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Queridos compañeros.

Ninguno de nosotros nos hubiéramos imaginado que nuestra ceremonia de


graduación sería así. Quizás con toga y birrete y junto a nuestros seres queridos. Pero
en nuestras casas. Lejos de nuestro centro de estudios y sin estar rodeados de
nuestros compañeros de clases y profesores. Nunca ha habido una graduación así. Una
graduación por Internet.

Pero ni la pandemia ni el distanciamiento social pueden restar brillo a lo que acontece


hoy. Hemos completado un importante capítulo de nuestras vidas y estamos
comenzando otro. Tenemos derecho a sentirnos orgullosos. Yo les aseguro que valió la
pena este esfuerzo. Debemos también sentir agradecimiento a nuestras familias, a
nuestros profesores y a todos quienes nos ayudaron a cumplir esta meta.

Les cuento que hace 06 años, esta institución educativa me recibió con los brazos
abiertos. Yo me siento honrado al igual que ustedes de pertenecer a esta generación
de bachilleres del liceo Dionisio López Orihuela, ya que tengo un sincero amor no solo
por mi liceo, sino también por mi Delta, su historia, su cultura y, muy especialmente su
gente. He vivido momentos muy hermosos y placenteros con ustedes mis compañeros
y mis maestros porque me inculcaron siempre los mejores valores en mi persona.

Lo que a principios de marzo se veía como una recta final sin obstáculos,
repentinamente cambió a una serie de desafíos que nos han llevado a momentos de
empatía, solidaridad, flexibilidad y transformación. La pandemia del COVID-19 nos ha
puesto a prueba en nuestra capacidad de ser responsivos, mostrar resiliencia, intentar
restaurar y recrear lo que era, pero también para reimaginar lo que será la nueva
normal

La vida cambió y decidió que dejaríamos las aulas antes de lo planeado, sin embargo,
no debemos despedirnos con tristeza, al contrario, debemos de estar felices que como
Institución, alumnos, maestros, directivos y padres de familia logramos adaptarnos a
esta situación inesperada y terminar este ciclo. No puedo mencionar todos los
momentos que cada uno de nosotros ha vivido, pero estoy seguro que los
conservaremos en nuestros corazones

Celebramos a distancia el cierre de un capítulo inolvidable de nuestro camino. Sin duda


la generación 2021 pasa a marcar un momento muy importante en la historia de
nuestra institución; sin embargo, a pesar de los cambios y las pérdidas juntos logramos
enfrentarnos a la situación que no logró quitarnos este momento tan especial. Esta
celebración es mucho más que una despedida, es el reflejo de todo nuestro esfuerzo,
trabajo y recuerdos que se quedan con nosotros toda la vida, el triunfo de una
generación que no se dejó caer
Decir adiós no resulta nada sencillo, mucho menos cuando hemos compartido tantas
cosas, como la emoción de volver a un salón de clases, donde nacieron amistades que
hoy consideramos como de nuestra propia familia. Por más adversidades que se
presentaran como la pandemia mundial, nunca declinamos, al contrario, nos
adaptamos para cumplir con nuestro compromiso y obtener nuestros resultados
deseados. Debemos de sentirnos orgullosos por la culminación exitosa de este ciclo
escolar
Esta no es un adiós por completo, sino un hasta luego, ya que aunque la pandemia ha
impedido la realización de las tradicionales graduaciones en el Liceo, pero nuestros
corazones y sentimientos estarán llenos de abrazos, gozo y felicitaciones porque
primeramente Dios esto va a terminar y nos sentiremos orgullos cuando de manera
física la Institución y sus graduandos puedan celebrar la culminación más de una etapa
formativa.
Un reconocimiento especial a mis padres, a nuestros padres, a quienes debemos
agradecer por felicitarnos por nuestro esfuerzo: Al hacerlo nos motivaban a adquirir
más confianza para seguir aprendiendo. Ser pacientes. Hablar con nosotros, sus hijos
porque hablar y escuchar cuidadosamente son dos destrezas que juegan un papel muy
importante en el éxito escolar. Cuidar de nuestra salud emocional, este periodo de
contingencia y aislamiento no ha sido fácil, sobre todo para nosotros y porque no, por
hacernos a veces la tarea, por mantener comunicación con los profesores, para
conocer con certeza las indicaciones y sugerencias, así como para expresarle posibles
dudas. Gracias por estar siempre a nuestro lado
Compañeros, amigos graduandos, en los momentos más difíciles del ser humano, es
cuando se define el verdadero carácter. Los logros que hemos alcanzado bajo estas
condiciones actuales, además de ser muy admirables, serán parte de nuestras
experiencias vividas que forjarán sus futuros. Todo el sacrificio y trabajo fuerte valió la
pena, ya que ahora nos encaminamos al próximo capítulo de nuestras vidas.
Celebrémoslo, sintámonos orgullosos y nunca dejemos que alguien nos diga que no se
puede. Tenemos una responsabilidad grande. ¡El futuro y el progreso de nuestro país,
de nuestro Delta, está en nuestras manos! ¡Qué Dios nos bendiga hoy, mañana y
siempre!

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