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𝗟𝗘𝗚𝗜𝗧𝗜𝗠𝗜𝗗𝗔𝗗 𝗗𝗘 𝗟𝗔 𝗣𝗥𝗨𝗘𝗕𝗔 "𝗗𝗢𝗖𝗧𝗥𝗜𝗡𝗔 𝗬 𝗖𝗥𝗜𝗧𝗘𝗥𝗜𝗢𝗦 𝗘𝗡 𝗟𝗔

𝗝𝗨𝗥𝗜𝗦𝗣𝗥𝗨𝗗𝗘𝗡𝗖𝗜𝗔 𝗗𝗘 𝗟𝗔 𝗖𝗢𝗥𝗧𝗘 𝗜𝗡𝗧𝗘𝗥𝗔𝗠𝗘𝗥𝗜𝗖𝗔𝗡𝗔 𝗗𝗘 𝗗𝗘𝗥𝗘𝗖𝗛𝗢𝗦 𝗛𝗨𝗠𝗔𝗡𝗢𝗦,


𝗘𝗟 𝗧𝗥𝗜𝗕𝗨𝗡𝗔𝗟 𝗖𝗢𝗡𝗦𝗧𝗜𝗧𝗨𝗖𝗜𝗢𝗡𝗔𝗟 𝗬 𝗟𝗔 𝗖𝗢𝗥𝗧𝗘 𝗦𝗨𝗣𝗥𝗘𝗠𝗔 𝗗𝗘 𝗝𝗨𝗦𝗧𝗜𝗖𝗜𝗔"

SUMARIO:

I) Exclusión de la declaración obtenida bajo tortura. II) Obligación del estado de verificar que la
declaración o confesión del imputado no haya sido obtenida mediante coacción. III) Validez de
la confesión del inculpado. IV) Naturaleza jurídica de la prueba ilícita. V) Naturaleza jurídica de
la prueba prohibida. VI) Prueba prohibida. VII) No es considerada prueba prohibida la que se
obtenga violando derechos de rango legal o infralegal. VIII) Conversaciones telefónicas
interceptadas ilegalmente. IX) El derecho al secreto y a la inviolabilidad de las comunicaciones.
X) La valoración del juez del examen de ADNI. XI) Efectos de la prueba irregular. XII) Prueba
ilícita y prueba prohibida. XIII) Prueba prohibida en grabación de conversación telefónica. XIV)
Prueba ilícita y correcta valoración de la prueba.

I.- EXCLUSIÓN DE LA DECLARACIÓN OBTENIDA BAJO TORTURA

Criterio 1: “La exclusión de pruebas obtenidas mediante coacción ostenta un carácter absoluto
e inderogable. No cabe duda que cualquier declaración obtenida bajo tortura, sea auto
inculpatoria o que inculpe a terceros, es absolutamente inválida como medio de prueba. En
este caso, los actos de tortura fueron cometidos con la intención de obligar a la presunta
víctima a declarar en su contra o a dar alguna otra información, a pesar de lo cual no llegó a
hacerlo. Sin perjuicio de ello, el artículo 8.2.g) de la Convención, que implica el derecho de
participación activa del imputado en los medios probatorios, reconoce el derecho a no declarar
contra sí mismo y, más específicamente, el derecho de abstenerse a declarar en una
investigación o proceso penal en a que la persona es señalada como autor probable o
sospechosa de la comisión de un hecho ilícito. Puesto que la administración de justicia penal
debe partir del análisis de pruebas legalmente obtenidas, un medio de investigación que implica
el uso de coacción para doblegar la voluntad del imputado deja de ser válido, pues implica una
instrumentalización de la persona y una violación per se de aquel derecho, independientemente
del grado de coacción (ya fuere desde una amenaza, otros tratos, crueles inhumanos o
degradantes o tortura) y del resultado (es decir, de que se obtenga efectivamente una
confesión o información). En consecuencia, no cabe duda que el presente caso el Estado es
responsable por la violación de derecho reconocido ene l artículo 8.2.g) de la Convección, en
relación con el artículo 1.1. de la misma, en perjuicio del señor Pollo Rivera”. Criterio
jurisprudencial establecido en el siguiente pronunciamiento:

• Corte Interamericana de Derechos Humanos


• Caso Pollo Rivera y Otros Vs. Perú
• (21/10/2016) / Fundamento 176
• https://cutt.ly/Tg1vEpD
II.- OBLIGACIÓN DEL ESTADO DE VERIFICAR QUE LA DECLARACIÓN O CONFESIÓN DEL
IMPUTADO NO HAYA SIDO OBTENIDA MEDIANTE COACCIÓN

Criterio 2: “Sin perjuicio de lo anterior, la Corte recuerda que en los casos que la persona
alegue dentro del proceso que su declaración o confesión ha sido obtenida mediante coacción,
los Estados tienen la obligación de verificar, en primer lugar, la veracidad de dicha denuncia a
través de una investigación llevada a cabo con la debida diligencia. Asimismo, la carga
probatoria no puede recaer en el denunciante, sino que el Estado debe demostrar que la
confesión fue voluntaria. Del mismo modo, de acuerdo a lo dispuesto en el Protocolo de
Estambul, en cuanto a la investigación de casos de tortura y a la realización del examen
médico, este “debe realizarse independientemente del tiempo que haya transcurrido desde el
momento de la tortura”. Además, las “declaraciones de testigos y supervivientes son
componentes necesarios de la documentación de la tortura” y las “pruebas físicas”, en la
medida en que existan, son importantes informaciones que confirman que la persona ha sido
torturada. De todas formas, en ningún caso se considerará que la ausencia de señales físicas
indica que no se ha producido tortura, ya que es frecuente que estos actos de violencia contra
las personas no dejen marcas ni cicatrices permanentes”. Criterio jurisprudencial establecido en
el siguiente pronunciamiento:

• Corte Interamericana de Derechos Humanos


• Caso Omar Humberto Maldonado Vargas y Otros Vs. Chile
• (02/09/2015) / Fundamento 86
• https://cutt.ly/Og1bkAm

III.- VALIDEZ DE LA CONFESIÓN DEL INCULPADO

Criterio 3: “Al respecto, la Corte observa que la regla de exclusión de pruebas obtenidas
mediante la tortura o tratos crueles e inhumanos (en adelante “regla de exclusión”) ha sido
reconocida por diversos tratados y órganos internacionales de protección de derechos
humanos que han establecido que dicha regla es intrínseca a la prohibición de tales actos. Al
respecto, la Corte considera que esta regla ostenta un carácter absoluto e inderogable. En ese
sentido, la Corte ha sostenido que la anulación de los actos procesales derivados de la tortura
o tratos crueles constituye una medida efectiva para hacer cesar las consecuencias de una
violación a las garantías judiciales. Además, el Tribunal considera necesario recalcar que la
regla de exclusión no se aplica sólo a casos en los cuales se haya cometido tortura o tratos
crueles. Al respecto, el artículo 8.3. de la Convención es claro al señalar que “[I] a confesión del
inculpado solamente es válida si es hecho a que se haya perpetrado un acto de tortura o trato
cruel, sino que se extienda a cualquier tipo de coacción. En efecto, al comprobarse cualquier
tipo de coacción capaz de quebrantar la expresión espontánea de la voluntad de la persona,
ello implica necesariamente la obligación de excluir la evidencia respectiva del proceso judicial.
Esta anulación es un medio necesario para desincentivar el uso de cualquier modalidad de
coacción. Por otra parte, este Tribunal considera que las declaraciones obtenidas mediante
coacción no suelen ser veraces, ya que la persona intenta aseverar lo necesario para lograr
que los tratos crueles o la tortura cesen. Por lo anterior, para el Tribunal, aceptar o dar valor
probatorio a declaraciones o confesiones obtenida mediante coacción, que afecten a la persona
o a un tercero, constituye a su vez una infracción a un juicio justo. Asimismo, el carácter
absoluto de la regla de exclusión se ve reflejado en la prohibición de otorgarle valor probatorio
no sólo a la prueba obtenida directamente mediante coacción, sino también a la evidencia que
se desprende de dicha acción. En consecuencia, la Corte considera que excluir la prueba que
haya sido encontrada o derivada de la información obtenida mediante coacción, garantiza de
manera adecuada la regla de exclusión”. Criterio jurisprudencial establecido en el siguiente
pronunciamiento:

• Corte Interamericana de Derechos Humanos


• Caso Cabrera García y Montiel Flores Vs. México
• (26/11/2010) / Fundamento 165 al 167
• https://cutt.ly/vg1m9cy

IV.- NATURALEZA JURÍDICA DE LA PRUEBA ILÍCITA

Criterio 4: “La prueba ilícita es aquella en cuya obtención actuación se lesionan derechos
fundamentales o se viola la legalidad procesal, de modo que la misma deviene procesalmente
inefectiva e inutilizable. Ahora bien, en el proceso penal impugnado ha quedado desvirtuado el
alegato del recurrente (que las entrevistas y la investigación que cuestiona hayan determinado
el sentido del fallo en su contra), pues se ha acreditado fehacientemente la comisión del delito y
su responsabilidad penal, en cuya merituación de pruebas los juzgados no tuvieron en cuenta
la documentación que el accionante impugna”. Criterio jurisprudencial establecido en el
siguiente pronunciamiento:

• Sentencia del Tribunal Constitucional


• Expediente N.° 2053-2003-HC/TC
• (15/09/2003) / Fundamento 3
• https://cutt.ly/Ng1QAP2

V.- NATURALEZA JURÍDICA DE LA PRUEBA PROHIBIDA

Criterio 5: “En resumen, en la dogmática y jurisprudencia constitucional resulta variable la


naturaleza jurídica que se le pretende atribuir a la prueba prohibida. No obstante, en
consideración de este Tribunal la prueba prohibida es un derecho fundamental que no se
encuentra expresamente contemplado en la Constitución, que garantiza a todas las personas
que el medio probatorio obtenido con vulneración de algún derecho fundamental sea excluida
en cualquier clase de procedimiento o proceso para decidir la situación jurídica de una persona,
o que prohíbe que este tipo de prueba sea utilizada o valorada para decidir la situación jurídica
de una persona. En ese sentido, debe destacarse que la admisibilidad del medio probatorio en
cualquier clase de procedimiento o proceso no se encuentra únicamente supeditada a su
utilidad y pertinencia, sino también a su licitud”. Criterio jurisprudencial establecido en el
siguiente pronunciamiento:
• Sentencia del Tribunal Constitucional
• Expediente N.° 655-2010-HC/TC
• (27/10/2010) / Fundamento 7
• https://cutt.ly/rg1Wx5c

VI.- PRUEBA PROHIBDA

Criterio 6: “De este modo del proceso penal la consecuencia de la prueba prohibida se
encuentra reconocida en el artículo 159° del Nuevo Código procesal Penal, al señalar que “[e]
el Juez no podrá utilizar, directa o indirectamente, las fuentes o medios de prueba obtenidos
con vulneración del contenido esencial de los derechos de rango legal o infralegal”. Criterio
jurisprudencial establecido en el siguiente pronunciamiento:

• Sentencia del Tribunal Constitucional


• Expediente N.° 655-2010-HC/TC
• (27/10/2010) / Fundamento 15
• https://cutt.ly/rg1Wx5c

VII.- NO ES CONSIDERADA PRUEBA PROHIBIDA LA QUE SE OBTENGA VIOLANDO


DERECHOS DE RANGO LEGAL O INFRALEGAL

Criterio 7: “En la sentencia recaída en el Expediente N.º 00655-2010-PHC/TC, este Tribunal


Constitucional dejó sentado que la prueba prohibida es un derecho fundamental que no se
encuentra expresamente contemplado en la Constitución, que garantiza a todas las personas
que el medio probatorio obtenido mediante la vulneración de algún derecho fundamental sea
excluido en cualquier clase de procedimiento o proceso para decidir la situación jurídica de una
persona, o que prohíbe que este tipo de prueba sea utilizada o valorada para decidir la
situación jurídica de una persona. En este sentido, debe destacarse que la admisibilidad del
medio probatorio en cualquier clase de procedimiento o proceso no se encuentra únicamente
supeditada a su utilidad y pertinencia,
sino también a su licitud. También se ha considerado que la prueba prohibida es un límite al
ejercicio del derecho fundamental a la prueba. A este respecto, en la STC
06712-2005-PHC/TC, este Tribunal precisó, entre otras cosas, que el medio probatorio debe
ser lícito, es decir que no «pueden admitirse medios probatorios obtenidos en contravención del
ordenamiento jurídico», pues se trata de «supuestos de prueba prohibida». En sentido similar,
en la RTC 02333-2004-HC/TC, este Tribunal destacó que «el derecho a la prueba se encuentra
sujeto a determinados principios, tales como que su ejercicio se realice de conformidad con los
valores de pertinencia, utilidad, oportunidad y licitud. Ellos constituyen principios de la actividad
probatoria y, al mismo tiempo, límites a su ejercicio, derivados de la propia naturaleza del
derecho». Criterio jurisprudencial establecido en el siguiente pronunciamiento:

• Sentencia del Tribunal Constitucional


• Expediente N.° 1601-2013-HC/TC
• (15/08/2014) / Fundamento 20 al 23
• https://cutt.ly/rg0RgEv

VIII.- CONVERSACIONES TELEFÓNICAS INTERCEPTADAS ILEGALMENTE

Criterio 8: “Pues bien, en el presente caso se advierte que las conversaciones telefónicas del
beneficiario que sirven de fundamento al auto de apertura que se cuestiona no fueron
interceptadas por agentes del Estado, por lo que la injerencia arbitraria en su vida privada no le
es imputable al juez demandado, ni al fiscal que interpuso la denuncia. En este sentido debe
destacarse que las conversaciones telefónicas del beneficiario no constituían información
pública, por lo que su divulgación a través de los medios de prensa sin la autorización del
beneficiario se tornó inconstitucional. Por esta razón este Tribunal considera que el Estado
debe investigar, juzgar y, en su caso, sancionar a los responsables de la violación del derecho
a la vida privada del beneficiario, consistente en la interceptación y divulgación de sus
conversaciones telefónicas, así como la entrega de las conversaciones telefónicas a los medios
de comunicación. Asimismo, debe precisarse que la divulgación de las grabaciones telefónicas
requiere de la autorización de sus interlocutores para que se legítima. Para evaluar la
incidencia de las pruebas prohibidas en la situación jurídica del beneficiario, este Tribunal
considera necesario examinar en abstracto el conjunto del proceso penal a fin de verificar la
afectación del derecho al debido proceso, y si la decisión sobre la situación jurídica del
demandante se fundamenta, o no, en pruebas prohibidas. Como el proceso penal aún no ha
concluido, la presente demanda ha sido presentada en forma prematura, por lo que deviene en
improcedente. Debe destacarse que el criterio del análisis global para evaluar la relación entre
prueba prohibida y debido proceso penal también es utilizado por el Tribunal Europeo de
Derechos Humanos”. Criterio jurisprudencial establecido en el siguiente pronunciamiento:

• Sentencia del Tribunal Constitucional


• Expediente N.° 655-2010-HC/TC
• (27/10/2010) / Fundamento 20 al 23
• https://cutt.ly/rg1Wx5c

IX.- EL DERECHO AL SECRETO Y A LA INVIOLABILIDAD DE LAS COMUNICACIONES

Criterio 9: “El derecho al secreto y a la inviolabilidad de las comunicaciones y documentos


privados que se encuentra reconocido en el artículo 2, inciso 10, de la Constitución, prohíbe
que las comunicaciones y documentos privados de las personas sean interceptados o
conocidos por terceros ajenos a la comunicación misma, sean estos órganos públicos o
particulares, salvo que exista autorización judicial debidamente motivada para ello. Al respecto
este Tribunal en reiterada jurisprudencia ha precisado que "el concepto de secreto e
inviolabilidad de las comunicaciones y documentos privados, desde esa perspectiva,
comprende a la comunicación misma, sea cual fuere su contenido y pertenezca o no el objeto
de la comunicación al ámbito de lo personal, lo íntimo o lo reservado. De manera que se
conculca el derecho tanto cuando se produce una interceptación de las comunicaciones, es
decir, cuando se aprehende la comunicación (...), como cuando se accede al conocimiento de
lo comunicado, sin encontrarse autorizado para ello" (Cfr. STC 2863-2002-AAlTC, fundamento
3, STC 003-2005-AIITC, fundamentos 359-362, entre otras). En efecto, la prohibición
contenida en la disposición constitucional antes mencionada se dirige a garantizar de manera
inequívoca la impenetrabilidad de la comunicación en cualquiera de sus formas o medios, a fin
de que no sufra una injerencia externa por parte de terceros, pues la presencia de un actor
ajeno o extraño a los que intervienen en el proceso comunicativo es precisamente el elemento
indispensable para invocar la posible afectación del derecho al secreto y a la inviolabilidad de
las comunicaciones. No obstante, ello, la función tutelar de este derecho no alcanza a quien
siendo parte de una comunicación registra, capta o graba también su propia conversación ni
tampoco a quien siendo parte de dicha comunicación autoriza de manera voluntaria y expresa
a un tercero para que acceda a la comunicación. Desde esta perspectiva, es
constitucionalmente posible sostener que el derecho a la inviolabilidad de las comunicaciones
no se ve vulnerado cuando alguna de las partes intervinientes en el proceso comunicativo
perenniza o graba para sí la comunicación en la que forma parte o cuando de manera libre,
voluntaria y expresa permite, posibilita o autoriza la interceptación, grabación o el acceso al
contenido de la comunicación a un tercero ajeno a la comunicación misma. Cuestión totalmente
distinta, hay que insistir, es la intervención en la comunicación de un tercero que no tiene
autorización de ninguno de los interlocutores o de la autoridad judicial. Ello es así porque,
repetimos, lo que constitucionalmente está vedado es la injerencia externa en la comunicación
de un tercero que no tiene autorización alguna y no el registro o la autorización para el acceso
a la propia comunicación. Teniendo en cuenta lo anterior, también es posible sostener que en
base al dominio de la comunicación que posee cada uno de los interlocutores, el registro para
sí o la autorización para acceder a ella por cualquiera de estos y el conocimiento del contenido
de la comunicación, tampoco supone la violación del derecho constitucional al secreto de las
comunicaciones”. Criterio jurisprudencial establecido en el siguiente pronunciamiento:

• Sentencia del Tribunal Constitucional


• Expediente N.° 867-2011-PA/TC
• (17/07/2014) / Fundamento 2 al 5
• https://cutt.ly/og0URaW

X.- LA VALORACIÓN DEL JUEZ DEL EXAMEN DE ADN

Criterio 10: “Establecer como doctrina legal, al amparo de los criterios expuestos en los
fundamentos precedentes –que se sumirán como pautas de interpretación en los asuntos
judiciales respectivos-, los siguientes lineamientos jurídicos: a. Que el examen de ADN es un
medio de prueba científico de alta fiabilidad probabilística, siempre que se observen todas las
condiciones para control de todas las etapas del análisis: recojo, observación, análisis,
contrastación de resultados, expresados términos probabilísticos. Es fundamental para este
objetivo que se mantenga la cadena de custodia. b. Que como medio de prueba puede
aplicarse en cualquier ámbito relacionado con la identificación de un sospechoso o de otra
persona, a condición que se respeten los criterios de legalidad, razonabilidad, proporcionalidad
y uso del procedimiento idóneo, conforme a las normas del Código Procesal, en materia de
búsqueda de la prueba. c. Que, en particular, en el ámbito de los delitos sexuales, el examen
de ADN puede ser útil para la formación de la prueba directa o de la prueba por indicios,
siempre que la no exclusión del sospechoso sea corroborada con otros elementos periféricos.
d. Que, que las partes procesales y, en especial, los jueces deben valorar con sentido crítico
los informes periciales de ADN, conforme a las reglas de la sana crítica racional.
Corresponderá su análisis individual como su examen correlacionado con otros medios de
prueba”. Criterio jurisprudencial establecido en el siguiente pronunciamiento:

• Sentencia Plenaria Casatoria N.° 2-2018/CIJ-433


• Corte Suprema de Justicia
• (18/12/2018) / Fundamento 46
• https://cutt.ly/tgMAU9R

XI.- EFECTOS DE LA PRUEBA IRREGULAR

Criterio 11: “Existen supuestos específicos en los que el legislador ha predeterminado,


mediante una norma de carácter procesal, un supuesto de obtención probatoria no permitido y
su consecuencia. Así se aprecia, por ejemplo, en el inciso tres, del artículo ciento sesenta y
tres, inciso dos, del artículo ciento sesenta y dos, inciso tres, del artículo ciento ochenta y
cuatro, del Código Procesal Penal-. Ello no significa que se cierre la posibilidad de limitar la
valoración probatoria de otros supuestos no regulados específicamente. En general, las leyes
procesales tienen en común que no admiten las pruebas irregulares; pero se distingue por la
mayor o menor amplitud con que prevén excepciones a esta regla general. En tal caso de las
pruebas irregulares, en nuestro sistema jurídico, el artículo VII, del Título Preliminar, del Código
Procesal Penal, establece, de modo genérico, una prohibición de valoración para las pruebas
no obtenidas mediante un procedimiento constitucionalmente legítimo –entre las cuales hemos
ubicado a la prueba irregular, conforme el fundamento jurídico décimo quinto-. Si bien tanto en
el mismo cuerpo normativo precitado, como en la jurisprudencia y en la doctrina, se utiliza una
terminología variada para denominar el efecto de los actos obtenidos en violación a derechos y
garantías constitucionales, en puridad el efecto derivado es el de ineficacia del acto, lo que se
traduce en una exclusión probatoria, sin distinción de si procesalmente esta se efectúa al
momento de la admisión o de la valoración de la fuente de prueba. Empero, la existencia de
una prueba irregular no implica la exclusión automática de las pruebas actuadas con
posterioridad o como resultado de ella”. Criterios jurisprudenciales establecidos en los
siguientes pronunciamientos:

• Casación N° 591-2015/Huánuco
• Sala Penal Permanente
• Ponente: Pariona Pastrana
• (17/05/2017) / Fundamento décimo sexto al vigésimo segundo
• https://cutt.ly/OgMKhZs

XII.- PRUEBA ILÍCITA Y PRUEBA PROHIBIDA


Criterio 12: “Séptimo. - Por mayoría: Admitir la teoría del riesgo, como excepción en casos
como función extra judiciales e intromisiones domiciliarias y sus derivaciones, logrando por
medio de cámaras y micrófonos ocultos, escuchas telefónicas y grabaciones de
conversaciones sin autorización judicial, informantes, infiltrados, delatores, etc. Su justificación
reside en el riesgo a la delación que voluntariamente asume toda persona que ante otro hace
revelaciones sobre un delito o realiza actividades relacionadas con éste. Si el propio individuo
no cuida sus garantías, no pretenda que lo haga un Juez. Se admite la validez de la cámara
oculta, cuando uno de los interlocutores lo consiente, pues su posterior testimonio es válido.
Similar posición se da en el caso que uno de los interlocutores por el teléfono grabe la
conversación, o, sea origen o destinatario de una carta o comunicación privada. Con esta teoría
se otorga valor a las pruebas obtenidas por particulares a través de cámaras ocultas. Se
reconoce que en el caso del agente encubierto, existe fuerte oposición pues se recusa el valor
probatorio de la prueba obtenida a través del engaño al inculpado. Sin embargo, dada la
popularidad de esta metodología de la investigación en los delitos contemporáneas, los
acusados admiten seriamente la posibilidad de que su actividad ilícita pueda ser infiltrada y a
pesar de ello asumen el riesgo de realizar tales actividades, utilizando para ello, personas no
tan confiables, ni medios de comunicación confiables. Asumen, desde el inicio de que sus
actividades ilícitas estén siendo observadas, grabadas o infiltradas. Octavo. - Por unanimidad:
Establecer que existen diferencias entre prueba ilícita y prueba irregular. Para comprender a
plenitud las diferentes teorías sobre la ilicitud de la prueba, es necesario distinguir entre
obtención de la prueba (fuente) e incorporación de la prueba (medio de prueba). La primera se
da cuando en la obtención de la fuente de prueba se transgrede un derecho fundamental del
imputado. La segunda, se produce cuando se viola una norma de carácter procesal al momento
de la incorporación de una prueba al proceso. Para el caso de la obtención de pruebas con
violación de derechos fundamentales; la doctrina y la jurisprudencia la han denominado
indistintamente como prueba ilícita, prueba prohibida, prueba ilegítimamente obtenida,
ilegalmente obtenida. Y para el caso de las pruebas irregularmente incorporadas, también se le
ha llamado ilícita, incompleta o defectuosa, pero entendida como prueba ineficaz, si no es
subsanada. Noveno. - Por unanimidad: No cabe valorar una prueba incorporada irregularmente
al proceso aunque sea determinante para afirmación de un delito, porque la Prueba irregular
afecta al medio de prueba, es decir su incorporación al proceso. Sancionado de acuerdo a las
reglas de anulabilidad. Si el defecto se subsana y aunque a la vez sea prueba fundamental, no
será posible su valoración”. Criterio jurisprudencial establecido en el siguiente pronunciamiento:

• Pleno Jurisdiccional Superior Nacional Penal de Trujillo


• (11/12/2004) / Fundamento tema 3
• https://cutt.ly/ig1wONz

XIII.- PRUEBA PROHIBIDA EN GRABACIÓN DE CONVERSACIÓN TELEFÓNICA

Criterio 13: “Que, de otro lado, se ha desestimado el mérito de la conversación telefónica entre
Doig Sánchez y Atencio Gonzáles (actas de transcripción de audio de fojas setecientos
cincuenta y nueve y setecientos sesenta y uno: su contenido, por lo demás, es
inequívocamente delictivo). La Sala Superior mencionó que es una prueba inducida, son
autorización judicial y la transcripción no cuenta con la presencia de un defensor. Sin embargo,
no se está ante una prueba prohibida (i) tanto porque se trató de una conversación entre dos
personas, una de las cuales era el interlocutor que aceptó efectuar esa llamada – no intervino
un tercero ajeno a la conversación, por lo que no existe vulneración del derecho al secreto de
las comunicaciones, y el contenido de la conversación no erpa íntimo o privado (véase: STCE
cincuenta y seis diagonal dos mil tres, de veinticuatro de marzo)-. (ii) cuanto porque se está
ante un delito de tracto sucesivo –una línea reiterada de conductas tendentes a la obtención de
dos mil quinientos dólares americanos con el objetivo. Presuntamente simulado, de influencias
ante un juez que tiene un caso a su cargo-, por lo que no se indujo al imputado a delinquir –la
idea criminal no se introdujo artificialmente: no se trata, en suma, de un delito provocado-. (iii)
Tratándose de una conversación entre dos personas –una de las cuales aceptó la grabación-,
no se necesitaba autorización judicial –la espontaneidad de uno de los interlocutores no está en
discusión-. (iv) No es ilícito, por lo demás que la autoridad inste a uno de los imputados a tener
una conversación con otro de los partícipes en el delito y que esa conversación se grabe
(STSE de veinte de febrero de dos mil seis). (v) A los efectos de la transcripción judicial, no es
constitutiva de su eficacia procesal la intervención del defensor; además, los testigos de cargo
corroboran la intervención delictiva de Atencio Gonzales”. Criterio jurisprudencial establecido en
el siguiente pronunciamiento:

• Recurso de Nulidad N° 2076-2014-Lima


• Sala Penal Transitoria
• Ponente: San Martín Castro
• (26/04/2016) / Fundamento sexto
• https://cutt.ly/Gg1phOu

XIV.- PRUEBA ILÍCITA Y CORRECTA VALORACIÓN DE LA PRUEBA

Criterio 14: “No es posible calificar de excesivo o desproporcionado el acceso por la empresa al
contenido de los correos electrónicos archivados, de suerte que impida su utilización en este
proceso penal. La medida efectuada por la empresa supera satisfactoriamente los juicios de
idoneidad, necesidad y proporcionalidad en sentido estricto. Es de acotar que lo realizado por
la empresa era la vía para examinar íntegramente los procedimientos utilizados por la empresa
y conocer lo ocurrido, son esa información y examen no se podía conseguir el propósito
buscado –no había otra meida menos moderada para hacerlo: los email era una comunicación
necesaria para garantizar una eficaz gestión e información-, y la actividad de fiscalización
ejecutada fue ponderada porque se derivó más beneficios o ventajas para el interés general
que perjuicios sobre los otros bienes o valores en conflicto. En consecuencia, no fue correcto
inutilizar o excluir de la apreciación de la prueba actuada el Informe “Revisión de Operaciones y
Control Interno en Automotores Gildemeister Perú Sociedad Anónima. La correcta valoración
de la prueba- de todo el material probatorio pertinente, conducente y útil, excluido lo ilícito, si lo
hubiere, en tanto forma parte de la garantía de defensa procesal en orden al derecho a la
valoración de la prueba pertinente- requiere el examen individual de los medios de prueba y,
luego, su análisis conjunto”. Doctrina jurisprudencial desarrollada en el siguiente
pronunciamiento:
• Recurso de Nulidad N° 817-2016/Lima
• Sala Penal Permanente
• Ponente: San Martín Castro
• (20/11/2017) / Fundamento décimo y undécimo
• https://cutt.ly/fg1jS5P

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