FE PARA EL DOMINIO PROPIO

2ª Timoteo 1:7 Porque no nos ha dado Dios espíritu de cobardía, sino de poder, de amor y de
dominio propio.

OBJETIVOS: Comprender que:

• Una de las mayores virtudes que un ser humano puede mostrar es el dominio propio.
• El espíritu de dominio propio solo es dado por Dios.
• Hay mayor ganancia en ceder nuestra voluntad a Dios que en dejarnos llevar por ella.
• La comunión con el Espíritu Santo nos asegura la victoria.
• Una fe firme en la Palabra nos hará ver nuevas realidades.

INTRODUCCION

El rey Salomón en los proverbios hace el reconocimiento de lo impresionante que llega a ser
el poder dominarse a uno mismo cuando menciona que, es mejor lograrlo que poder
conquistar una ciudad (Prov.16:32)

Asi también nos hace reflexionar sobre el peligro que conlleva para una persona el no poder
dominarse asi mismo, lo compara como una ciudad sin murallas (Prov. 25:28), es decir,
expuesta al peligro, indefensa ante cualquier ataque.

Cuantas veces nos hemos enfrentado al problema que nos menciona el apóstol Pablo en
Romanos 7:19 Porque no hago el bien que quiero, sino el mal que no quiero, eso hago. Quizá
a veces nos sentimos agobiados por el enojo, por la impaciencia, por el temor,etc. pero Dios
conoce nuestras debilidades y nos comprende, pero aún más allá de su comprensión, Él
quiere mostrase como nuestro ayudador, quien lo tiene a él, tiene la única solución efectiva a
este mal.

DESARROLLO

1. ENTREGANDO NUESTRA VIDA A CRISTO. Dios nos dio voluntad, tenemos que
cederla a él. Jesús dijo: pero no se haga mi voluntad sino la tuya ( Luc. 22:42). Dios
dio al ser humano el libre albedrio, la capacidad de elegir entre el bien y el mal, entre
obedecerle o desobedecerle. Cuando le entregamos nuestra vida a Cristo, estamos
tomando la decisión de creer en él y a él, y es un punto en el que cedemos nuestra
voluntad a la suya, esto, en la absoluta confianza de que sus pensamientos son
mejores que los nuestros.
Es un hecho que el ser humano nunca podrá vencer por si solo todas sus debilidades,
ni dominar sus deseos, es necesario tener la ayuda de Dios (su espíritu Santo) para
lograrlo.
 Es por eso que el primer paso que debemos dar para poder dominar nuestras propias
debilidades es pedir su ayuda y comprometerse a seguir su camino, seguir sus
instrucciones, haciendo las cosas a su modo y no al nuestro.

2. CREE A LA PALABRA DE DIOS. Jesús dijo: yo soy el camino, la verdad y la vida.

Todo lo que su Palabra dice es la verdad absoluta y para quien la práctica produce
vida, es por eso que debemos leerla diariamente con toda la atención que ella merece
y creer y obedecerle, lo cual dará los mejores resultados que podemos esperar.
a. ¡Quien me librará de este cuerpo de muerte? Rom. 7:24 El apóstol Pablo
hace esta expresión, y él mismo nos da la respuesta cuando dice: ¡Gracias doy
a Dios por Jesucristo, Señor nuestro!
Esta es una verdad que rompe con la esclavitud que teníamos al pecado y a la
muerte, Jesús a través de la obra redentora en la cruz, nos ha entregado su
naturaleza, aquella por la cual somos capaces de vencer pruebas y tentaciones.
Ya no vivo yo, mas Cristo vive en mí.
b. Espíritu de Dominio Propio. 2ª Timoteo 1:7 Dios nos ha dado al Espíritu Santo
para poder tener una vida en victoria, Él es quien nos convence de cada una de
sus Palabras, nos prepara y fortalece, a nosotros nos queda buscarle y pedir su
ayuda y compañía todo tiempo. La Palabra dice que debemos hacer morir las
obras de la carne por el Espíritu. No se trata de clamar a Dios solo cuando llega
el día malo, cuando vienen las asechanzas del enemigo, aunque sin duda Dios
nos ayudará si lo hacemos así, pero no tendrá el mismo efecto que cuando
tenemos una vida de comunión continua.
Vivir una vida en el espíritu, una vida de comunión tiene que ver con:
Lectura de la Palabra. 2 Timoteo 3:16 nos habla de lo maravillosa que es
La Palabra, pues nos enseña tantas cosas como por ejemplo, quien es
Dios, cuál es su lenguaje, sus promesas, sus principios; nos redarguye,
nos corrige y nos instruye, nos muestra el camino que debemos seguir
para que no erremos. Es preciso recordar que el mundo y sus deseos son
temporales más quien hace la voluntad del Padre vivirá eternamente.
Quien la atesora y la aplica, vive en victoria.
Oración. Romanos 12:12 Debemos ser constantes en la oración. Es
importante tener tiempo a solas con Dios, pero no debemos hacerlo solo
en ese momento, mientras trabajamos podemos estar platicando con él
en nuestro interior, meditando su Palabra. Mientras más tiempo pasemos
con él, más se verá reflejado en nosotros.
Adoración. La adoración verdadera, la que sale del corazón genera un
ambiente en el cual se establece el gobierno de Dios de tal forma que no
se puede evitar una rendición total.
 Ayuno. En la Palabra podemos ver casos en los que el ayuno se hizo
para estar totalmente con el Padre y poder adorarle y escucharle (la
razón correcta para hacerlo).
o Moisés estuvo en el monte con el Señor y no comió pan ni bebió
agua. Éxodo 34:28
o Jesús fue llevado por el Espíritu al desierto y ahí no comió ni bebió
nada.Lucas 4:1-2
o Un grupo de maestros y profetas en Antioquia entre ellos Saulo,
ministraban al Señor y estaban en ayuno Hechos 13:1-3.

3. PERSISTE. Aunque te equivoques, puedes perder una batalla pero no la guerra.

Siempre busca hacer la voluntad del Padre y nunca dejes que el enemigo domine tus
pensamientos porque desde ahí debes ganar la batalla.

a. Cuidemos nuestros pensamientos.

i. 2 Cor. 10:5 Derribando argumentos en contra del conocimiento de Dios y
llevando cautivo todo argumento a la obediencia a Cristo.
ii. Filipenses 4:8 Si hay virtud alguna en esto pensad. Démosle trabajo a
nuestra mente y corazón, no dejemos que ellos nos den trabajo a
nosotros, recordemos que la Palabra dice que engañoso es el corazón,
hay sabiduría en dar dirección a lo que pensamos y sentimos.
b. Vence con el bien el mal. Romanos 12:21 Hagamos lo que Dios nos manda
(siempre será lo correcto) aunque no sea lo que sintamos en el momento y
pidamos la ayuda del Espíritu Santo para no guardar en el corazón cosas
incorrectas.

CONCLUSION

Es necesario creerle a Dios para poder caminar en victoria, sin fe es imposible ganar batallas,
recordemos que todo lo que es nacido de Dios vence al mundo y esta es la victoria que ha
vencido al mundo, nuestra fe.