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Daniel Hernández Maestre ID 0000232734 13/04/2021

La Energía del Planeta

La energía es el motor de la sociedad y del mundo en el que vivimos. Sin embargo, en los

últimos años, la obtención de esta energía, que suele ser de combustibles fósiles, puede no ser la

más adecuada, resultando en un impacto ambiental muy grande. Existen diversas formas de

transformar movimiento y otros tipos de energía en la energía que necesitamos, sin necesidad de

petróleo o procesos de extracción destructivos. La expectativa es que por medio del principio de

piezoelectricidad se podría generar gran parte de la electricidad que mueve la sociedad y,

además, un impacto positivo en el cuidado del planeta. A través de la ingeniería se pueden

diseñar, e implementar sistemas basados en estas formas de transformación de la energía.

El principal objetivo de las personas es poder transformar la energía en electricidad, por

lo tanto se es preciso proponer formas de transformar energías alternas en electricidad. Lo que

caracteriza estos sistemas es que buscan ser prácticos, efectivos, de bajo costo, y mezclarse con

el día a día de las personas para aprovechar al máximo toda energía. La clave para la efectividad

y el aprovechamiento de la energía está en minimizar las disipaciones de ésta, o bien usarlas a

favor. En nuestras tareas diarias producimos y empleamos energía que podría ser aprovechada,

sin mencionar aquellas presentes en el ambiente. Por lo que a través de la piezoelectricidad se

espera poder usar toda energía a favor.

Piezoelectricidad

La piezoelectricidad combina la tensión mecánica con la electricidad, con este fenómeno

se abarcan varias áreas de la física, pero para hablar en términos simples y lo pertinente para

entender de manera general este principio; solo se tratarán la tensión mecánica y la electricidad.

Para explicarlo mejor; la piezoelectricidad son las cargas eléctricas que se acumulan en ciertos
cuerpos sólidos al aplicárseles una presión mecánica. Al igual que en el electromagnetismo, esta

se puede tratar viceversa: una carga eléctrica puede generar una respuesta mecánica.

Fundamentos de la piezoelectricidad

El efecto piezoeléctrico se logra solo con ciertos materiales, y estos suelen ser cristales

debido a su organización atómica en forma de red. El cristal más comúnmente utilizado es el

dióxido de silicio, encontrado en la naturaleza como cuarzo. Ahora, ¿por qué se genera

electricidad al aplicarle presión a estos materiales? La respuesta tiene que ver con las cargas que

poseen los átomos y la organización de estos. Tomando el cuarzo de ejemplo, los átomos de

silicio están positivamente cargados, mientras que los de oxígeno tienen carga negativa, por lo

que al presionarlos estas cargas (que estaban equilibradas en la estructura molecular) se van a

desfasar y esto creará polos en la superficie de ambos lados del cristal; uno positivo por un lado y

negativo por el otro, y se les conectase a un voltímetro se podría evidenciar un flujo de

electricidad al presionar el cuarzo.

Elementos de sistemas piezoeléctricos

Un sistema piezoeléctrico (de presión mecánica a electricidad) simple cuenta con algunos

dos elementos básicos, y dependiendo de para lo que se quiera usar esta tecnología, tendrá

diversos elementos. El principal es el sensor piezoeléctrico, es decir; el componente del material

piezoeléctrico con sus conexiones para conducir la electricidad generada, y el segundo elemento

básico es el receptor de este flujo eléctrico, que podría ser cualquier cosa que requiera

electricidad: una batería, una bombilla, un cargador, etc.

Una posible implementación de está tecnología sería combinarla con sistemas

fotovoltaicos y electromagnéticos, con el fin de crear un sistema conjunto autosostenible. Las


placas fotovoltaicas transforman la incidencia de los rayos de sol en una corriente eléctrica, y la

inducción electromagnética permite transmitir corriente a través de un campo electromagnético

mediante el movimiento de estos campos. Ubicarlas en fincas, granjas y lugares de campo donde

es más complicado llevar la electricidad podría ser un buen aprovechamiento de éste, o se podría

adaptar para hacerlo portátil y llevarlo a los días de campo o playa.

Es un sistema sencillo y relativamente económico si se considera el aprovechamiento que

este tiene. Todo el tiempo las personas están en constante movimiento, y en ocasiones en grandes

multitudes, mientras caminan generan una presión contra el piso, contra sus zapatos. El viento

genera también genera una presión al impactar con los objetos. Hay infinidad de ejemplos en

donde se evidencia una presión ejercida sobre algún objeto, por lo que aprovechar toda esta

fuerza para generar electricidad y sin dejar algún residuo químico o un daño al ambiente es una

gran apuesta para una sociedad autosostenible.

Apreciaciones y Conclusiones

La clave para aprovechar al máximo este sistema es ubicar estos sensores en lugar dónde

haya mucha presencia de presión mecánica o que sea muy frecuente. Ubicar los sensores

piezoeléctricos debajo de las tarimas y las gradas en los conciertos podría servir para aprovechar

toda esa energía empleada por los espectadores y artistas al saltar podría usarse para generar

electricidad suficiente para alimentar los componentes eléctricos del concierto. O en aceras

peatonales, en la suela de los zapatos, las alas de los aviones… la lista de posibles aplicaciones

de este sistema es amplia. Empezar a utilizar esto podría llevar electricidad a aquellos lugares

dónde no es posible llevarla por líneas ni torres.


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