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Teoría Literaria III Prof.

Lenscak María Elena


Alumna Córdoba Ruth

ANALISIS NARRATOLÓGICO DEL CUENTO EL COLLAR DE GUY DE


MAUPASSANT

En primer lugar, habría que tener en cuenta la vida del autor Guy de Maupassant, para que
en principio se pueda ir generando un sentido y una interpretación del cuento, aunque no es
posible decir que el autor realice una crítica de la época a través del relato.

Maupassant nació en Francia en 1850 y falleció en Paris en el año 1893 a causa de haber
llevado una vida activa rodeado de drogas que más tarde provocó la causa de su muerte, la
sífilis.

Conviene subrayar que en Paris se relacionó con Gustave Flaubert, quien lo acercó al
movimiento realista y naturalista. Estos movimientos tenían como principio fundamental la
búsqueda de la objetividad en la reproducción de la realidad.

En 1884 publica el cuento El Collar, donde se puede destacar la expresión de la ideología


pesimista.

El Collar de Guy de Maupassant pertenece al género de la Nouvelle realista que muestra


una desigualdad entre las distintas clases sociales, es probable que haya sido una manera de
marcar las diferencias que existían en esa época en Francia, pero como bien mencione
anteriormente, no está explícitamente enunciado en el cuento, se puede suponer que fue el
contexto de su época lo que lo inspira a escribir el cuento.

Este es un cuento en donde las descripciones amargas nos llevan a comprender la


burguesía del momento y como la vida de la señora Loisel se vuelve miserable por querer
pertenecer a esa clase social. Para poder llegar a esa posición su único recurso es aparentar
para poder calmar su sed de ambición y envidia.

De acuerdo con el análisis estructural del relato que realiza Barthes seria pertinente y, para
mantener un orden, comenzar desde el segundo nivel que plantea el semiólogo, el de las
acciones, es decir, quién lleva adelante las funciones. En este caso la protagonista (actante)
es Mathilde Loisel quien pertenece a una familia de empleados y sueña con hacerse rica.
Sin embargo, se conforma con una vida sencilla y se casa con un funcionario del
Ministerio:
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“Era una de esas criaturas nacidas como por un error del Destino en una familia de
empleados […]no disponía de ningún medio para ser conocida […]aceptó entonces casarse
con un modesto empleado del Ministerio de Instrucción Pública”.

Phillip Hammon va a decir que toda descripción está porque circunscribe un objeto, es
decir, la descripción que ayuda a encontrarle el sentido al relato. Lo que Hammon hace es
clasificar las descripciones según estén referidas a un paisaje o a una persona. En El Collar,
se puede dar cuenta de estas descripciones en la señora Loisel a través de:

● Vestinomonía: cuando el narrador nos dice: “no pudiendo adornarse, fue sencilla […]
no poseía galas femeninas, ni una joya; nada absolutamente […] mal peinada, con las
faldas torcidas y rojas las manos, hablaba en voz alta”.
● Fisonomía: “era una de esas hermosas y encantadoras criaturas […] Carecía de dote
[…] Pues su belleza, su instinto de elegancia y su flexibilidad de espíritu son para ella su
única jerarquía”
● Monomanía: Son los hábitos recurrentes de un personaje que se asocia con la
moral, con lo psicológico. Una clara monomanía en el cuento es el deseo de la
señora Loisel por ser rica a lo que asistir a la velada del Ministerio se vuelve muy
importante para ella. Su delicada apariencia la acerca a esa condición, a través de un
bonito vestido y un soberbio collar de brillantes que su amiga, la señora de Forestier
le presta:

“De repente descubrió, en una caja de raso negro, un soberbio collar de brillantes, y su
corazón empezó a latir de un modo inmoderado. Sus manos temblaron al tomarlo. Se lo
puso, rodeando con él su cuello, y permaneció en éxtasis contemplando su imagen”.

De toda esta información se conforma lo que Barthes llama INDICIOS E


INFORMANTES, es decir, toda aquella información precisa y lo que me anticipa o indica
algo, por ejemplo; es a través de estas descripciones que tenemos indicios del deseo infinito
que la señora Loisel tiene por querer guardar apariencias, la insatisfacción de ella y la
vergüenza que le ocasiona el pertenecer a una esfera social inferior a lo que aspira:

“No se sentía formada sino para aquellos goces imposibles. ¡Cuánto habría dado
por agradar, ser envidiada, ser atractiva y asediada!”.
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La información precisa se puede encontrar por ejemplo en la invitación que el marido le


acerca a Mathilde enunciando lo siguiente:

“El ministro de Instrucción Pública y señora ruegan al señor y la señora de Loisel les
hagan el honor de pasar la velada del lunes 18 de enero en el hotel del Ministerio”.

Es la fiesta donde la señora Loisel logra sentirse satisfecha y es esta monomanía lo que
nos indica su caos mental, su miseria, envidia.

“Ella bailaba con embriaguez, con pasión, inundada de alegría, no pensando ya en nada
más que el triunfo de su belleza, en la gloria de aquel triunfo, en una especie de dichas
formada por todos los homenajes que recibía”.

“Él le echó sobre los hombros el abrigo…modesto abrigo de su vestir ordinario, cuya
pobreza contrastaba extrañamente con la elegancia del traje de baile. Ella lo sintió y quiso
huir, para no ser vista por las otras mujeres que se envolvían en sus ricas pieles”.

Con respecto a las FUNCIONES, en términos de Barthes, pueden ser distribucionales


(nucleares o catalíticas) o integradoras (indicios o informantes). Las integradoras son las
que se mencionó y se ejemplificó anteriormente. Las distribucionales Todorov las va a
llamar lógica de las acciones. Las acciones fundamentales del cuento son:

1. Asistir (señor y señora Loisel son invitados a la velada que realiza el Ministerio)
2. Conseguir (Mathilde consigue comprar un vestido para la velada y va en busca de
su amiga para que le preste un collar)
3. Aparentar (Mathilde y su esposo asisten a la velada, ella se destacó entre todos por
su elegancia y belleza)
4. Perder (Mathilde pierde el collar cuando regresaba a su casa)
5. Mentir (Mathilde le miente y le oculta la verdad a su amiga para ganar tiempo y así
poder comprar uno nuevo)
6. Endeudar (el matrimonio se sumerge en una gran deuda para reponer el collar
pedido)

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7. Reconocer y aprender (Mathilde le dice la verdad a su amiga luego de haber pasado


diez años pagando la deuda y viviendo una vida miserable. Finalmente, su amiga le
comunica que el collar era de fantasía).

En términos de Todorov sería pertinente agregar a esta lógica de las acciones, la lógica de
los personajes y las interrelaciones porque Mathilde se relaciona con distintos personajes
formando así la sociedad del relato:

1. Señor Loisel con su trabajo (Ministerio de Instrucción Pública)


2. Señora de Forestier- Mathilde
3. Mathilde- invitados de clase social alta
4. Mathilde- su esposo (pierde el collar)
5. Mathilde- señora de Forestier (le miente a su amiga)
6. Mathilde- Loisel (se endeudan)
7. Mathilde- señora de Forestier (se revela la verdad del collar)

Por lo que refiere a las funciones catalíticas, es decir, aquellos momentos de descanso del
relato, en el cuento están para que podamos entender de una mejor manera el ambiente de
Mathilde y el por qué ella se siente tan desgraciada:

“sufría contemplando la pobreza de su hogar, la miseria de las paredes, sus estropeadas


sillas, su fea indumentaria”.

“la vista de la muchacha bretona que les servía de criada despertaba en ella pesares
desolados y delirantes ensueños. Pensaba en las antecámaras mudas, guarnecidas de
tapices, alumbradas por altas lámparas de bronce y en los dos pulcros lacayos de calzón
corto, dormidos en anchos sillones, amodorrados por el intenso calor de la estufa”.

En cuanto al nivel de la narración que plantea Barthes en su análisis, quien cuenta el relato
es una voz narrativa en tercera persona (narrador testigo).

“Ella meditó unos segundos, haciendo sus cuentas y pensando asimismo en la suma que
podía pedir sin provocar una negativa rotunda […]”

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Todorov le va a dar el nombre de FOCALIZACIÓN, es decir, la voz que lleva adelante el


relato. En este caso, la focalización la tiene una voz externa, la focalización es una por
fuera (el narrador sabe mas que el personaje). Sin embargo, encontramos la focalización en
Mathilde (narrador sabe tanto como el personaje) por ejemplo;

“Me disgusta no tener ni una alhaja, ni una sola joya que ponerme, pareceré, de todos
modos, una miserable. Casi, casi me gustaría mas no ir a ese baile”.

En relación al tiempo del relato, según Todorov se puede presentar de tres maneras que
puede o no coincidir con el tiempo de relato; encadenamiento, intercalación y alternación.
En el cuento El Collar encontramos un tiempo de la historia que coincide con el tiempo del
relato porque las acciones nucleares siguen un orden lineal, es decir, tenemos un
encadenamiento porque cada acción sucede a la acción que sigue.

Por último, analizando los modos del relato, Todorov va a decir que hay dos maneras para
contar un relato (telling y showing). Ambas formas se ven plasmadas en el cuento ya que
tenemos una narración contada (telling) y una interacción entre los personajes, es decir,
diálogos (showing).

A través del análisis narratológico de Barthes, Todorov y la categorización del personaje


que realiza Hammon, podemos crear un sentido y una interpretación del cuento El Collar.
Se entiende el porqué de su título, ya que hace referencia al collar que Mathilde pierde y
eso conlleva a que tenga que estancarse en una vida vulgar y miserable, toma sentido si
decimos que el collar simboliza la opresión y el control, es el precio que Mathilde debe
pagar por querer aspirar a un ascenso social y material, sobre todo, creyendo
(hipócritamente) que eso la llevaría a tener valores como la honradez, el éxito o respeto. Sin
embargo, podemos ver en el final una Mathilde aceptando su fracaso con humildad a pesar
de haber sacrificado diez años de duro trabajo para pagar la gran deuda que les quedo por
haber perdido el collar.

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