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DERECHO CIVIL I – T13 - LA CAPACIDAD

NOCIÓN
- VULGAR:

Ontológicamente la persona es dueña de sus actuaciones lo que significa que la persona por la
razón que le asiste, y que la diferencia de los demás seres, es capaz de dominar el curso de sus
actos. Ahora bien ocurre en ocasiones que la persona carece o tiene mermada esa capacidad, ya
sea desde un principio, ya como consecuencia de avatares ligados a su propia existencia y
alteridad. Es más dado el prodigioso avance de la ciencia y en concreto de la genética una persona
plenamente capaz puede conocer la tendencia e incluso el casi inexorable padecimiento futuro de
una enfermedad degenerativa que merme su aptitud volitiva e intelectiva hasta su completa
desaparición.

Adentrarse en el estudio de la capacidad de la persona, bien desde la perspectiva de su plenitud, o


bien desde la de su falta, resulta sumamente arriesgado y complejo, pues se trata de uno de los
temas troncales del Derecho en todos los ámbitos e implica adentrarse en la substancia de la
persona misma y, por ende, en la esencia de la ciencia jurídica. La implicación de la persona es de
tal calibre que desde casi todos los campos de conocimiento se han hecho incursiones en la
capacidad siendo destacadas y destacables las aportaciones de la Filosofía.

Wikipedia: La capacidad se refiere a los recursos y actitudes que tiene un individuo, entidad o
institución para desempeñar una determinada tarea o cometido. Se refiere a los recursos y
actitudes que tiene un individuo, entidad o institución para desempeñar una determinada tarea o
cometido.

- JURIDICO
María Candelaria Domínguez Guillen:

En al ámbito jurídico para dar una noción de capacidad debe distinguirse entre dos especies: la
capacidad jurídica o de goce por oposición a la capacidad de obrar o de ejercicio. Para algunos
autores esta es la verdadera capacidad, la que falta cuando generalmente nos referimos a
incapaces, en tanto que la primera viene asociada generalmente a la idea de personalidad.

CLASIFICACIÓN

1. Capacidad Jurídica o de Goce:


María Candelaria Domínguez Guillen:

Es una noción vinculada con la personalidad, pues toda persona natural o jurídica la tiene. De allí
que buena parte de la doctrina llegue inclusive al referirse a su noción s reproducir el concepto de
personalidad, esto es la aptitud para ser titular de deberes y derechos. Sin embargo, a los fines de
diferenciar tales conceptos, cabria hacerse partidario a la tesis que ve en la capacidad de goce la
idea de medida, de grado o de quantum, y de allí a que se defina en tal sentido la misma como “la
medida de la aptitud para ser titular de deberes y derechos”. Sin embargo, a los fines de
diferenciar tales conceptos, cabria hacerse partidario de la tesis que ve en la capacidad de goce
como “la medida de la aptitud para sr titular de deberes y derecho”, y como esta ultima
correspondo con “personalidad juridica”, bien puede definirse sintéticamente la capacidad de
goce como “la medida de la personalidad”. Idea que deja ver que toda persona tiene capacidad
jurídica, no obstante restricciones concretas o particulares que se traducen en incapacidades
especiales de goce. Implica también dicha capacidad la idea de potencialidad pues todo sujeto
tiene y puede llegar a tener la titularidad de múltiples deberes y derechos.

Gorrondona

Capacidad en derecho es la medida de la aptitud de las personas en relación con los derechos y
debers jurídicos.

Francisco hung

Entendemos por capacidad (legal o de goce) la medida de la aptitud (o, la extensión de la aptitud)
para ser titular de deberes y derechos jurídicos; la potencialidad del ente (en este caso el individuo
de la especie humana) para llegar a ser titular de deberes y derecho jurídicos, la capacidad de
obrar seria la medida de la aptitud para producir plenos efectos jurídicos mediante actos de la
propia voluntad.

2. Capacidad de obrar o de ejercicio:


María Candelaria Domínguez Guillen

Se presenta como una realidad dinámica, como la posibilidad de realizar actos jurídicos validos por
la voluntad propia “es la idoneidad del sujeto de realizar actos que incidan en su propia esfera
patrimonial y personal”. Noción mas precisa en términos técnicos que aquella que alude al
ejercicio de los derechos por sí mismo “la capacidad de ejercicio, es, por el contrario, la potencia
de toda persona para ejercer y actuar por sí mismo”, toda vez que se aclara que algunos incapaces
de obrar ejercen derechos como el de propiedad por sí mismos, pero su imposibilidad se dirige a la
realización de actos jurídicos.

Dicha Capacidad de obrar, se subdivide a su vez en capacidad negocial, procesal y delictual.


Trasladando la noción general de capacidad de ejercicio, según se trate de actos negóciales o
procesales, cabe decir que la capacidad negocial es la posibilidad de realizar negocios jurídicos
validos por voluntad propia. Esto es declaraciones de voluntad dirigidas a producir efectos
jurídicos, que pueden ser bilaterales (sí resulta de dos o mas declaraciones de voluntad) como el
contrato o unilaterales (sí, dependen de una sola manifestación de voluntad) como el testamento.
Para Melich Orsini de la capacidad negocial se puede descender hasta la capacidad de contratar.
Risolia, por su parte, considera tautológico referirse a capacidad para contratar, pues no es en
esencia distinta de la que se exige para la celebración de cualquier acto jurídico. la capacidad no es
un elemento propio de los contratos, sino de toda clase de actos jurídicos; es presupuesto de
valides de todo negocio jurídico.

La Capacidad procesal implica la posibilidad de realizar actos procesales validos por voluntad
propia, esto es diversas actuaciones ante el órgano administrativo o jurisdiccional en cualquiera de
sus instancias, como interponer demandas, escritos, ejercer recursos, etc. Esta se diferencia de la
capacidad de ser parte, que se asocia a la capacidad de goce (capacidad de goce procesal) y la
tiene toda persona, pues los incapaces de obrar pueden ser obviamente parte de un juicio, pero
deben subsanar su incapacidad de obrar con los mecanismos de ley, toda vez que su inacapacidad
de ejercicio se extiende a las actuaciones procesales.

Finalmente la capacidad delictual en el ámbito civil supone la posibilidad de responder por hecho
ilícito, esto es, toda conducta anti-juridica y culpable que le ocasiona un daño a otro y que debe
ser objeto de reparación de conformidad con e (encb, art. 1185, CC, “El que con intención, o por
negligencia o por imprudencia, ha causado un daño a otro, está obligado a repararlo”. Tal
capacidad no depende estrictamente de la capacidad legal o de obrar, sino del discernimiento (CC.
Art. 1186), “El incapaz queda obligado por sus actos ilícitos, siempre que haya obrado con
discernimiento”. La responsabilidad civil del sujeto con discapacidad mental no incapacitado
judicialmente se resolvería por aplicación de las normas generales de la materia.

PRINCIPIOS:
María Candelaria Domínguez Guillen:

a. Todas las personas tienen capacidad de goce. La capacidad de goce, según indicamos. Está
íntimamente asociada a la personalidad que para algunos son conceptos equivalentes. De
allí que se afirme que todo sujeto de derecho bien sea ser humano o ente incorporal por la
sola circunstancia de ser persona tiene capacidad jurídica o de goce (aunque la del ente
moral, esta limitada por su finalidad y su naturaleza. Por eso para algunos la verdadera
capacidad es la de obrar la cual no tiene toda persona humana “todas las personas, por el
solo hecho de serlo tienen capacidad jurídica o de goce, pero para obtener la capacidad de
ejercicio se debe cumplir con los requisitos que la ley señala, tales como la mayoridad, por
ejemplo”, pues capacidad jurídica general posee todo sujeto y lo único que se plantea son
incapacidades especiales o particulares de goce.
b. La capacidad de obrar presupone la capacidad de goce pero no viceversa: esto respecto
de la persona natural, pues la persona incorporal según se indico simpre tiene capacidad
de obrar. Pero la persona humana si bien tiene capacidad jurídica o de goce coetánea a su
nacimiento, la capacidad de obrar plena la adquiere a su mayoridad, y excepcionalmente
podría perderla si incurre en una de las causas taxativas que afectan la capacidad de los
adultos.
c. Las normas rigen la capacidad de goce y la capacidad de obrar son realmente distintas. La
capacidad de goce y la capacidad son nociones n distintas al punto que para algunos la
ultima es la verdadera capacidad. Las incapacidades especiales de goce responden a
prohibiciones no subsanables en torno a una relación jurídica particular; mientras que la
incapacidad de obrar generalmente es subsanable por los respectivos regímenes de
representación o asistencia que prevé al efecto la ley.
d. Las normas que rigen la capacidad negocial y procesal son substancialmente distintas a las
que rigen la capacidad delictual. En efecto, la esencia de la capacidad negocial y procesal
apoyada en la nocion de actos jurídicos contentivos de declaraciones de voluntad, que
suponen complejidad y discernimiento pleno; se presenta enteramente distinta a la idea
que ampara la capacidad delictual sustentada en la noción de simple discernimiento con
proyección al hecho ilícito (conducta antijurídica y culpable que ocasiona un daño a otro).
De allí que la capacidad delictual para constituir una situación de mayor comprensión o
menor complejidad no precisa a diferencia de la capacidad negocial y procesal, de la
capacidad legal sino de discernimiento o comprensión básica para distinguir lo bueno de lo
malo.
e. Las normas que establecen la capacidad son de orden público. Se afirma como una máxima
que la materia relativa al estado y capacidad de las personas es de orden público, por su
importancia y consecuencias interesa al estado y por tal está sustraída de la autonomía de
la voluntad. No puede pues por voluntad del o de los interesados escapar a las normas
imperativas relativas a la capacidad, pues las mismas son de cumplimiento obligatorio.
f. Las normas que consagran la incapacidad do obstante der de orden público, son dictadas
en beneficio y protección de los propios incapaces. Así pues tales disposiciones existen –
en principio salvo en el caso de la interdicción legal – a favor de los incapaces por lo que
son estos quienes pueden invocar la protección legal impuesta a su favor y no el tercero
que contrato con él. Contrariamente por no responder a lo anterior, la interdicción legal
puede ser alegada por cualquiera.
g. Las causas que afectan la capacidad de obrar son taxativas (las incapacidades no pueden
ser objeto de analogía). En efecto, la gravedad de las consecuencias derivadas de la
incapacidad, esto es la incapacidad de actuar solo o por voluntad propia, no pueden
quedar al libre juego de la analogía; sus supuestos son taxativos y no extensibles en
principio a supuestos aparentemente semejantes o relacionados (ej, avaro, anciano ciego,
analfabeta, etc).
h. La capacidad en sentido amplio depende del estado civil de la persona natural. Cabe
recordar que la noción de estado civil es amplia e incluye el estado persona donde se
ubica la edad que define en forma determinante la capacidad, así como otras situaciones
que pudieran afectar la capacidad de obrar (el matrimonio del menor de edad) y la
capacidad jurídica (el estado familiar en lo relativo a incapacidades especiales de goce).
Por ello se afirma que capacidad y estado civil presentan estrecha relación.
i. La incapacidad de obrar es exclusiva de la persona natural
j. La capacidad es la regla y la incapacidad es la excepción. La capacidad se presume y la
incapacidad debe probarse. Se trata de una consecuencia del citado carácter taxativo de
las incapacidades y de los principios básicos del derecho probatorio.
INCAPACIDADES DE GOCE Y DE OBRAR
- DE GOCE:
María Candelaria Domínguez Guillen:

Toda persona tiene capacidad general de goce, por lo que las excepciones son particulares y
vienen dadas por lo que ha denominado la doctrina “incapacidades especiales de goce”, que se
traduce en prohibiciones que pone el legislador por la posición que ocupan los sujetos en una
posible relación jurídica o por razones de moralidad. Es la imposibilidad de ser titular de deberes y
derechos en supuestos particulares. Así, por ejemplo, la prohibición de venta entre cónyuges o
entre padres he hijos sometidos a su potestad, como también los supuestos de indignidad para
suceder, se presentan según esta idea como incapacidades especiales de goce, porque en esos
casos especiales, los afectados no tienen la posibilidad de disfrutar de derecho.

Gorrondona

Veamos pues, cuales son los casos que la doctrina reseña com incapacidades especiales de goce:

1. Son incapaces para suceder ab intestato, cualquiera que sea la persona de cuya sucesión se
trate, artículo 809. CC- Son incapaces de suceder los que en el momento de la apertura de la
sucesión no estén todavía concebidos. A los efectos sucesorios la época de la concepción se
determinará por las presunciones legales establecidas en los artículos 201 y siguientes para la
determinación de la filiación paterna.
1.1. los que en el momento de la apertura de la sucesión no estén todavía concebidos 809.
CC.
1.2. Artículo 810.- Son incapaces de suceder como indignos: 1º El que voluntariamente haya
perpetrado o intentado perpetrar un delito, así como sus cómplices, que merezca cuando
menos pena de prisión que exceda de seis meses, en la persona de cuya sucesión se trate,
en la de su cónyuge, descendiente, ascendiente o hermano. El declarado en juicio
adúltero con el cónyuge de la persona de cuya sucesión se trate. Los parientes a quienes
incumba la obligación de prestar alimentos a la persona de cuya sucesión se trate y se
hubieren negado a satisfacerla, no obstante haber tenido medios para ello.
2. Incapacidades para recibir por testamento:
2.1. Artículo 840.- Son incapaces para recibir por testamento los que son incapaces para
suceder ab-intestato. Sin embargo, pueden recibir por testamento los descendientes
inmediatos, es decir, los hijos de una persona determinada que viva en el momento de la
muerte del testador, aunque no estén concebidos todavía.
2.2. Artículo 841.- Son igualmente incapaces de heredar por testamento: Las Iglesias de
cualquier credo y los Institutos de manos muertas. Son aquellos que por leyes o
reglamentos de su constitución no pueden enajenar sus bienes inmuebles (art. 1144, ap.,
único).
2.3. Los ordenados in sacris y los ministros de cualquier culto, a menos que el instituido sea
cónyuge, ascendiente, descendiente o pariente consanguíneo dentro del cuarto grado
inclusive del testador.
Son incapaces de recibir por donación:

Artículo 1.436.- No pueden adquirir por donación, ni aun bajo el nombre de personas
interpuestas, los incapaces de recibir por testamento, en los casos y del modo establecido en el
Capítulo que trata de las sucesiones testamentarias.

- DE OBRAR:
María Candelaria

La capacidad de obrar se ve afectada por determinadas causas o circunstancias, algunas de ellas


limiativas, esto que genran incapacidad o imposibilidad de realizar actos jurídicos por voluntad. Las
causa taxativas que aafectan la capacidad de obrar son la edad, la afeccion mental, la prodigalidad
“conducta desproporcionada, injustificada y habitual consistente en dilapidar el patrimonio”; la
condena penal a presidio y el matrimonio del menor de edad. Las cuatro primeras causas,
afectan la incapacidad de ejercicio, mientras que la ultima produce un aumento relativo de la
misma, toda vez que el menor de edad que contrae matrimonio se emancipa y aumenta su
capacidad. Ciertas discapacidades sensoriales como la ceguera (de nacimiento o adquirida durante
la infancia) o la sordo mudez que constituin causa de inhabilitación legal según el artículo 410 fue
derogado por la ley de las personas con discapacidad.

INCAPACIDAD NATURAL Y CIVIL


- NATURAL:
La incapacidad natural como su denominación lo indica emana de la naturaleza, se trata de una
posibilidad de discernir o de comprender la trascendencia de los actos jurídicos derivada de
circunstancias naturales, la incapacidad natural está íntimamente ligada al discernimiento de allí
que se afirme que si hay discernimiento habrá en principio capacidad natural, pero esta capacidad
puede existir en algunos casos incapaces legales o incapaces civiles. Así por ejemplo el condenado
a presidio es un incapaz civil pero no natural porque tiene discernimiento, de no tenerlo seria
inimputable y seria ajeno a la sanción penal. El adolscente va adquiriendo progresivo
discernimiento, que si bien lo acompaña a partir de los doce años se va incrementando a medida
que se aproxima a la mayoridad por lo que es un incapaz civil, pero no un incapaz natural.

- CIVIL:
La incapacidad civil es la que impone o reconoce la ley; su causa es pues taxativa según lo que
disponga el legislador, lo lógico es que la incapacidad civil sea inspirada en la incapacidad natural,
toda vez, que el derecho no crea incapacidades de la nada sino que suele reconocerlas con base a
una causa natural. Como es el caso de la incapacidad del niño y del entredicho por demencia,
porque aunque deberían estar relacionadas, bien podrían excepcionalmente no coincidir.

INCAPACIDAD DE OBRAR NEGOCIAL:


- DE PROTECCIÓN.
Gorrondona

Son incapaces (en mayor o menor grado): los llamados menores que la LOPNNA, denomino (niños
y adolescentes), los entredichos y los inhabilitados por antonomasia “En retórica, es la sustitución
de un nombre propio por una expresión, tal como «la Ciudad Eterna» por Roma. El proceso
inverso, también es a veces nombrado como antonomasia.

- DEFENSA SOCIAL
Hung

la cual se establece por necesidades colectivas (como protección de la comunidad) y no en


protección del incapaz, por ejemplo: la incapacidad qu afecta a los entredichos por condena penal.

REGÍMENES DE INCAPACES:
Si se considera que los incapaces (niños (as) y adolescentes, entredicho e inhabilitados), están
afectados por incapacidades negóciales muy extensas, se comprenderá que la ley no puede
limitarse a declararlos incapaces, sino que debe también establecer la manera de que se puedan
realizar negocios jurídicos validos que produzcan efectos respecto de dichas personas. Para ello, la
ley establece la intervención de personas distintas del incapaz en la celebración de negocios
jurídicos que afecten al mismo. La reglamentación de la intervención es lo que se llama régimen
del incapaz

- RÉGIMEN DE REPRESENTACIÓN:
Gorrondona

En los que la persona que interviene sustituye al incapaz, de modo que realiza negocios jurídicos
en nombre del incapaz, sin que este intervenga en la celebración de los mismos.

Hung

El tercero realiza los negocios jurídicos en nombre del incapaz y este no interviene en forma
alguna en la celebración del negocio, aun cuando recibe la totalidad de los efectos jurídicos del
negocio (regímenes de representación)
- RÉGIMEN DE ASISTENCIA Y AUTORIZACIÓN:
Gorrondona

En los cuales la persona que interviene no sustituye al incapaz en la celebración de sus negocios
jurídicos (cuya iniciativa conserva, pues el incapaz) Cuando para la validez de un acto se requiere la
actuación conjunta del incapaz y de la persona que lo protege, se habla de asistencia. En cambio,
si el protector solo tiene la facultad de aprobar o improbar los negocios jurídicos que se propone
celebrar el incapaz, se habla de autorización.

Hung

El tercero no sustituye al incapaz en la celebración del negocio jurídico, sino que para la validez de
esté, la ley requiere la intervención conjunta del tercero y el incapaz (asistencia), o bien el incapaz
actúa directamente pero contando con la del tercero (autorización).

INCAPACIDAD Y POTESTAD:
A veces la capacidad y el régimen de los incapaces al cual la ley somete a una persona no bastan
para asegurarle la protección que necesita. En efecto, esos medios jurídicos solo protegen a los
incapaces en la esfera de los negocios jurídicos, mientras que, a veces el sujeto requiere que
también se provea al gobierno de su persona. la ley ha presito por tanto, además de la incapacidad
y de los regímenes de los incapaces, el sometimiento de determinados sujetos al gobierno y
dirección de su persona por otra; esto es lo que se llama sometimiento a la potestad de otro. No
todos los incapaces, están sometidos a la potestad de otra persona, solo lo están los niños y
adolescentes y los entredichos por defecto intelectual. Por otra parte, aunque todos los incapaces
sometidos a potestad están sometidos a un régimen de representación:

1) No todos los incapaces sometidos a régimen de representación están sometidos a


potestad (así, no lo están los entredichos por condena penal).
2) Aunque normalmente la persona que tiene el gobierno y dirección del incapaz tiene
también el poder de representarlo, a veces, estas funciones se encuentran en otras
manos.
En cuanto a las incapacidades naturales, la Ley Para Personas con discapacidad, define este
término en el Artículo 5. Se entiende por discapacidad la condición compleja del ser humano
constituida por factores biopsicosociales, que evidencia una disminución o supresión temporal o
permanente, de alguna de sus capacidades sensoriales, motrices o intelectuales que puede
manifestarse en ausencias, anomalías, defectos, pérdidas o dificultades para percibir, desplazarse
sin apoyo, ver u oír, comunicarse con otros, o integrarse a las actividades de educación o trabajo,
en la familia con la comunidad, que limitan el ejercicio de derechos, la participación social y el
disfrute de una buena calidad de vida, o impiden la participación activa de las personas en las
actividades de la vida familiar y social, sin que ello implique necesariamente incapacidad o
inhabilidad para insertarse socialmente.

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