Introducción

La psicología comunitaria es concebida como un campo de estudio de la relación entre

sistemas sociales entendidos como comunidades, el comportamiento humano y su aplicación
intervenida a la prevención de los problemas psicosociales y el desarrollo humano integral.
(Sánchez, 2015).

Las políticas públicas son los proyectos/actividades que un Estado diseña y

gestiona, a través de un gobierno y una administración pública, con fines de satisfacer las
necesidades de una sociedad.

Al llevar a cabo la revisión literaria, se tomaron como referencia distintas investigaciones a

nivel internacional y nacional sobre el rol que desempeña un psicólogo en el marco de las políticas
públicas
Montero (2009) argumentan que, para lograr una contribución común entre las políticas
públicas y la psicología comunitaria, se debe identificar y respetar ciertas condiciones o derechos
mínimos de las comunidades al trabajar con ellas. Sobre esta base, la intervención en psicología
comunitaria puede contribuir a la toma de decisiones en política social, mientras que los procesos de
intervención comunitaria contribuyen al diseño de políticas más adecuadas a las necesidades de la
sociedad, las sociedades y su participación mejoran el sentido y la continuidad de las acciones.

En este sentido, el rol profesional del psicólogo es de vital importancia y es percibido como
protagonista principal de la intervención a nivel social. Este como representante debe velar por la
eficacia de las acciones que diseña e implementa en un determinado nivel, pero cuya dirección y
rumbo general está determinado por las orientaciones políticas básicas del nivel de centralización y
planificación (Alfaro, Sánchez y Zambrano, 2012).

Baró (1990) manifiesta que el rol del psicólogo o psicóloga comunitario debe sostener una
actitud de compromiso referentes a temas sociales y políticos, como fuente de apoyo en las
dificultades o inquietudes sociales de las comunidades sometidas.

Conclusión

El que hacer del psicólogo social se manifiesta como un puente de conexión entre la
resolución de políticas de acción que parten desde el estado y que esperan ser concebidas a nivel
social como mecanismos y herramientas de resolución de los problemas sociales propios de las
comunidades.