Parábola del hijo pródigo

Padre: Tengo dos hijos

Hermanos: Hermano, voy a pedir la herencia a nuestro padre
Padre: Hijo estas seguro que quieres que te dé
Hijo menor: Si padre, yo se que hacer con mi dinero
Padre: Esta bien aquí tienes
Hijo menor: Padre me voy de casa para disfrutar de la vida
Padre: hijo no te vayas
Hijo menor: Iré con mis amigos, les invitare a comer y a celebrar
Hijo menor: Ya paso un tiempo y se acabo mi dinero, ahora no tengo nada para comer,
trabajaría en cualquier cosa con tal que me den un plato de comida.
Hijo menor: soy capaz de trabajar cuidando cerdos, anhelo comer hasta la comida de estos
cerdos, pero ni eso tengo
Hijo menor: Que he hecho con mi padre, hasta los jornaleros de mi padre tienen la mejor
comida, voy a pedirle perdón a mi padre, regresare a casa sabiendo que ya no soy merecedor
de ser tratado como hijo, no me importa ser un peón más, estoy muy arrepentido y quiero
regresar a mi hogar de donde nunca debí partir.
Al regresar
Padre: ¿Quién es el que esta llegando?, mi amado hijo regreso (va y abraza a su hijo)
Padre: hijo mío, regresaste, lo abrazo y lo beso.
Hijo menor: padre no soy digno de ser tu hijo, no merezco nada.
Padre: hijo estoy feliz de que regresaste, voy a ordenar una gran fiesta, que te vistan con el
mejor traje y calzado, porque mi hijo estuvo perdido y ha vuelto.
Hijo mayor: padre, yo siempre estuve contigo y te he servido, nunca me diste nada para
celebrar al menos con algunos de mis amigos. ¿Por qué haces esto con mi hermano, si se ha
portado mal?
Padre: hijo mío tu siempre estas a mi lado y te portas bien, todo lo mío es tuyo, pero era
necesario hacer una gran fiesta y celebrar el regreso de tu hermano, pues el estuvo muerto y
ha vuelto a la vida, estuvo perdido y ha sido hallado.