías 53:10). Agradó a Adonai aplastar
a Jesús con la enfermedad y nuestro dolor emocional. Agradó al Padre aplastar
a Su Hijo. ¡Oh mi! Esto no es fácil de comprender en lo natural. Agradó a
Adonai hacer sufrir a Su Hijo, para hacerle una ofrenda por nuestro pecado. No
es sólo un billete de ida a
cielo. Él murió por nuestra sanidad y liberación.

Nuestro Padre ofreció a Su único Hijo por nosotros. Es el poder redentor

resucitado de la cruz. No se detuvo en la cruz. ¡Él resucitó, y ahora ese poder
de resurrección vive en ti! Por lo tanto, dile a tu enfermedad y dolencia que se
vaya. ¡El mismo poder que resucitó a Cristo de entre los muertos vive en ti!

Ejercicio Profético: Oración para Recibir Sanidad y Liberación

¡Ordene que cualquier enfermedad o dolencia que ataque su cuerpo se vaya

ahora en el nombre de Jesús! ¡Expulsa todo espíritu maligno de tu alma y
cuerpo! ¡Recibe tu sanidad!

¡La enfermedad y la enfermedad deben irse! ¡Fuera de mí en el

nombre de Jesús! Rompo el acuerdo con las aflicciones físicas. ¡En el
nombre de Jesús, ordeno a los espíritus de enfermedad que
abandonen mi cuerpo y que surjan milagros creativos! ¡Hablo a mi
cuerpo y digo, sé restaurado y sana en el nombre de Jesús! Ordeno
que vengan la salud y la curación.

Di esto hasta que sientas que ese espíritu se va. Háblele hasta que
sienta un cambio en la atmósfera y algo se mueva o suceda.

Ordeno a todos los perpetradores demoníacos que se vayan ahora en

el nombre de Jesús. ¡Rompo el acuerdo con la pasividad! ¡Rompo el
acuerdo con el miedo! ¡Rompo acuerdo con la opresión demoníaca!
¡Rompo el acuerdo con el rechazo! Rompo el acuerdo con todo espíritu
maligno que ataca mi alma. Digo que el reino espiritual está cambiando
a mi favor. ¡Se acerca la intervención divina! ¡La liberación se está
manifestando! ¡Recibo mi liberación! Mi día de la libertad está aquí!
Creo y recibo en el nombre de Jesús.
Continúe y confíe en que el Espíritu Santo burbujeará y le dará gotas
de lo que necesita orar y hablar.
Mando, decreto, y establezco renovación permanente, cosas buenas, prósperas
aumentan las cosas, las sanidades, la liberación, los milagros y el
discernimiento. Te agradezco, Señor Jesús, que por Tus llagas fui sanado.
No busco mi curación. Estoy caminando en mi sanidad. ¡Cuerpo, manifiesta
el cambio! Mente, ¡renuévate! ¡Demonios, no tenéis control sobre mí! Lo sello
y rezo todo en el nombre de Jesús

¡Sigue hablándolo! ¡Sigue adelante! ¡Lo entendiste! ¡Declararlo! ¡Me

pertenece! ¡Posee lo que es tuyo! Decretar un cambio.

JESÚS MINISTRÓ SANIDAD Y LIBERACIÓN

Jesús no solo compró nuestra sanidad y liberación en la cruz, sino que

cuando estuvo aquí en la tierra, liberó a las personas emocional y
físicamente cuando ministró. La enfermedad puede estar relacionada
con una fortaleza espiritual. Cuando buscamos la curación, también
debemos explorar la opción de una fortaleza demoníaca o una maldición
generacional adjunta a la enfermedad.

Cuando estudiamos los Evangelios, encontramos que Jesús

ministró sanidad y liberación juntos.

Su fama se extendió por toda Siria. Y le trajeron todos los enfermos,

los tomados de diversas enfermedades y atormentados por dolores,
los endemoniados, los convulsivos y los paralíticos, y los sanó.

—MATEO 4:24

Se le acercó un centurión, rogándole y diciendo: “Señor, mi criado está

postrado en casa, paralítico, terriblemente atormentado”.
Jesús le dijo: “Iré y lo sanaré”.
Respondió el centurión y dijo: “Señor, no soy digno de que entres bajo mi
techo. Pero habla solamente la palabra, y mi siervo sanará”.

—MATEO 8:5–8

Cuando llegó la noche, le trajeron muchos endemoniados. Y con su

palabra echó fuera a los espíritus, y sanó a todos los que estaban
enfermos.

—MATEO 8:16

Por la tarde, cuando el sol se había puesto, le trajeron todos los

enfermos y los endemoniados.

—MARCOS 1:32

Así que salieron y predicaron que los hombres se arrepintieran. Y echaban

fuera muchos demonios y ungían con aceite a muchos que estaban
enfermos y los curaban.

—MARCOS 6:12–13

En la Gran Comisión, Jesús mencionó la sanidad y la liberación juntas.

Él les dijo: “Id por todo el mundo y predicad el evangelio a toda criatura.
El que crea y sea bautizado se salvará. Pero el que no crea, será
condenado. Estas señales acompañarán a los que crean: En mi nombre
echarán fuera demonios; hablarán en nuevas lenguas; ellos tomarán
serpientes; si bebieren cosa mortífera, no les hará daño; sobre los
enfermos pondrán sus manos, y sanarán.”

—MARCOS 16:15–18
Siempre me ha parecido interesante que lo primero que Él nos mandó a
hacer es echar fuera demonios. También fue el primer ministerio que
exudaba con sus discípulos. Sin embargo, muchos dejan de lado el mismo
ministerio que Jesús nos ordenó hacer. No podemos tener un ministerio de
sanidad sin liberación. A medida que estudiamos la vida de Jesús, la sanidad
y la liberación van juntas. Y si vamos a ser como Jesús, y lo somos,
entonces debemos lanzar este ministerio juntos como lo hizo Él.

ES HORA DE LA ACTIVACIÓN

Oremos para recibir todo por lo que Jesús murió: perdón, sanidad
y liberación.

ORACIÓN DE ARREPENTIMIENTO, RENUNCIA Y

RUPTURA DEL ACUERDO

Me arrepiento de la falta de conocimiento y de cualquier lugar en el que

haya sido legalista o ignorante en mi forma de pensar. Renuncio a
cualquier falsa enseñanza y ociosidad que haya tenido al creer en la
sanidad y la liberación. Me arrepiento de no permitir que el Espíritu Santo
me hablara proféticamente de las Escrituras y me convenciera de la
verdad. Rompo el acuerdo con las tendencias y pensamientos carnales.
Me arrepiento por no dejar espacio para ser enseñado más del Espíritu
Santo. Hablo y decreto que soy enseñable. Derroco todo orgullo en el
nombre de Jesús.

ORACIÓN DE IMPARTACIÓN Y ACTIVACIÓN

Jesús, recibo la plena expiación de la cruz. Te agradezco por morir por mis pecados
para que yo pudiera ser perdonado y vivir contigo en el cielo. me
arrepiento del pecado. Rompo el acuerdo con el pecado, las
adicciones, el trauma y las acciones y motivos incorrectos. Jesús, te
pido que entres en mi corazón. Deseo cambiar y vivir mi vida para Ti.
Creo en la plena expiación de la cruz. Recibo la sanidad y la liberación
que compraste para mí. Ayúdame a servirte y orientarme al reino. ¡En
el nombre de Jesús, amén!

PROCLAMACIONES PROFÉTICAS (DECLARACIONES DE

FE)

Recibo sanidad física en mi cuerpo. Cuerpo, te ordeno que te alinees

a la Palabra de Dios y entres en completa salud.

Creo y recibo sanidad interior y liberación en mi alma. Ordeno que mi

mente, voluntad y emociones se liberen y que me apresure a recibir mi
liberación.

Creo que la sanidad y la liberación van de la mano, y buscaré el

conocimiento y la manifestación de ambos en mi vida.

Vivo mi vida para Jesús y la glorificación y edificación de Su nombre.

Exalto al Señor con mis palabras, acciones y vida. Señor, mi vida

es tuya. Me entrego completamente a Ti.
ACTIVACIÓN ESPIRITUAL
Activa tu sanación. ¿Dónde necesitas recibir sanidad? Lea escrituras
de sanidad, escriba una declaración y comience a creer en la
manifestación completa de su sanidad.

Activa tu liberación. ¿Qué fortalezas han resistido el desalojo en tu

vida? Rompe el acuerdo con las fortalezas. Diga y hable en voz alta:
"Rompo el acuerdo con la fortaleza de [insertar nombre], y les ordeno
que se vayan en el nombre de Jesús".

Echar fuera demonios. Mientras ora por las personas y ordena que surja la
curación, expulse a los espíritus demoníacos correlativos que los atacan y los
enferman.

DECLARACIONES DE GUERRA ESPIRITUAL

Ordeno a cada espíritu demoníaco que ha estado dormido y dormido

dentro de mí que me libere y se vaya ahora en el nombre de Jesús.

Ato y restrinjo la entrada de demonios en mi alma debido al

pecado. Cuando peco, me arrepiento rápidamente y no dejo
puerta abierta al enemigo. Cancelo y anulo estrategias
demoníacas en mi contra.
Venzo cada ataque del enemigo. Declaro que soy un vencedor y los
malos espíritus no pueden atormentarme.
En el nombre de Jesús, ordeno que cualquier enfermedad o dolencia
que intente invadir mi cuerpo se vaya ahora, y cualquier diagnóstico
médico o condición que intente manifestarse en mi cuerpo que cese su
asignación ahora.

En el nombre de Jesús llamo a todo espíritu maligno de aflicción

contra mi vida. ¡Soy un vencedor y victorioso!
 Capítulo 15

ACTIVACIÓN PROFÉTICA

PERMÍTANME compartir un poco más sobre esa temporada en mi vida

cuando sentí que el Señor me guiaba a operar en lo profético. Como escribí
anteriormente, me asociaría con el Espíritu Santo cuando se trataba de
operar en la mayoría de los dones del Espíritu, pero cuando se trataba de
liberar lo profético, me contuve porque había visto que se abusaba de lo
profético. La gente iría a una persona profética por una palabra en lugar de
ir a la oración y aumentar su relación con el Señor para escuchar de Él.
Querían la salida fácil: que alguien les hablara en lugar de invertir y pasar
tiempo con el Señor.

El Señor estaba tratando de llamar mi atención y activar el llamado profético

dentro de mí. Me instruyó durante mi tiempo de oración para hacer un viaje
ministerial fuera de la ciudad con mi equipo. Ahora, eso puede parecer
normal para una persona en el ministerio, pero tuve que confiar en el Espíritu
Santo para cada movimiento. Reveló el lugar —una ciudad y un estado— en
el que íbamos a proceder. A medida que nos acercábamos a la ciudad,
tuvimos que asociarnos con el Espíritu Santo para saber a dónde ir y qué
hacer. No sabíamos Sus intenciones para nosotros. Primero lo escuché decir:
“Sube”, y me llevó a un versículo de Deuteronomio. Buscamos edificios en los
que pudiéramos subir y ver la ciudad. Nos daría diferentes direcciones a
seguir, tales como, "Ir a esta iglesia", "Encontrar un edificio redondo" (sí,
había un edificio redondo), "Conducir a lo largo de la costa", y otras
instrucciones. Mientras seguíamos sus instrucciones, nos llevaría a más
revelación, nos encontraríamos con personas por las que orar, u oraríamos
por esa región. Estuvimos cuarenta y ocho horas enteramente guiados por la
guía del Espíritu Santo, incluyendo dónde conseguir gasolina, comer y
dormir.

A través de sus instrucciones durante este viaje, el Espíritu nos llevó a

conectarnos con un pastor local que terminó siendo un apóstol profético. El
apóstol me preguntó si yo era profético y le respondí que sí. Pero él no sabía
que apenas estaba comenzando a profetizar y que no había abrazado
completamente mi llamado profético. Me invitó a su iglesia al día siguiente para
profetizar sobre su congregación. Nunca antes había profetizado sobre una
asamblea entera. Pero supe a través de la oración, el discernimiento y la serie
de eventos por los que el Espíritu Santo nos guió, que el Señor
me había traído a esta iglesia, así que salí con fe.

Terminé profetizando sobre unas setenta personas, y él me llamó al día

siguiente y me dijo que todo lo que dije era exacto. Sin embargo, no se detuvo
ahí. Me estiró y dijo: “Llamemos a un par de profetas y animémoslos”. Estos
profetas habían estado ejerciendo el oficio de profeta durante cuarenta años y,
para ser honesto, pensé: “¿Quién soy yo para profetizar a los profetas de la
antigüedad?”. Solo tenía cuarenta años y profetizaba a profetas que habían
estado en el ministerio mientras yo vivía. No obstante, él los llamó, y yo
profeticé. Me temblaban las botas, pero ambas profecías eran precisas y los
profetas fueron bendecidos. Incluso me llamaron cuando una palabra se
manifestó en tres días.

Estaba fuera de mi zona de confort, pero tenía que ser empujado. Hubiera
retrasado el llamado profético en mi vida aún más si no hubiera sido por estar
estirada. Necesitaba lo que yo llamo campo de entrenamiento profético. El
Señor verificó lo que estaba experimentando a través de las Escrituras,
acciones proféticas, libros y canciones, lo que estaba haciendo en esa
temporada de mi vida para activar lo profético. Algunas personas piensan que
lo profético simplemente debe fluir, que es un don para ser liberado
sobrenaturalmente, y si bien eso puede ser cierto, a veces es necesario activar
el don. Timoteo incluso nos dijo que aviváramos el don dentro de nosotros.
(Véase 2 Timoteo 1:6.)

Jesús nos dijo que hiciéramos discípulos. (Véase Mateo 28:19.) El

discipulado proviene de alguien que camina a nuestro lado para ayudarnos a
liberar los dones que Dios nos ha dado. Me gusta describirlo como hacer la
vida juntos y recibir una patada espiritual para ponerte en marcha. Hay
momentos en los que necesitamos ser empujados y propulsados al siguiente
lugar en nuestro caminar espiritual. La inseguridad y la intimidación son dos
culpables que sofocan nuestros dones y nos hacen dudar en dar un paso
adelante.

Cuando tenemos supervisión, tutoría y aliento proféticos, nos impulsa a dar un

paso adelante y liberar lo que Dios nos ha ungido para hacer. Me gusta llevar a
la gente a mi lado y resaltar sus dones. Cuando estoy entrenando a un
miembro del equipo o interno, el Espíritu Santo a menudo me dice que tienen
una palabra profética para liberar. Les diré, y la mitad del tiempo, estaban
reflexionando sobre algo, pero dudaban en publicarlo por temor a estar
equivocados. Otras veces no tenían idea de que había algo en ellos. Sin
embargo, cuando se detienen, oran y se asocian con el Espíritu Santo, surge
algo y son vivificados para discernir.

Así como necesitamos asociarnos con el Espíritu Santo, a veces necesitamos

asociarnos con una persona que ha estado allí antes y puede ayudarnos a sacar
algo de nosotros.
Hasta que sepa y pueda escuchar la voz del Espíritu Santo con claridad y
confianza, ¡Él puede usar a una persona profética para sacar de usted lo que
puso dentro de usted! ¡El reino de Dios está dentro de ti! ¡Todo lo que
necesitas está dentro de ti! ¡Tienes que soltarlo! La confianza y la audacia no
son algo que todos tengan. Por lo tanto, que alguien crea en ti y en lo que el
Espíritu del Señor ha puesto en ti es beneficioso, tanto para ti como para la
persona que recibe lo que tienes para dar. Como escribí anteriormente, Jesús
nos ha llamado a hacer discípulos, y parte de eso es equipar y activar a las
personas, mostrándoles cómo moverse en el Espíritu e incluso
permitiéndoles cometer errores.

Este libro fue escrito para que pudieras ser activado. Mi objetivo ha sido
impulsar y liberar su destino, agitar sus dones y darle la confianza y la audacia
para hablar y dar un paso al frente. En la sección de activación profética de
cierre de cada capítulo, he publicado ejercicios y decretos espirituales dirigidos
por el Espíritu Santo.

Quiero que el Espíritu Santo te enseñe de la misma manera que me ha

enseñado a mí. Hace años aprendí a confiar y confiar en el Espíritu Santo
como mi mejor amigo. Aprendí a dar un paso atrás, respirar y permitir que
Él me guiara para ministrar a las personas. No quiero hablar o actuar a
menos que Él me instruya.

Sé que tú también deseas la dirección, sabiduría, instrucción e

impartición del Espíritu Santo. ¡La idea detrás de estos ejercicios y
aplicaciones prácticas fue capacitarte para confiar en Él y confiar en que
Él te hablará y te guiará también! Para mí fue un viaje de dos años,
boca abajo en la alfombra ante el Señor, para conocer al Padre, al Hijo
y al Espíritu Santo. ¿Cómo será tu viaje? El Espíritu Santo puede ser su
amigo más confiable. Si te saltaste las activaciones al final de cada
capítulo mientras leías este libro, quiero animarte a volver y hacer cada
activación profética. Te llevarán más allá del conocimiento a la
aplicación.

Tienes un destino que solo tú puedes cumplir y necesitas

completar tu destino. Dios te necesita para lograr tu destino, y las
personas en las que influirás te necesitan para cumplir tu destino.
ES HORA DE LA ACTIVACIÓN
Hagamos juntos una última sesión de activación. Además, quiero
invitarte a revisar mis cursos electrónicos en
kathydegrawministries.org para activarte aún más en la guerra
profética, espiritual y la liberación.

ORACIÓN DE ARREPENTIMIENTO, RENUNCIA Y

RUPTURA DEL ACUERDO

Se produce un cambio espiritual y la libertad se manifiesta cuando

oramos en voz alta. Hablar hace que nuestra fe aumente, y cuando los
espíritus malignos escuchan nuestras declaraciones, su actividad debe
cesar a medida que exudamos nuestra autoridad. Pronuncie esta
declaración de oración en voz alta:

Me arrepiento y renuncio a toda falsa enseñanza, legalismo y creencias y

prácticas religiosas que no se alineen con la Palabra de Dios. Me
arrepiento de cualquier idea falsa y mentalidad equivocada que tuve sobre
el reino de Dios, las entidades demoníacas o la guerra espiritual. Rompo
con las fortalezas que me han inhibido y con mis pensamientos y
tendencias carnales. Someto mi alma y mi carne al Espíritu Santo. Pido al
Espíritu Santo que entre y me convenza y me corrija. Renuncio a toda
palabra que no edifique que hablé en el reino de los espíritus por mi falta
de conocimiento y entusiasmo por las cosas del Señor. Reprendo,
renuncio y me arrepiento de todas y cada una de las actividades y lugares
impíos que actué en mi carne debido a las heridas. Hablo y decreto que
soy liberado por la sangre de Jesús, y recibo plenamente la reconciliación
pagada por mí por Jesús en la cruz. ¡En el nombre de Jesús, amén!

ACCIÓN PROFÉTICA A LA ACTIVACIÓN

Nuestras palabras son asignadas proféticamente y obtienen resultados
espirituales. Cuando profetizamos y declaramos en la atmósfera espiritual,
creamos un cambio divino en
nuestras circunstancias. Nuestra fe se activa al creer y escuchar lo que
acabamos de liberar a la atmósfera. Expresar nuestra fe y nuestros decretos
proféticos es una forma de liberar y activar lo profético que llevamos dentro. El
diablo odia cuando proclamamos nuestra fe. Al hablar, estamos haciendo lo que
yo llamo deberes. Los espíritus malignos monitorean nuestras actividades y
saben cuándo estamos orando y hablando de fe versus miedo. Pueden
mantenerte estancado porque tienen el derecho legal de hacerlo cuando no
estás siendo un guerrero. Hablar proclamaciones proféticas es profetizar sobre ti
mismo lo que quieres que suceda. Cambie sus circunstancias rezando la oración
de impartición y activación audiblemente. Las proclamaciones proféticas y las
declaraciones de fe en cada capítulo se pueden marcar fácilmente como
referencia para orar con regularidad.

ORACIÓN DE IMPARTACIÓN Y ACTIVACIÓN

Ore esta oración en voz alta con el corazón y la mente para recibir lo
que está siendo liberado del cielo.

Padre Celestial, gracias por enviar el Espíritu Santo. Recibo esta enseñanza
y voluntariamente la aplico a mi vida. Ayúdame a caminar en el Espíritu. Te
agradezco por un espíritu renovado. Te agradezco por la nueva impartición y
activación. Te invito a entrar, Espíritu Santo. ¡Espíritu Santo, úsame!
¡Asociate conmigo! ¡Quiero más de ti! Elevo mis expectativas por la
manifestación del Espíritu en mi vida. Activo lo profético dentro de mí a través
de Tu Espíritu. Guíame para seguir aumentando y liberando. Te agradezco,
Espíritu Santo, por Tu amor por mí.

PROCLAMACIONES PROFÉTICAS (DECLARACIONES DE

FE)
Profetiza sobre ti mismo y aumenta tu fe liberando estas
proclamaciones proféticas audiblemente en la atmósfera espiritual.
Profetizo y hablo a la existencia que activaré lo profético dentro de
mí. Me asocio voluntariamente con el Espíritu Santo en todo lo que
hago.

Libero palabras proféticas con fluidez y precisión. Confío en el Espíritu

Santo para que me dé palabras de sabiduría, palabras de conocimiento
y palabras proféticas para hablar y edificar, animar y exhortar a otros.

Lucho en el ámbito espiritual desde la obra consumada de la cruz,

sabiendo que Jesús lo logró todo por mí. Me asocio con el Espíritu
Santo cuando necesito orar y declarar para atar y restringir las fuerzas
demoníacas o proclamar y pedir bendiciones del cielo.

Yo hablo y mis palabras son proféticamente asignadas y dirigidas para

acertar en un resultado. Espero un cambio espiritual cuando hable. Proclamo
que lo que hablo en lo natural debe manifestarse en lo natural y espiritual.
Busco al Espíritu Santo para la unción profética de hablar según la voluntad
de Dios y la palabra de Dios.

Declaro que permitiré que el Espíritu Santo me guíe en mis operaciones

diarias. Buscaré el Espíritu Santo antes de tomar decisiones en lo natural.
Seré obediente y disciplinado a las instrucciones y convicciones del Espíritu.

¡Espíritu Santo, ven sobre mí ahora con fuerza y poder! ¡Espíritu

Santo, lléname hasta rebosar!
ACTIVACIÓN ESPIRITUAL
La activación puede venir de forma natural o sobrenatural. Cuando practicamos
lo que aprendemos, podemos aumentar la aceleración de lo que recibimos.
Nuestra fe crece a medida que implementamos lo que aprendimos. Activa lo
aprendido practicando los tres ejercicios de guerra espiritual. Los ejercicios no
tienen que ser completados todos a la vez. Te sugiero que pruebes uno por un
tiempo y luego pases al siguiente. Pruebe la activación con algunos amigos, un
grupo pequeño o en su tiempo de meditación.

Practique participar en la guerra proféticamente dirigido por el Espíritu.

Piensa en una situación que estés experimentando que necesite un
avance sobrenatural. Entra en la presencia de Dios y espera que el
Espíritu Santo te revele la estrategia de oración para lograr tu avance.

Busque el Espíritu Santo para obtener instrucciones para su vida y

ministerio para el próximo año. Pasa tiempo en oración, ayuno,
soledad y descanso en su presencia. Escribe lo que Él te habla.
Espera que Él te revele qué dirección quiere que tomes y cómo llegar
allí.

Aumente sus sentidos espirituales y discernimiento al tener un fuerte

tiempo y práctica devocional. Sea diligente en hacer de la adoración, el
estudio de la Biblia y la oración parte de su rutina diaria. Permanecer en
un lugar de amor y Su presencia viene de estar con Él. A veces no
escuchamos del Espíritu Santo porque no hemos estado con Él para
escuchar de Él.

DECLARACIONES DE GUERRA ESPIRITUAL

Ore por la ofensiva, no solo por la defensa. Protégete en lo natural y
espiritual pronunciando oraciones y declaraciones de guerra para atar y
restringir toda fuerza maligna en su contra. Vivir una vida en asociación
con el Espíritu Santo en oración lo ayudará a vencer los ataques de
guerra. Orar intensas declaraciones de guerra con autoridad y poder y
conocer tu identidad en Cristo dará un poderoso golpe en el reino
espiritual. Levántate y muévete en tu tiempo de oración. Orar de pie, si
puedes, te ayudará a intensificar tu vida de oración y te involucrará
emocional, espiritual y físicamente. Repite las declaraciones tres veces
cada una hasta que ganes fuerza y autoridad. Cada vez que las ores,
deberías sentir que surge una oración más intensa. Después de que te
sientas cómodo orando estas oraciones, te animo a que escribas tus
propias oraciones de guerra contra tu situación. Mi libro SPEAK OUT le
enseñará cómo escribir oraciones de guerra basadas en el conocimiento
natural, las percepciones proféticas o las Escrituras. (Ver el apéndice.)

En el nombre de Jesús aniquilo y aprendo en el espíritu toda fuerza

oscura que venga en contra de mi destino.

Reprendo al devorador, y les digo que quiten sus manos de mis

bendiciones. Invoco mi aumento. Invoco revelación profética para
recibir abundancia financiera. Proclamo que me llegan ideas
creativas y estratégicas, y ato y reprendo a las fuerzas demoníacas
para que no vengan en contra de mis éxitos y victorias.

Tomo autoridad sobre todo espíritu maligno en mi línea generacional, todo

espíritu familiar y territorial, y todo espíritu que intente venir en contra de mi
ministerio, carrera y negocio. Digo que los patrones, ciclos y estaciones del
pasado no serán reiterados. Aplico la sangre de Cristo en todo lo que pongo
en mis manos.

Le ordeno al espíritu de muerte y destrucción sobre mi salud y mi cuerpo

que se vaya ahora en el nombre de Jesús. Decreto que mi sanidad se
está manifestando por lo que Jesús hizo por mí. ¡Cuerpo, sé completo!
¡Baja por enfermedad! Ataques demoníacos contra mi salud, sé destruido
ahora por la sangre de Jesús.
¡Hablo y decreto que todo espíritu maligno que me ha plagado
durante años se vaya ahora! ¡Le han entregado papeles de aviso
de desalojo! ¡Salir! ¡Cancelo sus despliegues! ¡Digo que soy
bendecido!
Los espíritus que atan la mente que me han atormentado y causado
trauma en mi vida, dejan de existir en el nombre de Jesús. Desistir de
su encargo. Le ordeno a mi mente que no esté plagada de miedo,
ansiedad, estrés, preocupación o depresión. Hablo y decreto que estoy
libre del campo de batalla en mi mente y que tengo la victoria sobre
todas las cosas en el nombre de Jesús. Amén.
 PALABRA PROFÉTICA DE CIERRE

TU VIDA ES una plataforma para el Espíritu Santo. El mismo Espíritu de Dios

ha elegido operar a través de ti y en ti. Él es santo. Él te ama tanto. Él anhela
asociarse contigo y vivir la vida contigo, no solo en el cielo sino aquí en esta
tierra. Él no quiere que la primera vez que lo encuentres sea en el cielo. Él
quiere fluir a través de ti ahora, fluir a través de ti proféticamente. El Espíritu
Santo está aquí para asociarse contigo, para ser tu amigo, tu consuelo, ese
lugar de paz y tu Consolador. El Espíritu Santo también está lleno de poder,
poder para expulsar demonios, sanar a los enfermos y vencer la guerra
demoníaca. Confia en el. Confía en Él cuando no puedas verlo o sentirlo.
Confía en Él ahora, incluso antes de conocerlo realmente. Permita que Él se
mueva a través de usted. Tienes una nueva tarea aquí en la tierra, una de
cumplimiento Conmigo, con el Espíritu Santo. Permítele el acceso sin
restricciones. Permítele que se salga con la suya. Ríndete a Él. Sucumbir a
Él. Recibe revelación de Él y cree que escuchas de Él. Él tiene un camino
para ti, un camino que no puedes comprender. Necesita total confianza y
dependencia en Él. Necesitas confiar en Él con todo lo que hay en ti. Tu vida
es Su plataforma. Él puede llegar a la gente a través de ti. Tienes que confiar
en Él. Confía en Él con lo que puedes ver y con lo que no puedes ver y
entender. Permítele consumir cada parte de tu ser. Conecta tu espíritu con el
Espíritu Santo. Juntos tienen grandes cosas que lograr. Él te llevará a un
lugar de paz y convicción. Abraza la convicción; trae cambio y aceleración en
su caminar espiritual. Tienes un largo camino por recorrer, uno que he
trazado para ti, ahora hazlo con el ayudante más grande que te dejé,

OBSERVACIONES FINALES DEL AUTOR

Eres una plataforma para el Espíritu Santo. Él ha sido mi mejor amigo, y deseo
que Él sea tu mejor amigo. Espero que te hayas acercado más a Él a través de
este
libro. Vive tu vida para Él. Permítale orquestar y dirigir cada paso.
Invítelo a ordenar su día y a ser su mentor. Pasé dos años de mi vida
postrado en la alfombra, para que Él me enseñara e instruyera. El único
arrepentimiento que tengo es todo el tiempo que no me rendí a Él ni
estuve en Su presencia. Ruego que no se arrepienta de asociarse con
Él.

—KATHY
 BIOGRAFÍA

KATHY DEGRAW ES una ministra de liberación profética, liberando el amor y

el poder de Dios para encender y activar a las personas, liberar destinos
proféticos y liberar a las personas de la esclavitud del enemigo. Es la
fundadora de Kathy DeGraw Ministries y K Advancement LLC. Viaja
internacionalmente, habla en conferencias y lleva sus escuelas de enseñanza
por todo el mundo.

Kathy presenta un programa de podcast llamado Guerra Espiritual

Profética. Kathy es una voz profética y escritora de Elijah List, la
revista Charisma, Prophecy Investigators y la revista GODSPEED.
Ha publicado varios libros, incluidos Unshackled, Discerning and
Destroying the Works of Satan y SPEAK OUT.
Está casada con su esposo, el pastor Ron. Tienen tres hijos: Dillon, Amber (y
yerno, Josh) y Lauren (y yerno, Alex). Su cachorro golden retriever, Shiloh, es
un gran compañero y se sienta a su lado mientras escribe.

Póngase en contacto con Kathy en:

kathydegrawministries.org

correo electrónico: admin@degrawministries.org

Podcast de guerra espiritual profética

https://www.charismapodcastnetwork.com/

espectáculo/proféticoguerraespiritualpodcast
 Facebook: Kathy De Graw

https://www.facebook.com/kathydegraw
 Apéndice

RECURSOS ADICIONALES

Pódcast

https://www.charismapodcastnetwork.com/show/propheticspiritualwarfarepodcas

cursos electrónicos

https://www.charismacourses.com/collections?category=kathy-
degraw o www.kathydegrawministries.org

Libros

Sin grilletes: rompiendo las fortalezas de tu pasado para recibir la versión

completa
Liberación (Bloomington, MN: Libros elegidos, 2020)

Discernir y destruir las obras de Satanás: su guía de liberación para Total

Libertad (Shippensburg, PA: Destiny Image, 2018)

HABLA: Liberando el poder de declarar la oración (Lake Mary, FL:

Casa de la Creación, 2017)

¿Quién está hablando? Discerniendo la fuente que se infiltra en tus

pensamientos (np: K Publishing, 2018)

Proclamaciones proféticas: activando el Reino de los Espíritus para que opere a

tu favor
(np: Publicaciones K, 2017)
 NOTAS

CAPÍTULO 4

LA GUERRA ESPIRITUAL ES AUDIBLE

1. American Dictionary of the English Language, sv “say”, consultado

en enero 26 de febrero de 2021,
http://webstersdictionary1828.com/Dictionary/say.

CAPÍTULO 5

CAMINAR EN DOMINIO

1. English World Dictionary, sv “autoridad”, consultado el 26 de

enero de 2021, http://world_en.enacademic.com/5576/autoridad.
2. Blue Letter Bible, sv “radah”, consultado el 27 de enero de
2021, https://www.blueletterbible.org/lang/lexicon/lexicon.cfm?
Strongs=H7287&t=KJV.

CAPÍTULO 6
 CONSTRUYE UN CORAZÓN DE GUERRERO

1. American Dictionary of the English Language, sv “reverencia”, accedido

27 de enero de 2021,
http://webstersdictionary1828.com/Dictionary/reverence.

2. Merriam-Webster, sv “veneración”, consultado el 27 de enero

de 2021, https://www.merriam-
webster.com/dictionary/veneration.

3. Merriam-Webster, sv “filial”, consultado el 27 de

enero de 2021, https://www.merriam-
webster.com/dictionary/filial.

4. "Definición del diccionario KJV: Revere", AV1611, consultado el 27

de enero de 2021, https://av1611.com/kjbp/kjv-dictionary/revere.html.
5. “El poder de 'Te amo' de papá”, Centro Nacional para la
Paternidad, consultado el 27 de enero de 2021,
https://fathers.com/featured-resource-center-pagina/el-poder-de-te-
amo-de-papa/.

6. Blue Letter Bible, sv “yashab”, consultado el 27 de enero de

2021, https://www.blueletterbible.org/lang/lexicon/lexicon.cfm?
Strongs=H3427&t=KJV.

7. Blue Letter Bible, sv “luwn”, consultado el 27 de enero de

2021,
https://www.blueletterbible.org/lang/lexicon/lexicon.cfm?
Strongs=H3885&t=KJV.

CAPÍTULO 9
CONQUISTA CADA PENSAMIENTO
1. Kathy DeGraw, “Cómo proteger tus pensamientos del enemigo”,
Charisma, 10 de febrero de 2016,
https://www.charismamag.com/spirit/spiritual-warfare/25548-cómo-guardar-
tus-pensamientos.

CAPÍTULO 10

REPRENDIR Y EXPONER ASIGNACIONES DEMONÍACAS

1. Merriam-Webster, sv “ransack”, consultado el 28 de enero

de 2021, https://www.merriam-
webster.com/dictionary/ransack.

2. American Dictionary of the English Language, sv “centinela”,

consultado 28 de enero de 2021,
http://webstersdictionary1828.com/Dictionary/sentinel.

3. Blue Letter Bible, sv “pythōn”, consultado el 28 de enero de

2021, https://www.blueletterbible.org/lang/lexicon/lexicon.cfm?
Strongs=G4436&t=KJV.

CAPÍTULO 13

ACUERDO DE RUPTURA

1. American Dictionary of the English Language, sv “renunciar”, consultado

29 de enero de 2021, http://webstersdictionary1828.com/Dictionary/rounce.