Las funciones esenciales de los nervios pueden reducirse a dos:
- La excitabilidad: Hace que los nervios reaccionen ante la acción de un excitante o estímulo. Los estímulos capaces de lograr la excitación de un nervio pueden ser: • Mecánicos: golpes, pinchazos o presión. • Físicos: frío, calor o corriente eléctrica. • Químicos: alcaloides, sales o ácidos. • Fisiológicos: estímulo nervioso, hormonas y secreciones glandulares, entre otros.
- La conductibilidad: Consiste en la transmisión del influjo nervioso de una parte a otra
del organismo. Es la propiedad que tiene un nervio de asegurar esa propagación, permitiendo a una dendrita transmitir hacia un centro nervioso la excitación que proviene de un pinchazo periférico, por ejemplo, y posibilitando a un cilindro eje llevar a otra neurona o a un músculo la excitación procedente de un centro nervioso.