Está en la página 1de 1

Alguna vez se han levantado por la noche pensando y recordando todo lo que

hicieron en el día, pidiéndole a Dios por tu bebe, para que ese pequeño espacio
no estuvo contigo no le afecte, pidiendo sabiduría y amor de esa persona que lo
cuida, pidiendo que no se haya comido algo del suelo para no se enfermen,
porque te pareció que talvez podría estar enfermo de la panza, pidiendo perdón a
Dios por permitirle jugar en el charco y prometiéndole que no volverá a pasar pero
que porfavor le permita a tu bebe estar bien, alguna vez te has visto velando sus
movimientos por las noches, tapándolo constantemente para que no sienta frio,
algunas vez han se han levantado noche tras noche durante meses para
amamantarlo e no pudiendo conciliar el sueño después, dejándola por las
mañanas sin querer irte de su lado, tratando de no sentir pero dejando pedazos de
ti con ella, alguna vez t has descubierto diseñando el menú de su comida en tu
mente o diseñando su look para aquella salida, pasando lista de esa pañalera para
que cuando salga no le falte nada, previendo cada movimiento para que no tenga
dificultades, pensando en el vinculo, el apego, la estimulación, sacando fuerzas
para enseñarle a caminar aunque en el fondo tu cuerpo solo desee tirarse en el
sillón y descansar,

También podría gustarte