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Anduli · Revista Andaluza de Ciencias Sociales Nº 1 / 2002

cambio en la medida que aporta un del futuro y nos previene diciendo que
conocimiento sobre los acontecimien- las oportunidades para la sostenibilidad
tos en curso y una implicación de los social de Sevilla se enfrentan a un obs-
actores sociales en los proyectos de táculo difícil de salvar, cual es la de-
actuación combinando su diversidad de pendencia del erario municipal de los
enfoque y experiencias para la mejora ingresos por edificación y el empleo en
del funcionamiento de la sociedad, es- la construcción”, por lo tanto como prio-
pecialmente ante los retos de ridad estratégica recomienda que es
sostenibilidad”. preciso que el Ayuntamiento busque
otras fuentes de financiación alternati-
Una vez estudiados los escenarios de
vas y otros mercados para el podero-
la Sevilla Ecológica de 2010 y 2025, la
sos sector de la construcción.
Dra. Rojo se manifiesta crítica acerca
(Pedro Romero de Solís)

FRANCIS FUKUYAMA, La constituía “el punto final de la evolu-


Gran Ruptura. Ediciones B. ción ideológica de la humanidad”, lle-
Barcelona 2001. gando a afirmar que no resultaba posi-
ble mejorar el ideal de ese tipo de mo-
Fukuyama, norteamericano de origen delo ideológico que se encuentra en
japonés, formado en la crème de la cré- íntima complementación con el siste-
me de las universidades de la Ive ma de libertad de mercado inherente
League, ex funcionario del Departa- al capitalismo.
mento de Estado, donde ocupó con
Se trata de una obra que puede ser
poco más de 30 años la Dirección Ad-
discutible pero en la que el autor, a su
junta de Planificación Política, siendo
manera, refleja la casuística internacio-
actualmente alto directivo de la Ram
nal y procura la apoyatura de lo mas
Corporation –sólo le falta estar vincu-
granado del pensamiento occidental,
lado a Monseñor Escriva de Balaguer-
empezando por Hegel y sobre todo por
fue autor, a finales de los años 80 de
la revisión que de él llevó a cabo
un famoso artículo. “El fin de la histo-
Alexander Kojeve. Un libro notable,
ria”. Causó un gran impacto. Tanto que
que, como la LOU ha sido
se vió costreñido a dimitir de su pues-
profusamente criticado por muchos que
to en la Secretaría de Estado, a pesar
no la habían leído.
de haberse convertido en, quizás, el
más combativo defensor del sistema Recientemente Fukuyama nos ha pro-
político y económico protagonizado por piciado su tercer libro: “La Gran Rup-
USA. Su notoriedad resultó excesiva tura”. En él se puede concluir que el
para el “body” oficial y se enmascaró paradigma-democracia liberal, presen-
en el probablemente mejor pagado, y ta algunos, nada residuales ni secun-
sin compromisos, brazo intelectual de darios, defectos; principalmente en su
las Fuerzas Armadas norteamericanas. versión norteamericana que es la que
recibe el núcleo de la atención princi-
En “El fin de la historia” –artículo y pos-
pal por parte de este chico tan listo que
terior libro de igual nombre-, defendía
es Fukuyama.
la idea de que la democracia liberal

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Reseña

En esta ocasión la obra pretende ser ganización social de baja intensidad”


mas sociológica que las anteriores, en cuyo capítulo incluiríamos los espa-
sustituyendo las argumentaciones his- ñoles el vigente fenómeno del “bote-
tóricas y filosóficas por puntos de vista llón”.
procedentes de un repertorio de auto-
Al avalar su teoría y medir comparan-
res inscritos en la nómina de la moder-
do le conduce, en ocasiones, a caer
na sociología, aunque, eso sí, expur-
en grandes prejuicios y en un
gando los elementos más críticos. Todo
etnocentrismo acentuado. El arqueti-
muy cercano al pensamiento único y al
po para él –por muy japonés étnico
vigente modelo tecno-económico, a
que sea- son los WAP –blancos,
pesar de su profusa erudición.
anglos y protestantes-. En las antípo-
Como su título indica el autor estima das de esa perfección moral y política
que se ha originado un retorno que lle- sitúa a los sicilianos quienes además
ga a calificarlo de grande. Retorno que de ser italiano, católicos,
observa en USA y cuyo inicio sitúa a centrofamiliares e individualistas, na-
mediados de los años 70. Procede a turalmente no les queda más remedio
comparaciones entre países, pero que ser mafiosos.
siempre su punto de referencia es su
En concordancia con su línea de razo-
nación que, como sabemos se llame
namiento repertoria a los sociólogos
como se llame y por muy cara de chino
mas conservadores cuando no retró-
que tenga, está muy orgulloso de que
grados, aunque no falten citas de emi-
sean los Estados Unidos de América
nentes clásicos de la teoría sociológi-
del Norte, a los que Bush, entre otros,
ca. Lógicamente con tales cimenta-
abusivamente llama América.
ciones ideológicas, encontramos en
Los dos ejes a través de los que giran sus numerosas y no superfluas pági-
las argumentaciones respecto a las nas afirmaciones y conclusiones sus-
causas del retroceso, la ruptura, son: ceptibles de producir paradas respira-
el cambio originado por un reciente in- torias. Por ejemplo hace partícipe al
dividualismo –paradójica contradicción estado del bienestar y a políticas de
con el núcleo esencial de sus postula- asistencia social de la culpa del dete-
dos- y la pérdida de capital social de rioro familiar que observan las socie-
acuerdo con las concepciones de dades avanzadas.
Coleman y Putman. Define el capital
No obstante, es una obra interesante.
social como un conjunto de normas o
A veces apasionante. Y una magnífica
valores informales que comparte los
vía de acceso al conocimiento de una
miembros de un grupo y que permite
situación social -la norteamericana, a
su cooperación.
la que Fukuyama a su manera somete
La disminución del capital social es el a crítica –sino también de ideologías y
origen del incremento de patologías so- mentalidades que en modo alguno son
ciales como la delincuencia y otras for- residuales y sí por el contrario –des-
mas de desviación social, pero tam- graciadamente opino desde mi parti-
bién, de fenómenos que, empleando un cular sujetividad- dominante. ¡Qué mie-
paralelismo con formulaciones proce- do! En cualquier caso, no sólo resulta
dentes de las relaciones internaciona- una obra interesante sino que puede
les, designa como formas de “desor- ser hasta necesaria para todos aque-

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llos que participamos de las inquietu- espectáculos públicos calificaría a La


des incluidas en el amplio espectro de Gran Ruptura como 3R. Para mayores
las Ciencias Sociales. con reparos. Algo que uno no puede
perderse y sobre lo que quizás deba
Si el túnel del tiempo me retrotrayera a
confesarse.
las épocas del nacional-catolicismo y
me situara como censor moral de los (Juan Maestre Alfonso)

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